\"Las Remesas de expatriados atenúan el ciclo de \"stop\" de la Economía del Líbano\"

Las remesas de expatriados atenúan el ciclo de “stop” de la Economía del Líbano La desaceleración de la economía libanesa parece haber encontrado su atenuante con las remesas provenientes de exterior, las cuales traen esperanzas de fortalecimiento económico.

Por Abás Tanus Mafud* El desarrollo económico del Líbano atraviesa un ciclo recesivo o de “stop”, como consecuencia de diversos factores externos e internos: falta de autoridad presidencial; aumento del déficit fiscal; caída de los ingresos turísticos; reducción del comercio exterior (especialmente intrarregional) y el aumento de refugiados provenientes de Siria. En una entrevista reciente para la Cadena Reuters, Alain Hakim, Ministro de Economía y Comercio, declaró que “se espera un crecimiento de sólo 2 o 2.5 puntos del PBI para el 2015. Situación que preocupa a los sectores más importantes de la economía”. Sin embargo, no todos los indicadores son negativos y la esperanza de fortalecimiento económico parece haber encontrado un lugar en este entramado, según el informe del Banco Mundial, titulado “Migration and development brief 23”; las remesas de expatriados, experimentaron un crecimiento interanual del 1.6%, lo que representa el ingreso de 7.7 mil millones de dólares, aproximadamente el 17% del PBI.

Fuente: http://www.thebusinessyear.com

La importancia central de estas remesas radica en que con ellas se permite contrarrestar el efecto del déficit comercial estructural, intentando lograr estabilidad en la balanza por cuenta corriente. Por otra parte, con estos ingresos se podrá atenuar los efectos del ciclo recesivo y especialmente calmar la preocupación del sector más importante de la economía libanesa, el bancario; debido a que tendrán un soporte para su solvencia y continuar con la política de compra de bonos del Tesoro Libanés, contribuyendo a la existencia de una moneda fuerte, condición que le posibilitó al país aguantar las crisis políticas y económicas a nivel regional. Asimismo, se destacan en comparación con la tasa de inversión extranjera directa (IED), debido a que mientras esta última experimentó retrocesos y fluctuaciones desde el 2007 a la actualidad; las remesas atraviesan una etapa de crecimiento sostenido en los últimos cuatro años, basadas en los ingresos de empresarios y familias ricas de la diáspora libanesa. El Secretario General de la Asociación de Bancos en el Líbano (Asociation of Banks in Lebanon), Makram Sader, en una entrevista con Al-Monitor, sostuvo “que las remesas del Líbano dependerá principalmente de un estimado de 500 mil ciudadanos libaneses que han emigrado desde 2006”. Sin embargo, para la mejor utilización de estas remesas se requiere una solución al problema de la falta de la autoridad presidencial y así encarar políticas económicas del país. Por último, los sectores financieros y productivos, reclaman que estos ingresos sean utilizados para aumentar las inversiones en la industria y resolver problemas domésticos que obligan que la fuerza laboral joven deba emigrar, buscando mejores oportunidades en los países del Golfo o en Europa. *Abás Tanus Mafud es analista político internacional. Lic. en Ciencias Políticas por la Universidad Nacional de San Juan. Candidato a Magister en Economía y Política Internacionales de la Universidad de San Andrés.