La destrucción del patrimonio arquitectónico durante la Guerra de Independencia: el Buen Retiro y el Edificio Villanueva

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Inüoponütnüla

Jof nadas de Arte e lconografía del

I al 7 de mayo de 2008

La destrucción del patrimonio arquitectónico durante la Guerra de Independencia: El Buen Retiro y el Edificio Villanueva. Grorua ManrñBzLnrv¡ La conservqción de los monumentos

del pa-

sudo no es simple cuestión de conveniencia o de sentimiento. No tenemos el derecho de tocarlos. No nos pertenecen. Pertenecen en pqrte a los que los construyerony en parte a las generaciones que han devenir detrás. John Ruskint.

oscientos años después del inicio de la Guerra de Independencia, en la que el pueblo español luchó por su liberación de la invasión francesa, la memoria de este hecho histórico es aún perceptible en nuestro acervo

artístico, ya sea en forma de huella latente y patente, como ejemplifican los cuadros de Goya La carga de los Mamelucos o Los fusilamientos det 3 de *oyo', yu sea en forma de huella ausente, como es el caso del Palacio del Buen Retiro. Durante los cinco años que duró la ocupación nuestro patrimonio artístico sufrió el mayor expolio y deterioro de su historia. Miles de pinturas y alhajas, como relojes, tapices, mobiliario..., fueron sacadas del territorio español, mientras que algunos de nuestros edificios más emblemáticos sufrían graves daños. En e1 presente estudio centraremos la atención sobre los efectos que esta invasión tuvo en dos edificios en concreto: el Palacio del Buen Retiro y el Edificio Villanueva. Ambos representan hoy en día dos ejemplos bien diferentes. Mientras que el Retiro simboliza el patrimonio perdido, ya que tras el regreso de Fernando VII al tro*

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A la memoria del Dr. D. José Álvarez Lopera profesor e historiador entregado. 'RUSKTN (1890), p. t7s. 2 Muchos otros ejemplos de la huella de este hecho histórico en nuestra pintura pueden observarse en el catalogo de la exposición GOYA (2008).

Grorun MenrÍu¡zLsve

240

no éste fue derruido casi en su totalidad3, el Edificio Villanueva ejemplifica el patrimonio recuperado de los "desastres de la guerra".

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DEL BunN

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Tras el incendio del Alcánar de Madrid acaecido la Nochebuena de 1734 elPala-

cio del Buen Retiro pasó a ser la sede oficial de la monarquía enla capitala (Figs. 1 y 2). El complejo palaciego fue la morada preferida del primer Borbón y por ello estaba suficientemente equipada para la vida cortesana5. De hecho aunque durante el reinado de Felipe V se había planteado la posibilidad de levantar en los terrenos del Retiro un gran palacio de nueva planta6. Un nuevo Versalles. Estos proyectos nunca llegaron a pasar del papel. En cambio el palacio sí fue objeto, durante todo el siglo XVIII, de pequeñas modificaciones arquitectónicas y de redecoraciones a la moda del rococó francés7. Como ejemplo de las intervenciones decorativas que se llevaron a cabo tenemos los proyectos del arquitecto Santiago Bonavia para los aposentos reales del Retiro, para los que diseñó una nueva imagen tanto interior como exterior y toda una serie de elementos decorativos como espejos, consolas. marcos...t Gig. 3). De este modo el Buen Retiro fue sustancialmente transformado en espacios puntuales, enriqueciendo su simple y monocorde arquitectura anterior. 3

La parroquia de Santiago y la de San Juan, la Casa del Tesoro, el Convento Benedictino de San Martín. el Convento de Santa Clara o el Convento de las Carmelitas Descalzas de Santa Ana fueron otros de los

edificios derribados en época de la invasión francesa. La intención de José Bonaparte con estas demoliciones era crear una gran zona ajardinad4 a modo de los Campos Elíseos parisinos, desde el Palacio Real de Madrid hasta la plaza de Cibeles. Para conocer en profundidad el tema ver: GAYA NUÑO (1961), TOVAR MARTIN (1992), RUIZ PALOMEQUE (1992) y FERNANDEZ PARDO (2007), pp. 164-168. o No es objeto de este artículo relatar la historia constructiva del edificio desde sus orígenes. Para una visión detallada de la historia del Buen Retiro ver: BROWN y ELLIOT (2003) y BLASCO (2001). s Los extensos jardines y múltiples entretenimientos de los que los monarcas gozaban en el Retiro lo convirtieron en su residencia predilecta. De esto nos da cuenta la Princesa de los Ursinos que escribía así al duque de Gramont en 3 de julio de 1707: Sus Majestades "quittent le Retiro avec regret, parce qu'elles s'r plaisent beaucoup plus qu'au palais, par la commodité qu'elles ont d'avoir les promenades de plain pied". BOTTINEAU (1986), pp. 3 l0-3 I l. u Felipe V sopesó 1a posibilidad de convertir el Retiro en un nuevo Versalles. El proyecto fue encargado en1712 primero aRené Carlier, arquitecto francés ayudante del Arquitecto Real francés Robert de Cotte. ¡ posteriormente al mismo de Cotte. Sin embargo tras la llegada a la corte de Isabel de Famesio, segunda esposa de Felipe V, el proyecto quedó abandonado. BOTTINEAU (1986), pp. 291-298 y SANCHO GASPAR (1995), p. 6a6. ' En 1739 se sustituyó el Coliseo por un teatro a lo "vitruaviano" apto para las representaciones operÍsticas. Unos años más tarde, reinando ya Carlos IIl, se construyó un nuevo Salón para la tropa, un corral para avestuuces, una casa de aves, nuevas cocinas y cocheras. TOVAR MARTÑ (1989), p. 253. 8 El diseño de Bonavia para "el Quarto que habitan Sus Magestades en su Real Palacio del Buen Retiro". está fechado en enero de 1746, (Archivo General de Palacio (A.G.P.), Planero, no 1057: Plant4 alzado v corte). Tras la muerte de Felipe V, en julio de 1746, el nuevo monarca Fernando VI siguió con lo proyectado y concluyó las nuevas habitaciones reales (A.G.P., Buen Retiro, C 11748123 y 26).De ese mismo año son los proyectos de Virgilio Rabaglio, arquitecto predilecto de Isabel de Farnesio, para la "Fachada principal de la-< habitaciones de los Infantes" y para la "Galería de los aposentos" en el quarto baxo que mira al jardín del Buen Retiro (Archivo de la Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid, R.B.G/ P-15 y P-20t. Estos dos proyectos, de refinado gusto rococó, se cree que nunca llegaron a realizarse. Para el estudio en

24t

LA DESTRUCCIÓN DEL PATzuMONIO ARQUITECTÓNICO.

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Fernando VI continuó con la labor de transformar el Retiro iniciada por su pa,Jre. A11í el rey pasó largas temporadas disfrutando de los jardines y las representaciones operísticas. Pero tras su muerte en 1759 Carlos III no gustó de este Real Sitio. Tan solo permaneció en é1 el tiempo necesario para que el nuevo Palacio Real de Madrid estuviera completamente terminadoe. A panir de 1164, fecha en que la Corte se fue trasladando paulatinamente a éste, el Retiro sólo se usó en ocael siones puntuales lo que causó su lento deterioro por falta de vida. Sin embargo

Sitio pasó a tenet nuevas funciones al instalarse en sus iardines diversas Reales Fábricas, como la de la China o el laboratorio de piedras duras, que producían objetos de tujo con destino a los distintos palacios realesro' En 1766 otro acontecimiento incidió en el declive del Retiro. Tras la sublevación del pueblo de Madrid, hecho conocido como el Motín de Esquilache, el Conde de Aranda, presidente del Consejo de Castilla, acuarteló en el Sitio un importante número de tropas para intentar mantener el orden en la poblaciónll. Dichas tropas ocuparon parte de los edificios del palacio hasta el año 1787, momento en ei que se dió orden de abandonar esa posiciónl2. Durante esos años las quejas de los responsables del Sitio fueron constantes por "el abandono y desprecio con que

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Además de los desperfectos que la guarnición ocasionó en los edificios ésta también generó un creciente negocio de prostitución en los jardines del Sitio, lo que desvirtuó la fama de éstos. Desde 1767 los jardines estaban abiertos para el uso y disfrute del pueblo de Madrid. Esto hizo que pronto se convirtieran en lugar predilecto de paseo para los madrileños, pero también en el sitio perfecto para desarrollar actividades ilícitas. De este tipo de "actividades" informaba el Veedor del Sitio en 1778 diciendo: "Una de las obligaciones de mi empleo es zelar, en que 1o que conprehende la jurisdicción de este Sitio, no se permitan garitos, acojan bagabundos, ni mugeres abandonadas; y aunque en cumplimiento de ella. con la ronda del mismo Sitio, se logra tener limpia dicha jurisdicción, cojiendo dichas

encargado le Cotte, y rnda espo-

protundidad de estas intervenciones ver: ARIZA (1985), ATERIOO, VeRfÍmZ CUESTA Y PÉREZ PRECIADO (2004),pp.227-237,BLASCo (2001), pp. 199-203 y ToVARMARTÑ (1998), pp. 134-139.

