Vanguardias estéticas del siglo XIX en la obra de Woody Allen
Descripción
Ciencias de la Comunicación Historia de los Medios Cátedra: Rubén Levenberg Docente: Ariel Gurmandi Alumna: Lucía Cholakian Herrera DNI 37540651 Trabajo final correspondiente a consigna D 20/11/2014 II Cuatrimestre Año 2014 Vanguardias estéticas en París Corpus: “Medianoche en París” (Woody Allen, 2011)
“¿Cuál de nosotros, en sus días ambiciosos, no ha soñado en el milagro de una prosa poética, musical sin ritmo y sin rima, lo bastante flexible y contrastada para adaptarse a los movimientos líricos del alma, a las ondulaciones del ensueño, a los sobresaltos de la conciencia? Es sobre todo de la frecuentación de ciudades enormes, del entrecruzarse de sus innumerables relaciones, de donde nace este ideal obsesionante.” Charles Baudelaire, Le Spleen de Paris
vanguardia. (Del ant. avanguardia, y este de aván , por avante, y guardia ). 1. f. Parte de una fuerza armada, que va delante del cuerpo principal. 2. f. Avanzada de un grupo o movimiento ideológico, político, literario, artístico, etc. 3. f. pl. Lugares, en los ribazos y orillas de los ríos, donde arrancan las obras de construcción de un puente o de una presa. a, o a la, o en, ~. 1. locs. advs. En primera posición, en el punto más avanzado, adelantado a los demás.1
En este trabajo expondremos los desplazamientos y tensiones en la bohemia y las vanguardias artísticas del siglo XIX y XX teniendo en cuenta los usos y prácticas que los vincularon y separaron a los dispositivos técnicos en pleno desarrollo en la época y las rupturas que generaron en el plano del género cinematográfico. Utilizaremos, para este propósito, el film Medianoche en París (2011), con el objetivo de establecer una analogía entre la relación de la pareja protagónica, Gil (Owen Wilson) e Inez (Rachel Mc Adams) y las luchas de aquella coyuntura entre la moral y las buenas costumbres burguesas en oposición la incomodidad de época y búsqueda de transformación impulsada por las vanguardias.
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Fuente: Real Academia Española
I Entre copas y tintas, el desarrollo de los dispositivos técnicos aterraba a la bohemia de Montmartre del siglo XIX. La pintura había muerto, decían, la burguesía lo había hecho de nuevo: se había impuesto una vez más, irrefutablemente, tornando los recursos de representación a su favor, haciéndolos suyos, apropiándose de la imagen. El daguerrotipo irrumpió en la Europa de la época de Charles Baudelaire para desafiar las reglas del juego en el arte, y algunos de sus colegas lograron subyugar sus frustraciones valiéndose de la técnica para sobrevivir, mientras otros predecían el fin, y en el medio, una clase buscaba sus formas de representación tras lo que fueran ya siglos de sometimiento a la sombra de la aristocracia. Lo que sería el comienzo de una prolongada y acelerada historia del desarrollo de la técnica de captación de la imagen generó diversos debates en torno a cómo utilizarlo y para qué, los cuales diversificaron sus usos y devinieron en múltiples vanguardias y movimientos estéticopolíticos que construyeron y continúan haciéndolo espacios de experimentación y problematización en el campo de las artes. Estas vanguardias se hicieron cargo de desafiar en diversos campos las fronteras de lo verosímil en materia de usos del dispositivo y producción artística, y es su legado hoy menester para comprender y analizar el arte alternativo y vanguardista en todos sus aspectos. Fue bohemia francesa tomando a Charles Baudelaire, pionero en el simbolismo francés, primero en utilizar el término “vanguardias” la cual construyó como la lucha contra la moral burguesa y su gusto, a favor de la autonomía del campo estético. Los bohemios perseguían, obsesivamente, una poesía autónoma que los liberara del contexto ambiental en al cual estaban sometidos, en el que la máquina burguesa perteneciente a la