La historia de los conceptos y su relación con la historia de la filosofía y la historia social
Descripción
Historiografía y teoría de la historia del pensamiento, la literatura y el arte, Madrid, Dyckinson, 2015, ISBN 978-84-9085-439-6, pp. 463-482,
interdisciplinariedad con la que sus propuestas y fundamentos metodológicos se han enfrentado al legado
La historia de los conceptos y su relación con
de problemas dejado por el pensamiento posthegeliano
la historia de la filosofía y la historia social
sobre la historia y la cultura; por otro, inseparable del
Antonio de Murcia Conesa
anterior, el empeño por describir las condiciones del
Universidad de Alicante
conocimiento histórico y definir sus posibles sujetos sobre el abigarrado fondo de giros epistemológicos
1. INTRODUCCIÓN La historia de los conceptos o Begriffsgeschichte
(materialista, filológico, lingüístico, hermenéutico,...) de las ciencias humanas, que la Begriffsgechichte ha cribado
tiene una presencia muy relevante desde hace décadas en
y
asimilado
con
especial
sentido
crítico.
Con
diferentes disciplinas históricas y diversos mundos
independencia de sus logros concretos, el horizonte de
académicos, más allá del ámbito universitario y editorial
expectativas que los mejores trabajos de historia de los
alemán en el que se acuñó. Si entre los historiadores del
conceptos han abierto a las ciencias humanas puede
derecho, la política o la ciencia su repercusión es
medirse por su capacidad para poner la comprensión
considerable, entre los filósofos ha sido objeto de una
histórica al servicio de una praxis racional y una
atención más profunda y continuada. Sin duda esa
interpretación general del pensamiento europeo. El hecho
atención es inseparable de la importante contribución de
de que la fundamentación de sus propuestas se haya
la historia conceptual a la historiografía filosófica. Pero
desplegado como un work in progress, al hilo de su
aún más obedece a dos virtudes que podemos llamar, no
producción investigadora y en el lento curso de
sin cierta precaución, “ilustradas”: por un lado, la radical
monumentales proyectos editoriales, ha sido interpretado
por los filósofos como una invitación a construir una
filósofo esa historia nunca fue de los conceptos, sino por
epistemología de la historia de los conceptos en el marco
conceptos2. Cuarta especie de lo que Hegel llamó
de una teoría de la acción política y de una redefinición
“historia reflexionada”, la historia por conceptos o
general de las humanidades1. Lejos de recoger ese envite,
historia especial se correspondería con una historia
en lo que sigue, y de acuerdo con los fines expositivos de
disciplinar cuyas ramas (la literatura, el derecho, el arte...)
este libro, nos aproximamos a la techne metodológica de
se integran en el género mayor de la historia filosófica
la Begriffsgeschichte atendiendo al proceso de formación
universal, donde la Idea, como manifestación del
de sus producciones más notables. La referencia a
Espíritu, es la representación conductora. De acuerdo con
algunos textos programáticos nos permitirá exponer
esto, la historia del espíritu cultivada por la escuela
sucintamente cuestiones relativas a su fundamentación
hegeliana siempre subordinó la historia conceptual a la
teórica y por tanto a su trasfondo filosófico.
historia de la idea. Esta actitud está encarnada paradigmáticamente en la obra del jurista y político
2. ALCANCE
Y LÍMITES DE LA HISTORIA CONCEPTUAL EN
Adam Müller, quien en sus escritos sobre la lógica de los contrarios y, sobre todo, al exponer su concepción del
LA HISTORIOGRAFÍA FILOSÓFICA.
expresión
Estado atribuyó a la Idea una organización morfológica
Begriffsgeschichte se inicia con las Lecciones sobre
viva, cuya potencia productiva sería la antítesis del
filosofía de la historia de Hegel. Pero en la obra del
concepto o Begriff: un producto meramente teórico,
La
historia
moderna
de
la
1
Cf. Villacañas, José Luis y Oncina, Faustino, «Introducción» a R. Koselleck, Hans-Georg Gadamer, Historia y hermenéutica, Barcelona, Paidós, 1997; Villacañas, J.L., «Histórica, historia social e historia de los conceptos políticos», en Res Publica. Revista de filosofía política 11-12, 2003, págs. 69-94.
2
Cf. P. Aullón de Haro, «Reflexiones sobre el concepto histórico de la Literatura y el Arte», en Aullón de Haro (ed.), Teoría de la historia de la literatura y el arte, Teoría / Crítica, nº1, Universidad de Alicante, 1994, pp. 21-23-
muerto, incapaz de aprehender el devenir vital de los
proyecto la proporciona la obra de referencia contra la
sistemas humanos y útil sólo para quienes clasifican la
que estaba concebido: el influyente Diccionario de
realidad, y en particular la realidad política, desde una
conceptos filosóficos de Rudolf Eisler de 1899 cuya
estéril lógica mecanicista de causas y efectos3.
cuarta y última edición se editó entre 1927 y 1930, años
La constitución en el siglo XX de la historia de los
decisivos, entre otras cosas, para el desarrollo de las
conceptos como una metodología que asocia la
ciencias humanas de Alemania y Europa. La difusión del
comprensión histórica al estudio de las transformaciones
diccionario de Eisler suponía el triunfo de un modelo
semánticas, fue en parte una respuesta a estas
neokantiano para las ciencias del espíritu no sólo por su
interpretaciones totalizadoras de la historia, de las que
rigor terminológico, sino por la exigencia de cientificidad
Wilhelm Dilthey no terminó de alejarse. No obstante, la
importada de las disciplinas positivas cuyo cumplimiento
imagen diltheyana del mundo histórico está detrás de
se esperaba que erradicase las confusiones lógicas del
quien se considera el artífice de la Begriffsgeschichte
discurso filosófico. Para un epígono de Dilthey como
como disciplina institucionalizada: el filósofo Erich
Rothacker resultaba intolerable la escasa atención que el
Rothacker. En efecto, este pionero de las ciencias de la
modelo conceptual de Eisler prestaba a la complejidad
cultura alemanas del siglo XX, , concibió el propósito de
histórica de sus objetos. Eisler, formado en la psicología
construir una historia de la filosofía de acuerdo con el
de Wundt, había insistido desde el prólogo del
programa diltheyano de las Weltanschauungen: una
Diccionario en el carácter histórico de su tratamiento
exposición de los conceptos filosóficos en el marco de
conceptual —opuesto a la exposición psicologista de las
una historia de las concepciones del mundo. La clave del
ideas filosóficas— así como en la necesidad de abordar
3
conceptos liminares acordes con la interdisciplinariedad
Adam Müller, Elementos de política (1809), trad. de E. Ímaz, Madrid, Revista de Occidente, 1935.
