Una estrategia de aprendizaje activo para el campo de la salud: el estudio de caso

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Descripción

Una estrategia de aprendizaje activo para el campo de la salud: el estudio de caso.
El estudio de caso es una estrategia de enseñanza imbricada en los conceptos y estrategias del aprendizaje activo. Promueve que el estudiantado se enfrente ante una situación de la "vida real" en la que debe aplicar los conceptos y destrezas aprendidos previamente contextualizados con la intención de presentar una diversidad de opciones dirigidas a resolver la situación planteada. Como estrategia pedagógica, permite al profesorado el desarrollo de una actividad docente en la que, no solo se utilicen unos conceptos y destrezas enseñados, sino la posibilidad de plantear situaciones paradigmáticas que el estudiantado podría encontrar en su desempeño durante su futura vida profesional. De manera que esta estrategia capacita a los y las discentes a utilizar sus destrezas de análisis y de pensamiento crítico y contribuye al desarrollo del sentimiento de pertinencia del material que se ha facilitado en el aula al trasladarlo a posibles situaciones del mundo del trabajo (García, Sánchez, Jiménez y Gutiérrez, 2012; Fulbright, 2014).
Los estudios de caso no son unas herramientas nuevas. Su uso se ha generalizado en todos los campos del saber en los que se pretenda la aplicación del conocimiento adquirido en los cursos en situaciones del mundo real. "Los casos vienen en diferentes formas, de una simple pregunta, '¿Qué harías en esta situación?' a una descripción detallada de una situación acompañada de datos por analizar"(Center for Excellence & Innovation in Teaching,sf.). Son actividades centradas en el estudiantado basadas en temas que demuestren los conceptos teóricos en un ambiente real. Estos estudios de caso pueden ser situaciones que se planteen a nivel individual como de actividades que involucren el trabajo grupal:
"El planteamiento de un caso es siempre una oportunidad de aprendizaje significativo y trascendente, en la medida en que quienes participan en su análisis logran involucrarse y comprometerse tanto en la discusión como en el proceso grupal para su reflexión... El estudio de caso es una técnica de aprendizaje en la que el sujeto se enfrenta a la descripción de una situación específica que plantea un problema, que debe ser comprendido, valorado y resuelto por un grupo de personas a través de un proceso de discusión." (Colección.educ.ar,sf.)
El hecho de plantear una situación que pueda servir de paradigma para futuras situaciones de la vida real que pudiera revivir el estudiantado en su escenario de trabajo destaca la necesidad de redactar un buen estudio de caso. En la literatura profesional se destacan varias características que debe exhibir un estudio de caso efectivo:
verosimilitud. El caso planteado debe plantear una situación que sea posible y atenta a la realidad, es decir, una situación que pueda ocurrir en el ámbito de la realidad cotidiana o profesional. El profesor puede utilizar sus experiencias vividas o adaptar las situaciones que leemos en los periódicos.
provocador. No solo debe mantener ese elemento de credibilidad, sino que debe motivar al estudiante a adentrarse en su estudio de forma curiosa. El caso debe ser atractivo.
innovador. Esta característica nos impele a buscar casos actuales, de situaciones noveles y que contribuyan a que el estudiante vea la pertinencia del material estudiado a la luz de situaciones recientes.
concisión. Evite la verborrea o los excesos de tecnicismos científicos. Esos tecnicismos los podrá utilizar el estudiante en su análisis de ser necesarios.
fundamentado en las teorías estudiadas. Si lo que pretendemos es que el estudiantado aplique los conocimientos adquiridos de una forma activa para que los mismos pasen a su memoria profunda y se conviertan en parte de su estructura cognitiva, los casos desarrollados se deben analizar a la luz de las teorías y conceptos estudiados en el curso.
ambigüedad. El caso debe ser ambiguo para otorgar la oportunidad de una diversidad de interpretaciones a la hora de realizar su análisis. De esa manera, se fomentan las destrezas de pensamiento crítico y la noción de que para la solución de los problemas, se pueden hallar una variedad de opciones válidas.
metódico. El desarrollo del estudio de caso desarrollado por el profesorado es metódico porque el estudiante debe efectuar una serie de pasos para sugerir una posible solución al caso planteado y a un proceso de toma de decisiones fundamentado (Colección.educ.ar, sf.)