misma burguesía de la que muchos de ellos provenían y negaban se imponía. Ellos perseguían la belleza en un mundo crecientemente racional y frío. En palabras de Walter Benjamin, la importancia de Charles Baudelaire fue la de haber sido “el primero en manifestar concretamente la fuerza productora del hombre alienado, convertido en extranjero ante sí mismo” (Águila Gómez, 2003:11). Fue esta alienación la que separó, durante el siglo XIX, a la bohemia francesa tradicional de aquellos “inventores” de los dispositivos fotográficos. Cabe distinguir aquí a los que fueron quienes desarrollaron específicamente el dispositivo del daguerrotipo Daguerre, quien lo patentó en 1839, y Niepce, quien si bien falleció en 1833, aportó significativos conocimientos en el proceso de su invención, con su experimentación con técnicas de litografía y quienes fueron luego los “artistas fotográficos”, quienes eran artistas de las bohardillas parisinas y, frente a las dificultades de sobrevivir como pintores en aquel
contexto se abocaron a brindar servicios a través del dispositivo del daguerrotipo. Como ejemplo de éstos se observa el caso de Nadar, un pintor francés frustrado que fuera el primero en instalar un estudio fotográfico en la Rue SaintLazare, logrando así converger su potencial artístico con una búsqueda de supervivencia económica, valiéndose de los desarrollos técnicos de la época. Nadar fue uno de los primeros de los muchísimos artistas de Montmartre que se ajustaron a las demandas burguesas a partir de las posibilidades ofrecidas por los nuevos dispositivos, como forma de comercialización y experimentación en su arte. La técnica de la fotografía se establece alrededor de 1850, y es en el período que va de 1895 a 1915 que se dan las primeras experiencias con lo que comienza como lo cinematográfico y luego se transformará en el cine. Estos pioneros fueron los hermanos Louis Lumière y Auguste Lumière , introduciendo así el cinematógrafo con su cortometraje de 1895 L'arrivée d'un train en gare de La Ciotat , Melies, que incorpora en 1902 la ficción en el mundo de la imagen en movimiento junto a Voyage dans la Lune y Griffith, en 1915, con su largometraje de casi tres horas The Birth of a Nation, en el cual se comienza a otorgar funciones complejas a procedimientos técnicos como el primer plano (Costa, 1992:72) . Es a partir de estas experiencias principalmente que se consolida el lenguaje del cine y se comienzan a establecer sus formas. En este marco, quienes buscaban ser rupturistas del modelo y los estilos burgueses en el arte, los vanguardistas, encuentran en el cine un espacio en el cual vehiculizar esta pesquisa. Contemplan al cine con gran interés, por un lado, desde una perspectiva de que el dispositivo parecía facilitar un potencial destructivo de la cultura burguesa y por el otro, por las capacidades de experimentación que permitía (Costa, 1992:82) Fue hasta fines de la década de 1920 que el cine era mudo, o, en términos exactos, nosincronizado, y se grababa en forma separada como contrapunto de la imagen. La cámara grababa en una velocidad de dieciséis fotogramas por segundo, siendo hoy la velocidad de veinticuatro. Asimismo aún no se establecía de forma definitiva la técnica en color, por lo cual serían en “blanco y negro”, es decir, una escala cromática de grises que tenía códigos de sentido. En algunos casos, los fotogramas eran coloreados a mano. Es por esto que la mayoría de los resultados más característicos del entrelazamiento de las vanguardias con el cine fueron de este carácter. Las vanguardias en el cine tienen dos propósitos muy marcados: uno, romper los cánones narrativos tradicionales, especialmente en oposición al ascenso de la industria hollywoodense de la década. El segundo fue el de buscar a partir de esta ruptura lenguajes que en muchos casos devinieron en abstractos. Es así que se puede hablar de un cine figurativo, uno no figurativo, surrealista, dadaísta, futurista, impresionista,