que la tarea requería. Pero, a pesar de sobreponer la
la raza y el espíritu del pueblo serían “el motor último de
perspectiva histórico conceptual (begriffsgeschichtlich) a
la vida histórica”4. Afortunadamente para este desarrollo,
la descriptivo conceptual (begriffschriftlisch) —cercana a
el curso de los acontecimientos históricos hizo que
una historia intemporal de la ciencia como la que
Rothacker abandonase estas elucubraciones de sesgo
complacía al lógico Frege— sus recorridos sometían la
nacionalsocialista y volcase su trabajo en el propósito de
comprensión del
y sobre todo
recuperar el mundo histórico y el mundo de la vida para
terminológico del concepto a la comprensión de sus
la historiografía filosófica y las ciencias de la cultura. La
determinaciones lógicas. En cualquier caso, los esfuerzos
tenacidad del objetivo se mantuvo bien entrada la
de Eisler alentaron las posteriores incursiones de la
posguerra en el Archivo para la historia de los conceptos
metodología histórico-conceptual en la historiografía
que el propio Rothacker fundó, a instancias de la
filosófica, al mismo tiempo que encauzaron el desarrollo
Academia de las Ciencias y la Literatura de Mainz, en
ulterior de la Begriffsgeschichte bajo el dispositivo
1955, como metodológica piedra angular de su ansiado
lexicográfico
el
nuevo diccionario histórico de filosofía. La revista
Wörterbuch, que privilegia la exposición alfabética y
sobrevivió al autor y ha llegado hasta nuestros días,
hasta cierto punto acumulativa de los argumentos.
ampliando
Volveremos más adelante a este extremo.
publicación
y
cambio histórico
enciclopédico
del
diccionario,
Es innegable la importancia que para el desarrollo
sus de
objetivos referencia
y convirtiéndose para
las
en
la
aplicaciones,
ciertamente dispares, de la historia conceptual.
de la historia conceptual tuvo la constancia de Rothacker en su proyecto antieisleriano, incluso en los años que dedicó intensamente una filosofía de la historia en la que
4
Erich Rothacker, Geschichtesphilosophie, en Baeumler, Schröter, Handbuch der Philosophie, Berlin, 1934, pp. 3-150, trad. española de H. Gómez, Madrid, Pegaso, 1951.
El proyecto inicial de Rothacker, la realización de
Las evidentes distancias frente al léxico precedente
una historia de los conceptos filosóficos, se llevó
provenían de los propios cambios experimentados por la
finalmente a cabo, aunque de manera muy distinta a la
filosofía en su relación con las ciencias naturales y
que el pionero había imaginado. Los responsables fueron
humanas desde 1889, fecha de la primera edición del
otros colaboradores del Archiv, bajo la dirección de
venerable diccionario. Pero tales cambios, a juicio de los
Joachim Ritter. Anunciado en la revista en 1967, dos años
editores, tampoco eran compatibles con los esquemas
después de la muerte de Rothacker, el primero de los
histórico conceptuales de Rothacker. En efecto, aunque
trece volúmenes del Diccionario histórico de Filosofía
un somero recorrido por los voluminosos tomos del
(Historisches Wörterbuch der Philosophie, en adelante
HWPh deja reconocer en ella la ambiciosa aspiración de
HWPh)5 apareció en 1971; el último fue publicado en
sus precedentes por recoger los conceptos fundamentales
2007, treinta y seis años después. Los más de tres mil
de las ciencias del espíritu y de la cultura, la selección y
seiscientos conceptos tratados por mil quinientos eruditos
el tratamiento de sus entradas confirman la tendencia a
entre lo más granado de la academia filosófica alemana e
subordinar la perspectiva histórico-conceptual a la
internacional forman una imponente obra de referencia
exposición escolástica. Por una parte, de acuerdo con el
que seguramente habría entusiasmado al propio Eisler, a
plan primero de una historia de problemas y de términos,
quien Ritter en el prólogo general de la obra consideró
no hay entradas específicas para los autores; pero, por
mentor del proyecto.
otra, el protagonismo de las escuelas filosóficas europeas, en particular las del siglo XX, privilegia en la exposición la estructura teórica de los problemas sobre su génesis
5
Ritter J., Gründer K., Gabriel G. (ed.), Historisches Wörterbuch der Philosophie, Basel, Schwabe, 1973-2007.
histórica, y no sólo en el caso de las nociones lógicas y
epistemológicas. Probablemente es por eso que en esta
consideración de la filosofía como una actividad en
obra la historia de los conceptos se aplique en rigor sólo a
evolución. No obstante estas resistencias y frente a
aquellas nociones que han pervivido a lo largo del tiempo
quienes antihegelianamente consideran irrelevante el
o que, al contrario, han sufrido cambios notables sobre un
estudio del uso del concepto de Filosofía para su
horizonte histórico reconocible.
explicación sistemática, el editor del HWPh defiende la
Tomemos como ilustración ejemplar del esquema
heterogeneidad de este Begriff al que considera
expositivo del HWPh el concepto mismo de Filosofía,
históricamente constituido por haces de connotaciones,
que aparece en el tomo siete de la obra y que fue
que, procedentes de distintos ámbitos de la realidad, son
publicado un año más tarde como libro independiente6.
excluidas en la lógica de la definición. Los editores del
En el prólogo de esa edición el coeditor del Wörterbuch,
HWPh apelan también a Hegel para reclamar la
Karlfried Gründer, al justificar la presencia del concepto
naturaleza genuinamente filosófica de la reflexión
mismo de filosofía en un diccionario filosófico, previene
genética del concepto, pero se separan del maestro de
contra una equivocada perspectiva conceptual en las
Jena por la decisiva importancia que conceden al estudio
historiografías al uso. Una perspectiva que se remonta al
de la palabra, el relato de sus usos, los desplazamientos
momento en el que Hegel, en sus Lecciones sobre
de sus campos semánticos y, en fin, la minuciosa atención
historia de la filosofía, rechazó explícitamente la
al ingente instrumental léxico que la historiografía puede
tematización lexicográfica del término en virtud de su
aportar al propio filosofar. En este sentido, desarrollar la
imposible
entrada Philosophie sería una actividad inequívocamente
definición
abstracta
fundada
en
la
filosófica. El resultado de esa actividad está firmado por 6
Philosophie in der Geschichte ihres Begriffes, edición especial a cargo de Karlfried Gründer, Darmstad, Wissenschaftliche Buchgesellschaft, 1990.
