La restauración de la Alhambra y la Corona (1830-1846)

Share Embed


Descripción

lbercoio

Comón Aznor

MIW

Boletín Museo e Institwto Camón Aznar

Seporofo

Lq restourqción de lo Alhombro (r 830 -18461

y lo Corono

por

Nieves Ponodero Peropodre

N."

loó . 20lo

Póginos 199 o 226

o

ibercoio Obrq Sociol

Lo restouroción de lo Alhombro y lo Corono (l 830- 18461 Nieves Ponodero Peropodre Doctoro en Historío del Arte. lJniversidod Complufense de Modrid

Resumen cctnservaci(rn y restalrraciírn cle la Alhambra fue Lln¿r constante pre()cr-rpaciítn cle lzr Coron¿r clurante l:rs primeras clécaclas clel siglo XIX. Con ese fin, en 11130 Fernanclc> VII concecliír una renta anual cle 500 clncackrs, per() la arttonomí¿t con qlre í.rctu¿rban ls gbernaclores clel Real Sitio hizo qtre las obras ilvLrnzLrran

L¿r

p()c() y rnal. A esta sittraciírn quiso poner fln la reina María Cristina c()n Lln¿t R.O. cle 5 cle agosto cle 1U40 en la qtre clisponía la inn-recliata restallracií>n clel palacio írrabe siguienclo un plan glol>al y bajo la clirecciírn cle ttn :.trquitccto cualificaclr¿1, rest¿lrlmciírn, arqr-ritectura, siglo XIX, José Cr Amackrr, José cle Maclrazo.

Abstroct Tbe restr¡rcttknt artrl presentc.ttic¡n o.f the Alhambra trere a constc.tnt concerrt.frtr tbe Spctrtisb C'routn clurirtg the.first clecacles ql'tbe 19th centurry. I.-or thctt purpose, in 18-10 King l"erncnt¿k¡ WI grc.tntecl ctn artrtuit-y qf 50O clttcotts, but the aukntr¡nt.y uitb uthich tbe gctuernors of'the Ro-yctl Plctce acterJ cctusecl the works to progress skrutl-y c.trtd bctdly. Queen Maríct. Cristinct triecl tct pttt c.t,n end to this sitttc¿tic¡n b.y enctcting the Rrlyal Orcler c¡f'5 Atttlust 184O, in u;hicb she orclerec{ tbc immecliate restorcttion c¡f'the Mr¡c¡rish pcr,lace uncler the martagement of'ct qualiliecl architect ontd c¿ comprehensiue plctn. Despite acluerse círcumstcntces thc,tt preucntecl this .from bein,q cJone in tbe stipulated time ancl mctnner, tbe e.ffLtrts of'tbe Intenclencia (]enerctl cJe lc.t Rectl Cc¿sc¿ -y Pcttrimr.¡nic¡ succeeclecl in presenting tbe unrJerl.yirtg spirit c¡f'tbe c,4fóresotid Ro.yc.tl OrrJer.

Key words Alhctmbra, restorc.ttir.¡n, c.trchitecture, 19tb centutry, .fctsé Contreras, F-rancisco Enrír¡uez F-errer, Saluc¿ck¡r AmacJor, ./osé de Mctdrazo.

La retir¿lda cle las tropas francesas de la Alharnbra deió tras sí tln m()nttmento Élravemente deteriorado, cuya ruina no haría sino acelerarse en años s¡cesivcts como c()nsecllencia, ft-rndamentalmente, cle la falta de recLlrs()s, la mala aclministración y la incuria cle la Cc>rona '. I)ltrante el gobierno cle Ignacio Montilla (1U13-1827) se elevaron a la Mayorclomía Mayor de la Real Casa continlrcts informes danclo cuenta clel penc)so estaclcr en qLle se encontrtba el Real Sitio y de la perentoria nece.siclacl cle

