Los moluscos marinos del Mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos Aguas, Valencia). Análisis arqueomalacológico de la campaña de 1941.

Share Embed


Descripción

La Investigación Arqueomalacológica en la Península Ibérica: Nuevas Aportaciones

Comité Editor: Igor Gutiérrez Zugasti (IIIPC, Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria, España) David Cuenca Solana (CReAAH UMR-6566, Francia) Manuel González Morales (IIIPC, Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria, España) Comité Científico: María Teresa Aparicio (Museo Nacional de Ciencias Naturales-CSIC, España) Pablo Arias (IIIPC, Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria, España) Bárbara Avezuela (Universidad Nacional de Educación a Distancia, España) Darío Bernal (Universidad de Cádiz, España) Mariano Bonomo (Universidad Nacional de La Plata, Argentina) Pedro Callapez (Universidade de Coimbra, Portugal) Juan Jesús Cantillo (Universidad de Cádiz, España) Eduardo Carmona (Servicio Territorial de Cultura de Valladolid, España) André Carlo Colonese (University of York, Reino Unido) Diana Carvajal Contreras (Universidad Externado de Colombia, Colombia) Catherine Dupont (CReAAH UMR-6566, CNRS, Francia) Miguel Ángel Fano (Universidad de La Rioja, España) Javier Fernández López de Pablo (IPHES, Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social, España) Carlos Fernández Rodríguez (Universidad de León, España) Eloísa Bernáldez Sánchez (IAPH, Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, España) Juan Francisco Gibaja (IMF, Institució Milà i Fontanals-CSIC, España) María del Carmen Lozano (Gaia Museum S. L., España) Ricard Marlasca (Posidònia S.L., España) Arturo Morales (Universidad Autónoma de Madrid, España) Marian Vanhaeren (PACEA UMR-5199, CNRS, France) Ester Verdún (Universitat Autònoma de Barcelona, España) Yurena Yanes (University of Cincinnati, Estados Unidos) Mikel Zubimendi (Universidad Nacional de La Plata, Argentina)

Primera edición: Agosto, 2015 © Nadir Ediciones Fernando de los Ríos 80. 5º Dcha. 39006 Santander, Cantabria © Los autores Maquetación y diseño: Eduardo Rivas. www.erdesignplus.com ISBN: 978-84-943376-1-1 D. Legal.: SA 457-2015. Impreso en España - Printed in Spain Esta edición es propiedad de Nadir Ediciones. Cualquier, forma de reproducción, distribución, traducción, comunicación pública o transformación sólo puede ser realizada con la autorización de sus titulares, salvo excepción prevista por la ley. Diríjase a CEDRO (Centro Español de Derechos Reprográficos, www.cedro.org) si necesita fotocopiar o escanear algún fragmento de esta obra.

La Investigación Arqueomalacológica en la Península Ibérica: Nuevas Aportaciones

Actas de la IV Reunión de Arqueomalacología de la Península Ibérica

Igor Gutiérrez Zugasti, David Cuenca Solana, Manuel R. González Morales, (Eds.)

CONSEJERÍA DE EDUCACIÓN, CULTURA Y DEPORTE

Índice

Elementos de adorno malacológicos de la secuencia Solutrense de la Cova del Parpalló (Gandia, València). Nuevos datos. Begoña Soler Mayor. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13 Análisis de los moluscos continentales del Paleolítico Superior y del Epipaleolítico de la cueva de Nerja (sala de la Mina), Málaga, España. María Teresa Aparicio, Esteban Álvarez-Fernández , Jesús Francisco Jordá-Pardo, Bárbara Avezuela-Aristu, Joan Emili Aura-Tortosa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 27 Gasterópodos continentales en yacimientos arqueológicos de los valles Asón y Miera (Cantabria) durante el Holoceno: aTpectos paleo-ecológicos. Jesús Ruiz Cobo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 43 Holocene climate variability in Mediterranean Iberia: a review of snail shell isotope record. André Carlo Colonese, Giovanni Zanchetta, Anthony E. Fallick, Russell Drysdale . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55 Los moluscos marinos del Mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos aguas, Valencia). Análisis arqueomalacológico de la campaña de 1941. Josep Lluís Pascual Benito, Oreto García Puchol . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65 Análisis arqueomalacológico de la unidad estratigráfica108 del conchero Mesolítico de El Mazo (Llanes, Asturias): conclusiones socio-económicas y metodológicas. Asier García-Escárzaga, Igor Gutiérrez-Zugasti, Manuel R. González-Morales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 77 Un acercamiento al aprovechamiento de los recursos litorales durante el Mesolítico: los invertebrados marinos del abrigo de El Toral III (Llanes, Asturias). Patricia Bello-Alonso, Lander Ozkorta-Escribano, Igor Gutiérrez-Zugasti. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 91 Instrumentos de concha y producción cerámica en los grupos neolíticos de la costa Atlántica del oeste de Francia. David Cuenca Solana, Catherine Dupont, Gwenaëlle Hamon . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 101 Nuevos datos para la interpretación de los conjuntos malacofaunísticos de los asentamientos neolíticos en la ciudad de Barcelona: el yacimiento de Reina Amàlia nº31-33. Jordi Nadal, Ester Brieva, Anna Gómez, Miquel Molist, Javier González, Karin Harzbecher, Lluís Lloveras. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 113 Las Náyades (Mollusca, Unionoida) del Calcolítico de Camino de las Yeseras (San Fernando de Henares, Madrid). Laura Llorente Rodríguez, Eufrasia Roselló Izquierdo, Arturo Morales Muñiz, Corina Liesau von Lettow-Vorbeck, Arantxa Daza Perea, Rafael Araujo Armero . . . . . . . . . . . . . . . . . . 125 8

