LÍNEA DE BASE PARA LA CONSTRUCCIÓN DE CONFIANZA. SAQUEOS DE ANTÍMANO (VENEZUELA), ABRIL DE 2002

August 2, 2017 | Autor: Gloria Pino | Categoría: Psicologia Política
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Descripción

VENEZUELA INICIATIVA PARA LA CONSTRUCCIÓN DE CONFIANZA DEVELOPMENT ALTERNATIVES, Inc. AGENCIA PARA EL DESARROLLO INTERNACIONAL DE LOS ESTADOS UNIDOS FUNDACIÓN ESCUELA DE GERENCI A COMUNI TARI A UNIVERSI DAD RAFAEL URDANETA Centro de Investigaciones Psicológicas UNIVERSIDAD DEL ZULIA Escuela de Trabajo Socia l

LÍNEA DE BASE PARA LA CONSTRUCCIÓN DE CONFIANZA SAQUEOS DE ANTÍMANO ABRIL DE 2002

CARACAS, AGOSTO DE 2003

Equipo de Trabajo Coordinador General Alberto Rodríguez Álvarez1 Coordinador de Trabajo de Campo Jorge Moreno1 Diseño y Análisis de Datos Cuantitativos Gloria Pino-Ramírez2,3 Diseño y Análisis de Datos Cualitativos María Isabel Bustos3 Equipo de Campo Ana Teresa Fernández1 Nersa López1 Isabel Díaz1 Abelina Caro Trascripción de Datos Kelly Huerta2 Elaboración del Manuscrito Alberto Rodríguez Álvarez1 Gloria Pino-Ramírez2,3 María Isabel Bustos3 Concepto y Diseño Gráfico Analiesse Ibarra Esta publicación fue preparada con fondos suministrados por Development Alternatives, Inc. (DAI), con financiamiento de la Agencia para el Desarrollo Internacional de los Estados Unidos bajo el número de contrato #HDA-C-00-02-00179 Proyecto Venezuela Iniciativa para la Construcción de Confianza, y realizado por la Fundación Escuela de Gerencia Comunitaria1, el Centro de Investigaciones Psicológicas de la Universidad Rafael Urdaneta2 y la Escuela de Trabajo Social de la Universidad del Zulia3. Agradecimientos A los comerciantes de Antímano por compartir con nosotros sus dolorosas vivencias y así hacer posible éste trabajo. A Luis Esqueda-Torres, por sus comentarios y sugerencias sobre el diseño y contenido final de este trabajo, y al Centro de Investigaciones Psicológicas de la Universidad de los Andes por facilitarnos algunos de los instrumentos utilizados. Correspondencia Para cualquier información adicional puede dirigir su correspondencia a [email protected] o [email protected]

Línea de Base para la Construcción de Confianza: ¿Qué se Aprendió en Antímano? Los Saqueos de Antímano Venezuela era un país que se caracterizaba por la tolerancia y la universalidad. Caracas es una ciudad de inmigrantes, en los años 50 cerca del 40% de la población era emigrante del extranjero (España, Italia, Portugal, Siria-Líbano...), y el otro 50% eran inmigrantes de otras regiones del interior. Esto hacía una ciudad donde no existía el racismo y por el contrario había una conciencia cosmopolita donde se entremezclaban las culturas. A finales de los años 90 Venezuela enfrentó, entre otros factores, entrar al siglo XXI, construir la modernidad, lo que supone el asumir esta diversidad de población y construir una sinergia que permitiese lanzarnos como país hacia la competitividad, la productividad, la ciudadanía... o regresar al siglo XIX, donde se desataba el odio y el resentimiento entre los grupos sociales. En los primeros meses del año 2002 Venezuela vive una fuerte tensión política. El 11 de abril la oposición realiza la marcha con mayor cantidad de personas en la historia del país; la misma es disuelta por disparos provenientes de grupos que apoyan al gobierno. El 12, el Ministro de la Defensa anuncia a la nación que el Presidente ha renunciado a su cargo, lo que da pie a un gobierno de transición que asume todas los poderes y genera un caos institucional. El 13, ante la usurpación de poderes por parte del gobierno de transición, el aparato militar retorna al teniente coronel Hugo Chávez Frías a la presidencia; a nivel civil, algunos de sus afectos promueven en Caracas la realización de saqueos y actos vandálicos en las zonas donde tienen influencia. Antímano es una parroquia al oeste de la ciudad de Caracas, la cual sufrió saqueos liderados por bandas de delincuentes, quienes recibieron como premio o botín la zona comercial de la parroquia. En estos saqueos se apreció claramente que los asaltantes actuaron en tres oleadas, cada una realizada por grupos de personas diferentes. • •



Primera oleada. Los que empezaban los saqueos, actuando con mayor carga de violencia; los pioneros que arremetían contra la presa y que actuaron de una manera coordinada para realizar la “cacería”. Segunda oleada. Que aprovechando de forma oportunista la situación también se abocaban a saquear. Esto originó que los primeros se enfrentaran con algunos de ellos y los mataran por tener la pretensión de obtener algunas de las mejores “presas” que eran de su “exclusividad”. Tercera oleada. Los últimos saqueadores que entran a participar una vez que se retiran los anteriores, quedándose con los despojos.

Los saqueos de Antímano fueron de una violencia inusual en la Venezuela del siglo XX, no solo se robaron mercancía, también destruyeron enseres por el mero hecho de dañar, pero lo más dramático fue que le prendieron fuego a las edificaciones para quemar los locales comerciales y las viviendas que se encontraban arriba donde habitaban sus propietarios. Estos ataques estuvieron acompañados de amenazas hacia los propietarios, además de la

destrucción, no solo de su fuente económica, sino también de su vivienda, poniendo sus vidas en juego y destruyendo la mayoría de sus bienes materiales.

Las Víctimas Concretas de Antímano Los procesos sociales tienen especificidades propias en cada comunidad. Para trabajar en Venezuela la problemática de procesos tales como reconciliación, generación de confianza y cultura de paz, se requiere tener información local. Observamos que algunos actores que buscan realizar esfuerzos de reconciliación y construcción de confianza intentan incorporar herramientas técnicas de modelos o instrumentos que, se observa, pueden ser de utilidad, pero que se pretenden utilizar con información opinática o con inferencia de datos de los procesos sobre la antigua Yugoslavia, los conflictos de Centroamérica, o el más cercano caso de Colombia. Pero Venezuela no tiene un proceso de odio basado en elementos religiosos y de más de 300 años, ni estamos en una guerra civil, ni en un proceso de guerrilla prolongado; por lo que se requiere buscar la información de base de este país. Nosotros queremos ser parte de los que aporten los datos requeridos para una aplicación adecuada de estos modelos, y con ello facilitar recomendaciones con mayores posibilidades de tener éxito. Pero en Venezuela tenemos víctimas. Los comerciantes saqueados de Antímano son víctimas concretas de la actual situación, son las personas y familias que vivieron y viven una tragedia personal. Es importante destacar este hecho, pues parece que no ha sido percibido por los actores sociales que quieren construir ciudadanía. Hablamos de tragedias personales debieron convertirse en una tragedia pública. Una tragedia personal pasa a ser pública cuando la sociedad en su conjunto, o las organizaciones de desarrollo social las ven como hechos que implican brindar apoyo a las víctimas. Se asume que no es un problema exclusivo de las víctimas particulares, sino un problema que debe ser resuelto con la participación del colectivo. Este hecho se hace mas relevante cuando la mayoría de las organizaciones hablan, por un lado, de la importancia de la reconciliación, cultura de la paz y construcción de confianza; pero por el otro, se observan escasas o nulas acciones para trabajar con las víctimas de tragedias concretas, que si no se intervienen adecuadamente dificultará en gran medida la reconciliación, la cultura de paz, y la construcción de confianza. El trabajo con las víctimas determinará en gran medida la situación futura que queremos construir. Objeto central de cualquiera de los procesos reconstrucción requiere trabajar con las víctimas, conociendo sus vivencias del hecho y sentando las bases para desarrollar mecanismos de apoyo que les permitan resolver la situación y lograr superar la tragedia vivida. Nuestro interés se centró entonces en comprender cuáles fueron las características de los procesos psicosociales vivenciados por los comerciantes saqueados, tanto a nivel individual como de pequeños grupos.

