Microexcavación en Lagartero, Chiapas

June 16, 2017 | Autor: Oswaldo Camarillo | Categoría: Archaeology, Arqueología, Metodología Arqueológica, América Prehispánica
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Descripción



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Fotografías: Oswaldo Camarillo Sánchez

Dibujos: Mauricio Banenelli Pérez y Oswaldo Camarillo Sánchez
La microexcavación de la olla 2 de Lagartero, Chiapas
Dra. Sonia Rivero Torres y Oswaldo Camarillo Sánchez

Introducción
Durante los trabajos de restauración y consolidación de la Pirámide dos en su lado Oeste, dentro de la temporada de campo 14 del Proyecto Arqueológico Lagartero (marzo-junio 2012), se recuperaron, entre otros materiales, tres ollas con restos óseos humanos en el interior (cuadro A 10). La denominada olla número dos es la base para el presente estudio.
Estaba al pie de la escalinata de la estructura formando parte de una ofrenda, un complejo compuesto por ollas, vasijas y restos humanos dentro y fuera de ellas.
Fue embalada en colchonetas, hule espuma y papel de estraza dentro de una caja de madera de 90 centímetros por lado (figura 1).

Figura 1. Embalaje de olla
Cuando se encontró la olla estaba cubierta por una vasija con forma de cajete de cuerpo curvo convergente y base plana, la cual presenta un orificio al centro, dispuesta a manera de tapa (figura 2). Esto ayudó a que al interior se depositaran sedimentos muy finos introducidos por acción hídrica.
El borde presentaba una ruptura y al interior eran evidentes restos óseos humanos, raíces y tierra.

Figura 2. Ollas 1 (izquierda) y dos

Metodología
La micro excavación en gabinete es un procedimiento auxiliar que permite efectuar el registro y recuperación detallados de contextos arqueológicos definidos por elementos discretos (vasijas, contenedores, bloques, etcétera) y se basa en los principios de la excavación arqueológica pero aplicados a nivel milimétrico.
En primer lugar es necesario establecer un punto de referencia arbitrario que servirá como guía para el registro tridimensional y permitirá relacionar los elementos recuperados. Es preciso disponer de la información del contexto original para la mejor comprensión de los datos de gabinete: ubicación, orientación, estratos, alteraciones y elementos asociados.
Tras registrar las características físicas de la unidad a excavar (material, forma, posible función, dimensiones, estado de conservación), se registra la topografía de la superficie y de los elementos visibles para definir la metodología de excavación (por unidades milimétricas o por estratos culturales).
La excavación por unidades milimétricas tiene como objetivo descubrir los diferentes componentes y su relación para identificar estratos o eventos particulares, una vez identificados, se procede a excavar y registrar por eventos cronológicos.
Cada proceso se registra por medio de dibujos, descripciones y fotografía.
La identificación y el tratamiento de materiales in situ son fundamentales para su conservación y posterior análisis.
Los materiales recuperados se limpian, etiquetan y embalan y la tierra se cierne y se guarda (para flotación, análisis de polen, fitolitos y componentes).
Finalmente los datos obtenidos se integran a la información disponible para plantear hipótesis explicativas del contexto excavado.

Desarrollo
El embalaje en una caja de madera con estructura de polines y paredes de hoja de triplay sirvió para establecer el punto de referencia para el registro. Se fijaron hilos nivelados 6.5 centímetros arriba del borde más próximo y que cruzaran al centro de la olla, referidos a los puntos cardinales del contexto original en que se recuperó en Lagartero (figura 3).

Figura 3. Estructura con hilos orientados y nivelados para registro

La vasija es de forma globular sin asas y está hecha de barro cocido, presenta un acabado alisado al interior y pulido al exterior y es de color anaranjado claro con manchas obscuras producidas durante la cocción.
El diámetro promedio de la boca es de 48.7 centímetros y el diámetro máximo en su parte media es de 66.54 centímetros por lo que la circunferencia máxima es de 209 centímetros; la altura máxima es de 51.2 centímetros y el grosor es de 1 centímetro en promedio.
El borde Sureste está roto y al interior se aprecian fragmentos de éste, así como la parte interna de la vasija se exfolió produciendo perdida de fragmentos a manera de descamación, posiblemente por acción del agua, ya que también es evidente al interior que el nivel de agua fluctuó durante su estancia bajo tierra y afectó la coloración. Se aprecian diversas raíces en las paredes internas y entre los restos óseos. También existen grietas en distintas partes de la vasija por lo que se rodeó con vendas desde su primer embalaje para mantener su integridad.

