Niños, adolescentes y violencia política en el cine latinoamericano

Share Embed


Descripción

Ensayo

Niños, adolescentes y violencia política en el cine latinoamericano. El cine latinoamericano desde sus inicios ha tenido que luchar contra la censura y la inestabilidad económica (King, 1994: 347). A pesar de estos factores negativos, los temas políticos y sociales han estado presentes en muchos proyectos cinematográficos desde los inicios de la década de los 50, cuando los jóvenes directores latinoamericanos decidieron explorar las realidades, conflictos y potencial político de sus países. El ambiente de crisis social y política llevó a los cineastas de la Escuela Documental de Santa Fe en Argentina, el grupo Ukamau en Bolivia, el cinema nôvo en Brasil así como otros realizadores revolucionarios en Colombia, Chile, Uruguay y Venezuela, a buscar la forma de utilizar proyectos cinematográficos como instrumentos de concientización social. Al final de la década, estos cineastas buscaron conectar distintos proyectos radicales realizados en contextos nacionales específicos y llevarlos a un marco ideológico y cultural mucho más amplio, que pueda representar todo el continente en un movimiento cinematográfico llamado el Nuevo Cine Latinoamericano. Han pasado muchos años desde ese inicio y, durante ese tiempo, el Nuevo Cine ha producido innumerables productos cinematográficos, con contenido social y político, dignos de analizar. (Pick, 1996) Este ensayo presenta cuatro películas latinoamericanas que describen el encuentro violento y dramático entre el mundo infantil y juvenil contra la persecución política y la violencia militar provenientes de las fuerzas militares y de los movimientos guerrilleros. He decidido estructurar el ensayo de acuerdo a la edad de los protagonistas y analizar a través de sus historias la relación que tienen los protagonistas con el mundo en el que viven, el rol de sus padres en protegerlos o exponerlos a la violencia y la inclinación política que puedan tener de acuerdo a la situación en la que están.

Comenzaré analizando la historia de Gaby (5 años) en La Historia Oficial (1985), luego a la niña narradora y su primo Teo, ambos hijos de guerrilleros de la venezolana Postales de Leningrado (2007), seguidamente narraré la historia de Juan (10 años) el niño secuestrado y enlistado por Sendero Luminoso en la peruana Paloma de Papel (2003), Chava (11-12 años) quien huye del reclutamiento forzado en el San Salvador de la guerra civil en Voces Inocentes (2004) y, por último, la dura experiencia de Pablo y sus amigos (16-18 años) secuestrados y torturados por la policía en la argentina Noche de los lápices (1986). Gaby: la identidad perdida La película argentina La Historia Oficial nos presenta a Gaby, una niña de 5 años que probablemente ha nacido en cautiverio y cuyos padres pudieron ser víctimas de la violencia política en la Argentina de los 70. Gaby tiene una feliz y apacible al inicio de la película, unos padres que la adoran y un hogar próspero lleno de comodidades. Aunque Gaby no lo recuerde, ella ya ha sido víctima de la violencia que sacudió a Argentina en la dictadura de la Junta Militar entre 1976 a 1983. Sus padres biológicos han sido probablemente torturados y asesinados, su embarazo fue probablemente muy traumático y lleno de carencias, y su nacimiento se puede haber producido en cautiverio. A pesar de ser tan pequeña, Gaby ha sufrido la pérdida de sus padres y, al final de la película, el futuro de Gaby es impreciso. No podemos saber si ella conocerá a su posible abuela biológica, si sus padres se divorciaron, con cuál de ellos vivirá y quién la va a cuidar, si su estilo de vida cambiará radicalmente o si algún día llegará a saber la verdad de sus orígenes. En ese sentido, la película nos lleva a interpretar que un futuro incierto y gris espera a los protagonistas, quienes han sido totalmente transformados por los acontecimientos y, ya no son capaces de volver atrás y pretender que todavía están “en el país de no me acuerdo”, como cantaba Gaby. Ni Alicia ni Roberto ni la familia de éste ni la posible abuela biológica pueden proteger a Gaby del futuro divorcio de sus padres ni pudieron prevenir el robo de

