Participat: las instrumentalizaciones de la participación social en procesos patrimoniales.

Se presentan los objetivos, premisas e hipótesis del Proyecto Participat. El proyecto se plantea realizar una suerte de antropología de las instituciones, analizando los vínculos e intersecciones entre formas de gobernanza patrimonial, modelos neoliberales y procesos participativos. En primer lugar, se traza una genealogía de los “epocalismos” (Geertz, 1973) del imperativo participativo en la legislación y su estrecha vinculación con significantes cada vez más vacíos, flotantes y disputados, como “democracia” o “ciudadanía”.El Proyecto Participat parte de la premisa de que el régimen patrimonial (Bendix, 2012) o la máquina patrimonial (Alonso, 2013) está creando fracturas sociales que se reproducen por la propia maquinaria del sistema, independientemente de los elementos o prácticas patrimonializadas. Por esta razón, conjuntamente con Cooke y Kothari (2001), entendemos la participación social como una ideología que normalmente enmascara intereses políticos, además de apelar a un sujeto político ininteligible y difícil de delimitar – la comunidad –. Es decir, se mantiene una perspectiva crítica, que, lejos de asociar el aumento de procesos participación en patrimonio a la democratización del ámbito patrimonial, entiende los procesos participativos como instrumentos para garantizar la gobernabilidad.Sin embargo, más allá de etnografiar las formas de gestión del patrimonio por parte de las administraciones, el Proyecto Participat también se interesa por las asociaciones y agrupaciones ciudadanas que impulsan alternativas patrimoniales en – y desde – los márgenes de las instituciones. Un ejemplo emblemático que conozco de primera mano es la Plataforma Vecinal del Pumarejo (Sevilla), donde un grupo auto-generado en contra de la especulación inmobiliaria y la gentrificación, utiliza la participación y el patrimonio como retóricas aglutinantes y agregadoras para la transformación social. Después de una trayectoria de casi dos décadas articulando resistencias al modelo neoliberal, este movimiento social tiene mucha experiencia en técnicas participativas concretas puestas al servicio de la producción y construcción simbólica de dispositivos disidentes. Por esta razón, se hará un breve recorrido por sus formas de autogestión y autogobierno, como se verá, muy alejadas de la participación como sociotécnica de gobernanza neoliberal.