Por esta razón es necesaria la redacción de un buen estudio de caso: debe guardar gran correspondencia con los objetivos del curso que el profesor o la profesora esté facilitando. Asimismo, la literatura consultada (Ommundsen, 2001; Davis y Wilcock,sf.; Boston University Center for Excellence in Innovation in Teaching, sf.; National Center for Case Study Teaching in
Science, sf.) sugiere que para desarrollar el estudio de caso se debe:
Ofrecer a los estudiantes un marco conceptual para su análisis, suficiente información para que los estudiantes ponderen una variedad de soluciones y que se puedan transferir en situaciones que pudiese enfrentar el estudiantado cuando ingrese al mundo del trabajo.
Definir el problema del estudio de caso cuidadosamente. Es necesario que el creador o creadora del estudio de caso haya ponderado de manera exacta cuáles son los conceptos o aspectos teóricos que se convertirán en el sustrato del caso.
Anticipar las posibles soluciones al problema planteado. Si no es un caso de mayor dificultad, se puede asignar individualmente y luego en la plenaria de la clase, discutir las posibles soluciones al problema. Si el problema puede presentar una variedad de soluciones, se debe considerar subdividir el grupo en grupos de trabajo de 4 o 5 miembros y asignarle un lapso de tiempo para finalizar el estudio de caso.
Presentar el problema al estudiantado. Sea creativo. Utilice noticias del periódico, revistas científicas o médicas, vídeos, caricaturas u otros medios que resulten atractivos y motivadores.
Dividir la presentación del caso. Luego de un planteamiento inicial que incluya una información intrigante y que mantenga la verosimilitud en términos de lo real del caso, el profesor o la profesora debe dividir el caso e incorporar unas preguntas guías que sirvan de marco a los estudiantes. Cuando los estudiantes hayan respondido satisfactoriamente esas preguntas, se le entrega la continuación de la situación incrementando el nivel de dificultad de las preguntas y las destrezas de pensamiento a las que apele.
Enseñar a los estudiantes cómo se realiza el análisis de un estudio de caso: (definición del problema, exploración de posibles soluciones, establecer una hipótesis, delimitar las opciones para la solución del problema y probar la solución del mismo).
Proveer retrocomunicación. Manténgase en contacto con los subgrupos y ofrezca la retrocomunicación adecuada ya sea de forma presencial ya de manera virtual por medio de las redes sociales.
Identificar las herramientas de avalúo que utilizará para corroborar el trabajo grupal y de cada miembro del subgrupo en forma particular.
¿Cuál es la utilidad de esta estrategia?
A guisa de repaso, el estudio de caso contribuye al desarrollo de unas destrezas de pensamiento y metacognitivas que inciden en la capacidad del estudiantado de retención del material estudiado. Por otro lado, contribuye al desarrollo de las destrezas del siglo XXI: creatividad, innovación, comunicación, colaboración (en el caso de que sea un trabajo cooperativo), flexibilidad, adaptabilidad y la alfabetización de la información, entre otros. Algunas de las ventajas de la utilización de esta estrategia son:
Propiciar el razonamiento analítico a base de la observación, identificación de datos planteados en el caso, establecer hipótesis y vinculación con las teorías estudiadas.
Identificar la aplicabilidad y pertinencia del material estudiado y cómo trasladarlo a situaciones del ámbito laboral.
Comparar y contrastar situaciones de índole real.
El estudiantado asume un rol activo ante el proceso de aprendizaje.