su identidad. Roberto siempre supo la verdad y ha sido cómplice de este delito, pero, por otro lado, ha criado a Gaby como si fuera su hija y ha demostrado quererla como tal. Alicia adora a Gaby y no quiere perderla, pero está dispuesta a sacrificarse y poner en peligro su matrimonio y su familia con el fin de descubrir lo que tanto sospecha; ella cree verdaderamente que Gaby merece saber la verdad por más dura que sea. Es difícil saber si es mejor para Gaby saber la verdad o seguir pensando que los padres amorosos que la cuidaron y criaron no han cometido ningún delito. Visconti (2014: 4) señala las críticas que se dieron al film por considerar que, por influencia de distintos factores: necesidad, desesperación, culpa, marketing, etc. no logró explicar correctamente que fue la dictadura. La historia oficial fue criticada por dar una visión simplista del pasado al mostrar situaciones y personajes con roles unidimensionales. La utilización de técnicas convencionales y recursos emotivos dificultaba una conversación auténtica sobre los acontecimientos recientes. Otra crítica analiza el estilo visual de la película y lo califica de demasiado publicitario, pulcro y perfecto, que dan a la película una estética publicitaria que no corresponden con la trama (Visconti, 2014: 10). Por otro lado, Blommers (2002) señala que en el film ningún personaje logra escapar, desarrollarse o avanzar desde dónde comenzaron. Según él, todos los personajes vuelven a sus orígenes, Alicia, quien ya no está en el país de no me acuerdo, clara referencia a Alicia en el país de las Maravillas, vuelve a ser la niña huérfana que espera a sus padres en la mecedora de la abuela, Gaby vuelve a ser la niña abandonada que perdió a su madre de muy pequeña y Roberto vuelve a sus orígenes humildes sumergiéndose en la violencia y la adicción al alcohol, propios de su clase social. Blommers también critica ferozmente la presencia en el machismo, que, según él, no sólo se manifiesta en la relación entre Alicia y Roberto, pero también en el salón de clases de Alicia, su relación con Benítez y en cómo sus alumnos abusan de un estudiante probablemente homosexual. Pienso que el film muestra lo contrario; es una película que describe de forma desgarradora la transformación espiritual y moral de sus personajes de forma

negativa o positiva dependiendo de la situación. Roberto y Alicia se desplazan por caminos separados y, en el clímax de la película, destruyen irremediablemente su matrimonio. Alicia se siente liberada al descubrir la verdad y su propio crecimiento le impide tolerar a Roberto, quien ha sufrido un proceso opuesto y se ha adaptado demasiado bien a la dictadura y a la corrupción que la rodean y ya no sabe cómo continuar su vida sin ella. La niña narradora y su primo Teo: la imaginación para entender Mariana Rondón, la directora de la película, tuvo una motivación personal muy importante al hacer la película. Su abuelo fue uno de los fundadores del Partido Comunista Venezolano en 1931. Sus padres fueron guerrillero de las FALN (Fuerzas Armadas de Liberación Nacional), que fue una organización derivada del Partido Comunista de Venezuela (Rosas, 2008). Rondón afirma que rodó la película: “porque no [tuvo] ni fotos ni imágenes de la juventud de [sus] padres” (Bracci, 2007). La niña narradora, quien es también llamada “el paquete” o la bebé de Maicao, y su primo Teo utilizan la imaginación y combinan realidad con ficción para darle sentido a los acontecimientos que les ha tocado vivir. Por ejemplo, Teo no ha visto a su madre por varios años, ya no se acuerda cómo se ve pero recibe las postales que ella misteriosamente envía desde Leningrado. Al transcurrir el film, vemos que el padre de Teo desaparece y luego su cadáver es reconocido por su madre, quien lo llega a identificar 66 veces. Poco a poco, Teo y su prima se dan cuenta que los que se van a Leningrado, ya no vuelven jamás. La niña narradora nos cuenta la historia de sus padres, su tío, su primo y sus abuelos desde su punto de vista y con las explicaciones que muestran cómo ella entiende las cosas. Muchos personajes de la cultura pop, como el Hombre invisible, la Mujer Maravilla y el Hombre Rana ayudan a la niña a explicar el comportamiento y las motivaciones de sus padres y su entorno, por ejemplo, el plan para robar el centro comercial, el plan de su padre para escaparse de la cárcel y el manicomio, el motivo por el que su mamá tuvo que ir a la cárcel, entre otros. La niña vive primero con su madre hasta que su padre se ocupa de ella unos años más tarde.

