JOHN ADAMS y análisis de su obra \"CHINA GATES\"

JOHN ADAMS “CHINA GATES”

Trabajo de investigación

Alejandro Escuder González

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ESCUDER GONZALEZ, Alejandro (2012). John Adams. “China Gates”: Trabajo de investigación.

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ÍNDICE Pág.

v Presentación del trabajo.

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v Contexto histórico-musical de la época.

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v John Adams | Biografía

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Introducing to… Comienzos en Nueva Inglaterra. California y las nuevas influencias. Nixon in China, su primera ópera. Los años ’90. La consolidación de Adams y el reconocimiento. La figura de John Adams en la actualidad.

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v La música de John Adams | Estética | Estilo | Catálogo

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• Catálogo de obras.

v “China Gates”

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• Historia y descripción de la obra. • Análisis compositivo y interpretativo de China Gates.

v Bibliografía.

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DOCUMENTOS ADJUNTOS -­‐ Partitura de China Gates

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Presentación del trabajo En este trabajo vamos a analizar a fondo la vida y la música de John Adams, un compositor muchas veces definido como minimalista, aunque no es el término más correcto. En este trabajo aprenderemos cómo Adams llegó a estar donde está en la actualidad, rechazando los cánones compositivos que venían desde Europa, ya que no le satisfacían. Y también de cómo comenzó a pensar su música cuando empezaba a alcanzar su madurez musical con China Gates, y cómo busca complicar la simplicidad, y sobre todo buscar una expresión perpetua en su música, pero sin que ello suponga que sea aburrida, monótona, básica o incoherente, sino todo lo contrario.

Contexto histórico-musical de la época. Nos encontramos en EE.UU., en el estado de Massachusetts. John Adams nació cercano a los años 50s. Entonces no hacía apenas 5 años que la II Guerra Mundial había finalizado. Estados Unidos pese a la victoria también tenía cierta crisis porque habían tenido muchas bajas en la Guerra y se habían empleado también muchos recursos. Pero si miramos concretamente la época creativa del autor, el panorama es completamente distinto. En los años 70s, EEUU era un país en crecimiento continuo, tanto tecnológico como social. No hacía mucho que se habían producido las vanguardias de John Cage o el asentamiento del minimalismo. Mientras otros compositores seguían buscando seguir la línea de los compositores contemporáneos europeos, y también estaba el auge del jazz y también de The Beatles. Todo influye. En resumen, una época con mucho por descubrir, mucho por hacer, prácticamente un segundo nacimiento para la sociedad americana que Adams no dudó en sacar provecho de ello para poco a poco hacerse un hueco en el panorama musical americano entre 1980 y el 2000 hasta ser uno de los máximos exponentes de la música contemporánea en Estados Unidos. Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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John Adams (1947 – *) | Biografía | Introducing to… John Coolidge Adams nació en Worcester, Massachusetts (US), el 15 de febrero de 1947. Se define a sí mismo como compositor, director, y pensador creativo. Adams ocupa una importante posición en el mundo de la música americana. Sus obras operísticas y sinfónicas destacan entre las composiciones contemporáneas por la profundidad de su expresión, la brillantez del sonido y el carácter profundamente humanista de sus temas. Durante los últimos 25 años, la música de John Adams ha jugado un importante papel en la transformación y evolución de la estética musical contemporánea y modernista europea, y conducir a la música lejos de lo académico y hacia un lenguaje más expresivo, característico de su sonoridad y su entorno propios del Nuevo Mundo –así lo define él–. Actualmente, el compositor es aclamado por su habilidad de componer música que une técnicas minimalistas y música popular americana al idioma sinfónico del siglo XIX. Su obra tiene una influencia diversa, basándose en el minimalismo, en el jazz, en Mozart, el funk, Schoenberg, el rock y el ragtime. Ciertamente es uno de los compositores americanos más interpretados en la actualidad.

Comienzos en Nueva Inglaterra. Su infancia en Nueva Inglaterra estuvo llena de música. Aunque nació en Worcester, creció durante su infancia en Vermont y New Hampshire. Su padre era clarinetista y su madre cantaba con bandas de jazz y hacía comedia musical. Su abuelo administraba un salón de espectáculos donde el joven Adams escuchó a Duke Ellington, el gran maestro del jazz. Adams empezó a tocar el clarinete recibiendo sus primeras clases con su padre. Más tarde con Félix Viscuglia, clarinetista de la Orquesta Sinfónica de Boston. Desde temprana edad empezó a tocar en orquestas municipales y en bandas. Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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A los diez años, comenzó a tomar sus primeras lecciones de composición y de teoría musical y a escribir sus primeras composiciones musicales. Poco después, ya estaba dirigiendo una orquesta municipal patrocinada por el Hospital Mental del Estado de New Hampshire. Cuando tenía sólo catorce años, dicha orquesta estrenó una de sus composiciones frente a una audiencia de pacientes con problemas mentales. En 1965, ganó una beca para Harvard, donde concluyó tanto su licenciatura (BA) como su postgrado o “Master of Art” (MA). Aunque realmente cuando entró en esta institución sus estudios estuvieron centrados en la dirección y la interpretación del clarinete, poco a poco se fue atrayendo cada vez más por el mundo de la composición En Harvard, junto con otros estudiantes aprendió en el método dodecafónico de composición, originado por Arnold Schoenberg. Pero a Adams, pese a respetaba a su profesor Lon Kirchner, encontraba demasiado cerrada la atmósfera de la música académica. Terminó sus estudios en 1971, durante los cuales tocó el clarinete eventualmente con la Sinfónica de Boston, y también dirigió la «Harvard University Bach Society Orchestra». Habitualmente los graduados en Harvard solían elegir viajar a Europa para completar sus estudios, pero John, poco conforme con la música serial, prefirió elegir la costa oeste de Estados Unidos en busca de la libertad necesaria para explorar nuevas opciones.

