La influencia de la crisis bajomedieval en la prostitución de la Península ibérica

En los inicios de la época medieval, la prostitución estuvo condenada por la Iglesia, por la sociedad y, si bien a nivel institucional no eran perseguidas como delincuentes, las prostitutas carecían de derechos. Sin embargo, esta situación fue evolucionando de modo que a finales de la Edad Media se produjo un cambio en la postura de la autoridades eclesiásticas y civiles en torno a la prostitución: la Iglesia comenzó a mostrar cierta permisividad por considerar que la prostitución era un mal menor y los reyes intervinieron en la creación de una serie de burdeles públicos en numerosos puntos de la Península. Este trabajo trata de exponer los cambios que vive la prostitución a finales de la Edad Media y su relación con la crisis bajomedieval, haciendo especial hincapié en las causas que llevan a que se establezcan mancebías públicas a lo largo de todo el territorio peninsular desde el siglo XIII en adelante. Además de centrarnos en el caso de los burdeles públicos, se menciona también la persistencia de la prostitución clandestina y se explica la persecución de la alcahuetería, negocio satélite de esta prostitución realizada al margen de la ley