[School Essay] El concepto de «catarsis» en Aristóteles

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TRABAJO FIN DE ASIGNATURA

LA POÉTICA DE ARISTÓTELES: EL CONCEPTO DE CATARSIS EN LA DEFINICIÓN DE TRAGEDIA

Alumno: Andoni Peñalver Bayle, Asignatura: Historia de la filosofía antigua Grado: Filosofía Curso: 1º

Andoni Peñalver Bayle: Catarsis

Índice 1. UNA APROXIMACIÓN A LA POÉTICA...................................................................................... 3 2. DATOS ESTRUCTURALES DE LA OBRA.................................................................................. 5 3. LA DEFINICIÓN DE TRAGEDIA................................................................................................. 6 4. PROBLEMAS EN TORNO AL CONCEPTO DE CATARSIS....................................................... 8 5. BIBLIOGRAFÍA............................................................................................................................ 12 6. APÉNDICE.....................................................................................................................................12 RESUMEN En este ensayo se analizará la Poética de Aristóteles —con especial énfasis en las partes que constituyen la configuración de la tragedia— con el objetivo de lograr entender qué significa el concepto de catarsis (κάθαρσις). Para ello; se presentará, en primer lugar, una aproximación a la obra, para pasar después a la enumeración de datos de carácter estructural y lograr, de ese modo, un entendimiento general del libro. Tras ello, se procederá a presentar un análisis de la definición de tragedia y, posteriormente, la presentación de distintos problemas en torno a la definición del concepto de catarsis esgrimido en esta definición de tragedia presentada previamente. Poética — Aristóteles — Catarsis — Kathársis — Filosofía Antigua — Tragedia ABSTRACT In this essay we will analyse Aristotle's Poetics —focusing on the parts about tragedy— with the aim to achieve knowing what does the katharsis (κάθαρσις) concept means. In order to reach it we will set forth, firstly, an approximation to Poetics, then we will list some data about structural facts of the work in order to, in that way, have a overall understanding of the book. Finally, we will present an analysis about tragedy's definition and afterwards we will show a presentation of the several problems concerning the definition of the catarsis' idea implied in that definition of tragedy showed previously. Poetics — Aristotle — Katharsis — κάθαρσις — Ancient Philosophy — Tragedy

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis 1. UNA APROXIMACIÓN A LA POÉTICA (1)Es ampliamente conocida la clasificación que Cicerón utilizaba a la hora de referirse a los escritos aristotélicos: de un lado, los publicados eran llamados «exotéricos» y, de otro, llamaba «apuntes» a los que estaban destinados al uso personal del autor y del Liceo. Conocía Cicerón extremadamente bien el primer tipo y tenía clara constancia de la riqueza argumentativa, la brillantez léxica y el genuino encanto del discurso escrito de Aristóteles. La Poética (Περὶ Ποιητικῆς), empero, es una obra del segundo tipo; pues está pensada para la enseñanza oral en el Peripato. Parece estar escrita a «tirones» o «impulsos» durante diferentes fechas, probablemente estos fragmentos no estuvieron pensados para ser publicadas por su autor y, además; se suele decir que es rica en incoherencias —al menos aparentes—, promesas incumplidas, desconexiones y lagunas. A esto último se suele objetar que es algo lógico, pues, como se sabe, la obra está incomplenta a falta de un segundo tomo. (2)Se podría decir sin temor a equivocarse que la Poética (384-322 a.C.) es el tratado de teoría literaria más antiguo de la cultura occidental —de hecho, los referentes de dicha disciplina académica como Terry Eagleton o Lessing no harán sino copiar (o mimetizar) el esquema esgrimido por Aristóteles— y, asimismo, todos los estudios filológicos de las grandes universidades del S.XXI respetan esta doble vertiende que Aristóteles ofrece en su enfoque: por un lado, el estudio de la obra literaria y, por otro, el del lenguaje empleado en dicha obra —la archiconocida división entre crítica literaria y lingüística—. La influencia de la poética ha sido tal que la teoría lteraria moderna sigue fiel, en líneas generales, al esquema aristotélico. Conceptos como mímesis (imitación), unidad de acción, catarsis, dicción contra pensamiento, peripecia, nudo contra desenlace, la noción de creación literaria (poíesis, étimo de poesía) y la división en distintos géneros quedan acuñados en esta obra de Aristóteles de la que, por desgracia, solo se conserva una parte del primero de los dos libros que, según la tradición, se componían de uno consagrado a la tragedia y la epopya (género serio) y otro —perdido— dedicado a la comedia. (Miguel Candel, estudio preliminar, Gredos) 1

