Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

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Descripción

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O

o o

ÜACJ

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE C iu d a d Ju á r e z

Luis Carlos Salazar Quintana

U n iv e rs id a d A u tó n o m a d e C iu d a d Ju á re z

D.R. © D.R. ©

2015 Luis Carlos Salazar Quintana 2015 Universidad Autónoma de Ciudad Juárez Avenida Plutarco Elias Calles 1210, Fovissste Chamizal Ciudad Juárez, Chihuahua, México C.R 32310

Primera edición, 2015 Al norte: estudios de literatura / Coordinador: Luis Carlos Salazar Quintana - Primera edición -Ciudad Juárez, Chihuahua, México: Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, 2015. 270 páginas; 22 centímetros.

índice

ISBN: 978-607-520-115-3 Contenido: Fedray otras griegas: tragedia mitológica y pasado profético / Francisco Javier Romo Ontiveros." El Quijote de Cervantes como camino, paisaje y espacio simbólico / Edgar Abel Castro Álvarez.- El mito sorjuanista / Diana Janeth Rubio Medrano.— Úrsula Iguarán y la clarividencia del sentimiento / Ro­ berto Sánchez Benítez.— La creación de Agustín Yáñez como Künstlerroman / Fabiola Marín Lucas.--Oc­ tavio Paz: un poeta solar/Joselyn Pérez Pérez.--Guillermo y el nahual de Emilio Carballido: entre el mito y la tradición indígena/Jesús Armando Molina Barrazay Joel Peña Bañuelos.-Desdoblamiento, com­ pensación y muerte en "La fiesta brava'’, de José Emilio Pacheco / Luis Carlos Salazar Quintanay Alejandra Orozco Irigoyen.— La imagen del tiempo en Gonzalo Guerrero, de Eugenio Aguirre / Marión Martínez Vela.-- La pobreza en los cuentos de David Toscana: un acercamiento sociocrítico / Gustavo Herón Pérez Daniel.- La metaliteratura en Estación Tula, de David Toscana / Rocío Haydée Cárdenas Talamantes.-¿Por qué potenciar las competencias comunicativas en la universidady por qué hacerlo desde la literatu­ ra?/ Dalia Gómez Martínez.--Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular/ Carlos Urani Montiel Contreras. 1. 2.

3.

Literatura dásica-Crítica e interpretación Literatura mexicana- Sigloixx-Crítica e interpretación Literatura mexicana- Norte de México-Crítica e interpretación

Introducción

7



Fedray otras griegas: tragedia mitológica y pasado profético

Francisco Javier Romo Ontiveros

15



El Quijote de Cervantes como camino, paisaje y espacio simbólico Edgar Abel Castro Álvarez

37



El mito sorjuanista

LC-PQ7155 A54 2015

Diana Janeth Rubio Medrano

61

■ Apoyado con Recursos PIFI 2013

Úrsula Iguarán y la clarividencia del sentimiento

La edición, diseñoy producción editorial de este documento estuvo a cargo de la Dirección General de Difusión Cultural y Divulgación Científica, a través de la Subdirección de Publicaciones. Diagramación, diseñoy cuidado editorial: Subdirección de Publica­ ciones de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez Impreso y hecho en México / Printed and made in México

Roberto Sánchez Benítez

81



La creación de Agustín Yáñez

como Künstlerroman Fabiola Marín Lucas

105

Octavio Paz: un poeta solar Joselyn Pérez Pérez

125

Guillermo)?elnahual, de Emilio Carballido:

entre el mito y la tradición indígena Jesús Armando Molina Barrazayjoel Peña Bañuelos

143

Desdoblamiento, compensación y muerte en “La fiesta brava”, de José Emilio Pacheco

Introducción

Luis Carlos Salazar Quintana y Alejandra Orozco Irigoyen

165

E

l libro que el lector tiene en sus manos reúne trece

La imagen del tiempo en Gonzalo Guerrero, de Eugenio Aguirre Marión Martínez Vela

trabajos en los que se ofrecen diferentes aproxima­ ciones a la literatura desde tres orientaciones princi­

183

pales: tradición clásica, literatura mexicana del siglo

xxy literatura del Norte de México. Los autores que colaboran

La pobreza en los cuentos de David Toscana:

en este volumen son profesores y estudiantes de la Maestría

un acercamiento sociocrítico

en Estudios Literarios de la Universidad Autónoma de Ciu­

Gustavo Herón Pérez Daniel

199

dad Juárez que, en atención a las Líneas de Generación y Apli­ cación del Conocimiento ( lg a c ) del posgrado, ligan consisten­

