Una perspectiva bioarqueológica de la salud de los entierros de Yautepec (2015)

June 9, 2017 | Autor: K. Miller Wolf | Categoría: Bioarchaeology, Aztecs
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Descripción

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Capítulo C11 Una perspec va bioarqueológica de la salud de  los en erros de Yautepec Por Katherine A. Miller

perturbaciones ambientales, los factores culturales o la resistencia del huésped; sin embargo, es difícil precisar la etiología de la causa de estos factores (véase Buikstra 2010; Buikstra y Ubelaker 1994; Cohen y Armelagos 1984). Estos marcadores son útiles en estudios comparativos, ya que la prevalencia de los marcadores de estrés no específicos puede relacionarse con un elevado número de factores que afectan directamente, y de manera perjudicial, la salud general de un individuo o una población. Aunque a primera vista los defectos en el esmalte dental parecen ser evidencia de menor importancia, han sido correlacionados con una reducida esperanza de vida, ya que son adaptaciones al deterioro de la salud (Cook y Powell 2006; Simpson et al. 1990).

En este capítulo se ofrece una perspectiva bioarqueológica sobre los restos óseos descritos en los Capítulos C9 y C10. Las clases de edad establecidas por Wilkinson y Wharton (Capítulo C9) son: fetos/neonatos, infantes (6 a 18 meses), niños (1.5 a 12 años), adolescentes (12 a 18 años), adultos jóvenes (18 a 25 años) y adultos (25 a 40+ años). La muestra comprende individuos de las fases Atlan (n=8) y Molotla (n=18) (Figura 1). Los fetos/neonatos e infantes fueron excluidos de este análisis ya que murieron a una edad demasiado joven para mostrar marcadores óseos de estrés fisiológico sostenido. La tasa de mortalidad infantil durante la fase Molotla es significativamente más alta, un cambio que puede reflejar sistemas inmunológicos más débiles, tanto de los niños como de sus madres, ocasionando su incapacidad para sobrevivir.

COMPARACIÓN  DE  LAS  FASES  ATLAN Y MOLOTLA  Los habitantes de Yautepec vieron cambiar tanto su dieta como su salud en general después de la conquista del imperio azteca durante la fase Molotla (Figura 2). En la transición de la fase Atlan a la Molotla, se incrementó el porcentaje de individuos con defectos en el esmalte dental de 12.5% a 36.8%; el porcentaje de individuos con abscesos dentales también aumentó de 12.5% a 31.5%. El porcentaje de personas con pérdida de dientes ante mortem aumentó de 0% a 5.2% y la proporción de personas con desgaste dental pesada aumentó de 0% a 21%. En contraste, disminuyó la prevalencia de otros marcadores. Por ejemplo, se redujo el porcentaje de individuos con lesiones cariosas dentales de 37.5% a 31.5%, de individuos con cálculo (placa dental o sarro) de 62.5% a 36.8% y de personas con lesiones traumáticas o fracturas en los huesos largos de 37.5% a 15%; sin embargo, el porcentaje de individuos con periostitis (una infección en la capa exterior del hueso) disminuyó, aunque no de manera significativa, de 25% a 20% (Figura 3).

Figura C11-1. Distribución de edad.

En este capítulo, examino la salud general de los habitantes de Yautepec antes y después de la conquista azteca a través del análisis de los marcadores de estrés no específicos originalmente identificados por Wilkinson y Wharton (Capítulo C9). Los marcadores de estrés no específicos pueden ser ocasionados por numerosos factores, tales como la anemia, los parásitos, la talasemia (un desorden genético de la sangre), la desnutrición, las 439

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Figura C11-2. Marcadores de estrés no específicos y traumas esqueléticos

Figura C11-3. Marcadores de estrés no específicos y traumas esqueléticos, por porcentaje (Atlan, n=8; Molotla, n=10)

CASOS COMPARATIVOS 

El incremento en los defectos en el esmalte dental entre la fase Atlan y la Molotla sugiere un aumento en las épocas prolongadas de estrés fisiológico. Si bien la incidencia de caries dentales disminuyó ligeramente con el tiempo, el aumento en los abscesos dentales y en la pérdida de dientes ante mortem puede indicar que las infecciones secundarias a las caries fueron más graves durante la fase Molotla. La incidencia de periostitis se mantuvo relativamente constante durante las dos fases, sugiriendo que la población durante cada fase experimentó algún estrés físico que se manifestó en este marcador de estrés no específico. La reducción en las lesiones traumáticas y las fracturas durante la fase Molotla puede reflejar una reducción en la violencia interpersonal o la guerra, tal vez porque la agresión azteca cesó después de conquistar al asentamiento de Yautepec.