expresionista, por citar algunas de las líneas que se fundaron en el proceso de experimentación cinematográfica desde una perspectiva avantgarde. Es en 1917 que el formalismo ruso comienza a experimentar con el cine, junto a los desarrollos y sistematizaciones otorgados al trabajo sobre el montaje de Kulechov, y los trabajos históricos de Einsestein y Vertov en el cine puño y el ojo respectivamente. Se comienza a dar cuenta aquí de la penetración de las vanguardias en el mundo del cine, en este caso, con una clara impronta revolucionaria en el contexto de la Revolución Rusa y la primer guerra mundial. En Europa occidental los primeros resultados del trabajo de las vanguardias en el cine se verán a mediados de los años 20, aunque ya desde 1916 junto al manifiesto futurista de Marinetti se comenzaba a gestar un lazo entre el cine y la vanguardia sin precedentes.2 Es sobre ésta década que trabajaremos para analizar el desenvolvimiento de las vanguardias en relación con el cine. Para comprender este proceso, sus elementos e impactos, tomaremos como punto de partida la película Medianoche en París, de Woody Allen, filmada en 2011. Gil Pender (Owen Wilson) es un guionista de Hollywood que padece de “complejo de la edad de oro”. No se siente cómodo con sus tiempos ni su racionalidad, y por esto sus relaciones peligran a cada palabra que pronuncia: el personaje de su suegro es la materialización perfecta de un burgués molesto y contaminante, su mujer, la del sometimiento del gusto y la razón en pos de una clase y un poder que pretende sostener. Pender se dedica a escribir películas “buenas y fáciles de olvidar”. También escribe literatura, y esto lo remonta, junto a su nostalgia, a un lugar en el que se siente más cómodo. Siente una empatía obsesiva por los vanguardistas del siglo XX y desearía haber sido capaz de habitar París en esa época, lejos de los tiempos aburridos y tecnocráticos en los cuales le tocó nacer. Por alguna razón extraordinaria e inexplicable, descubre que todas las medianoches se abre un portal que lo conecta con aquel mundo, y comienza a hacer uso de él. En sus noches de fiesta en la bohemia de los 20, Gil Pender discute, baila e intercambia con personajes como Pablo Picasso, Salvador Dalí, Man Ray, Luis Buñuel, Ernest Hemingway y los Fitzgerald. Nos centraremos en algunas de estas conversaciones y momentos para desarrollar más en profundidad el contexto de la vanguardia, su historia y principales aportes al mundo del arte.
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El futurismo no tuvo una trascendencia destacable en el cine, pero de todas formas su impronta “destructiva” explícita en su manifiesto puede ser reconocida en varios momentos de otras vanguardias en el cine.
II Salvador Dalí, Man Ray y Luis Buñuel fueron tres de las figuras más importantes del movimiento surrealista, liderado por André Bretón, en cuyo manifiesto se autodenomina: “Automatismo psíquico puro por cuyo medio se intenta expresar, verbalmente, por escrito o de cualquier otro modo, el funcionamiento real del pensamiento. Es un dictado del pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajeno a toda preocupación estética o moral.”3 El surrealismo se desprende, en 1924, de lo que fue el movimiento dadaísta (del cual podemos destacar como obra emblemática Entr’acte, de René Clair, en la cual se hace explícita la negación y el rechazo por los valores burgueses). Man Ray, fotógrafo, perteneciente en primera instancia a aquel movimiento, sostenía, como en los años de la bohemia del siglo XIX una búsqueda por la negación de los valores estéticos de la razón, en contra de la lógica estética burguesa. Es él quien filma en el año 1923 El Retorno a la Razón , en el que se puede ver con mucha claridad la búsqueda de la ruptura del razonamiento lógico del estilo burgués. El cortometraje, como también lo harán