Teorías Clásicas de la Administración

Político, Social y Cultural
Ingresos Familiares y Mejoran las Condiciones de Vida
Empresario
Unidades Mano de Obra
UNIVERSIDAD NACIONAL DE COLOMBIA – SEDE BOGOTÁ
JEISSON LEONARDO RINCÓN NOVOA
TEORÍA DE LA ORGANIZACIÓN
CLAUDIA ALEXANDRA GARZÓN SANTOS
ADMINISTRACIÓN DE EMPRESAS – II SEMESTRE
2014 – 02

LA DIVISIÓN DEL TRABAJO Y LAS CONDICIONES FAVORABLES DE VIDA Y LABOR, ESTIMULAN LA CAPACIDAD DE PRODUCCIÓN


Para hablar de los aportes de Smith, Ricardo, Say, Owen y Babbage a la Teoría Clásica de las Organizaciones se debe delimitar las palabras "Clásica" y "Organizaciones"; cuando se habla de Clásica se entenderá por los pioneros de planteamientos, hipótesis y conjeturas que dieron lugar a otros nuevos y diferentes, ya que éstos son útiles para la crítica y replicables por su importancia a través de la historia; ahora bien, cuando se habla de Organizaciones se entenderá como lo establece Scott en 1964 al enunciar que "... las organizaciones están definidas como colectividades... que se han establecido para alcanzar objetivos relativamente específicos..." (Hall, 1983), esto debido a que las organizaciones son dinámicas a los cambios frente a su entorno y ante todo son entes sociales.
Por lo anterior es que aún en los primeros cursos de ciencias económicas se debe estudiar los aportes de Smith, Say y Ricardo, así mismo que los de Owen y Babbage; y simultáneamente se estudia el por qué toda empresa es organización pero no toda organización es una empresa, teniendo en cuenta la delimitación de los conceptos, se estudiará y evaluará la aplicación de los aportes dados por los economistas clásicos y los primeros paradigmas de gestión operativa y de recursos frente a la administración fabril de la época y la actualidad.
A todos los anteriores personajes se les atribuye el hecho de haber presenciado el cambio de concepción del mundo y la economía, que ejerció la Primera Revolución Industrial en los años posteriores a ella cuando el principal objetivo era obtener ganancias a través de una mayor producción de las fábricas, propiciado por el desarrollo de nuevas maquinarias minimizando los costos y obteniendo utilidades; es allí donde surgen los nuevos pensamientos y exponentes que se enmarcarán de aquí hasta finalizar el documento.
En la historia económica se encuentran unos de los exponentes como lo son, Adam Smith quien con sus aportes logró llegar hasta los simposios y aulas de la Universidad de Glasgow, David Ricardo quien siempre crítico a la sociedad por sus pugnas entre terratenientes e industriales y la forma como destruían las tierras por su poder (Heilbroner, 1985) , y Jean Baptiste Say quien logró fama como el escritor más importante en política económica en Francia y toda Europa (Quddus & Rashid, 2005).
Así mismo, encontramos personajes que tanto su vida como sus aportes los hace especiales y dignos de estudiar; Robert Owen quien siendo un habitante de comarca rural a través de su experiencia en los diferentes niveles de actividad en las fábricas en que laboró, consiguió la fama de gran empresario y líder, así como obtuvo ingresos en cantidades considerables (Santos Redondo, 2000) y Charles Babbage quien a través de sus matemáticas y dedicación al estudio de la manera de lograr mayor eficiencia en las operaciones fabriles, logra enunciar principios empíricos de la administración (Contreras Camarena, 2006).
Ahora bien, frente a los aportes y aplicación de los mismos en la administración, todos se pueden encerrar en un mismo objetivo, "Buscar la forma de maximizar la producción a través de diferentes estímulos o incentivos a la mano de obra, para que ésta sea más productiva y menos costosa"; sin embargo, los cinco autores se diferencian en la forma como cada uno interpreta la optimización de los procesos de producción; así como la forma en que se distribuían los ingresos y el camino para llegar a una eficiencia productiva.
En primer lugar Adam Smith con su Investigación sobre la Naturaleza y Causas de la riqueza de las Naciones establece que la división y especialización del trabajo aumentará la productividad (Méndez Morales, 2005), ya que los obreros se volverán más agiles y armónicos en un proceso de fabricación del bien, conllevando así que él se especialice y sea parte de la poca mano de obra capacitada que luego se regulará con los egoísmos individualistas y el aumento de la población (Aktouf, 2001); en segundo lugar se puede encontrar a David Ricardo, quien con su libro Principios de Economía Política establecía que al aumentar la población, aumenta la demanda de productos de la tierra, y el precio de éstos se eleva conllevando así a que los salarios también se eleven para darle poder adquisitivo al trabajador y esto a su vez reduce los beneficios, ya que suben los salarios y la tierra cada vez es más infértil (Heilbroner, 1985)
En último se encuentra a Jean Baptiste Say quien con su "Treatise on Political Economy" enmarca que la producción es definida como la creación no de la materia sino de la utilidad o ingresos que le genera al "Entrepreneur" (Quddus & Rashid, 2005), así mismo como el origen de la ley de Say, enmarcada en "... es la producción la que abre mercados a los productos... es la oferta la que crea la demanda..." (Fernández Delgado & Ramos Gorostiza, 2006).