California y las nuevas influencias. En 1972, Adams cargó con todos sus bienes su Volkswagen y marchó rumbo a California, atravesando todo el país, hasta llegar a la San Francisco Bay Area. John Adams comenzó a trabajar allí como profesor en el Conservatorio de Música de San Francisco entre 1971 y 1982, donde dirigió el ‘New Music Ensemble’. Adams cuenta que en sus inicios como profesor no se sentía seguro, se sentía novato y a menudo sus alumnos eran mayores que él, que tenía 25 años, pero lo positivo es que a base de errar aprendió mucho de sus alumnos: “No estoy muy seguro de que fuera un buen profesor, pero si sé que los diez años que pasé en el Conservatorio constituyeron la parte principal de mi propia educación como músico, y sé que no habría podido ser el compositor que soy de no haber surgido de ese ‘maelstrom’ loco de la vida en la escuela (...) Y los estudiantes me cambiaron irrevocablemente. Sé que es un cliché decir «aprendemos de nuestros estudiantes». Por supuesto. Pero aprendí aún más. Aprendí humildad, comprendí que el talento genuino para la música es un regalo que es repartido injustamente por la naturaleza, como en atletismo.” John Adams. Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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Al principio se influenció mucho del vanguardista John Cage. Pero fue allí y durante esos años donde comenzó a conocer la música de los maestros minimalistas como Terry Riley, Steve Reich, Philip Glass… lo cual supuso una gran fuente de inspiración y cambio para él. Pareció encontrar entonces el inicio de la solución a su dilema creativo. Pero John Adams tomó una dirección del minimalismo muy diferente de Reich o Glass, ya que le parecía muy mecánico y él buscaba un grado de cambios más veloz junto con un lenguaje mucho más emocional. Según él, “intentaba incorporar aspectos trágicos de la vida en su música, que es algo que el minimalismo aún no había podido hacer”. Acuñó su música entonces bajo el término “post-minimalista”. En 1977 Adams compuso las dos primeras obras que serían la prueba evidente del comienzo de su idea y estética musical: Phrygian Gates, y China Gates, ambas para piano solo. El compositor consideró estas piezas como su verdadero opus 1, y calificó que las piezas suyas anteriores de los años 70s no tenían un lenguaje propio. También forma parte de la estas ‘primeras nuevas obras’ el septeto de cuerdas Shaker Loops (1978). Estas obras se caracterizaban por tener unas modulaciones imprevistas y un lirismo líquido, que contrastaba con el discurso poco-móvil típico del minimalismo. Estas tres obras fueron estrenadas en 1978 y se grabaron (las primeras grabaciones de obras de Adams) al año siguiente con el sello 1750 Arch Records. En 1978, Edo de Waart le nombra consejero de música contemporánea de la Orquesta Sinfónica de San Francisco primero, y en 1982 compositor residente de la misma durante 3 años. Estancia durante la cual estrenaría muchas obras a través de la serie “New and Unusual Music”. Algunas de las obras que compuso y estrenó en este periodo fueron Harmonium (1980-81), Grand Pianola Music (1982), y Harmonielehre (1985); y más tarde estrenó por encargo de esta orquesta El Dorado (1991), El Niño (2001), My father knew Charles Ives (2003) y A Flowering Tree (2006). En concreto su obra Harmonium, una obra para gran orquesta y coro sobre poemas de Emily Dickinsin y John Donne, fue un éxito inmediato y un trabajo que anunciaba un nuevo periodo de vuelta a la tonalidad. El éxito que tuvo animó a que en la década siguiente hubiera una revolucionaria vuelta a la tonalidad. Si Adams ya tenía fama en la zona de San Francisco, tras el éxito de Harmonium y sus buenas críticas, pasó a ser conocido en todo el país hasta ser el compositor americano más interpretado en salas de conciertos en un plazo de 10 años. Su siguiente obra, Grand Pianola Music (1982) fue la primera que pudo ver interpretada por dos de las más grandes orquestas del mundo, la New York Philarmonic Orchestra y la Royal Concertgebouw de Ámsterdam. Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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Nixon in China, su primera Ópera. En 1983, Adams conoció al joven director escénico Peter Sellars y a su amiga la poetisa Alice Goodman. De esta asociación nacieron sus dos primeras y rompedoras óperas: Nixon in China (1987) y The Death of Klinghoffer (1991). Sellars quería crear una ópera sobre el histórico viaje de Richard Nixon a China y su reunión con Mao Tse-Tung en 1972. Adams al principio se mostró escéptico porque no hablaba sobre arquetipos y mitos como la ópera de siempre, pero entonces se dio cuenta de que podía hacer una nueva ópera inspirada en los personajes de su tiempo. Finalmente Goodman escribió el brillante libreto; Adams compuso la enérgica música y Sellars dirigió el espectáculo. Comenzó a componerla en 1985 y dos años más tarde Nixon in China se estrenó en la Grand Opera de Houston. La obra obtuvo buenas críticas, fue transmitida por televisión y ganó el Premio Pulitzer. Nixon in China se convirtió entonces y es hoy día la obra más conocida de Adams, y dos años después del estreno ganó el Premio Grammy a la “Mejor composición contemporánea”. Se considera al cuarteto formado por Sellars (director), Goodman (libretista), Mark Morris (coreógrafo) y John Adams (compositor) como los iniciadores de un nuevo teatro musical post-modernista, que mezclaba danza, música, con videos y proyecciones. Adams intentó mantener el espíritu logrado en el último acto de la ópera para sus próximas obras, y el resultado fue su obra orquestal Fearful Symmetry (1988), una pieza loca, acelerada y llena de ritmos “pop” estadounidense. En contraste, le siguió la introvertida The Wound-Dresser (1989), una pieza intimista.

