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estudi del moble/ estudio del mueble, núm.20, novembre/noviembre 2014, p. 26-28
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firmada por Maison Millet Monica Piera Miquel. Historiadora del arte.
[email protected] Imágenes: La Fotográfica
estudi del moble/estudio del mueble, no. 20, 2014
En el curso Las cómodas del museo estudiamos en directo una cómoda del Museu del Disseny de Barcelona de estilo Luis XV firmada Millet à Paris. Presentamos la ficha técnica del mueble y analizamos las características que definen la producción de este destacado taller de finales de siglo XIX y que ayudan a diferenciarla del mueble del siglo XVIII. Palabras clave: cómoda, Maison Millet, París, ebanistería, siglo XIX Data recepció: 31-7-2014 Data acceptació: 29-9-2014
An ormolu-mounted and marquetry commode signed by Maison Millet During the course The museum’s commodes we studied a Louis XV style commode from the Museu del Disseny de Barcelona signed Millet à Paris. We present the technical specifications of the piece of furniture and analyze the characteristics that define the production of this outstanding workshop of the late nineteenth century. These clues help us to differentiate it from the eighteenth century commodes. Key words: commode, Maison Millet, Paris, cabinetmaker, 19th century Receipt date: 31-7-2014 Acceptance date: 29-9-2014
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Descripción
Estudio
Cómoda de estilo Luis XV decorada con marquetería floral y abundantes bronces y cubierta por mármol brèche violette. La larga estructura presenta formas totalmente curvas: Abre por dos cajones de cantos recortados y el inferior incluye el faldón. El frente enrasado y los laterales SUHVHQWDQPDUTXHWHUtDÀRUDOHQXQD cartela cóncavo-convexa con chapas colocadas en dibujo convergente. El bronce rodea los cantos y se extiende en forma de tornapuntas, hojas de acanto y rocallas que ornan todo el cuerpo a la vez que cubren las funciones de asas y de escudete de cerradura. El bronce también enriquece las patas delanteras con spagnolettes, una femenina y otra masculina en las rodillas, y los cuatro pies se protegen por zapatillas en forma de hojas de acanto acabadas en voluta. El mármol grueso y con doble moldura es del tipo brèche violette procedente de Serravezza en Carrara. En todas sus partes, la madera estructural es el roble. La construcción es sólida, formada por cuatro montantes, paneles y bastidores con peinazo central, incluso en el separador entre los dos cajones y también en la solera del hondón. Los tableros de los paneles de la trasera están colocados en horizontal mientras que los de los laterales lo están en vertical. Los ensambles no llevan clavijas de refuerzo. El mueble dispone de una única cerradura. Es una caja rectangular alargada y ancha con doble lengüeta, una hacia arriba y la otra en la parte baja para cerrar los dos cajones con una doble vuelta de llave. Los cajones se ensamblan con colas de milano delante y detrás, las segundas siendo más pequeñas. Los fondos de los cajones están machihembrados en tres caras y clavados detrás. /DFyPRGDHVWi¿UPDGDWUHVYHFHV Dos MILLET, estampillados en seco en la testa de los montantes posteriores, y un MILLET À PARIS, inciso en una banda de bronce del cajón superior. Se conserva en un relativo buen estado, aunque hay algunas chapas ligeramente levantadas y pequeñas pérdidas, especialmente en los cantos de los cajones.
Esta cómoda formó parte del grupo de muebles estudiados en el taller intensivo de julio Las cómodas del museo. Aquel día, hicimos un repaso a los muebles franceses de época Luis XV e incidimos en los aspecWRVIRUPDOHV\WpFQLFRVTXHGH¿QHQ el estilo rococó. Pusimos en valor el trabajo de los ebanistas, capaces de crear muebles que, por un lado, escondían los elementos estructurales bajo formas curvas y líneas serpentinas continuadas y, por otro, aguantaban el peso y el desgaste que supone el uso continuado de los cajones. Comentamos que la mayor aportación de la producción de muebles Luis XV es, a nuestro entender, hacer desaparecer de la vista montantes, traveseros, cajones y patas bajo unas formas cóncavo-convexas TXHSDUHFHQÀXLU\VXSHUDUODOH\GH la gravedad. Hablamos de las técnicas para construir aquellas estructuras sobre las que se colocaban las elaboradas marqueterías, las lacas sacadas de biombos, que primero se debían curvar para adaptarlas a las formas de los muebles, y las placas de porcelana diseñadas expresamente en Sèvres. Después de la disertación teórica, pasamos a estudiar en directo la cómoda del museo de estilo rococó. El grupo estaba entusiasmado en poder analizar en detalle esta pieza que es espléndida. Yo no avisé que el mueble era del siglo XIX, sino que esperaba que fueran ellos los que llegaran a esta conclusión. Fue excitante ver como poco a poco iban descubriendo datos que no encajaban con lo que acababan de oír en la explicación sobre las cómodas de París del siglo XVIII y ellos mismos pudieron deducir la datación. La primera cosa que les llamó la atención fueron sus grandes proporciones que, aunque se dan en algunas cómodas del siglo XVIII, no son habituales. Observamos la marquetería que era de calidad y con chapas de unos 0,8 a 1 mm, pero una alumna que trabaja la técnica nos hizo fijar que el número de maderas utilizadas era reducido, quizás dos o tres, sabiamente cortadas para que parezcan más, combinando las aguas y los grados de VDWLQDGR1RSXGLPRVFRQ¿UPDUODV
especies aunque una de ellas podría ser bois satinée y la otra palisandro. Se emocionaron cuando uno de ellos encontró la firma Millet à Paris grabado en el bronce, y más cuando, al retirar el mármol, otros alumnos localizaron las estampillas grabadas en seco Millet en dos de las testas de los montantes, que con luz rasante se podían leer fácilmente. Fue entonces cuando delante GHDTXHOODV¿UPDVXQRGHHOORVVH cuestionó cómo era posible que el mismo artesano hubiera hecho el bronce y la estructura de madera si, como habíamos explicado, en París durante el siglo XVIII aquellos R¿FLRVHUDQUHDOL]DGRVSRUDUWHVDnos de dos gremios independientes. Esta duplicidad de oficios únicamente se daba en casos especiales, como el de Cressent.
