I Jornadas Doctorales de la Universidad de Murcia
P‐AH‐12
El juicio de Dios como categoría histórica en la historiografía visigoda J. A. Castillo Lozano1 1
Departamento Prehistoria, Arqueología, Hª Antigua, Hª Medieval y CC. TT. HH. Doctorando en el programa EIDUM de la Universidad de Murcia.
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En este póster pretendemos arrojar luz sobre un pensamiento historiológico clave para entender el pensamiento no solo visigodo sino el pensamiento medieval y moderno habida cuenta de que será algo intrínseco al propio funcionamiento de la historia europea. Por ello, analizaremos a las tres grandes fuentes literarias visigodas con el objetivo de analizar este pensamiento ya que será esencial para conocer la naturaleza intrínseca de estas fuentes literarias y para arrojar luz al conocimiento histórico de este periodo. Esta concepción a la que hacemos referencia es el juicio de Dios como categoría histórica, cuyo origen se atisba desde los albores de la humanidad aunque nosotros vamos a coger como punto de partida el inicio de esta idea en el imaginario católico a través de la primera historia universal netamente cristiana: la Historia Aversus Paganus de Orosio. Una interesante reflexión del tema la encontramos en Mazzarino el cual llega a decir textualmente que “todo evento habla directamente a Dios”[1] ya que Orosio crea un esquema que aplicarán todos los escritores posteriores y que básicamente se resume en que aquel que peca, Dios lo castigará directa o indirectamente. Esta concepción empapará a todos los grandes intelectuales visigodos, entre los que vamos a analizar en este soporte a Juan de Biclaro, a San Isidoro de Sevilla y a Julián de Toledo. Estas fuentes que vamos a tratar en esta trabajo habida cuentas de que tal vez sean las que mejor resuman y capten la esencia de este pensamiento y lo pongan en relación directa con la concepción del poder. De esta forma, si tenemos en cuenta que la historiografía visigoda siempre se posicionó del lado de los gobernantes [2], sabemos que este pensamiento fue utilizado como un eficaz mecanismo de legitimidad real. Por ello, al analizar los hechos de aquellos que van en contra del catolicismo, así como las sucesivas rebeliones de tyrannus y usurpadores, estos historiadores y cronistas visigodos siempre nos relatarán un final dramático en forma de duro castigo al ser juzgados no solo por la justicia terrenal sino también por la divina [3] como son los casos de Argimundo, Gosvinta, Witerico, Paulo [4], etc.. Vemos en definitiva como se aplica un pensamiento historiológico capital para entender la concepción del poder que se tenía en la época visigoda y que se adoptaría de igual modo en la Europa medieval. Además, vemos como dentro de esta idea, la figura del tirano será duramente castigada habida cuenta de que sería juzgada por la divinidad por la ruptura de un juramento de fidelidad hacia su rey, incurriendo de este modo en una ordalía si tenemos la creencia de que un juramento es una ordalía anticipada [5]. REFERENCIAS [1] S. Mazzarino, El fin del mundo antiguo, 1961, p. 55 [2] J. N. Hillgarth, “Historiography in Visigothic Spain”, La Storiografia altomedievale, 1970, pp. 261-311 (en concreto pp. 299-302). [3] Mª R. Valverde Castro, Ideología, simbolismo y ejercicio del poder real en la monarquía visigoda: un proceso de cambio, 2000, p. 218 [4] J. A. Castillo Lozano, “La figura del tyrannus, del rebelde, en la tradición visigoda a través de las obras de Julián de Toledo”, Herakleion 7, 2014, pp. 85-101 (en concreto p. 97). [5] J. Alvarado Planos, “Ordalías y derecho en la España visigoda”,III Congreso de Estudios Medievales. De la Antigüedad al Medievo. Siglos IV- VIII, 1993, pp. 437-540 (en concreto p. 487). y E. Benveniste, Vocabulario de las instituciones indoeuropeas, edición de 1983, pp. 334-335.