Los años ‘90. Tras el éxito de su primera ópera, Goodman, Sellars y Adams se juntaron nuevamente entre 1989 y 1991 para crear una segunda ópera: The Death of Klinghoffer, la cual trata sobre el asesinato de un anciano judeo-estadounidense por unos terroristas palestinos en 1985 a bordo de un trasatlántico secuestrado, el Achille Lauro durante una travesía por el Mediterráneo. Adams reveló que había tenido mucha influencia de las Pasiones de J.S. Bach para la creación de la ópera. La base emocional de la obra es el coro, oscuro y disonante. Esta obra contrapuntística y cromática queda lejos de post-minimalismo de su primera ópera. El estreno se llevó a cabo en la Ópera de Bruselas en 1991.

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Esta obra tuvo su cierta controversia y crítica, que se vio aumentada por coincidir su estreno con la Guerra del Golfo (en 1991), pero Adams no dejó que ello le afectara y siguió escribiendo música dramática. Sus siguiente trabajos fueron orquestales. El primero después de la ópera, fue El Dorado (1991), por encargo de la San Francisco Symphony (como ya hemos dicho con anterioridad). Una obra que alude a los conquistadores españoles en las américas y su afán por conseguir oro. Esta obra fue posteriormente premiada con un Grammy, en 1998. En esta década compuso varias de sus mejores obras entre las cuales incluimos y resaltamos la Chamber Symphony (1992) –para 15 instrumentos–; su Violin Concerto (1993) –encargo de la Minnesota Orchestra e interpretado actualmente por numerosos violinistas en todo el mundo–, que fue premiado con el Premio Grawemeyer de Composición; John’s Book of Alleged Dances (1994) –de nuevo con carácter intimista–; Slonimsky’s Earbox (1996); Concierto para piano (1997) –escrito para el famoso pianista Emanuel Ax y estrenado por él mismo–; y Naïve and Sentimental Music (1998), un gran ensayo orquestal de más de 50 minutos, reconocido como uno de los mayores aciertos compositivos orquestalmente de John Adams. En 1994 volvió a colaborar con Sellars y en esta ocasión con la poetisa June Jordan en la creación de un nuevo teatro musical: I Was Looking at the Ceiling and The I Saw the Sky, comedia musical que terminó de componer en 1995, año en que se estrenó en Berkeley. La obra era un meditación acerca de un terremoto que hubo en Loma Prieta en 1989. Adams buscó en esta ocasión crear una obra “de canciones” al estilo West Side Story de Bernstein, o Porgy and Bess de Gershwin.

La consolidación de Adams y el reconocimiento. Entrado en el nuevo milenio, John Adams compuso un oratorio navideño multilingüe (en inglés, español y latín) que tituló El Niño (2000), también colaborando junto a Sellars. Requería un gran número de voces, 6 solistas y dos coros (uno de ellos de niños). Fue estrenado en diciembre de 2012 por Kent Nagano en el Théatre du Chatelet. Pero realmente llegó al punto más álgido de su carrera cuando compuso On the Trasmigraation of Souls en 2002, un trabajo coral en memoria del primer aniversario de las víctimas del atentado del 11 de septiembre de 2001. Con este trabajo ganó el Premio Pulitzer en 2003, pero esta vez Adams declaró sentir que este premio no tenía tanto valor porque había perdido mucho prestigio en el ámbito de la música respecto a otros, ya que las mayores mentes musicales de américa habían sido ignoradas numerosas veces. Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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Como guinda del pastel, el disco que grabó de esta obra en 2005 con la New York Philharmonic dirigida por Lorin Maazel ganó tres premios Grammy ese mismo año: “Mejor disco de música clásica”, “Mejor interpretación orquestal”, y “Mejor composición contemporánea clásica”. En 2003 Adams compuso My father knew Charles Ives, una obra autobiográfica adolescente en la que también muestra homenaje a Ives y su influencia en él; y también The Dharma at Big Sur, para violín eléctrico y orquesta, para la inauguración del Walt Disney Concert Hall de Los Angeles el 23 de octubre de 2003. En abril y mayo de 2003, el Lincoln Center presenta un festival titulado “John Adams: An American Master”, que se convirtió en el festival más extenso dedicado a un compositor vivo. Ese mismo año además, se produjo una versión cinematográfica de su segunda ópera “La muerte de klinghoffer” dirigida por Penny Woolcock para el Canal Cuatro de televisión y emitida en cines, televisión y en DVD. Adams compuso también dos óperas más en la primera década del s.XXI. La primera fue en 2005, sugerida por Pamela Rosenberg (directora de la Ópera de San Francisco en 2002) sobre Oppenheimer y la bomba atómica. Así que comenzó a componer Doctor Atomic en 2004 y la terminó en 2005. La siguiente ópera la compondría en 2006, A Flowering Tree, en dos actos. En esta década de los 2000s fue cuando Adams ha conseguido su verdadera consolidación para la historia y un gran amplio número de reconocimientos a su obra, su personalidad y su labor. La Universidad de Harvard ha honrado en dos ocasiones a John Adams con importantes premios: en 2004 recibió la Medalla del Centenario de la Escuela de Artes y Ciencias "por sus contribuciones a la sociedad", y en 2007 recibió la Medalla de las Artes de la Universidad de Harvard. También recibió en el 2004 el Premio Michael Ludwig Nemmers en Composición Musical (el primer premio otorgado), y en 2008 un doctorado honoris causa, ambos premios por la Universidad de Northwestern. Fue también galardonado por el gobernador Arnold Schwarzenegger de California por su distinguido servicio a las artes en su “estado adoptivo”. También ha sido investido doctor honoris causa por la Universidad de Cambridge y un miembro honorario de Phi Beta Kappa. También fue galardonado en 2009 con el Premio NEA Opera.