(3)Según el estudioso James J. Murphy, Platón (maestro de Aristóteles) había mostrado su recelo hacia la poesía cuando, al exponer sus ideas sobre el estado ideal en la República, condena a los poetas por considerarlos fuente de mentiras. 2 En ese sentido, se puede entender que Aristóteles se considere un pionero en el estudio general de la obra poética pues para él se trata de un fenómeno de interés. Asimismo, pese a que Aristóteles 1 A partir de esta cita se puede afirmar con total seguridad lo que se postula en el párrafo anterior a ella 2 La Poética de Aristóteles, epílogo a la edición de la Poética de la editorial Tres Cantos (2002)

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis siempre comenzaba sus escritos con una breve mención a los autores que habían abordado previamente la materia que va a tratar, en este no menciona a nadie a sabiendas de que varios autores trataron temas similares antes y simultáneamente a él. (4)Es interesante el apunte de que, en principio, pueda sorprender que Aristóteles escribiese una obra como esta. ¿Un filósofo de «carácter científico» que presta atención a las obras poéticas y a la actuación de los actores de esta? ¿Por qué? Una posible respuesta se puede encontrar recurriendo a la frase que abre la Metafísica: «Todos los hombres desean por naturaleza saber. Así lo indica el amor a los sentidos; pues, al margen de su utilidad, son amados a causa de sí mismos, y el que más de todos, el de la vista» . (Aristóteles, Metafísica)3

El filósofo observa que el drama y otras formas de poesía existen y, en tanto que ser humano, él quiere saber por qué lo hacen; es decir, su motivación es la misma que le lleva a escribir el resto de su sobras. Otros añaden que es casi un hecho totalmente seguro que Aristóteles nunca habría construido una teoría de la literatura —o no la teoría de la literatura tal y como la esgrimió— de no haber comenzado su carrera intelectual como pupilo de Platón. 4 De hecho, se dice que Platón estuvo obsesionado por la poesía y los grandes poetas durante toda su vida hasta el punto de que se asegura que había escrito ditirambos y tragedias en su juventud, los cuales destruyó tras conocer a Sócrates.5 El proceder en esta obra es distinto a las demás; pues, al contrario que en la mayoría de sus obras no parte de un principio básico a partir del cual operar de manera deductiva con el fin de explorar a fondo la materia examinada (recordemos que, en la Ética, comienza con una definición del «bien» para llegar a definir deductivamente cómo han de ser los actos realizados por el hombre), sino que en esta obra Aristóteles se basa en dos observaciones empíricas sobre el comportamiento: de un lado, que la imitación es una actividad connatural al ser humano y, de otro, que es normal que el hombre disfrute imitando (1448b.5). (5)La Poética se pregunta por la naturaleza del hecho y del discurso poético y qué es lo que estos se proponen. Para dar la respuesta un lector debe centrarse, según Reale, en la atención de dos conceptos: la «mímesis», de un lado, y la «catarsis», de otro. 6 En cuanto a la mímesis, como ya hemos dicho, Platón reprobaba severamente el arte por tratarse de una imitación de cosas fenoménicas que son, a su vez, una imitación de los paradigmas de las 3 4 5 6

Edición de Gredos, traducción de Valentín García Yebra. Amelie Rorty en la introducción a la compilación de papers de Princeton «Essays on Aristotle's Poethics». Según James J. Murphy esta información proviene del conocido libro de Diógenes Laercio. Historia de la filosofía de Giovanni Reale y Dario Antiseri (Herder ed.)

