PRÁCTICAS MORTUORIAS POST-CHAVÍN: UN ANÁLISIS TAFONÓMICO DE RESTOS HUMANOS ENTREMEZCLADOS DEL CANAL ROCAS DE CHAVÍN DE HUÁNTAR

May 22, 2017 | Autor: Matthew C. Velasco | Categoría: Bioarchaeology, Taphonomy, Andes, Mortuary Practices, Chavín de Huántar, Ancash-Perú
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Descripción

ARQUEOLOGÍA DE LA SIERRA DE ANCASH 2 POBLACIÓN Y TERRITORIO

Bebel Ibarra Asencios Editor

INSTITUTO DE ESTUDIOS HUARINOS

2016 1

ARQUEOLOGÍA DE LA SIERRA DE ANCASH 2: POBLACIÓN Y TERRITORIO Editor Bebel Ibarra Asencios Corrección de Texto y Estilo Carlo Brescia Carlos Escobar Silva Pablo Mateos Edición de Bibliografía Jhon Cruz Quiñones Diseño y Diagramación Bebel Ibarra Asencios Diseño de Portada Margarita Brikyte

Copyright © Instituto de Estudios Huarinos Av. Vira 473. Huari. Ancash Copyright © Bebel Ibarra Asencios ISBN 978-1-365-43505-8 2016. Primera Edición

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CONTENIDO

Introducción (7) Capítulo 1 OCUPACIONES HUMANAS TEMPRANAS DURANTE EL PERIODO ARCAICO EN LA PUNA SUR DE ANCASH: EL SITIO DE HATUN MACHAY (13) Jhon Cruz, Eduardo Sante y Stephanie Van Berkel Capítulo 2 LA INCORPORACIÓN DE LA TRADICIÓN MITO EN EL ÁMBITO RITUAL DE CHAVÍN DE HUÁNTAR (29) Daniel Contreras Capítulo 3 LAS OCUPACIONES FORMATIVAS EN LA BANDA: EXCAVACIONES DURANTE LA CONSTRUCCIÓN DE LA VARIANTE CHAVÍN Y SU IMPACTO SOCIOECONÓMICO EN EL VALLE DEL MOSNA (53) Jorge Gamboa Velásquez Capítulo 4 PRÁCTICAS MORTUORIAS POST-CHAVÍN: UN ANÁLISIS TAFONÓMICO DE RESTOS HUMANOS ENTREMEZCLADOS DEL CANAL ROCAS DE CHAVÍN DE HUÁNTAR (77) Mathew Velasco Capítulo 5 ANTARAGÁ: ARQUITECTURA MONUMENTAL RECUAY EN EL ALTO MARAÑÓN (93) Rafael Segura Rivera Capítulo 6 ARQUEOLOGÍA DE UNA PACARINA ANDINA (107) Carolina Orsini y Elisa Benozzi Capítulo 7 ICHIC WILLKAWAIN Y EL CALLEJÓN DE HUAYLAS: UN ENCLAVE PROVINCIAL WARI EN LA SIERRA NORTE DEL PERÚ (137) Juan Paredes Olvera 3

Capítulo 8 CONSIDERACIONES CRONOLÓGICAS DEL ALTO MARAÑÓN: TANTAMAYO Y RAPAYÁN (165) Alexis Mantha y Hernando Malca Capítulo 9 ESTRATEGIAS DE OCUPACIÓN INCA EN LA SIERRA DE ANCASH: EL ROL DE TAMBOS Y COLCAS EN LA DEFINICIÓN DE PROVINCIAS INCAS (179) Bebel Ibarra Asencios Bibliografía General (211)

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Arqueología de la Sierra de Ancash 2: Población y Territorio. Pp 77-92 Instituto de Estudios Huarinos. Lima. 2016

4 PRÁCTICAS MORTUORIAS POST-CHAVÍN: UN ANÁLISIS TAFONÓMICO DE RESTOS HUMANOS ENTREMEZCLADOS DEL CANAL ROCAS DE CHAVÍN DE HUÁNTAR Matthew C. Velasco*