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De esos cinco años realmente Carlos III tan sólo pasó en el Retiro setenta y siete días, prefiriendo en todo momento las estancias en sus otros palacios de jornada. BLASCO (2001), p. 29. 1o Para conocer más sobre las diferentes industrias que se instalaron en el Buen Retiro consultar el libro ¿e

pÉRpz VILLAMTL (1904). 11

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La revuelta que ha pasado a la Historia como Motín de Esquilache tuvo lugar en Madrid y otros puntos de España en 1766, siendo rey Carlos III. En ella se calcula que participaron alrededor de 40.000 personas que protestaban no tanto por la publicación de una norma municipal que regulaba 1a vestimenta de los madrileños, como por el hambre que sufría la población a causa de las constantes subidas del pan. Para profundizar sobre este tema ver: LOPEZ GARCIA (2006). 12 Las órdenes para que se retire la tropa y se arreglen las habitaciones dañadas por ésta pueden consultarse en: A.G.P., Buen Retiro, C 11759116y C 11755134. Carta del Veedor del Sitio, Matías MartínezLópez, dirigida al Marqués de Grimaldi en 1773. A.G.P.,

"

BuenRetiro,

C

11760143 bis.

CitadosindarlasignaturaporTOBAJASLOPEZ(1977c),p.39.

242

Glonr¡. MnnrÍupz

Luv¡

mugeres, embiandolas al Hospicio de Madrid, como sucedió anoche con siete de ellas: a llegado a tal exceso de escándalo, que los soldados que ocupan este Sitio, las defienden públicamente, con tal ceguedad, que me temo suceda alguna desgra-

cia. Ruego que se ordene a los soldados no se opongan a las providencias del Gobierno de este Sitio, y celen por su parte como deben, la honra y gloria de Dios, y el honor de esta Real Casa"la. Desocupado ya el palacio de la presencia de los militares, en la última década del siglo XVIII, el Arquitecto Mayor del Rey, Juan de Villanueva, encargado del mantenimiento del Buen Retiro, escribió varios informes en los que denunciaba el "estado deplorable de la mayor parte de los Edificios de ése Sitio..." y las numerosas goteras que amenazaban con echarlo abajols.

El arquitecto realizó una

serie

de recomendaciones para paliar en lo posible la ruina del complejo, pero el estado

de la Hacienda pública no era el más propicio para abordar los gastos necesarios parula reparación del Sitio. De hecho Manuel Godoy, primer Ministro de Carlos

IV, en una carta dirigida a Villanueva expresaba su desacuerdo con la realización de reparaciones y proponía derribar algunos edificios del Retiro: "Como la experiencia acredita que las obras que continuamente necesitala fábrica del Palacio, y de otros varios edificios del Real Sitio del Retiro son insuficientes para asegurar su conservación y ocasionan inutilmente crecidos gastos, se ha servido S.M. resolver que pasando Vmd a examinar dhas fabricas forme un plan expresando lo que entre ellas se halle de util y pueda conservarse por algunos años sin necesidad de reparos; y de lo que absolutamente inservible y viejo, por si se vá arruinando; para que enterado S.M. se sirva mandar demoler 1o inservible y estrechar el recinto del Palacio con lo que se eviten los gastos que hasta ahora ha ocasionado"l6. El abandono que sufría el Buen Retiro hizo que en 1803 cuando la viajera Lady Elizabeth Holland visitó el lugar declarase que "el palacio carece de magnificencia tanto por fuera como por dentro; las estancias reales no están amuebladas. Tan sólo quedan unas pocas y excelentes pinturas"". En efecto, tras el alojamiento de la tropa las pinturas habían sido descolgadas y "ocupan los sitios más oscuros y 'o Carta del Veedor del Sitio, Matías MartínezLópez, dirigida al Conde de Floridablanc4 Secretario de1 Despacho de Estado, en 2l de enero de 1778. En TOBAJAS LÓPEZ (1977c), p. 40. Pese a las medidas tomadas el Retiro siguió siendo lugar de cobijo nocturno para meretrices, por ello el 27 de octubre de 1790 se acordaba "que los Sres. Alcaldes de la Casa y Corte de S.M. puedan y deban entrar en el Rl. Palacio y Rl. Sitio del Buen Retiro, rondar, prender y hacer otros actos precisos y que las tropas deben auxilia¡". A.G.P., Buen Retiro, C 1176219. " Conservamos varios de los informes que realizó denunciando e1 mal estado de la construcción. Dos de los más exhaustivos son los de 1793 (A.G.P., Buen Retiro, C 1176018) y 1800 (ver: TOBAJAS LÓPEZ (1977b), p. l2). También el arquitecto Manuel Machuca en 1'797 señalaba el lamentable estado de los diferentes edificios y tejados (A.G.P., Buen Retiro, C 11760110). Algunas de las reparaciones propuestas por los arquitectos fueron realizadas y de ello constan diversas facturas: A.G.P., Buen Retiro, C 11761159 y 60. 'u Carta del Príncipe de laPaz a Juan de Villanuev4 San Ildefonso, 13 de septiembre de 1796. A.G.P., Buen Retiro, C 11763142. t7 The Spanish Journal of Elizabeth Lady Holland, ed. conde de Ilchester, Londres, 1910, p. 109. En BROWN y ELLIOT (2003), p.252.

LA DESTRUCCIÓN DEL PATR]MONIO ARQUITECTÓNICO

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lóbregos del Palacio"l8. Sin embargo a fecha de 12 de julio de 1808 todavía se conservaban en el Retiro 1074 pinturas de las 1383 que se inventariaron en el Sitio con motivo de la testamentaríade Carlos III1e. A saber: 449 almacenadas en el Salón de Reinos, 575 que estaban colgadas en las habitaciones "de las quales se han exijido los correspondientes recibos con especificación de los números de quadros que cada uno [de los militares] tiene en sus quartos", 30 en la calle del Turco, 4 enlaErmita de San Juan y 24 enla Tribuna de Atocha20. Sin embargo la verdadera destrucción del Sitio hay que situarla apartir del año 1808. El 27 de octubre de 1807, Manuel Godoy había firmado con Napoleón Bonaparte el Tratado de Fontainebleau, en el que se estipulaba la invasión militar conjunta franco-española de Portugal (Fig. a). Gracias a ese pacto se permitía el paso de tropas francesas por territorio español para dicha invasión. En pocos días el general galo Andoche Junot atravesaba la penínsulay entraba triunfante en Lisboa el 30 de noviembre de 1807. No obstante la presencia de tropas francesas siguió aumentando en nuestro territorio y fueron ocupando diversas ciudades como Burgos, Salamanca, Pamplona, San Sebastián, Barcelona o Figueras. En total el número de soldados franceses acantonados en España ascendió a unos 65.000, que controlaban no sólo las comunicaciones con Portugal, sino también con Madrid y con Francia. Carlos IV alarmado por esta ocupación'oamistosa" de su territorio se retiró a Aranjtez para, en caso de necesidad viajar a Sevillay embarcarse hacia América, como yahabía hecho el Príncipe Regente de Portugal. En marzo de 1808 los acontecimientos se precipitan. El 17 de ese mes se produce el Motín de Aranjuez, q\e provoca la caída de Godoy, la abdicación de Carlos IV y la subida al trono de Fernando VII. Pocos días después, el23 de marzo el mariscal Murat era recibido en Madrid por Fernando VII como aliado. Un regimiento francés de infantería compuesto por 2.000 hombres ocupaba el Real Sitio del Buen Retiro con la idea de alojarse en él y convertirlo en su cuartel general2l. La posición elevada del Buen Retiro y su situación alejada del núcleo de población fue considerada por Murat como la ubicación idónea para controlar la capital de España. Se demostraba así que la idea de Napoleón desde un principio no había sido sólo invadir Portugal sino también hacerse con el control de España aprovechando la debilidad política que presentaba. De esto se percataron los ciudadanos

"Ie LAvATLE (r996),p.93.

Aunque Cartos III murió el l4 de diciembre de 1788, la realización de su testamenta¡ía se extendió durante varios años. Es por ello que el inventario de las pinturas del Buen Retiro está fechado en 25 de febrero de 1794. FERNANDEZ MIRANDA (1988), vol.I, pp.257-356. 20 "Reseña de las pinturas existentes en el Palacio del Buen Retiro", Pedro Gil de Bemabé, Buen Retiro 12 de julio de 1808. A.G.P., Buen Retiro, C 11760145. 2r Fernando VII accedió a los deseos de los Generales galos de examinar el Palacio Real del Buen Retiro y sus edificios adyacentes. Por ello dio orden para que se le franqueara el acceso al Capitan de Ingenieros franceses el 28 de marzo de 1808 (A.G.P., Buen Retiro, C 11765152). En cuanto atodo lo referente al alojamiento de 1as tropas francesas en el Buen Retiro puede consultarse: A.G.P., Buen Retiro, C 11760144.

