República y republicanos en Bilbao. En: Sociedad \"El Sitio\". Conferencias año 2011. Bilbao, Sociedad El Sitio, 2012, pp. 39-54.

Del terrorismo de Mott¡t José Manuel Azcona

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ISBN: 978-84-8606 4-20-4 Depósito legal: 8I-693 -2072 Impresión: Lankopi, S.A. Printed in Spain

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Impreso en España

ÍxorcB Del terrorismo de Montoneros a la dictadura de Videla en Argentina .losé Manuel Azcona

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republicanos en Bilbao

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-lon Penche Lcts secuelas físicas y los daños emocionales del abandono .lesús García y Javier Múgica

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Burlodor de Sevilla: el heroísmo discreto de Catalinón

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REPUBLICA Y REPUBLICANOS EN BILBAO Jon Penche

Doctor en H" Contemporánea. Universidad del Pqís Vasco ierencia oronunciada en la Sociedad

"El Sitio"

de Bilbao, el

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Introducción El objeto de esta conferencia es realizar un breve recorrido por la historia del repuuna historia que corre paralela a la de la Sociedad "El Sitio", con la

- :;anismo bilbaíno, -

-¡1 se entrelaza en multitud de ocasiones, como veremos.

La historia del republicanismo en Bilbao ha sido, hasta ahora, desconocida, algo que :rulta sorprendente si tenemos en cuenta que se trató de una fterza política que se mantu, t¡ efl el Ayuntamiento de Bilbao entre 1872 y 1931 siendo muchas veces el grupo político rtayoritario en el consistorio, y que si no ostentó en más ocasiones la alcaldía que en los :.-ríodos republicanos (1873 y 1931-1937) fue a causa de que el nombramiento de presiientes de la corporación municipal recaía en el poder real, que prefrrió incluso conceder :l poder al nacionalismo antes que otorgarlo al republicanismo. Que monopolizó, junto ,'on los socialistas, la representación de Bilbao en Cortes entre 1910 y 1936, y consiguió lener una representación estable en la Diputación Provincial durante el primer cuarto del siglo XX. Cabe destacar, por otra parle, la importancia de los personajes que militaron en el republicanismo bilbaíno,la gran mayoría de ellos socios de "El Sitio". Cosme y Horacio Echevarrieta, padre e hijo, son sin duda los más conocidos por su faceta empresarial, pero hubo otras personalidades destacadísimas como Bemabé Larnnaga, Federico Solaegui, Gaspar Leguina, Ramón Madariaga, Ramón Aldasoro, Vicente Fatrás, Ernesto Ercoreca o Ernesto Vega de la Iglesia, por mencionar sólo a los más importantes.

Con el estudio del republicanismo recuperamos asimismo la historia del liberalismo bilbaíno, aquel salido del sitio carlista de 1874 y encarnado en la Sociedad "El Sitio" y en la fiesta del 2 de mayo. El republicanismo engarzó desde un primer momento con ese espíritu liberal y lo mantuvo vivo hasta 1937, puesto que los republicanos acabarían siendo, a parlir del cambio de siglo, los únicos promotores de la jornada del 2 de mayo, en la que se recordaba a los héroes de la libertad de I814. La presencia de los republicanos tanto en "El Sitio" como en las celebraciones de la misma Sociedad es palpable con sólo realizar un pequeño vistazo a Ia prensa y a las listas de socios. Con la recuperación de la historia del republicanismo nos replanteamos, además,la definición de Ia tantas veces mentada "pluralidad bilbaína", basada tradicionalmente en Ia existencia de 3 polos (liberalismo, socialismo y nacionalismo) omitiendo de esa interpretación al republicanismo. Hay que matizar esta afirmación, ya que se situaba en el mismo polo liberal que a liberales dinásticos a los republicanos por extensión. En nuestra opinión, la pluralidad bilbaína no debe considerarse como un triángulo de fuerzas, sino que habría que añadirle un cuarto vértice que sería el del republicanismo, puesto que su importancia fue tanta o mayor que la de las otras formaciones.

JON PENCHE

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El Ensanche bilbaíno, poblado de clases medias acomodadas y burguesía fue un distrito en el que los republicanos no tuvieron demasiada predicación en el conjunto del período analizado. Solamente la configuración del distrito de Estación a partir de 1901, que agrupaba en su seno a los nuevos núcleos obreros de La Casilla, Zugastinovia o Recaldeberri, permitió a los republicanos obtener un puesto en el ayuntamiento por este distrito entre 1903 y 1915, justo hasta que entró en vigor, en l9I'7,Ia nueva reforma censal de Bilbao que consiguió diluir la fuerza electoral de estos barrios en un nuevo distrito más amplio. Por otra parte, la también destacada representación que consiguió el republicanismo en el distrito de Gran Vía igualmente entre 1903 y 1915 nos lleva a pensar que entre esas clases medias acomodadas pudo también haber calado el mensaje

republicano.

En definitiva, de esta recapitulación en conjunto del análisis de la representación republicana por distritos se puede concluir que el voto republicano provino en primer término de las clases obreras, tanto de los "barrios altos" como del resto de núcleos proletarios del resto de Bilbao. En segundo lugar, existió una significativa cuota de voto republicano que salió de distritos con una importante presencia de clases medias más o menos acomodadas, pero no tradicionales, es decir, no autóctonas, como era el caso de aquellas que residían en los distritos de Casas Consistoriales, sobre todo en la zona de Castaños, y Gran Vía. Todo esto nos lleva a pensar que, dado que el voto procedía de distritos con una alta cuota de población inmigrante, el apoyo republicano residió, de forma importante, en sectores de la población foráneos. Conclusión

El republicanismo se constituyó como una fuerza imprescindible dentro del panorama político bilbaíno en el tiempo comprendido entre el Sexenio Democrático y la II República. Su desarrollo político fue similar al del resto de sus correligionarios españoles, si bien se mostraron un tanto más unidos que ellos y añadieron a las habituales reivindicaciones republicanas la reclamación fuerista y autonomista. Los republicanos de la capital vizcaína tejieron una red de organizaciones y espacios de sociabilidad que les permitió "vivir en republicano". Sus votantes procedieron fundamentalmente de los barrios en los que residía la población obrera inmigrante.

Jefe Unii

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Las secuelas

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