Narcoliteratura: entre el testimonio, el reportaje y la crónica

Entre el testimonio, le reportaje y la crónica: "Carta dese La Laguna" y "Mi vida con el narco"
Betsy Fabiola Castillo Ríos
El periodismo y sus productos han sufrido cambios a partir del paso al llamado ciberperidismo, destacando principalmente:
La hipertextualidad, es decir, que trabaja con softwares que permiten crear, agregar, enlazar y compartir información de diversas fuentes por medio de enlaces asociativos.
La multimedialidad, es decir, que trabaja con diferentes recursos como los visuales, textuales y auditivos.
La interactividad, es decir, que posibilita la comunicación instantánea ya no con la figura de lector sino con el actual usuario. (Cfr. Edo, 2009)
Estas características han permitido a los géneros periodísticos abrir sus horizontes en cuanto a los tipos de discurso que se pueden utilizar dentro de un mismo género. Si bien José Joaquín Fernández de Lizardi ya nos hacía ver que para denunciar y hacer pensar tendría que ocuparse más de una forma de discurso, es esta época la que está marcando una etapa de eclecticismo en la que, como ya se puede observar, no sólo los géneros viven modificaciones: la misma idea de periodismo está cambiando, quién lo hace, desde qué visión, bajo qué escuela y en qué medio, son preguntas que ponen en jaque a los teóricos del siglo XXI.
A su vez, uno de los temas que ha propiciado un subgénero en la literatura mexicana es el narcotráfico; fenómeno extendido en todo el país, ha provocado el nacimiento de la llamada "narcoliteratura"; sin embargo, los debates en torno a ella no ceden: la realidad y la ficción —problema que la enmarca como hermano de la literatura histórica— vacilan entre el testimonio, la crónica, el cuento, y más, según la extensión, profundidad y tono con los que el autor desee presentar su obra, por lo que los límites entre uno y otro género provocan cada vez más interés en los críticos.
De esta manera, resulta necesario emprender comparaciones que permitan vislumbrar el camino hacia la definición, tratamiento y conocimiento de estos géneros. Es motivo de este trabajo la reflexión del tema genológico a partir de dos documentos extraídos de internet: "Mi vida con el narco" de David Piñón Balderrama y "Carta desde La Laguna" de Alejandro Almazán.
Ambos textos presentan diferentes formas de discurso para hablar de su experiencia con el narcotráfico. La realidad y la ficción se entrecruzan para dar paso a un relato verosímil capaz de enchinar la piel de los espectadores. ¿Cuál es el efecto que cada uno quiere provocar en el lector? ¿Miedo?, ¿precaución?, ¿atención? Esto no se puede resolver sino a partir de la confrontación de los textos y de la reflexión sobre su construcción.
Discurso
Ambos textos presentan discurso indirecto como base, sin embargo, el discurso directo se presenta:

—Las cosas se están poniendo calientes. Nos están diciendo que le bajemos de huevos.
—Está bien, chaparrito —respondí—. Pues entendimos el mensaje y ya ("Mi vida con el narco").

—Tienen cámaras de vigilancia, ¿no? —le dije.
—Pero no sirven de mucho —contestó alzando los hombros—. Fíjate: la semana pasada vinieron dos sicarios por uno de sus compañeros que estaba herido. Traían unos riflones. ¿Tú crees que les iba yo a cobrar? ("Carta desde La Laguna")