Los niños tienen un ambiente cálido y un grupo de familiares que se ocupan de ellos cerca de casa. Sin embargo, a ambos les afecta mucho la falta de sus padres y la incertidumbre de no saber cuándo los van a volver a ver. Los padres de la niña “toman turnos” para cuidarla, mientras que Teo es cuidado por la abuela y el abuelo que hacen su mayor esfuerzo. La abuela de Teo tiene problemas psiquiátricos, que pueden o no ser producto de la participación de sus dos hijos en la guerrilla. Los niños parecen estar seguros en medio de las mentiras y el miedo. Sin embargo, es obvio que ellos también sienten miedo y que a través de su lógica infantil, tienen una idea aproximada de lo que puede pasar si una de las identidades falsas es descubierta y si el disfraz deja de funcionar. Postales es una película muy innovadora en animación, sonido y música. Estos recursos no constituyen el eje principal de la película pero son un recurso que la directora utiliza para contar la historia y resaltar el punto de vista de la niña narradora. Las animaciones en el film son abundantes, 47 de los 93 minutos de duración y requirieron un proceso de digitalización del film y dos cambios de formato. La escena del asalto al Sears es una de las más atractivas y sorpresivas del film debido a los avanzados recursos gráficos que utiliza que la muestra como viñetas de cómics. (Bracci, 2007) A pesar del toque documental del film, éste se puede interpretar como una apología o una lección didáctica de historia combinada con recursos de humor y parodia burlesca. La animación y el sesgo documental relaciona a Postales con Persépolis de Marjane Satrapi y El Laberinto del Fauno de Guillermo del Toro. Es un film refrescante e innovador en medio de películas melodramáticas con características convencionales. Juan, Pancho y Rosita: la niñez robada A diferencia de los otros filmes, en Paloma de papel, el enemigo no es el ejército solamente sino también el movimiento guerrillero “Sendero Luminoso”. Los guerrilleros de este grupo frecuentan un pueblo de la sierra a escondidas, haciendo pintas con lemas marxistas y ejecutando a las autoridades locales. El

padrastro de Juan, Fermín, conoce a los líderes guerrilleros y, por algún motivo no explicado, realiza encargos para ellos. La madre de Juan, Domitila, está sometida a la voluntad de Fermín y no se atreve a enfrentarse a él incluso en los momentos en que éste castiga físicamente a su hijo. La película muestra la vida diaria en el pueblo, el trabajo de campo, los trabajos comunales y el modo de vida de la comunidad mayoritariamente indígena. Los niños juegan, cuidan al ganado, trabajan y se divierten juntos disfrutando de la belleza del paisaje. Sin embargo, ellos conviven con la presencia de los soldados quienes se llevan a algunos pobladores debido a denuncias o sospechas con o sin fundamento y que representan una amenaza para ellos. Por otro lado, la presencia de los guerrilleros es más sutil y oculta pero sus consecuencias son igual de visibles: cadáveres aparecen en la madrugada con cárteles que dicen “así mueren los enemigos del pueblo”. Un día, Juan encuentra panfletos marxistas en el cuarto de Fermín cuando estaba jugando con sus amigos. Fermín descubre que los niños han encontrado sus panfletos e informa a los líderes guerrilleros, quienes deciden reclutar a Juan para que no comente la participación de Fermín. Juan es llevado al campamento senderista, en lo alto de la puna, recibe entrenamiento con armas y confección de granadas caseras. Al inicio, Juan intenta escaparse constantemente pero al ser amenazado con asesinar a su mamá, decide quedarse e intenta adaptarse a la vida guerrillera. Posteriormente, cuando en uno de sus recorridos, el comando guerrillero descubre un nuevo puesto militar en una de las zonas controladas por ellos, los líderes deciden atacar el puesto militar y se hacen pasar por campesinos lugareños para colocar una bomba. Cuando este explota, los guerrilleros reducen rápidamente a los soldados sobrevivientes y obligan a Juan a asesinar a uno de ellos. Los guerrilleros huyen cuando llegan los refuerzo militares pero Juan aprovecha la oportunidad para escapar. Los guerrilleros se dirigen al pueblo a vengarse por la muerte de uno de ellos, a mano de ronderos, campesinos organizados militarmente. Juan logra llegar antes