El rol del profesorado es el de mediador en el proceso de aprendizaje. Deja de ser la única figura trasmisora de conocimientos.
El profesorado se ve obligado a mantenerse actualizado en las situaciones que se viven en el país y que inciden en su vida profesional o social.
El estudio de caso se puede desarrollar a base de tres tipos de caso:
Tipo 1. La descripción de la situación tiene los datos suficientes para que los alumnos realicen un diagnóstico de la situación o una identificación del problema y de sus causas. Las preguntas que se formulan son: ¿Cuál es el problema? ¿Cuáles son sus causas?
Tipo 2. Además de describir la situación, también se identifican el problema y sus causas. Se trata de determinar las posibles soluciones y analizar sus ventajas y desventajas. Las preguntas que se plantean son: ¿Cuáles son, a tu juicio, las soluciones al problema planteado? ¿Cuál consideras que es la mejor solución y por qué?
Tipo 3. En este caso se describe la situación, se presenta el problema de forma clara, se dan soluciones y se justifica la selección de cada una de ellas. Se pretende que el alumno analice la solución elegida, que por lo general, presenta algunos inconvenientes. Las preguntas que dirigen el análisis son: ¿Fue correcto el diagnóstico realizado? ¿Fue adecuada la solución elegida? ¿Fue correcta su puesta en práctica? ¿Qué se debería haber hecho? ¿Cómo? ¿Por qué? (Colección.educ.ar,sf.)
¿Y los estudios de caso en el campo de la salud?
Los programas de ciencias aliadas a la salud son campos fértiles para la inclusión de estrategias que propendan al aprendizaje activo y significativo. La naturaleza de estos programas, en los que el estudiantado necesita aprehender y mantener en su memoria profunda una gran cantidad de datos, unidos a las destrezas psicomotoras que debe desarrollar un profesional del campo de la salud en términos de los equipos actualizados que maneja y la necesidad imperiosa de desarrollar las destrezas de toma de decisiones informadas, inciden en la relevancia de esta estrategia. Actualmente, en los programas de las ciencias aliadas a la salud se utiliza unos equipos computadorizados en maniquíes que simulan las enfermedades de un ser humano y contribuyen a desarrollar las destrezas de manejo de las condiciones que el futuro profesional encontrará en su escenario laboral (Flo, Flaathen y Fagerström, 2013). Por este motivo, las estrategias de aprendizaje activo, entre ellas el estudio de casos, pueden contribuir en la capacitación cognitiva de los educandos quienes luego se enfrentarán a prácticas como las que se señalaron.
El estudio de caso, por ejemplo, fomenta que el estudiantado analice un escenario clínico y conteste preguntas relacionadas al caso. El foco deber ser el de interpretar las necesidades del paciente y sus problemas, identificar los datos adicionales que se deben obtener, aplicar los conceptos y teorías de la clase o de las lecturas realizadas al caso, examinar el caso desde diferentes perspectivas e identificar las intervenciones (Oermann y Gaberson, 2012). El estudio de caso es una estrategia que se puede trabajar como una actividad grupal porque capacita al estudiantado en el desarrollo de destrezas de pensamiento y clínicas y a llegar a un consenso (Oermann y Gaberson, 2012). Contribuye a desarrollar las destrezas de trabajo en equipo, de tanta necesidad en el escenario de la salud.
No obstante, Fulbright (2014) señala que no existen muchas investigaciones del uso de los estudios de caso en el campo de la salud. Coinciden con esta posición Winkelman, Kelley y Savrin (2012) quienes afirman que, sorpresivamente , el estudio de casos no tiene una larga historia en la educación en el ámbito de la enfermería. Sin embargo, Sprang (2010) destaca que tanto la literatura de enfermería y la de ciencias de la salud discuten los beneficios de utilizar el estudio de caso para instruir a los estudiantes a pensar críticamente y desarrollar sus capacidades para la solución de problemas. Por este motivo es que, someramente, aspiro a presentar algunas investigaciones que corroboran la efectividad de esta estrategia en el campo de marras. Asimismo, ofrecen la oportunidad de sopesar el valor de las mismas para su campo de peritaje y la enseñanza de las destrezas inherentes de la misma.
