Entrevista a David Mateo
IDENTIDAD, CULTURA Y SUPERCULTURA
La influencia de Internet en la recepción-difusión Entrevista realizada vía e-mail por Daniela Sirvent, Andrew Chernin y Ximena Greene, estudiantes de Periodismo de la Universidad Diego Portales (UDP-Chile) en el contexto de la preparación de la defensa de su tesis: “Comunitarismo virtual: La cultura de la descarga”, proyecto que revisa cómo según sus autores, producto de la Web 2.0., ha cambiado la difusión-recepción de la música independiente en la ciudad de Santiago Tesis guiada por el Profesor, Sr. Christián Leyssen.
DS. David, muchas gracias por tu disposición. Leí sobre tu ámbito de estudio , los autores que te interesan son los mismos que nosotros usamos en la primera parte del marco teórico (Corrientes y teorías de la Comunicación), especialmente el concepto de “identidad” de Jorge Larraín1 y de “Supercultura” de James Lull2. Por lo que las preguntas que queremos hacerte son: -¿Cómo se resuelve la identidad en la Web 2.0, donde opera la lógica de la gratuidad y la cooperación a nivel de intercambio cultural? 1
Sociólogo. Profesor Emérito de Birmingham, Inglaterra y Vicerector Académico de la Universidad Alberto Hurtado, Chile, en donde es además, profesor en el la Facultad de Ciencias Sociales. Es autor de numerosos libros, y destacan sus trabajos en torno a los conceptos de Identidad e Ideología, ambos con gran impacto en el mundo anglosajón de Estudios Culturales y la Sociología. 2 Profesor Emérito de Communication Studies en la Universidad de San José State, USA. Autor y editor de más de una docena de libros en estudios de comunicación, medios y cultura contemporánea.
DM. Cuando hablamos de medios o de tecnologías, claro que hablamos de aparatos y máquinas que no son neutros ni para la cultura ni para la cuestión de las identidades, y es verdad que su presencia tiene cierto impacto, pero tal como los conceptos de supercultura o de programador cultural, ambos de James Lull, o la noción de la identidad como en construcción permanente de Jorge Larraín destacan, lo más importante aquí son los usos culturales que las personas hacen de ellos. Desde este punto de vista, las webs 2.0, y toda clase de softwares y hardwares constituyen soportes, medios y vehículos para los impulsos comunicativos, que es lo mismo que hablar de discursos culturales, que a su vez es lo mismo que hablar de discursos de identidad. Debemos desfetichizar, a los medios y las TIC’s. A mi por ejemplo me interesan los usos más particulares (alternativos e individuales)
Identidad, Cultura y Supercultura. Entrevista a David Mateo Por: Daniela Sirvent, Andrew Chernin y Ximena Greene
Finalmente. También creo que tu pregunta trae implícita parte de la respuesta. La gratuidad elimina la barrera económica. La consecuencia de ello es que no sólo favorece la cooperación, sino que la amplía al nivel global. Eso es muy importante. Sin embargo, no hay que engañarse, la gratuidad favorece sólo a aquellos que en primera instancia ya han aceptado y utilizan la tecnología, pues por mucho que hagas gratuitos los softwares, ciertas barreras culturales previas pueden mantenerse, como por ejemplo la que existe entre usuarios y no usuarios. Entre ambos, aunque no exista mucha diferencia respecto de ingresos económicos, sí puede existir diferencias en el interés por el uso de internet. Las diferencias culturales o de estilo de vida son a veces
- ¿Cómo se dan las dinámicas de usos de la música en la era de la descarga de contenidos en nuestro país (cambios de las audiencias)? En mi opinión la descarga es interesante, pero es sólo un aspecto del asunto. Incluso creo que aunque con ciertas diferencias tampoco es muy distinto del consumo de las audiencias de los años 80s y 90s. No quiero que se me mal interprete, hay diferencias, pero para mi lo más interesante de todo es el upload, la posibilidad que tiene cada vez más y más gente común y corriente de subir (sus) cosas, día a día, desde sus lugares cotidianos, desde sus experiencias privadas. Cuando unes ambos aspectos tienes el corazón de lo que ocurre en esta época. Entonces ahí sí que tienes un cambio. La gente está “halando” y “empujando” a la vez que está siendo “presionada” por la cultura. El mismo James Lull lo define de cierta manera, habla de la cultura con “c” minúscula (la individual) y la con “C” mayúscula (la colectiva). Personas comunes y corrientes, antes entendidas como receptores, de cierta manera activos, pero de cierta otra,
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Es decir, las tecnologías son usadas por los individuos, y no lo inverso, que es como se nos enseñó que ocurría mayormente. Los individuos usan los recursos tecnológicos como instrumentos para promover, visibilizar, difundir, construir, armar y modificar sus discursos culturales de identidad, y al mismo tiempo, esa explosión de discursos nuevos resultado de esos esfuerzos se reúnen con los más viejos, convirtiendo a la cultura en una trama viva.
