La obesidad

Universidad Autónoma De Nuevo León Facultad De Organización Deportiva

La Obesidad la poca actividad física y la mala alimentación en niños, jóvenes y adultos.

Deporte y Política.

Nombre: Ana Paola Garibay Valdez Maestro: Zapopan Muela Matricula: 1552346 Grupo:105

Monterrey, N. L. A 2 de Noviembre del 2015.

La Obesidad, la poca actividad física y la mala alimentación en niños, jóvenes y adultos.

Resumen: En este trabajo se mostrara lo que es la obesidad, en qué consiste, porque afecta a poca actividad física, porque la gente se alimenta de una manera inadecuada y como se podría solucionar este tipo de problema de obesidad. Palabras clave: Obesidad, Mala alimentación, Falta de actividad física. Abstract: This paper will show what is obesity, what it is, because it affects a little physical activity, because people are inadequately fed and how it could solve this kind of problem of obesity. Keywords: Obesity, poor diet, lack of physical activity. Introducción: En este trabajo se hablara de lo que es la obesidad y la falta de actividad física en las personas, se podría decir que estamos hablando de los riesgos que traen estas enfermedades y el por qué se ocasionan este tipo de enfermedades, La causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es un desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas. A menudo los cambios en los hábitos de alimentación y actividad física son consecuencia de cambios ambientales y sociales asociados al desarrollo y de la falta de políticas de apoyo en sectores como la salud; agricultura; transporte; planeamiento urbano; medio ambiente; procesamiento, distribución y comercialización de alimentos, y educación. También se va a hablar sobre el por qué las personas no realizan actividad física y cuáles son los factores que impiden que no tengan un día para hacer actividad física. Planteamiento del Problema: Se puede decir que la obesidad y la mala alimentación son problemas que afectan en la salud de las personas, porque cuando llevas una mala alimentación de ahí viene la obesidad y otros problemas que causa el sobrepeso y eso con una mala condición física puede que sea mortal. Hipótesis: La mala alimentación y la obesidad son problemas muy comunes hoy en día. Objetivo General: Este trabajo se enfoca en la salud de las personas para que lleven una buena vida saludable.

Objetivos Particulares: 

Mala alimentación

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Obesidad

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Porque afecta la poca actividad física.

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Política Deportiva. Como solucionar este problema de alimentación en las personas

La mala alimentación. La mala alimentación se puede decir que es cuando las personas se alimentan de una manera inadecuada, ya que consumen lo que no les hace bien a su organismo y aun así lo seguimos consumiendo, sabiendo el daño que nos causa, Por ejemplo, la comida chatarra, la que venden en las calles. También se dice que la mala alimentación es a raíz de que nos mal pasamos y no comemos las veces al día que deben de ser, por no llevar una comida balanceada o por no comer frutas, verduras, etc. La mala alimentación influye en todo tipo de personas desde pequeño hasta ya mayor. Todos sabemos que uno de los males de la vida moderna es la mala alimentación. La mala alimentación en el ámbito deportivo no ayuda para nada porque se lleva a cabo una condición física elevada y si te alimentas de una manera inadecuada tendrías un rendimiento bajo debido a la mala alimentación que se lleva a cabo. Los hábitos alimenticios se han vuelto irregulares, con una mayor tendencia a comer mal, abusar de las comidas chatarras, dejar de lado los alimentos que son realmente saludables como frutas y verduras y todo ello acompañado de una vida sedentaria, por ello debemos tener en cuenta cuales son las consecuencias de una mala alimentación. Todos necesitamos consumir determinados tipos de alimentos y nutrientes que contribuyen a nuestra salud física y mental. El desbalance nutricional por exceso o falta de nutrientes afecta nuestro cuerpo de diferentes maneras generando trastornos de salud que pueden llegar a ser muy graves. Entender esto es fundamental antes de sufrir los riesgos de una mala alimentación, así como los efectos inmediatos de la salud. La mala alimentación en las personas adultas creo que afecta más que en una persona joven ya que no utilizamos los mismos nutrientes que un adulto, no tenemos las mismas necesidades, las mismas defensas y los mismos hábitos alimenticios de un joven a un adulto.

Una mala alimentación ocurre cuando tenemos un aporte insuficiente de uno o más nutrientes. Si una persona no satisface sus necesidades alimenticias diariamente, corre el riesgo de sufrir las consecuencias de una mala alimentación. “Algunos de los problemas que, según los estudiantes, causa una mala alimentación (anemia, colesterol, diabetes, etc.) aparecen en los diferentes niveles educativos, a pesar de que apenas son tratados en la instrucción, que habitualmente sí se ocupa repetidas veces de las enfermedades carenciales que no mencionan los alumnos.” (Membiela, P., & Cid, M. C. 1998, P.505). Comer es necesario para vivir, crecer, movernos, jugar, estudiar… Por lo que un niño que come poco se desarrollará peor, será menos fuerte, se cansará antes y le costará más estudiar, leer, concentrarse, etc..