Método Para la consecución de nuestra meta se diseñaron dos etapas en la investigación. La primera fase, desde la vida cotidiana, realizando entrevistas a profundidad a algunas víctimas; y la segunda fase evaluando, en la población de comerciantes de Antímano, un conjunto de variables cuya escogencia se fundamentó en los hallazgos de las entrevistas.

Participantes Para la primera fase se escogieron cuatro comerciantes víctimas de los saqueos, con orígenes étnico-culturales diferentes (portugués, chino, palestino y venezolano), sin embargo la entrevista realizada al comerciante de origen chino debió ser eliminada de la muestra seleccionada, en tanto que las respuestas fueron parcas, siendo imposible desarrollar un dialogo fluido con el mismo. En la segunda fase se realizó un censo de los establecimientos comerciales del casco central de Antímano que totalizan 139 negocios. Se encuestaron 109 dueños, quienes accedieron a responder los instrumentos. De estos, 16 eran dueños de negocios fundados hace menos de un año y que no habían padecido los saqueos de abril del 2002, por lo cual no se incluyeron en la muestra. El análisis descriptivo de los negocios se realizó en base a los 93 restantes. Para los análisis inferenciales se excluyeron siete personas que no fueron saqueados en 2002, pero si en los años 1989 ó 1992, quedando así una muestra de 86 comerciantes, 37 víctimas de los saqueos y 49 testigos. Recolección de la Información En la primera fase la utilización de las entrevistas nos permitió profundizar en una situación concreta, la experiencia vivida por los comerciantes saqueados. La técnica de recolección de información fue la entrevista en profundidad que consiste en una conversación fluida entre el entrevistador y el entrevistado, dándole algunas pautas sobre el tema a tratar. Las mismas fueron registradas en grabaciones sonoras. Posteriormente se procedió a transcribir cada una de las entrevistas, tomando en cuenta un registro sistemático que se llevó paralelo a la recolección de la información, denominado “notas de campo”. Para cada entrevista se otorgaron rótulos a partir de los detalles percibidos, acciones, red de relaciones múltiples y complejas en un mundo de significados implícitos que se van haciendo explícitos con la aparición de los símbolos verbales, identificando los núcleos centrales significativos de la entrevista. En ese momento, se estuvo en condiciones de categorizar. A partir de la discusión del grupo de investigadores se realizó el análisis y se expusieron las ideas centrales de cada una de las entrevistas. De ésta manera, se llegó a conclusiones que nutrieron la investigación y dictaron la pauta para el desarrollo de la siguiente fase. Para la recolección de la información en la segunda fase se utilizó una multiescala de seis grados de acuerdo, cuyos reactivos estaban fraseados en formato tipo likert. Los instrumentos que constituyeron la misma fueron: Dos escalas especialmente construidas para el estudio, Adaptación Cognitiva (AC-Saqueos) y Necesidad de Justicia y, los instrumentos DISES (Morales de Romero, 1990), Resila (Colina y Esqueda , 2002) y la versión de Romero-García del Test de Orientación por la Vida de Sheier y Carver (1985), que evalúan Esperanza, Resiliencia y Optimismo Disposicional, respectivamente. El grado de religiosidad fue evaluado por autoreporte con un ítem único: Me considero profundamente religioso. Para efectos del procesamiento de datos los resultados de cada instrumento se convirtieron a escalas de 6 puntos. El análisis de datos se utilizó la prueba Chi-cuadrado para las variables categóricas y la prueba t de comparación de medias y el coeficiente r de Pearson para las variables continuas. Se utilizó un α ≤ 0.05.

Los Comercios de Antímano Los comercios en Antímano son empresas familiares de reciente constitución. La mayoría son propiedad del mismo fundador del negocio, o de sus hijos, o de otro familiar cercano (esposo, tío, primo). Esto evidencia que en el 98% de los negocios existe una estrecha vinculación entre familia y empresa.

Otro Familiar 20%

No Familiar 2%

Entrevistados 46%

Padre 32%

Son empresas en su mayoría gerenciadas por y propiedad de venezolanos inmigrantes; un 61% tiene esta condición. Cabe destacar que la mayoría de los venezolanos inmigrantes son hijos de padres que vinieron a Venezuela buscando mejores condiciones de vida.

Nieto 5% Migrantes 30%

Hijo 65%

La mayor parte de la migración que llegó a Venezuela fue originada por la situación de precariedad que se vivió en países aledaños al Mediterráneo debido a la postguerra. Cabe destacar la importante presencia de venezolanos originarios de Portugal en Antímano.

Otros 7% España 16%

Portugal 59%

Siria/Jordania 18%

Los Saqueos El 40% de los comercios de Antímano fueron objeto de saqueos en abril de 2002. A raíz de estos eventos, el 15% de los negocios fue vendido después de los saqueos, cifra que puede indicar poca disposición a la venta del local por parte de las víctimas de los saqueos, o poca disposición a comprar e iniciar un nuevo negocio por parte de otros empresarios dada la situación de los saqueos. También se observó que el banco de la localidad cerró y actualmente está en venta, del mismo modo la adquisición de un terreno para la construcción de una agencia de otro banco, se canceló. El 89% de todos los encuestados estuvo completamente en desacuerdo con la idea que los saqueadores actuaron por hambre, y el 80% estuvo completamente de acuerdo que estas cosas suceden por culpa de la política. Estos hallazgos manifiestan la percepción por parte de los comerciantes que los saqueos no estuvieron justificados por motivos socioeconómicos, sino políticos. Durante los saqueos, hubo más víctimas absolutas y relativas en los venezolanos inmigrantes que los venezolanos nacionales. Esta diferencia fue significativa estadísticamente hablando al 0.02 aplicando una prueba de hipótesis de chi cuadrado. Saqueos vs Origen Étnico %

Testigos Saqueados

Total % (f)

Nacionales

81

19

100 (36)