mucho más difíciles de salvar. Una persona sin conexión propia, puede acceder por otras vías si lo desea. Por eso me importa tanto el “acceso” a una conexión, a veces más que la “posesión” de una conexión propia.
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mientras que a otros les interesa cómo – también- permiten reforzar una serie de formas de asociaciones culturales y sociales previas (más colectivas y tradicionales).
Agosto de 2008
Identidad, Cultura y Supercultura. Entrevista a David Mateo Por: Daniela Sirvent, Andrew Chernin y Ximena Greene
Haré un intento respondiendo con aquello que he tenido la oportunidad de discutir antes en mis investigaciones de grado5. Las personas no somos de una única forma, ni tampoco nos comportamos exactamente igual en todos 3
Tal como lo hace la sociología en las diversas corrientes de estudio de las teorías de la acción. Estoy pensando en un agente conocedor como el de la teoría de la estructuración de Anthony Giddens. Idea que por otro lado, se corresponde con las nociones de los otros autores que se han mencionado antes, los Señores Jorge Larraín y James Lull. Nota de D.M. 4 Ese es precisamente el corazón de mis estudios de doctorado. Hacer esta relación en el contexto de la discusión sobre las identidades individuales en el contexto chileno. Nota de D.M. 5 Me refiero a ¡Kacha el Bombo! El Individualismo Colectivo en la era de la comunicación”. Esta fue mi tesis para optar al grado de Magister en Comunicación Socia por la Universidad Diego Portales. Se trató de una extensa etnografía hecha a los fanáticos de la música electrónica en Santiago de Chile (2003 – 04). Este trabajo fue además dirigido por el Sr. James Lull y puede ser considerado como un esfuerzo par analizar la cultura desde la perspectiva de las superculturas.
Lo anterior nos lleva de vuelta a la primera pregunta e invita a no aceptar tan fácilmente las ideas teóricas de las corrientes que le restan capacidad, conocimiento y control al individuo. Ya he dicho que prefiero dejar de pensar en los individuos como “idiotas”. También evito pensarlos como “prisioneros”. No es todo lo libre que quisiera, pero tampoco lo limitado que se supuso.
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- ¿Cómo se da la interacción en el mundo Internet (perfiles en línea)?
los contextos. Podríamos decir que tenemos un repertorio variado de recursos expresivos, los que constituyen nuestros también variados perfiles -culturalespersonales. A veces somos más románticos, otras mucho más agresivos, y así… Tampoco somos sólo una cosa cada vez. Nuestros perfiles son variados y además múltiples. Sin embargo, eso tampoco significa que tengamos una variedad inmanejable. Creo fuertemente que el individuo tiene la capacidad de mantener cierta unicidad. No creo en su descentramiento posmoderno, eso para hacer alusión a cierta referencia teórica y que espero que Uds. mantengan lejos. Lo que hacen las personas es cultivar ss perfiles de acuerdo a sus intereses, sus realidades próximas, sus contextos y sus requerimientos. Las tecnologías, una vez más están co-actuando y amplificando esa variedad y multivariedad de formas de ser proveyendo de una herramienta que hace más nítidos los discursos. Digámoslo así, aumente o mejora la resolución de pantalla de esos discursos, pero no los construyen.