Introducción Recientemente los contextos funerarios de restos humanos entremezclados vienen recibiendo nuevas consideraciones con respecto a las problemáticas teóricas y metodológicas que se presentan al investigador (Osterholtz, Baustian, y Martin 2014a). En particular, la distinción entre las prácticas intencionales de seres humanos y los procesos tafonómicos que pueden obstruirlas nos exigen especial consideración del contexto funerario y sus transformaciones físicas a través del tiempo. El sitio de Chavín de Huántar, en la sierra de Áncash, uno de los templos principales del Formativo Medio y Tardío (1200-500 a.C.), también contiene contextos funerarios de huesos entremezclados que pertenecen a las épocas “post-Chavín,” las cuales inician alrededor del 500-400 a.C. con la difusión de cerámica Huaraz o Blanco sobre rojo (Rick et al. 2009). Durante esta época y en las épocas sucesivas1, la zona monumental de Chavín, en particular la plaza Circular, fue reutilizada como asentamiento doméstico. Estas nuevas poblaciones construyeron sus casas y enterraron a sus muertos en los espacios arquitectónicos previamente exclusivos para el uso ceremonial asociado al culto Chavín (Rick 2005). Aunque se han encontrado depósitos funerarios postChavín en diversas galerías, canales, y sectores del monumento, raramente han sido estudiados de manera sistemática2. En este artículo, llevo a cabo un análisis tafonómico de restos humanos encontrados parcialmente fracturados y entremezclados en el Canal de Rocas, una de las estructuras hidráulicas principales del sistema de drenaje que corre debajo del centro monumental (Contreras y Keefer 2009). El estudio tafonómico ofrece herramientas metodológicas para poder ampliar la historia de formación deposicional y distinguir entre los agentes naturales y culturales que hubieran podido modificar la condición y distribución de material osteológico (Lyman 1994). En particular, se probará tres hipótesis para la formación del contexto * [email protected]

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Prácticas Mortuorias post-Chavín en Chavín de Huántar

funerario dentro del canal: (1) que los restos humanos fueron disturbados por el flujo de agua dentro del canal; (2) que representa un contexto de desecho de victimas de masacre o sacrificio; ó (3) que representan contextos funerarios secundarios depositados de manera intencional y ritual. El estudio sistemático de las modificaciones tafonómicas permite examinar estos tres escenarios y lograr la mayor reconstrucción de prácticas mortuorias de los habitantes del sitio de Chavín durante un periodo de transformación social significativa. Descripción del Contexto Funerario Rocas Se expusieron los entierros del Canal Rocas por primera vez en 1998 como parte de un Proyecto de conservación dirigido por el Instituto Nacional de Cultura (INC), con el fin de mitigar los efectos del fenómeno El Niño en el monumento (León Ascurra y Sánchez Mendoza 1998). El material óseo se extendió por 6.6 metros a lo largo del canal de 90 cm de ancho, en la sección que pasa por debajo de la escalera oeste de la Plaza Cuadrada (Figura 1). El contexto funerario se caracteriza por la escasez de material cultural y la presencia de huesos mezclados y en desorden, mostrando varios grados de articulación anatómica. Al norte del conjunto principal de restos óseos se ubican dos esqueletos de camélidos juveniles, posiblemente ofrendas asociadas al depósito óseo3. El INC realizó la limpieza, consolidación, y la documentación inicial de los restos óseos, registrando la distribución de los huesos con fotografías y un dibujo en escala (Figura 2). A petición del INC, el equipo de la Universidad de Stanford, bajo la dirección del Dr. John Rick, llevó a cabo el análisis in situ e inventario preliminar de los restos humanos ese mismo año. Sin embargo, no los pudieron remover del contexto por cuestiones de tiempo y falta de permiso oficial. El contexto fue cubierto con papel impregnado con asfalto para aislar el piso del relleno moderno, dejando en este estado los entierros hasta que pudieran ser excavados con el cuidado necesario (León Ascurra y Sánchez Mendoza 1998). Finalmente en 2004, el equipo de Stanford logró excavar el contexto como parte de un trabajo de consolidación e investigación del canal. Los restos humanos recuperados durante esa temporada pertenecen a las unidades CdH-RO-PM05 hasta CdH-RO-PM09 (Figura 1; recuadro). Las observaciones in situ realizadas por el INC y el equipo de Stanford en 1998 nos han brindado información indispensable sobre el contexto funerario y su asociación cronológica, además del planteamiento de las hipótesis de la formación del contexto. Basado en la identificación de los pocos fragmentos de cerámica asociados, se asignaron los entierros a la ocupación del sitio “RecuayAquilpo” (200-1200 d.C.) (León Ascurra y Sánchez Mendoza 1998)4. También se propusieron algunas hipótesis sobre la desorganización de los huesos, especulando que fueron disturbados por la acción fluvial o alternativamente que representan el depósito intencional y secundario de restos humanos. Aunque no se observaron indicadores evidentes de trauma en el análisis preliminar, la posibilidad de que este contexto representa un sacrificio colectivo merece consideración, dado que los restos se encuentran en una estructura tanto ritual como funcional, además de la escasez de ofrendas formales directamente asociados a los entierros. 78