consegltir medios cron que atencler a las reparaciones más ttrgentes, sin q¡e ¿r mentrclo ni siquiera .se obtr-rviera respuesta 2. El propio Montilla se lamental)a, en 23 cle noviembre cle 7825, de nct halrer recibidcl contestación a cliversas propllestas que paru consegLlir fonclos había clirigiclo a la Mayorclomía el 74 de septiembre anterior, cctnclr-tyenclcl st-t exposición en términos dramáticcts: Porqr-re el Palacio Arabe, Señclr, se piercle, se arrttin , y no eS COmparable ese cletrimento de Vuestro Real Patrimonio con ningltna otra perdida 3. Sin embarg(), inesperaclamente, en enero de 1U30 Fernanclcl VII conceclía r-rna dotación cle 500 ducaclos anttales destinacla a las obras cle conservaci(rn clel Real Sitict y, por R.O. de 22 de junict clel mismo añcl, ttna lrrigada cle 50 confinaclos para trabtiar en ellas '. \ü7asTras este ll¿rmativct cambio cle actitucl podrían estar los escritos de hington hving denlrnciando el cleterioro del pzrlacio o motivos más prácticos, como la haltilitación cle la Alharnltra y clel Alcáz¿r cle Sevilla pLva alojamiento clel infante Francisco cle Par-rla qr-re poclría h¿rber llet. vaclo a intelenir al rnismo tiempo en ambos Reales Sitios Sin ernbargo, no existe constancia doclrmental de qr-re eI Alcázar clispr-rsiera cle Lrna renta anual fija antes cle \832, lo qr-re hace cluclar de la existencia

-

lhombro, entre lo conservoción y lo restou-

roción

(1905-l9l 5)>,

Cuodernos

restouroción monumentolde

lo

de

Arte

Alhombro:

de

lo

,pp.25-26; Rolníourz Domt¡1Go, J.M., lo (t8271927), Universidod de Gronodo, Gronodo,

llniversidod de Gronods,Xlv, 29-31 ,1977

de Reolsitio o

lvlonumento Nocional

1998, pp. 3l-32; Bmnlos Rozúr, J.M., , en Am¡nul, J.A., y Ar¡¡rn, A. (eds.), lo Alhombro. Lugor de lo memorio y eldiologo, Comores, Gronodo, 2008, pp. 29'37,y

6otzÁL¡z

del mismo outor, . Por otra parte, la primera ediciírn de los Cuentos de la Albambra es de 7832 y la estancia del Infante en Sevilla y Granacla tuvo lugar en el verano de ese mismo año. A.sí plles, aLrnque en 1832 se produjeran acontecimientos que atrajeron la atención sobre atnl>os monLlmentos, la dotación concedida en 1830 no puecle relacionarse clirectamente con ningr-rno de ellos. Hemos de pensar pues en motivos más generales, como la enorme popr-rlaridad de la Alhambra dentro y fuera de nuestras fionteras, así como el cambio de gusto experimentado en la Corte tras la llegada en 7829 de la joven reina María Cristina de Borltón, mltcho más afín a los icleales románticos que sLl espos().

A ello debemos

sLlmar, sin dr-rda, el celo demostrado por Francisc cle Sales Serna t', q.,e desde su nombramiento como gobernador de la Alhambra en abril de IB27 no dejó cle insistir en la necesidad cle que la Corona

proveyese los fondos necesarios para frenar el deterioro del Real Sitio, especialmente del palacto árabe. De hecho,la concesión de dicha renta a la Alhambra está directamente relacionada con una solicitud elevada por Serna en noviembre de 1829 y se efectuó .en consideración a su lauclable aplicación y decidido interés por la Restar-rración de ese glorioscr

monllmento de los Reyes de España,7. Gracias a ello, durante la tercera década del siglo se acometieron diversas obras encatninaclas a preservar el edificio de la ruina, pero sin que se plreda hablar de una verdadera restauración, no existiendo ni un plan director, ni un arquitecto competente al frente de las mismas 8. Mientras que en esos años los Reales Alcázares de Sevilla contaban c()n Lln arquitecto titulado e, eo Granada encontramos, a menudct simr-rltáneamente,

diversos maestros de obras carentes de la preparación necesaria paÍa afrctntar un trabajo tan c()mprometido. Entre ellos destacaron José cle Salas, José Contreras Osorio y Antonio López Lara. ó

Elcoronel de lnfonterío Froncisco de Soles Giménez de lo Serno fue nombrodo gobernodor del Reolsitio y Fortolezo de lo Alhom-

B2l, ocupondo ese puesto ho$o el 30 de iunio de I 835. Por R.0. de ó de iunio de I 84ó volvió .l854. o lo Alhombro con el corgo de comondonte, en el que se iubiló el 28 de ogosto de Murió en Gronodo el 2l de enero de lB5/ (AGB Penonol, C! 992/19 y Administrociones Potrimonioles, Gronodo, C! 12017 bro por R.0. de 25 de obril de I

/

8

Sobre los obros llevodos o cobo duronte el primer mondoto de Serno, véose AGP, Adminisfociones