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bastante pasivos, ahora son también emisores, lo que es una definición de “agente”3 y por lo tanto de sujeto activo portador de capacidad de acción, de reelaboración cultural. Eso es lo que nos está obligando a los analistas a modificar la definición de audiencias con que habíamos convivido desde la era industrial. Esta idea es clara en el concepto de los programadores culturales de James Lull, y en el de la identidad como en construcción permanente de Jorge Larraín, ideas que me parece hacen un gran favor a esta discusión4.
Agosto de 2008
Identidad, Cultura y Supercultura. Entrevista a David Mateo Por: Daniela Sirvent, Andrew Chernin y Ximena Greene
Sí, Las cifras así lo indican. En algunos casos colabora reforzando a la industria, pero en muchos otros, que es lo que a mi perspectiva interesa, permite dar vida y visibilidad a individuos, grupos, colectivos o artistas que antes no tenían ninguna opción por no poseer contactos, poder económico, reputación o capacidad de influencia. Cada vez se necesita menos “suerte”, o al menos, se puede presionar vía estos medios “auto-gestionados” que en el contexto de los colectivos de música
Si me permites, diría que me parece más preciso decir que lo que la Internet y todas las tecnologías hacen es “facilitar” el intercambio y el consumo de imágenes y símbolos. Con esta distinción deseo mantener que la tecnología no crea esos impulsos y deseos culturales (de comunicación, consumo, intercambio e hibridación) y que ellos siguen siendo culturales ante todo. Eso para mi es un aspecto clave al analizar estos fenómenos. Es importantísimo mantenerse alejado de perspectivas u orientaciones “mediocéntricas” en donde el responsable es el “transistor” o el “chip”, y el sujeto no pasa de ser su resultado o su víctima. Esas son formas rejuvenecidas de teoría crítica (a mi juicio muy poco críticas), o de funcionalismos y postmodernismos recalentados. Por mi orientación teórica tengo mucha confianza en el agente (el individuo) y mantengo adelante que es hábil en el uso de las tecnologías, incluso siendo capaz de utilizarlas para fines personales, en muchos casos alejados de las intenciones originales de sus creadores. Pasa en el mundo simbólico (uso y apropiación de imágenes) y pasa también en el mundo de las tecnologías y software. Eso me aparece fascinante y muy atractivo de analizar y teorizar.
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- ¿Es hoy Internet un medio importante de consumo e intercambio cultural (entiéndase música, información, etc.)?
electrónica que estudié hace cinco años (¡acompañado de su profesor!) llamé los “supermicromedios”, esto por sus vínculos con la idea de “superculturas”.
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Ahora, si la pregunta es por los delitos que relacionan a la Internet con cierta posibilidad de “falsación” de la identidad para concretar abusos y engaños, estoy de acuerdo con que son muy posibles y se facilitan en la red, pero si seguimos con la idea de que los “medios son medios” y no causas, quizás no nos parezca tan distinto a como ocurrió antes con el teléfono o incluso en las interacciones cara a cara. Lo que implica esto es que así como aprendemos a movernos en el mundo físico y a establecer relaciones en él, debemos aprender a hacerlo en la red. No es otro mundo, sino que una nueva dimensión de él. La Internet no es un espacio full time, es uno part-time, de tiempo parcial.
Agosto de 2008
Identidad, Cultura y Supercultura. Entrevista a David Mateo Por: Daniela Sirvent, Andrew Chernin y Ximena Greene
Jorge Larraín, Ulrich Beck y Anthony Giddens, quienes, aunque no son muy populares en los estudios de comunicación en Latinoamérica, en mi opinión, han hecho apuntes que resultan muy útiles para estos asuntos. Déjame volver al concepto de supercultura y decirte cómo es que pienso que debería ser utilizado para obtener su mejor rendimiento.