El aumento en las lesiones dentales entre la fase Atlan y la Molotla sugiere que el imperialismo azteca aumentó el estrés que experimentó la población de Yautepec. Se han realizado numerosos estudios sobre los efectos de la colonización en otras regiones; a continuación se resumen dos de estos casos comparativos para contextualizar las repercusiones del control imperial azteca que comenzó en el 1440 d.C., durante la fase Molotla. Los casos breves que se presentan a continuación ponen de relieve la relación entre los cambios culturales o socio-económicos y la variación en la salud individual o social. Wright (1990) consideró los indicadores dentales de estrés para identificar cambios epidemiológicos entre los períodos pre- y pos-contacto en los restos óseos del 440

M®½½›Ù, C11: P›ÙÝ֛‘ã®òƒ B®ÊƒÙØç›Ê½Ì¦®‘ƒ contacto, los casos fueron más graves. Casi el 83% de la población de la misión española se vio afectado por 2.5 defectos por diente en promedio, lo cual refleja un aumento en la incidencia tanta como la severidad del estrés fisiológico.

sitio maya de Lamanai, en el centro norte de Belice. Ella evalúa la etiología y la coincidencia de las bandas de Wilson y las hipoplasias del esmalte dental. Las bandas de Wilson son finas capas de prismas desorganizadas de esmalte a lo largo de las estrías de Retzius, las cuales se perciben en las secciones transversales longitudinales de los dientes. La prevalencia de estos indicadores de estrés permite la identificación de eventos epidemiológicos que conducen a la inestabilidad dietética (Wright 1990:26). Su muestra comprende 23 individuos adultos (excluyendo los de edad avanzada) del período Posclásico (900-1500 d.C.) y 36 del período posterior. La muestra del Posclásico incluye cuatro hombres y cuatro mujeres, mientras que la muestra del período poscontacto incluye siete hombres y ocho mujeres. La edad de la formación de las bandas de Wilson y las hipoplasias se determina en relación con la interfaz entre la corona y la raíz (unión dentina-esmalte) y representan el estrés agudo o crónico, respectivamente. La coincidencia de las bandas de Wilson y las hipoplasias del esmalte dental permite la identificación de una correlación directa entre estos dos marcadores de estrés. Se clasificaron las 74 hipoplasias observadas según su severidad (superficial, modal, aguda); la mayoría siendo clasificada como poco profundas. La taza de coincidencia entre las bandas de Wilson y las hipoplasias superficiales o modales vacila entre 20% y 25% en siete individuos del Postclásico y 36 de la época subsiguiente; la coincidencia apareció por primera vez entre los 2 y 3.5 años de edad. La etiología de cada defecto es levemente diferente; las enfermedades cortas e intensas se manifiestan en las bandas de Wilson, mientras que las enfermedades crónicas pero de baja intensidad ocasionan las hipoplasias (Wright 1990:33). Casi el 84% de las bandas de Wilson observadas en la muestra fechan al período poscontacto, mientras que solo el 16% de los defectos totales pertenecen a la muestra del período Posclásico. En resumen, el estrés era más agudo durante el período pos-contacto, lo cual sugiere un estilo de vida más difícil en comparación con los tiempos pre-coloniales.