cuarenta y cuatro autores responsables de las distintas
subsecciones, que en sí mismas son también artículos. El
los marxismos occidental y soviético. A ese recorrido se
editor justifica la heterogeneidad y complejidad del texto,
añade una sección sobre las formas institucionales de la
así como las consiguientes interferencias metodológicas y
filosofía presentada de nuevo en su evolución histórica;
de contenido, apelando a lo inabarcable del concepto en
sigue otra dedicada a las “formas literarias de la filosofía”
su historia. Ante el esquema inviable de Rothacker, la
con una argumentada propuesta de clasificación en virtud
uniformidad metodológica y de perspectiva es sustituida
de diferentes criterios, más sincrónicos que diacrónicos:
por un haz, un cluster de connotaciones que, a la postre,
la relación entre el autor y la obra, la finalidad interna de
significa
ésta, los modos de argumentación o los denominados
integrar
una
multiplicidad
de
historias
“fines externos”. Para terminar, en contra de los criterios
conceptuales. Sin embargo, bajo la heterogeneidad programática
de Eisler y parcialmente de Rothacker se dedica una
de su perspectiva histórica, la propia exposición delata
sección a las filosofías orientales, limitadas a las
una homogeneidad efectiva de períodos y escuelas. Como
tradiciones china, india y japonesa. En la versión
en el resto de conceptos, el completísimo recorrido
monográfica del artículo se añaden otros que aparecen de
histórico por el término Philosophie se distribuye
manera independiente en el HWPh: Filosofía analítica,
canónicamente a través de la Antigüedad, la Edad Media,
árabe, cristiana, perennis, judía, Filosofía de la filosofía,
el Renacimiento y la Neuzeit, que comprende la Edad
Filosofía del hecho (Philosophie der Tat), Historia de la
Moderna y Contemporánea. Éstas son estrictamente
filosofía, Filosofía comparada y Filosofía de X (la
divididas
supuesta vulgarización del término como determinante de
en
sus
etapas
presocrática,
platónica, la
cualquier genitivo y cuya enojosa presencia es achacada
deconstrucción, pasando por la Reforma, la Ilustración y
por el diccionario alemán a la tradición académica y
aristotélica,
helenística,
patrística,…
hasta
editorial británica). Puede que esta heterogeneidad sea
Ciertamente decisiones como la que intentó justificar
más fiel a la complejidad histórica en la formación del
Ritter, en el prólogo general, de excluir las metáforas
concepto que la representación de un esquema unificador;
casan mal con la amplia perspectiva del diccionario. Sus
pero también se ajusta a las necesidades expositivas de un
intenciones enciclopédicas y su pretensión, sobradamente
texto cuya estructura de obra de referencia requiere
cumplida, de convertirse en la monumental obra de
adoptar la organización acumulativa de un manual.
referencia para cualquier trabajo histórico-filosófico
Pese a la inclusión de muchos y muy diversos
posterior, le alejaron de la estela que la Begriffsgeschichte
conceptos y términos interdisciplinares procedentes de la
estaba siguiendo en otros proyectos. Gestados en
historia de la ciencia, la teoría literaria, el derecho o la
diferentes disciplinas históricas, estos otros proyectos han
teoría política entre otros campos, el HWPh fue pronto
despertado paradójicamente mucho más atención en la
criticado por su inclinación a la inmanencia en el
filosofía y la historia intelectual del siglo XX y XXI que
tratamiento de las entradas y, en particular, por su escasa
el mismo diccionario histórico filosófico.
atención a los aspectos sociales y políticos en la reconstrucción de los usos y la historia de los conceptos.
3. HISTORIA
Sin perjuicio de su éxito académico internacional, que
HERMENÉUTICA.
confirma su capacidad para desbordar el ámbito cultural alemán, la metodología se granjeó críticas de naturaleza distinta: tanto por su posible epigonismo con respecto a la vieja Historia del Espíritu como por su concepción positivista y neokantiana de la historiografía filosófica.
DE LOS CONCEPTOS, HISTORIA SOCIAL Y
La presentación del proyecto de un diccionario histórico
de
conceptos
políticos
fundamentales
(Geschichtliche
Grundbegriffe7,
en
adelante
GG)
su circunscripción a la historia alemana, no tardó en
apareció en el mismo número del Archiv de 1967 en el
convertirse
en
que Ritter presentó el HWPh. La firmaba el historiador
contemporáneo sobre el sentido de la Modernidad. La
Reinhart Koselleck que años antes se había doctorado con
propia Modernidad, el Poder, la Revolución, los Partidos,
un trabajo titulado Crítica y crisis del mundo burgués8,
la
cuyos planteamientos determinarían la elaboración y la
Monarquía, la Crisis, el Derecho natural, la Publicidad
recepción de los GG.
Koselleck fue junto a Werner
política, la polaridad Cultura-Civilización, la Policía, la
Conze y Otto Brunner coeditor de esta obra subtitulada
Raza, la Representación, el Terror, la Constitución o el
“Léxico histórico para el lenguaje sociopolítico de
Mundo forman parte de esos Grundbegriffe. Su carácter
Alemania”. Sus ocho volúmenes, publicados entre 1972 y
enciclopédico resulta mucho más matizado que en el
1997, contienen nueve mil páginas en cuya redacción
Diccionario histórico-filosófico, en parte gracias a un
trabajó una pléyade de especialistas en historia y ciencias
estricto criterio regulativo: limitar la selección de
humanas. Como ocurre con el HWPh la monumental obra
conceptos a aquellos que acuñaron su significado actual
fue recibida internacionalmente y casi de inmediato como
en un período decisivo para la formación del lenguaje
una obra de referencia obligada, de modo que, a pesar de
político de la Alemania moderna: una época brecha, o en
Soberanía,
un
la
texto
clave
Revolución,
el
para
el
debate
Liberalismo,
la
expresión de Koselleck, Sattelzeit, asentada entre 1750 y 7
Koselleck R., Conze W., Brunner O., (ed.), Geschichtliche Grundbegriffe. Historisches Lexikon zur politisch-sozialen Sprache in Deutschland, Stuttgart 1972-1997. 8 R. Koselleck, Crítica y crisis en el mundo burgués, Madrid, Rialp, 1973
1850. La aparente sencillez del criterio contrasta con la complejidad de la tarea y puede provocar, en una aproximación escolar, cierta impresión de arbitrariedad.
Nada más lejos de su metodología. Cada una de las
entre
entradas del Léxico está dispuesta históricamente de
tradicionales,
modo que la exposición de la historia antigua y medieval
transformaciones permiten identificar una continuidad en
del término ocupa un primer lugar relevante, seguido por
el significado; en segundo lugar, aquellos conceptos que,
el tratamiento en la época de la Reforma y la
como “Estado” o “Sociedad civil”, sí que han sufrido
Contrarreforma, y las transformaciones entre los siglos
importantes transformaciones en la Sattelzeit, de modo
XVIII y XIX, que concentran la mayor parte del texto. La
que resulta difícil reconocer su significado anterior. En
tercera sección de cada entrada se detiene en la época
tercer lugar, los neologismos o nuevos conceptos
contemporánea en un intento por vincular la perspectiva
acuñados en esa etapa central y que en su mayor parte
histórico-conceptual
están
a
la
comprensión
actual
del
concepto. Esta sección, obviamente cobra protagonismo
ellos.