Figura 1. Plano general de las unidades excavadas del Canal Rocas y su ubicación en la Plaza Mayor. Mapas cortesía del Dr. John Rick.

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Figura 2. (Arriba) Plano de los entierros del canal Rocas con las tres áreas de investigación indicadas. (Debajo) Detalle del Área 2 con los individuos y cráneos simbolizados. Re-dibujado del original hecho por el Instituto Nacional de Cultural.

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Con el fin de facilitar el futuro análisis, el equipo de Stanford dividió el contexto osteológico en tres áreas de estudio en base a ligeros cambios en el nivel estratigráfico de los huesos (Moyer y Saffer 1998). Estas divisiones permiten un control espacial más preciso para el análisis de indicadores tafonómicos y la examinación de las hipótesis arriba mencionadas. En el área central (Área 2), se encuentran dos individuos casi completos, una mujer en posición fetal (Individuo #1) y un varón (Individuo #6). Los dos individuos están claramente asociados dado que quedaba poca tierra entre el coxal izquierdo del Individuo #1 y la escapula izquierda del Individuo #6. Al norte y sur de estos entierros centrales se encuentran dos conglomeraciones de restos humanos desarticulados (Figura 2). El material osteológico del Área 1 y 3 se ubica a un nivel más profundo (120 a 144 cm bajo el nivel de la plaza) que el conjunto central (77 a 119 cm). Sin embargo, la distribución de los huesos es más o menos ininterrumpida entre las Áreas 2 y 3, mientras que el Área 1 se separa del Área 2 por tierra estéril. La falta de fechas radio-carbónicas para el contexto funerario no permite determinar con certeza si estas diferencias estratigráficas o espaciales se relacionan con distintos episodios de deposición dentro del canal. Sin embargo, los datos tafonómicos pueden ayudar a distinguir entre casos de depósitos acumulados por eventos episódicos o por uso de larga duración (Osterholtz, Baustian, and Martin 2014b). Composición Demográfica Esta investigación aporta nuevos datos sobre la composición demográfica de los contextos funerarios y su historia tafonómica. El cálculo del número mínimo de individuos (NMI) presentado en este artículo se basa en los huesos largos, dado que son los elementos mejor preservados, tomando en consideración la edad, la bilateralidad, y la posibilidad de que los huesos en las áreas adyacentes se hayan entremezclado (Velasco 2008). Se calcula un NMI de 15 individuos—11 adultos y 4 juveniles—para el contexto en conjunto (Tabla 1). La variación en el tamaño y la robusticidad de los fémures adultos probablemente se debe al dimorfismo sexual. En general, los huesos coxales no se conservaron bien pero las notas de los arqueólogos además de mis propias observaciones nos sugieren que ambos sexos están presentes. En resumen, no hay evidencia que el entierro en este segmento del canal Rocas fuera restringido a alguna cohorte demográfica.

Tabla 1. Número mínimo de individuos por cada área

Adultos Sub-adultos

Área 1

Área 2

Área 3

6

2

3

11

1

1

3

15

3

1

*

3

Infante (
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