LA PARADOJA OSTEOLÓGICA  La “paradoja osteológica” es relevante para entender las implicaciones del análisis osteológico en Yautepec. Este término describe las limitaciones de los estudios basados en la identificación de un deterioro en la salud a través de los marcadores de estrés no específicos en el esqueleto (Larsen 1997; Wood et al. 1992; Wright e Yoder 2003). La interpretación de los patrones de las enfermedades y la salud en los restos humanos arqueológicos no es tan intuitiva como parece; lesiones esqueléticas pueden no indicar un deterioro en la salud de la comunidad, sino más bien una mejoría. Una alta incidencia de lesiones esqueléticas refleja una población con mayor capacidad para soportar una enfermedad prolongada; es decir, el tiempo suficiente para que la enfermedad se vuelva tan grave que afecta el esqueleto. Las personas con sistemas inmunológicos incapaces de soportar una enfermedad, se morirán rápidamente y no habrá evidencia de dicha enfermedad en el registro arqueológico, aparte de la muerte obvia del individuo. Es menester contemplar la paradoja osteológica al interpretar los resultados del análisis de los restos óseos de Yautepec. Considerando el tamaño reducido de la muestra y el sesgo de incluir solo los contextos domésticos, es razonable concluir que durante la fase Molotla la población experimentó mayor desnutrición o estrés físico durante la infancia, lo cual ocasionó defectos en el esmalte dental. Durante el crecimiento, los recursos destinados al desarrollo esquelético y dental del niño fueron desviados a otra parte del cuerpo para asegurar su supervivencia, ocasionando interrupciones observables en el desarrollo esquelético (p.ej., bandas de Wilson, hipoplasias). Durante la fase Molotla, el crecimiento de los niños se interrumpió de forma significativa. Sin embargo, el elevado número de lesiones óseas demuestra que los niños fueron capaces de sobrevivir episodios periódicos de estrés nutricional o fisiológico grave. Al mismo tiempo, la gran cantidad de neonatos y niños en la muestra de entierros sugiere un aumento en las tasas de mortalidad infantil como resultado del deterioro de la salud y el incremento en el estrés en comparación con la fase Atlan.

En un estudio de una población indígena en Florida durante el período anterior al contacto (1-1565 d.C.) y el período Histórico (1566-1704 d.C.), Simpson (1999) emplea técnicas microscópicas para identificar desequilibrios homeostáticos en las estrías patológicas de Retzius y los defectos superficiales en los dientes, los cuales reflejan épocas de perturbaciones metabólicas. Tomando en cuenta las variaciones individuales normales, Simpson identifica la posición relativa de las estrías patológicas al dividir su ubicación a lo largo de la unión dentina-esmalte por la anchura cervical del diente. Se identificaron más casos de estrías patológicas en el grupo pre-contacto, siendo afectado el 67% de la población temprana pero solo el 36% de la población del período Histórico. Sin embargo, se observaron más defectos por diente en los restos más tardíos que en los restos más tempranos (un promedio de 2.2 por diente y 1.8 por diente, respectivamente). Aunque se identificaron menos defectos durante el último período pre-

DISCUSIÓN  Con respecto a los cambios culturales y socioeconómicos en Yautepec, es posible que cambios en la dieta ocasionaran los cambios en la prevalencia de algunos defectos dentales entre las dos fases (Cucina y Tiesler 2003; Cucina et al. 2011). Una dieta rica en carbohidratos ocasionará la producción de ácido láctico durante el 441

CƒÝƒÝ —› Yƒçã›Ö›‘ proceso de metabolizar azúcares y almidones, aumentando la prevalencia de bacterias (como Streptococcus mutans) y caries dentales. En cambio, una dieta alta en proteínas y carne se verá reflejada en un aumento en los depósitos de cálculo (sarro) en los dientes (Hillson 2008; Larsen 1997). Las personas con desgaste dental pesada durante la fase Molotla eran adultos mayores (40+) quienes consumían alimentos con abundante arena o piedra (de los metates), en comparación con los individuos de la fase Atlan. Estos resultados sugieren que durante la fase pre-imperial de Atlan, los habitantes de Yautepec gozaban de una dieta rica en fuentes de carne alta en proteína con una menor dependencia en las plantas, en particular el maíz molido con herramientas de piedra. En el Capítulo C8 se informa que se encontraron más restos de fauna en los basureros de las viviendas de la fase Atlan en comparación con la fase Molotla, indicando un cambio en la dieta entre las dos fases. La mayor prevalencia del desgaste dental mayor, las caries, los abscesos dentales y la pérdida de dientes ante mortem además de la disminución en la prevalencia del cálculo dental reflejan una dieta rica en maíz y fuentes vegetales con una menor dependencia en la carne. La evidencia que se presenta en el Capítulo C8 sugiere que los animales o bien no fueron incorporados a la dieta durante la fase Molotla o no estaban disponibles en grandes cantidades para el consumo. Los defectos en el esmalte dental, como las hipoplasias observadas en los restos de Yautepec, reflejan episodios duraderos y frecuentes de malnutrición o enfermedad entre los niños durante la fase Molotla, después de la conquista azteca de la región.

