La vida cotidiana de jóvenes mixtecos en Santa María California. Vivir a través de la discriminación

Share Embed


Descripción

La vida cotidiana de jóvenes mixtecos en Santa María California. Vivir a través de la discriminación

Magdalena Barros Nock CIESAS [email protected] Barros Nock, Magdalena, 2013, “La vida cotidiana de jóvenes mixtecos en Santa María California. Vivir a través de la discriminación.” En Alejandra Aquino, Pablo Rojas y Amarela Varela, (coords.), Desafiando Fronteras. Control de la Movilidad y experiencias migratorias en el contexto capitalista, Frontera Press Sur+Ediciones. Cap. 14 Resumen

El presente capitulo discute las diferentes formas en que las y los jóvenes de origen mixteco perciben y experimentan la discriminación en su vida cotidiana en la ciudad de Santa María, California, EU. Con sus propias palabras los jóvenes describen cómo hacen frente a la discriminación que viven día a día en la escuela y en la ciudad en la que viven. Con frases breves y claras demandan como un derecho: tener una familia unida, tener acceso a una educación, el poder ser diferentes y vivir en una ciudad segura.

La discriminación se presenta de diversas maneras, en diferentes espacios y tiempos, en la vida de las personas. En ocasiones los jóvenes sufren situaciones de discriminación sin darse cuenta de lo que esta pasando en ese momento, otros lo sienten claramente en cada momento de su vida, día a día. Situaciones que en un periodo de la vida pueden ser consideradas como acciones de rechazo, maltrato, grosería por parte de otros, poco a poco se van convirtiendo en formas constantes de marginación y discriminación. Lo que en la secundaria y preparatoria se muestra como el rechazo por parte de los compañeros,



201

profesores y las autoridades de la escuela, en unos años se puede convertir en la imposibilidad de entrar a la universidad o tener un trabajo digno, con un buen salario. El presente capitulo discute las diferentes formas en que las y los jóvenes de origen mixteco perciben y experimentan la discriminación en su vida cotidiana en la ciudad de Santa María, California, EU. Mi objetivo es presentar la opinión de los jóvenes mixtecos sobre la discriminación en su vida cotidiana y mostrar los diferentes espacios sociales en que se presenta. En este trabajo los jóvenes son vistos con capacidad de agencia y no sólo como “sujetos” a los procesos de integración y asimilación en el país de destino. Este capitulo se basa en los resultados de un taller de fotografía y narrativa que se llevó a cabo con chicas y chicos mixtecos en la ciudad de Santa María CA en 20111 en el cual participaron 9 jóvenes: 5 mujeres y 4 hombres, entre 13 y 18 años de edad.2 Así como en entrevistas realizadas a jóvenes, entre los 13 y 25 años de edad durante varias estancias de trabajo de campo en el valle agrícola de Santa María entre los años 2007 y 20113.

Discriminación, juventud e identidad Considero a la juventud como un proceso de transición hacia la adultez, en el cual intervienen sentimientos y decisiones individuales. En este proceso de transición los jóvenes viven múltiples experiencias. Ser joven se experimenta diferencialmente según el momento histórico y las construcciones sociales en que se desarrollan los individuos 1 Este taller formó parte de un proyecto colectivo coordinado por María Betely y Gonzalo Saraví titulado: Ciudadanía y adolescencia en la población indígena de México. Un estudio participativo”, financiado por UNICEF. 2 El taller de fotografía y narrativas se llevó a cabo en las oficinas del Centro de Recursos para Comunidades Indígenas. Estoy muy agradecida con Natalia Bautista por su ayuda, cooperación y amistad. 3 Se puede conocer más sobre el taller en: Voces de jóvenes indígenas. Adolescencias, Etnicidades y Ciudadanías en México, 2011, CIESAS y UNICEF, México. Todos los nombres han sido cambiados para respetar su privacidad.