Inmigrantes

47

53

100 (57)

El apoyo gubernamental a las víctimas de los saqueos fue menor para los venezolanos inmigrantes. Esta diferencia es de igual manera significativa estadísticamente hablando al 0.02 aplicando una prueba de hipótesis de chi cuadrado. Apoyo Post-saqueos vs Origen Étnico %

Con Apoyo Sin Apoyo

Total % (f)

Nacionales

14

86

100 (7)

Inmigrantes

63

37

100 (30)

Las Historias Entre el dolor, la nostalgia y la incertidumbre Joao, de ascendencia portuguesa, nacido y criado en Caracas, cuenta con 42 años de edad y es el encargado de una empresa familiar. Fue una de las víctimas de los saqueos de abril de 2002. Como la mayoría, es hijo de europeos que emigraron a Latinoamérica a partir de la crisis generada en sus países de origen por efecto de la segunda guerra mundial. Viajeros que vieron en Venezuela un país atractivo para vivir, para invertir, consolidar su producción, y generar ingresos que redundaran en la manutención de su grupo familiar y en la conformación de un patrimonio propio. En tal sentido, expresa nuestro entrevistado: “Mis padres vinieron a hacer una vida nueva y empezar. A buscar un futuro, para hacer una vida pues, eso es igual que la gente que se va de aquí a otros países a buscar mejor calidad de vida pues.” Descendiente de la cultura europea, Joao, adquiere a través del proceso de enculturación, es decir, la forma a partir del cual se transmiten los hábitos cotidianos y los valores familiares y sociales de una generación a otra, la noción del trabajo como centro y sentido de su vida. Éste, aparece desde la infancia en función del individuo y la ejecución del mismo para alcanzar éxito personal y social. Tenemos pues que apegado a tales principios, manifiesta: “mis padres me enseñaron de que...para tener algo hay que trabajar pues, entonces... uno bueno, uno tenía su negocio atendido, tratando de ponerlo más bonito cada vez que se pueda”. A partir del espíritu de austeridad, una de las bases de la formación social y familiar del inmigrante, evidencia los elementos que constituyen la educación que recibió de sus padres, entre ellos figuran como prioritarios: el trabajo, los estudios, el ahorro y la vida exenta de lujos: “A nosotros nos dieron estudio y...bueno, necesitábamos vestir, él nos vestía pues, o sea no, fortuna no había, pero tampoco estábamos pasando necesidad extrema pues..., lujo poco. Poco lujo, nada más cubrir necesidades, es lo que había pues..., pero está bien pues, porque yo creo que eso, gracias a eso soy lo que soy pues, que todas las cosas que uno gane eh..., uno lo sepa apreciar pues, si tú te ganas un bolívar sudado, bueno yo trato de sacar ese bolívar, cuando realmente me haga falta pues..., no botarlo." Una experiencia de vida orientada hacia el trabajo y como expresión de éste la reinversión de los excedentes en su negocio, nuestro entrevistado describe con sumo dolor el saqueo del cual fue objeto: “lo del 11 de abril... bueno, nosotros..., cuando fue el problema, empezaron a matar gente, allá en el centro, uno más o menos se asustó pues, después ese mismo sábado siguiente, aquí

habían motorizados, como dando vueltas y vueltas y vueltas, entonces, empezaron a gritar: -‘saqueo, saqueo’, entonces la gente se metió toda para el negocio, toda asustada y entonces nosotros, por precaución cerramos pues, bueno y cada vez veíamos la cosa como más difícil así, peligrosa, entonces, los policías nos recomendaron que, que nos fuéramos... y, bueno y nos fuimos y entonces, por intermedio de algún vecino, nos llamaban por teléfono y nos dijeron que nos estaban saqueando el negocio”. El complejo mundo emocional humano se puso de manifiesto ante un evento de tal magnitud, que colocó en jaque la estabilidad económica y psicológica de los afectados. Se hace notorio en el testimonio del comerciante, oscilaciones emotivas que van desde la tristeza por lo perdido, el miedo ante la violencia sin límites, la rabia por la impunidad del hecho delictivo, hasta la incertidumbre ante el futuro venidero; Joao lo expresa de la siguiente manera: “Bueno, no es lo mismo empezar de cero, porque nosotros nos quedamos con todas las cuentas por pagar, no teníamos mercancía, el negocio estaba destrozado; no es lo mismo que empezar de nuevo, como un negocio nuevo, compramos la mercancía, compramos mobiliario, todo se debe pero se tiene. Nosotros no, nosotros quedamos... sin nada y con deudas, o sea, por eso digo que es menos cero. Tenemos que trabajar para pagar lo que se llevaron pues. Bueno vamos pagando poquito a poquito, las viejas vamos pagándolas de a poquito y las nuevas bueno las vamos pagando a medida que se van venciendo las facturas..., uno le compra a uno y después le paga a otro y después... así vamos pues... no sé como hacemos pero lo hacemos y es una situación difícil y mira uno se siente, es una situación de incertidumbre, uno no sabe ni que hacer a veces, a veces te levantas que no quieres... no quieres saber de nada, otras veces te levantas con fuerzas de trabajar y todo por cuestiones políticas pues, que uno de verdad...uno no se dedica a la política, uno se dedica es al trabajo pues, lo que le enseñaron a uno pues. Es que yo no puedo estar alegre. Yo creo que no soy el único; creo que mucha, mucha gente en este país está triste pues, sean de un partido político que sean...yo no quiero participar en ningunas cuestiones políticas”. El deseo de la estabilidad socio-económica que ofrecen ciudades europeas en la actualidad, como Madeira-Portugal, de donde es originario el padre de Joao, permite que éste haga una inevitable comparación con nuestro país: “Bueno, porque allá por lo menos lo poco que trabajas el estado te lo cuida y aquí lo que uno trabaja, de un día para otro te puedes quedar sin nada pues”. No obstante, se muestra muy agradecido por el apoyo que recibió de las empresas y los empresarios privados: “Los extremos son malos. Bueno, llamé a las compañías y les dije que si ellos me ayudaban a surtir el negocio y que las facturas que fueron del saqueo, si me daban facilidades para pagar. Entonces bueno, el 99% de las empresas me dijeron que si, entonces, todas me mandaron un poquito y bueno, y otras me dijeron paguen en seis meses, paguen un año, paga poco a poco. De repente, otros llegan y me dicen: -‘bueno si me debes un millón, me pagas setecientos’. Compartieron alguna deuda, pero muy pocos”. El resentimiento y la necesidad de venganza que surgen ante tales acontecimientos no tienen asidero en su discurso: “No me interesa saber quienes fueron los que saquearon, con eso no gano nada. Si, bueno es que yo lo que tengo es..., lástima de este país”. Se despide de la conversación con lágrimas, manifestando un profundo arraigo por Venezuela, la necesidad de reconstruir en el país."Bueno me gusta, este país me gusta porque primero que yo soy Venezolano y nací aquí y defiendo esta ciudad... pero si llega un momento en que tú no puedas estar aquí porque la delincuencia.., no es porque yo viva de la política, sino, oye yo tampoco quiero estar en un país que de un día para otro te maten. No sé... y vivir con esta zozobra, que si uno..., todo por ansias de poder. Yo lo que quiero es trabajar como a mi me enseñaron y disfrutar un poco de la