otros marcadores de estrés no específicos en los esqueletos de la fase Molotla (1430-1520 d.C.), los cambios en la dieta produjeron más episodios de estrés nutricional y fisiológico, particularmente en los niños. Aunque es difícil establecer con certeza, es probable que estos cambios fueron estimulados en parte por los efectos directos o indirectos de la incorporación de Yautepec al Imperio de la Triple Alianza. Junto con los procesos regionales de crecimiento de la población, la imposición de los impuestos imperiales impulsó la intensificación de las prácticas agrarias y aumentó el estrés económico que experimentaban las familias y los individuos. Los cambios en la salud dental de los habitantes de Yautepec sugieren que el control imperial afectó tanto a los individuos como a las provincias de una manera muy íntima, y muy distinta a la simple difusión de bienes e ideología imperial.

REFERENCICAS, CAP. C11   Buikstra, Jane E. 2010 Paleopathology a Contemporary Perspective. In A Companion to Biological Anthropology, edited by Clark Spencer Larsen, pp. 395-411. Wiley-Blackwell, Oxford Buikstra, Jane E. and Douglas Ubelaker 1994 Standards for Data Collection from Human Skeletal Remains: Proceedings of a seminar at the Field Museum of Natural History (Arkansas Archaeology Research Series 44). Arkansas Archaeological Survey, Fayetteville.

SUGERENCIAS PARA INVESTIGACIONES FUTURAS  Para examinar a fondo la dieta de Yautepec, sería útil integrar los estudios de isótopos estables—en particular de nitrógeno (15N) y el ratio de isótopos de carbono (12C/13C)—para identificar los componentes de la dieta antes y después del imperialismo azteca. Los isotopos de carbono permitirán la identificación de la importancia relativa de plantas C3 (legumbres, papas, yuca, algas) y C4 (maíz) en la dieta, mientras que el nitrógeno facilitará la identificación de las cantidades y fuentes de proteína consumida (p.ej., mamíferos terrestres, plantas o peces de agua dulce). Además, un análisis detallado de las hipoplasias del esmalte dental y las estrías de Retzius permitiría un análisis de grano fino de los episodios específicos de estrés nutricional en las ciudades aztecas provinciales e imperiales (p.ej., Wright, 1990).

Armelagos, George J. and Mark Nathan Cohen, eds. 1984 Paleopathology at the Origins of Agriculture. Academic Press, New York. Cook, Della C. and Mary L. Powell 2006 The Evolution of American Paleopathology. In Bioarchaeology: The Contextual Analysis of Human Remains, edited by Jane E. Buikstra and Lane A. Beck, pp. 281-322. Academic Press, New York. Cucina, Andrea, Cristina Perera Cantillo, Thelma Sierra Sosa, and Vera Tiesler. 2011 Carious Lesions and Maize Consumption among the Prehispanic Maya: An Analysis of a Coastal Community in Northern Yucatan. American Journal of Physical Anthropology 145(4): 560-567.

CONCLUSIONES  Se identificó un cambio en la dieta durante la fase Molotla, caracterizado por el aumento en la importancia del maíz, dejando huellas osteológicas en la forma de lesiones cariosas, abscesos dentales y desgaste dental pesado. Considerando esto factores en conjunto con los

Cucina, Andrea and Vera Tiesler. 2003 Dental Caries and Antemortem Tooth Loss in the Northern Peten Area, Mexico: A Biocultur442

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