Información y orientación para jóvenes, un reto comunitario / Information and guidance for young, a community challenge

Información y orientación para jóvenes, un reto comunitario

INFORMACIÓN Y ORIENTACIÓN PARA JÓVENES, UN RETO COMUNITARIO / INFORMATION AND GUIDANCE FOR YOUNG, A COMMUNITY CHALLENGE Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 1 y 2 octubre 2014

SUMMARY What reasons lead a youth group to a youth information center rather than learn comfortably in any web or social networks?

RESUMEN ¿Qué razones llevan a un grupo de jóvenes hasta un centro de información juvenil en lugar de informarse cómodamente en alguna web o en las redes sociales?

Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 2014

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INDICE 1- Contra la pobreza de la ignorancia: educación, educación y educación 2- Educación para que la red sea un puerta de acceso a oportunidades para tod@s 3- La comunicación interpersonal, la más eficaz con jóvenes 4- L@s jóvenes necesitan encontrarse en espacios físicos , no solo en los virtuales 5- Cooperemos en reinventar la participación

¡Hola! Estoy pensando en irme como voluntaria, si se puede al Reino Unido. Tengo 24 años y necesito una pausa en mis estudios universitarios, estar en otro entorno y practicar mi inglés. ¿Me podéis ayudar? Emilie, Estocolmo (Suecia) ¿Qué tengo que hacer para buscar prácticas en empresas? IAJ, Aragón Hola. Yo vivo con mi novia a la que quiero mucho y con la que quiero compartir mi vida. Pero, últimamente tengo dudas sobre mi orientación sexual porque llevo una temporada que me atraen los chicos. Chica de 26 años. CIPAJ, Zaragoza ¿Cómo puedo encontrar un trabajo a media jornada o a jornada completa? Graz, Austria Hola. Mis padres están separados y tienen mi custodia compartida. Desde hace unos años lo que hacemos es que yo vivo un curso escolar con mi padre y otro con mi madre, pero a mi no me gusta este sistema y lo querría modificar. Querría saber todas las opciones legales que tengo para luego explicárselas a ellos. Chica de 16 años, CIPAJ Hola estoy viajando en bicicleta y querría contactos de Asociaciones juveniles en Bosnia Herzegovina. JovInfen escocesa en Zagreb, Croacia Estoy haciendo segundo de Bachiller y querría estudiar en una universidad extranjera, preferiblemente del Reino Unido, un Grado sobre cine o medios de comunicación. ¿Hay alguna Universidad con esos estudios en Londres y alrededores? Helsinki, Finlandia He oído en la radio que hay un programa que se llama Garantía Juvenil que da trabajo a los jóvenes ¿Qué tengo que hacer para apuntarme? IAJ, Aragón

Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 2014

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INTRODUCCIÓN Estas preguntas reales, realizadas durante una semana del mes de septiembre de 2014, nos ayudan más que ninguna otra cosa a visualizar que desde Helsinki hasta Cádiz, y desde Dublín hasta Atenas, en Europa existen redes formadas por más de 7.000 Centros de Información Juvenil que se apoyan y retroalimentan mutuamente, y que, pese a su lejanía geográfica, comparten principios deontológicos, herramientas de información, estándares de calidad y la vocación de prestar un servicio público y útil al colectivo juvenil europeo. Han pasado más de 30 años desde el nacimiento de los primeros centros de información juvenil en nuestro país, durante los que hemos lidiado con una auténtica revolución tecnológica que ha cambiado de forma radical y en un tiempo récord las herramientas de nuestro trabajo con información y que, además, y esto es lo más espectacular, ha colocado esas mismas herramientas en manos de casi toda la población juvenil y adulta. El ordenador, la tableta y cada vez más el móvil, nos permiten de una forma casi automática acceder a fondos documentales, libros, películas y medios de comunicación que no podríamos ni soñar a finales del siglo XX. Los mismos instrumentos permiten, y esto sí que es revolucionario, publicar escritos, componer música, editar imágenes, realizar vídeos, crear aplicaciones… y ponerlo todo al alcance de otros ordenadores, tabletas o móviles en cualquier parte del mundo.

