Payaso Publicitario

PAYASO PUBTICITARIO James Oles

Recortado contra una entrada oscura, el Payasito triste retratado por Manuel Alvarez Bravo voltea la cara al sol, apartando su mirada de la cdmara, parado sobre la banqueta de

|acalledeAllendeenelcentrohist6ricodelaciudaddeM6xico.(Eslamahana)lApenas empieza la jornada) La figura estd levemente fuera de foco, como si se hubiera movido justamente cuando Alvarez Bravo dispar6. No hay aqui ni banda musical, ni elefantes'

menosainunmaestrodeceremoniasgritando,aunquesiunacacofonfadetextosestrilos dentes que cubre la fachada del edificio, como en una feria de pueblo: La Casa de Articulos para Nifros. iTreiganlos, nosotros nos encargamos de vestirlos! En articulos para caballeros somos los tinicos: nuestros precios convencen Por terminaci6n de balance castigamos todas nuestras existencias con un )oyo. Atrapado como un juguete, con su inmaculado traie de Pierrot y su maquillaje arln fresco, el pobre payasito parece incapaz de hacer reir, y menos a los pocos transe ntes que examinan los escaParates (s6lo el fot6grafo le hace caso). Parece un niho, pero no tiene por qud serlo. Aunque no es miembro de un circo, este Payasito si es un trabaiador' un anuncio viviente, antecedente de las computadoras de peluche, de las chicas go-go o del detestable Ronald McDonald, que siguen bailando en las entradas y las avenidas, hoy mrs chillantes y mds cursis porque la competencia es ain mds fuerte, porque los coches pasan m6s veloces. Como trabaiador solitario, este payaso nos recuerda al hombre balancedndose sobre la escalera en el Tanque de petrdleo no t de Tina Modotti, o mejor adn' a Lo elegancia y la pobreza. Pero no obstante su aislamiento, aquf no hay did'ctica Prole-

taria sino ambigiiedad Po6tica. Los detalles urbanos encontrados por Alvarez Bravo mientras deambulaba por el centro, observando los escaparates y otros espacios comerciales, muchas veces incluyen signos y simbolos: imdgenes pintadas (el pez grande y los chicos, los maniquies riendo' los ojos pintados), palabras cargadas de sentido ("inimitable" y "emulsi6n") y objetos mnemot6cnicos (una bicicleta al cielo' unos mazos de polo, los rayos x), utilizados todos para atraer la atenci6n del transe nte, obligarlo a detenerse y a comprar' El payasito es simplemente el equivalente animado de estas sefiales inanimadas Entre los fot6grafos modernos que trabaiaron en Mdxico en los afros veinte y treinta, s6lo Manuel Alvarez Bravo estuvo cautivado por el lenguaje preexistente de los anuncios (es algo distinto, claro, que hacer fotografias Publicitarias) Pero mientras se podria decir que la omniPresencia de anuncios comerciales define' en parte, a la "ciudad moderna", la mayoria de los letreros en estas fotograffas Parecen hechos a manoyalgo pasados de moda -tanto como el circo mismo- De hecho, laPintura y la falsedad, el exhibicionismo y la hipdrbole, son parte integral del mundo circense: al final, quizds nuestro payasito no resulta tan fuera de lugar.

36E

Maiue Alvare, Bravo

E/ p ayosita, 1929. Cortesia Co ette Alvarez Urbajtet.

169