202

(Saraví 2009). En las siguientes páginas los jóvenes nos narran cómo experimentan día a día actitudes racistas y veremos cómo estas experiencias han ido influyendo en la formación de su identidad. La identidad de los sujetos se va formando a través de las experiencias que experimenta en su vida cotidiana. La experiencia es la acción de los sujetos sobre si mismos, la cual está determinada por la interacción de sus identidades biológicas y culturales y en relación con su entorno social y cultural. Como menciona Falla, citando a Castells, “se construye en torno a la búsqueda infinita de la satisfacción de las necesidades y los deseos humanos” (Falla 2008:22; Castells 2001:40-41). Mi interés es presentar, desde la visión de los jóvenes, cómo viven, sienten y perciben la discriminación como jóvenes pertenecientes a la comunidad mixteca migrante. Mi objetivo es, en lo posible, darles a conocer, con las propias palabras de los jóvenes, lo que la discriminación es para ellos y cómo lo viven en su vida cotidiana. Sin embargo creo importante mencionar la definición de Menéndez quien nos ayuda a entender porqué la discriminación también existe entre grupos subalternos: … reducir el racismo a una sola sociedad, al papel del Estados y/o a las clases dominantes limita la comprensión de esta problemática, ya que si bien el racismo puede ser impulsado intencional o funcionalmente por determinados Estados y grupos dominantes, debe asumirse que dicho proceso conduce a que al menos una parte de los grupos subalternos asuma el racismo como parte de su propia identidad positiva o negativa y frecuentemente a nivel no conciente, o si se prefiere de inconciente cultural. Debemos reconocer que los racismos se desarrollan históricamente y que en el proceso histórico se van constituyendo las representaciones y practicas del conjunto de los sectores sociales y no solo de los sectores dominantes.



203

De tal manera que puedan gestarse representaciones y practicas racistas tanto en los grupos hegemónicos como subalternos. (Menéndez 2002: 193). La mayoría de los jóvenes entrevistados señalaron que las actitudes de discriminación que experimentaban provenían con más fuerza de parte de otros jóvenes mexicanos. Cómo Samuel comenta: “Yo conozco la discriminación desde México, la primaria la hice en una primaria bilingüe y todos éramos mixtecos, pero luego me enviaron a una escuela mixta y todos me decían ‘indio pata rajada’, allí me di cuenta que era considerado diferente a otros. Cuando llegue a Estados Unidos, me metieron a la High School (preparatoria), no sabía ingles y las clases me costaron mucho trabajo. Mis compañeros me decían a mi y a mi hermana que éramos indios brutos y que debíamos estar recogiendo fresas y no estudiando. Lo peor es que eran otros mexicanos los que nos decían eso, los gabachos ni se metían con nosotros.” (Entrevista Samuel 2, Santa María, 2011) Las discusiones que llevamos a cabo durante el taller me hicieron pensar en los procesos de integración de estos jóvenes y en cómo se va formando su identidad, y en las experiencias que están influyendo en su desarrollo (Falla 2008). Las y los jóvenes que habían nacido en Estados Unidos no reconocían con tanta claridad las situaciones y experiencias de discriminación como los jóvenes nacidos en México, quienes venían sintiendo las discriminación y el racismo desde pequeños. Los chicos nacidos en Estados Unidos sentían que eran actitudes de rechazo, agresión, violencia, pero no las identificaban como racismo y discriminación hacía ellos por ser parte de una comunidad indígena. Estas percepciones fueron cambiando a lo largo del taller.