I

244

GLozul M.qnrir'¡,2 Lp,rv.c

madrileños que el 2 de mayo de 1808 se alzaron espontáneamente contra los invasores. Sin embargo el levantamiento fue aplastado y el 5 de mayo Napoleón obteniala abdicación de Fernando VII y su padre Carlos IV en la ciudad francesa de Bayon*2. En previsión de que la población de Madrid pudiera seguir intentando sublevaciones más o menos parciales, el ejército francés inició la fortificación del Retiro en el mes de junio23. Así lo expresaba en una carta Napoleón a su hermano José: "Toda actividad es poca paratrabajar en estas fortificaciones... el buen sen-

tido y la experiencia prueban que el populacho de Madrid no estará tranquilo sino cuando esté bien sujeto. Haced colocar en el Retiro piezas de 24 y morteros; esto hará ala población sumisa y será de gran resultado"24. El Retiro quedó así convertido en una ciudadela tal y como refleja el "Plan du fort du Retiro a Madrid" que se conserva en la Real Biblioteca del Palacio Real de Madrid y que muestra el estado del Sitio y el aspecto de la fortificación militar (Fig. 5)25. En éste puede verse con claridad que la ciudadela del Retiro constaba de tres recintos amurallados. El primero o exterior abarcaba toda la extensión del palacio y sus jardines e incluía el edificio Villanueva y el Jardín Bot¿ínico. El segundo recinto era de forma irregular, pero constaba de nueve frentes avanzados en forma de flecha a la manera de las fortificaciones renacentistas. El tercero y último era un pequeño recinto, que rodeaba la Fábrica de la China, y tenía forma de estrella de ocho puntas. Panlaconstrucción de dicha fortificación fue necesariala tala y quema de numeroso arbolado, con lo que la destrucción de los jardines comenzó nada más llegar al Sitio las tropas napoleónicas; y la ocupación de la Fábrica de la China, una de las Reales Manufacturas más importantes creada en tiempos de Carlos

11126.

En cuanto a los edificios del Buen Retiro, en un principio las tropas francesas acamparon en los jardines y patios, pero en junio de 1808 se solicitabanya"las Casas y Quartos que han quedado vacantes para disponer de ellos para alojar tropas 1Oficiales"27. En este momento también se decidió ocupar el Coliseo del Buen Retiro que contaba todavía con buena parte de sus decoraciones. Los lienzos y bastido22

Napoleón convocó en Bayona, a Fernando VII y a sus padres, Carlos IV y María Luisa de Parma. El 5 de mayo de 1808 obtuvo de ellos la abdicación a su favor tras lo cual cedió la Corona a su hermano José I Bonaparte. Para más información ve¡: TORENO (1848), pp. 47-56. En 1809 la construcción avanzaba a un buen ritmo tal y como refleja el plano de Madrid del cartógrafo Bentabol (Service Historique de I'Armée de Terre, Vicennes, París. Litografado en 1823). En éste vemos como el amurallamiento de la segunda línea de la fortaleza aparece incompleto pero los bastiones en forma de punta de lanzaya estaban finalizados. Cartas de Napoleón Bonaparte a su hermano José I. En DUCASSE (1356), pp.359 y 373. 'o 2s Anónimo: "Plan du fort du Retiro a Madrid", 1811. Dibujo a plumilla y acuarela. 59x85 cm. Real Biblioteca, Sig. MAP/86 (6). 'u La Fábrica de la China fue establecida en 1759 por Carlos III en la ermita de San Antonio. Para su puesta en marcha el monarca trajo operarios procedentes de la napolitanafábica de porcelanas de Capodimonte. Durante la invasión francesa la China fue utilizada como almacén de armas. Esta construcción fue arruinada en l8l2 cuando fue volada por los ingleses. Para todo lo referente a la historia de la Fábrica de Porcelanas ver: MAÑUECO (1999). '1 A.G.P., Buen Retiro, C 11765159. Citado sin dar signatura por TOBAJAS LÓPEZ (1977a),p.60.

"

LA DESTRUCCIÓN DEL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO

245

res de escena que se usaban para las ricas escenografías del Coliseo fueron traslada-

dos a los sotanos del cercano Edificio Villanueva al ser considerados objetos de "crecido valor y utilidad"28. Junto a éstos también se llevaron algunos de los cuadros que permanecían almacenados en el palacio, aunque la mayor parte fueron trasladados al Palacio de Buenavista o a la Academia de Bellas Artes de San Fernando. Sin embargo algunas de las pinturas del Retiro fueron sacadas de nuestro territorio y vendidas en Londres en la casa de subastas de William Stewart en lg132e.

También hubo de ser entregado al comandante de la artellería francesa el cementerio del Sitio, muy próximo a la Fábrica de la China y por tanto cercano a la fortificación3o. Asimismo quedaron "evacuadas la Yglesia Parroquial de ese

Rl. Sitio y ta

y

Sacristan de la misma para alojar a los Convalecientes Franceses"". Tras la ocupación del Casón, en julio de 1808, los franceses escenificaron la toma total del palacio. Como dueños y señores del lugar incluso saquearon Casa de los Capellanes

las habitaciones de los empleados del Retiro llevándose sus escasas posesiones32. Por todo ello el Veedor del Sitio pidió "que, en atención a estar ya ocupado todo el Casco del Palacio

y

sus accesorias por los Generales, Yntendencia, Tesorería y tro-

pa Francesa, dueños de sus entradas

y

salidas, y a su disposición todos los quadros

y

enseres de su cargo, se le libertase de esta responsabilidad"33.

Durante el tiempo que Madrid estuvo en mano de los franceses el Retiro fue el cuartel general de sus tropas. Por este motivo cuando las fuerzas anglo-españolas, bajo el mando del duque de Wellington,lanzaron su ofensiva para libertar la Villa

y Corte, la peor parte se la llevó el Real Sitio. Dos días antes de iniciarse el asedio, el 11 de agosto de 1812, José Bonaparte había huido de la ciudad ante la victoria de Wellington en Salamanca. El 14 de agosto el comandante francés LafonBlaniac se rendía al comprobar que los ingleses habían atravesado la primera línea de defensa de la fortaleza.Temía que los ataques, cadavez más cercanos, acertaran a alguno de los polvorines instalados en el Retiro y se produjera una gigantesca explosión. La facilidad con la que el ejército aliado consiguió penetrar en el fortín francés del Retiro nos hace pensar que éste no debió de poseer la consistencia adecuada para este tipo de construcciones. Aunque también es probable que 28

La petición para que estos objetos se trasladaran al Museo fue realizada por Juan de Villanueva en 24 junio de 1808. A.G.P., Buen Retiro, C 71761165. 2eEn abril de l8l3 se remató en Londres a un altísimo precio un lote de pinturas supuestamente procedente de las confiscaciones realizadas por los franceses en el Buen Retiro. Para más información ver: FERNÁNDEZ GARCÍA (1998-1999), p.235 y DE LA MANO (2008), pp. 59-60. 30 29 de¡unio de 1808. A.G.P., Buen Retiro, C 11765164. r' 3 de ¡ulio de 1808. A.G.P., Buen Retiro, C 11765165. Citado sin dar signatura por TOBAJAS LÓPEZ de

(1977a), p.6r. 32De

ello se quejaba amargamente el Veedor del Sitio, Joaquín Marti¡ez de Mendinueta, en dos cartas enviadas al Príncipe de Nuchates y al Conde de Cabamus respectivamente, 12 óe diciembre de 1808. A.G.P., Buen Retiro, C 11765143. 33

ToBAJAS LóPEZ (1977a),p.60.

246

Glome MARrñpz LsNe

este tipo de fortificaciones militares sí bien fueron de gran utilidad hasta el siglo

XVm resultaran obsoletas para el modo de hacer la guena que se desarrolló en el siglo XIX3a. Tras la marcha del ejército francés la situación del Buen Retiro resultaba desoladora. Mesonero Romanos la describe de esta forma: "El pueblo de Madrid, que

durante cuatro años habia tenido como imponente ciudadela aquél sitio mismo que en otro tiempo formaba sus delicias, corrió a reconocerle a la salida de sus dominadores, y lloró de amargura al contemplar su actual estado", convertidos "sus jardines en terraplenes y campos de maniobra; y los escasos árboles que aun daban testimonio de sus antiguos bosques, estaban solamente regados con la sangre de las víctimas madrileñas"3s. El ejército de Wellington permaneció en la capital hasta finales de agosto. Antes de marcharse el General redactó un extenso memorando con instrucciones precisas respecto al Buen Retiro: "Se han dado órdenes al Mayor Hartmann, de la artillería real germánica, para preparar la destrucción de los depósitos y el incendio de los ediñcios del Retiro... Si se resuelve la retirada de Madrid se adoptarán inmediatamente las medidas convenientes para destruir el Retiro"36. Estas órdenes se llevaron a cabo el 3l de octubre de 1812 cuando el general Hill y sus hombres destruyeron las fortif,rcaciones del Retiro y volaron la f;íbrica de Porcelana, ante la inminente reentrada de los franceses en Madrid, la cual se produjo el2 de noviembre. El7 de ese mes Wellington decía así en una de sus cartas: "El edificio llamado "La China", en el Retiro, y todos los cañones, almacenes, etc., que aquella obra contenía fueron destruidos antes que las tropas salieran de Madrid"37. Poco tiempo antes de que se produjeran estos acontecimientos, el 13 de octubre de 1812, se había realizado un "Inventario del estado actual del Sitio y Casa Real de Buen Retiro" en el que se pornenorizaba cómo se encontraban las diferentes construcciones y jardines de que se componía el palacio3s. En dicho informe la mayor parte de los edificios se encontraban ocupados por las tropas inglesas y "en lo general maltratados, faltos de puertas, ventanas, vidrieras, y algunas rejas"; pero no presentaban daños mayores o irreversibles a excepción del Coliseo que había sido demrído en su totalidad. Mientras, el estado de los jardines era mucho más grave ya que "faltan todas las arboledas y plantas menores; el Parterre, escalinatas, pretiles, ornacinas, estatuas, y estanques" y muchas de sus ermitas y pequeñas edificaciones habían sido denuidas. Se consideraba que para hacer habitables las principales casas del Retiro, es decir, el Casón, Salones del Palacio y las

"35 CANTERA

MONTENEGRO (2008), pp. 125-148. N,m,soNERo RoMANos (1s4a), pp. 4oo-402. 36 MÉLIDA (1946), p. 80. 37I,m,LIDA (19a6), p. 81. 38 Ver anejo documental no l.