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La figura de John Adams en la actualidad. A parte de su faceta creativa como compositor, John Adams es un director de orquesta activo, apareciendo con las mejores orquestas del mundo con programas que combinan sus propias obras con una gran variedad de repertorio. En las últimas temporadas, ha dirigido la Filarmónica de Nueva York, la Orquesta de Cleveland, la Orquesta Sinfónica de Chicago, la New World Symphony, la Sinfónica de San Francisco, la Atlanta Symphony Orchestra, la Orquesta Sinfónica de Baltimore, la Royal Concertgebouw Orchestra y la Orquesta Sinfónica de Londres, entre otros. Dirigió la Orquesta Sinfónica Nacional en Washington DC en mientras estuvo residiendo allí durante dos semanas en mayo de 2010 y regresó a la Sinfónica de San Francisco ese mismo año. En 2011, además de la realización de Nixon en China en el Metropolitan Opera, dirigió conciertos con la Orquesta Juilliard en el Carnegie Hall, la New World Symphony y la Sinfónica de Toronto. Adams también ha recibido elogios de la crítica por su programación creativa. En el Carnegie Hall entre 2003-07, Adams dirigió el primer concierto público en el Carnegie’s Zankel Hall y fundó el festival anual "In your Ear". En 2006, también emprendió los populares festivales "Minimalist Jukebox" y "West Coast/Left Coast" de la Filarmónica de Los Ángeles. A su vez, es un invitado frecuente con la London Symphony Orchestra, la Sinfónica de la BBC en el Barbican Centre de Londres, y la BBC Proms en el Albert Hall. Actualmente es el Presidente Creativo de la Filarmónica de Los Ángeles. La música de Adams juega un papel dinámico en la aclamada película de Tilda Swinton "I Am Love", dirigida por Luca Guadagnino. Su música también ha sido utilizado en las películas de Martin Scorsese y Schroeder Barbet. Finalmente, para destacar su faceta de pensador creativo, además de ser un compositor y director de orquesta, John Adams es también un escritor productivo y provocativo. Escribe un popular blog acerca de música y literatura llamada "Hell Mouth", y sus escritos han aparecido en The New Yorker, el New York Times Book Review y el Times de Londres. También publica y habla a veces sobre temas políticos y crítica social de su país. Entre su prolífera discografía podemos destacar el set que publicó con Nonesuch Records de 10 CDs llamado The John Adams Earbox, que poseía todos su trabajos grabados hasta el año 2000.

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La música de John Adams | Estética | Estilo | Catálogo | La música de John Adams es con frecuencia (y erróneamente) incluida en el marco del minimalismo. Sin embargo, su mejor música, a pesar de que posee los rasgos del minimalismo, tiene sus rasgos característicos, su marca de estilo de expandir el género de minimalismo mediante la creación de mayores contrastes dinámicos y una más fluida, sonido en capas. Fue Adams quien acuñó el término "post-minimalismo", una evolución del minimalismo teniendo diferencias sutiles pero cruciales. Hoy ya está claro que el minimalismo es solamente un lado de la personalidad musical multifacética de Adams. Más que cualquier otro compositor de su generación, Adams ha alcanzado una síntesis accesible y genuinamente estadounidense entre la ambición seria clásica y el toque vernáculo. Esta clase de populismo apenas se había oído en Estados Unidos desde el apogeo de Copland en los años cuarenta y de Bernstein en los años cincuenta, y promete recuperar la audiencia para la música estadounidense de concierto. Cuando era joven, John Adams estuvo en contacto con todo tipo de músicas, que van desde música clásica hasta el jazz. Cuando fue a la Universidad de Harvard en la década de 1960, estaba inmerso en los elementos sociales radicales de los tiempos cambiantes. William Burroughs fue uno de los causantes de inspirar a Adams para crear un estilo musical que "no hiciera distinción entre el arte “alto” y arte “bajo”, entre música culta y de cultura media o de bajo perfil". La música experimental de John Cage también fue una influencia en Adams, mostrándole un ejemplo de cómo ser diferente y tener una voz individual como compositor en la escena musical de la época. Por otra parte, la música serialista es la que le fue enseñada extensamente durante los años universitarios de Adams, pero al graduarse, mostró una gran aversión al género musical del serialismo y le pareció que era demasiado reducido. Después de graduarse de la Universidad de Harvard, Adams fue a San Francisco, donde se encontró con las obras minimalistas de Philip Glass, Steve Reich y Terry Riley. Este fue un hito importante en el desarrollo de su estilo.