Estilo
Esta utilización de discurso directo propicia a su vez la estilización de los involucrados, es decir, al desarrollarse el tema en lugares del norte como Coahuila, Monterrey y Chihuahua la estilización de las voces es dada a partir de: su posición social, su ubicación pero sobre todo por su profesión: narcotraficantes y periodistas involucrándose con estos.
A lo largo de los textos se usan además regionalismos que aportan a la verosimilitud y a la violencia que el ambiente quiere enmarcar:
—Es que ando medio enfermo, pero mañana vemos ese pedo, a ver dónde nos vemos. Puta madre, pensé. No me voy a andar drogando y menos con unos narcos. Comenzaba a pensar, por cierto, cómo tenía que hablar con ellos. Por alguna razón, si ellos comenzaban a utilizar malas palabras yo les respondía de la misma forma. Nunca he sido mal hablado. Pero algo me hacía ponerme al mismo nivel. De cualquier forma, insistí, pura madre que voy a verlos, mejor que todo sea por teléfono ("Mi vida con el narco").
Y en "Carta desde La Laguna" :
Los chapos no quieren a los municipales. El pedo ahora es que los municipales de torreón trabajan para los chapos y los de la letra andan matando polis. A uno lo rafaguearon afuera de su casa, cuando estaba lavando su carro. Eso fue hace como una semana, allá en Matamoros.
Datos duros
Esto a su vez no es lo único que forma la veridicción en estos textos, también, se presentan datos duros que permiten al lector establecer no sólo el texto como creíble, sino también empezar a reflexionar sobre el tema:
Su muerte se perdió entre las 100 ejecuciones que se habían registrado en la ciudad a lo largo de 2007 y que duplicaban las ocurridas el año anterior. Al comenzar 2008 se había alcanzado esa misma cifra en sólo dos meses. A fines de marzo habíamos contabilizado 214 víctimas y yo había descubierto que mi nuevo empleo poseía grandes desventajas: el teléfono sonaba a cualquier hora de la madrugada, ganaba sólo un poco más de sueldo y tenía, en cambio, el triple de trabajo. Me pasaba el día encerrado en la oficina, extrañando las calles y la urgencia de la nota diaria, obligado a atender trámites burocráticos de la Gerencia, Recursos Humanos y Publicidad. ("Mi vida con el narco").
Y en el caso de "Carta desde La Laguna se lee:
Los Zetas se adueñaron de casi toda la municipalidad en 2007, pero el 11 de enero pasado se les acabó el corrido: 159 municipales fueron detenidos por el Ejército. Los Zetas no fueron los únicos que abrieron la cartera. El cártel de Sinaloa compró el Cereso.
Asociaciones metafóricas
Sin embargo, el carácter asociativo del periodista no se deja esperar, las metáforas se hacen presentes y ponen en duda la objetividad de autor:
Y pronto, también, caminarás por callejuelas empinadas, gatearás escalinatas hechas sin ninguna planeación, no sabrás si hay más basureros que callejones sin salida, te toparás con teléfonos públicos destrozados, con perros vagabundos y observarás paredes pintarrajeadas y agujereadas que te harán entender que, por estos rumbos, la única que tiene paso libre es la muerte. ("Carta desde La Laguna")
Y en "Mi vida con el narco":
Hoy asocio aquella llamada con un poema de Ungaretti:
Lejos, lejos
Como a un ciego
Me han llevado de la mano
Las metáforas y asociaciones que realizan los autores sirven para propiciar sensibilidad en sus lectores así como para dar mayor expresividad a las emociones que desean exaltar, la relevancia está puesta en los efectos de estas asociaciones.
Tono
En general el tono de ambos textos es lo que nos permite establecer esta comparación: ambos presentan tono e interés de denuncia que parte desde el o los testimonios contenidos; encontramos desde la denuncia implícita hasta la explícita. El final de ambos textos es fundamental para entender el fin de estos. Por su parte, Carta desde La Laguna presenta una antología de testimonios y a partir de uno de ellos, señala con un conjunto de oraciones yuxtapuestas en presente histórico, el conjunto de acciones y pensamientos que envuelven a un periodista mexicano en época de narcotráfico:
Para ese entonces, verás que en Twitter circula la información sobre el asesinato de cuatro jóvenes a unas cuantas cuadras de ahí y tu recordarás otra frase que le leíste a Vallejo: "La muerte viaja siempre más rápido que la información". En algún momento subirán a la azotea del edificio donde vive Carlos y, desde ahí, contemplarás casi todo Torreón. Entonces caerá la noche y todo se verá como un inmenso charco de sangre seca ("Carta desde La Laguna).
Cabe destacar que en este texto, es fundamental, para fortalecer la viridicción y la denuncia, exponer otros testimonios, por lo que en él se encuentran voces que hablan de su propia experiencia en la pérdida de algún familiar copatado para fines lucrativos.
Y en "Mi vida con el narco, se reflexiona explícitamente sobre lo que es ser periodista en esta época y bajo el yugo del narco:
Ser periodista en los peores días de la guerra contra el crimen organizado puede volverse asfixiante. La incertidumbre te mata. No es una lucha cuerpo a cuerpo, no es una batalla que uno pueda enfrentar. Es hallarse a merced de desconocidos que saben de uno mismo detalles sorprendentes. Es pelear contra nada, y luego detenerte a escuchar la voz de tu conciencia. Es temblar cuando suena el teléfono, y despertar por la noche con la frente llena de sudor. Es vivir espantado hasta de tu propia sombra. Por eso escribo este informe. Porque, pase lo que pase, quiero que mis familiares sepan que no, que yo no estuve metido en nada. ("Mi vida con el narco).
Estos textos vacilan entre ser testimonios, reportajes, crónicas e informes. Su relación cronológica señala una relación importante con la crónica y el testimonio, y la utilización de diversos géneros periodísticos los llevan hacia el reportaje. Sin embargo, el tono y la firme intención de denunciar cuál es la situación actual por la que están pasando los periodistas, nos llevan a pensar que estamos frente a un testimonio que se vale de todos los elementos que tiene a la mano para inyectar credibilidad y expresividad a su texto.
De esta manera, el testimonio, puede basarse en datos duros, asociaciones metafóricas, discursos directos e indirectos y testimonios de otras personas para enmarcar las nuevas necesidades de un género que con el narcotráfico se siembra al por mayor.




BIBLIOGRAFÍA
Almazán, Alejandro. "Carta desde La Laguna" en Gato pardo. Marzo 2013. Disponible en: http://www.gatopardo.com/ReportajesGP.php?R=185&pagina=3. [Consultado mayo 17 de 2015].
Piñón, David. "Mi vida con el narco" en Nexos. Diciembre de 2009. Disponible en: http://www.nexos.com.mx/?p=13407, [Consultado mayo 17 de 2015].
Real Academia Española. (2015). Diccionario de la lengua española. En línea, disponible en: www.rae.es



Al ser los únicos textos trabajados, ambos se citan en este documento sólo con el nombre de uno u otro texto.
Recordemos que la esencia de la crónica es que en ésta "se observa el orden de los tiempos". (rae.es)
Género periodístico de diversidad discursiva, referencial y genérica por excelencia.
Cuya finalidad es "Atestar o aseverar algo" (rae.es)