Modelamiento de Factores Determinantes de la Estacionalidad en Destinos Turisticos

June 24, 2017 | Autor: Felipe Arancibia | Categoría: Turismo, Estacionalidad
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Descripción

DETERMINANTES DE ESTACIONALIDAD 8
DETERMINANTES DE ESTACIONALIDAD 1





Modelamiento de Factores Determinantes de la Estacionalidad en Destinos Turísticos
Felipe Tomás Arancibia Torres
Universidad Austral de Chile









Introducción
La estacionalidad en la demanda turística parece estar presente en la mayor parte de los destinos turísticos (BarOn, 1973; Yacoumis, 1980; Higham & Hinch, 2002; Jang, 2004), y al mismo tiempo, podría considerarse como uno de los atributos más representativos dentro de la actividad turística, según menciona Fernández-Morales (2003), quien también la identifica como uno de los problemas más importantes al que la industria se enfrenta. Sin embargo, es interesante que sea uno de los menos examinados (Allcock, 1989), o al menos, sigue siendo poco entendido (Butler R. W., 2001) .
Es por esto, que se hace necesario modelar las causas de este ciclo, haciendo primero una recopilación del conocimiento actual en la literatura, y posteriormente, determinar qué áreas de este proceso aún no han sido investigadas para determinar un modelo completo que explique los orígenes de este ciclo y los factores que dan el sustento para continuar. Todo esto con el objetivo de guiar a la industria turística a diagnosticar eficientemente la situación predominante que mantiene la estacionalidad de los destinos, aumentando la eficiencia del tratamiento (los que podemos suponer, siempre serán procesos a largo plazo) y en consecuencia, obtener resultados eficaces en un período razonable de tiempo.
Para el propósito de esta investigación, nos restringiremos al proceso de realizar la investigación de la literatura ya existente y modelarlo, por lo que la segunda parte queda para un proceso de investigación futuro que complemente lo aquí expuesto. Así mismo, nos restringiremos a la investigación de textos en español e inglés, simplemente por temas de manejo de idiomas. Igualmente, se priorizan textos posteriores al año 2000, lo que de todas formas no es excluyente debido a que lo más esencial de la literatura al respecto fue escrito previamente (principalmente durante los 80's), considerando, que el tema fue reconocido e investigado recién en 1975 (BarOn, 1975). Como última restricción, el modelo está acotado a los componentes del Sistema Turístico, con el fin de encontrar las soluciones a la problemática dentro de la industria turística, en vista de la gran cantidad de factores ajenos a la industria propiamente tal, que pueden tener incidencia en este fenómeno.
En definitiva, este estudio tiene como objetivo modelar los factores que determinan la existencia de un ciclo de estacionalidad en destinos turísticos.
Estacionalidad en el turismo
La estacionalidad no es un fenómeno exclusivo del turismo, y puede darse tanto en otros sectores económicos, como en otras áreas de investigación (climatología, biología, etc.). Por lo mismo, para el caso del turismo encontramos tres características que la determinan.
Primero, la estacionalidad es esencialmente un fenómeno de desbalance temporal, que en el caso del turismo puede ser expresado en dimensiones tales como número de turistas, gasto de turistas, tráfico en carreteras y otras formas de transporte, empleo y accesos a atractivos (Butler R. W., 1994). En segundo lugar, Allcock's (1989) concluyó que involucra concentraciones de turistas en períodos relativamente cortos de tiempo lo que consideró el aspecto más importante , y en tercer lugar (y dentro de la misma publicación), estableció que era una característica fisiológica del turismo, y por consiguiente, una característica inevitable del sector económico.
Es cierto que en la literatura podemos encontrar algunas variaciones en la definición, pero estas son los 3 componentes más genéricas y relevantes que delimitan el alcance del concepto.



Origen de los factores de estacionalidad
La mayor parte de la literatura especializada hasta comienzos de 1997, estudió las causas de la estacionalidad turística refiriéndose principalmente al componente temporal, indagando sobre la incidencia de los procesos anuales para encontrar las problemáticas. Es entonces que se comienza a mencionar el componente espacial, primero de forma indirecta, a través del estudio en el que se enfatiza que: "Las áreas urbanas tienen una menor fluctuación urbana que las locaciones remotas (rurales)" (Butler R. W., 1994), para luego reconocerla como tal y definiéndolo como la relevancia del lugar de origen del turista versus el lugar a visitar, y la influencia en la estacionalidad de los destinos (Butler & Mao, 1997). En este sentido Lundtorp et al. (1999) Apuntan que igualmente se debe incluir en esta caracterización la incidencia del deseo de viajar en un período determinado versus las posibles restricciones de hacerlo, desición que en parte se relaciona con ambos componentes. Por lo mismo, al relacionar los componentes temporales y espaciales, llegamos a la clasificación de factores "Tira – Empuja", por la traducción del Inglés "Pull–Push" (Butler & Mao, 1997; Lundtorp, Rassing, & Wanhill, 1999; Frechtling, 1996).
Los factores "Empuja" consisten en aquellos que influencian la estacionalidad desde el área de generación de la demanda, tales como las vacaciones estudiantiles, el clima, la presión social, etc. De la misma forma, los factores "Tira" son aquellos que se involucran en el turismo mediante la atracción de turistas, es decir desde el destino turístico en sí. Dentro de estos podemos encontrar nuevamente el clima, pero en el lugar de destino, la accesibilidad, la legislación local, capacidad de carga establecida, etc.