Figura 4. Descamación interna, raíces y grietas; coloración diferencial por fluctuación de nivel de agua

Se efectúa el registro de los niveles iniciales del contenedor y la tierra al interior, lo que arroja una profundidad máxima de -44.6 centímetros y una mínima de -41.7, al existir una fluctuación de 2.9 centímetros es factible suponer que el depósito fue homogéneo y corresponde al acomodo normal de sedimentos por efectos de filtración y agua, además la diferencia entre el nivel promedio del borde de la olla (-7.95 centímetros) y del sedimento (-43.15 centímetros) indica que los materiales depositados intencionalmente dentro de la olla no fueron cubiertos por tierra, sino que ésta se enterró con tapa para aislarla de los materiales exteriores (figura 5).

Figura 5. Planta de los niveles iniciales

Al interior de la olla, antes de efectuar cualquier movimiento, se pueden identificar restos óseos humanos que guardan relación anatómica parcial y algunos segmentos sin relación anatómica evidente, lo que permite suponer que se trata de los restos óseos de un individuo desarticulado en un espacio vacío y que sufrió alteración en su disposición después de su recuperación, es decir, durante el proceso de excavación, embalaje y traslado.
Ambos extremos distales de los fémures se encuentran depositados al oriente de la olla junto con fragmentos no identificados y arena, esto indica que la olla se inclinó en este sentido y los materiales sueltos se agruparon allí (figura 6).

Figura 6. Acumulación de materiales al oriente de la olla

Por tratarse de materiales removidos de su posición original son fotografiados, dibujados y retirados del interior. Junto con fragmentos del borde, raíces y gravilla (figura 7).

Figura 7. Dibujo en planta de elementos evidentes al inicio

Cerca de la acumulación de materiales, a cinco centímetros al Suroeste, se recuperó un huesecillo del oído -martillo derecho- (figura 8).
Antes de mover los elementos son tratados con RECONOS 1 10 por medio de goteo (figura 9), ya que se encuentran muy frágiles y se identifican los segmentos visibles: húmeros derecho e izquierdo, cráneo, tibia y peroné derechos, cervicales, fémures derecho e izquierdo, clavícula izquierda, escápula izquierda, costillas izquierdas, cóndilo mandibular.

Figura 8. Acercamiento de martillo derecho


Figura 9. Restos óseos tras aplicación de RECONOS 1 10

Los restos óseos visibles mantienen una relación anatómica parcial (figura 10) por lo que el procedimiento de excavación corresponde al retiro del estrato de sedimento depositado sobre ellos, se busca liberar la totalidad de los huesos para identificar la posición actual del entierro, la posición al momento del depósito y las condiciones en que se efectuó.
Se utilizan brochas de cerdas finas y bombilla para soplar, pinceles y cucharas plásticas.

Figura 10. Tras retiro de materiales fuera de relación anatómica

La excavación sigue el contorno de los huesos identificados, desde los extremos proximales de las tibias hacia los extremos distales en busca de los pies. Encima de los pies se identifica un objeto que tuvo forma circular, sin embargo, aunque parece mineral, es necesario un análisis específico para identificar el material de que está hecho; es de color rojo y se encuentra fragmentado.
Los pies se encuentran al Sur de la vasija, apoyados directamente sobre ella, la tibia y peroné derechos van hacia la parte Oeste. Tibia y peroné izquierdos corren de Sur a Norte y entre los extremos distales derechos e izquierdos se encuentran fragmentos de cráneo, el tercio proximal del húmero derecho, vértebras y la mandíbula. Bajo las tibias y peronés se evidencian los fémures y más abajo cúbito y radio derechos. El pie derecho se encuentra sobre el izquierdo y restos del objeto circular encima y a los lados. Falanges derechas están bajo tibia y peroné izquierdos, muy cerca del húmero izquierdo. También hay fragmentos del borde de la olla junto a los pies (figura 11).

Figura 11. Extremidades inferiores liberadas, cráneo y cinturón escapular izquierdo

Puesto que se han liberado los segmentos que no eran visibles, se identifica la mayoría de ellos y se aplica nuevamente RECONOS 1 10 por medio de goteo.
Los fragmentos del objeto circular son recuperados en el orden en que estaban y se acomodan y embalan para reintegrar la forma, es necesario el análisis del material para poder hipotetizar sobre la función (figuras 12 y 13).