e intenta advertir a los pobladores pero ellos no le escuchan porque ya saben que Juan estuvo en el campamento senderista y lo consideran como tal. Después de la batalla entre guerrilleros y ronderos, Juan es separado brutalmente de sus padres, de sus amigos y de su pueblo y es llevado a un orfanato y posteriormente a una cárcel acusado de terrorismo. Juan pierde todo en el transcurso del film, su padre, su madre, sus amigos, su pueblo y termina solo en una ciudad extraña creciendo en un ambiente frío e impersonal. Su único enlace con su pasado son las palomitas de papel, hechas con la técnica de origami, que el herrero del pueblo, quien representa la figura paterna, le enseñó a hacer. El reencuentro de Juan con sus amigos ya de adultos representa una nueva esperanza para una generación que recién empieza a recuperarse de las huellas de la violencia y para una población que todavía sigue llorando y buscando a sus muertos. Chava y sus amigos: la inocencia perdida Voces inocentes (2004) es una película mexicana que narra la historia de un niño de 11 años, que se ve atrapado junto a su familia en la guerra civil de El Salvador, que duró 12 años. La guerra es vista y narrada desde los ojos de un niño, llamado Salvador aunque todos le llaman Chava, que trata de escapar de ella. Al inicio de la película, los niños, ya se están acercando a la adolescencia, todavía conservan la inocencia y la alegría propias de la infancia. Durante la guerra civil, era habitual que los militares reclutaran forzosamente a niños a partir de los 12 años, aunque Esta película está basada en hechos reales ocurridos al guionista Oscar Torres. (Márquez, 2005) El mexicano Carlos Padilla interpreta a Chava, un niño de 11 años que vive con su madre, su hermana y su pequeño hermano en Cuscatancingo, en San Salvador. Posteriormente, vemos a su abuela, quien vive en un vecindario cercano, ayudar a la familia a superar la partida del padre y a mantenerse seguros de la guerra. La figura de la madre y la abuela son personajes importantes para el desarrollo de la trama. Ellas ofrecen protección a los niños en medio de la guerra, las explosiones y los balazos perdidos mientras que el padre,

figura ausente, parte a los Estados Unidos a buscar una nueva vida sin importarle su familia. Al salir del colegio, Chava juega, inventa historias, se enamora y vive feliz en un ambiente lleno de privaciones. Chava ha tomado el rol del “hombre de la casa” debido a la ausencia de su padre. Entonces decidí salir a trabajar y sueña con cuidar y mantener a su familia. La carga familiar no parece interferir en el desarrollo social y sicológico de Chava, todo lo contrario, su trabajo como cobrador en el bus lo lleva a soltar su imaginación, soñar con una vida de viajes donde puede ser libre y sentirse responsable con su familia. Pareciera que en aquel pueblo y al tratarse de un sector económico pobre, es común que los niños trabajen además de estudiar. Los niños están atrapados, no tienen dinero ni medios para escapar y pareciera que su única alternativa es elegir un bando: o unirse a la guerrilla o el reclutamiento forzoso de los militares. En la película los militares son mostrados como seres sin escrúpulos ni moral, que no respetan a ninguna autoridad y gobiernan el pueblo de acuerdo a sus caprichos. Nadie puede oponerse a sus caprichos y órdenes, incluso ciertas estaciones de radio y canciones están prohibidas. Los militares tienen autoridad sobre toda la población y tienen derecho a ejecutar a cualquiera que sea o parezca guerrillero, subversivo o rebelde, así se trate de niños. Los guerrilleros, por otro lado, son retratados con mayor simpatía y sus motivaciones parecen adquirir sentido a los ojos de Chava. Especialmente después que la amiga de su hermana, Angelita, muere por culpa de una bala perdida. Chava se reafirma más en su simpatía hacia los guerrilleros, cuando empieza a utilizar diariamente la radio portátil que le regaló su tío Beto y de donde puede escuchar y, al final, optará por buscar e integrarse a la guerrilla luego que descubre la casa de su novia incendiada y comprobar que ella y su madre están desaparecidas. A pesar de la guerra y la pobreza que envuelven la vida de Chava, pareciera que él aún logra mantener la ingenuidad y pureza característicos de la infancia. Por