Apuntes sobre formación de sitios a partir de restos arqueomalacológicos. El conchero 4 del sitio Karoline (400 Cal BC - 300 Cal AD) de la costa Atlántica de Nicaragua). Ermengol Gassiot Ballbè, Ignacio Clemente Conte . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 137 No sólo para comer. Análisis de los taxones minoritarios del conchero nº 4 de Karoline (Costa Atlántica, Nicaragua). Ignacio Clemente-Conte , Ermengol Gassiot Ballbè. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 151 Estudio arqueomalacológico del yacimiento púnico de Na Galera (Mallorca-España). Mercedes Alvarez Jurado-Figueroa, Miquel Àngel Vicens i Siquier, Agustín Fernández Martínez . . . . . . . . . 163 Los Concheros de Eirís (A Coruña): primeros resultados de una acumulación singular de mejillones (Mytilus sp.) de época romana. Carlos Fernández Rodríguez, Víctor Bejega García, Eduardo González Gómez de Agüero, Eduardo Ramil Rego, Natividad Fuertes Prieto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 173 Marisqueo en la Baelo Claudia Tardorromana. Contextos malacológicos de las termas marítimas. Darío Bernal-Casasola, Juan Jesús Cantillo, José Juan Díaz, José Ángel Expósito, María de los Ángeles Pascual, Ana María Durante, Lorena Hoyo, Estrella Blanco, José Alberto Retamosa . . . . . 187 Os moluscos marinhos como recurso alimentar no Garb al-Andalus dos sécs. XII-XIII:Os sítios de Cacela Velha (Vila Real de Santo António) e Castelo de Salir (Loulé). Maria João Valente, Soraia Martins . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 199 Explotación, conserva y comercio de moluscos en época histórica: el caso de Taramancos (Noia, A Coruña, Galicia). Eduardo González Gómez de Agüero, Víctor Bejega García, Carlos Fernández Rodríguez . . . . . . . . . . . . . 213 Pesquerías y mariscadores en la ensenada de Bolonia en época medieval y moderna. Una nueva línea de investigación. Darío Bernal-Casasola, Rafael Jiménez-Camino, Juan Jesús Cantillo, José Ángel Expósito, José Juan Díaz, Macarena Bustamante, Macarena Lara, José Manuel Vargas, Alicia Arévalo, Miguel Calvo, Nicolás Muñoz, Antonio Bellido . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 227 Orifícios de predação em conchas de moluscos marinhos. Um modelo experimental para o estudo de perfurações em conchas arqueológicas. João Paulo Cabral, Sérgio Monteiro-Rodrigues . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 241

9

Los moluscos marinos del Mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos Aguas, Valencia). Análisis arqueomalacológico de la campaña de 1941 Josep Lluís Pascual Benito1, Oreto García Puchol2

Resumen La cueva de la Cocina ofrece una de las secuencias más conocidas del “Epipaleolítico Geométrico” desde que Javier Fortea publicó su análisis del Epipaleolítico mediterráneo en la Península Ibérica a partir de los primeros trabajos en el yacimiento dirigidos por Luís Pericot en los años 40. En los años 70 Javier Fortea excavó en la cavidad durante varias campañas, aunque hasta el momento sólo se han publicado algunas notas. Las referencias a la malacofauna se limitan a una nota de M. Vidal de 1945 en la que menciona la presencia de once restos de cinco especies marinas y doce restos de cinco especies continentales. En el presente artículo se estudia la malacofauna marina de la campaña de 1941, centrándonos en los sectores donde se observa mayor fiabilidad estratigráfica en base a la revisión de la totalidad de materiales que estamos llevando a cabo dentro del proyecto HAR2012 33111 “Meso Cocina: Los últimos caza-recolectores y el paradigma de la neolitización en el Mediterráneo peninsular”. En el conjunto analizado se observan dos grupos tafonómicos, uno de carácter bromatológico con Cerastoderma glaucum y otro de carácter ornamental con Columbella rustica, Glycymeris sp., Nassarius reticulatus y, posiblemente, Pecten sp. Palabras clave: Mesolítico, País Valenciano, malacofauna marina, dieta, adorno.