LA DESTRUCCIÓN DEL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO.

241

viviendas de "ostentación y comodidad" se necesitarían cerca de 300.000 reales de vellón3e.

El 17 de marzo de 1813 los franceses abandonaban definitivamente Madrid, pero aún habría que esperar más de un año, hasta el 10 mayo de 1814, para que Fernando VII volviera a la capital de España. Durante ese año el Gobierno de la Regencia mandó al arquitecto Antonio López Aguado, Teniente de Arquitecto Mayor de Madrid, que procediera a evaluar los daños sufridos en el Palacio Real de Madrid y en el Buen Retiro. En lo referente a éste último, informó al Mayordomo Mayor, Sr. Conde de Villapaterna, que los departamentos "que menos han padecido en el tiempo de la dominacn enemiga; quales son el patio de la Pelota, el de Oficios que esta contigüo a este y parte pral del Palacio", siendo "necesario demoler el resto de los demas edif,rcios que se hallan enteramt'ruinosos, y es dificil su conservación por falta de medios en las actuales circunstancias"4o. Como puede verse la situación que se describe es bien distinta a la que se señalaba en octubre de 1812. Se deduce pues que la voladura por parte de los ingleses de la Fábrica de la China afectó no sólo a ésta sino también al resto de las construcciones del Sitio, especialmente a los edificios que miraban al Jardín del Caballo, que eran los más próximos a la antigua Real Manufactura. Tras la entrada en Madrid de Femando VII, el soberano encargaba de nuevo a Antonio Aguado un informe sobre el Real Sitio. Aguado inició su examen por la Fábrica de la China la cual encontró muy destruida y con numerosas piezas de artillería entre sus ruinasal. Sus conclusiones fueron secundadas por el Arquitecto Mayor del rey, Isidro GonzálezYelánquez, quién "haviéndolo reconocido detenidamente... he hallado que la fachada del poniente est¿í la mayor parte caída y el resto amenazando ruina" por lo que consideraba "no ser posible repararlo en términos que pueda dársele algún destino útil, sin mui considerable gasto"42. El desmonte del ediñcio se inició de inmediato aunque el derribo definitivo no se efectuó hasta el 2 de enero de 1 8 1 643. La misma suerte corrió la ciudadela levantada por los franceses, la cual fue mandada derribar por Fernando VII el23 de octubre de 181544. En cuanto al estado del palacio, éste se encontraba en una situación ruinosa. El 11 de agosto de 1814 el Aparejador del Sitio, Diego Bolón, señalaba que "sí las aguas del próximo invierno lo acometen en esta situación, se envolberan en sus ruinas muchos de los efectos, que extrayéndolos en tiempo podrán ser útiles

3e a0

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l9 de septiembre de 1812. A.G.P., Buen Retiro, C 1176616. 5 de noviembre de 1813. A.G.P., Fernando VII,C 32113. 22 de¡.lnio de 1814. A.G.P., Buen Retiro, C 1176812,C 11769140y ToBAJAS rópr.z (1977b), p.

4l y C

11770161.

15.

En el verano de l8l4 ya hay una notificación que informa del comienzo de los trabajos de demolición en la Fábrica de la China (A.G.P., Buen Retiro, C' 11766138). Las noticias del derribo definitivo pueden encontrarse en: TOBAJAS LÓPEZ (1977b), p. 16. o4 ToBAJAS LóPEZ (1977b), p. 13.

GI-ozua MrRriNez

248

L¡rv¡.

para alguna de sus reformas, u otro cualquier destino"45. Ante estas noticias el monarca decidió enviar de nuevo a Isidro González Yelánquez a reconocer el Palacio. Éste, con fecha de 13 de septiembre, afirmaba que el estado del Palacio era "tan deplorable, que encuentro por absolutamente irreparable e inservible toda la parte de habitaciones ácia el Jardín del Caballo, Patio de Oficios y Jardín bajo que mira al mediodía, que deben demolerse con aprovecho de todos sus enseres". No obstante consideraba que "la parte que ocupan los Quartos de Sres. Ynfantes y todo el quadrado de las quatro torres que comprende la havitación de SS.MM., Salón de Pinturas, Pieza-recivimiento de Embaxadores, Salón de Reynos y de Coloma que da alaplaza de pelota, con algunos reparos de corta consecuencia en las torres, podrá cubrirse enteramente, y reponerse algunos suelos, para evitar la total ruina a que también está amenazada aquella parte en el próximo ynvierno"46. Yelázquez proponía paru llevar a cabo estos trabajos el aprovechar los materiales sobrantes de los edificios derribados y realizar una inversión de cerca de 500.000 reales de vellón. Sin embargo, una vez más, las arcas del Estado no contaban con el dinero necesario como para acometer semejante gasto. Lo que sí se autorizó fue la realización de trabajos de desescombro en las zonas ya derruidas, para 1o que se utilizó la mano de obra de presos encarcelados en Madrida'. Lo, escasos beneficios que se obtuvieron con la venta de los materiales de derribo no fueron utilizados para restaurar el palacio sino que se invirtieron en levantar cercas y pagar los gastos ordinarios del Sitio, véase: gastos de iglesia, jardines, arboledas, cañerías, norias, caballerizas, etc. La no realización de las reparaciones precisas en el palacio unido al hecho de los sonstantes robos de plomo de los tejados y otros materiales ag:udizó el estado precario de éstea8. Así pues, el 8 de enero de 1817, tras tres años de abandono, se hundió buena parte del Palacio "a excepción de la cruxía en que está situado el Salón de Reynos hacia Iaplaza grande llamada de la Pelota, y la gran sala titulada el Casón, que deve conservarse por las pinturas al fresco del célebre Jordán que en ella se hallan"ae.Isidro GonzálezYelázquez recomendó que se procedieraala inmediata demolición de las zonas afectadas, 1o que fue autorizado por el rey: "se ha servido mandar S.M. que V.S. proceda a su demolición, exceptuando

"ou ToBAJAS o'

LóPEZ(1977b),p. A.

ToBAJAS t-óppz (1977b), p. 15.

2l de noviembre de 1814. A.G.P., Buen Retiro, C 11769142. Los actos de pillaje fueron constantes pese a contar con vigilancia para evitar el robo principalmente de plomo y hierro. Muchos de estos hurtos se producían con la connivencia de los propios soldados o guardianes encargados de la custodia del lugar. Véase: A.G.P., Buen Retiro, C 11766146 y C 11773129. on TOBAJAS LÓPEZ (1977b), p. 16. Isidro GonzálezYelázq,rcz compartía la opinión expresada por Antonio Ponz ensttViaje de España'. "Sí algún día se pensase en reedificar este palacio del Buen Retiro, es de creer que bien lejos de que este pedazo de arquitectur4 que contiene la obra de Jordán, fuese comprehendido en las demoliciones, se pensase cuidadosamente en su conservación y en hacerle parte de cualquier proyecto por que sería gran lástima destruirla y dificil de suplir". PONZ ( 1793), p. 291 . a8