vida pues más nada, pero si en este..., si esto sigue así va a llegar un momento que..., uno no es porque quiera sino de repente tiene que aprovechar que su papá es de otro país y hacer vida en otro lado pues, pero yo prefiero que todo esto aquí se arregle..., antes de irme pues. Bueno porque yo soy Venezolano y me siento Venezolano pues." Ambivalencia entre el arraigo de identificación y la rabia por la tragedia. Abdul, es propietario de una tienda. De padre palestino, pero nacido en Caracas, cuenta con 36 años de edad, es casado con una mujer de origen jordano, con la cual procreó varios hijos. Actualmente se encuentra en un proceso de reconstrucción de su local comercial, el cual fue objeto de los actos vandálicos de abril, en la Parroquia Antímano, de la ciudad de Caracas. Profesa la religión musulmana. Para la tradición islámica, el tiempo no esta regido por ciclos sino por instantes. El instante es lo más importante. Apegado a ésta noción, y para referirse a los saqueos sufridos, Abdul adjudica los hechos a un designio divino: “sufrimos el primer saqueo que hubo, el segundo saqueo gracias a Dios no nos pasó nada y en éste, que hubo la tragedia, eso fue un ensañamiento y...bueno, son cosas de Dios y hay que darle gracias a Dios, seguimos en pie porque bueno ¿que vamos a hacer?, vivimos de esto, dependemos del negocio” La empresa que dirige, era parte del capital familiar, sin embargo, es el único miembro de su familia que aún permanece asentado y trabajando en la ciudad. Para hacer alusión a su padre, el cual falleció seis meses atrás para el momento de la realización de la entrevista, y a su familia de origen, sostiene: “nosotros vivimos en Amman, Jordania, mi papá se fue definitivo pues, que ya no quiso mas..., bueno ya era un señor mayor, quiso ir a vivir en su tierra, pasar su tiempo en su tierra, bueno y allá en la tierra de él pues, se fue y bueno me quedé yo de todos mis hermanos y eso, todos se fueron el único que se quedó aquí soy yo, mi esposa y mis hijos”. Trabaja para dejar garantizado el futuro de sus hijos, para legarles bienes materiales... Desde muy temprana edad se dedicó al trabajo comercial, como parte de la tradición familiar. El trabajo es asumido como un vehículo para alcanzar la prosperidad. También un signo de independencia. Justifica su arraigo a la tierra venezolana sustentado en razones de índole económica y emotiva. Ante la interrogante de cual ha sido el motivo por el cual no se ha ido del país, afirma: “Bueno ¡será que amo mucho a mi patria! (Risas)...já, pero en el sentido, mira será la costumbre, yo soy nacido aquí, criado aquí, estudié aquí, mis amistades, estoy en el ambiente, yo voy para otro país y en verdad me siento como un extranjero, no me hallo, pues, entonces, soy criollo pues, para decirlo así, como se dice aquí, no sé, me gusta mi país”. Y, respecto a lo económico, argumenta: “ Bueno de verdad, mira, sinceramente ahorita, después del saqueo, que ya empezamos a trabajar, vino el paro, ahorita yo aquí casi saco...de broma saco el gasto de lo que tengo que pagar, de mis hijos, mi comida, a veces no me alcanza...me veo forzado.. Y yo para trabajar...mira...la inseguridad que tenemos aquí es bárbara, si se me presentara la oportunidad, si a mi me dieran la oportunidad de salir de este país, yo saliera...”. Acorralado por la situación económica y por la inseguridad social, expresa un ferviente deseo por tener la oportunidad para marcharse del país. A su vez, los sentimientos de identidad y pertenencia a la tierra, generan en su interior estado de conflicto y ambivalencia. En tal sentido, asegura: “Yo soy venezolano, nacido aquí, en la Concepción Palacios, criado, todos mis

hijos son nacidos aquí, y por la situación, porque mira, trabajo no hay, seguridad no hay, no hay nada, uno no puede salir con sus muchachos, uno no puede comprarse un carro bueno, no puedes tener algo bueno, entonces ¿cómo uno vive en un país así?, cómo vives tu... la inseguridad, que tu sales con muchachos ¡cuidado!, ¡cuidado con el niño!, ¡cuidado con este!, porque no..la gente debe suponer: -‘éste tiene un negocio y debe tener real’, ¡mentira!, mira, problemas que uno de verdad, gasto mira, contabilidad e impuestos, cosas así, que ya no damos la base, el margen de ganancia es tan mínimo, que estamos perdiendo prácticamente, y te vuelvo a decir, que si a mi me dan la oportunidad y tuviera unos reales, yo me fuera...yo me fuera de Venezuela, lamentándolo mucho, es mi país y todo pero me fuera”. Su propuesta para salir de la crisis que atraviesa el país, se centra en un llamado a la unión, no de los poderes políticos, sino por el contrario del venezolano común, sobre la base del sentimiento de amor que, según él, debería existir hacia el mismo. “Tu te das una idea, cuando el paro, mucha gente se afectó, tanto los otros, mucha gente pues, que no estaban de acuerdo con el paro, y así lo que hacen es mas mal al país, porque no hacen un bien al país. Imagínate, si yo ahorita estoy trabajando y digo: -"no, me voy a parar porque no hay vida" pues, el país no esta...entonces se pone la cosa peor, pero no, no le buscan una solución un futuro: pa´lante, en vez de ir nosotros pa´lante, avanzar, estamos yendo pa´tras, lamentándolo mucho, es así la situación”. “La economía del país, mira, yo con tantos amigos que comento, comerciantes, importadores, eh, me dicen: -"mira, aquí, verdad, sinceramente ya no vale la pena ni trabajar", no se si echarle la culpa al gobierno, la oposición, o a lo mejor porque, ¿tu sabes lo que nos hace falta?, unirnos de verdad como venezolanos y no como políticos, porque eso es lo que nos falta, ¡unión de venezolanos!” A su vez, hace un llamado a los políticos y expresa cuales son sus sentimientos sobre la situación de otros extranjeros que han logrado marcharse del país: “envidia no siento!...para serte sincero, envidia no siento, el que se va es porque tiene sus reales, de repente tiene como trabajar en otra parte, no, eh, verdad a veces yo digo que es una cobardía de la persona, abandonar un sitio de su trabajo, tantos años, tanto esfuerzo y dejarlo por... Mira hay momentos que la situación económica del país, yo digo que es política, si aquí tanto la oposición, como el gobierno, se dejaran de la política y trabajaran por Venezuela, como ellos dicen que aman a Venezuela, mira aquí todo el mundo trabajara feliz, viviera feliz, tu tuvieras y yo tuviera, algo siempre se hiciera, pero mientras que se concentra en política”. El calificativo que utiliza para designar los hechos abril es el de “vandalismo”, diferenciándolo claramente de los actos delictivos cometidos por razones de pobreza. Es así como aseveró: “Mira, yo digo que si de verdad el pueblo tiene hambre, el pueblo tiene hambre, yo soy como decir, yo soy un comerciante de aquí de Antímano, se supone que si yo vivo en Antímano, no soy una persona multimillonaria porque, sino yo viviera en el este ¿por qué ellos no van a robar para el este, por ejemplo? ¿Por qué no van a saquear al este, los mercados grandes, las comidas? ¿Los depósitos de comida? No debería ser tampoco, porque mira, no importa que esa gente tengan todos los millones que tengan, la gente no tiene que quitarle eso, ya eso es voluntad de uno, mira, yo les quiero regalar mi comida, se las regalo, vamos a colaborar, vamos a colaborar, pero tu no me puedes obligar a mi a regalarte toda mi mercancía”. Las condiciones que exige, para pensar en la posibilidad de reconstruir su negocio y reinvertir en Venezuela son las siguientes: “Bueno para, construir mi negocio y empezar un negocio de verdad, como debe ser un negocio, primero habría que haber seguridad en el país, estabilidad política, la economía del país y que todo