204

La comunidad Mixteca en California, Estados Unidos Esta investigación se llevó a cabo en la ciudad de Santa María, la cual se asienta en el valle de Santa María ubicado en la Costa Central. En el año 2010 la población ascendía a 99,553 habitantes, 65,188 de ellos de origen mexicano, es decir 65.5 por ciento de la población (US Census Bureau 2010), la cual proviene principalmente de los estados de Jalisco, Michoacán, Guanajuato, Zacatecas y Oaxaca. Según el personal del consulado de México ubicado en la ciudad de Oxnard, actualmente 6 de cada 10 mexicanos que viven en la ciudad de Santa María provienen de Oaxaca, es decir, alrededor de 24,400 habitantes, convirtiéndose en una mayoría dentro del grupo de mexicanos en la ciudad (Entrevista telefónica con personal del consulado, febrero 2011). La migración de mixtecos a Santa María, CA se ha ido transformando a lo largo de las décadas. Hubo mixtecos, aunque pocos, que migraron con el programa bracero (1942 – 1964), sin embargo no es sino hasta los años ochenta que un numero mayor de mixtecos empiezan a integrarse a la fuerza laboral agrícola del valle de Santa María. Poco a poco empiezan a traer a sus familias y se establecen en el valle. Según narran las familias entrevistadas, en los años ochenta y los años noventa se encontraban en Santa María principalmente familias de la mixteca alta que venían siguiendo las cosechas por el territorio mexicano, llegaban a Baja California a la cosecha del tomate en San Quintín y se cruzaban hacia Santa María. “Todos nos conocíamos, nos habíamos visto en los diferentes estados recogiendo las cosechas” (Entrevista 3, 2011). Pero, al crecer el número de oaxaqueños en la ciudad, así como sus redes sociales, en la ultima década ya se encuentran familias que vienen directamente de Oaxaca a Santa María. En los años ochenta y noventa la mayoría de los mixtecos asentados en Santa María provenían de San Juan Mixtepec, también había indígenas triquis y en menor



205

número zapotecos originarios de Teotitlan del Valle (Ibarra, 2005). Ahora en día se encuentran también mixtecos de la mixteca baja y de la costa, triquis, zapotecos y oaxaqueños mestizos. Los trabajadores mixtecos se encuentran insertos en una de las producciones agrícolas capitalistas más productivas del mundo. El estado de California representa el mayor productor de algunos frutos, produce el 35% de los vegetales del país y 44% de las frutas enlatadas. La producción agrícola alcanzó en 2003 un ingreso de casi 28,000 millones de dólares (CDFA 2004). Hombres, mujeres y jóvenes mixtecos se han ido incorporando poco a poco, a través de las décadas, a esta agricultura capitalista. En los años ochenta y noventa los trabajadores mixtecos se encontraban principalmente en la fresa. Al no tener redes sociales hechas su posición laboral en el sector agrícola era en los puesto más bajos y peor pagados del valle de Santa María. Tanto informantes mixtecos como mestizos atestiguan que era a los mixtecos a quienes se les pagaban los peores salarios, por ser los nuevos, y por no hablar español o ingles. Poco a poco su situación en las empresas agrícolas empieza a mejorar. Se forman cuadrillas completas de mixtecos y para finales de los años noventa son reconocidos como excelentes trabajadores. La mayoría de los mixtecos trabajan como jornaleros agrícolas, de la fresa se han ido extendiendo a otros productos como la lechuga e incluso a la viña donde se pagan mejores salarios y encuentran trabajo durante casi todo el año. La industria agrícola les da trabajo por 8 o 9 meses al año, el resto del año tienen que vivir de sus ahorros, otros trabajos y los que tienen documentos, que son los menos, del seguro de desempleo. El trabajo en el campo es un trabajo mal pagado, que se lleva a cabo bajo condiciones extenuantes, entre insecticidas y plaguicidas, afectando y deteriorando su salud.