Abstract Cocina cave provides one of the better stratigraphic sequences of the “Geometric Epipaleolithic” since Javier Fortea published their analysis of the Mediterranean Epipaleolithic in Iberia using data from the first works in the site conducted by Luís Pericot in the 40s. In the 70s Javier Fortea excavated in the cave during several campaigns although only some notes have been published so far. Information on the shell remains is limited, refering only the presence of 11 remains corresponding to five marine species and 12 remains related to five continental species. In this paper we present the analysis of the shell assemblage found in the campaing conducted in 1941 and studied now in the framework of the project HAR2012 33111 “Meso Cocina: Los últimos caza-recolectores y el paradigma de la neolitización en el Mediterráneo peninsular”. Two taphonomic groups have been recognised in the studied assemblage, one of a bromatological type and mainly composed by Cerastoderma glaucum, and other ornamental that includes Columbella rustica, Glycymeris sp., Nassarius reticulatus y Pecten sp. Keywords: Mesolithic, Valencia Region, marine molluscs, diet, ornament.

Servei d’Investigació Prehistòrica. Museu de Prehistòria de València. Diputació de València. C/ Corona 36. 46003 València (España). [email protected] 2 Investigadora Programa Ramón y Cajal. Departament de Prehistòria i Arqueologia, Universitat de València. Av. Blasco Ibáñez 28. 46010 València (España). [email protected] 1

65

Los moluscos marinos del mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos aguas, Valencia)...

1. Introducción 1.1. El yacimiento La Cueva de la Cocina (Dos Aguas, Valencia) se ubica en el extremo occidental de la sierra del Caballón, a 405 m de altitud y a poco menos de 40 km en línea recta de la actual línea de costa. Se trata de una amplia cavidad, de unos 300 m2, con una boca de 22 m de anchura orientada a levante y con escasa visibilidad (Fig. 1). La cueva se abre en la parte cóncava de un recodo estructural enfrentado directamente a la trayectoria del barranco de la Ventana, el cual recoge las aguas de La Canal -valle alto y de difícil acceso-, y termina bruscamente en un gran salto topográfico de unos 80 m de altura que lo comunica con el barranco del Falón. Este

último es subsidiario del Júcar, el cual ofrece en este punto un paisaje de aspecto muy quebrado formado por un cantil continuo casi vertical, donde la red fluvial se encaja en un valle tan estrecho que se reduce prácticamente al cauce que ocupan las aguas.

1.2 Las campañas de excavación, estudios y secuencia estratigráfica El yacimiento fue dado a conocer por las excavaciones del Servei d’Investigació Prehistòrica de Valencia en los años 40. La primera intervención fue un pequeño sondeo en 1940. Después, bajo la dirección de Luís Pericot, se efectuaron cuatro campañas en 1941, 1942, 1943 y 1945. Estas intervenciones y los

Figura 1. Fotos de la entrada (desde el exterior y desde el interior) y planta de la Cueva de la Cocina con indicación de los sectores excavados por L. Pericot (en línea clara) y J. Fortea (en línea oscura). La trama rayada corresponde a la campaña de 194l.

66

Josep Lluís Pascual Benito, Oreto García Puchol

estudios sobre ellas lo convirtieron en un yacimiento imprescindible para la definición del Epipaleolítico reciente de la vertiente mediterránea peninsular (Pericot, 1945; Fortea, 1971 y 1973). Con posterioridad, nuevos trabajos se llevaron a cabo de 1974 a 1981 bajo la dirección de Javier Fortea (Fig. 1). La secuencia estratigráfica obtenida en las primeras intervenciones (especialmente en el sector EI de 1945), de 4,5 m de potencia, sirvió de base a Fortea para establecer el modelo evolutivo del “Epipaleolítico Geométrico de tipo Cocina”, complejo industrial representativo en el marco del mediterráneo peninsular de las industrias europeas de raíz “tardenoide”, basado en la tipología y tecnología de las armaduras líticas geométricas, en sus frecuencias y en su puntual asociación con otros indicadores cronoculturales (cerámica). Fue estructurado en cuatro fases, organizadas a partir de los horizontes arqueológicos Cocina I a IV. La última revisión de la industria lítica de los sectores excavados por Pericot ha matizado esta secuencia del sector EI en el yacimiento, donde se distinguen bien las dos fases más antiguas. Cocina I (Fase A) (circa 8600-8000 Cal BP), caracterizada por el predominio de los trapecios fabricados a partir de soportes laminares fragmentados mediante técnica de microburil, y Cocina II (Fase B) (circa 8000-7600 Cal BP), en la que los triángulos pasan a ser las armaduras mejor representadas, destacando entre ellos un tipo singular, con lados cóncavos y espina central o tipo Cocina (García Puchol, 2005). Por el momento resulta difícil individualizar con claridad en el yacimiento el horizonte Cocina III (o fase C) que, en su día, se definió por los segmentos de retoque abrupto y las cerámicas neolíticas «antiguas» (impresas, incisas), aunque no invalida la fase C en el esquema general (García Puchol, 2005; Juan-Cabanilles y Martí, 20072008), mientras que ha sido desestimado como horizonte cronocultural el nivel superficial u horizonte Cocina IV (fase D), caracterizado en su momento por la técnica del doble bisel aplicada a los geométricos (segmentos, triángulos) y presencia de cerámicas neolíticas más «avanzadas» (peinadas) y que fue interpretado como la evolución final de esas industrias en un horizonte neolítico más avanzado, con algunos materiales de la Edad del Bronce, ibéricos, medievales y modernos, consecuencia del frecuente uso de la cueva como refugio temporal y corral. Aparte de los datos estratigráficos e industriales ����� referidos a la campaña de 1945, y las referencias sobre la���� colección de plaquetas grabadas con motivos geométricos recuperadas en el yacimiento���������������������������� , se cuenta con estudios sobre la fauna por M. Pérez Ripoll, que evidencian la espe-

cialización del yacimiento en la caza de la cabra montés a lo largo de toda la secuencia (Fortea et al., 1987) y sobre la sedimentología por P. Fumanal (1986), que han permitido conocer las oscilaciones medioambientales.

