Mirada de mujer. Annemarie Heinrich y el oficio del siglo XX

IVIIRADA DE VIUJER Annemarie Heinrich y el oficio del siglo XX P,AOtA CORTES.ROCCA

con ilnica d.esgracia es haber nacido mirq'ndo' "d.efecto": *i,orv mirar, mirqrse

este

La,

-

Aleiandra Pizarnik' Dianos

forma de imagen' los anheios del siglo XX tienen Los sueflos, las f-antasias' forma de fotografias' Apenas en cualquier soporte' Tienen No cuaiquier lmagen' no de Ciencias de Paris' la U"''" f*""taci6n ante la Academia 1o aflos despu6s y diversificaba su uso objeto de lujo para las 6lites fotografia clejaba d"

'"''""

documentalr"tt*ono*rico'seutilizabaerrarchivospoliciales'informesdeguela despu6s de su presentaci6n' Apenas 3o aflos rra y relevamientos territoriales'

imagens".oi...io',.""b".""p"'"r.',setraficabacomopartedelaeducaci6nsen. timental,delainiciaci6nsexual.Elfotoperiodismoyiasrevistasilustradasla La cimara puso el mundo pagi""' para construir la "actuaiidad"' aioiaban consumo' El sigio )C( es ",t "" lo convirtio en un obieto de a

disposici6n a"f

un siglo d"

"'p"Ld"r' to"""'ro de fotografias que proponen

modelos de conductas y formas

PAOIA CORTES-ROCCA

MIRADA DE MU]ER

de vida, maneras de vestir y de alimentarse, estilos e identidades. La radio y el

cine, y el apenas despuntar de la televisi6n, proponen un universo de imAgenes que no deja de multipiicarse bajo la forma de m6s imigenes.

admirados y coleccionados por el priblico. Eran fotografias que tenian un itinerario mriltiple: devenian otra cosa, un dibujo en colores que se deformaba y multi-

ar-rstraliana Melitta Lang y el polaco Sivul Wilenski, Heinrich abre su propio y

plicaba en revistas y carteles, un instrumento de promoci6n que circulaba, con ei se1lo del estudio, en 1as oficinas de productores y agentes, o una pieza coieccionable, en las manos de los admiradores qr-re la recibian autografiada. En ese recorrido, algunas incluso volvian firmadas al estudio, demostrando que 1a reproducibilidad

modesto estudio en rgJo y se propone desarrollar el oficio del siglo: fot6grafa

t6cnica clue vertebra

profesional. Se vuelve, entre otras cosas, retratista del slar systemlocal. De ella son ciertas imigenes embiemdticas: Mirtha Legrand o Libertad Lamarque, la

modos de reponer lo auritico y 1o irni,co de una estampa. Hay una foto de la espectacular Dolores del Rio, e1 pelo recogido, las ceias perfectas, las luces y las sombras subrayando la escultura de sus p6mulos, ei

El mundo dei espectaculo local tendri su fot6grafa en Annemarie Heinrich, una joven nacida en Alemania en r9r2 y criada en la Argentina. Discipula de la

cabeza ladeada con previsible coqueteria, la boca entreabierta, los dientes perfec-

1a

imagen en el siglo XX no es sino un desafio para inventar

tos, la mirada sonriente. Tambi6n la foto de 1a joven Evita Duarte, en traje de bano a iunares, ei cabeiio sueito, ios brazos detris tie la cabeza y ios ojos picaros

misterio de su escote (p. Zz).A1 dorso aparece el seilo del estudio de Heinrich y

mirando hacia arriba,

pl6ndida fot6grafa Annemarie Heinrich" y la firma de la diva. Tomada cuando 1a mexicana estaba en Buenos Aires para filmar Histori a de una mala mujer -una pelicula de r948, dirigida por Luis Saslavsky para Argentina Sono Film-, Ia fbtografia sintetiza 1a complejidad de este tipo de imagen: entre slr ser para la

o 1a de

Tita Merello, asomando

a

la imagen de costado, con

el pelo revuelto y las cejas arqueadas,

e1 gesto de rea. Durante d6cadas, la cimara de Heinrich registr6 los rostros del mundo de1 cine, ei teatro y la danza, tom6 tambi6n retratos de artistas plSsticos, mirsicos y escritores: Zully Moreno, Tilda

Thamar, Antonio Gades, Dolores del Rio, ]orge Luis Borges, Pablo Neruda, BSrbara Mujica, Rafael Alberti, Cecilia Ingenieros, Atahualpa Yupanqui, Mercedes Sosa,

Astor Piazzolla, Pinky, Anibal Troilo, Graciela Borges, Susana Gim6nez. Gestos y poses, formas de poner el cuerpo, objetos que acompaflan al retratado, encuadre e iluminaci6n hablan del profesionaiismo de Heinrich, qlle encuentra un modo rinico de cumplir con ei oficio y, al mismo tiempo, escapar de ia imagen adocenada. El retrato de los hombres y mujeres que pertenecen al ambiente del arte y 1a cultura es central para 1a industria cultural. Son imigenes que inventan 1a figura del autor donde solo habria objetos, novelas, libretos, partituras. La c|mara de Heinrich habla de ese encuentro entre un rostro, una gestualidad y la construcci6n de ese artefacto que es el actor, la escultora o el mfsico. Estas imigenes son piezas de un genero que, inevitablemente, distri buye roles previsibles -1a joven angelical, la estrellita en ascenso, el ga16n, el mrisico temperamental, el escritor asceta- como parte de una trama en 1a que tambi6n se imbrican las novelas, piezas radiales y peliculas. Los retratos tomados por Heinrich aparecian en las.tapas de las revistas de actuaiidad, Antena, Sr.ntonta, Radiolandia, o se integraban al aparato de difusi6n de especticulos teatrales y productos cinematogrifi.cos. Eran rostros para ser multiplicados por la maquinaria de la inclpiente industria cultural, para ser

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