206

Poco a poco algunos mixtecos han podido dejar el trabajo agrícola e incorporarse a otras actividades económicas como asalariados en tiendas y supermercados o están probando su suerte como comerciantes o formando grupos musicales que tocan en las fiestas, bautizos y bodas. En la década pasada un número creciente de mixtecos pudo integrarse al sector de la construcción como albañiles, carpinteros, reparadores de techos, jardineros, etc, sin embargo éste ha sido uno de los sectores más afectados por la crisis económica y muchos de estos trabajadores tuvieron que regresar al campo. El trabajo de todos los miembros de la familia es muy importante, por lo general los hijos mayores ayudan en el cuidado de los hermanos menores. Durante el verano los hijos e hijas van a los campos a trabajar con sus padres. Si tienen algún negocio pequeño los hijos ayudan a sus padres. Aunque los jóvenes saben que su trabajo es necesario para el bienestar de la familia, éste en ocasiones se interpone en sus proyectos personales, siendo la educación el más importante, como nos dice Azucena: “Mi mamá tiene que viajar mucho por su trabajo y mi papá trabaja todo el día y yo por ser la mayor tengo que cuidar de mis hermanos y eso me quita mucho tiempo y no me deja estudiar y a veces me atraso en mis estudios.”(Taller Febrero – marzo 2011). Cuando los mixtecos empezaron a llegar al Valle de Santa María la mayoría vivía en galeras construidas en los ranchos donde habían vivido grupos de migrantes anteriores como los chinos, japoneses y mexicanos de otros estados. Así mismo se encontraron familias viviendo al aire libre en los campos agrícolas o en los parques de la ciudad. Fue hasta finales de los años ochenta y noventa que comienzan a rentar cuartos en la ciudad y eventualmente casas o trailas (casa remolque) entre varias familias. Es común encontrar 3 o 4 familias viviendo juntas en una casa de 2 o 3 recamaras, o un grupo de hombres rentando un departamento de una recamara.



207

La comunidad mixteca cuenta con varias organizaciones binacionales de apoyo a sus comunidades, es famosa en Santa María la organización de San Juan Mixtepec (Ibarra 2005), sin embargo existen varias más que se han ido creando a través de los años conforme han ido llegando

mixtecos de otros municipios. Es importante

mencionar que las comunidades ejercen su sistema de cargos, donde exigen que sus miembros regresen de Estados Unidos a cumplir con sus cargos, en ocasiones regresan con toda la familia. La ausencia de los varones en las comunidades ha llevado a que las mujeres participen activamente en representación de los esposos, padres o hermanos ausentes (Ibarra 2003; Besserer 1999). Para las y los jóvenes que migraron pequeños o que nacieron en Estados Unidos, el sistema de cargos parece más como parte de la historia de sus padres y que la de ellos. Como comenta un joven de 20 años cuando le pregunté si él regresaría a Mixtepec si lo llamaran a ejercer un cargo, él comento: “yo estoy orgulloso de ser mixteco, pero tengo mis planes, mis estudios. Yo nací en Ensenada y no conozco San Juan Mixtepec aunque sé que de allí somos. Sin embargo no me veo regresando a ejercer un cargo a un lugar que no conozco. Yo tengo mis planes de vida que quiero realizar” (Entrevista 20, 2011). La vida social entre la comunidad mixteca es cada vez más activa. En los años ochenta y noventa era común que los mixtecos esperaran a regresar a México para llevar a cabo sus festejos como bautizos, comuniones y bodas. Pero actualmente cada vez más mixtecos festejan sus rituales importantes en Estados Unidos, los cuales se planean con todo cuidado y a los cuales asisten mixtecos de todo California e incluso aquellos que viven en otros estados de la Unión Americana. También se llevan a cabo fiestas de la comunidad oaxaqueña en la ciudad. Por ejemplo desde 2007 se organiza cada año la fiesta de la Guelaguetza en el mes de junio. A llegado a tener tal



208

importancia esta fiesta que ya esta considerada dentro de las actividades anuales de la ciudad. A esta fiesta asisten mixtecos de toda California y mexicanos de otros estados y euro – americanos interesados en conocer la cultura oaxaqueña. La Guelaguetza de Santa María es especial pues su comité organizativo decidió que no se vendería alcohol durante la fiesta, decisión no sin oposición, pero que busca mejorar la imagen de la comunidad mixteca frente a la ciudad. Los jóvenes participan activamente en los grupos de baile folklóricos y musicales que se presentan durante el día.

Espacios de discriminación desde la visión de las y los jóvenes El tema central de discusión en el taller4 fue la discriminación, sus derechos y ciudadanía. Para todos sus derechos venían aparejados con obligaciones y en todas las discusiones siempre emergían una serie de propuestas de cómo mejorar su situación y la situación de su comunidad y la ciudad en la que vivían En las siguientes paginas transmitiré las ideas y opiniones que ellos consideraron más importantes.