piezas del surrealismo que analizaremos, remite a la ruptura absoluta de la estructura lógica en pos de una tendencia vinculada a lo onírico. El surrealismo se vio fuertemente influenciado por el psicoanálisis de los años 20. Como establecía Antonin Artaud, en sincronía con el pensamiento del movimiento, “si el cine no expresa sueños o todo lo que en la vida consciente se asemeja a los sueños entonces el cine no existe.” Junto al aporte de Man Ray, fue esencial el de Salvador Dalí y Luis Buñuel. El primero fue el reconocido artista plástico cuyas obras estuvieron caracterizadas por su fuertes formas oníricas, entre las cuales podrían citar como clásica la obra “La persistencia de la memoria” de 1931.4 El segundo, Luis Buñuel, coterráneo de Dalí, era cineasta. A mediados de la década del 20 emigró a París donde se instaló e interesó profundamente por el movimiento liderado por Breton, hasta convertirse luego en uno de sus máximos referentes. Junto a Salvador Dalí produjeron la eterna obra “Un Perro Andaluz”, en la cual se consolida el surrealismo como gran vanguardia estética en el cine. La obra es un sueño en sí: hechos aislados asociados libremente, vinculados al deseo, a la muerte, al dolor y a la pérdida de la razón. Fue el mismo Buñuel quien estableció que el cortometraje fue inspirado por dos sueños, uno propio y otro de Dalí. Juntos también produjeron “La
Primer manifiesto surrealista, Andre Breton, 1924. http://thales.cica.es/rd/Recursos/rd99/ed99005501/manisur1924.html 3
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http://img2.wikia.nocookie.net/__cb20090117170130/wikiart/es/images/9/9b/La_Persistencia_de_la_Memoria.jpg
Edad de Oro” que luego les valdría una discusión que culminó con su vínculo y por ende, con sus colaboraciones. En términos del lugar que ocupaban estas obras en la industria cinematográfica, podemos establecer que su carácter era independiente. Fue la madre de Buñuel quien financió, por ejemplo, la realización de “Un Perro Andaluz”. En una de las escenas de la película de Woody Allen los tres personajes entran en el bar en el que está Gil Pender y se sientan con él en la mesa. Salvador Dalí, obsesionado en aquel presente con la idea del rinoceronte, insiste en traerlo a colación en la conversación, mientras que Luis Buñuel, oscuro y reflexivo, pita su cigarrillo con la mirada clavada en el perfil de Pender. Al exponer el protagonista sus inquietudes respecto a la situación en la cual se encontraba, Man Ray responde “Usted habita dos mundos. Eso es perfectamente normal. Nada raro en eso”, haciendo una afirmación de profundo contenido surrealista: era posible, claro, habitar dos mundos. El de la vigilia y el del sueño. Y en el medio ellos posicionaban al arte. “Yo veo un fotografía”, dice Man Ray cuando Pender le explica su situación. “Yo veo una película” agrega Luis Buñuel. “Y yo” dice Salvador Dalí, con los ojos desorbitados de ingenio y brillantez, dice “veo un rinoceronte” Al día siguiente, Gil Pender reflexiona y se acusa a sí mismo de realista. Puede pensarse este momento de la película el del encuentro con el surrealismo como el que marca un punto de inflexión en el personaje. El encuentro con los surrealistas le genera al personaje principal una ruptura de los límites de lo verosímil en su propia obra, lo cual sucedió exactamente en el plano del cine en la década del 20, con la irrupción de esta vanguardia en la manipulación de los dispositivos de la imagen. En el segundo encuentro entre Buñuel y Pender, el protagonista se vale de su recientemente adquirida confianza para hacer una sugerencia de trama para un film a Buñuel: durante una cena, los invitados se dan cuenta de que no pueden salir del salón. “¿Por qué no podrían salir del salón?” pregunta Buñuel desconcertado. “Simplemente no pueden” responde Pender, siendo fiel a la irracionalidad propuesta por la vanguardia. Buñuel, en desconcierto, reflexiona. Este es un guiño a una de sus películas más conocidas películas, “Un Ángel Exterminador” que filmaría el cineasta ya en su período en México, en 1962, junto a Gustavo Alatriste. En el film también se da la aparición, una noche de tertulias y trabajo en la casa de Gertrude Stein, de Pablo Picasso, quien fue un referente del dadaísmo y el surrealismo en las artes visuales. Si bien él nunca se