En
primer
tales
formados
por
lugar
como
el
los
considerados
“Democracia”,
sufijo
–ismo:
cuyas
marxismo,
conservadurismo o nacionalismo.
en términos recientes como el de Nacionalsocialismo. El
La selección de estos conceptos, la elección del
equilibrio, a veces, puede quedar descompensado, de
modo de abordarlos y la relación que se establece entre
modo que la Sattelzeit pierda terreno a favor de la Edad
ellos son suficientes razones para entender que esta obra,
Media y la Antigüedad. Ciertamente el proyecto de los
a diferencia del HWPh, responde escrupulosamente a
GG nunca menospreció las etapas premodernas, toda vez
decisiones epistemológicas cuya justificación constituye
que contaba entre sus editores con eximios medievalistas
una parte central del proyecto. Algunos de esos conceptos
como Otto Brunner y especialistas en la Antigüedad
ya fueron tratados en el HWPh, aunque de modo bien
como Christian Meier. Pero el diferente tratamiento de
diferente. Ciertamente si la teoría política encontraba
los conceptos obedece también a una distinción básica
inagotables filones en el léxico filosófico, los filósofos
estaban directamente interpelados por los GG, incluso por
convierte en concepto cuando es capaz de integrar y
aquellos
remitirnos
conceptos
menos
frecuentados
en
sus
a
todas
las
circunstancias,
prácticas,
escolásticas. Y es que su propia concepción obligaba a
relaciones, contextos y significados posibles en los que se
tomarse muy en serio la perspectiva histórico-conceptual,
usa y para los que se usa; tal capacidad coincide con el
resituándola en el marco de una filosofía del lenguaje,
momento en que el contenido del término sobrepasa la
pero también de una filosofía de la acción.
unívoca significación lingüística y permite dar cuenta de
Los responsables de GG afrontaron buena parte de
la pluralidad de experiencias y prácticas objetivas en que
su tarea como una particular semántica histórica. Ésta se
está involucrado y cuyo contexto sólo es dado
entiende a un tiempo semasiológica y onomasiológica,
precisamente por el concepto9.
pues se ocupa tanto de las transformaciones de los
La
referencia
a
“prácticas”,
“relaciones”,
significados como de los cambios de los diferentes
“contextos” delata la distancia con los tempranos
nombres dados a los conceptos en el tiempo.
Es
proyectos de Rothacker e incluso con el posterior de
precisamente esta diferencia entre término y concepto la
Ritter. Pues, en efecto, en el trabajo de reconstrucción
clave para distinguir entre el trabajo con Begriffe y el
histórica de los GG no sólo se acude a los autores y sus
trabajo con Ideen. Koselleck explicó la transformación de
textos más canónicos; también y sobre todo, a los
una palabra en un concepto histórico como el proceso por
panfletos,
el que aquélla llega a ser capaz no sólo de describir con
declaraciones, periódicos y una larga y heterogénea serie
exactitud, sino también de generar una serie de procesos
de textos considerados imprescindibles para conocer los
documentos
jurídicos
o
comerciales,
recurrentes que determinan la interpretación de los acontecimientos. Dicho de otro modo, un término se
9
R. Koselleck, “Historia conceptual e historia social”, en Futuro pasado. Para una semántica de los tiempos históricos, Barcelona, Paidós, 1993.
usos y representaciones del concepto y por tanto para la
precisamente a partir del privilegio que ésta concede al
constitución de un conocimiento de los procesos
lenguaje sobre la acción. Para Koselleck, la hermenéutica
históricos sostenido sobre el testimonio de sus propios
gadameriana tiene, en efecto, mucho que ver con los
agentes. Esta ambición interpretativa pronto encontró
objetivos de la Historik, es decir, el saber histórico que
elementos comunes con la hermenéutica de Hans-Georg
tematiza las condiciones de posibilidad de las historias
Gadamer.
la
posibles. Puesto que estas condiciones conciernen —
Begriffsgeschichte es desplazado por el giro social y
Heidegger ya lo había explicado— a las “aporías de la
político, de manera que la comprensión de la historia
finitud del hombre en su temporalidad”, la historia, al
conceptual pone la filología al servicio de la historia
igual que la jurisprudencia y la poesía —objetos
social. El apoyo inicial de Gadamer a los GG fue una
privilegiados del saber hermenéutico— sería un subcaso
reacción contra la tendencia neokantiana del HWPh —en
del comprender existencial11. Ahora bien, en la medida
el que él mismo participó— a tratar la historia de la
en que tales condiciones no son sólo lingüísticas, sino
filosofía como una historia de problemas filosóficos.
extralingüísticas o prelingüísticas, la reflexión sobre la
Gadamer quiso situar en el marco mismo de su Verdad y
historia, la Historik, que subyace a la historia de los
método la contribución de la Begriffsgeschichte a una
conceptos no puede considerarse como querría Gadamer
hermenéutica del lenguaje10. Pero esta hermenéutica no
una modulación de la hermenéutica. El examen de los
era suficiente para los propósitos de la disciplina.
nexos entre acontecimientos históricos y el examen de su
Koselleck explicó, en un amable e intenso debate con
representación a través de conceptos requiere reconstruir
Pero
el
giro
hermenéutico
en
Gadamer, la distancia insalvable con la hermenéutica 11
10
Hans-G. Gadamer, “La historia de los conceptos como filosofía”, en íd. Verdad y método, II, Salamanca, Sígueme, 1988.
Koselleck, R., Histórica y hermenéutica, op. cit. págs. 67ss. La respuesta de Gadamer aparece en la misma edición bajo el título «Histórica y lenguaje: una respuesta», ibíd., págs. 97-106.
nexos de acciones, “formaciones de finitud” en un ámbito
a partir de los años setenta, abandonando los modelos
extralingüístico, toda vez que “escribir la historia de un
teórico-críticos, marxistas y analíticos, que habían
período significa hacer enunciados que nunca podrían
desplazado a los herederos de la historia del espíritu. La
haber sido hechos en ese período”. Dicho de otro modo:
creación de revistas especializadas como Geschichte und
ningún texto de una fuente histórica contiene aquella
Gesellschaft, de la que fue editor Koselleck, sirvió de
historia que se constituye y expresa sólo con la ayuda de
plataforma a una concepción de la historiografía que,
fuentes textuales. Ello implica, por una parte, indagar
aunque compartía algunos principios con la escuela de
estructuras y procesos históricos a largo plazo, que,
Annales y más aún con la sociología del conocimiento de
cristalizados en conceptos, no están contenidos en ningún
Mannheim, profundizó en la perspectiva política mucho
texto como tal, sino que más bien provocan textos. Y, por
más que cualquiera de las escuelas anteriores. La
otra, implica un marco racional de traducción, que
tendencia venía de lejos. Así, el medievalista Otto
aunque necesite del lenguaje, ha de considerar motivos y
Brunner, editor de los GG en sus primeros años,
acciones que escapan al lenguaje. En este marco, el papel
representa el temprano esfuerzo de la historiografía
de la historia social es decisivo para los propósitos de la
germana por superar las limitaciones metodológicas de
historia de los conceptos.
los estudios medievales. Con una sólida formación
La redefinición de la historia social que subyace a
filológica sus principales trabajos abrieron vías para el
todo el proyecto de GG fue especialmente trabajada años
estudio de las relaciones entre la historia de los términos,
antes por Werner Conze, uno de sus editores, en el taller
los conceptos y las condiciones sociales y políticas en que
de Sozialgeschichte de la Universidad de Heidelberg. La
se acuñaron y desarrollaron12. El objetivo era en primer
Sozialgeschichte se extendió en la historiografía alemana 12
Cf. sobre todo Otto Brunner, Land und Herrschaft. Grundlagen
lugar evitar el tenaz anacronismo de las categorías
comprensión del cambio político y social, la formación de
historiográficas del que hacían gala las distintas escuelas.