ande como decir normal, pues, como antes. Que uno diga " no importa, yo voy a pedir un crédito de doscientos millones y lo voy a invertir, porque yo se que la situación, gracias a Dios en el país, esta marchando bien, la política, todo el mundo tiene real, trabajar". Finalmente, hace un llamado a los venezolanos para que se refugien en la fe en Dios, como única vía para la salida de la actual crisis: “Mira, yo les diría al pueblo, a los comerciantes venezolanos, que tengamos fe, que tengamos fe y… Hay que darle esperanza al pueblo Venezolano, y hay que comprender al pueblo que la culpa no es de ellos, es el mismo gobierno que lo está exprimiendo, la cuestión del trabajo, y vamos...vamos a seguir luchando pues, porque somos comerciantes” El sentido de vivir y la razón de ser: la familia. Simón, tiene 63 años, es venezolano por nacimiento, casado, tiene ocho hijos. Está a la cabeza de un negocio de su propiedad, ubicado en Antímano. Fue víctima de los saqueos de abril. A partir de la entrevista realizada, se remitió directamente a la familia cercana (esposa, hijos, hermanos), para luego, hablar de si mismo. Para el venezolano, la familia es eje y centro de significación, y dentro de ella, la figura materna. Tenemos pues que ésta institución familiar, emerge en el testimonio de Simón, como centro a partir del cual surgen todas sus demás relaciones, de cualquier índole que se trate. Todos los sucesos narrados, las referencias sobre los acontecimientos, las decisiones dentro del negocio, poseen un epicentro a partir del cual, un entramado relacional cobra vida y se expresa en el discurrir de la cotidianidad. Su reacción frente a las condiciones en las que quedó su negocio, luego del saqueo son de una tristeza profunda, que le impulsaría a tomar decisiones trágicas sobre su propia vida “Bueno yo prácticamente no...yo me fui y claro eso fue sábado, viernes, sábado , martes, lunes. ¿Cuándo llega, después? Uno piensa cosas malas (mira hacia abajo) eso es una cosa muy humana. Tirase un tiro, suicidarse, una cuestión uno queda en la calle...nada, pues, ni un año, entonces yo mismo no lo creo porque uno es cristiano dice no...Bueno poco a poco”. La madre y la religión cristiana, aparecen invocadas como razón para no suicidarse ante situaciones como la vivida. “era muy importante mi mamá...mi mamá me consultaba todo, mi mamá era la...el...este...la, el consejo...mas que todo de madre encima de una amiga, pues ¿no? hijo no hagas eso, hijo puedes hacer esto no? Uno se enriquecía con... la experiencia de mi mamá, mi madre es una mujer que siempre ella rezaba mucho, sobre todo a los difuntos, siempre la llamaban, su casa estaba siempre asuntos ...de santos pues, su fe.” Ante el planteamiento de considerar la posibilidad de marcharse del país, rotundamente contesta que no. Lo argumenta de la siguiente manera: “Si uno nació aquí, ¡como se va ir! hasta bonita es esa que tengo aquí, con que vas a vivir, con que vas a vivir y la edad de los muchachos, lo que pasa claro ah...eh...ha habido anhelos, pero esa no es la realidad, la realidad es luchar y corregir los factores. Bueno que se estabilice el país, que cónchale haya posibilidades, que la cosa mala se corrija, se dialoguen pues, se hable, no todo en la vida es perfecto (pausa larga).” A diferencia de los ascendientes de extranjeros entrevistados, el venezolano, por origen y por nacimiento, asume el trabajo como un sacrificio y a su vez, el producto de este, es para subsistir y para mantener mientras se viva, a la familia. “Realmente este es un negocio ya pa' casi los 45 años.. y realmente el deseo era uno superase porque realmente no es así profesional de gran manera para tener una, un ingreso para terminar de criar la familia, subsistir, vivir, pues, eso es a

grandes rasgos..la, lo importante, bueno en aquella época era mucho mejor, ahora se han presentado muchos problemas y esto prácticamente ya no es negocio, si no una subsistencia de negocio”. Por otro lado, ante los sucesos acaecidos, el Sr. Simón no señala, ni juzga a quienes efectuaron el saqueo y la destrucción, por el contrario, se refiere al evento como un desastre natural que no puede evitarse y que a aparece de manera sorpresiva. En tal sentido, expresa: Desastre natural exactamente, entonces está prevista esa contingencia con un buen seguro y el estado también tiene un seguro, bueno ese amigo mío que perdió el apartamento, en menos de 3, 6 meses ya tiene su apartamento nuevo y mejor que como estaba antes porque le respondió el seguro, yo no..esa experiencia no la pude, porque en esta oportunidad no estaba asegurado, porque en la otra oportunidad tuve un problema con el seguro, inclusive es un litigio judicial que tuve con el seguro, yo demandé a la compañía de seguros porque no me respondió la garantía que yo tenía en mi, en mi póliza para que respondiera del saqueo...el anterior el 4 de Febrero y 27 de febrero y gané la, la cuestión”. Su visión de país y la alternativa para solucionarlos es como sigue: “cuando tu tienes que desarrollar, mas bien un, un potencial industrial como en el caso por lo menos de Guayana, debemos fabricar ya el carro, el avión, el tractor aquí, porque tenemos materia prima, tenemos gente preparada y tenemos gente joven, eso si desarrolla un país, es lo que yo llamo tristeza, eh...indefensión que no veo que el país produce, avanza...”. Finalmente, aparece la relación, como el aspecto de su vida que da significado a todos los aspectos de su estructura de vida. En ese sentido, concluye: “Oye, el ser humano la primera es dialogar, saber conversar…oye yo no soy mas que tu, ni tu eres mas que yo, a lo mejor yo puedo aprender de ti, a lo mejor de mi no, a lo mejor yo puedo aprender mas de ti, la..eh..la, la interrelación del ser humano es muy importante, hay unos que estudian y se preparan y a lo mejor tiene un poquito mas de, de conocimiento, aunque yo no estoy de acuerdo mucho con esos conocimientos, porque es un conocimiento de una etapa, es decir de todo lo que ya se ha aprendido, debiera un conocimiento que revolucione los conocimientos que tienes aprendidos. Eso sería una etapa maravillosa y que lo hay aquí porque hay gente tanto, muchachas como muchachos que son maravillosos y una relación y un coeficiente de inteligencia maravilloso y no lo hemos aprovechado, ¿tu ves? estudian pa' que, pa ser concha, prácticamente como el caso del farmaceuta me dio pena como yo no se de eso, me dice pero perdóname mija pero tu estudiando farmacia para ser vendedora de medicinas en una farmacia?, cuando tu tienes un campo tan maravilloso que es la investigación y aquí hay bastante cosa que investigar y hacerle y producirla y romper esa patente de industria y comercio del lado internacional, que eso no es ninguna cuestión de lucha contra el imperialismo, ni nada de eso, eso es una etiqueta, lo importante es que nuestro país eche pa' lante, que sea mejor”. Convergencia de nacionalidades: Una misma tragedia. En los tres entrevistados, conseguimos un denominador común: todos fueron víctimas de los sucesos de abril. Víctimas de saqueos injustificados y de la destrucción bárbara de sus negocios y locales comerciales, testigos pasivos de la tragedia, atónitos, observaron los escombros a los que se redujeron décadas de trabajo, herencia y patrimonio familiar. Tristeza, rabia, depresión, angustia, miedo, desasosiego personal emergen en sus discursos como los sentimientos más vívidos experimentados por estos hombres, sus hijos y sus familias. Incertidumbre ante el futuro próximo. Y cuando se es partícipe de una tragedia de tal magnitud, no puede sino pensarse en el presente inmediato, el mañana traerá su propio mal.