La obesidad. Para mí la obesidad es un problema de salud muy fuerte en México ya que se dice que somos el primer país con mayores casos de obesidad, creo que este es uno de los problemas o enfermedades más fuertes y lamentablemente más comunes en nuestro país, y lo considero un problema bastante grave, por que como puede ser posible que nuestro país sea de los primeros lugares en estos casos. En la región latinoamericana unos 130 millones personas son víctima del sobrepeso y la obesidad. Es decir, casi un cuarto de la población. Es un estado patológico que se caracteriza por una acumulación anormal o excesiva de grasa en el cuerpo. Un exceso de alimentos puede producir obesidad, y esto viene con la consecuencia de provocar un infarto cardiaco, arteriosclerosis, hipertensión y otras enfermedades. La obesidad se ha más que doblado en todo el mundo, es una enfermedad crónica de origen multifactorial prevenible, la cual se caracteriza por la acumulación excesiva de grasa. La mayoría de la población mundial vive en países donde la obesidad y el sobrepeso cobran más vidas que la insuficiencia ponderal. La causa fundamental del sobrepeso y la obesidad es un desequilibrio energético entre calorías consumidas y gastadas. El sobrepeso y la obesidad, así como sus enfermedades no transmisibles asociadas, son en gran parte prevenibles. Para apoyar a las personas en el proceso de realizar elecciones, de modo que la opción más sencilla sea la más saludable en materia de alimentos y actividad física periódica, y en consecuencia

prevenir la obesidad, son fundamentales unas comunidades y unos entornos favorables. “La obesidad es una enfermedad crónica, compleja y multifactorial, que suele iniciarse en la infancia y la adolescencia, y que tiene su origen en una interacción genética y ambiental, siendo más importante la parte ambiental o conductual, que se establece por un desequilibrio entre la ingesta y el gasto energético.” (Majem, Barba, Bartrina, Rodrigo, Santana & Quintana, 2003, P.13) La obesidad infantil se asocia con una mayor probabilidad de obesidad, muerte prematura y discapacidad en la edad adulta. Pero además de estos mayores riesgos futuros, los niños obesos sufren dificultad respiratoria, mayor riesgo de fracturas e hipertensión, y presentan marcadores tempranos de enfermedad cardiovascular, resistencia a la insulina y efectos psicológicos. A menudo los cambios en los hábitos de alimentación y actividad física son consecuencia de cambios ambientales y sociales asociados al desarrollo y de la falta de políticas de apoyo en sectores como la salud; agricultura; transporte; planeamiento urbano; medio ambiente; procesamiento, distribución y comercialización de alimentos, y educación.

Por qué afecta la poca actividad física. Para mí la inactividad física está aumentando en algunos países y eso incrementa la carga de enfermedades no transmisibles y afecta la salud en general en todo el mundo. Las personas con un nivel insuficiente de inactividad física, tienen entre un 20 y 30 por ciento más de riesgo de muerte que las personas que realizan al menos 30 minutos de actividad física moderada a la mayoría de los días de la semana. El descenso de la actividad física se debe parcialmente a la inacción durante el tiempo de ocio y al sedentarismo en el trabajo, y en el hogar, de mismo modo, un aumento del uso de los modos pasivos de transporte también contribuye la inactividad física. Las razones por las cuales alunas personas no quieren realizar actividad física es por el miedo a la violencia o a la delincuencia que se vive hoy en día en las calles, por la mala calidad del aire y la contaminación, también por la falta de parques recreativos e instalaciones deportivas. La actividad física regular de intensidad moderada como caminar y montar en bicicleta o hacer deporte, tiene considerables beneficios para nuestra salud. En todas las edades los beneficios de la actividad física contrarrestan los posibles daños provocados, por ejemplo; por accidentes.