La metaliteratura en Estación Tula, de David Toscana Rocío Haydée Cárdenas Talamantes

temente sus proyectos de investigación al trabajo de tesis de

217

los maestrantes. A través de perspectivas críticas diversas y teorías con­

¿Porqué potenciar las competencias comunicativas en la

temporáneas con valor funcional, el interesado encontrará

universidady por qué hacerlo desde la literatura?

en estos estudios un conocimiento sistemáticamente docu­

Dalia Gómez Martínez

241

mentado, que supone la revisión suficiente de los referentes bibliográficos de base, así como una praxis interpretativa

Historia literaria del norte de México:

pertinente con las obras elegidas para su estudio.

una propuesta de diseño curricular Carlos Urani Montiel Contreras

Otro de los propósitos que anima la presente muestra

255

es la difusión oportuna del análisis de corpus literarios que desde lenguajes diferentes significan la realidad de nuestro

AL NORTE ESTU D IO S DE LITER A T U R A

integrar el gusto por aprender, aprender desde el deleite. “Sólo lo será en la medida en que el proceso educativo tenga la capacidad de diversificarse también y de adaptarse a las diferentes exigencias y condiciones de los grupos de jóvenes y adultos que se desea atender ”.14

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular Carlos Urani Montiel Contreras’

-"Hubo una vez una isla llamada California..."y se encontraron de cara con la muerte encomenderos cronistas cartógrafos que se adentraron allende la mar océano en años. Aglae Margalli, En las lumbrerías de la California .2

E

ste ensayo se vale de las herramientas de la historio­ grafía para enfocarse en la didáctica de la literatura

del norte de México. La relación dialéctica entre las

dos nociones que componen el título del trabajo pro-

1

14

254

S. Schmelkes, art. c it.,p .i 6 .

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

2

Es licenciado en Letras Hispánicas (m edalla al mérito universitario), Universidad Autónom a Metropolitana-lztapalapa (uam i), México y Doctoren Estudios Hispánicos por la U niversityof Western Ontario, Canadá. Pertenece al Sistema Nacional de Investigadores (nivel C), y actualmente es m iem bro del Núcleo Académico de la Maestría en Estudios Literarios de la u a o . Aglae Margalli, En las lumbrerías de la California. Instituto de Cultura de Baja California, Mexicali, 1999 , p. 23.

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

AL NORTE ESTU D IO S DE LITER A T U R A

duce un tipo de actividad selectiva en la que la literatura se

A casi cien años del último gran movimiento armado que

incorpora a la agenda de trabajo de la historia. A dicha prác­

convulsionó al país entero, parece que la nación se ha recupe­

tica se le conoce como historia literaria, la cual cuenta con un

rado del conflicto que vino del N orte-aunque sufre otros no

proceder y discurso propios. Desde la didáctica este ejercicio

emparentados con a q u é l-y es posible ficcionalizar más allá

tiene el objetivo fundamental de trazar un recorrido a través

de cartuchos y centauros. La novela de la Revolución Mexi­

de la aparición o publicación de obras literarias que serán

cana, esa que sí se estudia a fondo en las universidades del

comprendidas dentro de una misma tradición genealógica.

resto del país y más allá de sus fronteras, confirmó que los

La investigación histórica como eslabón de un amplio corpus

“bárbaros del norte” también poseen dotes literarias capaces

permite, además, la contextualización de cada pieza, la recu­

de llenar los huecos que la historiografía oficial no pudo (o

peración de textos-m ás allá del canon, aunque inevitable­

prefirió) no colmar.

mente sugiriendo otro-y su análisis a partir de la reconstruc­ ción de las condiciones de creación de cada obra.

