LAS ENFERMEDADES ESPIRITUALES Y LA MEDICINA ANDINA

LAS ENFERMEDADES ESPIRITUALES Y LA MEDICINA ANDINA
En nuestra sociedad actual en donde confiamos nuestra salud corporal en la medicina científica que se desarrolla en nuestras universidades y siempre tratamos de basarnos en ella para cualquier situación de malestar, incluso a pesar de su precio y su negligencia en algunas situaciones, sin ponernos a pensar en nuestra salud espiritual la que no debe confundirse con la salud mental, porque cuando algo enferma o afecta al espíritu o alma, que es una base de nuestra vida, también afecta primer al cuerpo y luego a la mente o viceversa, que puede llevar a la muerte o la desgracia familiar. La parte de la sociedad que está familiarizado con el mundo espiritual se encuentra en la sociedad de la cultura andina, cuya sabiduría heredada desde sus antepasados es muy importante para ellos, y que es algo desconocido para nosotros, pero cuando pasamos por una situación rara o desconocida que está fuera de nuestro conocimiento y confianza, buscando una respuesta o solución que está fuera de nuestro entorno necesitamos la ayuda o los servicios de los llamados "brujitos" o "yatiris" andinos que resuelven nuestros problemas que parecen imposibles para la medicina científica o nuestro intelecto, los "brujitos" de forma fácil con sus propios métodos e ingredientes que son usados de forma extraña para nosotros, pero al final no es posible creer la rapidez de la recuperación de la persona afectada después del "ritual" o la sesión con el "brujito" andino, estos métodos que para personas extranjeras y ciudadanos de la alta sociedad es anticuada y confusa, porque confían más en la ciencia aplicada a la medicina y la tecnología, debido a que pueden pagarla; en cambio nosotros los de clase media y baja junto con los originarios de nuestro país conocemos la mejor forma de estar sanos de forma natural y económica.
Hay que entender que estas enfermedades que son muchas y pueden contraerse de diversas formas cuya razón puede ser confusa o imposible de creer, además es difícil de controlar por su naturaleza desconocida, a veces un mejoramiento puede significar el empeoramiento de la persona o el anuncio de su muerte, que para personas de mentes "cerradas" y que son muy racionales es una tortura porque no está dentro de sus experiencias, en cambio los que se adaptan muy rápido comprenden mejor la situación y la dominan, obteniendo una mejor percepción de la realidad y la vida.
Las enfermedades espirituales que rondan por todo el mundo son diversas y muy diferentes de una ciudad a otra, se podría decir que se los clasifica como naturales (que provienen de un lugar en específico) y los provocados (que son hechos por personas para personas, conocidas como maldiciones); dependiendo el caso y el tipo de gravedad de las enfermedades se la puede curar, debido a que algunas son casos menores y simples, en cambio existen otras de mayor gravedad y complejidad de resolver que pueden llevar a la muerte.
Ninguna persona está libre de enfermarse, todos estamos indefensos, no importa cuán sanos y fuertes estemos de igual manera no podemos evitar una enfermedad espiritual, porque no depende las defensas del cuerpo o una extrema religiosidad, sino estar abiertos a nuevas experiencias y conocimientos, además de una fuerte fé. La vida está llena de lugares buenos y personas buenas, pero también de lugares malos con horas "malas" que son capaces de dañar a personas de toda edad con un sinfín de enfermedades y dolores, en cambio las personas malas que van busca de personas sanas para dañarlas no importa quién sea o la edad que tenga, con tal de que llegue a su objetivo o su "pago"; hay que saber reconocer estos tipos de lugares y personas para evitar calamidades futuras.