Realizar algún tipo de actividad física es mejor que no realizar ninguna. Volviéndonos más activos a lo largo del día de formas relevantes simples, podemos alcanzar fácilmente los niveles recomendados de actividad física. La actividad física regular y en niveles adecuados; mejora el estado muscular y cardiorrespiratorio, mejora la salud ósea y funcional; reduce el riesgo de hipertensión, cardiopatía coronaria, accidente cerebrovascular, diabetes, cáncer de mama, colon y depresión; reduce el riesgo de caídas y de fracturas vertebrales o de cadera y es fundamental para el equilibrio energético y el control de peso. La inactividad física se ha vuelto uno de los peores enemigos del bienestar físico en estos tiempos, cuando el 60% de la población mundial no realiza la actividad necesaria para mantener su cuerpo en condiciones aceptables. La OMS estima que la poca actividad física y el sedentarismo provocan al menos dos millones de muertes al año. Los niveles de inactividad física son elevados en prácticamente todos los países tanto desarrollados como en desarrollo. Más de la mitad de los adultos observa una actividad insuficiente en las grandes ciudades, la inactividad física es un problema aun mayor, la urbanización crea factores ambientales que desalientan a cualquiera. “Durante los últimos años estamos asistiendo a un resurgir de las relaciones entre la actividad física y la salud, debido a la creciente preocupación que han despertado los temas relacionados con la salud en la sociedad española de nuestros días. En ello ha jugado un papel fundamental el incremento de las enfermedades cardiovasculares, el apoyo que ha recibido la medicina preventiva para reducir los costes de la tradicional medicina curativa y la extensión de un concepto más abierto y dinámico de la salud que se ha orientado a la promoción de ambientes y estilos de vida saludables.” (Devís & Peiró, 1993, P.72)

Política deportiva, como solucionar este problema de alimentación en las personas. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad y el sobrepeso han alcanzado caracteres de epidemia a nivel mundial. Más de mil millones de personas adultas tienen sobrepeso y, de ellas, al menos 300 millones son obesos.

La preocupación por la prevalencia que la obesidad está adquiriendo a nivel mundial se debe a su asociación con las principales enfermedades crónicas de nuestro tiempo, como las enfermedades cardiovasculares, diabetes mellitus tipo 2, hipertensión arterial y ciertos tipos de cáncer. A mayor obesidad, mayores cifras de morbilidad y mortalidad por estas enfermedades. En el mundo mueren 57 millones de personas al año. Según el Informe sobre la salud en el mundo, 2002 1 el aumento de las enfermedades crónicas es el responsable de las dos terceras partes de estas muertes y del 46% de la morbilidad global. Estos porcentajes van en aumento, por lo que si no invertimos esta tendencia, en el año 2020 las enfermedades no transmisibles serán la causa del 73% de las defunciones y del 60% de la carga mundial de enfermedad. De los diez factores de riesgo identificados por la OMS como claves para el desarrollo de las enfermedades crónicas, cinco están estrechamente relacionados con la alimentación y el ejercicio físico. Además de la ya mencionada obesidad, se citan el sedentarismo, hipertensión arterial, hipercolesterolemia y consumo insuficiente de frutas y verduras. Como puede verse, la alimentación poco saludable y no practicar actividad física con regularidad son las principales causas de las enfermedades crónicas más importantes, y ambas son susceptibles de modificarse. En los adultos, la obesidad está asociada también a otras patologías, como las enfermedades respiratorias y la artrosis. Pero es en los niños y adolescentes donde el problema se hace más grave ya que, de no tomar medidas a tiempo sobre sus hábitos, hay una alta probabilidad de que el niño obeso se convierta en un adulto obeso. En la población más joven las enfermedades asociadas a la obesidad incluyen la hipertensión arterial, hiperinsulinemia, dislipemia, diabetes mellitus tipo 2, agravamiento de enfermedades respiratorias como el asma, así como problemas psicosociales. Todas las enfermedades descritas anteriormente acortan la vida. “La Organización Mundial de la Salud (OMS), señala que un proceso de educación para la salud es efectivo, cuando identifica en primer lugar las creencias, mitos y barreras presentes en la población a educar y con base en esta información se establecen los contenidos temáticos” (López-Amador, K. H., & Ocampo-Barrio, 2007, P.81) La obesidad puede llegar a reducir la esperanza de vida de una persona hasta en diez años. Además, suponen una elevada carga económica para los sistemas de salud. Por ejemplo, en nuestro país se calcula que los costes directos e indirectos asociados a la obesidad suponen un 7% del gasto sanitario total, lo que representa unos 2.500 millones de euros anuales. Por estas razones, puede afirmarse que las consecuencias de la obesidad hacen de esta enfermedad uno de los mayores retos de la salud pública para el siglo XXI.

Conclusión. Si mejora el ‘entorno alimentario’, tomaremos decisiones individuales más saludables que tendrán un impacto mucho mayor en la salud de la población. La opción sana debe convertirse en la opción más fácil, dicen. Es hora de terminar con los daños causados por la maquinaria de la industria de 'comida basura'. No se puede correr más rápido que una mala dieta.

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