Desde la frontera más congestionada del m u n d o -au n ­ que San Ysidro opine lo contrario desde Tijuana-escribo es­

De alguna forma el Gran Norte mexicano, inabarcable en

tas líneas para girar latuercay explorarel cómo seríay el por

extensión geográfica, rico en avatares político-económicos

qué no ha sido. Por lógica, como ya profetizaba Ezequías, mi

y configurados simbólicamente a través de un vasto corpus

voz no es la única, ni mucho menos la primera o la más fuer­

lingüístico, carece de presencia en la actual malla curricular

te, que clama en este desierto .3Así que el presente ensayo se

de la Licenciatura en Literatura Hispanomexicana en nuestra

limita a desarrollar un par de objetivos concretos. Primero,

misma Universidad. Y aunque en la Maestría en Estudios Li­

me interesa reflexionar sobre la etiqueta misma de “literatu­

terarios, perteneciente al Programa Nacional de Posgrados

ra del norte de México”. ¿Hasta dónde llega o dónde inicia el

de Calidad, sí se imparte un curso monográfico al respecto;

septentrión nacional?¿Cuáles son los límites de su tradición

y el próximo rediseño curricular a nivel superior anuncia con

literaria?¿Qué esperaría leer una estudiante residente en Ciu­

bombo y platillo solucionar tal ausencia, el paisaje hoy en

dad ]uárez en una materia así titulada? La primera parte del

día en el programa de licenciatura sigue siendo desolador. El

trabajo se detiene en este asunto. Posteriormente ensayaré

corpus literario más septentrional incluidoen el programase

el diseño curricular de ese mismo curso, el cual tendría como

estudia en un curso sobre Literatura Chicana; sin embargo,

última meta promover el interés por aspectos referentes a la

es una materia optativa, lo que manifiesta el carácter espo­

posición que ocupa nuestra institución y su estudiantado en

rádico, fragm entario-porque se limita a las letras hispanas

la franja fronteriza, ya sea como Universidad, como lectores

en los Estados Unidos-y secundario de la producción escrita

asiduos o como especialistas en la crítica e historia de su li­

en y acerca del norte de México, precisamente en su región de

teratura. ¿Cómo es que somos parte de ese norte de México?

origen o escenario de acción.

¿Cómo nos modifica su discurso literario o de qué forma po­

3

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

Isaías, 40.

Carlos Urani Montiel Contreras

257

AL NORTE ESTUDIOS DE LITERATURA

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

demos transformarloy difundirlo?¿Qué dinámicas presentes

¿quién estudia al narrador que hace suya una lengua extran­

en su literatura son afines a nuestras prácticas cotidianas? El

jera para relatarnos su experiencia fuera de su tierra natal?

andamiaje de este modelo de enseñanza-aprendizaje, com­

A mi entender el concepto de región resuelve estas cues­

pilado en una segunda sección, se sostiene gracias a dos ejes:

tiones,ya que nuestro antiguo norte es ahora el sur, pero sigue

uno sincrónico, representado por el concepto de región, en el

siendo él mismo. Entiendo por regionalismo, por una parte,

que el estudio y dinámicas de la frontera (borderstudies ) ocu­

el devenir histórico de una población que define una zona

pan un lugar central; y otro diacrónico, dictado por el queha­

geográfica como región al otorgarle ciertas características

cer de una historiografía literaria y su continuum de produc­

demográficas, económicas, políticas, lingüísticas y culturales.

ción creativa.

Pero también es la conciencia de esas experiencias comparti­ das, que actúan sobre la base de un mismo conocimiento .4 Si

Literatura del norte de México

esas dinámicas sociales acusan regularidady condicionan sus características, entonces es posible ubicarlas y describirlas en

Todo canon literario es una estructura históricay narrativa ci­

la literatura escrita en o acerca de la misma región fronteriza.

mentada en la toma subjetiva de decisiones y en el designio

¿Es posible conceptualizar las letras del norte de México y del

de otras tantas exclusiones. Por tanto, una de las principales

sur de los Estados Unidos como un todo orgánico?

tareas de la historia literaria consiste en cuestionar frecuen­

Desde esta perspectiva es posible vincular, por ejemplo, la

temente el valor concedido -casi institucionalizado- a de­

isla de California que fray Marcos de Niza trazó en la prime­

terminados autores y obras; y en hacer lo propio con épocas

ra mitad del siglo xvi, a fuerza de su incansable imaginación

áureas o marcadas con prehistóricos ismos, y hasta con lite­

cartográfica, con los versos publicados en

ratura enteras.