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Adams pronto declaró que el minimalismo es "el desarrollo estilístico más importante en la música el arte occidental desde los años cincuenta". El minimalismo ofrecía la solución definitiva al dilema creativo de Adams. Adams se sintió atraído por su sonido pulsante y diatónico, que proporcionaba una retórica subyacente sobre la que Adams pudo expresar lo que quería en sus composiciones. Aunque algunas de sus piezas suenan similares a las escritas por compositores minimalistas, Adams en realidad rechaza la idea de hacer una música mecánica basada en procedimientos o procesos matemáticos, lo que Adams se llevó y absorbió del minimalismo fue la tonalidad y/o modalidad, y la energía rítmica de la repetición. El impacto en su música era innegable, la composición de Phrygian Gates (1977) y China Gates (1977) para piano marcó el comienzo de un estilo individual del compositor. Ambas piezas están etiquetados Adams "una obra", lo que significa que fueron las primeras piezas mostrando su nuevo estilo. A partir de aquí, junto con Shaker Loops, Adams comenzó a acuñar el término "post-minimalismo" para describir su propio estilo musical. Con la ópera Nixon en China (1987), trajo post-minimalismo al escenario dramático, obteniendo críticas de división, sino más atención, no obstante. John Adams, continuó componiendo a gran escala, haciendo un nombre por sí mismo como uno de los grandes compositores modernos de Estados Unidos con obras de encargo como The Death of Klinghoffer (1991) y Sobre la transmigración de las almas (2002). Actualmente se conoce ya mucha música de John Adams y se sabe que algunas de las composiciones de Adams son una amalgama de diferentes estilos. Un ejemplo es el Grand Pianola Music (1981-82), una pieza humorística que a propósito se basa su contenido de clichés musicales. Además Adams también ha confesado su amor hacia otros géneros distintos de música clásica, sus padres eran músicos de jazz, y él también ha escuchado música rock, aunque sólo sea de forma pasiva. Adams dijo una vez que la originalidad no era una preocupación urgente para él, como sí que lo fue para los minimalistas, y compara su posición con la de Gustav Mahler, de J.S. Bach y Johannes Brahms, que "estaban hacia el final de una era y fueron adoptando todas las evoluciones que se han producido en los últimos treinta a cincuenta años".

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Catálogo de obras. Ópera §

(1987) Nixon in China

§

(1991) The Death of Klinghoffer

§

(1995) I Was Looking at the Ceiling and Then I Saw the Sky

§

(2000) El Niño (ópera-oratorio)

§

(2005) Doctor Atomic

§

(2006) A Flowering Tree

Orquesta §

(1979) Common Tones in Simple Time

§

(1980) Harmonium

§

(1983) Shaker Loops (version for string orchestra)

§

(1985) Harmonielehre

§

(1985) The Chairman Dances

§

(1986) Tromba Lontana

§

(1986) Short Ride in a Fast Machine

§

(1988) Fearful Symmetries

§

(1989) Eros Piano

§

(1991) El Dorado

§

(1993) Violin Concerto , ganador del Premio Grawemeyer de composición en 1995.

§

(1995) Lollapalooza

§

(1996) Slonimsky's Earbox

§

(1997) Century Rolls

§

(1998) Naive and Sentimental Music

§

(2001) Guide to Strange Places

§

(2002) On the Transmigration of Souls

§

(2003) My Father Knew Charles Ives

§

(2003) The Dharma at Big Sur

§

(2007) Doctor Atomic Symphony

§

(2009) City Noir

§

(2010) Absolute Jest

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Voz y Orquesta §

(1987) The Nixon Tapes

§

(1989) The Wound-Dresser

Música de cámara §

(1970) Piano Quintet

§

(1978) Shaker Loops

§

(1992) Chamber Symphony

§

(1994) John's Book of Alleged Dances

§

(1995) Road Movies

§

(1996) Gnarly Buttons

§

(2007) Son of Chamber Symphony

§

(2007) Fellow Traveler

§

(2008) String Quartet

Otras obras para ensemble §

(1973) American Standard

§

(1973) Christian Zeal and Activity

§

(1975) Grounding

§

(1982) Grand Pianola Music

§

(1996) Scratchband

§

(2001) Nancy's Fancy

Coro §

(1973) Ktaadn

§

(1980) Harmonium

§

(1991) Choruses from The Death of Klinghoffer

§

(2002) On the Transmigration of Souls

§

(2011) The Gospel According to the Other Mary

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Composiciones de cinta y electrónica §

(1970) Heavy Metal

§

(1976) Studebaker Love Music

§

(1976) Onyx

§

(1983) Light Over Water

§

(1993) Hoodoo Zephyr

Piano solo o dueto. §

(1977) Phrygian Gates

§

(1977) China Gates

§

(1996) Hallelujah Junction

§

(2001) American Berserk

Film score §

(1982) Matter of Heart

§

(1999?) An American Tapestry

§

(2010) I Am Love (Io sono l'amore) - all existing pieces, no original compositions