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis ideas. Concebía el arte como una copia de una copia, con lo que la verdad se debilitaba hasta desaparecer. Aristóteles se opondrá a esta concepción en su concepto de mímesis (artística), para él el arte no solo no reproduce pasivamente la apariencia de las cosas, sino que prácticamente las recrea de acuerdo con una nueva dimensión. Esta dimensión (según la cual, el arte imita) es la de lo «posible» y lo «verosímil» y en ella se universalizan los contenidos del arte de tal manera que los eleva al nivel universal en un sentido simbólico, fantástico. Antes de proseguir con los datos estructurales de la obra que se estudia, es pertinente añadir respecto al concepto de mímesis que en la Metafísica (987b.11) Aristóteles menciona que los pitagóricos empleaban el concepto de mímesis para referirse con él a la relación de las cosas visibles con la auténtica realidad que era, para ellos, el número: la relación numérica. En cuanto al concepto de catarsis, se explicará en qué consiste en el cuarto punto de este ensayo, pues ese es el objeto de este trabajo. 2. DATOS ESTRUCTURALES DE LA OBRA A continuación se añadirán una serie de datos relevantes para entender la Poética y que serán de ayuda, por tanto, a la hora de enfrentarse tanto a la definición de tragedia como a los problemas en torno al concepto de catarsis. (1)Según Miguel Candel se debe ubicar la Poética en estrecha relación con la dialéctica, pero también con la Ética y la Política; asimismo, debe plantearse bajo la etiqueta «escritos sobre el uso del lenguaje» conformada por la Poética (el arte de la creación literaria) y la Retórica (el arte de comunicar de manera convincente). Parece ser que la diferencia entre lo retórico y lo poético radica en la distinción entre apáte frente a la dupla mímesis-catarsis. Tal como Gorgias lo dejó escrito y como lo recoge Aristóteles en su Retórica, al orador le interesa conocer la naturaleza del terror y de la compasión para saber aplicar esos conocimientos cuando desee provocar esas dos pasiones entre su auditorio. Esas actuaciones propias del orador no son poéticas, pues son solo apáte y no constan de la función propia de lo poético. Así pues, esta función es peculiar y exclusiva de lo poético y consiste en procurar, a través de la imitación, el placer derivado de la purificación del terror y la compasión. 7 (2)Otra de las cuestiones que más controversia genera a la hora de aproximarse a esta obra es la de las fuentes originales. No se meterá un comentarista en este profundo debate, pero parece pertinente señalar que, por el momento, existen cuatro fuentes «testigo» originales: Parisinus 7 Esta función se ve, evidentemente, imbuida en la discusión sobre el concepto de catarsis, por ello aunque parezca una afirmación vaga, se verá totalmente precisada al término del punto nº 4.

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis graecus 1741 del siglo X u XI, Riccardianus 46 del siglo XII, Etonensis 129 (perdida) cuya traducción latina se halla en Toletanus 47.10 del siglo XIII; y Paris gr. arab. 2346 del siglo X, esta se trata de una traducción árabe por Abu Bisr Matta a partir de una traducción original siria de un ejemplar original en griego. La versión que se usa a día de hoy parte de la configurada por Rudolf Kassel de la Universidad de Oxford publicada en 1965 y que incluye partes y referencias de las cuatro fuentes nombradas. (3)La Poética, como ya hemos dicho, es una obra que recoge apuntes que configuran una teoría literaria y que, en ciertos momentos, puede parecer inconexa. En ese sentido, apoyándonos en el esquema capitular que he confeccionado a partir del manual de Terry Eagleton y que se adjunta en punto 6 (apéndice), podemos observar de un modo empírico como esta sentencia es bastante acertada, pues los 26 capítulos de los que consta la obra podrían dividirse entre diferentes temáticas tales como (por orden de aparición): artes imitativas, origen de la poesía, tragedia, fábula, personajes, poetas, pensamiento y elocución, las especies del nombre, epopeya, problemas críticos y superioridad de la epopeya o la tragedia. A continuación, se hará una exposición detallada de la definición de tragedia que el Estagirita esgrime en esta obra. 3. LA DEFINICIÓN DE TRAGEDIA Es conocida la definición de la tragedia que Aristóteles da en la Poética: Una tragedia es la imitación de una acción grave (σπουδαιαζ) y que, además de grandiosa, es completa en sí misma, en deleitoso lenguaje, cada peculiar deleite en su corresponidente parte; en forma dramática, no narrativa; con peripecias que provocan la conmiseración y el terror, de suerte que se cumpla la purgación (κάθαρσις) de tales pasiones. [1449b.24]