Aglae Margalli, que he utilizado como epígrafe. Asimismo

1999

de la poeta

Es común, por otra parte, que la historia literaria se nutra

la bestia causante de los feminicidios en 2666, obra monu­

y corra a la par que el concepto de nación y restrinja así su se­

mental del escritorchileno Roberto Bolaño, que “salió a lasu-

lección según los límites territoriales de cada núcleo político

perficie... al ver que no lo atrapaban ”,5 puede adquirir mayor

o a partir del acta de nacimiento, cuando no del pasaporte, de

significación al relacionarla con el territorio gentil e incivili­

un determinado escritor. Sin embargo,¿dónde ubicamos a los

zado que el jesuíta cordobés Andrés Pérez de Ribas pretendía

autores que cruzaron fronteras y dan cuenta de ello antes de

evangelizar a inicios del siglo xvii: “Era Sinaloa una selva de

que estas fueran trazadas? Pensemos que la memoria escrita de un náufrago o el espacio narrativo de un explorador no ne­ cesitan Estado. ¿A qué historia pertenecen las voces literarias que se expresan en su lengua materna desde un país vecino

4

que no le entiende o que precisa de un traductor? O viceversa, 5

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

Vid. José Cuello,“Las raíces coloniales del regionalism o en el noreste de México", en El norte, el noreste y Saltillo en la historia colonial de Méxi­ co. Archivo M unicipal de Saltillo, Saltillo, 1990, pp. 171-172. Roberto Bolaño, 2666. Anagrama, Barcelona, 2004, pp. 589-590.

Carlos Urani Montiel Contreras

259

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

AL NORTE ES I U D IO S DE LITER A T U R A

fieras, una cueva de los demonios, donde habitaban millares

de hechiceros”.6

Hace diez años, en un interesante artículo académico, el

teño que, por un lado, vertiera en su discurso “un ritmo que se basa en una respiración sofocada por los extremos del clima, que aunque abundante, da una impresión de parquedad, re­

cuentista Eduardo Antonio Parra se preguntaba si realmente

petitiva y entrecortada”, mientras que, por otro, el habla de

existía una narrativa del Norte e indagaba sobre la configura­

sus personajes estuviera condicionada por los grandes espa­

ción de los posibles tópicos norteños. “¿Sus temas son reflejo

cios abiertos, como sugiere Parra;8 entonces esta narrativa

de un determinado imaginario colectivo o de experiencias

sólo cobraría una óptima significación en la voz de su lector

específicas de esa región ?”.7 Las conclusiones del narrador,

ideal, es decir, uno norteño, quien bajo el resguardo del som­

oriundo de León, Guanajuato, se concentran en tres elemen­

brero, evite que el sol expanda el blanco de la hoja y entor­

tos recurrentes: el desierto, la frontera y, sobre todo, un len­

pezca su prosodia. Por tanto, la constante interacción y cruce

guaje particulary regional. Él insiste en que esta forma de ex­

entre los tres elementos son determinantes para perfilar lo

presión es la principal característica de la narrativa del Norte.

que entendemos como literatura del norte de México.

La propuesta se sostiene, ya que el registro lingüístico de

De esta forma, tanto la omnipresencia del paisaje-que en

la zona presenta evidencias suficientes con las que es posible

ocasiones afecta el devenir de la historia o condiciona el carác­

asentar que el habla norteña evolucionó con ciertas peculia­

ter de los personajes-, como la proximidad con el vecino país,

ridades debido a su distancia temporal y espacial respecto a

sólo entendí ble a través del examen histórico sobre los cambios

los centros de toma de decisión. La incubación prolongada de

y sobresaltos geopolíticos en la región, así como las caracte­

las formas del decir ocurrió a gran distancia de la metrópoli

rísticas y procesos lingüísticos de un lenguaje singular, son las

centralista de habla hispana, y respiró de cerca los ideolec-

claves para el estudio de un extenso corpus literario. Este len­

tos del american way. Sin embargo, no creo que los otros dos

guaje, que cifra el paisaje (no siempre desértico) y da cuenta de

elementos deban estar subordinados a uno solo, al del len­

las dinámicas de frontera (no siempre del lado mexicano), se

guaje. Sin duda la categoría de “novela del desierto”, con su

convierte en la materia prima de los escritores nacidos alrede­

premeditada condición geográfica, resulta insuficiente para

dor del Paralelo 30 N. de México, o de aquellos provenientes de

explicar el fenómeno; de igual forma, la “narrativa fronteriza”

cualquier otro punto del planeta que han tenido la capacidad

reduce el problema y suele reafirmar la división política ex­

de escuchar a sus habitantes para construir espacios y persona­

cluyendo a lo escrito de uno u otro lado del límite territorial.