Orquestaciones §

(1990) The Black Gondola ( Liszt's La Lugubre Gondola )

§

(1991) Berceuse Élégiaque ( Busoni's Berceuse Élégiaque )

§

(1993) Le Livre de Baudelaire ( Debussy's Cinq poèmes de Charles Baudelaire )

§

(1995) La Mufa ( Piazzolla's tango )

§

(1996) Todo Buenos Aires ( Piazzolla's tango )

Arreglos §

(1989–93) Six Songs by Charles Ives ( Ives' songs)

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China Gates (1977) | para piano | China Gates es una de las primeras obras del estilo propio de Adams, compuesta en 1977 en sus primeros años de estancia en San Francisco, California. Se trata de una obra post-minimalista para piano solo de aproximadamente entre 5 y 6 minutos de duración. En ella Adams busca crear un nuevo sonido, usando los recursos propios del minimalismo pero más elaborado, menos básico, y sobre todo libre y expresivo. Son estas dos palabras precisamente, “libertad y expresión”, las que mejor definen el sentido que Adams siempre ha buscado para su música, y a partir de Phrygian Gates y China Gates parece que lo encontró por primera vez.

Historia y descripción de la obra. La composición de China Gates estuvo escrita y dedicada para la joven pianista de 17 años Sarah Cahill. Es una pieza corta de piano que Adams escribió como acompañante de Phrygian Gates, una obra de mayor envergadura pero que contiene y está basada en las mismas técnicas que China Gates. Esta pieza en concreto, fue escrita durante una temporada lluviosa en el norte de California. El propio compositor ha sugerido que las notas constantes de la pieza reflejan las constantes gotas de lluvia que no cesaban de caer durante aquella época. Tanto China Gates como su hermana mayor Phrygian Gates, son producto de un período crítico en la carrera como compositor de John Adams. Juntos conforman lo que verdaderamente sería su “Opus 1”, porque, pese a haber tenido piezas interesantes anteriores, es esta la primera vez que compone algo coherente al idioma musical que andaba buscando. Varias piezas anteriores de la década de 1970, como American Standard, Grounding, y algunas otras composiciones, muestran sin duda una gran creatividad, pero aún en busca de un medio que mantuviera unido el estilo coherentemente.

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Phrygian Gates y China Gates muestran una fuerte influencia de los procedimientos minimalistas, y es con seguridad la primera pieza de Adams que se basa en la idea de una estructura celular repetitiva. Como influencias para la pieza no sólo tuvo presente a los minimalistas americanos, sino que también tomó ejemplo y aprendió mucho de otros menos conocidos, los ingleses Skempton Howard, John White y Gavin Bryars, que estuvieron en la mente de Adams durante la composición de estas piezas. La década de 1970 fue una época de enorme conflicto ideológico en la nueva música, ya que la evolución de la estética post-Schoenbergiana finalmente comenzaron a ser cuestionados por los compositores que vieron poco futuro en los principios del serialismo. Adams además, afirma que también vió un futuro igualmente sombrío en los métodos de John Cage, que finalmente le pareció también demasiado basado en principios racionalistas y formalista. La decisión sobre qué dirección tomar para Adams no fue nada fácil. Con el descubrimiento del minimalismo, a pesar de resultarle un estilo reducido y a veces ingenuo, éste le ofreció una manera de salir de este aprieto. Encontró una buena idea de que si elaboraba con éxito la combinación de la tonalidad, la pulsación y grandes estructuras arquitectónicas podía ser muy prometedor. Con este par de obras muestra claramente una posible forma de acercarse a esos potenciales del minimalismo. Paradójicamente, también pone de manifiesto el hecho de que desde el primer momento Adams ya estaba buscando la manera de enriquecer la simplicidad del estilo. La frase que a menudo se le ha atribuido es que era un "minimalista aburrido con el minimalismo", a raíz del comentario de otro escritor, que sin embargo, no estaba muy lejos de la realidad. En Phrygian Gates hace un recorrido de 22 minutos recorriendo la mitad de las tonalidades, modulando por el círculo. La estructura tiene la forma de una onda moduladora cuadrada, por un lado en el modo lidio y por otro en el modo frigio. A medida que la pieza avanza la cantidad de tiempo invertido en el lidio se reduce gradualmente, mientras que la dedicada al frigio se alarga. Por lo tanto la primera sección, en un lidio, es el más largo de la pieza y es seguida por un pasaje muy corto en un frigio. En el siguiente la sección en lidio es un poco más corta, mientras que su compañero el frigio es proporcionalmente más largo, y así sucesivamente hasta que se cambian las tornas. Luego sigue una coda en la que los modos se mezclan rápidamente, uno tras otro. Gates significa "Puertas", un término tomado de la electrónica, con el cual alude a los momentos que hay cambios modales de forma abrupta y sin advertencia.

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Lo que hace que Phrygian Gates y China Gates sean interesantes es la topografía de su forma y la variedad de ideas de teclado, muchos de los cuales sugieren que el murmullo de las ondas, según el autor. A veces, estas olas son suaves y tranquilas. Y otra veces, sus figuraciones y sobresaltos pueden ser un tanto violentas. Phrygian Gates es una obra bastante gigante y requiere un pianista capaz de una resistencia física considerable y con una capacidad para sostener los grandes y largos arcos de sonido. China Gates, por su parte, se ha escrito para jóvenes pianistas y utiliza los mismos principios sin recurrir a virtuosos efectos técnicos. También oscila entre dos mundos modales, sólo que lo hace con extrema delicadeza y fluidez.

