PEREZ-MARTIN,Mariangeles,\"Aldo Alcota. Imaginario Caníbal\", Catálogo Exposición Roomart 2015, La Nau UVEG

Organització

Vicerectorat de Cultura i Igualtat, Universitat de València Centre de Documentació d’Art Valencià Contemporani “Romà de la Calle”, Universitat de València Centre Cultural La Nau, Universitat de València

Exposició Projecte: Jose Romeu Soler Comissari: Ricard Silvestre Coordinació: Mariló Gradolí i Manuel Martinez Muntatge: Santi Andrés Visites guiades: Voluntaris de la Universitat de València

Catàleg i calendari Edició a carrèc de Disseny: Sento Serra © de les imatges: els artistes Karina Vagradova, Manuel Martínez Ojea, Su-pi Hsu, Addy Chávez, Ewa Okolowicz, Aldo Alcota, Vicente Perpiñá, Natuka Honrubia, Pau Pascual Galbis, Núria Antolí Savall, Paula Prats, Daniel Coves © dels textos: el autors Carmen Senabre, Luisa Pastor, Josep Soler, Montse Hormigos, Aida Antonino, MªAngeles Pérez, Juan Antonio Herrero, Rosalia Torrent, Xesqui Castañer, Amalio Vanaclocha, Elena Monzon, María Fuset, Romà de la Calle, Ricard Silvestre. Traducció Servei de Política Lingüística, Universitat de València © de la present edició ISBN: 978-84-943473-2-0 Dipòsit Legal: V-367-2015

Aldo Alcota

- 81 -

^ Errante delirante

Acrílico, rotulador, tiritas y collage sobre papel. 29,7 x 21 cm. 2014

> Delirios de un errante

Acrílico, rotulador y tiritas sobre papel. 21 x 29,7 cm. 2014

- 82 -

- 83 -

Imaginario caníbal

Tal vez contemplar le comunique a quien contempla lo que no es dicho por ninguna expresión ni se contiene en ninguna interpretación. Al-Niffari Hasawa Chaan Kawil viajó en canoa durante cuatro katunes. Los dioses remeros jaguar y pastinaca conducían la barca junto al mono araña, la iguana y el dios tutelar con el lirio acuático en su frente. El rey retornaba del inframundo encarnado en divinidad. Sucedió en el siglo VIII, era gobernante de Tikal. Dos siglos antes se rebelaban los artefactos en la Huaca de la Luna andina mientras Ai Apaec con su rostro felino se debatía entre la noche y el día, masculino y femenino, oro y plata, turquesa y jade, vida y muerte… daba comienzo el sacrificio, la danza frenética del dios degollador moche. Mitos ancestrales surgidos en lugares lejanos que una y mil veces se transmutan en seres diferentes incorporados al imaginario surrealista universal: esa presencia o surréalité, sobre(realidad) de las imágenes ocultas que proceden de lo onírico. Así es el universo de Aldo Alcota, sus criaturas se componen de múltiples realidades, nacen en los sueños, sus imágenes se contorsionan,

se quiebran, se funden hasta formar seres imposibles. Breton proclamaba el libre albedrío para expresar «el automatismo psíquico puro» verbalmente «o de cualquier otro modo»1. Fiel seguidor del compromiso surrealista, Aldo es un poeta que dibuja. Para este chileno migrado a Europa lo crucial es dejar fluir la invención, lo inesperado. En sus dibujos plasma lo espontáneo, trabaja sin boceto, aprovecha los errores del automatismo, surgen formas que giran y se completan. Prima la sorpresa, pero se detiene y analiza la composición y el equilibrio. Su plástica de tintas planas bebe del cómic, de los superhéroes y del mundo de Disney. Robin Walz señaló la conexión del surrealismo con la cultura de masas y su afinidad con lo efímero y aterrador de 1 BRETON, André. Manifiestos del Surrealismo. Barcelona: Labor, 1992, p. 44. Cit. por: FER, Briony. «Surrealismo, mito y psicoanálisis» en Briony FER; David BATCHELOR; Paul WOOD. Realismo, Racionalismo, Surrealismo. Madrid: Akal, 1999, p. 176.