jes ficticios con las particularidades del ser norteño. La condición fronteriza o norteña no tiene por qué ser

Además, pienso que si existiera un prototipo de escritor nor­

exclusiva del creador y podría ajustarse a su discurso o al de 6

7

Andrés Pérez de Ribas, Historia de los triumphos de nuestra santa fee en­ tre gentes las mas barbaras,y fieras del Nueuo Orbe. Alfonso de Paredes, Madrid, 1645, fol. 33. Eduardo Antonio Parra, "El lenguaje de la narrativa del norte de Mé­ xico", en Revista de Crítica Literaria Latinoamericana, 59 (2004), p. 72.

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

sus personajes. En todo caso-y en contra del tópico derrotis­ ta de: “Pobre México, tan lejos de Dios y tan cerca de Estados 8

Ibid., p.76.

Carlos Urani Montiel Contreras

AL NORTE ES I U D IO S DE LITER A T U R A

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

Unidos”- , deberíamos recordar que la inspiración divina,

rizados-y el significado universal que trasciende las coorde­

aquella que aparece como motivo central en la novela Idos de

nadas espacio-temporales de una coyuntura pretérita que,

la mente, manifiesta su toda poderosa afición por el bajo sex­

evidentemente, tuvo su aquí y ahora, ya lejanos. ¿Pero qué

to y el acordeón. El tema principal de esta obra narrativa de

tan distantes? El diseño curricular considera los debates que

Luis Humberto Crosthwaite es la composición y la creación

cercan estas dos dimensiones que tienden a agotar el sentido

literaria; en ella, una deidad con sombrero tejano le confiesa

de la interpretación histórica: la horizontal donde ubicamos

a Cornelio Reyna, cantante del dúo Los relámpagos de agosto,

el momento actual, y la dimensión vertical de la posteridad.

que lo necesita como intermediario para "entrar al corazón

El teórico Luis Beltrán Almería explica que “la tendencia he-

de la gente. Por eso comencé a componer: me cansé de es­

gemónica de la historia literaria ha sido la de tratar de expri­

perar a que la pinche gente se acercara. Mis palabras, tu voz”.

mir el sentido histórico de los fenómenos literarios dentro de

La música norteña es el objeto artístico con la que el altísimo

los límites de su época, de su actualidad o de su dimensión

alcanza la conmoción del auditorio, por lo que insiste: "Cor-

horizontal”.10Concuerdo con que esta postura es una limitan­

nelio, muchacho, entiéndeme: yo sólo quiero escribir cancio­

te, por lo que el curso plantea explorar las posibilidades de

nes. Seré muy Dios, y habré hecho muchas cosas, pero sólo

interpretación histórica más allá de la contemporaneidad de

unas cuantas me salen bien. Y escribir, qué te puedo decir, es

cada obra concreta, es decir, en el eje vertical, en el de la ge­

un deleite, un placer, mi regodeo favorito ”.9 Lo que quiero de­

nealogía, conexionesy consecuencias.

cir es que la voz creadora del norte mexicano puede venir de

El curso a nivel licenciatura sobre la Literatura del norte de

mucho más allá y no sólo desde nuestro angosto aquí.

México, que aquí esbozo, tiene como objetivo que los estu­

Diseño (norteño) curricular

tadas y activas en la misma zona donde se imparte la clase.

diantes se inmiscuyan en la huellay tradición literarias asen­ La línea espacio-temporal sobre la que planteo las siguien­ La disciplina de la historia literaria está vigente desde el siglo

tes cuestiones se extiende hasta el paisaje que se asoma por

xvny desde entonces, además de sus aportaciones bibliográ­

la ventada del aula y alcanza el justo momento del proceso

ficas, delimitaciones de corpus, ha vivido en un constante

enseñanza-aprendizaje. ¿Qué favor persigue con su pluma el

estado de re-elaboración debido a la preocupación y juicio

conquistador del siglo xvi que se abre paso con la espada a

sobre su mismo quehacer. Con frecuencia dichas formulacio­

través de tierras y pueblos septentrionales que todo abarcan?

nes o interrogantes se dirigen a una labor donde confluyen

Seguramente no es el mismo que el mítico explorador his

las circunstancias inmediatas del aquí y el ahora - a las que pertenecen los estudiantes y con las que están más familia10 9

262

Luis Humberto Crosthwaite, Idos de la mente: la increíble y (a veces) tris­ te historia de Ramón y Cornelio. Tusquets, México, 2010, pp. 157-158.