Factores determinantes de la estacionalidad
Para la clasificación de los factores existen variaciones en la cantidad reconocida, pero si hay una tendencia clara, es que los factores principales se basan en 2 categorías: Naturales e Institucionales (BarOn, 1975; Fernández-Morales, 2003; Allcock, 1989; Boffa & Succurro, 2012; Getz & Ake Nilsson, 2004; Capó Parilla, Riera Font, & Rosselló Nadal, 2007; Young Chung, 2005; SooCheong Shawn, 2004; Higham & Hinch, 2002).
Las causas (factores) Naturales son las relacionadas al clima y el ecosistema, incluyendo la vegetación, la luz solar, luz del día, la nieve, estaciones, precipitaciones y temperaturas extremas (BarOn, 1972). Las que afectan debido a las actividades relacionadas, ya que, según palabras de Jin Young Chung:
Por ejemplo, un resort de playa es preferido por un turista que desea disfrutar de la luz del sol y deportes acuáticos, mientras que un resort de ski es favorecido por esquiadores o viajantes que estén ansiosos por ver hermosos escenarios de nieve (pág. 85).
Por otro lado, la estacionalidad Institucional, es el resultado de la religión y factores sociales, culturales y/o étnicos (BarOn, 1972; Butler R. W., 1994; Janiskee, 1996). Del mismo modo, podemos clasificar este grupo en 4 sub-grupo de factores: Culturales (etnia, religión, inercia) (Hartmann, 1986), Calendarización (relacionado a los eventos aceptados socialmente que abren la posibilidad de realizar turismo) (Butler R. W., 1994; Hinch & Jackson, 2000), Legislación e Intereses Etarios (Butler & Mao, 1997; Butler R. W., 1994).
Los factores culturales hacen referencia a eventos tales como el caso de las peregrinaciones del Islam, el Judaismo y el Cristianismo, quienes deben trasladarse a destinos específicos porque su cultura así lo dice, sin que necesariamente sea en una fecha específica, o las vacaciones de los trabajadores públicos y/o privados, quienes de la misma forma, no tienen una fecha determinada de vacaciones, lo que no resta que deban tomarlas periódicamente. Uno de los factores interesantes a analizar es lo que Butler (1994) denomina como Inercia, lo que varios autores han reafirmado, refiriéndose a "… uno de los factores de la estacionalidad, el cual implica que algunos turistas tienden a viajar en momentos específicos del año a pesar de no tener que hacerlo" (Higham & Hinch, 2002, pág. 179). Cabe señalar, que dentro de esta categoría podemos considerar efectos menos evidentes, como el efecto de las segundas residencias y propiedades compartidas, que como mencionan Brida & Boffa (2010) "La litertura admitida destaca la substancial responsabilidad de las segundas residencias y propiedades compartidas en el aumento de la estacionalidad" (pág. 352), lo que complementan Pijanowski & Shellito (2003), argumentando que estas reducen la demanda por los negocios locales, y generan un excedente negativo en la comunidad completa, lo que finalmente reduce el bienestar general.
En el caso de los factores de calendarización, nos referimos a todos los eventos que tienen una fecha determinada y comúnmente aceptada independientemente de la cultura, como el caso de Año Nuevo y Navidad, que son festividades que se celebran todos los años en una fecha predeterminada, así como las vacaciones escolares o mega eventos (Copa Mundial de Futbol, Super Tazón, Jamboree's, Olimpiadas, etc.).
En tercera instancia tenermos las Políticas Públicas, que determinan una amplia gama de agentes que inciden a la hora de viajar, desde la fijación de impuestos hasta las restricciones para períodos de vacaciones. Muestra de esto es lo que dice Butler (1994) respecto a las vacaciones del sector industrial:
Las vacaciones del sector industrial tienen una fuerte influencia en alcanzar un peak de actividades turísticas, especialmente después de la introducción de las vacaciones pagadas y el cierre de algunos sectores industriales para una semana de vacaciones de verano. (pág. 335)
Por último, está el sub-conjunto de factores relacionados a patrones etarios de decisión, que según lo que argumentan Butler y Mao (1997), "El envejecimiento de la población puede, a largo plazo, cambiar considerablemente los patrones de estacionalidad, desde que la población anciana está menos constreñida en los tiempos de sus vacaciones".
Impactos de la estacionalidad
Los impactos de la estacionalidad han incrementado su relevancia gracias al crecimiento del turismo de masas (Wall & Yan, 2003), así como el número de empresas dependientes del turismo ha aumentado en tamaño y cantidad, mientras que la capacidad de adaptarse al cambio se ha visto reducida (Cannas, 2012). Por otra parte, Baum & Hagen (1999) argumentan que los impactos de la estacionalidad dependen de la locación del destino y de las empresas turísticas (sin considerar el destino). Ya que usualmente los destinos más especializados son los que sufren una estacionalidad más marcada en comparación a los destinos cercanos o dentro de centros urbanos, debido a que presentan una demanda más diversificada, lo que reduce directamente la estacionalidad.
En vista de lo anterior y de la gran cantidad de impactos que podemos llegar a considerar, podemos catalogarlos en bajo dos clasificaciones simultáneas: Positivos y Negativos; y en los siguientes tres grandes grupos: Impactos económicos, Socio-culturales y Ecológicos.
La primera clasificación nace de la observación de Butler (1994) y Murphy (1985) respecto a que la estacionalidad no tiene efectos necesariamente negativos, sobre todo en el punto de vista de la sociología y la ecología.
Por ejemplo, luego de un uso excesivo de un recurso turístico durante una temporada alta, un período de reposo largo puede ser mejor que un uso continuo sin tiempo de refresco (Butler R. W., 1994). De la misma forma, Sinclair & Stabler (1997) dijeron que "El uso continuo de los recursos naturales sin detención puede ser dañino. Por ejemplo, mientras el senderismo es apropiado en una temporada seca, puede erosionar un camino severamente durante una época de lluvias" (pág. 147).
Una temporada baja también permite a los residentes tener una vida "normal" y disminuir la pérdida de los hábitos que componen la cultura local producto de la llegada en masas de turistas, y les provee de tiempo para preparar la próxima temporada alta. Complementariamente, cada vez es más la gente que disfruta de viajar evitando las masas de las temporadas altas (BarOn, 1973).
En el otro sentido, la mayor parte de los investigadores han apuntado que los patrones de la estacionalidad causan un gran número de efectos negativos (Cannas, 2012).
En el aspecto medioambiental, es conocimiento de alto alcance que "El uso intensivo de al medioambiente durante las temporadas de alta demanda impacta en la capacidad de carga de los ecosistemas (Maning & Powers, 1984), lo que complementa al ejemplo del párrafo anterior sobre la erosión de los senderos.
En la economía está el impacto que más suele preocupar a los empresarios del turismo, y se focaliza en la ineficiencia de la utilización de los recursos, como lo mencionan Connell, Page & Meyer (2014), lo que lleva directamente a una reducción de la rentabilidad, disminución de los puestos de empleo y/o empleos estacionales, lo que al largo plazo dificulta el reclutamiento y la retención de personal (Fernández-Morales, 2003), entre una amplia lista de problemáticas.
Socioculturalmente, el impacto se deriva principalmente de los problemas de contratación del personal, y por consiguiente, la población flotante y los costos de capacitación, así como la pérdida de la identidad local en los servicios por la reducción de personal del destino propiamente tal (Lee, Bergin-Seers, Galloway, O'mahony, & McMurray, 2008).