Portada de la obra editada por Associated Music Publishers (G. Schirmer, Inc.)

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Análisis compositivo e interpretativo de China Gates. Esta pieza post-minimalista de 1977 como hemos comentado, es una de las primeras obras de madurez de Adams, compañera de Phrygian Gates, pero en versión más fácil para pianistas aunque usando los mismos recursos, que utiliza también modos, en este caso varios, como el mixolidio, el eolio, el lidio y el locrio. La pieza estructuralmente está escrita en tres partes. Se podría decir que texturalmente tiene una forma A-B-A’. En la primera sección (A), escrita en tres planos claramente, un motor de corcheas, una submelodía de valores mayores (que poco a poco se van acortando) y un bajo muy resonante y permanente, que alterna entre los modos La bemol Mixolidio y por enharmonía Sol sostenido Eolio (o modo menor natural más comúnmente). Esta sección comprende desde el comienzo hasta aproximadamente el quinto sistema de la página 6. Entramos en la segunda sección (B), a partir de ahí cambia la textura, y ambas manos pasan a tocar corcheas simultáneamente, a la vez que se suceden rápidos cambios (con sus respectivos cambios de armadura, es muy visual) entre los modos de la primera sección y añadiendo Fa Lidio y Fa Locrio, hasta la página 8 donde volvemos a recuperar la textura original. Estamos en la tercera sección (A’), más parecida texturalmente a la primera, pero esta vez alternando entre Fa Lidio y Fa Locrio hasta el final. Como antítesis de la primera sección, la melodía de la mano izquierda comienza con valores cortos y va adquiriendo poco a poco valores más largos. Adams describió en una ocasión esta pieza como un “palíndromo casi perfecto”, y realmente estructuralmente lo tiene porque comienza igual que acaba y son similares los procesos utilizados para llegar al centro de la obra tanto si lo miras empezando por el principio como por el final. La genialidad de Adams reside sobretodo en esa sección central donde mezcla los modos usados en A y A’ creando una especie de fusión entre ellas. En el marco compositivo general podemos resaltar que no hay una escritura compleja, ni de difícil métrica, ni de figuras desconocidas, todo está escrito en 4/4, aunque al comienzo no hay indicación de compás pero se intuye por los valores que contienen los compases. Luego Adams marca las modulaciones muy claramente con cambios de armadura bastante frecuentes. Pero analicemos mejor la obra paso a paso… Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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Comencemos por el principio, porque al ser casi igual toda la obra nos da una gran información interpretativa ya en sus primeros compases. En los primeros compases podemos observar que la textura se compone de tres planos importantes: el continuo de corcheas de la mano derecha, las notas melódicas de la mano izquierda y el bajo. Lo vemos en el ejemplo 1: (Ej. 1)

Acerca de la interpretación hemos de dar unas premisas importantes que son aplicables a toda la obra que el autor adjunta a la partitura de la obra, son unas “notas interpretativas” muy breves que vienen a decir esto:

“El sonido a lo largo de la obra debe ser siempre suave y resonante. Los niveles dinámicos jamás han de excederse del ‘mezzoforte’. Prestar especial atención a que el volumen entre ambas manos sea igual de manera que ninguna de las dos líneas sobrepase claramente a la otra. De esta forma el entrelazamiento de patrones resultará mucho más exitosamente realizado. En los pasajes donde la proximidad entre ambas líneas sea especialmente estrecho, se debe usar un ataque rápido para permitir las repeticiones de notas. El pedal de resonancia debe mantenerse tenido a lo largo de cada paso de una ‘puerta’ (gate) hasta que la siguiente ‘puerta’ (cambio de modo) se produzca. ”

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Con estas indicaciones ahora podemos entender mejor la manera de realizar estor primeros compases de la obra (Ej. 1). Por un lado debe sonar el bajo, con un nivel sonoro en piano como indica la partitura, pero en todo caso siempre un sonido lleno, que permita al pedal que se mantenga lo máximo posible hasta el cambio de modo. Por el otro la línea de corcheas y la línea casi superpuesta en el teclado de la mano izquierda, que según las indicaciones de Adams deben mantener un volumen idéntico, para así ejecutar con éxito las transiciones de manera que parezcan fluidas. Obsérvese el uso que hace Adams de los elementos. En la mano derecha se suceden un grupo de tres notas (Do – Reb – Mib) y seguidamente un grupo de 4 notas (Do – Reb – Mib – Lab). Esto lo repite muchas veces seguidamente de manera que al ser un grupo final de 7 notas produce por si solo una alteración de métrica, ya que cada vez el comienzo del grupo cae en una parte distinta del compás. Porque en cuestión de ritmo es claro que se sigue en todo momento el pulso de corchea. En la mano izquierda tenemos también un motivo de 3 notas (Reb – Do – Lab) y con ellas les aplica un patrón de figuras rítmicas. En el ejemplo 1 podemos observar como al principio es: Q Q Q . / Q Q . / … y así sucesivamente. El tempo establecido por el autor es de Blanca = 76, lo cual supone un tiempo moderado. El pulso permanente es el de corchea, y dada la indicación de tempo de una blanca, puede ser una ayuda para el intérprete pensar los tempos por blancas, es decir, dos pulsos internos por compás. Digo internos porque interpretativamente no debe existir un pulso marcado ni evidente en ninguna parte del compás salvo que cuestiones melódico-rítmicas lo sugieran. La pieza continúa con el patrón de la derecha inamovible y el de la mano izquierda en cambio sí que evoluciona, y esa evolución la recoge con el mismo modelo en el cambio de modo a Sol # eolio (Ej. 2). Como vemos aquí, vuelve a haber un bajo profundo (Sol#), la izquierda recoge el motivo que venía haciendo antes del cambio de modo, pero la derecha parece cambiar un poco. (Ej. 2)