10758/12 y

Potrimonioles, Gronodo, [.0

Archivo Histórico de lo Alhombro [AHA], Leg. 22B.Un resumen de los mismos puede verse en BmRlos Rozúr, J.M.,

rigen, pLles solo en estos terminos podrá transmitirse a la postericlacl el citado edificio 2e. En stt informe Parejo no clisimr-rlaba slr apoyo a Contreras, calificánclole y capaz de dirigir las obras con la clelica cleza y gllsto Arabe'. Coincidía en ello con la recornenclación clel visitaclo, g.n"ral respectcl a qlle 'ya qlle hay la sllerte de poseer un buen Maestro,, Se le clcttara cle ltn suelclo fijo a fin de qr-re, aclemás cle ocr-rparse cle las gbras cle restattraciírn, enseñara ¿t los operarios los preparativos clel estnco J0. cle 'inteligente



2/ 28 2e,

y

lo

lnforme de lo Contodurío fechodo el

R.0. de

l/

de enero de

l84l

l5

de diciembre de

lB40

(AGB Administrociones

(AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

C! j2014/1/

Contreros divide el presupue$o en dos portidos. En lo

Solo de los Dos Hermonos, con un coste t0t0l de

Potrimonio6r,

gt*o¿o¡: lZOlq/I3).

C.,i20l al6yAHA,

Leg. 228).

.

qrmero incluye lo re$ouroción del Potio de los Leones, el Solón de Emboiodores

98.i20 n.

Lo segundo se refiere o obros en el M¡rodoi¿, i¡n¿orro y en los solos de los Comos, de losl'linfos y de los Boños, osíc0m0 en lo llomodo r corrro en la fachada de la galería alta clel costado mericlional del Patio de los Arrayanes, qlle se cr-rbrió con Lln "techo

morisco de peinaceria,, .c()rr sus labores arabescas en las qr-re se hallab2n, ''*¡i.

r-rn

todo igr-rales

a

Sin emltarÍlo, r-rn durísimo comunicado publicado por el pintor italiano Gaspare Sensií" en el cliario madrileño El Espectador cle 17 de jr-rnio de 1842, obligó a Palacio a replantearse la forma en que se estaba llevandc> a cabo la restauraci(>n de la Alhambra. Sensi denr-rnciaba el raspaclo qlre había efectuado Contreras en algunas columnas del Patio de los Leones

con la pretensión de limpiarlas, qr-ritándoles precisarnente lo que tienen de mas venerable, de mas

solemne, y lo que forma parte cle su mérito que e¡i el sello que ha irnpreso el tiernpo con sll mano poderosa. Significativ¿rmente, sus reproches no se dirigen a Contreras, al que ni siqr-riera menciona, sino clirectamente al gobernador al que acLlsa de qr-re llevado .por Lln celo insensato e ignorante, se meta a disponer restaltraciones qlle son clestrucciones verdacleras, 50.

En re¿rliclad, las crític¿rs cle las que Sensi se hizo eco, amplificánclolas a esc¿rl¿l nacional y provocanclo la reacción de Palacio, habían sr-rrgiclo en 48 ae

AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo, El pintor

estobleció en

50

H

C.' 120.l4/13.

y litógrofo itoliono Gospore Sensi y Boldochi (Perugio I 794-Modrid I 880), t0mbién conocido como Perugino Sensi,

l825

en Modrid, donde desorrolló uno importonte correro como litógrofo.

.l842 Espectodor,lT de iunio de

(incluido en AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

i.'

,l2014/1ü.

se

el seno de la propia Acaclemia de Bellas Artes granadina. En la junta cle 5 cle jlrnio varios cle sus profesores -entre ellos Francisco Enríquezclenunciaron qlle algr-rnas cle las intelenciones efectuadas en la Alhambra suponían la progresiva desaparición del car¿rcter cle antigtieclacl qlle presentaba el edificio, lo cual constit¡ia su verclaclero merito para los amantes cle las artes sttstitltyenclo Llna cosa nlreba y haciendo desaparecer los preciosos fracmentos cle las miniaturas de or() y azvl y otros bellos colores que resultaban en los marmoles cle sus columnas y esquisita laceria de sr-ls techos, bajo el ruclo asperon o la pintura al oleo, haciendo a Ia vez percler a las columnas su bello torneadct, a los collarines de estas slrs fcrrmas, como asi mismo a las inscripciones y hoias de sgs capiteles, todo lo cr-ral se veia en el patio de los Leones y galeúa alta clel Patio del EstanqLle. Una comisión nombracla al efecto corroboró la veracidad de las denuncias, añacliendcl

