Recursos informáticos en el aula de música

RECURSOS INFORMÁTICOS EN EL AULA DE MÚSICA ¡Cada año que paso en el aula me doy cuenta de la gran diferencia que hay en el aprendizaje entre unos alumnos y otros de una misma clase! ¡Cada vez hay más alumnos y alumnas que se me aburren en clase, cuando explico la lección utilizando los medios tradicionales de la pizarra y la tiza! Estas y otras cuestiones, manifestadas o pensadas por la mayoría del profesorado, nos hacen reflexionar sobre los cambios y transformaciones que en la escuela están ocurriendo merced a las alteraciones y variaciones que la propia sociedad está desarrollando, así como la conversión en los medios de comunicación. En otras palabras; la dimensión intercultural provocada por la inmigración de otros pueblos y la utilización de las nuevas tecnologías, desde la más temprana edad entre los alumnos y alumnas, hace imprescindible que el profesorado atienda y entienda como ejes primordiales en la educación de sus alumnos/as: la Atención a la diversidad y la aplicación en el aula de nuevos recursos más acordes con la demanda social. La asignatura de música, en comparación con otras materias, ha sido siempre integradora por su carácter universal; el idioma del sonido no tiene fronteras. Pero hasta la fecha los recursos educativos de los que se ha servido el profesor/a de música han partido exclusivamente de la fuente sonora de la voz o de los instrumentos, “Orff” en la mayoría de los casos, de los libros de texto, enciclopedias, fichas,..., y, como no, de la tradicional pizarra pautada. El uso de las nuevas tecnologías abre al profesorado, en este caso el de música, un mundo de posibilidades más amplio donde el “enganche” por parte de los alumnos/as a la materia es más fructífera. Para servirse de estos nuevos medios, el educador requiere de conocimientos mínimos de informática, electrónica y audiovisuales. Pero sobre todo debe disfrutar de un espíritu innovador y tenaz, donde a través de la nueva herramienta surjan originales ideas en la metodología, procesos de aprendizaje, criterios de evaluación,..., todo ello gracias a un singular recurso donde la Atención a la diversidad es más comprensible. Para ello nos proponemos a continuación, en forma de ayuda, una serie de normas y elementos necesarios para construir un estudio musical informático básico dentro de nuestra aula. Especificaremos su ubicación, conexión, aparatos y coste aproximado parcial y total.

Estudio informático-musical básico UBICACIÓN: Aunque el mejor sitio para albergar los aparatos necesarios para el montaje de nuestro laboratorio musical es el aula específica de música, no se descarta la posibilidad de ser instalada en otras salas: véase informática, el departamento o, siempre y cuando lo hubiere, el salón de actos. En éste último, si dispone a su vez de escenario y megafonía propia, la versatilidad y la capacidad de contingencias distintas, hacen que sea éste el preferible emplazamiento de trabajo. ELEMENTOS: En un laboratorio musical se precisan instrumentos informáticos y electrónicos. Cada uno de ellos deben de tener una serie de características especiales para su buen funcionamiento, además de existir una adecuada conexión entre todos ellos. a) Informáticos: Es este un campo de avance vertiginoso, donde un ordenador que se compra hoy, dentro de seis meses está obsoleto. Este es un dato importante a tener en cuenta a la hora de hacernos con la adquisición del ordenador. Si el coste de uno de última generación no excesivo en cuanto al monto total, sería una opción a tener en cuenta. No obstante, las especificaciones mínimas para realizar música utilizando el medio informático serían las siguientes: • Ordenador en entorno PCII o Machintosh, con una Memoria RAM de 64Mb, disco duro de 3 Gb y 350 Mhz de velocidad de microprocesador. Imprescindible una tarjeta de sonido medianamente aceptable (ya existen en el mercado tarjetas de gran calidad con muy bajo coste económico) y tarjeta de vídeo. Además sería recomendable que tuviera una unidad de CD regrabable para almacenar archivos de audio. Por último el monitor de 15’’ como mínimo.

• El Software dependerá de las distintas etapas y niveles donde se piense usar: Infantil, Primaria o Secundaria. Al mismo tiempo hay que reflexionar en las posibilidades de utilizar programas donde el coste sea pequeño, pero con un interés pedagógico suficientemente interesante. Existen en el mercado programas de libre acceso, tanto secuenciadores, como editores de partituras o programas educativos.

(Página principal del secuenciador Evolution) gráfico 1.

• La impresora no es imprescindible. Una propiedad de la nueva herramienta es la de propiciar cambios, borrarlos y editar tantas copias como sean precisas para su aprovechamiento en el aula, en una palabra imprimir nuestros trabajos. Pero lo más interesante de éste atributo es que los centros no tienen por qué tener una impresora por departamento o aula, sino que en una sola impresora central (láser), se pueden imprimir todos los trabajos derivados de los distintos ordenadores, ya que éstos están en red. • Proyector multimedia. La capacidad de visionar y el manejo aséptico de un “cañon” multimedia hace de éste uno de los elementos más importantes en el desarrollo del recurso informático. Se trata de un sustituto al manido retroproyector de opacos y transparencias. Se diferencia de este último en que su proyección es interactiva y dinámica.

b)

Electrónicos:

• Cadena de música. Lo más aconsejable es modular tu propia cadena de música, de tal manera que podrás garantizar una mayor calidad en los elementos que la integran: amplificador, CD, cassette, altavoces, ecualizador, .... Esta opción, evidentemente, resulta más costosa. • Mesa de mezclas. No son imprescindibles pero resultan interesantes a la hora de conducir manualmente los canales de una grabación MIDI o Audio en un Secuenciador. Para nuestro ligar de trabajo con una mesa de cuatro u ocho canales, mono y estéreo, serían suficientes. Felipe Gértrudix Barrio Profesor de Música (Asesor de AA/EF del CAP de Leganés)