- 84 -

Imaginari caníbal

Potser contemplar comunica a qui contempla allò que no és dit per cap expressió ni es conté en cap interpretació. Al-Niffari

Hasawa Chaan Kawil va viatjar en canoa durant quatre katunes. Els déus remers jaguar i escurçana conduïen la barca al costat de la mona aranya, la iguana i el déu tutelar amb el lliri d’aigua al seu front. El rei retornava de l’inframón encarnat en divinitat. Va succeir en el segle VIII, era governant de Tikal. Dos segles abans es rebel·laven els artefactes a la Huaca de la Luna andina mentre Ai Apaec, amb el seu rostre felí, es debatia entre la nit i el dia, masculí i femení, or i plata, turquesa i jade, vida i mort… encetava el sacrifici, la dansa frenètica del déu degollador moche.

es contorsionen, es dobleguen, es fonen fins a formar éssers impossibles. Breton proclamava el lliure albir per a expressar «l’automatisme psíquic pur» verbalment «o de qualsevol altra manera».1 Fidel seguidor del compromís surrealista, Aldo és un poeta que dibuixa. Per a aquest xilè migrat a Europa, allò que és crucial és deixar fluir la invenció, l’inesperat. En els seus dibuixos plasma l’espontani, treballa sense esbós, aprofita els errors de l’automatisme, sorgeixen formes que giren i es completen. Preval la sorpresa, però es deté i analitza la composició i l’equilibri.

Mites ancestrals sorgits en llocs llunyans que una i mil vegades es transmuten en éssers diferents incorporats a l’imaginari surrealista universal: aqueixa presència o sur-réalité, sobre(realitat) de les imatges ocultes que procedeixen de l’oníric. Així és l’univers d’Aldo Alcota: les seues criatures es componen de múltiples realitats, naixen en els somnis, les seues imatges

La seua plàstica de tintes planes poa en el còmic, en els superherois i en el món de Disney. Robin Walz va assenyalar la connexió del surrealisme amb la cultura de masses 1 BRETON, André. Manifiestos del Surrealismo. Barcelona: Labor, 1992, p. 44. Cit. en: FER, Briony. «Surrealismo, mito y psicoanálisis» en Briony FER; David BATCHELOR; Paul WOOD. Realismo, Racionalismo, Surrealismo. Madrid: Akal, 1999, p. 176.

- 85 -

la cultura popular de las historietas. Una irreverente cultura extendida a nivel global a través de los medios masivos que fascinó a los surrealistas. Anke Birkenmaier2 afirma que a los latinoamericanos la mirada surrealista sobre «el otro» les permitió asumirse como una sociedad moderna en un mismo campo discursivo con las europeas. El movimiento nació en París, pero el espíritu surrealista es globalizador, estaba en la cultura azteca, en los bestiarios medievales, en el Bosco, en los Dogón africanos… La estética surrealista ha sobrevivido expandiendo su fama, convertida en un lugar común de nuestra era moderna. Parafraseando a Henri Béhar3, en su Le surréalisme, éste es un modo de pensamiento que rompe la lógica y se asimila a la magia. La ruptura descubre el parentesco espiritual con los locos, los niños y los primitivos; y aproxima a las etnias excluidas por la civilización. En 2013 Aldo Alcota publicó Guayacán / Virgen Bacon, un poemario ilustrado. Bacon, el artista de lo deforme, de los cuerpos desfigurados y sufrientes, de las heridas humanas. Así se transmutan las criaturas de Aldo, la fuerza de su plástica radica en su imprevisión, discontinuidad e inmediatez. Le fascina la patafísica, la ciencia de la solución imaginaria. La imaginación es algo expansivo y poderoso, es necesaria. Sus seres no tienen escenario, flotan como si levitaran en el vacío. No son animales, no son humanos, solo fragmentos. Fragmentos que remiten al erotismo de las muñecas rotas, Poupées de Hans Bellmer. Son continua metamorfosis del ser humano y del cosmos.

aumenta su potencial sugestivo. Pero en el paraíso subjetivo el placer y el pathos se confunden. El dolor es el aspecto íntimo y el horror es el rostro público de lo abyecto. Las tiritas de camuflaje en las piezas de Aldo simbolizan las heridas, el mundo que nos rodea es apocalíptico, las guerras, el imperialismo norteamericano, el salvajismo del capital. El surrealismo representa el cambio social, la imaginación nos lleva más allá. Frente a los límites impuestos por el orden Aldo nos proporciona una visión fluida del ser que aparece en constante transformación. Un conflicto entre apariencia y verdad en el que las imágenes dialogan entre sí y el arte anterior. En un diálogo que subvierte las convenciones sociales y reclama un lugar para su propia voz. La esencia misma de la subversión surrealista incluye en lo visual lo onírico como un todo que fragmenta y reconstruye el ser humano, alcanzando la premisa surrealista establecida por André Breton al final de Nadja «la belleza será convulsiva o no será». Mariángeles Pérez-Martín