ejemplo, mientras está escondido junto con cientos de niños en los techos de calamina de las casas del pueblo, él y sus amigos comienzan a jugar a atrapar las estrellas, contarlas y comérselas para pasar el tiempo y aliviar la angustia y el miedo que deben estar sintiendo. Hacia el final de la película, luego de la desaparición de su novia y de la destrucción del campamento guerrillero, donde Chava y sus amigos habían tomado refugio, Chava parece convertirse adulto de golpe, está a punto de ser ejecutado y teme por su vida. Él y sus amigos se dan cuenta que lo que parecía ser un juego de escondidas con los militares y los guerrilleros, es en realidad una guerra despiadada donde no se toman prisioneros y donde no se perdona la vida de nadie. Chava logra sobrevivir pero ha despertado a la realidad de la vida y sabe que no es invulnerable. Él ya tiene 12 años y se ha salvado milagrosamente de ser ejecutado. Su madre y abuela deciden enviarlo a Estados Unidos para salvarlo de la violencia de la que ya no es posible escapar. Como espectador, uno se pregunta qué sucederá con el resto de niños que, a diferencia de Chava, no lograron o lograrán escapar y con la familia de Chava que ha perdido por segunda vez al “jefe de familia”. Voces inocentes logra narrarnos una historia que, a pesar de la oscuridad del contexto histórico en el que se encuentra, nos da un mensaje positivo y un final feliz para el gusto hollywoodense y mexicano. Se puede sentir una cierta influencia del formato y el discurso del género de la telenovela mexicana, por ejemplo la perspectiva melodramática, la historia fantástica de amor entre madre e hijo y entre Chava y su novia María Cristina, la clara división de los buenos y malos y la santificación de la figura de la madre santa y bella a la vez (Rogers y Antola, 1985: 27–28). Tal vez la principal crítica al film es el dialecto que utilizan sus personajes principales, ya que todos emplean la variante mexicana del español e ignoran el voceo propios de El Salvador, el cambio de f por h o j, la aspiración de la s entre vocales, entre otros (Lipski, 2000). Este descuido puede ser intencional; con el fin de hacer que Voces Inocentes sea un éxito comercial global, los productores y realizadores pueden haber elegido intencionalmente actores mexicanos y basar

el guión en la variante mexicana ya que dicha variante es muy conocida en América Latina, Estados Unidos y España, por la influencia de la industrias televisiva y cinematográfica mexicanas (Roger y Antola, 1985: 29, 31). Por ejemplo, la actriz Leonor Varela (Kella, mamá de Chava) era una actriz muy internacional en la época del estreno del film, quien había participado en las estadounidenses The Man in the Iron Mask y Blade II. Pablo y sus amigos: el costo del activismo social El secuestro y el asesinato de siete adolescentes miembros de agrupaciones estudiantiles fue un hecho que marcó el inicio de la guerra sucia durante la dictadura militar y el Proceso de Reorganización Nacional (1976–1983). Uno de los principales objetivos de este plan fue eliminar por completo cualquier indicio de insurgencia o de la más mínima disidencia. El secuestro generó polémica en el ámbito nacional e internacional y en base a las historias recogidas se escribieron libros y se filmó la película que vamos a tratar a continuación. (Seoane & Ruiz, 2011: 1–3; Barrio, 2005: 94) La Teoría de los Dos Demonios explica de manera simplista que existieron dos grandes bandos que se enfrentaron entre sí como iguales y afectaron la estabilidad nacional. Por un lado, toda la gama de grupos guerrilleros izquierdistas, socialistas, marxistas y peronistas con Montoneros y ERP (Ejército Revolucionario del Pueblo) a la cabeza. Por otro lado, el total del estado y del ejército que comenzó el trabajo de insurgencia sistematizada en toda Argentina. Absolutamente todos, desde los altos mandos hasta los realizadores directos, llamados también Grupos de Tareas, participaban activamente en este sistema desde el propio Estado. (Barrio, 2005: 91–95) Al inicio de la película, que está basada en los hechos reales ocurridos aquella noche, los jóvenes tienen distintas ideas y esperanzas para mejorar la situación de sus compañeros estudiantes. Todavía no se da el Golpe de Estado y están viviendo los últimos días del régimen de Isabel Perón, luego del fallecimiento de Perón. Las asociaciones estudiantiles deciden en junta exigir la aprobación del boleto estudiantil para aliviar la precaria situación económica de miles de estudiantes durante la crisis económica de la década de los 80.