las estructuras urbanas, económicas, etc., y el amplio arco
La proyección de términos modernos como “Estado”,
de problemas relativos a tales cuestiones. Ciertamente,
“feudalismo” o “clase” había sustraído a los historiadores
aunque se trate de disciplinas distintas, son inseparables,
la posibilidad de comprender la realidad social de su
pues sus objetivos se determinan mutuamente. Sin
objeto. Tal conocimiento exigía una crítica minuciosa y
embargo, la atención a las estructuras sociales y las
disciplinada de todo el entramado conceptual utilizado en
formas lingüístico-conceptuales involucran técnicas de
la investigación. Conze y Koselleck terminaron de
trabajo diferentes. Que el equilibrio entre tales técnicas
trasladar estos principios a la formación de una
no fuera fácil, se confirma en la rapidez con la que las
metodología histórico-conceptual, que tuviera como
páginas de GG fueron puestas en cuestión invocando
objetivo, en palabras del segundo, “investigar las
precisamente los mismos principios epistemológicos y
formaciones sociales, la construcción de las formas
políticos que las alentaron. De este cuestionamiento
constitucionales, las relaciones de estratos, grupos y
surgió un nuevo léxico, que constituye la primera
clases…”.
aplicación específica de la metodología fuera de la
Pero la convivencia metodológica de ambas
historia alemana: el Manual de conceptos sociopolíticos
disciplinas es compleja y en ocasiones fallida. La
fundamentales en Francia, 1680-182013. Su coeditor, el
Begriffsgeschichte pone toda su atención en los conceptos
antiguo alumno de Koselleck, Rolf Reichardt, no obstante
y
subrayar su deuda con los GG, señaló las deficiencias de
las
palabras
que
constituyen
los
textos;
la
Sozialgeschichte pone los textos al servicio de la 13
der territorialen Verfassungsgeschichte Össterreichs im Mittelalter, Rohrer, Wien, Wiesbaden, 1965.
R. Reichardt, E. Schmidt, Handbuch politisch- sozialer Grundbegriffe in Frankreich, 1680-1820, Oldenbourg Verlag, München, 1985.
la historia social practicada en este monumental léxico, al
cuantitativas en la aparición de los términos se presentaba
quedar desplazada por una aplicación vetusta de la
como un antídoto contra las perspectiva elitistas con
Begriffsgeschichte, insuficiente, en su opinión, para
respecto a las fuentes e historicistas con respecto a la
conceptualizar
que
reconstrucción de la génesis del concepto, que habría
Modernidad
llevado a un excesivo detenimiento de los GG en los
acompañaron
los el
cambios
advenimiento
estructurales de
la
centroeuropea. Reichardt fundamentaba su crítica en el
períodos previos a la Sattelzeit.
tratamiento de las fuentes mostrado por Koselleck y su
Todas estas críticas trasparentan el fantasma de la
equipo, en exceso escorado hacia el protagonismo de las
historia del espíritu, la Geistesgeschichte que deambula
élites culturales y literarias, y, por tanto, inapropiado para
por las discusiones historiográficas alemanas durante
una historiografía atenta al papel que desempeñaron las
todo el siglo XX. La sombra de ese fantasma parece
mentalidades de las clases, órdenes y estamentos en la
acosar a la historia de las ideas y a la historia conceptual,
Revolución Francesa. Es éste un asunto en torno al que
desde las propuestas de Rothacker y, antes, las de
gravita el Manual de Reichardt, pero que también
Dilthey.
concierne al estudio de la Sattelzeit o época fundacional de la modernidad alemana. Las estrategias propuestas por
4. HISTORIA DE LOS CONCEPTOS FRENTE A HISTORIAS DEL
Reichardt para superar esas insuficiencias en el
ESPÍRITU E HISTORIAS DE LAS IDEAS.
tratamiento de sus conceptos —muchos de los cuales,
El estatus del concepto en la Begriffsgeschichte
como Philosophie o Terreur ya aparecieron en los GG—
concierne al problema de las objetivaciones históricas de
acuden al análisis del discurso y a técnicas estadísticas
las prácticas humanas y sus expresiones, es decir, los
como la lexicometría. La potencia de las frecuencias
erga y sus logoi. Es éste un problema que, bajo distintas
formulaciones, ocupó desde los inicios del siglo XX a
exterioridad e interioridad de sus objetos. En el fondo, la
una amplia serie de investigaciones histórico-culturales.
teoría del símbolo en la antropología filosófica de
Puede decirse que las categorías centrales de la filosofía
Cassirer, la indagación de las formas artísticas en la
moderna de la cultura y las ciencias sociales se gestaron
historiografía del arte warburgiana, o el desarrollo de
como herramientas para lograr una descripción de estas
metodologías morfológicas en el estudio de la historia
formas, que pudiera reintegrarlas al mundo de la vida
literaria tales como la tópica histórica de Ernst Robert
superando la escisión de las ciencias14. La sombra de la
Curtius15 fueron distintas respuestas a los peligros de un
historia del espíritu se proyectaría sobre aquellas
subjetivismo, que Dilthey, a pesar de sus esfuerzos no
propuestas teóricas que intentaban disolver tal escisión
había podido neutralizar16. Tras esas respuestas, como
enfatizando la dimensión subjetiva de la cultura. Llevado
tras todas las metodologías orientadas a la identificación
a su extremo, esta subjetivación o espiritualización
de cristalizaciones culturales y a su reconstrucción
negaba toda mediación entre las dimensiones de
diacrónica, hay un propósito de poner lo histórico a
14
Se debe a Edmund Husserl la acuñación de la fórmula Lebenswelt en el marco de las preocupaciones filosóficas sobre el papel de las relaciones entre ciencia y vida en la crisis europea del siglo XX, cf. Die Krisis des europäischen Menschentums und die Philosophie, 1935, trad. por Peter Baader, “La filosofía en la crisis de la humanidad europea”, en Husserl, Invitación a la fenomenología, Barcelona, Paidós, 1992, págs.75-128 y La crisis de las ciencias europeas y la fenomenología trascendental del mismo aturo, Barcelona, Crítica, 1991. Desde la sociología y la filosofía de la cultura, George Simmel expuso algunos argumentos centrales para la reflexión sobre las relaciones entre estructuras y experiencia; cf. como ejemplo muy ilustrativo el artículo “El futuro de nuestra cultura”, en El individuo y la libertad, Península, Barcelona, 1971.
15
Cf. Cassirer, Ernst, Esencia y efecto del concepto de símbolo, México, FCE, 1975; Gombrich, E. H., Aby Warburg, una biografía intelectual, Madrid, Alianza, 1992; Curtius, Ernst Robert, Literatura europea y Edad Media latina, trad. de M. Frenk Alatorre y A. Alatorre, México, FCE, 1955 16 Esfuerzos que subyacen al propósito, inherente a la teoría de las Weltanschauungen, de buscar el conocimiento del sujeto en la indagación minuciosa de las objetivaciones del espíritu, explícitamente enfrentado a esa vana “contemplación de sí mismo, arrancando una piel tras otra”, que Dilthey atribuyera a Nietzsche en su breve escrito “Sueño” (1903), publicado en Teoría de las concepciones del mundo, Madrid, Alianza, 1988.
disposición del presente mediante una redefinición de las
contra el que se enfrenta la historia conceptual de
relaciones entre conocimiento y experiencia.