Modelo de relación de factores de la estacionalidad
En relación al modelo de la estacionalidad, pudimos detectar un modelo planteado anteriormente por Butler & Mao en 1997, el cuál fue modificado por Christine Lee, et. al (2008, pág. 3) como se muestra a continuación:
Ilustración 1. Modelo de estacionalidad modificado en base al modelo de Butler & Mao

Fuente: (Lee, Bergin-Seers, Galloway, O'mahony, & McMurray, 2008)
Este modelo hace énfasis en las acciones que modifican los factores y en su origen, pero no ayuda a identificar cuál es el problema específico, que debiese ser solucionado para reducir la estacionalidad, ya que las acciones modificadoras son propuestas de vías de solución directamente.
Por lo mismo, y en vista de que nuestro objetivo no coincide con el de este modelo, se presenta el siguiente borrador para un posible modelamiento de la estacionalidad y sus factores, en el que aún no se han logrado incorporar algunos componentes:

En este modelo se ve cuál es la clasificación de los factores, que se dividen en las 2 clasificaciones: Por características generales, tenemos los factores Naturales e Institucionales; los que se pueden sub-clasificar en Factores Económicos (billetes), Socioculturales (personas en blanco y negro) y Medioambientales (hoja). Los que a su vez implican impactos positivos y negativos, dónde el resultado es que entre mayor sea la presencia de estos factores más marcada será el efecto estacionario.



Conclusiones
La estacionalidad es una característica irrefutable de la actividad turística, la que difícilmente puede ser resuelta, lo que no quita que puede verse desde diferentes perspectivas para favorecer a la industria de los impactos positivos. De todas formas, no se debe olvidar que tiene diferentes áreas de impacto, y que obtener la rentabilidad esperada de los negocios turísticos no implica que se ha sorteado las dificultades de la estacionalidad, ya que el recurso turístico ambiental y/o sociocultural son componentes inevitables de los productos turísticos, y por consiguiente, el producto no será sostenible en el tiempo si estos factores se ven comprometidos.
Respecto al modelo, faltó relacionar el origen físico de los factores y definir en detalle los factores, delimitando a los estrictamente necesarios, por lo que queda abierta la posibilidad para realizar estudios futuros que puedan dar un cierre definitivo al modelo y poder dar un enfoque hacia la búsqueda de soluciones para la problemática.











Referencias
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