LA DESTRUCCIÓN DEL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO

249

la cruxia en que está situado el Salón de Reynos...y el Casón"5o. El pliego de condiciones del derribo fue firmado el 6 de febrero de 1817. En él se especificaba que "se habían de rellenar y macizar todos los huecos de cimientos y sótanos" y que la superficie de los solares debía de "quedar plana, y con solo el descenso necesario parala vertiente de las aguas". En cuanto al terreno de la Fábrica de la China, éste debía quedar aplanado "y dejando formadas las entradas de las cuatro calles que deben crrtzar y servir de Paseo y tránsito de coches..."51. Los trabajos de demolición se extendieron hasta 1819. Finalizados éstos el en su día extenso complejo palaciego quedó reducido al Casón y a los edificios que constituían laPlaza Grande, entre los que se contaba el Salón de Reinoss'6ig. O¡. El abandono en el que continuaron los edificios no destruidos hizo que en 1822 éstos estuvieran de nuevo en estado precario. Aunque la primera intención fue restaurarlos, la traslación de la Real Familia a Cádiz y la escasez absoluta de fondos imposibilitó que se iniciaran las obrass3. La falta de celo por la conservación de los restos del Real Sitio llegó hasta tal punto que en enero de 1823 se almacenó en el Casón un cargamento de pólvora, aunque un mes más tarde se decidió su trasladosa. Dos años después, en 1825,Isidro GonzálezYelá.zqluez, por orden del Administrador del Real Sitio, José Laviña, informaba de nuevo de la situación de las construcciones, las cuales encontró "en un estado deplorable y ruinoso a causa del abandono en que yacen"55. Ese mismo año se formó "Expediente de subasta para la demolición y construcción de las armaduras de los lados de la plaza cladrada del Rr Sitio del Buen Retir 0"56. La adjudicación de la obra quedó desierta y por tanto sólo se realizarcn algunos pequeños reparos de urgencia pero no se acometió la restauración en la dimensión deseable, por lo que los edificios siguieron su proceso de destrucción. Algunas casas accesorias como la de las herramientas o la Casa de la Fuente de la China cayeron, al igual que una de las torres del palacio que cerraba laPlazaGrandesT (Fig. 7). Superada ya la primeramitad del siglo XIX los terrenos, que antes habían conformado el palacio del Buen Retiro, fueron centro de la especulación arquitectónica. En 1865 la reina Isabel II vendía al Estado la parcela comprendida entre las to

Carta de la Mayordomía Mayor a Isidro González

Yelínqtez,2l

de enero de 1817. TOBAJAS LÓPEZ

(1977b), p. 16.

"s2 ToBAJAS

LóPEZ (t977b), p. 16. Isidro GonzálezYelázqtezrealizó por orden de Fernando VII plantas y alzados de los edificios no demrídos. Los planos fueron encargados para formar parte del Gabinete Topográfico del Rey, el cual debía de haberse emplazado en el Salón de Reinos, según Real Orden de 1832 (A.G.P., Buen Retiro, C l1't82141). A.G.P., Planero, no 1422, 1423, 4446 y 4451. tt A.G.P., Buen Retiro, C 11773143. 5o En el Casón se almacenaron 29 carros de pólvora. Después de varios informes diciendo que la ubicación no era 1a adecuada y reseñando el grave riesgo que corría la construcción, se decidió su cambio de emplazamiento el27 de febrero de 1823. A.G.P., Buen Retiro, C 1177314. 5s Ver anejo documental no 2. 'o A.G.P. Buen Retiro. C' 11773144.

t'A.G.P.,BuenRetiro,

C

11783136,C 11779188yC 1t794l22.EnTOVARMARTÍN 0959),p.25a.

Grorun M,qnrñpz Luve

250

calles de Alcalá, Alfonso XII, el Paseo del Prado y el Jardín Botánico. Cuatro año más tarde se decidía la demolición definitiva de la Plaza Grande, quedando tan sólo como vestigios del antiguo recinto palaciego el Salón de Reinos y el Casón58. Con estas intervenciones se daba lugar al nuevo barrio de los Jerónimosse. Por su parte los jardines fueron objeto de diversas intervenciones en época de Fernando VII. Se plantaron cientos de pinos, árboles frutales, tilos...uo; ,. crearon paseos

y parterres y se construyeron pabellones, a modo de los pintorescos "Ca-

prichos" arquitectónicos de los tiempos de Maria Antonieta en Versalles. La montafla artiftcial o "montaña rusa", la Casa del Pescador o la Casa del Contrabandista aún siguen en pie, aunque sus funciones ahora son bien distintas. Todas estas construcciones se ejecutaron en una parte del jardín denominada "El Reservado", entre las calles O'Donell y MenéndezPelayo, que quedó para el uso exclusivo del monarca y su Corte. Mientras, el resto de los jardines del Retiro se convirtieron en un gran parque público. Tras la revolución de 1868, la Gloriosa, la totalidad de la extensión de los jardines, incluido "El Reservado", pasó a ser propiedad del municipio de Madrid6r.

Er, EnmICIo VILANUEVA Muy próximo al Buen Retiro se encontraba uno de los lugares de paseo predilectos para los madrileños, el Paseo del Prado. Carlos III en su aflín de embellecer la ciudad y dotarla de edificios representativos centró buena parte de sus esfuerzos en el omato de esta arterialúdica de la ciudad62. Así, en 1779, el monarca mandó establecer el Real Jardín Botánico, en "las tierras que hay entre el paseo del Prado de Madrid y la antigua cerca del Rr Sitio de Buen Retir 0"63 , y unos años más tarde, en 1785, resolvía que se construyera junto a ese espacio un edificio para alojar el Gabinete de Historia Natural y un Laboratorio Químico6a. El encargado del proyecto tt El Salón de Reinos fue convertido en Museo de Artillería en 1841 [ver CASTRILLO MAZERES

(199'7)l mientras que el Casón fue destinado en l88l a albergar el Museo de Reproducciones Artísticas. Para conocer los avatares por los que ha pasado el Casón ver el estudio de UBEDA DE LOS COBOS (2008), pp. 55-89. se

Los diversos proyectos arquitectónicos que se elaboraron para este nuevo barrio han sido estudiados por SUAREZ PERALES (1989). u0 Sobre la llegada y plantación de diferentes especies de árboles procedentes de Aranjuez y otros Reales Sitios ver: A.G.P., Buen Retiro, C 11794141, C^ 1179714 y 36, C 10693147. 6' La totalidad de los jardines del Retiro fueron transferidos al Ayuntamiento de Madrid por un Decreto del Gobiemo Provisional de 1868, el cual fue confirmado por Ley en 1869. Para conocer al completo la historia de los Jardines del Reti¡o ver: ARIZA y ACERO (1990). u'Sobr. el carácter lúdico y social del Paseo del Prado y las transformaciones a las que se vio sometido, véase: LOPEZOSA (1991-1992), (2005a) y (2005b). 63 l3 de mayo de 1779. A.G.P. Buen Retiro, C 11757156. uo "El Rey ha resuelto se ejecuten las obras correspondientes á un Gabinete de Historia natural y un Laboratorio Químico y otras propuestas por V.S. en 25 de Enero del año próximo pasado". A.G.P., Buen Retiro, C 7069211, en MOLEON GAVILANES (1996), p. 15.

LA DESTRUCCIÓN DEL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO.

251

fue el Arquitecto Real Juan Villanueva, quien en mayo de 1785 yaterua listos los primeros diseños65. En el otoño de ese año se iniciaron las obras que fueron avanzando a buen ritmo gracias al interés del ministro Floridablancuuu. Arí se demuestra en el Memorial que éste dirigió a Carlos III el 10 de octubre de 1788, en el que afirmaba se estaba construyendo "un magnífico palacio a las ciencias, en cuya obra se empieza ya a descubrir que competirán la grandiosidad con la solidez, y la utilidad con la elegancia y la hermosura. Más de 700 pies de tierra ocupa este soberbio edificio que se halla muy adelantado, donde el riquísimo gabinete de historia natural que vuestra magestad ha erigido, el estudio y la Academia de Ciencias Naturales tendrán el domicilio que merecen los conocimientos más útiles de la humanidad"6T . Sin embargo, tras la renuncia de Floridablanca, los trabajos entraron en un proceso de ralentización y casi semiolvido. Es por este motivo que en 1808 cuando las tropas francesas imrmpieron en la Corte y se acuartelaron en el Retiro y en el edificio Villanueva éste último estaba todavía inacabado. En ese momento las tres fachadas principales se encontraban terminadas y las cubiertas estaban revestidas de plomo y pizarra, pero sin embargo la fachada posterior estaba sin finalizar. Reflejo del estado inacabado de la construcción es el dibujo anónimo conservado en el Museo del Prado que muestra como la fachada posterior estaba levantada hasta la cornisa general, mientras que la rotonda alcanzaba tan sólo el segundo nivel de impostas681Fig. 8). También refleja la situación inconclusa de la obra la maqueta de Madndrealizada por León Gil de Palacio, en 1830, en la que puede verse perfectamente como el cuerpo absidial todavía no había sido terminado y carecía de cubierta años después de que el Museo hubiera sido abierto al público6e(Fig. 9). En esta precaria condición fue como el edificio afrontó la ocupación francesa en mayo de 1808. Durante los cuatro años que éste sirvió como acuartelamiento los daños que padeció fueron cuantiosos. Antonio López Aguado, discípulo de Villanueva, detalló estos daños en su Descripción del Real Museo..., publicada en

1826.Pua Aguado "lariquezay el lujo arquitectónico que reinaban en aquel edificio, cubierto de un emplomado y empizartado muy doble, sentado y redoblado con maestría" desapareció debido a que durante la contienda éste "participó de las innumerables vejaciones que sufrió España... Su capacidad y situación local, convenientes al enemigo para objetos bien distintos del de su instituto, e incompatibles con la conservación de sus bellezas, ocasionaron multitud de deterioros en su fábrica, concluyendo por la extracción de todo su emplomado. Descubierto y 65

Los diseños creados por Villanueva es posible estudiarlos en toda su extensión en MOLEÓN GAVILANES (1996) y en VILLANUEVA Y CHUECA (2003). uu Los primeros movimientos de tierra y desmontes se iniciaron en noviembre de 1785. Latiena sobrante se envió para los jardines del Buen Retiro: A.G.P., Buen Retiro, Ca

6'BnRoqut

tfi57140.