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Las corcheas de la m. d. están ahora sin una nota respecto al Ej. 1, concretamente faltaría el do# en este caso. Y ahora el patrón es siempre de 3 corcheas y no de 3+4 como antes. Poco a poco si seguimos la partitura veremos como llegado el momento (en la vuelta a Lab) añade una nota más, volviendo a crear el 3+4, y luego incluso 4+4 cuando va de nuevo a Sol#. Podemos encontrar también estos juegos en la m. i. hacia el final de la página 5 por ejemplo. Vemos que aparece primer un patrón que juega entre corchea-negra y desemboca en un patrón de 4 corcheas seguidas diatónicamente (contrastando con el patrón de 3 corcheas de la derecha) que poco a poco pasan a ser 3, y luego 2 (Ej. 3). En ese momento se produce un nuevo cambio de modo a Sol# eolio y comienza el patrón de la izquierda justo a modo de palíndromo, es decir, 2 corcheas – 3 – 4 – y un juego retrógrado de valores respecto a lo anterior. (Ej. 3)

Por primera vez vemos aquí un ligero cambio en la dinámica. Hasta ahora era sempre piano y ahora aparece una indicación de poco più forte, pero recordando siempre que no hemos de sobrepasar el umbral del mezzoforte. Llegamos a la parte central donde ambas manos tocan simultáneamente usando recursos ya usados anteriormente. La mano derecha toca grupo de 3 ó 4 corcheas arpegiadas y la mano izquierda combina movimiento de 3 ó 4 corcheas ascendentes diatónicamente con arpegios en ciertos momentos. (Ej. 4) Un hecho distintivo en esta parte es la desaparición de ese bajo para llegar a este punto donde se suceden muy rápidamente los cambios de modo, algo que debe hacerse con fluidez y sin cambios abruptos para su correcta interpretación. (Ej. 4)

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Dichos cambios de modos están separados claramente por dobles barras cada vez que acontece, señal de que la obra está creada para un pianista joven. Esto le permite analizar con mayor facilidad la obra para así entenderla mejor y por tanto poder interpretarla mejor. Nótese también que el uso del pedal está perfectamente escrito por el autor, y también sigue un patrón: se mantiene siempre mientras dura una sección en un modo. En el Ej. 4 vemos que los cambios de pedal se corresponden con los cambios de modo. Cuando llegamos a la tercera sección (pág. 8) se repiten los mismo métodos y procedimientos que en la primera parte, pero esta vez en Fa (nótese en el bajo), tal vez incluyendo los elementos de forma distinta, hasta llegar al final. En términos generales de fraseo, la intención es que sea todo una gran frase, en la cual los cambios modales marcan las pequeñas respiraciones, aunque no demasiado. Como hemos dicho repetidas veces hay que conseguir una sensación de fluidez, recordemos la idea de la obra que es la de la lluvia y su fluidez. A propósito de eso es por lo que el autor pide una igualdad entre líneas y creo que sólo debe haber acentuación en ciertos momentos en que se producen síncopas o notas interesantes en la línea de la m. i. por el juego que produzca con la línea de la m. d. Aprovechando también esta misma idea nos puede servir para explicar la articulación. El hecho de que no hayan articulaciones escritas es señal de la homogeneidad de todo. El efecto del legato se va a producir solo al mantenerse el pedal continuamente, aunque bien e verdad que esta articulación deberá siempre ir en función del sonido que queramos sacar. En este caso debe ser un sonido amable, por lo que deberemos utilizar una articulación bien definida, pero en ningún caso punzante ni brillante, más bien algo que se acerque al legato en la mano derecha, y en la mano izquierda introducir sus notas en el conglomerado de corcheas como si una parte más de ellas se tratara. Alejandro Escuder     www.alejandroescuder.com

 

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A la hora de buscar el sonido, nos puede ayudar pensar que cada nota es una pequeña gota de lluvia que cae, incesante, continua, pero a la vez cambiante, y cuando hablábamos de la acentuación, que eventualmente unas pequeñas gotas de agua son más grandes. Eso puede darle vida a esa monotonía auditivamente desordenada de gotas de lluvia repicando sobre la ventana de una casa californiana en época pluvial.

Bibliografía Ø http://archive.operainfo.org/ Ø http://blogclasico.blogspot.com.es/ Ø http://es.wikipedia.org/ Ø http://www.earbox.com/ Ø http://johnadamscomposer.com/ Ø http://www.schirmer.com/ Ø http://www.laphil.com/ Ø http://filomusica.com/

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_____________________________ Castellón, 26 de abril de 2012. Alejandro Escuder González.

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