Hogar, el verdadero bien-estar

Ensayo 5
Montserrat Garduño Martínez
A01183319
Fecha de Entrega: 20 de febrero de 2016
Ensayo: Hogar, el verdadero bien-estar
Análisis crítico de la Arquitectura y su Contexto
Prof. Eska Solano
Hogar, el verdadero bien-estar

A partir del boom de la construcción masificada, el rol del arquitecto cambia, la arquitectura parece solo ser la construcción de conjuntos habitacionales sin identidad, se proyecta para un usuario estándar y la casa se hace algo universal, que no responde a las necesidades de todos ni a la cultura, entonces el habitante no encuentra comodidad, deja de ser un espacio de bien-estar, por esta razón es responsabilidad del arquitecto construir espacios habitables óptimos para el usuario, haciendo posible el arraigo y sentido de pertenencia a la vivienda.

La arquitectura como profesión surge desde que el hombre se asienta en un lugar, buscando satisfacer la necesidad de un refugio, el arquitecto debe hacer posible un espacio habitable, que provea cobijo, a medida que el arquitecto domina la técnica, también cambian las necesidades en respuesta al contexto histórico y al panorama de la época. Después de la Segunda Guerra Mundial hay una nueva explosión de creación de unidades que alberguen el mayor número de viviendas posible, para atender la demanda creciente de la población y el desarrollo de las ciudades, entonces comienza a desvirtuarse uno de los cometidos del arquitecto, que es construir espacios personalizados para el usuario, que respondan totalmente a sus necesidades y gustos, se busca solamente la funcionalidad, pensando en un tipo de vivienda que se puede repetir infinitas veces en cualquier lugar y en cualquier época y así es como hasta nuestros días y en nuestro entorno próximo seguimos visualizándolo, se percibe al sector de bajo poder adquisitivo como cliente potencial para las viviendas sociales, se manipula, ya que no tiene una amplia gama de oportunidades para escoger una vivienda que resuelva sus necesidades, ni una gran oferta, acepta lo que cualquiera quiera venderle, y si a esto le sumamos que la mayoría de empresas que construyen desarrollos inmobiliarios de este tipo te ofrecen engañosas facilidades y créditos con plazos interminables, en los que el usuario termina pagando lo equivalente a un proyecto de mejor calidad y que pudiera ser totalmente personalizado, entonces el habitante no logra un sentido de arraigo y apego a su vivienda, no logra vivir en un hogar.
El arquitecto debe impactar en lo que su campo le permita, y eso se traduce a lo que menciona Jordi Oliveras a cerca de hacer buena arquitectura de vivienda "…protección y refugio frente al entorno. Ergonomía, organización de espacios, disposición de las máquinas y de los servicios, geometría distributiva de los espacios… un ambiente favorable para vivir, reposar y sentirse identificado." (Oliveras, 2001, p.132).
En este mismo sentido, Oliveras ejemplifica con el quehacer de los grandes maestros de alta costura y grandes chefs, lo que los arquitectos en su campo deberían aportar, "han de formarse para aportar soluciones que permitan erradicar el hambre o vestir a todo el mundo." (Oliveras, 2001, p.129).

Para que un arquitecto encuentre un sentido completo de su profesión necesita aportar algo más que espacios habitables y reitero que es responsabilidad del arquitecto construir espacios habitables óptimos para el usuario, haciendo posible el arraigo y sentido de pertenencia a la vivienda.

Referencias.
(De Solà-Morales, Llorente, Montaner, Ramon, & Oliveras, 2001)
(Ideario ético para el ejercicio de la arquitectura y sus profesiones auxiliares, s.f.)