(1932a), p. 16. ut Anónimo: "Vista de la galeria de arcos y del cuerpo absidial del edificio del Museo", ca. 1813. 14lxl92 mm. Madrid, Museo Nacional del Prado. u'Gil de Palacio, León: "Maqueta de Madrid", 1830, Madera, 5,20x3,50 m. Madrid, Museo Municipal.

Grorua MemiNsz LsrvA.

252

abandonado á la inclemencia durante los años de la dominación francesa, reconcentráronse en sus bóvedas todas las lluvias, amrinaron la mayor parte de ellas en todas sus alturas, y prepararon igual suerte a las restantes"70. Después de la marcha de los ocupantes se comisionaron diferentes campañas pa-

ra cuantificar los daños y aportar soluciones. Durante el Gobierno de la Regencia, Santiago Gutiérrez de Arintero, discípulo de Villanueva, en calidad de Caballero Capitular del Ayuntamiento, y Antonio Aguado, cumpliendo sus funciones como Teniente de Arquitecto Mayor de Madrid, realizaron diversos informes. El escrito de Santiago Gutiérrez fue presentado el 24 de agosto de 1813 y en él expresaba: "me es sumamente doloroso manifestar, que despojado sus cubiertas de todo el plomo que los vestía, inconclusos los faldones en los encuentros de las comisas y sus bajadas, mucha parte de pizarra y algunas molduras de madera, se penetra todo de las aguas, manchando y destruyendo la fábrica de sus lienzos. El destrozo que ya se advierte en la bobeda de la pieza circular donde termina la cruxia o nave principal, y en un granfrozo de esta, con la grave y pronta exposición que presenta mucha parte de las que forman los cubiertos, á igual desgraciado suceso, es también sumamente doloroso; sin que en todo el edificio se encuentre material, util, ni herramienta alguna de que poder sacar a provecho, pues todo quanto en el habia, no de corta consecuencia, ha sido substraido por la rapacidad francesa y gentes malintencionadas"7l. En efecto, como ya se ha señalado al hablar del Retiro, la rapiña de materiales continuó acabada la guerra ante la situación de penuria que vivian las gentes de Madrid72. Así el 30 de noviembre se daba orden para rcforzar la guardia de soldados que custodiaban tanto el Museo como el Jardín Bot¿ínico para que el robo de plomo y otros materiales que se producÍa de noche no continuaraT3. El edificio necesitaba de urgentes reparaciones si no se quería perder los más de cuarenta millones de reales que se habían gastado en su realizacíón En este aspecto hicieron hincapié los arquitectos consultados. Sin embargo la carencia de dinero iba retrasando el inicio de los trabajos. El estado de ruina llegó a ser tal que el7 de abril de 1814 se desprendía una bóveda y mataba a un operario que colaboraba en los ornatos para la entrada en la capital de Fernando VII. Tras este incidente, el 17 de octubre, se nombró a Antonio López Aguado como arquitecto encargado de la recomposición del museo proyectado por Villanueva. Para iniciar éstos trabajos Aguado contó con "la madera y texas de los derribos que puedan hacerse en los edificios de S.M. difíciles de reparar"Ta;y además se le asignó la cantidad de cuatro mil reales semanales para principiar las obras de consolidación. 1o

en:

LÓPEZ AGUADO (1839), pp. 193-195. Algunos extractos de este texto pueden encontrarse también pp. 49-50 y MOLEÓN GAVTLANES (1996), p. a5. Archivo de la Villa de Madrid (A.V.M.), Secretaría, 3-459-76. En MOLEÓN GAVILANES (1996),p. a7.

vILLANUEVA y CHUECA (2003),

"72

Véase nota no 48. Buen Retiro, C^ 11766123 A.G.P., Femando Yil, Ca 37415.

"?o A.G.P.,

y 31.

LA DESTRUCCIÓN DEL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO

253

En este momento el edificio no tenia aún un destino claro, pero su lenta reconstrucción era considerada una obra pública necesaria, útil y que debía servir para el ornato de la ciudad. La suerte del Edificio Villanueva cambió radicalmente en el otoño de 1814. El Consejo del Rey recomendó a Fernando VII, quién buscaba un

edificio para convertirlo en Museo de Pinturas, "aprovechar para este efecto el famoso edificio que a este fin y a costa de muchos millones se construyó por la magnificencia de los Augustos abuelo y padre de V.M. en el paseo del Prado"75. En un principio se había pensando en el Palacio de Buenavista como sede del Museo Fernandino, el mismo lugar que ya José Bonaparte había designado en 1810 como lugar para establecer su Museo Josefino, pero finalmente se consideró el edificio del Prado como más adecuadoT6. Todavía hubo que esperar cuatro años más para el nombramiento definitivo del Prado como sede del nuevo museo y para que se tomaran en serio las labores de restauración. De ello inform aba la Gaceta de Madrid el 3 de manzo de 1 8 1 8 . En el texto publicado ese día se decía que: "El estado a que ha venido, a consecuencia de una gueffa destructora que todo lo afaca, el magnífico edificio del Museo de Ciencias Naturales,... ha herido continuamente la vista del Rey Nuestro Señor, excitando su real ánimo, la gloriosa idea de perfeccionar su obra, que además de la grandeza de su objeto, concluida sería uno de los mayores ornatos de Madrid. Bien convencido de esto S.M., y de que las ciencias y las artes, recibirían un nuevo ser, reunidas en este hermoso monumento de arquitectura, y no menos cierto de que, no pudiendo llevarse a efecto esta idea de los fondos públicos, destinados a llenar otras atenciones, de preferencia,llegaría a anuinarse si su mano benéfica y protectora no le sostiene particularmente; para evitar tan doloroso término y erigir en este alcézar el trono de la ilustración española de las bellezas de las artes, y de los prodigios de la Naturaleza y fomentar en él el germen y el poderío de la industria y del comercio, se ha decidido S.M. en tomar bajo su peculiar cuidado la conclusión de tan importante establecimiento... Se ha dignado mandar S.M. que a la corta dotación señalada a este ediñcio últimamente para impedir que las aguas precipitasen su ruina... se contribuya con otra de su mismo real patrimonio, capaz de llevar a cabo sus deseos, disponiendo que se concluya con preferencia laparte destinada a galería de las Nobles Artes con la mira, según benignamente ha insinuado S.M. de colocar en ella, para su conservación, para estudio de los profesores y recreo del público, muchas de las preciosas pinturas que adornan sus Palacios Reales"71. Fenrtando VII se comprometía a dotar al edificio de veinticuatro mil reales mensuales a cargo de su bolsillo secreto. Según el Marqués de Santa

" Archivo Histórico Nacional, Consejos Suprimidos, Consultas, 1814. Libro 972e, fols. 340-349v. En MOLEÓN GAVTLANES (1996), p. 51. 'u Para conocer todos los detalles sobre la gestación del Museo Femandino ver: SAMBRICIO Q9a\,pp. 132-146. 17

Gaceta de Madrid,

3 demazo de 1818. En MADRAZO (1945), pp. 89-90.

Gronre MenrÍr'ez Luva

254

Craz, encargado de la formación de la Galería de Pinturas, con esta cantidad solo se lograba "repasar con lentitud una pequeña parte de las muchas quiebras que eil la pasada guera desoladora padeció el edificio que se reforma; cuyo ruinoso estr do exige imperiosamente que a la mayor brevedad se repasen las quiebras actuales sino se quiere aumentarlas progresivamente en lo sucesivo y por consiguiente los gastos"78. Aunque, como bien apuntaba el Marqués de Santa Cruz,la dotación económica señalada por el monarca no era muy grande, los dos arquitectos encargados de los trabajos, Antonio López Aguado e Isidro GonzálezYelázquez,logra ron ir haciendo las reparaciones más urgentes: enmienda de bóvedas, cubrimiento de salones, construcción de salas... Durante 1818 fueron llegando cuadros al Mrr seo y se fueron habilitando lugares para exponer obras. Así, con 1.531 cuadros en sus fondos, aunque tan sólo expuestos una pequeñaparte de ellos en las tres salas habilitadas en sus comienzos, el Museo abría sus puertas al público el 19 de ne viembre de 1819 (Fig. 10). Se iniciaba de esta forma la historia del Real Museo de Pintura, a la postre Museo del Prado, y concluía así la amenaza de ruina de uno de los edificios más bellos de la ciudad. Como se ha visto, los perjuicios que padecieron tanto el Buen Retiro como el Edificio Villanueva durante la contienda fueron cuantiosos. Laúilización de ar bos como lugar de acuartelamiento, tanto por las tropas francesas como inglesas, causó graves deterioros en su estructura. Sin embargo, como demuestra la docrr mentación, no podemos achacar todos sus males ala guera. Tras ésta la desidia por parte del gobierno,Iafalta de recursos económicos y el pillaje agtdízaronla situación extrema que padecían ambas construcciones. El edificio Villanueva le gró salvarse, y ha llegado a nosotros, gracias a que se decidió convertirlo en sede del Real Museo de Pinturas. Mientras, el Buen Retiro corrió más triste suerte y se optó por su destrucción antes que por su reconstrucción. Los beneficios de la especulación inmobiliaria se mostraron mayores que los de la restauración de rm palacio que había sido residencia de Austrias y Borbones. Con el Retiro no sólo se perdió un palacio sino también una forma de vida y de recreo de la monarquía, una forma de vida respetuosa con el patrimonio heredado de sus antepasadosTe y un recreo basado en los placeres de la vista, el gusto y el oído. Quizás los franceses no trajeron con su invasión "las luces" de su revolución, pero un cambio de mentalidad se produjo e hizo que nada volviera a ser 1o mismo.