2. La malacofauna marina de la campaña de 1941 Hasta la fecha los restos malacológicos de Cocina solo contaban con una nota provisional de M. Vidal (1945), quien clasificó un pequeño lote dado a conocer como apéndice en la primera publicación del yacimiento (Pericot, 1945). Entre las especies marinas señala la presencia de 11 restos pertenecientes a cinco géneros o especies: Columbella, Murex, “Cardium edule”, “Pectunculus” y “Nassa reticulata”, indicando que se encontraban frecuentemente perforadas lo que abogaría por su uso como objetos de adorno. En los últimos años, los materiales de las excavaciones antiguas depositados en el Museu de Prehistòria de València que, en su mayor parte, aún conservaban los envoltorios originales de los años 40, han sido ordenados e inventariados en su totalidad. Esta circunstancia ha permitido conocer que la malacofauna de las intervenciones de los años 40, en curso de estudio, es abundante con más de 4000 restos, de los que la mayor parte corresponden a caracoles completos terrestres y dulceacuícolas, si bien los de origen marino suman más de 800 ejemplares, un número destacado teniendo en cuenta que se trata de un yacimiento de interior. En este trabajo se estudwian los restos malacológicos marinos de la campaña de 1941, por ser la que, tras la reciente revisión de la totalidad de la industria lítica tallada, muestra una secuencia coherente con el desarrollo del Mesolítico Geométrico, además de no estar afectada por la posterior ocupación neolítica de la cueva, lo que permite asignar con garantía el material a alguna de las dos fases mesolíticas del yacimiento, Cocina I y Cocina II. Durante 1941 se excavó en una superficie de 3 x 3,5 m, cerca de la entrada, llegando hasta 2,5 m de profundidad, mediante capas artificiales de entre 10 y 20 cm de espesor en el sector denominado “cata”, realizando posteriormente una ampliación de 0,50 m con capas de diversa potencia que se indican en las tablas con la letra “a” tras el número de la misma y que han podido relacionarse con una o dos capas de 67

68 13

10

3

4

5

3

2

2a

178

59

119

Total

9

5

Tabla 1. Distribución por capas de los restos de moluscos marinos.

10

11

6

5

1a

Nº. Restos

47

22

25

3

1

91

18

73

2

Pecten sp.

Hinia reticulata

Glycymeris sp.

11

11

Cerastoderma glaucum

Columbella rustica

1

Capas

Cocina II

2

2

6

3

3

4a

9

1

7

1

7

2

2

8

Cocina I

3

3

9

1

1

7a

1

1

11

2

1

1

12

1

1

13

34

1

1

2

28

2

Total

8

6

2

L

220

1

1

2

93

123

Campaña 1941

TOTAL

Los moluscos marinos del mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos aguas, Valencia)...

Josep Lluís Pascual Benito, Oreto García Puchol

la cata inicial. Así, la capa 1a equivale a las capas 2-3, la 2a a las 3-4, la 4ª a las 5-6 y la 7a a la 10.

los que el 64,2% son valvas enteras y el 35,7% valvas fragmentadas (Tabla 2). No existen en la muestra estudiada fragmentos de pequeño tamaño, hecho que si ocurre en las excavaciones más recientes del yacimiento, de lo que se deduce cierta selección en la recogida de estos materiales en las campañas antiguas como también se ha observado para los caracoles terrestres, quizás debido a los diferentes tamaños de criba utilizados, de los que no poseemos información.

En la Tabla 1 se indica el número de restos documentado en cada capa, un total de 220 pertenecientes a cinco especies, tres de bivalvos y dos de gasterópodos. El conjunto se encuentra dominado por dos especies, Cerastoderma glaucum y Columbella rustica, las cuales suman el 98,1% del total de restos. Por fases, el número de restos y especies es desigual, 178 corresponden a Cocina II, donde solo hay dos especies representadas, Cerastoderma glaucum y Columbella rustica, y 34 a Cocina I, donde aparte de las anteriores se documentan Glycymeris sp., Nassarius reticulatus y Pecten sp. Otros ocho restos se documentaron en tareas de limpieza (L). Los momentos más recientes de la secuencia –capas 1 a 4- son los que mayor número de restos contienen, el 76,2%.

Teniendo en cuenta la lateralidad de las valvas el número mínimo de individuos es de 65, el número de valvas derechas, si bien podría ser superior, alrededor de 111, el número mínimo de valvas calculado, toda vez que no hemos encontrado en este conjunto ningún ejemplar que case con su pareja. Excepto dos ejemplares fragmentados procedentes de las capas 7 y 13 (Cocina I) los demás efectivos de C. glaucum se documentan en Cocina II y, dentro de este horizonte, se concentran en las capas 2 y 3 de donde proceden el 83,7% de los restos (Fig. 2).