Familias fracturadas Como se mencionó anteriormente, primero migraron los varones dejando atrás a sus familias y poco a poco, los que han podido, fueron trayendo a sus esposas. En un principio dejando a los hijos en México con los abuelos u otros familiares y en cuanto podían se traían al resto de la familia. Algunas familias aun tienen hijos mayores en México que no han podido traer a Estados Unidos. Esto ha creado familias donde hay jóvenes nacidos en México, indocumentados y otros nacidos en Estados Unidos con la ciudadanía americana. El endurecimiento de las leyes hacía los migrantes y los 4 Trabajamos dos meses con reuniones semanales de tres horas cada una. En la reuniones unimos juegos con discusiones.



209

sentimientos xenofóbicos hace la vida cada vez más difícil para estas familias y sus miembros. Los chicos comentan cómo, por un lado, gracias a los medios de comunicación se pueden comunicar con mayor frecuencia con su parientes en México, sin embargo, cada vez es más difícil para la familia viajar a México de vacaciones o a sus parientes visitarlos, causando grandes tristezas y periodos de depresión entre los miembros de la familia. Como comenta Lili: “Mi hermana mayor vive en México, ella es enfermera y no pudo venirse con nosotros y la extrañamos mucho. Hace muchos años que no la vemos.” (Entrevista Lili, Santa María, 2010) Los muchachos piensan que uno de sus derechos es tener una familia unida y sólo así podrían realmente ser felices. Alicia nos dice: “Yo extraño a mis abuelos y a mis tías, siento mucho que estemos separados por una frontera. Mi papá si va a verlos pero nosotros no podemos.” (Entrevista Alicia 2, Santa María, 2010). Los chicos comentan que el estar separados trae tristezas y provoca que existan periodos en que incluso se sientan enfermos de tristeza. No entienden porqué algunas familias si tienen el derecho estar unidas y ellos no.

El derecho a una educación Para la mayoría de los niños mixtecos entrar a la escuela es un paso difícil. Algunos llegan de Oaxaca sin hablar español y sin hablar ingles. Los chicos cuentan que en la escuela se sienten marginados no sólo por los profesores sino también por sus compañeros mexicanos, quienes los discriminan. El racismo en las escuelas parece ser un problemas grave. “Tu vida en la escuela se mueve de acuerdo al grupo étnico al que pertenezcas” comenta Juan (Entrevista Juan, Santa María, 2010) un joven mixteco: “A la hora de recreo, el patio se divide entre los mexicanos documentados (llamados los del norte) y los mexicanos indocumentados (llamados los del sur), los mixtecos, los

210

triquis, los zapotecos y otros sin grupo especifico”. Son años difíciles para los jóvenes en que empiezan a enfrentar la discriminación día a día por parte de sus compañeros, de los profesores y administradores de la escuela. En la escuela y en las calles de la ciudad los y las jóvenes constantemente escuchan comentarios como: “hay va un oaxaco” “los oaxacos son raros” “son chaparros y por eso trabajan la fresa”. Según los jóvenes la presencia de miembros de pandillas, la violencia y la circulación de drogas es un problema grave en la ciudad y se presenta sobre todo en las escuelas y zonas donde habita la población proveniente de Oaxaca. Uno de los problemas más graves a los que se están enfrentando las preparatorias es la deserción escolar de los estudiantes, entre las principales razones están las siguientes: necesidad de trabajar y embarazos; las familias con hijos indocumentados ven muy difícil poder financiar los estudios de sus hijos en la universidad. Incluso aquellos que tienen la ciudadanía no tienen la información necesaria sobre las becas existentes y las oportunidades que se ofrecen. Gemma nos dice: “Yo quisiera estudiar pero no hay apoyos para nosotros y la universidad es muy cara. Es elitista. A nosotros sólo nos quieren para trabajar en el campo” (Gemma, Taller febrero – marzo 2011). Raúl comenta: “En la escuela, yo quería tomar un curso que dan para prepararnos para entrar a la universidad y la profesora me dijo que mejor tomara el curso de jardinería. Yo pos no sabia nada y me fui a jardinería.” (Entrevista Raúl, Santa María, 2011).