Forsgren, Christensen y Hedeman (2013) llevaron a cabo una investigación cualitativa con estudiantes de un programa de enfermería en Suecia en torno a sus experiencias con el uso del estudio de casos como estrategia de enseñanza. Señalan que el estudio de caso es una variación del modelo del Aprendizaje Basado en Problemas en las que se involucra al estudiante en unas actividades retantes en términos cognitivos. En el estudio se quiso auscultar la percepción de los estudiantes en torno a si esta estrategia contribuía en sus procesos de aprendizaje. El análisis cualitativo del contenido se hizo basándose en las aseveraciones escritas de los estudiantes al evaluar los cursos. La percepción del estudiantado fue que el estudio de casos era una herramienta que al combinar la teoría con la práctica les proveía con una visión abarcadora de la profesión a la que ingresarían. Señalaron obtener un conocimiento adecuado acerca del cuidado del paciente y que contribuyó a capacitarlos para obtener un entendimiento holístico de los problemas de salud de los pacientes. Las reflexiones relacionadas a los casos ampliaron la perspectiva del estudiantado, incrementaron su capacidad para la cooperación y los ayudaron a obtener un aprendizaje a largo plazo. Este método de enseñanza les ofreció la oportunidad de aumentar sus destrezas de pensamiento crítico y de juicio al aplicar la teoría en la práctica. Finalmente, consideraron que adquirieron un conocimiento adecuado acerca del cuidado de los pacientes lo que podría beneficiar el cuidado del paciente en el futuro al actuar profesionalmente durante su etapa de estudiantes.
Ghafouridard, Hairian y Aghajanloo (2013) se propusieron auscultar la opinión de los estudiantes de enfermería acerca de la estrategia del estudio de casos y cómo compara con la estrategia de la conferencia. La población del estudio se compuso de treinta estudiantes de enfermería a quienes se les presentó una sesión académica dividida en dos partes. En la primera parte se presentó con el método de estudio de caso; en la segunda parte se utilizó la conferencia como estrategia de enseñanza. El tiempo lectivo para cada estrategia fue de 45 minutos. Al finalizar la sesión, se les solicitó a los estudiantes que compararan las dos estrategias y que llenaran un cuestionario. De acuerdo a los resultados, muchos estudiantes estuvieron completamente de acuerdo en que el estudio de casos incrementó la comprensión de lectura al compararlo con la conferencia.
Oermann y Gaberson (2012) identifican un modelo (Ulrich y Glendon, 2005) que se puede seguir a la hora de desarrollar un estudio de caso para un curso de enfermería o de ciencias de la salud. Los siguientes pasos proceden del modelo de, citado en su libro. Las etapas son:
Incluye, por lo menos, tres párrafos.
El caso se plantea en el primer párrafo, seguido de unas preguntas de solución de problemas y pensamiento crítico.
El caso se desarrolla mientras el maestro o maestra presenta nueva información acerca del paciente o de la situación clínica en un segundo párrafo, acompañado nuevamente por unas preguntas de alto nivel.
Al ofrecer unos nuevos datos en los párrafos subsiguientes, la maestra presenta un cambio en el espacio de trabajo del estudiantado.
Los estudiantes completan un ejercicio grupal de redacción y de reflexión que los capaciten para identificar dónde un aprendizaje más detallado es necesario.