(1)Basándome en el manual de Copleston considero de utilidad precisar esta cita a través de cinco puntos: 1. El adjetivo «grave» significa noble o digno —indica características del contenido de la tragedia—. Comparte esto con la poesía épica. Se distinguen las dos de la comedia y de la sátira, que versan sobre lo bajo, lo feo, lo ridículo. 2. No es exacto afirmar que Aristóteles exigía las tres unidades para la acción dramática (al contrario de lo que normalmente se dice en la enseñanza de las artes escénicas). Sin embargo, sí que dice que la tragedia procura mantenerse «dentro de los límites de una 6

Andoni Peñalver Bayle: Catarsis revolución del sol» (esto es una constatación factual, no una demanda). Aristóteles define la tragedia como «completa en sí misma», es decir, que tiene un principio, desarrollo y es un todo orgánico —esta unidad de la intriga o unidad estructural orgánica es la única que exige Aristóteles—. 3. «Deleitoso lenguaje» significa «con ritmo, armonía o entonaciones de cantos añadidos». 4. «Cada peculiar deleite» se refiere a que Aristóteles piensa, como es evidente, en la tragedia griega, con su alternancia de parlamentos en versos y cánticos corales. 5. «En forma dramática y no narrativa». Esto distingue a la tragedia de la poesía épica. (2)Para Aristóteles existen, a su vez, seis elementos constitutivos de la tragedia: En primer lugar, La intriga o fábula. El más importante de estos elementos, también conocido como «trama»; más importante que los personajes porque en una pieza no se pone a los perosnajes actuando para que retraten los caracteres, sino que se incluyen estos en orden a la acción, pues la tragedia es esencialmente una imitación no de personas sino de la acción y de la vida, de felicidades y de desgracias. En segundo, los personajes, también de gran importancia pues una tragedia cuyos caracteres no tengan fuerza y personalidad es defectuosa (elemento más importante tras la fábula). En tercer lugar, el pensamiento, la idea; es decir, la facultad de decir lo que cada cosa es en sí misma y lo más apropiado para cada ocasión. La tragedia no es el lugar adecuado para la disquisición socrática. En cuarto lugar, la dicción, esto es, el verso o la prosa. Es importante, pero podría ser perfecta y, con todo, no lograr producir el efecto trágico verdadero. En quinto lugar, la melodía, que se concibe como el principal de los accesorios placenteros de la tragedia Por último, el espectáculo, ciertamente es un atractivo, pero es la menos importante de las partes y tiene poco que ver con el arte poética (compete más al decorador que al poeta). (3)Antes de proceder con el análisis del concepto de catarsis quedan por añadir dos precisiones más en torno al concepto de tragedia: Por un lado, Aristóteles considera que la tragedia (al menos la «compleja») consta de peripecia (περιπέτεια), descubrimiento (ἀναγνώρισις) así como de «lance patético». La peripecia es el repentino cambio de un estado de cosas en su contrario (E.d: cuando el mensajero descubre el nacimiento de Edipo). La anagnórisis refiere a un cambio de la ignorancia en saber y, por tanto, en los personajes marcados por la buena fortuna o por el infortunio (E.d: en Edipo el descubrimiento o 7