innovaciones practicadas privaban al edificio del colorido alhagiieño y armonioso que formal-:ran dandoles distinto caracter y alterando slt esencia. En vista de ello, la Academia comisionó a José Fuster Mayorga para qlle se entrevistara con el gobernaclor y le solicitaru Ia paralización de las intervenciones más polémicas pero Parejcl, pese a mostrarse receptivo, no se avino a sllspencler el raspaclo de las columnas. Todavía el 15 cle jnnio -clos clías antes cle la public ación del comunicado de Sensi- el propio presiclente cle la Academia, Antonio Díaz del Corral, se dirigía por escritct al gobernador insistienclo en este asllnto, aunqLle siempre clentro cle ltn tono comecliclo y respetLloso plles' al fin y al cabo,Ia Acaclernia granaclina no tenía ninguna potestad sobre la Alhambra5r. qr-re las

Como al gobernaclor tampoco le interesaba enemistarse con la clocta instit¡ción, se avino finalmente a sllspender la limpieza de las columelescritodirigidoel15deiuniodelB42porAntonioDíozdelCorrol,ptesidentedelo el rospodo de los columnos e ol gobernodor de lo Alhombro, en el que ,onclrye insi$iendo en lo necesidod de cesor en que les comunique oquel bello ,

Boletín de lo

nas (por no merecer la aprobación de esa Corporación cLlyo c()ncepto

me es tan respetable', solicitando inch-rso qlle se nombtata Ltn comisión consr-rltiva que tutelara la ejecución de las obras, allnqlle sin dejar de apr-rntar que la crítica realizacla.tiene mas la tendencia de rivalidades entre los artistas que el buen celo por la perfección de las obr:ls', en clara alusión a la presumible parcialidacl de Enríquez52. El 26 cIe junio el presidente de la Acadernia notificaba al gobernador el nombramientcr pan la comisiírn consr-rltiv¿r que había solicitaclo de Ramírn Laínez y ¡Francisccr Enríqlrczt, dejando mr-ry claro que ni la Acaclemia ni la Comisión aceptan por esto responsaltiliclad de ninguna especie puesto que en este particular no tienen otra representación que como Lln cLlerpo consultivo qr-re presenta slls conocimientos en obsequio del pais sin otra intelenciírn en la materia de los trabajos 5r.

El asunto pctdría haber quedado asi zanjado, pero la incendiaria de-*, provocó alarma en nuncia del artista italiano, muy ligado a la Corte Palacio. Por orclen clel propio Agustín Argiielles, Tutor cle la reina, el clía 20 de jr-rnio se remitló al gobernador de la Alhambra el comttnicado cIe El Espectaclo4 conminándole a qLle -"a vuelta de Correct'- manifest¿rra

si las restauraciones que se estan ejecutando en esa Real Alhambra son dirigidas p()r personas de capacidad qlre puedan desvatt. necer la idea poco ventajosa qlle presenta el citado comttnicaclo s2

El

mole$or de Poreio onte los críticos es evidente, pues en su conte$oción o Díoz del Corrol seguío defendiendo el rospodo de

los columnos p0r0 que no desentonoron de los mórmoles nuevos (0n que se hobíon restourodo, negobo que con ello hubiero desoporecido ninguno policromío porque dichos , mostrobo irónico extroñezo onte lo ofirmoción de que lo techumbre de lo golerío del Potio de los Anoyones se hubiero cubierto con pinturo ol óleo -cuondo - y, con reloción o los yeseríos de dicho golerí0, osegurobo que solo se hobíon renovodo los que estobon en mol e$odo y los que foltobon (Bonodores de lo conte$oción de Poreio

o lo misivo de Díoz del [onol, AHA, Leg. 233-5). 53 5a

AHA, Leg. 233. Sensi coloboró como litógrofo en lo edición del primer cotólogo del Museo del Prodo. En

lB39

publicó, en coloboroción con el

orqueólogo froncés Achille Jubinol, el cotólogo de lo Reol Armerío, cuyo Museo se encorgó de orgonizor.

tt

AGB Admini$rociones Potrimonioles, Gronodo,

C.'l20la/1By

AHA, 1e9.228.