Así pues, debatiéndose entre el sentimiento de arraigo, el amor por la tierra venezolana, la identificación con su gente, y la necesidad de optar por una salida lógica: la emigración, guardan la esperanza de que las condiciones socio-económicas mejoren, y de que la prosperidad vuelva a tocar sus puertas.

Superación de la situación: Los Procesos Una situación de tragedia, crisis o victimización está relacionada con eventos que causan daño o sufrimiento a personas; situaciones como la violencia y los desastres naturales están incluidas en la definición de victimización (Morales de Romero, 1990). La Adaptación Cognitiva es el proceso de recuperación psicológica de personas que han sido víctimas de eventos traumáticos; la teoría sostiene que cuando los individuos experimentan tragedias personales, responden con esfuerzos cognitivos adaptativos que pueden capacitarles para retornar o exceder sus niveles previos, y que estos esfuerzos se realizan mediante percepciones parciales de la realidad (ilusiones) que le permiten al individuo percibirse a sí mismo, al mundo y al futuro de manera más positiva de lo que la objetividad o realidad confirman Esto testimonia la capacidad de resistencia del espíritu humano (Taylor, Wood y Lichtman, 1983; Taylor 1991). La Adaptación Cognitiva supone el logro de un afrontamiento exitoso en las siguientes dimensiones: •

Búsqueda de Significado



Búsqueda de Dominio o Control



Recuperación de Autoestima

La Búsqueda de Significado de los infortunios de la vida puede ser importante en recuperar o mantener la salud física y mental, tanto en el momento de ocurrir el infortunio como años después. El generar la pregunta: ¿Por qué a mí? y darle respuesta, pudiera especularse como habilidad de colocar el incidente traumático en una vía o perspectiva filosófica influenciada por la capacidad de los individuos para enfrentar efectivamente los eventos. (Bulman y Wortman, 1977). Dada la particular agresividad de los saqueos de abril 2002, desvalijamiento y posterior incendio de los locales y hogares de algunos comerciantes, dicha experiencia puede ser caracterizada como traumática, y por tanto se espera que de pie a procesos de Adaptación Cognitiva. A lo largo de su recuperación la víctima procura darle un significado al evento en su vida, viendo su experiencia negativa como proveniente de una perspectiva de propósito o significativa (Silver, Boon y Stone, 1983). La Búsqueda de Dominio o Control es otro recurso psicológico para superar los eventos traumáticos y con ello disminuir la ocurrencia del hecho que originó la tragedia y a partir de allí evitar que se socave el sentido de control sobre la propia vida. La ganancia de un sentimiento de control sobre el evento traumático permite al individuo manejarlo o evitarlo a partir de su nueva ocurrencia. La Recuperación de la Autoestima es el tercer componente de la Adaptación Cognitiva. Cuando un evento adverso ocurre hay usualmente un declive precipitado en la autoestima, aunque el evento pueda ser legítimamente atribuido a fuerzas externas más allá del control del individuo como lo sucedido en Antímano. En este sentido el individuo intentará realizar la búsqueda de beneficios positivos a partir del evento y la realización de comparaciones sociales descendentes, ‘fue peor para mi’ o ascendentes con individuos menos afortunados, ‘fue peor para otros’ (Taylor, 1983). La mayoría de los individuos que han tenido que afrontar una experiencia traumática, con el transcurso del tiempo, acaban siendo capaces de decir que la

vida es tan buena o mejor que antes de lo ocurrido, dando esto lugar a la recuperación de la autoestima. Una de las variables asociadas a la restauración de la autoestima de la víctima es la retaliación contra el atacante (Miller, 2001); de hecho el fracaso en responder a la injusticia percibida puede disminuir a la víctima tanto ante sus propios ojos como ante los ojos de los demás (Vitmar, 2000; Felson, 1982; Pitt-Rivers, 1965), es por ello que incluimos la evaluación de la Necesidad de Justicia en el presente estudio. Ahora bien, tanto el proceso de ‘recobrarse’ como el requerimiento justicia pueden estar modulados por otros aspectos entre las cuales destacan Religiosidad, Esperanza, Resiliencia y Optimismo Disposicional, que a continuación describiremos. En cuanto a la Religiosidad, Koening (2000) ha referido que la práctica religiosa activa permite la superación de eventos adversos, y se manifiesta acompañada de emociones de satisfacción, esperanza y optimismo, siendo una variable predictora de participación comunitaria, es por ello que establecimos el grado en el que los participantes se percibían “profundamente religiosos”. La Esperanza es definida por Morales de Romero (1990) como la disposición motivacional, que puede ser activada en un momento determinado, y que está asociada a la creencia en la ocurrencia de un evento futuro deseado, el cual es evaluado por la persona como importante y posible, aunque incierto. De acuerdo a este modelo existen dos tipos, la Esperanza Activa referida como la creencia personal en que los resultados deseados ocurrirán si la persona actúa para obtenerlos, y la Esperanza Pasiva, esto es la creencia en que los eventos futuros deseados ocurrirán sin una acción personal particular. La Resiliencia es la capacidad que una persona puede desarrollar para reaccionar positivamente y sobreponerse a la adversidad o la crisis que vive, en un momento dado. Una escala desarrollada por Esqueda y Colina (2002) en muestras venezolanas para la medición de esta variable, evalúa cuatro dimensiones de esta capacidad. En primer lugar Competencia y Control Personal, referida a conocer y utilizar los recursos propios; Estabilidad Emocional, dada por la percepción de las relaciones entre los padres y de la propia relación con la figura paterna; Seguridad Afectiva: referida a la satisfacción con las relaciones, comunicación y apoyo familiar; y Fortaleza Física: relacionada con el hábito de realizar ejercicio corporales. El Optimismo Disposicional es una variable de personalidad referida a la expectativa global que las cosas buenas serán abundantes en el futuro y que las cosas malas serán escasas. Cuando las personas se cuestionan sobre los impedimentos para lograr las metas que han adoptado, los optimistas, contrariamente a los pesimistas, mantendrán sus esfuerzos para lograr la meta; de esta manera el optimismo se relaciona con la auto-regulación del comportamiento. Los resultados de las investigaciones previas muestran que esta variable está vinculada a resultados deseables, y particularmente a un afrontamiento activo y efectivo (Carver y Sheier, 1981; Carver, Weintraub y Sheier, 1986). A partir de las descripciones previas surgen dos preguntas ¿Existirán diferencias en los procesos descritos entre el grupo víctima de los saqueos y el que no fueron saqueados (grupo testigo)?, y ¿Cómo se relacionan las variables de estudio en estos grupos? Para responder a la primera pregunta se compararon los promedios de cada variable de acuerdo a la conformación de dos grupos (ver tabla 1), quienes nunca habían sido saqueados (testigos) (n = 49) y aquellos que fueron saqueados en Abril 2002 (n = 37). Se observaron diferencias entre los grupos en las variables Recuperación de la Autoestima (p. ≤ 0.03), donde el promedio del grupo de saqueados fue significativamente superior al grupo

