La geología y el golpe de estado de 1973 Edmundo Polanco Valenzuela Servicio Nacional de Geología y Minería (SERNAGEOMIN), Av. Santa María 0104, Providencia, Santiago.
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El golpe de estado del 11 de septiembre de 1973 cambió drástica y en muchos casos dramáticamente la vida a miles de chilenos. La vida republicana de nuestro país quedó truncada por más de 17 años. Miles de personas fueron apresadas, secuestradas, torturadas, ejecutadas. En este ambiente muchos chilenos debieron exiliarse. En particular, el golpe de estado en el área de la geología significó al igual el resto del país, una persecución sistemática a profesionales que habían apoyado y/o simpatizado con el gobierno de la Unidad Popular. El presente resumen pretende exponer algunos de los hechos que ocurrieron gatillados por el golpe de estado con el objetivo de abrir la discusión y transparentar estos hechos históricos. Entre las primeras medidas que afectaron directamente a instituciones geológicas fue la destitución de los directores del Departamento de Geología de la Universidad de Chile y del Instituto Investigaciones Geológicas (IIG). La persecución a profesionales no se hizo esperar, muchos son los geocientistas que se vieron obligados a tomar la decisión de salir al exilio porque eran conocidos por su apoyo al gobierno del Presidente Allende o bien por el miedo a represalias por su pensamiento de abiertamente de izquierda. Existen dos casos documentados en la literatura (Danús, 2007), Don Luis Aguirre y Beatriz Levi tuvieron que salir a desarrollar investigación y docencia en universidades europeas. También es conocido el caso de Lautaro Ponce del IIG que partió rumbo a México donde en el seno del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México desarrollo una fructífera actividad como académico e investigador. Aunque fueron muchos más los colegas que días después del golpe tuvieron que optar por el camino del largo exilio. Las organizaciones de derechos humanos tienen documentados dos casos que involucran geocientistas en los primeros días del golpe militar, los asesinatos de Freddy Taberna y Carlos Cuevas. El geógrafo Freddy Taberna de 30 años, Director de la Oficina Regional de Planificación de Iquique y presidente regional del Partido Socialista, se presentó voluntariamente el día 16 de septiembre de 1973 en el Regimiento de Telecomunicaciones, fue ejecutado el día 29 de octubre de ese mismo año en el Campo de Prisioneros de Pisagua. Por su parte, el estudiante de la carrera de Geología, Carlos Cuevas Moya de 21 años, militante del Partido Comunista, fue detenido el día 20 de diciembre en el domicilio de su madre en San Miguel. Fue torturado y ejecutado al día siguiente por agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (DINA). Muchos geólogos fueron defensores del golpe de estado y de la junta de gobierno: José Corvalán, Giovanni Cecioni y Oscar González, por nombrar sólo algunos. Pero este último personaje destacó abrumadoramente por lo vil y siniestro. Una de las historias más terribles e infames conocidas fue la delación de un colega sin fundamento alguno a las nuevas autoridades militares, lo que significó el secuestro y brutal tortura en el recinto de Tejas Verdes de este investigador. Aparece con el número 24136 en el Informe de la Comisión Valech, el geólogo, académico, investigador, bombero y gran arquero, el Dr. Ricardo Thiele. Danús H. (2007) Crónicas Mineras. RIL Editores, 422 p.