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estudi del moble/estudio del mueble, no. 20, 2014
L ! "# $ %!& ' (' )"$! cuando, examinando el mueble de cerca, se dieron cuenta de que las cajas y espigas no llevaban clavijas de refuerzo en ninguna de sus partes, un dato que por sí solo tampoco es concluyente pero que, unido a los otros, ya hacía sospechar. Ante estas dudas, todos se pusieron a buscar marcas de sierra ya que éstas podrían ayudar a datar el mueble. Revisando maderas, unas visibles marcas regulares de sierra de calar salieron en los dos fondos de cajones, partes que se veían originales y no alteradas. Ante aquel descubrimiento les hice notar otros aspectos estilísticos incongruentes. En concreto, advertimos que en la decoración se combinaban spagnolettes, motivo propio de la Regencia, con rocallas asimétricas del rococó y con una lazada en la marquetería, que es motivo típico del estilo Luis XVI. De esta manera, la misma decoración daba pistas que alejaban el mueble de la producción del siglo XVIII. Que emoción tuvieron al comprobar que entre todos habían sido capaces de descubrir que se trataba de una buena cómoda rococó de la era industrial. Quedaba entonces por investigar sobre el autor ya que no siempre se puede disfrutar de un mueble firmado. A partir de los diccionarios de ebanistas franceses, que había llevado expresamente a la clase, localizamos la Maison Millet, empresa de muebles y bronces de arte antiguo y moderno fundada por Blaise Millet en 1853, continuada por su hijo Théodore, y especializada en la reproducción de mueble francés del siglo XVIII. Se trata de una empresa reconocida que tenía la sede en la capital francesa. Primero en la calle Jacques-Coeur 11 y hacia 1902 -1904 en el boulevard Beaumarchais 23; aunque también se han localizado muebles firmados en la calle
Saint-Sabin 50. La casa utilizaba sus propios modelos de bronce de buenos diseños y calidad, tanto en el modelaje como en los acabados y dorado. En un primer momento marcaba “MB”, que son las iniciales de Blaise Millet, el fundador, y después, también lo hacía bajo el nombre “Millet à Paris”. La casa ganó medalla en la Exposición Universal de 1889 y un gran premio en la de 1900, donde recibió tres diplomas de honor y cuatro medallas de oro. Entre las copias de muebles destaca la reproducción del gran joyero de María Antonieta, pieza que Millet pudo realizar en 1902 gracias al permiso que el museo de Versalles le concedió para estudiarlo durante un mes. Las producciones de la empresa fueron vendidas en 1906 a la muerte del propietario, pero la casa se mantuvo abierta hasta 1918. Algunos alumnos siguieron con el estudio de la cómoda y tuvieron la sorpresa de encontrar que obras de Maison Millet, muchas con marquetería, se subastan habitualmente en el hotel Drouot, Christie’s y Sotheby’s, y se ponen a la venta en prestigiosos anticuarios. Los datos recogidos en los catálogos nos confirmaban que el tipo de mármol y de maderas sugeridas en la cómoda eran especies habituales en la producción de la casa Millet. También localizamos en Sotheby’s un cabinet de estilo Luis XV con los mismos diseños de spagnolettes que los de la cómoda del museo, HQDTXHOFDVR¿UPDGRFRQHOVHOOR a tinta MILLET/FABRICANT DE MEUBLES ET BRONZES/PARIS/ 50, Rue de Saint Sabin. De esta manera, a partir del estudio en directo de una cómoda nos habíamos adentrado en la destacada inGXVWULDGHOXMRGH3DUtVGH¿QDOHVGH siglo XIX, que servía mobiliario y artes decorativas a potentados clientes que decoraban a la francesa los
Cómoda Maison Millet (1853-1918). París, 1853 -1918. Bois satiné, palisandro y otras maderas en la marquetería. Roble en la estructura e interiores. Mármol brèche violette. Bronce en las aplicaciones. Metal en la cerradura. 95 x 174 x 70 cm. Procedencia: mobiliario del palacio de Pedralbes.
salones de casas y palacios de todo el mundo. Coincidía con el momento en que el mueble francés se asentaba entre la opinión pública como la mejor producción del mundo. Los coleccionistas competían por los muebles del siglo XVIII que salían en el mercado del arte, obras que convivían con otras de estilo dieciochesco que compraban en esas prestigiosas tiendas de decoración de París y que eran de altísima calidad. Como hemos visto, en ningún momento estos autores del siglo XIX tenían pretensión de engaño, sino que construían con todas las herramientas a su alcance para conseguir un resultado incluso mejor que el de los originales. El orgullo del trabajo bien hecho y el prestigio de sus marFDVOHVOOHYDEDD¿UPDUODVREUDV Con la experiencia habíamos con¿UPDGRODEXHQDFDOLGDGGHOWUDEDjo de aquellas empresas que ofrecían reproducciones y recreaciones de los muebles más famosos de la ebanistería francesa, así como nuevas versiones de muebles inspiradas en las mejores creaciones de los luises. El autor de la cómoda, Maison Millet, era uno de los grandes nombres de una industria artística, competidor directo ni más ni menos que de Dasson (1825-1896, Linke (1882-1935) o Sormani (1847-1934).
BIBLIOGRAFÍA
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