testigo, y en Optimismo Disposicional (p. ≤ 0.01) en el cual los testigos mostraron un promedio estadísticamente superior al otro grupo. La diferencia de los grupos en Adaptación Cognitiva fue marginalmente significativa (p. ≥ 0.07) a favor del grupo de víctimas. Un análisis de los promedios de las subdimensiones de cada escala evidenció medias significativamente superiores en el grupo de saqueados en “Conductas y Esfuerzos Orientados al manejo de la situación" (p. ≤ 0.03) y “Construcción de Beneficios” (p. ≤ 0.01), pertenecientes a las dimensiones Búsqueda de Control y Recuperación de la Autoestima, respectivamente. Las diferencias encontradas evidencian que, a pesar de haber transcurrido un año de los saqueos, sus víctimas continúan en proceso de recuperación del evento, particularmente en relación a la aceptación de las pérdidas materiales, la valoración de la propia vida, y la manifestación de conductas concretas de protección como reforzar la seguridad de sus negocios. La crudeza de los saqueos aunada a la indefensión vivida por los comerciantes, debido a la ausencia de los cuerpos de seguridad del estado durante los eventos, pueden derivar en la percepción del medio como incontrolable e impredecible. En este orden de ideas emigrar pudiera ser uno de las últimos asideros del control personal sobre el ambiente, es por ello que incluimos en el instrumento la frase La manera de no volver a pasar por esto es irse de este país. Solo el 19.7% de los entrevistados estuvo de acuerdo con esta opción, 14.3% de testigos y 27% de saqueados (n.s.). Sin embargo como referimos en los resultados de la fase cualitativa, la idea está allí, lo difícil parece ser generar los recursos para concretarla. En cuanto a las diferencias en Optimismo Disposicional el grupo testigo obtuvo un promedio superior a los saqueados. El grupo de víctimas de los saqueos fue menos optimista en cuanto a esperar cosas buenas en tiempos de incertidumbre, y estuvo de acuerdo con que “Si algo malo puede sucederme, seguro que me sucederá”. Dado que el Optimismo pudiera estar afectado por factores culturales se compararon las medias de los venezolanos y los inmigrantes entre los grupos de saqueados y testigos, sin encontrar diferencias entre los mismos. De esta manera la discrepancia observada está efectivamente relacionada con la experiencia del saqueo, disminuyendo las expectativas positivas sobre el futuro en el grupo de víctimas. Las variables Adaptación Cognitiva y Religiosidad presentaron diferencias de significación marginal (p.≥ 0.07 y 0.08, respectivamente). Para el primer caso esta discrepancia refleja la divergencia de los grupos en cuanto a Recuperación de la Autoestima. Para el caso de Religiosidad, aunque ambos grupos obtuvieron promedios ubicados en grados de acuerdo, las víctimas de los saqueos se consideraron más religiosos que el grupo testigo. Ahora bien, ¿Cómo se relacionan las variables de estudio en estos grupos? (ver tabla 2). Las relaciones entre Adaptación Cognitiva y Resiliencia, en sus dimensiones Seguridad Afectiva, Estabilidad Emocional, solo se observaron en el grupo de víctimas. De acuerdo a los resultados obtenidos, la Seguridad Afectiva esto es, las experiencias positivas y la percepción de soporte afectivo por parte de la familia, favorece la confianza que se tiene sobre la propia capacidad para recuperarse. La Estabilidad Emocional, referida a experiencias adecuadas en las relaciones con el padre, facilita la construcción de beneficios a partir de los eventos, tales como sobreponerse a las pérdidas y valorar la propia vida. También en el grupo de víctimas, el Optimismo Disposicional estuvo relacionado con la Recuperación de la Autoestima; así los sujetos optimistas refirieron sentirse vinculados afectivamente al país, y formar parte de él.

En el grupo de testigos las personas con Esperanza Activa realizaron mayores esfuerzos por comprender los eventos sucedidos; en tanto que los comerciantes con altas puntuaciones en Esperanza Pasiva centraron el control en la fe y, consideraron ser profundamente religiosos. Para el grupo de víctimas Religiosidad fue la variable que tuvo mayor número de correlaciones, y a su vez las de mayor magnitud; estas se evidenciaron con Optimismo, Esperanza Pasiva, Necesidad de Justicia y todas las dimensiones de Resiliencia, a excepción de Seguridad Afectiva Curiosamente en este grupo las expectativas de control interno del comportamiento y el cuidado del cuerpo (como plataforma corporal de la recuperación), están significativamente relacionadas con Esperanza Pasiva y Religiosidad. La pérdida control sobre los eventos, que raya en la indefensión, parece llevar a este grupo a centrar su confianza en un último asidero: el poder divino. La tendencia que sugieren los resultados, en términos de proceso de reestructuración de la experiencia vivida, permiten deducir que las víctimas muestran un patrón actitudinal marcado por mayor búsqueda de control, mayores esfuerzos por recuperar la autoestima, mayor reconocimiento de seguridad afectiva, de estabilidad emocional y de fortaleza física, lo que conduce a la expresión de mayores capacidades resilientes, todo ello apoyado por mayor religiosidad. Estas fortalezas del grupo de víctimas les ha permitido desarrollar estrategias de afrontamiento dentro de un esquema social confuso que los empuja al uso de la esperanza pasiva (como estrategia protectora de la integridad psicológica) debido a la dificultad de creer en una justicia real y de encontrarle significado a la incertidumbre. Y es la incertidumbre vivida en la experiencia de saqueos la que, posiblemente, explica la diferencia sustancial entre testigos y víctimas. Los testigos (que no fueron saqueados) son los que encuentran recursos para ser optimistas, muy a pesar de que son las víctimas las que, de toda evidencia, muestran haber utilizado positivamente la adversidad para crecer psicológicamente hablando. A pesar del camino recorrido por las víctimas y testigos de los saqueos desde Abril de 2002, aún no se enderezan las cargas; la Justicia precisada vendrá, al menos por la vía divina.