Figura 12. Disco sobre los pies

Figura 13. Detalle de disco

Tras la aplicación de RECONOS 2 20 y el secado, se retiran las extremidades inferiores, comenzando por tibias y peronés, posteriormente los fémures.
Bajo ellos se encuentra la extremidad superior izquierda: húmero, cúbito y radio, carpos, metacarpos y falanges (figura 14).
Cuando se retiran las falanges distales del pies izquierdo es evidente que están fuera de relación anatómica, simplemente como articulaciones lábiles perdieron el soporte del tejido blando y se depositaron a un lado de los metatarsos, esto indica claramente que la descomposición del cuerpo sucedió en un espacio vacío y no hay evidencia de tela o algún contenedor del cuerpo, mortaja o atado (figura 15).

Figura 14. Extremidad superior izquierda, pelvis, cráneo, costillas izquierdas y dorsales


Figura 15. Detalle de tarsos y metatarsos izquierdos
Se retiró la extremidad superior izquierda y quedó expuesta la derecha, flexionada sobre el abdomen; costillas izquierdas, rótula izquierda. A un lado del húmero derecho se recuperaron falanges medias y distales de la mano izquierda, lo que indica la desarticulación de la mano en un espacio vacío, posteriormente, bajo la articulación húmero - cúbito – radio derecha, junto al iliaco derecho, se recuperaron las demás falanges (figura 16).

Figura 16. Liberación de extremidad superior derecha

Se retiró la extremidad derecha y quedó expuesta la pelvis, costillas izquierdas, derechas y vértebras; todo apoyado al fondo de la vasija (figura 17).

Figura 17. Pelvis, vértebras, costillas y falanges

Finalmente, al retirar los últimos segmentos óseos, en los extremos de la mandíbula se encontraron dos cuentas de piedra verde, una sobre las vértebras dorsales y otra sobre las costillas derechas, a un costado de la rama derecha de la mandíbula; por su ubicación es posible que formaran parte de un collar, ya que en caso de ser pendientes, su depósito hubiera sido alterado por el movimiento del cráneo. Bajo la mandíbula se recuperó una tercera cuenta de piedra verde confirmando la idea de un collar (figura 18).

Figura 18. Cuentas verdes de collar

Figura 19. Detalle de cuentas de collar

Interpretación, conclusiones y perspectivas.
La olla número 2 corresponde a un entierro individual, primario, en posición decúbito dorsal flexionado, con las extremidades superiores cruzadas sobre el abdomen (la izquierda sobre la derecha), con las piernas flexionadas sobre el tórax y el pie derecho sobre el izquierdo. Fue depositado dentro de un contenedor de cerámica con tapadera, lo que provocó una descomposición en espacio vacío -sin algún tejido enrollando o cubriendo el cuerpo- (figura 20).
Es un individuo adulto, masculino.
La olla se hizo con la intensión de servir como contenedor del cuerpo del personaje muerto y éste fue depositado poco tiempo después del momento de la muerte, ya que la totalidad de los restos recuperados, la posición y relación permiten aseverar esto.


Figura 20. Reconstrucción hipotética de la posición al momento del depósito

Se depositaron objetos con la intención de individualizar a la persona, elementos característicos del personaje y con un tratamiento diferenciado de otras personas depositadas en ollas.
Para la mejor comprensión de las costumbres funerarias del sitio Lagartero, es necesario contar con información contextual de cada entierro, no sólo el perfil biológico obtenido en laboratorio, sino el cuidadoso registro in situ de los elementos contextuales que permitan interpretar y relacionar cronológicamente los hallazgos. La relación estratigráfica y de materiales entre los entierros, la posición, los objetos asociados, la orientación, edad, sexo, condiciones de salud, adornos y ofrendas comprenden el complejo simbólico de elementos que permiten plantear una tradición funeraria en un sitio.
A través del estudio holístico de los entierros podemos conocer la esperanza de vida, demografía, salud, fenotipo, dieta, relaciones de parentesco, diferenciación social, ocupación, comercio y transformación de las relaciones sociales por medio de la dinámica de los contextos funerarios.

Bibliografía
Rivero Torres, Sonia E.
2012 Informe de la 2ª parte de la 14 temporada de campo del Proyecto Lagartero, Chiapas. Del 19 de marzo al 30 de junio de 2012, Dirección de Estudios Arqueológicos, Instituto Nacional de Antropología e Historia.

Sánchez Ramírez, Patricia V.
2012 Informe de actividades del Proyecto Arqueológico de Lagartero, Chiapas, segunda parte de la 14 temporada, 19 marzo-30 de junio de 2012.

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