Decía Pierre Reverdy que «lo grande no es la imagen, sino la emoción que provoca»4. Los trazos fugaces de Aldo tienen carácter explosivo, cuanto mayor es su incoherencia 2 BIRKENMAIER, Anke. Alejo Carpentier y la cultura del surrealismo en América Latina. Madrid: Iberoamericana, 2006. 3 BÉHAR, Henri; CAROSSOU, Michael. Le surréalisme. París: Libraire Générale Française, 1984. p. 8. 4 REVERDY, Pierre. Nord-Sud. París: Flammarion, 1975, p.73. Cit. en: ADONIS. Sufismo y Surrealismo. Madrid: Ed. Oriente-Mediterráneo, 2008.

- 86 -

i la seua afinitat amb l’efímer i aterridor de la cultura popular de les historietes. Una irreverent cultura estesa a escala global a través dels mitjans massius que va fascinar els surrealistes. Anke Birkenmaier2 afirma que, als llatinoamericans, la mirada surrealista sobre «l’altre» els va permetre assumir-se com una societat moderna en un mateix camp discursiu amb les europees. El moviment va nàixer a París, però l’esperit surrealista és globalitzador, es trobava en la cultura asteca, en els bestiaris medievals, en el Bosch, en els dogons africans… L’estètica surrealista ha sobreviscut expandint la seua fama, convertida en un lloc comú de la nostra era moderna. Parafrasejant Henri Béhar3, en el seu Le surréalisme, aquest és una forma de pensament que trenca la lògica i s’assimila a la màgia. La ruptura descobreix el parentiu espiritual amb els bojos, els infants i els primitius; i aproxima les ètnies excloses per la civilització. En 2013 Aldo Alcotava publicar Guayacán / Virgen Bacon, un poemari il·lustrat. Bacon, l’artista del deforme, dels cossos desfigurats i sofrents, de les ferides humanes. Així es transmuten les criatures d’Aldo, la força de la seua plàstica radica en la seua imprevisió, discontinuïtat i immediatesa. El fascina la patafísica, la ciència de la solució imaginària. La imaginació és una cosa expansiva i poderosa, és necessària. Els seus éssers no tenen escenari, suren com si levitaren en el buit. No són animals, no són humans, solament fragments. Fragments que remeten a l’erotisme de les nines trencades, Poupées de Hans Bellmer. Són contínua metamorfosi de l’ésser humà i del cosmos.

caràcter explosiu, com més gran és la seua incoherència, augmenta el seu potencial suggestiu. Però al paradís subjectiu el plaer i el pathos es confonen. El dolor és l’aspecte íntim i l’horror és el rostre públic de l’abjecte. Les tiretes de camuflatge en les peces d’Aldo simbolitzen les ferides, el món que ens envolta és apocalíptic, les guerres, l’imperialisme nord-americà, el salvatgisme del capital. El surrealisme representa el canvi social, la imaginació ens porta més enllà. Enfront dels límits imposats per l’ordre, Aldo ens proporciona una visió fluïda de l’ésser que apareix en constant transformació. Un conflicte entre aparença i veritat en el qual les imatges dialoguen entre si i l’art anterior. En un diàleg que subverteix les convencions socials i reclama un lloc per a la seua pròpia veu. L’essència mateixa de la subversió surrealista inclou en el visual l’oníric, com un tot que fragmenta i reconstrueix l’ésser humà, i aconsegueix així la premissa surrealista establida per André Breton al final de Nadja: «la bellesa serà convulsiva o no serà». Mariángeles Pérez-Martín

Deia Pierre Reverdy que «allò que és gran no és la imatge, sinó l’emoció que provoca».4 Els traços fugaços d’Aldo tenen 2 BIRKENMAIER, Anke. Alejo Carpentier y la cultura del surrealismo en América Latina. Madrid: Iberoamericana, 2006. 3 BÉHAR, Henri; CAROSSOU, Michael. Le surréalisme. París: Libraire Générale Française, 1984. p. 8. 4 REVERDY, Pierre. Nord-Sud. París: Flammarion, 1975, p.73. Cit. en: ADONIS. Sufismo y surrealismo. Madrid: Ed. Oriente-Mediterráneo, 2008.

- 87 -