A manera de conclusión: Línea de base para la construcción de confianza. •

Para poder desarrollar intervenciones dirigidas a la construcción de confianza, procesos de reconciliación y cultura de paz es indispensable trabajar con las víctimas del proceso.



En Venezuela los comerciantes de Antímano han vivido su tragedia de forma privada, y la sociedad y sus organizaciones no la han asumido como lo que fue: Una tragedia pública.



Víctimas y testigos perciben que la justicia por parte de las instituciones del estado es poco viable, y pueden estar desarrollando un proceso de indefensión. Los conflictos generados por los saqueos, desde lo psicológico hasta lo institucional permanecen sin resolver, entorpeciendo los procesos de reconciliación y construcción de confianza Es urgente el desarrollo de estrategias de intervención dirigidas a atender las necesidades de los involucrados, desde las psicológicas en términos de soportes terapéuticos que permitan a las víctimas elaborar sus vivencias y continuar construyendo sus vidas, hasta lo institucional donde los entes gubernamentales brinden seguridad política, económica y social a los venezolanos.



El proceso de Adaptación Cognitiva fue más intenso en la dimensión emocional, poniendo de manifiesto la necesidad que el abordaje psicológico esté dirigido prioritariamente al manejo de este componente.



La situación de incertidumbre actual generó mecanismos de control externo (esperanza pasiva y religiosidad) para proteger la integridad psicológica; sin embargo esto no favorece la inversión económica y humana requerida para la reconstrucción.



Las evidencias indican que hubo grupos más perjudicados que otros y que el apoyo brindado fue también desigual, siendo los venezolanos inmigrantes el grupo en desventaja. Este aspecto de xenofobia debe ser tomado en cuenta para los procesos de reconciliación y construcción de confianza.



La intervención inicial debe prioritariamente contribuir a devolverle al venezolano la sensación de controlabilidad y la capacidad de predicción sobre la sociedad en general y su entorno inmediato en particular.

Referencias Bibliográficas •

Bulman, J. y Wortman, M. (1977) en Morales de Romero, N (1990) Construyendo la Esperanza. Ediciones ROGYA, CA. Mérida.



Carver, SC; Sheier, MF (1981) Attention and Self-Regulation: A control theory approach to human behaviour. New York: Springer-Verlag.



Carver, SC; Weintraub, JK y Sheier, MF (1986) Coping with stress: Divergent strategies of optimists and pessimist. Journal of Personality and Social Psychology. 51, 1257-1264.



Colina, K; Esqueda-Torres, L (2002). El Concepto de Resiliencia: Una escala para su evaluación. Trabajo Especial de Grado de la Maestría en Psicología Clínica. Universidad Rafael Urdaneta. Maracaibo-Venezuela.



Felson, RB (1982) en Miller, DT (2001). Disrespect and the experience of injustice. Ann. Rev. Psychol. 52, 527-553.



Koening, S (2000) The importance of religious community to older adults. Gerontology Washington. 40(1): 112-115



Miller, DT (2001) Disrespect and the experience of injustice. Ann. Rev. Psychol. 52, 527-553.



Morales de Romero, N (1990) Construyendo la Esperanza. Ediciones ROGYA, CA. Mérida



Pitt-Rivers, J (1965) en Miller, DT (2001). Disrespect and the experience of injustice. Ann. Rev. Psychol. 52, 527-553.



Silver, P; Boon, R y Stone, G (1983) en Morales de Romero, N (1990) Construyendo la Esperanza. Ediciones ROGYA, CA. Mérida.



Taylor, SE (1983) Adjustment to threatening events: A theory of Cognitive Adaptation. American Psychologist, 38, 1161-1173.



Taylor, SE (1990) Health Psychology: The science and the field. American Psychologist, 45, 40-50.



Taylor, SE; Wood y Lichtman (1983) en Morales de Romero, N (1990) Construyendo la Esperanza. Ediciones ROGYA, CA. Mérida.

Anexo 1 Tabla 1. Comparaciones de medias para las variables de estudio de acuerdo a los grupos testigos y saqueados Testigos

Saqueados

Media ± D.E.

Media ± D.E.

Búsqueda de Significado

3,53 ± 1,12

3,36 ± 1,47

Búsqueda de Control

4,36 ± 0,65

4,51 ± 0,68

Recuperación de la Autoestima

4,15 ± 0,76

4,51 ± 0,76

Adaptación Cognitiva

4,15 ± 0,52

4,38 ± 0,62

Necesidad de Justicia

4,23 ± 0,84

3,91 ± 0,67

Religiosidad

4,80 ± 1,61

5,30 ± 1,08

Esperanza Activa

3,86 ± 0,78

3,76 ± 0,78

Esperanza Pasiva

4,47 ± 0,74

4,58 ± 0,76

Seguridad Afectiva

5,41 ± 1,01

5,62 ± 0,58

Estabilidad Emocional

4,92 ± 1,49

5,24 ± 1,20

Fortaleza Física

4,39 ± 1,39

4,56 ± 1,30

Competencia y Control Personal

5,62 ± 0,59

5,62 ± 0,44

Resiliencia

5,08 ± 0,75

5,26 ± 0,67

Orientación por la Vida

4,79 ± 0,62

4,44 ± 0,65

Variables

* p ≤ 0.05

0,432

0,59

0,53

0,391

* Solo se muestran las correlaciones ≥ 0.27 GV = Grupos de Víctimas de los saqueos (n = 37) GT = Grupo de Testigos (n = 49)

Religiosidad

0,597

0,444

0,469

0,471

GV

0,363

GT

0,375 0,42

GV

0,352

GT

0,305

0,293

0,46

0,453

GT

Competencia y Control Personal

0,444 -0,305

0,378

GV

Fortaleza Física

0,283

0,284

GT

Estabilidad Emocional

Necesidad de Justicia

0,4

0,316

0,307

0,348

0,367

GV

Seguridad Afectiva

Adaptación Cognitiva

Recuperación de Autoestima

Vinculación Afectiva

Comparaciones arriba/abajo

Construcción de Beneficios

Búsqueda de Control Total 0,327

0,271

Conductas de manejo de situación

-0,288

GT

Expectativas de Control

GV -0,41

GT

Esperanza Pasiva

0,415

GV

Esperanza Activa

Búsqueda de Significación

Variables

0,636

0,373

0,374

GV

GT

Resiliencia

0,29

0,348

GV

GT

Optimismo

Tabla 2.Matriz de Correlaciones* entre variables de estudio, de acuerdo a grupo de víctimas y testigos

Anexo 2

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