Cabe imaginarse el apuro de Parejo, que en su contestación recuerda que Contreras era arquitecto de la fortaleza con nombramiento real, corno asimisrno 1o era del Ayuntamiento de la ciudacl,

por 1o que se vendrá en conocimiento de que es Lln artista que goza reputacic)n y por ello no interrumpe sus proyectos, por rec()nocer en él capacidad y gusto en su profesion, y, sin mencionar en ningún momento las críticas de la Academia gtaneldina, ni el hecho de que él misrno ya se hr-rbiese cornprometido a paralizar la limpieza cIe las columnas, jr-rstifica esta iniciativa -qne atribr-rye a Contretas- a que "se hallaban con Llna especie cle sarro qr-re las hacia aparecer de piedra oscllra, siendo de esquisito mármol blanc', asegllrando con lógica aplastante que .el limpiar una pieza sucia, en ningun tiempo se ha tenido por demérito,. Además, el gobernador acLlsa directamente a Enríquez -al que califica, en oposición a Contreras, de .Arquitecto moderno en aquella capital,- de ser .la mano oculta'tras el comunicado de El Espectado4 pues .resentido por no habersele encargaclo de la direccion de dichas obras, ha tratado cle desacreditarlas,. Segúrn la versión de Parejo, Enríquez en Lln encuentro casual que tuvo con Contreras en el Palacio Arabe le echo en cara esta disposicion amenazandole con qLle insertaria comunicados en varios periodicos y segun los conceptos del estampado en el Espectador aparece ser sllyo por halrersele visto en relaciones muy estrechas con el estrangero qrte lc> firmí>

5('.

Sin dejar de lado la probable animadversión de Enríquez, no debemos olvidar qLle en las críticas de la Academia granadina estaban irnplicados varios de sns indivicluos, que fueron respaldadas por la propia institr-rción con su presidente al frente y que Gaspare Sensi era un artista rec()-

nocido, con criterio suficiente paru hablar en nombre propio. En su contestación, Parejo incluía un comLrnicado qlle pensaba remitir a El Espectador como respLlesta aI de Sensi y qlle nunca llegó a pr-rblicarse -probablemente porque no obtuviera el visto bueno de Palacioen el que además de tildar al italiano, entre otras cosas, de terco y fanático, expc>nía,.ay.r-rclado de los conocimientos del Director cle esta Obra,,

t'

AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

Leg. 233.

'216

t.' l20l a/n

V 12014/18. Un bonodor de este escrito se encuentro en AHA,

el ccrncepto de restatrración que animaba a ambos. Convencido cle la bonclacl cle su actr-ración, argllmentaba:

que modo se conserya Lln Edificio, para que sin derribar las partes pllramente ruinosas y reedificarlas, sufra el peso de los incansables años? El mundo instruido sabe qLle para este restablecimientc> es preciso clestruir y recomponer de nuevct bajo las mismas fcrrmas que nos presenta el original. ¿cle

Esta teoría cle destn-rir paÍa rehacer imitando no se limitaba a los mtivos decorativcts, sino que incluía también a los elements arquitectítnicos -entre ellos, las propias arquerías clel Patio cle los Leones que estr-rvieron ¿l pLlnto de ser clerribaclas al n() encontrarse r-rn métodct mejor cle "conserv¿lciÓn'-, atreviénclose el gobernador a preguntar ¿r.l .sabio artist¿r Sensi, si podía clecirle

si cabe otro modo de fortificar que no sea destn-ryendo lo antiguct cttanclo por rnil veces se han valiclo \/a para sll conservacion de ligamentos cle fierros, apuntalados y encaden¿rdos y alln no b¿rsta pa-ra contener zrquellas

57.

Las explicaciones clel gobernaclor no clebieron reslrltar muy cctnvincentes, ya qlle el 1 de julio su misiva fr-re remiticla al director del Museo clel Praclo, Jo.sé cle Madr^zo,parLr que clijese.lo que se le ofrezcaacerc cle est¿r c()ntest¿tci(rn,5s. Itesulta llamativo qlre no se encargase el informe al arqlri-

tecto mayor cle Palacio, a l¡ sazón Custodio Teocloro Moreno. Es ciertct que Moreno era ya mayor y estaba enfermo -en 1843 solicitaría la jubilación por motivs cle salnd-, pero en el verano cle 7842 se enc()ntrab¿r en Maclricl y, ztl parecer, en concliciones de manifestarse sctbre este asrtnto. De cr-ralquier formr, la elección cle Madrazo no parece casual, sobre toclc> p()rqLle se le clesigna en función cle sll carg() cle director clel Praclo y n() por slrs posibles conocimientos en la materia. Si tenem()s en crtent¿t qlle en matzo cle 184U se encargará a Valentín Carclerera cliseñar el plan cle intervenci(rn en el Alcázar cle Sevilla -no tantct como histctriaclcrr y erlrclito sino por sLl cargo cle pintor honorario cle cámar¡ que le perrnití¿r .sltstitt-tir al Director del Real Mr-rseo cle Pintura y Escultura en c¿rso cle enfermeclacl, alrsencia o vacante cle aqtrel'5e-, está clarct qlle en estos asLlntos se :lnteponía la opinión cle los pintc)res a la de los arquitect()s. sz

tu 5e

AGB Adminisfociones

Potrimonioles, Gr0n0d0,

AGB Admini$rociones Potrimonioles, Gronodo,

[nÁvrz GorzÁL¡2, M.R., op.

t.' l20l a/B C} 12014/13.

cit.,pp.79 y l47,noIo92.

y 12014/18.