Una ciudad insegura y sin lugares para recreación Los jóvenes pasan la mayor parte de su tiempo dentro de sus casas. Los padres no los dejan salir a la calle, por un lado tienen miedo que ICE (US Immigration and Custom Enforcement - La migra) se los pueda llevar y deportar, y por otro lado, tienen miedo que otros chicos miembros de pandillas los puedan atraer o les puedan hacer daño. La

211

mayoría de los chicos de familias migrantes pasan su niñez y juventud temprana dentro de las cuatro paredes de sus casas y sólo salen con los mayores. Sólo cuando los jóvenes son mayores pueden salir un poco por su barrio. Esto se ve reflejado en las fotos que presentaron, ya que los chicos sólo fotografiaron su casa, la parte de enfrente de su casa y sólo los mayores nos presentaron la ciudad por la que pueden transitar como mixtecos, es decir los callejones, las zonas industriales y zonas abandonadas. Como dice Rosa: “No nos podemos mover libremente por la ciudad, tenemos a veces miedo y nos sentimos como prisioneros”. (Taller febrero – marzo 2011). Por las calles oyen como los insultan y les dicen: “mira esa india pata rajada”. Juan nos platica que la gente espera que en las banquetas sean ellos los que se bajen de las banquetas para que los otros pasen, mostrando así que ellos son inferiores. Esto lo hacen los mexicanos de otros estados, Juan dice: “Esto significa que nuestros derechos no son respetados pues no nos podemos mover libremente por la ciudad, no nos respetan y se burlan porque somos diferentes y nos vemos diferentes, aunque mucha gente se parece a nosotros, tienen la piel igual de oscura y son igual de chaparros!” (Taller febrero – marzo 2011)

Comentarios Finales En estas páginas hemos podido visualizar brevemente el esbozo de nuevas identidades que la migración esta forjando en las nuevas generaciones; podemos ver jóvenes que crecen con sueños de crecimiento y mejora y otros con dolor reflejan la discriminación que viven día a día. La manera de combatir y hacer frente a la discriminación que viven es demandar que sus derechos sean honrados. Para ellos, en estos momentos de su vida, es decir, durante su juventud, sus derechos básicos son: el poder tener una familia unida donde una frontera no los divida; el derecho a ser diferentes donde sus orígenes como



212

parte de la nación Ñuu Savi sean respetados y aceptados; el derecho a una educación, donde los que quieran, puedan llegar y terminar los estudios universitarios; y el derecho a una ciudad segura donde puedan caminar libremente y puedan tener espacios de esparcimiento sin importar el grupo étnico al que pertenecen.

Referencias BESSERER, FEDERICO (1999) Moisés Cruz. Historia de un transmigrante, México D.F .Universidad Autónoma de Sinaloa, Universidad Autónoma Metropolitana- Iztapalapa. CASTELLS, MANUEL (2001) La era de la información, Economía y Sociedad y Cultura. Vol. 1: La Sociedad red. Vol. II: El poder de la identidad. Vol. III: Fin del Milenio. Siglo 21 (1.era edición en ingles: 1996 FALLA, RICARDO (2008) Migración trasnacional retornada Juventud indigena de zacualpa, Guatemala, Instituto Avancso, Editorial Universitaria, Universidad de San Carlos de Guatemala, Guatemala. IBARRA, YURIBI MAYEK (2003) Espacios alternativos de poder: la participación de las mujeres en una comunidad transnacional, tesis de licenciatura, Departamento de Antropología UAM-I, México.

IBARRA, YURIBI MAYEK (2005) ¿Construyendo morada en California? Migrantes mixtecos y la compra de casas, tesis de maestría, Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, México. MENÉNDEZ, EDUARDO (2002) La parte negada de la cultura: relativismo diferencias y racismo, Bellaterra, Barcelona. SARAVÍ, GONZALO (2009) Transiciones Vulnerables. Juventud, Desigualdad Social y Exclusión en México, México, CIESAS.



213

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.