1- Contra la pobreza de la ignorancia: educación, educación y educación Entonces… ¿Qué razones han llevado al grupo de jóvenes hasta un centro de información juvenil en lugar de haberse informado cómodamente en alguna web o en las redes sociales? - En primer lugar, aunque el 93% de los jóvenes se conecta a Internet al menos una vez al día (Informe de la Juventud en España, 2012), lo cierto es que utilizan la red como plataforma de ocio y disfrute del tiempo libre y no tanto como una herramienta de información y crecimiento personal. Los jóvenes están muy lejos de saber sacar rentabilidad a los recursos de información que ofrece Internet: desconocen, por ejemplo, las opciones de búsqueda avanzada, limitándose, en muchos casos, al uso de motores de búsqueda generalistas como google; se desplazan rápidamente entre páginas, invierten poco tiempo en leer y digerir la información, y tienen dificultad para hacer juicios sobre lo fiables que son las páginas a las que acceden. De hecho, está muy extendida la creencia de que si está en google o en un gran buscador, es que se trata de algo bueno y de calidad. La mayoría de los jóvenes no tienen ni la preparación, ni las habilidades, ni las capacidades que son necesarias para localizar la información pertinente y asimilarla como conocimiento propio. No las tiene el grupo de jóvenes más jóvenes por falta de formación y madurez, y no las tienen los jóvenes más maduros con niveles bajos de formación. Pero incluso los jóvenes con formación superior (también los adultos) tienen dificultades para realizar una búsqueda sistemática de información en Internet. Los profesionales de la información juvenil pueden confirmar que es rara la consulta que no tenemos que complementar con alguna enseñanza de cómo localizar información fiable en Internet sobre el tema demandado. Estamos, por tanto, todavía en un momento de desajuste entre las enormes potencialidades de Internet y de las redes sociales, y las capacidades y habilidades para utilizarlas como recurso de información, y considero que hay que hacer todo el esfuerzo para revertir esta situación. Los Centros de Información Juvenil fueron de los primeros departamentos de la administración en apostar por la red como un recurso básico dónde poner información al alcance de la ciudadanía, en este caso de los jóvenes. Eryica, la Agencia Europea de Información y Asesoramiento Juvenil, elaboró de forma participativa los Principios para trabajar una información juvenil online de calidad, y se han multiplicado los documentos Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 2014

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europeos que advierten de la necesidad de acabar con la brecha digital que se está produciendo entre diferentes tipologías de jóvenes, una brecha que en la actualidad no es de género, ni geográfica, ni siquiera económica, ya que prácticamente todos los jóvenes disponen de Internet. La brecha está producida por el nivel educativo y por el tipo de uso: según sea lúdico o educacional, y domina el primero.

2- Educación para que la red sea un puerta de acceso a oportunidades para tod@s Por esta razón, los Centros de Información Juvenil no se han limitado a utilizar Internet como un recurso de información y comunicación, sino que desde el inicio han organizado acciones de pedagogía informacional, en un intento de ayudar a los jóvenes, especialmente a los jóvenes menos cualificados, a ser autónomos en la búsqueda y utilización de la información. Algunas de las acciones más extendidas son visitas didáctica a los Centros, sesiones de búsquedas temáticas dirigidas por profesionales y cursos sobre herramientas básicas en Internet. Pero el desajuste es tan importante y el objetivo tan beneficioso que apostaría de forma inmediata por incluir la formación sobre utilización de Internet y redes sociales en una etapa de educación obligatoria en la que los jóvenes hayan adquirido ya las capacidades de lectura comprensiva y de expresión oral y escrita que tanto van a necesitar al utilizar los medios tecnológicos. 2º y 3º de secundaria, o niveles equivalentes, podrían ser los momentos ideales para incluir la enseñanza de estos conocimientos. También son necesarias medidas públicas de alfabetización digital dirigidas a los jóvenes menos cualificados y, en especial, a los que han abandonado el sistema educativo sin haber conseguido un diploma básico (22,7% según datos de la semana pasada), para que puedan buscar y utilizar la información, y que las nuevas tecnologías se conviertan, también para ellos y ellas, en herramientas de acceso a oportunidades. En los Centros de Información atendemos mucho las demandas de este grupo de jóvenes, y nos encontramos con que no hay oferta pública suficiente que atienda sus necesidades. El reto es complejo, es comunitario, y exige, por tanto, la implicación de todos los agentes sociales y educativos.

3- La comunicación interpersonal, la más eficaz con jóvenes Volviendo a las preguntas del inicio, es fácil deducir que muchas de tampoco podrían haber sido resueltas en Internet aunque los jóvenes tuviesen una mayor formación tecnológica. No eran preguntas de búsqueda de información pura y dura, como: ¿en qué Universidades puedo estudiar Psicología? o ¿qué conciertos hay este fin de semana?. La mayoría de las cuestiones que nos plantean los jóvenes requieren una búsqueda multidisciplinar y un conocimiento de los recursos y de los temas que exigen la intervención personalizada de especialistas. De ahí la importancia de los servicios de apoyo y orientación, tanto en los centros de enseñanza, como en centros de salud, orientación sobre empleo… Y esa es la razón de que en Europa, a pesar de que los Centros de Información Juvenil han apostado de forma decidida por la tecnificación y han luchado por estar al día en ofrecer las últimas herramientas de comunicación y participación… han seguido mimando, desde el principio y hasta la actualidad, la atención personal, la información cara a cara y el asesoramiento especializado, hasta convertirlos en su seña de identidad y en su mayor fortaleza. Cuando evaluamos los servicios de información juvenil siempre es la atención personal de informadores y asesores la que se lleva la nota más alta de l@s jóvenes usuarios, por encima del 9. La comunicación interpersonal se trabaja en dos niveles en los Centros de Información Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 2014