Hay que tener en cuenta que en esasj fechas el problema cle la restauración cle eclificios históricos estaba aúrn muy lejos de plantearse entre lcrs arqtritectos españoles y qlle en Europa t estaban más famlhartzaclos qlle los arquitectcts con el problerna cle la intervención en la obra cle arte. De hech(), el propio Sensi era pintor y tenía r-rna visión pictórica de la arqr-ritectura qne valoraba como elemento fr-rndamental el "c()l()r, qr-re el pas() clel tiempcr otorga a los eclificios; por ello sus críticas se centraban exch-rsivamente en el raspaclo cle las coh-rmnas clel Patio cle los Leones y no en otras intervenciones cle caracter arquitectónico posiblemente más reprobables.

Mtclr¡zo, iguahnente pintor y aclemás c()mpañero y amigo cle Sensi ('0, no podíu sino comp:lrtir las opiniones del italiano. Pese ¿r n() c()n()cer la Alhambra .tn¿ts qLle por clibujos y gravaclos,, basa sr-r opinión en las prítcticas restaurad()ras qLle había observaclo dr-rrante los años que viviír en It¿rlia. Con slr habitual ponderación, don José se muestra cle ¿rcuerclo ccrn el gobernaclor en que al repatat un eclificio rlrino.scr

suele ser inclispensable sacrificar algr-rna parte pLlramente ornamental, reponienclola o acompañanclol¿r despues qlle el gran murl se h¿t evitaclo con el mismo caracter y clibr-rjos de aclornos que ¿rntes tenia, parLL lo cr-ral se saca antes un vaciado cle la parte qr-re se va a destruiÍ para que la que sustituya sea en lrn toclo igr-ral, pero cree qlle son las partes nllevas las qr-re cleben igr-ralarse con el coloriclo general del edificio y n() al contr:lrio, .sin buscar ()tras r¿rzones

porqlre la parte menor debe sllget¿lrse ¿l llt mayor, tanto en la fcrrma, c()m() en la pátina,,lrsi pues bajo este principio tocl¿r reparacic)n qLre se haga en la Alharnbra cleberá uniformarse en la tint¿r al tono local de su conjnnto. En el c¿rso concreto cle las colnmnas del Patio de los Leones no ve

l¿r

necesiclacl cle rasparlas,

ó0

Lo llegodo de Sensio Modrid en

cuodros

del

Rey

de kpoño el

lB25

Señor Don

se debió precisomente o su coloboroción como litógrofo enlo Colección lithogrúfico de ternondo Vll (1826), proyectodo y dirigido por José de Modrozo. Los corgos de Modrozo

como director del Reol E$0blecimiento Litogrófico y del Museo del Prodo fomentoron lo reloción entre ombos pintores. Es

conocido lo omistod de Sensi con Federico de Modrozo, quien en I

B/3

reolizó un retroto del orfi$o del que se conservo un esplén-

dido opunte en el Museo del Prodo (Dí¡2, J.1., tederko de lúodrozoy Kunlz Prodo, Modrid, 1994, p. 320). .

(lBl5-lB?4),

cotólogo de lo Exposición, Museo del

porqLle la pátina que imprime el tiernpo en los monumentos artísticos, lejos de ser un defecto, los da r-rn aspecto venerancl() qlle