El activismo político y social eran muy importantes para el grupo de jóvenes, por ejemplo se dedicaban a enseñar a leer a los más niños en las villas miseria. La película logra comunicar con mucho éxito el sentimiento de sorpresa, espanto y frustración, que viven los jóvenes cuando son secuestrados y encarcelados. Ninguno de ellos se esperaba una reacción tan violenta de parte de sus adversarios políticos y tampoco comprendían el porqué de las torturas ni la crueldad del encierro. La película nos muestra abiertamente y sin ningún tipo de filtro un mundo de pesadilla de los desaparecidos, la desesperanza, la tortura y la muerte. Pablo, el personaje principal, es conducido a la sala de torturas y una de las sesiones es mostrado vividamente. La absurdidad e injusticia de la situación saltan a la vista. Pablo es todavía un niño en ciertos aspectos pero aún así le preguntan y piden que delate a sus camaradas y que menciona quien es su líder. Aunque Pablo repite entre sollozos que él no entiende lo que dicen y no sabe sobre que están hablando; los martirios siguen para él en una situación tristemente ridícula. Pablo logra evitar el secuestro por unos días luego que sus compañeros fueron atrapados pero es finalmente atrapado y no logra reencontrarse con ellos hasta que lo trasladan a la detención. Todos pasan momentos horribles en unas celdas pequeñitas, pero también están aliviados de estar juntos y poder consolarse y animarse el uno al otro. Hay dos mujeres embarazadas y guerrillero herido que comparten las celdas con los jóvenes. Claudia, el interés romántico de Pablo, logra ayudar a una de ellos en el proceso de parto en condiciones muy precarias. Al final de la película, Pablo es elegido para ser traslado a una cárcel y luego liberado por lo que se despide afectuosamente de sus amigos y sobre todo de Claudia a quien promete volver a ver. Pablo aún tiene esperanzas de recuperar lo perdido, sus amigos, su vida despreocupada de estudiante, su interés romántico, y regresar a su vida normal antes del secuestro, a pesar de las crudas vivencias que acaba de pasar. Sin embargo, sabemos que esos jóvenes nunca lograron salir con vida de aquel infierno y que Pablo tuvo que vivir con los fantasmas de estos acontecimientos durante toda su vida.

Conclusiones Como hemos visto, la guerra trae distintos problemas y retos, especialmente a las poblaciones vulnerables como son los niños y los jóvenes. Ellos muchas veces están atrapados entre dos bandos intransigentes y, en su imaginación y sus juegos infantiles, buscan evadirse de la realidad que los rodea. No obstante, la realidad siempre los alcanza, los atrapa y los obliga a tomar decisiones que cambiarán sus vidas. Las heridas causadas por la guerra son llevadas de por vida y, si se podría decir, que estas películas son parte del proceso de curación para muchas sociedades y muchos países que han pasado por conflictos civiles y sociales recientemente. Como Oscar Torres resume: “la guerra no acaba cuando acaba la guerra, la guerra la llevamos por el resto de nuestras vidas, eso es inevitable. Ninguno de los que estuvimos en medio de ese conflicto va a liberarse jamás; la diferencia es lo que haces con eso, cómo reaccionas a la vida, independientemente de lo que hayas vivido”. (Sánchez, 2012) Utilizar el punto de vista de los niños, es también un recurso dramático para retratar los acontecimientos históricos de una manera más emotiva y espectacular. El mensaje es más efectivo cuando las víctimas retratadas son los miembros más vulnerables de la sociedad. Es también un intento de entender cómo pasaron las cosas y por qué sucedieron de esa manera. Como Luis Puenzo explica: ”La historia oficial intenta reflejar sobre los desaparecidos y sus hijos pero también lo que nos pasó y lo que dejamos que nos pase en los últimos años”. (Alberto & Díaz López, 2003: 180) Sobre las decisiones y las responsabilidades de los padres en el destino de sus hijos se ve reflejado en los finales de las películas. Desde Alicia de La Historia Oficial quien está dispuesta a poner a su hija en una situación difícil con el fin de saber la verdad; las madres guerrilleras de Postales de Leningrado, una que abandona a su hijo para ir al monte, Marcela que mantiene a su hija a su lado pero la utiliza para cumplir misiones peligrosas; Domitila de Paloma de papel, por su parte antepone las necesidades de su esposo, decide quedarse y esperarlo a