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Juvenil: 1. En la atención a las demandas informativas de los jóvenes que se trasladan al Centro de Información Juvenil 2. En las asesorías ofrecidas en muchos Centros de Información Juvenil, ya que generalmente los jóvenes necesitan que profesionales especializados les informen y orienten antes de tomar determinadas decisiones. Las asesorías más habituales en la red de los Centros de Información Juvenil son la laboral, orientación de estudios, las vinculadas a la salud (sexológica, psicológica, adicciones…), que son las que el Libro Blanco de la Juventud de la Comisión Europea recomentaba en 2002, y la de movilidad internacional, que se ha promovido en los últimos años como respuesta a la demanda de los jóvenes por salir al extranjero. Nos encontramos por tanto con que, a pesar de la revolución tecnológica, l@s jóvenes de hoy, como los de hace 30 años, no sólo siguen recibiendo la mayoría de la información relevante, la que más va a influir en su itinerario vital, a través de la comunicación interpersonal, sino que, además, es la información a la que dan mayor credibilidad. En las memorias de las asesorías para jóvenes del CIPAJ, curso 2013/14, una vez más se confirma la potencia de la comunicación interpersonal con jóvenes. A la pregunta “¿Cómo te has enterado de este servicio?” más del 50% cita a personas como fuente informativa: amigos, familia, profesorado, compañeros, por este orden. Por contraste, sólo el 15% se había enterado a través de Internet.

4- L@s jóvenes necesitan encontrarse en espacios físicos, no solo en los virtuales Este renacimiento, esta edad de oro del contacto físico, del cara a cara, tiene que ver con la abundancia de lo virtual. Resulta curioso cómo l@s jóvenes valoran cada vez más aquellas actividades que implican una relación personal con otros jóvenes, lo que juega a favor de nuestros proyectos más participativos. Las antenas o corresponsales juveniles, por ejemplo, confiesan que una de las cosas que más les ha motivado para participar en los proyectos de información juvenil es la oportunidad que les ofrece para relacionarse, trabajar y divertirse con otros jóvenes de sus mismas características. Durante el curso pasado realizamos en el CIPAJ grupos de trabajo con jóvenes que tenían idea de salir al extranjero para recoger sus necesidades informativas en dos momentos clave: antes de partir y cuando llegasen al destino elegido. Lo que más pedían los jóvenes era que en la ciudad de destino pudiesen tener lugares de encuentro, físico no virtual, con jóvenes que estuviesen o hubiesen estado en su misma situación, para poder intercambiar experiencias y consejos, lo que consideraban muy útil para poder integrarse en la ciudad de acogida. Nos sorprendió esta petición por parte de los jóvenes de Zaragoza, precisamente en un momento en el que las redes están plagadas de foros y lugares de encuentro virtuales sobre todo tipo de temas, pero lo curioso fue que esta necesidad también la expresaron otros jóvenes de los otros 14 países europeos que participan con el CIPAJ en un proyecto europeo denominado YOMIM Infomobility. Está claro que la creación de espacios de encuentro o la dinamización o reenfoque de los que ya existen es una oportunidad de intervención para las políticas de juventud en general y para la información juvenil en particular. Podría ser también un buen momento para replantearse ese horario concentrado de mañana en los Centros Públicos de Enseñanza Secundaria, que casi no permite ni comer el bocadillo. Habría que apostar por unos centros educativos con un horario que deje tiempo para charlar, discutir, jugar y aprender a relacionarse entre iguales, en una etapa, la adolescencia, básica para la adquisión de hábitos para el futuro. Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 2014

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Afortunadamente, algunos proyectos de actividades de ocio y participación fuera del horario escpñar en algunos municipios cubren de alguna manera esa necesidad. Habrá que reforzarlos