Cerastoderma glaucum (Bruguière, 1789) Este bivalvo constituye el taxón mejor representado de la malacofauna marina con 123 restos, de Cocina II

Cocina I

Capas

1

2

3

1a

4

2a

Total

7

13

Total

L

TOTAL

Nº de restos

11

73

25

5

3

2

119

1

1

2

2

123

Valvas enteras

6

45

19

5

3

1

79

Fragmentos

5

28

6

Nº mínimo de valvas

10

62

25

Quemadas

1

13

3

Valva derecha entera

3

31

9

Valva derecha fragmentada

1

10

3

Total valva derecha

4

41

12

Valva izquierda entera

3

14

10

Valva izquierda fragmentada

1

8

3

Total valva izquierda

4

22

13

Frag. Labio o cuerpo

3

10

5

5

5

3

78 2

41

1

1

2

1

44

3

108

1

1

2

1

111

1

18

18

2

50

50

1

15

15

1

65

65

2 1

1

28

1

29

1

13

1

1

1

15

1

41

1

1

2

44

13

1

1

14

Tabla 2. Características y distribución por capas de los restos de Cerastoderma glaucum.

69

Los moluscos marinos del mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos aguas, Valencia)...

Figura 2. Restos de Cerastoderma glaucum de la capa 3.

Figura 3. Relación anchura/altura de las valvas completas de Cerastoderma glaucum.

70

Josep Lluís Pascual Benito, Oreto García Puchol

La medición de todas las valvas muestra que la mayor parte de ellas corresponden a ejemplares adultos. Tan solo en un caso la altura es inferior a 2 cm. (Fig. 3), por lo que probablemente existió una selección por el tamaño en la recolección de este bivalvo.

ejemplares contienen. La mayor parte de las conchas se conservan completas, aunque el 11,8% se encuentran fragmentadas por la perforación. El 12,9% se encuentran quemadas y un ejemplar conserva escasos restos de ocre en su superficie.

Ninguno de los restos de C. glaucum muestra erosión natural o incrustación de otros organismos postmortem, lo que sugiere que fueron recogidos vivos. Este hecho y la selección por tamaños en su recolección, apunta a que tuvieron un carácter bromatológico. Desconocemos el modo en que fueron preparados para su ingesta. En este sentido el porcentaje de valvas quemadas es escaso, un 17,2%. Algunas valvas presentan una pequeña muesca en el labio que podría relacionarse con la abertura de los ejemplares para acceder a las partes blandas, una hipótesis pendiente de confirmar mediante experimentación.

Solo poco más de la tercera parte, un 36,5%, conservan el ápice completo (Fig. 4: 1). El resto de las conchas de C. rustica se encuentran rodadas, habiendo perdido el ápice por erosión natural, así como alguna vuelta, lo que indica, al contrario de lo que pasa con C. glaucum, que fueron recogidas en la playa una vez muerto el animal. Conservan cuatro vueltas el 4,3%, tres vueltas el 32,2%, dos vueltas el 24,7% y una sola vuelta el 2,1%. En estos dos últimos casos se observa que la zona interior de la columela ha sido eliminada o ampliada antrópicamente por presión y, por tanto, la zona apical se encuentra perforada (Fig. 4: 2 y 3).

Columbella rustica (Linnaeus, 1758) Es la segunda especie más abundante con 93 ejemplares, todos ellos perforados en la última vuelta. Se encuentran mejor repartidos en toda la secuencia, si bien vuelven a ser las capas superiores las que más

Todas las perforaciones ubicadas en la última vuelta de las C. rustica son amplias e irregulares y se efectuaron mediante percusión en el dorso de la última vuelta junto al labio, observándose en algunos casos una posterior regularización por presión.

Figura 4. Selección de conchas marinas empleadas como adorno.

71

Los moluscos marinos del mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos aguas, Valencia)...

Nassarius reticulatus (Linnaeus, 1758) Un ejemplar completo sin señales de erosión natural con perforación en la última vuelta enfrentada a la apertura realizada por percusión indirecta desde la cara interior (Fig. 4: 4). Glycymeris sp. Dos valvas de este género, de pequeño tamaño y muy rodadas, con perforación en el umbo producida por erosión natural, una de ellas quemada (Fig. 4: 6 y 7). Su grado de rodamiento impide la clasificación taxonómica a nivel de especie. Pecten sp. Un pequeño fragmento de borde y cuerpo del que resulta difícil una clasificación taxonómica más precisa. El borde muestra señales de erosión natural, mientras que el resto del perímetro presenta una fractura angulosa antigua, por lo que se deduce que posiblemente se fragmentó en el yacimiento (Fig. 4: 5).