Koselleck, no surgió de las universidades alemanas sino
La historia conceptual tal y como se desarrolla en los GG, es decir, en convergencia con la historia social,
de las angloamericanas, sobre todo con los trabajos de Arthur Lovejoy.
significa un paso adelante en este camino. Pues la
La influyente concepción de la history of ideas
conexión entre Begriffs- y Sozialgeschichte, justo desde
aplicada paradigmáticamente en The Great Chain of
el reconocimiento de sus diferencias materiales y
Being17 sostiene una historiografía de la cultura a partir
formales, significa una concepción de las estructuras
de
conceptuales y sociales mucho más compleja y fértil que
permanencia debe buscar el historiador bajo los procesos
la de historiografías escoradas bien hacia la investigación
de cambio del pensamiento colectivo. El proceder
filológica, bien hacia el sociologismo. Frente a una
analítico del profesor de Harvard no excluía la crítica del
metodología marxista, la historia conceptual considera
lenguaje, pero sí su tratamiento semasiológico y
que los conceptos no son un mero producto de las
onomasiológico como en la Begriffsgeschichte. Los
condiciones sociales, sino que, antes al contrario,
métodos de su semántica filosófica son muy diferentes de
funcionan como factores generadores de la realidad
los métodos de la semántica histórica, pues aquélla
social. Pero las estructuras conceptuales no serían
desplaza la historia de los usos de los términos en sus
estables a lo largo de la historia y ni mucho menos
contextos particulares por la crítica de la ideología
autónomas. Y es aquí donde presenta sus mayores
entendida como una criba entre las verdaderas ideas y las
diferencias con la historia de las ideas. Aunque tiene una
meras falacias ideológicas. En cualquier caso y no
larga historia, el programa de la historia de las ideas
17
grandes
ideas
unitarias,
cuya
recurrencia
y
Arthur O. Lovejoy, La gran cadena del ser (1969), Madrid, Icaria, Barcelona,1983
obstante privilegiar el estudio de la recepción y difusión
publicó en 1936 culminó en la contemplación goetheana
de las ideas por encima de su gestación en los grandes
de la vida histórica sub specie aeternitatis18.
pensadores, los trabajos de Lovejoy y sus discípulos
La historia de las ideas políticas ha sido también
pusieron muy escaso interés en relacionar sus ensayos
adoptada
por
metodologías
historiográficas
ideográficos con las estructuras políticas, sociales o
especialmente atentas a la teoría política y la filosofía del
económicas.
lenguaje. Nos referimos a los trabajos desarrollados, de
Desde este punto de vista la Begriffsgeschichte
nuevo en el ámbito anglosajón, por J. G. A. Pocock,
presenta más afinidades con la anterior tradición germana
Quentin Skinner o Richard Tuck, entre otros. Obras como
de la historia de las ideas representada por la obra de
El momento maquiavélico o Los fundamentos del
Friedrich Meinecke: al menos en lo que se refiere la
pensamiento político moderno19 vinculan la defensa del
centralidad de la política, relegada por la historiografía de
republicanismo clásico con el giro lingüístico o, más
Lovejoy a los márgenes de la historia. Sin embargo, las
bien, pragmático, de la filosofía política. En su búsqueda
afinidades con la historia de los conceptos pierden su
de las esencias de una política republicana en la primera
evidencia cuando se constata que en la historiografía de
modernidad y el modelo de las ciudades-Estado italianas,
Meinecke la realidad política se reducía a un cosmos de
la labor historiográfica adopta los postulados de una
ideas que trascendían sus condiciones sociales e incluso
teoría de la acción: la comprensión de las ideas o los
su mismo cambio y cuyo estudio requería la intuición del
conceptos
políticos
exige
un
riguroso
análisis
investigador y el concurso de grandes espíritus. Fiel a esta convicción, la génesis del historicismo que Meinecke
18
Friedrich Meinecke, El historicismo y su génesis (1936) J. G. A. Pocock, El momento maquiavélico (1975), Tecnos, Madrid, 2002; Quentin Skinner Los fundamentos del pensamiento político moderno (1978), México, FCE, 1985. 19
argumentativo que atañe a las estructuras lingüísticas y su
debería servir de correctivo contra las creencias
dimensión pragmática. Como los contextos históricos, los
equivocadas y un mal uso de los conceptos.
conceptos han de ser comprendidos en su singularidad
diferencias metodológicas entre estos republicanistas de
histórica desde universales pragmáticos como los que
Cambridge y los quizás más conservadores historiadores
proporciona la teoría de los actos de habla. Desde este
de los GG no pueden resolverse en una mera adscripción
punto de vista la comprensión histórica de las ideas
a posiciones lingüísticas más diacrónicas o sincrónicas,
habría de atender a la fuerza ilocucionaria del lenguaje y
más saussureanas o más chomskyanas21. Ciertamente la
al
revolución estructuralista que supuso institucionalizar
mismo
tiempo
esforzarse
por
buscar
una
las
metodologías
lingüísticas
Las
“reconstrucción racional” de lo que los agentes históricos
académicamente
y
creían, “antes que una imagen enteramente auténtica
antropológicas que subordinan las cuestiones semánticas,
desde el punto de vista histórico”20. Entender una idea
el espíritu de la letra, a la disposición material de las
históricamente requiere, pues, comprender al sujeto que
palabras y estructuras comunicativas no es ajena a los
la enuncia, pero en tanto que comprensión de un acto de
intereses de la Begriffsgechichte. Sin embargo, la ilusión
habla, de comunicación intencional, entendida según las
iluminadora, aclaratoria de los propios prejuicios, que
pautas del razonamiento discursivo. Por otra parte, esto
anima los métodos de Skinner, poco tiene que ver con la
entrañaría también despojar al prejuicio de todo valor
complejidad en las relaciones categoriales entre el sujeto
interpretativo, de modo que la reconstrucción del significado que los agentes históricos dan a las ideas, 20
Cf. Skinner, Q., «La idea de libertad negativa», en Rorty, Schneewind, Skinner, La filosofía en la historia, Barcelona, Paidós, 1990, págs. 236ss.