5- Cooperemos en reinventar la participación En 2002 el Libro Blanco de la Juventud de la Comisión Europea y en 2003 la Carta europea sobre la participación de los jóvenes en la vida local y regional incluían la información y la participación como políticas esenciales hacia los jóvenes, promoviéndolas de forma independiente, pero tambien interconectándolas: sin información no puede haber participación, se argumentaba. Desde entonces la palabra participación está presente en todos los documentos, reuniones y foros donde se hable de políticas de juventud. En aras de la participación, los Centros de Información Juvenil hemos desarrollado proyectos como el de las Antenas Informativas, que fue seleccionado por la Comisión Europea como una buena práctica de participación juvenil. También, los profesionales nos hemos formado en ludopedagogía y en dinámicas participativas para trabajar con grupos de jóvenes, hemos medido la calidad de nuestros servicios basándonos en lo que percibían nuestros usuarios, hemos organizado grupos de discusión para conocer las necesidades informativas, hemos promovido mapas colaborativos realizados por jóvenes... Y, sinceramente, nos sentíamos bastante satisfechos con ese nivel de participación de los jóvenes en los proyectos de información juvenil. Pero, es un modelo de participación dirigida que se está quedando corto. Rita Levi, neuróloga y humanista italiana, premio nobel de Medicina; en su libro “Elogio de la imperfección” apostaba por dejar las decisiones importantes en manos de niños y jóvenes de ambos sexos (cuanto menos contaminados por la cultura dominante mejor) como única posibilidad de salvar a un planeta en crisis mortal. Y defendía con pasión que es preciso atribuir a las nuevas generaciones, de ambos sexos, el papel de actores, no de espectadores, en la arena de la sociedad global, donde se toman las decisiones. La capacidad de decidir, por supuesto asumiendo la responsabilidad, es la mayor motivación para la participación real. ¿Y qué dejamos decidir a nuestros jóvenes?: ¿qué posibilidades tienen de cambiar, por ejemplo, la política de juventud que se les ofrece desde una institución?, ¿o el presupuesto que se destina a sus lugares de encuentro?, ¿pueden intervenir en la planificación de los medios de transporte en una ciudad? Durante el curso pasado tuvimos un ejemplo claro de lo motivadora que resulta la posibilidad de decidir sobre algo que te afecta. Hubo una altísima e inusitada participación del alumnado de la Universidad de Zaragoza en una votación vinculante (que decidía) sobre los exámenes de septiembre. Votó el 86% cuando en ninguna otra votación se había llegado nunca al 10% de participación. También es interesante el ejemplo de Finlandia que ha rebajado la edad de voto en las elecciones locales a los 16 años, porque se ha considerado que las personas jóvenes tienen derecho a influir en el modelo de sus pueblos y ciudades. Pese a estos ejemplos, la realidad es que nos faltan muchas vueltas de tuerca para acercarnos al modelo participativo planteado por Rita Levi, aunque en los dos últimos años se han dado pasos de gigante con la aparición de numerosas herramientas informáticas que posibilitan la participación actuando: desde recogidas de firmas y envíos masivos de peticiones (Avaaz, Change, Oiga.me), hasta debates en los que podemos plantear temas y opinar sobre ellos (Loomio, Incoma o Propongo), pasando por las aplicaciones que permiten debatir y tomar decisiones democráticas mediante votaciones muy sofisticadas (Agora voting , Democracia en red...). Gema Villa Bermejo, II Congreso de Juventud del IAJ, 2014

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Estas herramientas, sin duda van a allanar el terreno a la intervención ciudadana en la gestión de lo público, a través de presupuestos participativos o de control como los observatorios ciudadanos de la gestión pública. Pero, al igual que ocurría con la información en Internet, tampoco en este caso la disponibilidad de herramientas nos garantiza las capacidades para utilizarlas, y en este tema todavía lo tenemos más difícil porque padecemos un déficit social generalizado de cultura participativa. Y cuanto más se desarrollen las herramientas, más urgente y necesario será educar y entrenar en la participación, si no queremos convertirnos en una noocracia o en un gobierno de sabios o de frikis. Nuevamente nos encontramos con un reto comunitario: la necesidad de aunar esfuerzos para educar y capacitar a los jóvenes en la participación responsable. Y otra vez creo que son los centros de enseñanza los espacios privilegiados, aunque no los únicos, para entrenar en la participación. Hay ya experiencias, como las asambleas con las que inician el día algunos niños y niñas aragoneses de Educación Infantil, en las que planifican y votan los objetivos de la jornada. También desde los centros de ocio se están proponiendo actividades que entrenan a los jóvenes en el debate y en la discusión razonada. Según los expertos, se trata de los primeros pasos en un nuevo camino de la inteligencia colectiva; unos pasos todavía torpes, pero que ya nos permiten intuir un mundo fascinante cargado de oportunidades. Es el momento de que educadores, orientadores, informadores juveniles y trabajadores de juventud en general... nos sumemos a esta nueva corriente, formándonos y abriendo nuestras mentes para facilitar la intervención de los jóvenes, hasta que lleguen a decidir, por ejemplo, sobre los programas y presupuesto de nuestros servicios. Luego les exigiremos que cumplan lo que está escrito en el libro que sostiene un maestro, esculpido en bronce junto a su joven pupilo, en una plaza de Conil de la Frontera:

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! ! ! A ustedes los jóvenes! les toca el deber,! la responsabilidad y ! por qué no decirlo,! la gloria de llevar! a la humanidad ! a la felicidad! ! "#$%!&'(')'*#!

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