78

"

El Marqués de Santa CruzalRey,22 de septiembre de 1818. BEROQUI (1932b),p.213. Como bien dice la Dra. Dña. Virginia Tovar: "... resulta ridículamente pedantesca la actitud a conti-

nuación de Fernando VII, que no se opuso a la devastación, sino que mirando el problema con ojos indiferentes, continuó el proceso de demoliciones, derribando sin piedad cuanto amorosamente habían hecho sus antecesores". TOVAR

tUanfÍN (992)- p.366.

LA DESTRUCCIÓN DEL PATRIMONIO ARQUITECTÓNICO..

255

ANEJO DOCT]MENTAL DOCUMENTO N"

1

INVENTARIO DEL ESTADO ACTUAL DEL SITIO Y CASA REAL DE BUEN RETIRO, 13 DE OCTT]BRE DE 181280

Palacio: Entrando por los Jardines se halla el apiadero undido, sin techo, sin puertas, ventanas, vidrios, ni redes.: La pieza de los espejos, sin ninguno, una oja de la puerta caida. : El Casón, pintado famosamente por Jordán, está en buen estado, aunque falto de vidrieras (aquí hay un Molino de harinero pequeño). : El Antecasón pintado por el mismo Jordiín se hallo estropeado, por causa de goteras, y haber echo un bujero en su Bóbeda. : Las habitaciones de Ynfantes e Infantas, medianamente tratadas, faltas en parte de ventanas y vidrieras. : Quarto del Rey, y la parte del partio del Guindo tienen varios suelos, techos y tejados undidos; los embaldosados rotos, falto de algunos balcones, con especialidad en los dos terrados. : La enfrada por el patio de Oficios contigua al dicho del Guindo, se halla, sin puertas, estropeada la escalera, y undido su techo. : El Quarto del Príncipes, bien tratado, aunque falto de vidrieras, alguna ventana y puerta. : El Salón del cuerpo de Guardias de la Reyna, Reynos, Coloma, y la escalera llamada de Reyna, en buen estado, solo falto de vidrieras. : Los pisos vajo y segundo en lo general maltratados, faltos de puertas,

y algunas rejas.

:

Debajo del quarto de Ynfantas y del Salón de los Reynos, hay dos Almacenes de tenajas grandes que según dicen contenian aceyte, vinagre, aguardiente, y vino, pero estos están en poder de los Yngleses; todos los tejados, empizarrados y emplomados necesitan recofferse. - El Coliseo está demolido.: ventanas, vidrieras,

Jardines de dentro de Palacio: El JardÍn llamado de Francia; y los dos jardinitos inmediatos al Casón; en buen estado, au:Ique sin cultivo; sus puertas estropeadas. : El del Caballo, está erial, existe la estatua ecuestre, en buen estado; faltan dos o tres trozos de varandillas de yerro, y la puente desbaratada. : El de los Reynos está erial, desechas sus dos puertas y pilones; falto de puertas, con su portillo a el Olivar del Convento de S" Gerónimo. Patio de Oficios: Compuesto de treinta habitaciones; La fachada del Norte, contigua a Palacio, es de trece, con inclusión de la Botica del Sitio, surtida por la de la Rl. Está sin tejado la mayor parte; sus habitaciones estropeadas, faltas de puertas y ventanas. : La que mira al Oriente, que comprende sus havitaciones, est¿ín en igual estado; y en esta misma por la parte que mira al Prado, han abierto dos comunicaciones por una reja, y una lumbrera de cueva. : La del mediodia compuesta de once habitaciones están medianamente tratadas, faltas de algunas puertas

estropeado el tejado. : La fachada del poniente, corresponde a Palacio. llamada del Angel, está por dentro, hasta la mitad tapiada.:

:

y

ventanas,

y

algo

La puerta de entrada

Plazuela de la Pelota: La Casa inmediata a Palacio y Coliseo, conocida por la de la Condesa de Torre-Palma; está poco maltratrada, falta de vidrieras, algunas puertas, y el todo de llaves en sus tres pisos; en el bajo hay tres quadras; y está ocupada por la hopa. : Además hay en dicho Patio, diez y ocho havitaciones corrientes, aunque faltas de vidriera en la mayor parte, alguna puerta, cerraduras 80

y llaves;

ocupada la fachada del medio-día

AGP, Secc. Buen Retiro, Cu 11766110.

y poniente por dependientes del Sitio,

sus

Glop¡n MenrÍNez Lprv¿.

256

oficinas y el Governador de las Armas Yngles; La de Oriente por tropas

y la del Norte es una de

las de Palacio.:

Oficinas: En las espresadas Oficinas, de Veeduría, Contaduría, Tesorería y Escrivanía, existían sus Archivos, en la que se han encontrado 1o siguiente. : [Aquí

se detallan una serie de legajos de documentación que no

transcribimos]

Entrada a los Jardines: A la derecha,

esta el antiguo Juego de requeta, que se halla en buen estado, y ocupado por el cuerpo de guardia que guarnece el Sitio.: A la izquierda de se hallan cinco habitaciones, las quatro regularmente tratadas, faltas de vidrios, algunas puertas, cerraduras y llaves, y la otra, que servía para el carpintero, está amrinada.: Dos afarazar'as o depositos del Coliseo, están tal qual, la una con paja de la que se surte la tropa.:

Plazuela de la Carniceria: En la fachada del Norte, hay dos habitaciones ocupadas por Dependientes del Sitio, las que se hallan en buen estado, aunque faltas de alguna puerta, cerraduras, ¡, quasi todo de vidrios.: La cochera y dos caballerizas que estrín debajo, siguen igual suerte, aunque falta alguna otra puerta, y rotas otras.: La fachada de Oriente, que tiene diez habitaciones, las nueve se hallan am¡inadas por causa de haberse quemado sus tejados, y después las aguas haber hundido sus pisos, y la otrahabitación restante, está en buen estado aunque falta de vidrieras; ocupada por los Yngleses; Asimismo las dos quadras y el quarto que servia para el Regalero de Aran-

juez, solo tiene las puerta un poco estropeadas; el Quarto que servía de Carcel, está medianamente tratado, aunque falto de puefias interiores.: El Quarto bajo que le sigue se halla en iguales términos.: La fragua del sitio está desecha.: El quarto del Arquitecto (inmediato a la puerta de Yerro) cochera, y quadras, de mediano estado, falta de algunas puertas, cerraduras y vidrieras, ocupado por los Yngleses. Fachada del Medio-día: Casa del Aparejador y cochera, está en buen estado, menos las puertas: ocupada por la Tropa.: Seis cocheras, en buen estado, menos las puertas, en una de ellas se halla un boquetón que comunica al Jardín de la Primavera.: La Hermita de Sn Juan y Casa Quartel inmediato, están amrinados.: Las dos habitaciones inmediatas, y que miran a poniente, hasta la puerta de Povar, están bien tratadas, pues solo le faltan vidrieras, ocupadas por la tropa.: Las ocho havitaciones que hay desde dicha puerta hasta la que sale al patio de la pelota, estián irregularer aunque faltas de vidrieras, algunas puertas y cerraduras; ocupadas por Portugueses.- La cochera ¡ quadra que sigue, se están hrurdiendo los tejados, y las puertas rotas.: En el medio de esta fachadahan hecho una cofadura para abrir puerta de comunicación al Corralón, llamado de la Munición a Almacén del Sitio, en el que se halla una Casa, fundición de metales, executada anteriormente por Dn Agustín Betancour; y en ella se hallan construidos varios homos para galleta con sus maseras que está cerada, y a sus lados dos cobertajos que servían para custodiar materiales, est¿ín hundi-

dos.: En todo lo que he reconocido, no se ha encontrado cosa alguna que merezca atención, mrís qrx alguna ofra mesa ordinaria de pino, sillas, y taburetes rotos y pedazos de tablas despreciables. 1 reliquias del saqueo general que sufrieron los dependientes de este Sitio, y algunas puertas de la arrancadas: Pero tanto Palacio, como las demás habitaciones se hallan llenas de inmundicia combro, sucediendo lo mismo con sus Plazuelas.