presenta a la imajinación muchos recuerdos y mucha poesízr('r. Atrnqne cuanclo Madrazo ernitió su informe el gobernador ya haltía ordenado sr-rspender el raspado y devolver a las columnas su años() aspecto, su escrit() es cle gran importancia no sólo por permitirnos con()cer la opinión de una cle las personalidades artísticas más relevantes e inflr-ryentes del momento, sino también por ser la primera vez que desde Palacio se solicitaba la intervención cle un experto pan inlormar sobre la restauración cle la Alhambra. A partir cle entonces la Intenclencia General cle la Real Casa no sólo vigiló muy de cerca los asuntos presLlpuestarios, sino también los artísticos concernientes al histórico eclificio. La polémica acerca clel raspaclo de las columnas clel Patio de los Leones está lnlly lejos de poder enmarcarse en el gran debate sc>bre la restauración monllmental que será, sin dr-rda, uno de los grandes protagonistas de la arqr-ritectura decirnon(rnica. Sin embargo, lo temprano cle la fecha -especialmente tratánclose de España- y la diversidad cle actores implicados,, entre los que destaca el papel fr-rndamental desernpeñadr> por la prensa t'', le confieren Lln especial interés. En jr-rsticia es preciso reconocer que las intervenciones en eclificios rnedievales realizadas en España con anterioridad a 1842hallían sido mucho men()s respetuc>sas qLle las acometidas por Contreras en la Alhambra, donde tanto el arquitecto, colno el gobernador, como el Real Patrimonio tuviercrn siempre presente la obligatoriedacl de cc>nserv'¿r \/ perpetuar el carácter original y úrnico de sr-r arquitectura. AunqLle en rnodo alguno puecla considerarse al binomio Parejo-Contreras como pionero cle r-rna restanraciírn estilística auant Viollet, es ciefto qLle -aLln sin ninguna base te(rrica y con un deficiente conocimiento del estilo qr-re pretendían .rehacer,- los principios en qlle se basaba slr intervención no estaban muy alejaclos cle 6r

.l842,

t.' l20l a/18 ó2

el 5 de iulio de V un resumen del mismo en C.' 12014/13.

El informe de José de Modrozo, fechodo

Unos meses mús torde,

f/ fspecfodorse otribuío

se encuentro en AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

el mérito de hober pue$o freno olrospodo de los columnos de lo Alhombro. ,

f/

fspeclodor, n.o

5/1, 24 de febrero

.l843.

de

qr-te en la década cle los cuarenta se ponían en práctica en otros países ellropeos, sr-rscitando críticas similares, corn() las clirigiclas por Rtrskin a las restallraciones efectr-radas por Gianbattista Meduna en algunos cle los ('J. lc>s

principales lrronlllnentos venecianos En la propia Granacla, aun sin mencionar expresamente la Alhamlrra, un joven Jc>sé Castro y Orozco afirmaba en 1839 en la inauguración clel Museo Provincial: .preferibles son las rlrinas a prosaicas y disparatadas restauraciones: escitan las unas poéticos sentitnientos y desprecio las otras,,.''. ALroeue cle fbnna mLly elernental, con est¿.t polémica .se inaugnraba en España el del>ate entre los partidarios cle la .rest¿lllración estilística, y los particlarios cle la no-intervenciírn. Solventaclo este inciclente, la restanraci(rn continuí> chrrante los últimos lneses de IB42 y los primeros de 7843, según los correspondientes pre('5. sr-rpuestos fbrmados por Contreras Sin embargo, la compleja situación pcrlítica y la escasez econórnica llevó a qlle pr R.O. de 26 cle jtrnio cle IB43 se sllspencliese la consignación cle 10.000 reales rnensuales destinada a las obras de la Alharnbra, qLle :.r partir cle esa fech¿r qr-redaron prácticarnente ptralizaclAs ('('. El propio interventor clel Real Sitict, L¿rure¿ln() García, confirmaba en 7846 qne .clescle entonces qr-red¿lron paraclos tambien los trabajos y el Edificio en el estaclo cle cornpleto olviclcr y cloloroso abanclon() en qr-re hoy se encLlentr¿I, ('7. En rnarzc> de 7844 Contreras presental-¡¡ a Francisco cle Sales Serna, n()ltt-

ltraclo ctnancl¿lnte interino a la rnuerte cle ó3

Parejc>

('*,

Lrna Memoria resLl-

Aliguolque Sensi, Ruskin criticobo lo limpiezo y enlucido o los que Meduno hobío sometido o lo Bosílico de Son Morcos y el Polo-

cio Ducol, osí como el criterio restourodor que hobío empleodo, por eiemplo, en lo Co' d'0r0, consistente, según zos lo obro originol y sustituirlo por un0 vulgor imitoción (véose

rio, óa

principios

y n0m0s, [ótedro, Modrid, 1999, pp.

Cmtno v 0n0zc0,

J.,

20/

y

Got.tzÁLrz-VARAS,

1.,

é1,

en hocer pedo-

hnservoción de Bienes Culturoles. Teoríl, histo-

s.).

l,llemorio histórico sobre los Bellos Arles de Gronodo, Gronodo, 1839.