3. La malacofauna marina de otros yacimientos mesolíticos valencianos

de “Murex brandaris, Murex trunculus, Purpura haemastoma consul, Triton nodiferus, Cerithium vulgatum, Columbella rustica, Nassa reticulata y Purpura haemastoma“ entre los gasterópodos y “Pectunculus violascense, Venus gallina, Cardium glaucum, Spondylus gaederopus, Cardium tuberculatum, Pecten jacobaeus y Arca noae” entre los Lamelibranquios (VV.AA., 2008). Otro conchero, es el del nivel inferior del Abric de l’Assut de d’Almassora (Vila-real, Castellón), con una potencia superior a 0,80 m de espesor en algún punto, sin material lítico significativo y con abundantes conchas de moluscos marinos que “en su inmensa mayoría son del género «cardium»; excepcionalmente se encuentran algunos raros ejemplares del «pectunculus» y sólo en un caso de «nática», «cyprea» y «columbela», esta última perforada” (Esteve, 1970: 47). Este nivel se atribuye al mesolítico por su carácter de conchero y por su cercanía a Sitjar Baix (Martí et al., 2006), donde se documentó un triangulo tipo Cocina (Pascual y García, 1998). El tercer conchero del que tenemos noticias, actualmente desaparecido y de atribución cronológica indeterminada, se localizó en los años ochenta en un corte realizado para transformaciones agrícolas en los alrededores de Torre d’Espioca (Picassent, Valencia) y fue descrito como una acumulación antrópica de conchas con esca-

Los restos malacológicos de origen marino son frecuentes en contextos mesolíticos valencianos, tanto en yacimientos del Mesolítico de Muescas y Denticulados (MMD) como del Mesolítico Geométrico (MG). Por regla general se documentan en número muy escaso y pertenecen a un reducido número de especies, si bien existen algunas excepciones. En tres casos los yacimientos forman auténticos concheros, todos ellos ubicados próximos a la costa y a marjales litorales (Fig. 5), si bien la información que se posee sobre estos conjuntos es muy desigual y no se dispone de ninguna cuantificación de los restos. El más conocido es el de El Collao (Oliva, Valencia) con una industria lítica donde se observan niveles del MMD y de la fase A del MG, del que en los avances de la malacofauna publicados se cita un amplio inventario de especies de origen marino entre las que abundan “Pectunculous gaditanus” y “Cardium edule” y entre los gasterópodos “Murex trunculus, Purpura haemastoma y Triton nodiferus” (Boscá, 1916). Posteriormente J. Cuerda y L. Gasull ofrecen un listado de las especies marinas de los numerosos restos recuperados en las excavaciones recientes, observando las presencia 72

Figura 5. Mapa del País Valenciano con yacimientos mesolíticos donde abundan los restos de Cerastoderma glaucum.

Josep Lluís Pascual Benito, Oreto García Puchol

sos restos líticos y “abundantes valvas de Cerastoderma edule/glaucum y escasos Cerithium vulgatum y Trunculariopsis trunculus” (Mateu et al., 1985: 93).

alguna “Hinia reticulata”, “Hinia costulata”, Cerastoderma glaucum y Antalis sp. (Barciela, 2008: 110).

Como ocurre en Cocina, en los tres concheros citados, la especie marina predominante es Cerastoderma glaucum, una circunstancia que tan solo se observa en otro yacimiento de interior recientemente excavado y el único conjunto publicado, el del asentamiento al aire libre de Benàmer (Muro, Alicante), donde en niveles atribuidos a la fase A de MG, se documentaron 61 valvas del género Cerastoderma (edule/glaucum), muchas de ellas completas, la mayor parte sin señales de erosión y un ejemplar quemado, además de un valva de Glycymeris con perforación natural y un fragmento de Columbella rustica (Barciela, 2011: 250).

4. Conclusiones

Son más numerosos los yacimientos mesolíticos valencianos con especies utilizadas para adornos presentes en Cocina, especialmente Columbella rustica perforada presente en todos ellos, como ocurre en toda la vertiente mediterránea peninsular, desde el Valle del Ebro hasta la costa de Málaga (Pascual Benito, 1998: 132; Álvarez, 2008: 104), mientras que Glycymeris sp., Nassarius reticulatus, Pecten sp. y otras especies se documentan en menor numero de yacimientos. Sin ánimo de ser exhaustivos citaremos el conjunto documentado en niveles del MMD de la Cova de Santa Maira (Castell de Castells, Alicante): 16 Columbella rustica, dos Hinia reticulata, un Glycymeris sp., dos Clancullus corallinus y un fragmento rodado de bivalvo indeterminado perforado (Pascual Benito, 2006a: 101). Además, entre la escasa malacofauna no perforada de esa cavidad –15 taxones- hay presencia de cardiidos y un fragmento rodado de bivalvo indeterminado ( Jordá, 2006: 89). De la Penya del Comptador (Alcoi, Alicante) procede una Columbella rustica en un contexto del MMD, del Abric de la Falguera (Alcoi, Alicante) dos Columbella rustica en la fase VII, atribuida a un momento intermedio de la fase A del MG (Pascual Benito, 2006b: 303), de La Mangranera (Andilla, Valencia) una Columbella rustica y una valva de cardiido muy rodada, de la Covacha de Llatas (Andilla, Valencia), atribuido a la fase B/C del MG, M. Vidal determina “dos Columbelas, un Pectunculus perforados y una valva de Cardium edule” ( Jordá y Alcácer, 1949: 36), de la Cueva del Lagrimal (Villena, Alicante) 15 Columbella rustica y una Natica de la fase IV, atribuida al MG (Soler, 1991: 29) y de Casa de Lara (Villena, Alicante), con materiales de las fases A y B del MG y también neolíticos se recogieron sin referencia estratigráfica conchas perforadas, entre ellas abundantes Columbella rustica,