21
Así parece entenderse en Richter, Melvin, «Conceptual history (Begriffsgeschichte) and Political Thought», en Political Theory, Sage Publication Inc. vol. 14, nº 4, 1986, págs. 604-637. Cf. también del mismo autor «Begriffsgeschichte and the History of Ideas», en Journal of the History of Ideas, University of Pennsylvania Press, vol. 48, nº 2, 1987, págs. 247-263.
historiográfico y los sujetos de las historias en la que se
las condiciones trascendentales para la escritura de las
interna la historia conceptual y la historia social. Lejos de
distintas historias.
utilizarse como disolvente de ciertos usos actuales y
Según Koselleck, la historia conceptual, en sus
erróneos de los conceptos, la Begriffsgeschichte intenta
relaciones con la historia social, confirma que esas
establecer —y en esto delata su vínculo con una teoría de
condiciones sólo pueden pensarse desde una antropología
la comprensión— la compleja interacción de tales usos
del tiempo histórico. Y en efecto, la experiencia del
con la experiencia humana del tiempo histórico.
tiempo
sustituye
a
la
filosofía
de
la
historia,
paralelamente a como los argumentos antropológicos 5. TIEMPO HISTÓRICO Y MODERNIDAD.
sustituyen a los ontológicos en la epistemología
Antes que una conciliación completa entre la
historiográfica. Ello tiene importantes consecuencias para
historia conceptual y la historia social, tal y como
la comprensión de los conceptos políticos, pues es en
defiende Reichardt, lo fundamental para Koselleck es
éstos donde de manera más decisiva intervienen los
reconocer las tensiones y resistencias entre ambas. En
cambios en la experiencia del tiempo y en la praxis
efecto, trabajar esa disparidad metodológica es un
política organizada en torno a ella. Los conceptos
requisito de toda historiografía que quiera describir e
políticos son, en efecto, una señal, un índice de las
interpretar los acontecimientos sobre un trasfondo de
transformaciones
estructuras reconocibles. Y ello concierne directamente a
acontecimientos que la acompañan; pero también son un
la constitución de esa Historik, que ya hemos mencionado
factor, un elemento agente determinante para su
y que podemos redefinir como una descripción crítica de
gestación. Esa doble función de los conceptos históricos,
de
esa
experiencia,
y
de
los
índice y factor, obedece al hecho de que los hombres
vivan y comprendan la historia de acuerdo con su
“Ciudadano” o “Secularización”— para designar y
experiencia del tiempo. Y ésta es una característica básica
concentrar
de la Modernidad. En este marco teórico la elección de la
onomasiológico
Sattelzeit como criterio constitutivo de los GG cobra su
incluso
valor epistemológico para comprender el significado
tridimensionalidad está aquí en juego. Por un lado aquella
moderno de lo político. Pues, en efecto, el cambio en la
que atañe al vínculo entre la experiencia del pasado, el
forma moderna de experimentar el tiempo tiene una
presente y el futuro; por otro, la que concierne a los
motivación y unas consecuencias esencialmente políticas,
estratos de esa experiencia a corto, medio o largo plazo:
que han alterado la misma concepción de los distintos
la experiencia de los contemporáneos, la propia de una
estratos
distinción
generación o la que involucra a varias generaciones. El
mencionada más arriba entre conceptos de tradición,
caso de los neologismos investidos por el sufijo –ismo es
conceptos en transformación y neologismos obedece a la
particularmente ilustrativo. Términos como “marxismo”
radical temporalización (Verzeitlichung) sufrida por los
o “liberalismo” encierran una justificación de la acción
politische
se
según una perspectiva de futuro. Pero también pueden
manifiesta de manera perspicua en la tendencia
vincular sus contenidos posibles a “un eje temporal
generalizada a situar el concepto en cuanto tal, casi
imaginado del pasado” como en el caso de las palabras
teleológicamente, en una constelación de períodos,
“conservadurismo” o “monarquismo”. En cualquier caso,
estadios o épocas. La comprensión de su situación en el
todos ellos “contienen coeficientes temporales de
orden del tiempo es, así, inseparable de la potencia
modificación” y pueden, por ello, clasificarse según se
otorgada al término —por ejemplo “Revolución”,
correspondan con los fenómenos a los que se refieren,
y dimensiones
Grundbegriffe.
temporales.
Tal
La
temporalización
bajo
un
mismo
contextos
conceptuales
campo
prácticos, diferentes.
semántico
y
lingüísticos
e
Una
doble
esto es, según provoquen ellos mismos fenómenos
uso al punto de incorporar distintos sentidos y
delimitados o simplemente se limiten a reaccionar ante
gradaciones por diferentes estratos sociales y en
fenómenos ya dados. Las tres dimensiones temporales
diferentes contextos. Esa generalización es paralela a su
pueden, así, “entrar en los conceptos con una importancia
politización y transformación en consigna de una crítica
completamente diferente refiriéndose más al presente,
ideológico-política entre cuyos argumentos Koselleck
más al pasado o más al futuro”. Se trata, en fin, de
localiza el hiato entre su función discursiva y la situación
conceptos de movimiento cuya estructura temporal
política de la que emerge y a la que se aplica.
interior les permite, según el caso, enfatizar su relación
Si es posible encontrar esta fundamentación de la
con cualquiera de las tres dimensiones temporales o
historiografía en la experiencia del tiempo de la
incluso atribuirse una estructura temporal imaginada. Por
Modernidad es porque en ésta tiene lugar lo que
los ejemplos que aduce Koselleck —“democracia”,
Koselleck percibe como una “aceleración del tiempo
“libertad”, “liberalismo”— parece que los conceptos
histórico”. Esa aceleración consiste básicamente en una
modernos de movimiento presentan todos un inequívoco
ruptura de las correspondencias entre el espacio de
22
sesgo ideológico . Y en efecto, la ideologización y la
experiencias del sujeto histórico y su horizonte de
democratización son dos características de los conceptos
expectativas futuras, provocado por el brusco cambio de
básicos de la política moderna, que, lejos de permanecer
las estructuras sociales alemanas y europeas entre 1750 y
en una única esfera de la acción humana, generalizan su
1850. Si el período premoderno estaba dominado por la congruencia entre experiencia y expectativas, la Sattelzeit
22
Para un desarrollo de estas tesis cf. el libro de Koselleck ya citado Futuro pasado, así como las Richtlinien o líneas directrices de la historia conceptual publicadas en el Archiv con ocasión del primer volumen de los GG.
significa el desbordamiento de ambas: la imposibilidad de controlar el proceso de la historia desde el acervo de
enseñanzas de la vieja experiencia. En este sentido, la
de secularización a través de los residuos no conceptuales
historia deja de ser magistra vitae para convertirse en el
sobre los que cristalizaron la ciencia y la cultura
lugar donde se juega la nueva experiencia y sus
modernas. La dimensión filosófica de la metaforología
posibilidades de orientación. Éstas son tan inagotables
apunta de manera explícita a las conexiones entre la
como el significado de los conceptos históricos cuya
teoría y el mundo de la vida del que ella emerge y al que
semántica debe recortarse en esa fusión de horizontes,
nos remite. Pero al contrario que la historia de los
que, lejos de resolverse en una tradición lingüística
conceptos, la de las metáforas no es expuesta a través de
envolvente al modo de la hermenéutica gadameriana, se
un léxico. Blumenberg no escribe ni edita un diccionario
va configurando a través de los propios conceptos y
de las metáforas absolutas o explosivas —como
acciones, que determinan los límites de la experiencia y
denomina a las más irreductibles23. Sus recorridos bucean
las formas de pensarla.