ós

Contreros presupuestó obros en lo Puerto de Elviro o fines de lB42 (AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo, C:12013/14 y AllA, Leg. 228). En enero de I 843 presentó el presupue$o de los intervenciones previstos p0r0 ese oñ0, lo es extraño pues qtre el com¿lnclante calificase ante la Intendencia el informe cle Amaclor colrto .difus¿r certificación, y que solicitara Lln¿t con-

signaciítn mensttal p^ra intervenir sin clemora en el Patio de los Lec>ne.s, attn sin plan ni presr-rpllesto clefinitivos, proceclienclo a .fortificarlo, cctn el objetct cle evitztr sLl clesplome 8s. I'ese a qlle Serna sugiere contar con la aqttiescencia clel intervent()r, éste no debía compartir su arriesgada iniciativa, pLtes en Lln nllevo escrito elev¿rdo a Palacio, L:lurezrno Garcí¿r insiste en qlle las obras sean dirigiclas por Lln arquitecto conocedor cle lrr arqnitectura lral->e, señalanclo como el más indicado paÍa ello ¿rl Arqr-ritecto Mayctr cle Palacio s('.

Ante

est¿r

clifícil sitr-ración, la Contach-rría cle la Real Casa, teniendc) en propio Amaclor .respecto cle los irrepara-

cltent¿t l¿ts observaciones clel

85 Escrito dirigido ol intendente generol de lo Reol [oso en

l4

de iulio de

c.'1201 4/21). uu

AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

C} 12014/13.

lS4ó

(AGP,

Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

bles perjr-ricios que la ignorancia ha causaclo en algr-rnas restaltraciones y los que poclrian ocasionarse si clel rnismo modo se continlltSefl, y c()n el fin cle .no esp()nerse ¿l qlre los males sigan y los fbndos se gzrsten inútilmente,,, torró la decisión cle

oir sobre este particlrlar al Arquitecto Mztyor cle Palacio [...], a fin de qr-re con la breveclad que el caso reclama cliga sll parecer sol>re el mejor meclio qr-re del>a adoptarse para la egecr-rcion cle las restaur¿rciones y rep¿rraciones cle mayor necesidacl y r-rrgencia y con arreglo a las v¿lses o terminos qLle el crea nas aclecltaclos s7. Narciso Pascr-ral y Colomer, nomlrraclo Arqr,ritecto Mayc>r cle Palacio en ener() cle 7844, era homl>re de fuerte carácter y cLlya capaciclzrcl profesional estaba, ya entonces, bien afirmacla. Su informenn, fechaclo el 7 de septiernltre cle 1846, rn:lrcará un plrnto cle inflexión en la rest¿tltraciítn cle la Alharnbra. Retomanclo el espíritr-l cle la R.O. cle agostc¡ cle 1U40, Colorner insiste en la necesiclacl cle contar con Lln proyectct general cle restaur¿rción elabraclo por Lln arqr-ritecto colnpetente, per() con la importante noveclacl cle qr-re éste clebería ser proptresto por el Arqtritectct M:.ryor cle Pal¿rcio y no, c()mo hasta entonces, p()t el comanclante clel Iteal Sitio, resetvzrnclo también al Arqr-ritecto Mayor la sr-rpervisión última cle los trabajos. Si bien en ¡iLl pllgna por el control de la restauraciírn la I'¡alanza pareciír

inclinarse en principio clel lado clel comandante Serna -qlle consigr-ri(r impctner a Salvaclor Amaclor como clirector cle las olrras 8e-, lo cierto es que el papel cle.sempeñaclo tantc> por Pascual y Colomer c()mo por sLl sLrces()r en el carfl(), l)omingo Gómez cle la Fuente, en la planificación y clesarrollo cle los trabajos fi-re de cruci¿tl importancia. A ellos se clebe en lo funclamental el plan cle restanraciírn impr-resto a p:lrtir cle entonces y a ellos debemos, sin cllrcla, la salvaciírn cle pitrtes esenciales del palurcicr árabe qr-re han llegaclo hast¿r nosotros gracias a la sensatez y prof'esionalidacl con que se enfrentaron a las ingerenci¿rs cle los comanclantes, la mecliocriclacl de los arqr-ritectos clirect()res y la egctlzrtría cle r-rn personaje singular, el célebre .rest¿trraclor aclc>rnista, Rafael Contreras.

ut uu

AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

C! 12014/13.

AGB Administrociones Potrimonioles, Gronodo,

C! 12014/21.

se Solvodor Amodor fue nombrodo director de los obros de fortificoción y reporoción de lo Alhombro en iunio de nistrociones Pofimonioles, Gronodo, t.' l 20l a/22 y 10932/ 4 y AHA, Leg. 22B).

l84/

(AGB Adm¡-

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.