Raúl Arreola Cortés: Estado, poder político y autonomía universitaria, 1985-1986.

Durante la década de los ochenta, la especulación y la abrupta baja en los precios del petróleo, desataron una crisis financiera de gran magnitud, obligando a varios países subdesarrollados a reestructurar su modelo económico y políticas monetarias, dando como resultado un viraje hacía el neoliberalismo, como fue en el caso mexicano durante el gobierno de Miguel de la Madrid. Se dio paso a un proceso de privatización de empresas estatales para incentivar la inversión extranjera. El papel del Estado fue cambiando de modo que se transformó en un Estado clientelar, lo cual trastocó la relación entre éste y las Instituciones de Educación Superior. Las universidades se vieron orilladas a acceder a las nuevas políticas educativas que se perfilaban a los procesos de evaluación y acreditación. En Michoacán, durante el gobierno de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, se experimentó el inicio de la ruptura al interior del Partido Revolucionario Institucional de cara al cambio de gobierno local en 1986. El cisma político repercutió en la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, institución que se vio envuelta en los vaivenes que acontecían entre grupos de poder. La autonomía universitaria se vio mermada y la Casa de Hidalgo pasó a ser un escenario en donde convergieron los grupos antagónicos. Personajes como Raúl Arreola Cortés y Moisés García López, fueron clave en el desenvolvimiento del conflicto que reflejó la existencia de dos rectores en la máxima casa de estudios de Michoacán.