El estudio de caso puede ser una gran estrategia en los procesos académicos en los programas de ciencias aliadas a la salud. El llamado es para los profesores quienes pueden utilizar casos ya redactados (es común encontrar ejercicios de este tipo en los textos universitarios o en páginas Web) o desarrollados basados en las experiencias clínicas del profesorado. Lo importante es recordar que el caso debe mantener el aspecto de la verosimilitud y el carácter comprehensivo del mismo, esto es, debe ser amplio y con una diversidad de opciones para la solución de la situación planteada. Asimismo recordar que a la hora del redactar el caso se deben considerar las preguntas que deberá contestar el estudiante al dividirlo en pequeño segmentos en los que se incrementa la información del caso y la dificultad del nivel de pensamiento en las preguntas. Finalmente, los estudiantes deben ofrecer una posible respuesta o solución, justificada en el material aprendido en clase, al culminar las actividades de esta estrategia.
Aunque la literatura consultada señala que la utilización del uso de casos como estrategia de enseñanza en el campo de la salud es relativamente reciente, los estudios en el campo de marras como en otras áreas del saber académico demuestran su efectividad. Sus beneficios son innegables si consideramos las siguientes razones:
permite la aplicación de los conceptos y teorías que deben ser demostrados, cerrando de esta manera la brecha entre la teoría y la práctica.
fomenta el aprendizaje activo.
provee una oportunidad para el desarrollo de varias de las destrezas del siglo XXI (pensamiento crítico, comunicación, trabajo en equipo, alfabetización de la información y mediática, liderato y solución de problemas).
incrementa el gusto del estudiantado por un tema y su deseo de aprender.

Referencias:
Boston University. Center for Excellence & Innovation in Teaching. (sf.). Using Case Studies to
Teach. Recuperado de www.bu.edu/.../teaching.../using-case-studies-to-teach...
Colección. educ.ar. Estrategia: Método de estudio de caso. Recuperado de:
coleccion.educ.ar/coleccion/CD6/contenidos/teoricos/modulo.../m2-6.html
Colección. educ.ar. Estrategia: Método de estudio de caso. Recuperado de:
www.educ.ar/Dinamino/UnidadHtml/obtenerSitio?rec_id=91478
Davis, C. y Wilcock, E. (sf.). Teaching Materials Using Case Studies. UK Centre for Materials
Education. Recuperado de www.materials.ac.uk/guides/casestudies.asp.
Flo, J., Flaathen, E. y Fagerström,L. (2013). Simulating as a learning method in nursing education- A
case study of students learning experiences during use of computer-driven patient
simulators in preclinical studies. Journal of Nursing Education and Practice, 3 (8).
Forsgren,S., Christensen, T. y Hedeman, A. (2013). Evaluation of the case method in nursing
education. Nurse Education in Practice. Recuperado de:
www.nurseeducationinpractice.com
Fulbright, S. (2014). Three active learning strategies that push students beyond memorization.
Faculty Focus. Recuperado de: http://faculty focus.com/
García, J., Sánchez, C., Jiménez, M. y Gutiérrez, M. (2012). Estilos de aprendizaje y estrategias de
aprendizaje: un estudio en discentes de posgrado. Revista Estilos de Aprendizaje, 10 (10).
1-14.
Ghafouridard,M., Hairian, H. y Aghajanloo, A. (2013). The opinion of nursing student about case-
based teaching method and comparison with lecture. Future of Medical Education
Journal, 3 (1).
National Center for Case Study Teaching in Science. Recuperado de sciencecases.lib.buffalo.edu
Oermann, M. y Gaberson, K. (2012). Evaluating and testing in nursing education. New York:
Springer Publishing Company.
Ommundsen, P. (2001).Critical Thinking in Biology: Case Problems. Recuperado de
capewest.ca/ct.html.
Sprang, S. (2010). Making the case using case studies for staff development. Journal for Nurses &
Staff Development, 26 (2), 6-10.
Winkelman,C., Kelley, C. y Savrin, C. (2012). Case histories in the education of advanced practice
nurses. Critical Care Nurse, 32 (4). Recuperado de: www.cconline.org.




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