proclamó surrealista, sus obras aparecieron en ocho de las once publicaciones de la Révolution Surrealiste entre 1924 y 1925. 5
III A lo largo del film, Gil Pender es atraído por dos polos contradictorios: por un lado, su prometida, Inez, hija de dos republicanos millonarios de Estados Unidos, amante de los lujos y Malibú, fiel a los valores de la burguesía norteamericana de la costa oeste. Por el otro, su sensibilidad e instinto artísticos y el mundo que descubre a lo largo del film, dotado de poesía, pintura y danza, teñido de vaivenes y discusiones en torno a diversas perspectivas de mundo que se levantan contra las estructuras planteadas por el desarrollo de un sistema opresor que no los incorpora por lo que son. Pender, como artista burgués, se aferra a sus contradicciones e intenta resolverlas a través del vínculo con aquellos que, como él, también son incomprendidos. Desde esta perspectiva es que se delimitan en el film de Allen dos mundos contrapuestos pero que conviven, empujándose entre ellos: el de la razón y el de la sensibilidad. Es entonces cómo Allen configura en su relato relaciones que reflejan las tensiones de la época de las vanguardias (y también, las de la actualidad). La película funciona como un puente entre las épocas y también plantea un cuestionamiento para pensar el momento actual que atraviesa el mundo del arte. En paralelo al desarrollo de las vanguardias, se gestaba en Estados Unidos lo que sería la industria cinematográfica de Hollywood, caracterizada por el surgimiento de la figura del productor, una lógica capitalista de maximización de beneficios abaratando los costos, la creación de estudios cinematográficos (el primero, Paramount, fue fundado en 1918) y el advenimiento de los tres sistemas: star system, de estrellato, abocado a la creación de “estrellas” de cine que serían una de las grandes atracciones de los públicos masivos, studio system, con la fundación de los estudios y el sistema de géneros, que determinaría las formas que cobrarían los films según los géneros a los que pertenecieran (comedia, película romántica, western, etc). Este mundo, que sobrevivió crisis económicas y regulaciones por parte del Estado en las décadas siguientes, es al que en 1968 se incorpora con su primer obra el director y escritor Woody Allen, con Take the money and run , financiada por Palomar Pictures6. Pasaron sólo once años entre su primer experiencia y el estreno de Manhattan , obra que lo consagró como director y que se conviritó en un clásico en la historia del cine. 5
Publicada en París desde el 1 de diciembre de 1924 hasta el 15 e diciembre de 1929 , La revolution surrealiste fue dirigida por Pierre Naville y Benjamin Peret, hasta que Breton se hizo cargo a partir del tercer número.http://melusine.univparis3.fr/Revolution_surrealiste/Revol_surr_index.htm 6 Woody Allen IMDB http://www.imdb.com/name/nm0000095/
Sus películas son identificadas con la categoría “cine de autor”, junto a otros grandes directores como David Lynch, Quentin Tarantino y Martin Scorsese. Si bien Allen no produce sus películas con financiamiento de los grandes estudios de la costa oeste, comparte características con las producciones del mundo de Hollywood7 y es él considerado una de las figuras de lo denominado “New Hollywood”. Sus películas se consumen masivamente por públicos en todo el planeta y están, generalmente, protagonizadas por estrellas de la industria. Por lo tanto, puede establecerse que su personaje ficticio, Gil Pender, proviene del mismo mundo que él.