El análisis de la malacofauna marina de la Cueva de de la Cocina muestra un aprovechamiento de recursos del mar y de humedales litorales para la obtención de productos comestibles y de materia prima para adornos. La primera función se ve reforzada con la presencia en el yacimiento de otras evidencias de origen marino. Así en la revisión de los materiales se han identificado diversos restos ictiológicos en curso de estudio, entre ellos dos mandíbulas y numerosos molares de Sparus aurata (dorada), una especie común en zonas litorales y desembocaduras de los ríos y que en ocasiones se ha llegado a pescar en zonas salobres de la Albufera, ecosistemas donde Cerastoderma glaucum abunda. Como hemos visto, el empleo de recursos marinos no es exclusivo de Cocina. En otros yacimientos mesolíticos valencianos, tanto ubicados próximos a la costa como en el interior, la abundancia de conchas Cerastoderma glaucum apunta hacia la explotación con carácter bromatológico de este bivalvo. La relación con los recursos litorales se ha documentado también durante el MMD en Santa Maira, ubicada a unos 35 km de la línea de costa actual, por los restos de espáridos, mugílidos y anguila allí documentados (Rodrigo, 2006: 87). Así mismo, el consumo de proteínas de origen marino por las poblaciones mesolíticas se ha constatado a partir del análisis de isótopos estables (carbono y nitrógeno) en restos humanos de El Collao y también de yacimientos en cueva del interior, Santa Maira y Mas Nou (Salazar et al., 2014). No existen datos seguros sobre la posición de la línea de costa durante la ocupación mesolítica de Cocina. En todo caso la distancia de Cocina a los recursos marinos aquí vistos estaría, en línea recta, entre 30 y 38 km, distancias de la cueva a la zona inundable (marjal de la Albufera), donde podía haber alguna laguna costera, y a la línea de costa actual, donde se sitúa la restinga de la Albufera. La presencia significativa de restos malacológicos e ictiológicos evidencia que la Cueva de la Cocina fue un lugar frecuentado de forma recurrente a lo largo de casi un milenio, especialmente durante la primera mitad del VI milenio antes del presente, por los últimos cazadores-recolectores, en el marco de una estrategia 73

Los moluscos marinos del mesolítico de la Cueva de la Cocina (Dos aguas, Valencia)...

de explotación del territorio móvil que estaría ligada a desplazamientos costa/interior, tal como ha sido formulado recientemente, al contemplar la posible existencia de unos 15 grupos locales durante el mesolítico reciente en el País Valenciano, con un territorio con diámetro variable en torno a los 25-35 km. (Martí et al., 2008: 248, fig. 11).

Esteve, F., 1969. El abrigo rupestre del Assud de Almazora y su yacimiento arqueológico. Archivo de Prehistoria Levantina XII, 43-54

De cualquier modo, la explotación de recursos marinos para el consumo puede considerarse marginal y esporádica. La caza de la cabra y, en menor número de ciervos y jabalíes, constituiría el principal recurso económico de los grupos de caza-recolectores que ocuparon a lo largo de casi un milenio la Cueva de la Cocina.

Fortea, J., 1973. Los complejos microlaminares y geométricos del Epipaleolítico mediterráneo español. Universidad de Salamanca, Salamanca.

Agradecimientos Este trabajo se ha llevado a cabo en el marco del proyecto “Meso Cocina: los últimos caza-recolectores y el paradigma de la neolitización en el mediterráneo occidental” (HAR2012-33111), subvencionado por el Ministerio de Economía y Competividad, Gobierno de España.

Bibliografía Álvarez-Fernández, E., 2008. The use of Columbella rustica (Clase: Gastropoda) in the Iberian Peninsula and Europe during the Mesolithic and Early Neolithic. En: Hernández, M., Soler, J.A., López Padilla, J.A. (Eds.), IV Congreso del Neolítico Peninsular (Alicante 2006), Tomo II. Museo Arqueológico de Alicante, Alicante, 103-111. Barciela, V., 2008. Adorno y simbolismo. Los adornos personales del Neolítico y Eneolítico en Villena (Alicante). Fundación municipal José María Soler, Villena. Barciela, V., 2011. El estudio de la malacofauna: implicaciones paleoambientales y antrópicas. En: Torregrosa E.P., Jover, F.J., López, E. (Dirs.), Benàmer (Muro d’Alcoi, Alicante). Mesolíticos ���������������������� y neolíticos en las tierras meridionales valenciana. Serie de Trabajos Varios del SIP 112, València, 239-256. Boscá, E., 1916. Un paradero de la época paleolítica en Oliva (Valencia). Boletín de la Real Sociedad Española de Historia Natural, Tomo XVI, 81-83. 74

Fortea, J., 1971. La Cueva de la Cocina. Ensayo de cronología del Epipaleolítico (Fácies Geométricas). Trabajos Varios del SIP 40, Valencia.