Andoni Peñalver Bayle: Catarsis anagnórisis va acompañado de la peripecia). El lance patético hace referencia a la técnica de conseguir esta peripecia o este descubrimiento a través de la acción fuera de escena (muertes, tormentas, heridas y eventos semejantes). Por otro lado, a partir de la definición de tragedia de Aristóteles este estima que hay tres modalidades de fábula que deben evitarse: 1) no debe verse pasar a un hombre bueno de la dicha a la desgracia, 2) no deberá verse a un malvado pasar de la desdicha a la felicidad —no mueve piedad, espanta, es antitrágico— y 3) No se debe ver al frívolo, al perverso, caer de la felicidad en la desgracia —puede suscitar sentimiento humano de justicia, pero no piedad ni terror—. Por tanto, la tragedia debe presentar un personaje de condición «intermedia» que caiga en la desgracia no por su actitud viciosa o depravaca, sino por un error de juicio. (E.d: muchas de las tragedias de Eurípides finalizan desastrosamente). 4. PROBLEMAS EN TORNO AL CONCEPTO DE CATARSIS Para finalizar este ensayo, se hará una revisión de diferentes problemas a los que se puede llegar al definir el concepto de catarsis (κάθαρσις) a partir de la definición de tragedia que en el punto anterior se ha citado. Se sigue de esto, como es evidente, que existen varios modelos definición «aceptables».8 (1)Empecemos con la idea tan extendida (desde el Renacimiento) en torno a que la catarsis es una purgación o purificación de las emociones. Para tomarnos en serio esta afirmación debemos pensar que para Aristóteles la catarsis es una cura para una condición patológica emocional, es decir, que la tragedia ayuda a uno a expulsar o a deshacerse de las emociones perjudiciales o nocivas. La evidencia de la que parte esta interpretación parte de la discusión aristotélica sobre la catarsis que produce la música y que se ve explícitamente en La Política, donde Aristóteles distingue las melodías catárticas de aquellas que son «éticas» (que ayudan a entrernar y reforzar el carácter y, por tanto, el objetivo de la catarsis no puede ser de ningún modo el de la educación ética). No obstante, la objeción que se le hace a esta visión es que en su planteamiento se implica que se produce «una cierta catarsis e iluminación a través del placer en todas las personas». Cuando se habla de «todas las personas» se incluye también a las virtuosas, esto supondría que una persona virtuosa tiene sentimientos patológicos (pues experimenta la catarsis) lo cual es contradictorio. 8 Para este punto se seguirá el paper de Jonathan Lear: «Kathársis» publicado en la recopilación de Amélie Rorty sobre la Poética de Aristóteles editada por Princenton Press.

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis Además, se añade a esta crítica que si se observa la concepción aristótelica de las emociones no parecen el tipo de «cosa» que podría concebirse como dadas a la purificación. (2)En segundo lugar, el término catarsis se asocia por su uso de corpora lingüísticos que recogen textos antiguos al de «purga», y en primera instancia se interpreta como que lo Aristóteles está construyendo es una metáfora entre un proceso de purga (la purificación de las impurezas de un objeto X) y lo que ocurre al público en la tragedia. Este uso pre-aristótelico del término contempla su mayor «trascendencia» en que a día de hoy se usa la palabra «catarsis» en las ciencias biológicas para hablar de un proceso natural por el que el cuerpo expulsa sustancias nocivas para el organismo. No obstante, habrá autores9 que coqueteen con la idea de que realmente lo que Aristóteles esgrime no es una metáfora, sino que usa la palabra de modo literal. Esto es, la tragedia produce una purga literal, por tanto, lo que logra la tragedia es que el público llore. La crítica que se hace a esta visión es certera: se señala una obviedad. Lo que la visión hace no es explicar el concepto de catarsis sino señalar el lado palpable (el hecho, la acción) consecuencia inminentemente posterior a que la catarsis tenga lugar. La única utilidad que esta postura tendría es la de señalar que el origen del término-metáfora se basa, precisamente, en una purga de carácter «natural» como lo es la segregación de lágrimas. (3)Por último, la interpretación que se torna más sofisticada y que ha sido fervientemente deatida en los años recientes es la idea de que la catarsis proporciona una educación de las emociones, una suerte complementación a la educación ética que consiste enseñar a los jóvenes a sentir placer en actuar noblemente y dolor si actuasen innoblemente. Para el estagirita la virtud consiste parcialmente en dar la respuesta emocional correcta a cualquier conjunto de circunstancias; sentir dolor en las dolorosas, sentir placer en las placenteras y sentirlos en la cantidad adecuada, sin excesos o escasez. En ese sentido, la tragedia nos proveería de los objetos apropiados a hacia los que sentir compasión y terror. Por tanto, se podría decir que para esta visión la tragedia nos «entrena» o nos habitúa en el sentir pena y terror como respuesta a eventos que corresponden a esas emociones. Dado que nuestras emociones han sido suscitadas en las circustancias apropiadas, estas son también cultas, refinadas y clarificadas (virtuosas). Se le hacen tres grandes críticas a esta visión que acabamos de exponer. Por un lado, es evidente que la catarsis y la educación ética están relacionadas incluso teniendo en cuenta que sirven a 9 Como es el caso de J. Lear al comienzo de su paper