IV Durante el transcurso de la película, aparece un personaje antagónico a Pender: Paul, un académico pedante que seduce a Inez con su ingenio y datos históricos de los más extravagantes. Paul representa en la película la racionalidad burguesa y la búsqueda por el conocimiento, dos valores antagónicos a los de las vanguardias. Es entonces que Inez compara a los personajes y resuelve que el “complejo de la edad de oro” de Gil es intolerable. En paralelo, en sus paseos de medianoche, Gil conoce a Ariana, una estudiante de diseño de Lyon que tiene una debilidad por los artistas y su sensibilidad. Tienen una breve historia de amor que culmina en una ruptura que luego se convierte en la tesis fundamental del film: Ariana se encandila con la posibilidad de viajar a su edad de oro: 1890, la Belle Epoque. Allí, su encuentro con Gaugin, Lautrec y Degas la convence de que los años 20 en París carecían de sensibilidad y de arte, en oposición a la verdadera época dorada en la que ahora tenían la posibilidad de instalarse. Gil comprende entonces que cada época responde a la nostalgia por una anterior. Retomando la definición de la Real Academia Española citada al comienzo del trabajo, si tomamos a las vanguardias como movimientos adelantados a su tiempo, no es difícil entender por qué, en muchos casos, el presente no representaba más que incomodidad. Ésto se vio reflejado en su forma de deconstruir las narrativas tradicionales, proponiendo el caos como lógica, criticando al buen gusto, buscando la belleza estética y otorgando también un sentido político: la ruptura per se fue su marca ineludible. Lo que sucedió en muchos casos fue que esa ruptura tardó poco en pasar de ser novedad a ser establecida en el momento del presente contra el cual se atentaba. Gil Pender decide volver a 2011, abandonando a Ariana en la Belle Epoque, a Buñuel y Dalí en los 20, y a su prometida, que parte de nuevo a Estados Unidos. Se encuentra entonces en el bellísimo Pont Neuf con 7
De hecho, un caso de Allen es denominado el “mayor escándalo de Hollywood”: la acusación por parte de abuso sexual de su hija adoptiva, Dylan Farrow, caso que vió la luz en el año 1992. Creemos importante no dejar pasar estos detalles más allá de la calidad de la obra del artista. http://www.elmundo.es/loc/2014/02/02/52edc8b2e2704efd668b456a.html
una chica que había conocido vendiendo discos de Cole Porter, y por primera vez en toda la película vemos al personaje Owen Wilson sin una marca de nostalgia en la mirada. A modo de conclusión, podemos afirmar que el film Medianoche en París ilustra con fidelidad las tensiones de la época de principios de Siglo XX: Un momento en el que el mundo comienza a aprehender los nuevos dispositivos, generándose así prácticas de uso y consumo diversas, y en el que el cine por un lado se instaura como industria de lo que serán luego los medios masivos y, por el otro, es utilizado con un fin experimental y, hasta en algunos casos, revolucionario. La unión de las vanguardias con el cine sirve a los propósitos que perseguían los artistas de la época, y fue sin dudas el séptimo arte muy útil para estos objetivos. Muchas de las películas producidas en esa época no sólo son clásicos sino que son tomadas como referencias en términos de experimentación y ruptura. Su recorrido continúa, aunque sea en forma de nostalgia: no fracasaron.
BIBLIOGRAFÍA SÁNCHEZ BIOSCA, V, “Cine y Vanguardias Artísticas”, Paidós, Buenos Aires. 2004 Costa DEL ÁGUILA GÓMEZ, J, Las ideas estéticas en Baudelaire , BENJAMIN, W, Tesis sobre la historia y otros fragmentos , Ítaca, España. __________, La obra de arte en la época de la reproductibilidad técnica, Ítaca, España. BAUDELAIRE, C, Las flores del mal, Colihue, Buenos Aires, 2011 __________, Le Spleen de París, Espuela de Plata, España, 2009 COSTA, A, Saber ver cine . Barcelona, Paidós, 1992 TOMÁS UCEDO, J, París, capital del siglo XIX en: Revista de Ciencias Sociales, Universidad de Costa Rica, Costa Rica, 2003
ANEXO
La Persistencia de la Memoria, Salvador Dalí
Montmartre, París, a mediados del Siglo XIX
Fotograma de “Un Perro Andaluz” de Salvador Dalí y Luis Buñuel
“La Llorona” Pablo Picasso, 1937
Fotograma de “Retorno a la Razón” de Man Ray
Gil Pender, como un flaneur en términos baudelaireanos, recorre París
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