Fortea, J., Martí, B., Fumanal, M.P., Dupré, M., Pérez, M., 1987. Epipaleolítico y neolitización en la zona oriental de la península Ibérica. En: Guilaine, J., Courtin, J., Roudil, J.-L., Vernett, J.-L. (Dirs.), Premières Communautés paysannes en Méditerranée occidentale. Actes du Colloque Internacional du CNRS (Montpellier, 1983). Éditions du CNRS, Paris, 581-591. Fumanal, M.P. 1986. Sedimentología y Clima en el País Valenciano. Serie Trabajos Varios del SIP 83, Valencia. García Puchol, O. 2005. El proceso de Neolitización en la fachada mediterránea de la península Ibérica. Tecnología y Tipología de la piedra tallada. British Archaeological Reports International Series 1430, Archaeopress, Oxford. Jordá, F., Alcacer, J., 1948. La covacha de Llatas (Andilla). Serie de Trabajos Varios del SIP 11, València. Jordá Pardo, J., 2006. La malacofauna marina. En: Aura J.E., Carrión, Y., García Puchol, O., Jardón, P., Jordá, J.F., Molina, L., Morales, J.V., Pascual Benito, J.L., Pérez Jordá, G., Pérez Ripoll, M., Rodrigo, M.J., Verdasco, C.C., Epipaleolítico-mesolítico en las comarcas centrales valencianas. El mesolítico de muescas y denticulados en la cuenca del Ebro y el mediterráneo peninsular. Memorias de yacimientos Alaveses 11, Álava: 88-89. Juan-Cabanilles, J., Martí Oliver, B., 2007-2008. La fase C del Epipaleolítico reciente: lugar de encuentro o línea divisoria. Reflexiones en torno a la neolitización en la fachada mediterránea peninsular. Veleia 24-25, 611-628. Martí, B., Aura, J.E., Juan-Cabanilles, J., García Puchol, O., Fernández, J., 2009. El Mesolítico Geométrico

Josep Lluís Pascual Benito, Oreto García Puchol

facies Cocina. En: Utrilla, P., Montes, L. (Coord), El Mesolítico Geométrico en la cuenca mediterránea. Publicaciones de la Universidad de Zaragoza, Zaragoza, 205-258. Mateu, J.F., Martí, B., Robles, F., Acuña, J.D., 1985. Paleografía litoral del Golfo de Valencia durante el Holoceno inferior a partir de yacimientos prehistóricos. En: Pleistoceno y Geomorfología litoral. Homenaje a Juan Cuerda, Universitat de Valencia, València, 77-102. Pascual Benito, J.L., 1998. Utillaje óseo, adornos e ídolos neolíticos valencianos. Trabajos Varios del SIP 95, Valencia.

Isotope evidence for the use of marine resources in the Eastern Iberian Mesolithic. Journal of Archaeological Science 42, 231-240. Soler García, J.M., 1991. La Cueva del Lagrimal. Caja de Ahorros Provincial de Alicante, Alicante. Vidal y López, M., 1945. Nota malacológica (apéndice). En: Pericot, L., La cueva de la Cocina. (Dos Aguas). Nota preliminar. Archivo de Prehistoria Levantina II, 70-71. VV.AA., 2008. La necrópolis mesolítica de El Collado (Oliva-Valencia). Varia VIII, Diputación provincial de Valencia, Valencia.

Pascual Benito, J.L., 2006a. Industria ósea y adorno. En: Aura J.E., Carrión, Y., García Puchol, O., Jardón, P., Jordá, J.F., Molina, L., Morales, J.V., Pascual Benito, J.L., Pérez Jordá, G., Pérez Ripoll, M., Rodrigo, M.J., Verdasco, C.C., Epipaleolítico-mesolítico en las comarcas centrales valencianas. El mesolítico de muescas y denticulados en la cuenca del Ebro y el mediterráneo peninsular. Memorias de yacimientos Alaveses 11, Álava, 99-102. Pascual Benito, J.L., 2006b. La malacofauna del Abric de la Falguera. En: García Puchol, O., Aura, J.E. (Coord.), El Abric de la Falguera: 8.000 años de ocupación humana en la cabecera del río de Alcoi, Vol. 2, Museo Arqueológico de Alicante – MARQ, Alcoi, 168-174. Pascual Benito, J.L., García Puchol, O., 1998. El yacimiento prehistórico de Sitjar Baix (Onda, Castelló). PLAV-Saguntum 31, 63-78 Pericot, L., 1945. La Cueva de la Cocina (Dos Aguas). Nota Preliminar. Archivo de Prehistoria Levantina II, 39-75. Rodrigo García, M.J., 2006. Ictiofauna. En: Aura J.E., Carrión, Y., García Puchol, O., Jardón, P., Jordá, J.F., Molina, L., Morales, J.V., Pascual Benito, J.L., Pérez Jordá, G., Pérez Ripoll, M., Rodrigo, M.J., Verdasco, C.C., Epipaleolítico-Mesolítico en las comarcas centrales valencianas. El mesolítico de muescas y denticulados en la cuenca del Ebro y el mediterráneo peninsular. Memorias de yacimientos Alaveses 11, Álava, 87-88. Salazar-García, D.C., Aura, J.E., Olaria, C.R., Talamo, S., Morales, J.V., Richards, M.P., 2014. 75

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.