por el trasfondo mismo de la conceptuabilidad que el
Koselleck y los editores de GG quisieron ordenar a través
ordenamiento del fondo no sistematizable de la
del lenguaje, de una onomasiología que, sin embargo,
aproximación histórica a los conceptos. En ese fondo, la
trasciende al propio lenguaje. El hecho de que los
clave metodológica de la vinculación entre historia de los
proyectos mayores de éstos últimos adopten la forma
La
historia
conceptual
parece
asumir
conceptos e historia social reside también en lo inconceptualizable, sobre lo que los conceptos configuran la experiencia moderna. En este sentido, su metodología presenta afinidades electivas con la metaforología de Hans Blumenberg. Blumenberg reconstruyó los procesos
23
Para una introducción a la metaforología de Blumenberg cf. sus Paradigmas para una metaforología, (Madrid, Trotta, 2003) y el ensayo posterior aunque traducido al español bastante antes “Aproximación a una teoría de la inconceptualidad”, en Naufragio con espectador (Madrid, Visor, 1995). Un excelente estudio sobre la relación entre historia de los conceptos y metaforología puede encontrarse en Palti, Elías, «Ideas, conceptos, metáforas. La tradición alemana de la historia intelectual y el complejo entramado del lenguaje», Res Publica, 25, 2011, págs. 227-248.
enciclopédica de un léxico, un manual o un diccionario
Aristóteles; la proiáresis aristotélica en la teoría de la
evidencia sus aspiraciones a una regulación metodológica
racionalidad práctica;
del
un
Scoto como ejemplo de la teoría trascendental de las
autoconocimiento de la acción política. Por eso, el
causas; la metáfora de la luz en Bacon, Descartes, Hobbes
carácter del Begriff como índice y factor no sólo responde
y Spinoza; los orígenes de la expresión das Logische en
a los objetivos del conocimiento histórico y la realidad
el primer Hegel; y la confrontación entre los términos
social, sino también a la responsabilidad política del
“emoción” y “pasión” en la emergencia de una categoría
sujeto con respecto a su propio uso de los conceptos, en
amoral. No tiene nada de extraño la heterogeneidad del
la medida en que conoce su potencia para configurar y
número del Archiv de 2011, sobre todo si consideramos
transformar esa realidad.
además la extraordinaria labor del Foro interdisciplinar
trabajo
historiográfico.
Pero
también
a
la metafísica del concepto en
para la historia conceptual dentro del Zentrum für 6. DERIVAS DE LA HISTORIA CONCEPTUAL. El
recorrido
académico
y editorial
Literaturforschung de Berlín, que viene desarrollando de
sus
una intensa actividad investigadora y editorial. La obra
publicaciones revela tratamientos muy heterogéneos de la
más importante auspiciada por este foro y por la
historia conceptual, aunque todos sus cultivadores
Universidad de Francfort del Meno, Johann Wolfgang
reconozcan cierto epigonismo con respecto a los pioneros
von Goethe, ha sido sin duda el diccionario histórico —de
de la disciplina. Si revisamos el índice de un número
nuevo
reciente del citado Archiv für Begriffsgeschichte, fundado
Grundbegriffe, dirigido por Karlheinz Barck y publicado
hace más de cincuenta años, apreciamos una significativa
entre 2000 y 200524. Una vez más se satisface con creces
un
diccionario
histórico—
Ästhetische
variedad de temas: el uso del principio del movimiento en 24
Karlheinz Barck, Martin Fontius et alii, Ästhetische Grundbegriffe.
el objetivo de construir una obra de referencia aunando
y objetivos de la Begriffsgeschichte25. Pero en el terreno
una completa investigación histórico-cultural con los
europeo de las promesas filosóficas, el mismo que
principios de la historia conceptual.
Y de nuevo las
ocuparon, desde otros ángulos, el materialismo histórico,
numerosas entradas de diferentes autores ofrecen un
el estructuralismo, la filosofía analítica, la hermenéutica o
paradigma de la investigación interdisciplinar, del estudio
la teoría de la recepción, algunos observadores perciben
crítico de las fuentes, del rigor en la interpretación y,
en el modelo síntomas de agotamiento.
sobre todo, del empeño por reinterpretar el significado de
Hace algunos años, un conspicuo colaborador de la
la Modernidad, esta vez atendiendo a uno de sus esferas,
historia conceptual, Hans Ulrich Gumbrecht, publicó un
la Estética, menos atendidas por los GG. No parece, sin
ensayo
embargo, que los objetivos filosóficos de los editores de
Begriffsgeschichte, que venía a ser una especie de
la anterior obra y del programa de Koselleck conserven el
despedida de aquellos grandes proyectos editoriales que,
mismo vigor de sus propuestas, ya sea en ésta o en otras
como las pirámides formarían parte de un futuro pasado,
obras, ya se trate de léxicos instrumentales —como el
hoy ya muerto26. Su importante contribución a los GG —
diccionario de historia conceptual de la ciencia, aún en
con un artículo central sobre la Modernidad— o más
marcha— o de ensayos histórico-culturales. Nos consta
recientemente a los Ästhetische Grundbegriffe, autorizan
sobre
los
logros
y
los
límites
de
la
que en España desde comienzos de este siglo se han venido
desarrollando
y
ampliando
con
decisión
propuestas historiográficas hasta entonces inéditas, basadas en una reinterpretación profunda de los métodos Historisches Wörterbuch in sieben Bänden, Metzer Verlag, 20002005.
25
Como ejemplo paradigmático de una recepción y aplicación críticas de la historia conceptual hay que citar el proyecto Historia del pensamiento político hispánico emprendido por José Luis Villacañas en el marco de la Biblioteca Digital Saavedra Fajardo y del que ha publicado los volúmenes relativos a la Edad Media y la primera Monarquía Hispánica. 26 Hans Ulrich Gumbrecht, Dimensionen und Grenzen der Begriffsgeschichte, München, Wilhelm Fink Verlag, 2006.
a Gumbrecht a señalar los límites de la historia
autores de esos pacientes e inmensos trabajos han
conceptual para el pensamiento. O, al menos, para pensar
conseguido al menos que, tras ellos, ya no sea posible
un presente que, irreductible a las dinámicas históricas y
sostener ningún conocimiento y ninguna enseñanza cabal
estructurales descritas por aquellos historiadores de la
de los conceptos históricos sin tener muy presente la
aceleración, finalmente ha resultado mucho más lento de
compleja y vulnerable experiencia social de sus agentes;
lo que se esperaba. Sin duda, las promesas de un saber
y sin reconocer en ella nuestra propia experiencia del
totalizante de la experiencia del hombre moderno, incluso
tiempo histórico.
de una revitalización de algunos ideales kantianos a través de la crítica histórica, social y filológica, albergadas desbordadas
por y
la
Begriffsgeschichte
arrumbadas
por
la
han
sido
irrupción
conceptualmente irreductible de nuevas producciones y nuevas presencias. Pero ese gesto irónico hacia los grandes proyectos de la Begriffsgeschichte y sus hitos editoriales no desmiente la importancia de su legado, al menos sobre la escala de una teoría general de la historiografía. Ese legado está formado por modelos extraordinarios para la escritura, la lectura y la transmisión de la historia. Epígonos, a su manera, de la mejor Ilustración, los
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