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Jardines y Edificios interiores: Entrando por la puerta a los Jardines (llamada de Aparicio) a m¿rr¡La derecha se ve, faltan todas las arboledas y plantas menores; el Parterre, escalinatas, pretiles, ornacinas, estatuas, y estanques; no existen.: El Jardín de Sn Pablo, sus Arcas, Casa, Salones y fuentx tan poco; sólo se encuentra el Pedestal de la Estatua de Carlos V, y algún cerco de pilón; en e*. parte falta la cerca que dividía de este Sitio el Olivar de Sn Gerónimo.: Las habitaciones de Ba¡rir' hermoso, ocupada por la Tropa; y el Lavadero, existe, aunque con algún detrimento.: La cerca qrr

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257

continua del Olivar de S" Gerónimo al angulo de la Fábrica de la China, falta su mitad y algunos otros portillos en lo restante.: El Cementerio, existe exteriormente.: La cerca del Sitio que lindava al Poniente con el Botanico, hacia frente a Sn Blas, lindando con el Observatorio y continuava dividiendo el Olivar de Atocha por el pedazo de los Benados, hasta la cerca del resguardo; nada existe.: El Plantel de S" Antonio, su noria y estanque, tan poco.: La noria del Portón de dicha fábrica existe con toda la circunferencia de ésta fortificada.: La noria alta también existe, aunque en mal estado.: El Juego del Mallo, desbaratado y extraida su cantería.: La tarazana grande, no existe.: El Palomar chico, existe.: Las dos norias cubiertas de la derecha, del estanque grande, y sus estancos, demolidas y ciegos sus pozos.: El Barrio nuevo, quemado, y su mitad en ruinas.: La Yglesia Parroquial, havitaciones de Capellanes, Sacristanes, Escuela, Quaüas, Pajares, Cocheras, habitaciones de sus dependientes, y Jardín de S'Bruno, solo hay parte de sus escombros.: El estanque de la Torrecilla, desecho.: Hasta aquí en todo lo dicho no existe ningún arbol.: Al estanque grande, le faltan tres trozos de varandilla.: La Noria del plantel de la Viña existe el edificio, y ciego el Pozo.: La del plantel de la Magdalena, amrinandose, y quasi ciego el Pozo.: Los dos Planteles dichos de Viña y Magdalena; sólo tienen dos boquerones en sus cercas, las puertas estropeadas y faltas de cerraduras.: Las Plantas mayores y estanques no existen en buen estado, y hay algunas verduras.: El Quartel de los Arbolistas no existe.: La puente de la Viña y su paseo en buen estado.- La Casa del Guarda, amrinada.: La Casa reservada de aves, al cuidado de Dn Eusebio de Aria, se halla en un estado muy regular.: El Plantio viejo, del pedazo de la leonera, sus paseos y arboledas, verjas de la Glorieta, noria y los tres estanques pertenecientes a este plantio; en un estado mas que mediano.: Al Jardín de Primavera le falta el emberjado de madera, hay algunos frutales y verduras, y tiene dos comunicaciones con el Patio de Ia Carniceria.: El Jardín de So Juan, existe con algunos fiutales, y fuentes, la estufa sin las vidrieras; y han havierto otra comunicación a dicho patio.: La Leonera, existe, con sujaulas y puertas de llerro, falta alguna ventana y

erage, demás esta bueno. Fontanería; viaje alto: En la fuente de la Viña, falta el Caño de subida, el arqueton de plomo, las dos bajadas, la una que surte a la fuente de la Viña, y la oha a la Casa de Aves.: En la mina principal del Bosque, faltan seis trampillas de llerro, y la puerta del Arca del León; también están seis varas de la Corona de los Galapagos hundidas.: En la Fuente de los Barrios, está cortada la cañería por tres partes, con las baterias; y los caos del plomo sin ningún betun.: En la Noria del Mallo, faltan un Arquetón de repartimiento y unos doce pies de caño, de a tres en plancha.: En el jardín de la Viña, faltan las dos subidas de los dos estanques.: En el estanque de la Leonera, faltan las subidas y bajadas, el Arquetón de plomo y la ventanilla de madera; a la parte de adenho faltan las dos bajadas, la subida, el arquetón y puerta de madera; La cañería principal de este viage está rota en el prado de la Magdalena, junto a Cha-martín.=

Viage de Ia Castellana: Este viage está estancado junto a la puerta de las Eras; faltan dos trampillas de yerro y parte de dos bajadas en el jardín de S"Bruno.: En el plantel de la Viña, faltan cinco llaves de Bronce para los riegos.- En el de la Magdalena quatro.: En el de la primavera, y So Juan; dos.: En el estanque de la Leonera; una.: En el estanque de entre planteles; otra.: Para el plantio nuevo de la Viña; dos.: En los dos estanques de las norias del Mayo, quatro.: En el Parterre, para el riego de los Jardinitos; dos.: En el riego de la Torrecilla, tres; y parte de la cañería.: Buen Retiro, 13 de Octubre de 1812. Fdo: Joaquín Martínez de Mendinueta.

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GLORIA MARTiI\,ez

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DOCUMENTO N"

2

RECONOCIMIENTO DE LOS EDIFICIOS DEL REAL SITIO, 7 DE MARZO DE 18258I "En cumplimiento del anterior decreto de V.E. he pasado a practicar un detenido reconocimiento de los edificios que forman laplaza de Palacio del RrSitio de Buen Retiro, y más particularmt' la linea de habitaciones adyacentes a la Yglesia, Palacio, Salón de Reinos y habitación que fue de Betancourt, y encuentro que todos estos puntos y otros varios se hallan en un estado deplorable y ruinoso a causa del abandono en que yacen, y que para contener la proxima ruina que amenazan) se hace indispensable el que se verifique su precisa y pronta reparación, al menos en la de los puntos siguientes:

En las habitaciones contiguas a la Yglesia, es indispensable desvaratar su armadura, construyendola después a una proporcionada corriente, constituyendo asimismo sus guardillas, echando nuevas las maderas que necesite, como algunos trozos de suelo; y la parte de habitación ala contigua a dicha armadura demolerla, para que todo quede a una misma altura. En el lado de Palacio, incluso el salón de Reinos, se destejariín en general sus armaduras y guardillas, reponiendo los canecillos y maderas que se hallan podridas, y enseguida se tejará, pero antes en la fachada opuesta a la principal, se recrecerá de fábrica toda la altura del piso segundo con los aplomos de los otros pisos; igualmente se reforzarátn las dos alturas del piso bajo y principal en toda su linea. En la parte del edificio de la habitación que fue de Betancoult, es necesario construir un de nuevo todos sus aleros, de la misma forma q' los anteriores , reforzando antes las fachadas qt miran al Jardín y al paseo del Prado, destejando todas sus armaduras y echando varios tramos nuevos, como igualmente algunos trozos de suelos que se hallan totalmente podridos y apeados; y no es menos urgente la demolición del chapitel por la proxima ruina que amenaza, con inminente peligro de los que habitan en sus alrededores.

En los restantes edif,rcios que forman laplaza se hace preciso ejecutar un recorrido general de sus tejados, echando al mismo tiempo algunas maderas nuevas, por que las que existen en la actualidad se hallan podridas. En las cuatro fachadas de dicha plaza,es necesario ejecutarunrecorrido o reforzado, particularmt' el de sus zócalos que se hallan muy deteriorados y destruidos, tendiendolo después de estuco, como asimismo 1as fachadas dichas aquí, opuestas a esta. En el interior del Palacio el Salón de Reinos, habitación que fue de Betancourt, y partes de las otras dos fachadas, falta toda su distribución, puertas, ventanas, solado..., y aunque el coste de estas obras sería de alguna entidad, no exigen su pronta reparación.

Todas las obras de reparación expresadas por un calculo de aproximación, aunque aventurado, y sesenta mil reales de vellón, pues no es posible fixarlos, sin antes descubrir y ver el estado que tienen las maderas de sus armaduras, guardillas, aleros y demas partes ascenderá a unos ciento

ruinosas, para poder venir en conocimiento de lo que resulte aprovechable e inutil cálculo mas acertado. Esto es cuanto puedo informar a V.E. en el particular. Madrid, T demarzo de 1825. Fdo : Isidro Y elázquez" .

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A.G.P., Buen Retiro"

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11773143.

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Fig 3. Santiago Bonavía: Proyecto para reformar e/ Quarto que habitan Palacio del Buen Retiro, 1746. Archivo General de Palacio, Madrid.

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Fig 4. Vicente Urrabieta y Ortiz: Tratado de Fontainebleau, 1807. Colección Artelio. Pamplona.

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Fig 6. León Gil de Palacio: Detalle de la Maqueta de Madrid, 1830. Museo Municipal, Madrid.

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§ Fig 7. Charles Clifford: Detalle de La carrera de San Jerónimo con el Museo del Prado y la carrera de San Jerónimo, 1853. Biblioteca Nacional de España, Madrid.

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Fig 8. Anónimo'. Vista de la galería de arcos y del cuerpo absidial del edificio del Museo, ca. 1813. Museo Nacional del Prado, Madrid.

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