Ya en este punto se puede evidenciar el cambio de pensamientos, puesto que Smith pensaba en maximizar las producciones a través de la especialización del trabajo y los bajos costos de mano de obra causados por la sobrepoblación y las bajas tasas de desempleo, sin embargo, hay que tener en cuenta lo que critica Ricardo, ya que una alta tasa de población provoca la necesidad de más productos alimenticios para su subsistencia o supervivencia; no obstante, lo que logrará ese aumento de la población es la reducción de los beneficios y la destrucción de las tierras fértiles por uso excesivo de las mismas, conllevando así a que se deba analizar la cantidad producida y las tasas de natalidad, lo cual se complementa con el aporte de Say, ya que si se oferta cierta cantidad de productos y mano de obra, la demanda (población) se encargará de a través del libre mercado y la competencia egoísta mantenerse en los mismos niveles debido a que la producción es restringida y escaza.
Ahora bien, después de estos economistas clásicos vienen dos pioneros en el Management y los salarios al destajo o por pieza; Robert Owen quien dentro de sus aportes tiene los más importantes, el demostrar que las condiciones del medio social influyen decisivamente en la posibilidad de perfeccionar los métodos de producción argumentado en el logro, de que el bienestar suministrado a sus obreros fuera fructífero por parte de ellos evidenciado en un índice más alto de productividad que superaba lo invertido en las mejoras de las condiciones de vida, cuidando y manteniendo así lo que él mismo denominó "Maquinaria Viviente" (Contreras Camarena, 2006); también creó sistemas de control a través de la evaluación de conductas por medio de registros diarios y un cubo de colores que representaba diferentes comportamientos del trabajador para que éste se motivara en mantener una buena imagen exterior frente a sus compañeros (Díaz Alonso, 2003).
Simultáneamente también se puede encontrar a Charles Babbage quien enuncia en sus principios de administración basados en las experiencias, que en primer lugar la producción debe hacerse en pasos simples y sencillos para que los operarios aprendan rápidamente y en menor tiempo, que en segundo lugar la especialización del trabajo sea clara y delimitada, ya que al cambiar de un proceso a otro las acciones se entorpecen por los segundos perdidos en descanso y que en tercer lugar la repetición conlleva a la especialización y ésta a una mayor producción, evidenciando lo anterior la continuación de una parte del pensamiento de Smith, sin embargo le adiciona que esta especialización conlleva a la invención de herramientas y maquinarias nuevas (Contreras Camarena, 2006).
Además, Babbage hace un aporte mucho más importante al manejo de los salarios en los métodos de producción al decir que "... el trabajo debía ser dividido en esfuerzo físico y mental... cada trabajador debería obtener una gratificación proporcional a su propia eficiencia y al éxito del negocio..." (Quijano Ponce de León, 2009); lo que se conocería después como el salario destajo o por pieza, ya que su eficiencia en el desarrollo de la producción conllevaría a que se pagara más a la mano de obra si ésta produce más en términos de cantidad o servicio, con el trasfondo de que las ganancias de producción serían mayores a éste.
Después de analizar los aportes de Owen y Babbage, se puede entender que estos dos líderes empresariales, buscaron una forma de incentivar a la mano de obra para que ésta motivada por el factor ingresos o condiciones de vida optimizara la producción conllevando así a mayores beneficios para el empresario y de la misma manera satisfacción de las UMO frente a las condiciones de trabajo y su remuneración o distribución del ingreso sea proporcional al desgaste de las mismas y el esfuerzo que éstas hagan por el buen funcionamiento de la organización.
Pero, ¿Cómo se aplican estos aportes en la actualidad?, las organizaciones en la actualidad se preocupan en mayor o menor medida en la obtención de beneficios a partir de sus cantidades producidas o servicios ofertados, teniendo en cuenta la división y especialización de Smith, los márgenes de restricción entre población y capacidad de producción de la tierra enunciados por Ricardo y Malthus; se puede determinar que los niveles de producción en éstas deben ser planeados y estructurados para que así haya un margen representativo de ganancia y no se llegue a una destrucción total e irreversible (por efectos de la ley de Say) de las tierras fértiles deterioradas por la producción ya sea de alimentos o por el establecimiento de fábricas y centros de producción en el ensamble de otro tipo de producto.
Sin embargo, no se puede olvidar la mano de obra en la actualidad, principalmente porque podemos observar que aún se mantiene el salario a destajo o por pieza, en su mayoría se evidencia en las empresas de manufactura, ensamble y automatización, ya que en estos centros de producción los procesos están bien definidos y la maquinaria agiliza el proceso de especialización; así mismo, se puede observar que las condiciones de vida y laborales se han convertido en un objetivo más en las organizaciones, esto evidenciado pues en la reducción considerable de la jornada de trabajo y en la calidad del mismo, propiciando condiciones mínimas de supervivencia tanto en alimento, vivienda y educación como lo formó Owen en New Lanark.
En suma, todos los personajes anteriormente mencionados, analizados y criticados hacen parte de un desarrollo y preocupación por aumentar la capacidad de producción en torno a diferentes cambios y situaciones que favorecen las condiciones para que el desarrollo de ésta actividad sea más eficiente y agradable para las unidades productivas.