En realidad las superculturas constituyen formas abstractas de representación cultural que son construidas por las personas en su vida cotidiana (programación cultural) debido a la abundancia de recursos culturales, a su habilidad y sobre todo a sus motivaciones. Aunque más provisorias siguen siento formas intensas de discursos culturales. Eso es similar a lo que yo he llamado un “individualismo colectivo” y a lo que Ulrich Beck, llama “self-culture”. La cultura por definición debe ser entendida como compartida, pero lo que ocurre es que en esta era estamos viendo mucha fragmentación aparejada del aumento de la posibilidad de transformar y modificar la cultura, y que eso está también en 6
Este concepto aparece primero publicado en: Media, communication, Culture (Columbia Press 2000); pero en donde fue especialmente desarrollado fue en: The Communication Age (Routledge 2001). Un desarrollo posterior ha sido publicado en: Culture –On- Demand (Balcwell 2007).Todos libros de James Lull.
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Mira, se podría decir que sí, y puedes, desde cierto punto de vista concluir de esa forma. De hecho yo mismo usé el término de una manera similar en la investigación que cité anteriormente. Pero, sin embargo, debo advertir que esa es una comprensión un tanto estrecha del concepto, que la reduce a un especie de sustituto, a una versión 2.0 de la vieja idea subcultura o de cualquier otra noción que pretenda utilidad en la posibilidad de reunir a personas bajo algún paraguas conceptual que distingue a personas que se apartan de la cultura corriente o dominante. Mis últimos trabajos y reflexiones me han hecho moverme mucho más hacia la idea “pura” de Lull, y como dije antes, estoy encontrando mayor utilidad y correspondencia teórica con otras propuestas importantes como las de
Las superculturas6 tal como han sido pensadas por James Lull (su autor) no son unos espacios, unos lugares concretos, ni la constituyen o representan un grupo de personas con algún grado de acuerdo o coincidencia en sus comportamientos, deseos o ambiciones. Para entender la idea de superculturas tal como la ha planteado su autor es necesario moverse hacia un concepto teórico más personal y privado de cultura, enfatizando la idea de construcción cultural, en ese sentido, tal como lo ha indicado también el sociólogo chileno Jorge Larraín.
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- ¿Puede decirse que los consumidores de música independiente por Internet componen una supercultura?
Agosto de 2008
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manos de las personas en los espacios corrientes. Ya no dependemos ni del poder institucional, ni de largos procesos de elaboración cultural como los que describe la literatura antropológica. Las superculturas son por tanto, muy parecidas a los discursos de identidad que te comenté al principio, apropósito de tu primera pregunta. En efecto es mi opinión que la idea de Lull es muy útil y refrescante para entender el aumento de los discursos individuales de identidad, entender cómo son construidos y la dinámica en que está involucrado ese trabajo.
Agosto de 2008
Actualmente estoy trabajando en un artículo que utiliza a ambos recursos para, y a partir de la idea de “individualismo colectivo”, elaborar las bases para lo que llamo una teoría contemporánea sobre la construcción de la identidad. Espero poder publicar pronto en nuestro circuito y hacer algunas lecturas para explicar mejor a lo que me refiero con esto. Saludos a su profesor y a la UDP, en donde tuve la oportunidad de tener excelentes maestros. Muchas gracias a Uds. por considerarme para esta entrevista. ¡Suerte
con su tesis!
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Magíster en Comunicación Social, Universidad Diego Portales. Magíster © Antropología y Desarrollo, Universidad de Chile. Doctorando en Sociología, Universidad Alberto Hurtado. Profesor de los cursos: Teorías de la comunicación, Sociología de la comunicación, Medios comunicación y cultura, Oratoria y Discurso público en diferentes universidades chilenas. E-mail:
[email protected]/ Weblog: http://davemateo.blogspot.com/