él en lugar de huir con su hijo, quien se encuentra en extremo peligro; Killa de Voces Inocentes, es una madre muy sacrificada que intenta darle lo mejor a sus hijos y protegerlos de la violencia y, por último, la Sra. Falcone, mamá de Claudia y la Sra. Ungaro, mamá de Horacio, quienes tienen que soportar todo tipo de desprecios, malos tratos y mentiras durante la búsqueda incansable de sus hijos. Como podemos ver, los padres tienen un rol muy importante en el desarrollo de los acontecimientos y el futuro de los niños. Rondón (Rosas, 2008), explica, al hablar de su película: “Es la biografía de una generación, de un grupo humano. Y uno puede preguntarse: ¿valía la pena el sufrimiento de los seres queridos por una utopía?”. Creo que la pregunta de Rondón es el tema principal que todas las películas analizadas anteriormente intentan responder. La generación revolucionaria y la respuesta militar contrarrevolucionaria dejaron tras sí sueños rotos, niños huérfanos, utopías destruidas, desencuentros culturales, vidas destrozadas y traumas de por vida. Es una pregunta que este ensayo tampoco ha podido responder y que ha sido tema de numerosas investigaciones y distintos debates: ¿valió la pena sacrificar todo por una utopía? Referencias: Alberto, Elena & Díaz López, Mariana (2003). “La Historia Oficial”. The Cinema of Latin America p. 177–183. London: Wallflower Press. Barrio Terol, José Manuel (2005). “Insurgencia y Represión: Acerca de la teoría de los dos demonios” Historia Actual On Line. 8: 91–104. Blommers, Thomas (2002). “Social and Cultural circularity in La Historia Oficial”. Ciberletras 6. Disponible en http://www.lehman.cuny.edu/ciberletras/v06/blommers.html [Consultado 4.12.2014] Bracci Roa, Luigino (2007). “Postales de Leningrado... ¡las guerrillas venezolanas, a debate público!”. El espacio de Lubrio. Disponible en http://lubrio.blogspot.fi/2007/09/postales-de-leningrado-viva-venezuela.html [Consultado 4.12.2014] King, John (1994). El Carrete Mágico. Una historia del Cine Latinoamericano. Bogotá: Tercer Mundo. Lipski, Jonh (2000). ”El español que se habla en El Salvador y su importancia para la dialectología hispanoamericana”. Científica 1 (2): 65 – 88. Disponible en http://www.personal.psu.edu/jml34/salvador.pdf [Consultado 3.12.2014]

Márquez, Sandra (2005). “Innocent Voices. War through the eyes of a child”. Hispanic 18 (9): 72. Pick, Zuzana (1996). The New Latin American Cinema. A Continental Project. Austin: University of Texas Press. Rogers, Everett y Antola, Livia (1985) “Telenovelas: A Latin American success story”, Journal of Communication, 35 (4): 24–36. Rosas, José (2008). “Mariana Rondón: un imaginario polifacético”. Radio Francia Internacional Español. Disponible en http://www1.rfi.fr/actues/articles/102/article_8249.asp [Consultado 3.12.2014] Sánchez, Hugo (2012). “Oscar Torres: la herida no va a sanar a menos que esté expuesta”. Revista Digital Contra Cultura. Disponible en http://www.contracultura.com.sv/oscar-torres-la-herida-no-va-a-sanar-amenos-que-este-expuesta [Consultado 3.12.2014] Seoane, María & Ruiz Núñez, Héctor (2011). La Noche de los Lápices. Buenos Aires: Editorial Sudamericana. Visconti, Marcela (2014). “Lo pensable de una época. Sobre La historia oficial de Luis Puenzo”. Revista Aletheia 4 (8): 1–13. Disponible en: http://www.aletheia.fahce.unlp.edu.ar/numeros/numero-8/articulos/lopensable-de-una-epoca.-sobre-la-historia-oficial-de-luis-puenzo [Consultado 3.12.2014]

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.