Jeisson Leonardo Rincón Novoa

BIBLIOGRAFIA

Aktouf, O. (2001). La Administración: entre Tradición y Renovación (Artes Gráficas del Valle Ltda ed., pp. 35-45). Cali, Colombia.

Contreras Camarena, J. A. (2006). Antología sobre Administración (pp. 33-47). México: Universidad Autónoma del Estado de México.

Díaz Alonso, A. (2003). Apuntes Administración Básica I (Fondo Editorial FCA ed., pp. 40-48): Universidad.

Fernández Delgado, R., & Ramos Gorostiza, J. L. (2006). Escuelas de pensamiento económico. España: Ecobook - Editorial del Economista.

Hall, R. (1983). La naturaleza y las clases de organizaciones (P.-H. Hispanoamérica Ed.). México.

Heilbroner, R. (1985). Vida y Doctrina de los Grandes Economistas I (Orbis S.A. ed., Vol. II, pp. 61-249).

Méndez Morales, J. S. (2005). Fundamentos de Economía (M. G.-H. Interamericana Ed. Cuarta ed.). México.

Quddus, M., & Rashid, S. (2005). Jean Baptiste Say - Political Economy and Wealth. Society, 42(6), 47-58.

Quijano Ponce de León, A. (2009). Sistema de producción.

Santos Redondo, M. (2000). Robert Owen, pionero del management (pp. 35). Madrid, España: Universidad Complutense de Madrid.