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis objetivos completamentes diferentes, no obstante, cuando en la Política Aristóteles escribe «para educación y catarsis» si se saca de contexto podría pensarse que ambos conceptos son parte de un mismo proyecto (como se piensa en esta visión). Desafortunadamente, el texto no apoyaría está suposición pues Aristóteles dice explícitamente que aunque se deben usar todos los tipos de melodías no se deben usar para la misma función.Por tanto, cuando dice que la música debe usarse para estos dos conceptos está listando —sin ambigüedad probable— dos beneficios diferentes que se derivan de la música. Por otro lado, se le objeta a esta visión que en un sentido fundamental la tragedia no suscita respuestas apropiadas para los hechos representados. Es decir, que no debemos ser espectadores en la vida real tal y como lo somos en el teatro pues sentir cualquier ápice de placer ante la desgracia de alguien a quien queremos —y es bueno— sería una respuesta totalmente inapropiada. No debemos ser entrenados para buscar la tragedia en la vida real tal y como la buscamos en el teatro así como para buscar cualquier placer en los eventos trágicos de la vida real tal y como lo hacemos ante las representaciones de los poetas. La tercera crítica a esta visión parte de que esta visión no explica, en último término, el placer peculiar de la tragedia. Aunque la visión a la que se critica se defienda hablando de «placer cognitivo» (conocer el correcto uso de emoción para su circunstancia apropiada) esta idea apenas encuentra apoyo en el texto y; además, el placer que se deriva de la tragedia no es, en principio, el mismo que se deriva de satisfacer el deseo de entender. (II) Se torna una tarea imposible concluir este ensayo con lo que sería ideal, es decir, con una definición exacta y apropiada del concepto de catarsis, no obstante sí que se puede esgrimir una definición lo más exacta posible a partir de una lista de puntos que la correcta debería satisfacer. 10 1. La catarsis trágica no puede ser un proceso puramente correctivo, esto es, no puede ser una purificación en tanto que esto implica algo patológico o nocivo; no puede ser una purga de polución, no puede ser una educación de las emociones. 2. Del punto anterior se sigue que, en consecuencia, existe una razón para el virtuoso para experimentar la catarsis de compasión y terror. 3. Lo que uno siente ante la representación de la tragedia no es lo que uno debería sentir en una contraparte de la vida real. 4. Una audiencia apropiada nunca deja de concebir el hecho de que está «disfrutando» de la 10 Estas líneas definitorias están sacadas,literalmente, del paper de J. Lear

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis representaciónde una tragedia. 5. La mera expresión o liberación de emociones no es, en sí misma, placentera. 6. La catarsis produce un alivio (o rescate)11. O es en sí misma placentera, o ayuda a explicar el placer propio que se deriva de la tragedia. Queda, de este modo, explicada la definición de tragedia y planteado el debate sobre la definición del concepto de catarsis.

11 Traducción desde el inglés del sustantivo «relief»

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Andoni Peñalver Bayle: Catarsis 5. BIBLIOGRAFÍA Aristóteles.Metafísica (V. García Yebra Trans.). Aristóteles.Política (L. García Valdés Trans.). Aristóteles. (2011). Poética (V. García Yebra Trans.). Madrid: Gredos. Copleston, F. (1986). Historia de la filosofía: Grecía y roma. Barcelona: Ariel. Eagleton, T. (1996). Literary theory: An introduction. Masachusetts: Blackwell. Lear, J. (1992). In Rorty A. (Ed.), Essays on aristotle's poetics Princeton University Press. López Eire, A., & Murphy, J. J. (2002). Poética: Introducción, notas y comentario de antonio lópez eire ; epílogo de james J. Murphy. Tres Cantos. Reale, G., & Antiseri, D. (2010). Historia de la filosofía: De la antigüedad a la edad media Herder. 6. APÉNDICE Esquema capitular y temático de la poética de Aristóteles Artes imitiativas Tragedia Fábula Caracteres y personajes Poetas Pensamiento y elocución Sobre las especies del nombre Epopeya Problemas críticos y soluciones Superioridad de la epopeya o la tragedia

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