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

Luis Beltrán Almería, "Horizontalidad y verticalidad en la historia literaria”, en Leonardo Romero Tobar (ed.), Historia literaria/historia de la literatura. Prensas Universitarias de Zaragoza, Zaragoza, 2004, pp. 13-14.

Carlos Urani Montiel Contreras

AL NORTE ESTU D IO S DE LITER A T U R A

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

paño esperaba tras cada soplo y sahumerio después de sus

examinar el fenómeno más allá de un norte concreto, donde

naufragios. ¿En qué latitud se esconde el sueño americano de

se encuentra Ciudad Juárez. El ejercicio de reflexión en cada

las siete ciudades de Cíbola (ahora llamadas Nueva York, Los

una de las sesiones considera que si esas dinámicas sociales

Ángeles, Miami, Houston, Chicago, Dallas y San Antonio)?

condicionan particularidades en la organización espacial, co­

¿Cuál es el objetivo de una crónica en latín dieciochesca sobre

mercial, política, lingüísticay cultural de la región, es posible

las rebeliones tarahumaras, enunciada por un misionero ale­

ubicarlas y describirlas en la literatura escrita en o acerca de

mán desde los confines del imperio?¿Existen continuidades temáticas entre las letras coloniales/virreinalesy la literatura

la misma zona fronteriza. La frontera como campo de estudio para las Ciencias So­

escrita en las postrimerías del siglo xx?¿Cómo se recupera la

ciales y Humanidades no se identifica con alguna categoría

pérdida decimonónica del territorio mexicano en la narrativa

geográfica específica, sino que se refiere al espacio territorial,

del presente siglo? ¿Cómo sacudirse el olor a escaparate de

pero también simbólico, ubicado en un momento histórico

una literatura local, para llegar a lectores en busca de un es­

preciso y condicionado por dinámicas sociales de por lo me­

pectro humano más hondoy no centrado en anécdotas sobre

nos dos grupos o comunidades en interdependencia; o sea,

violencia (con todas sus potentes variantes) o industrializa­ ción imperialista?11

que una frontera se define no con latitudes particulares, sino

El curso está pensado para impartirse en la Licenciatura

elementos sociales que los componen. Para cubrir la variable

en Literatura Hispanomexicana de la u a c j (nivel avanzado, 16

diacrónica/cronológica, el material de lectura se conforma

semanas, 32 sesiones). La materia consiste en el estudio de un

por obras literarias adscritas en distintos géneros (narrativo,

corpus en el que es necesario trazary definir ciertos ejes con­

ensayístico, lírico y dramático) y escritas a partir del siglo xvi

a partir de un tiempo, un espacio escindido y los diferentes

ceptuales que sirvan como punto de referencia para el análi­

hasta nuestros días. Estudiaremos en ellas cómo cada autor

sis de las obras. El doble papel del carácter regional ha impre­

construye un espacio simbólico, pero también territorial, don­

so en el septentrión mexicano, antiguamente novohispano,

de el norte de México adquiere características propias, aun­

una sorprendente unidad temática en su desarrollo histórico

que siempre al margen, creando, a su vez, un nuevo epicentro.

y una identidad moldeada a conciencia. Por tanto, es posi­

El criterio de selección del material de lectura obedece al

ble afirmar que esta región es también un escenario donde

esfuerzo por ubicar continuidades y rupturas temáticas aún

existen procesos sociales concretos que acusan regularidad y

vigentes y perceptibles desde el encuentro de dos mundos,

recurrencia. Es por eso que el concepto de frontera es útil para

en tiempos de la Conquista, hasta la creación de un tercero que se ubica en medio de ambos y por encima de sus fronte­ ras geográficas. Las sociedades fronterizas erigidas sobre dis­

11

Esta últim a pregunta tiene un eco más o menos literal. Vid. Die­ go Ordaz, “Garabato: escribir desde la frontera” [en línea], Al límite. Febrero 2015. < http://allimite.mx/apuntes-sobre-garabato-novela-de-wi 11ivaldo-delgadiIlo/> [Consulta: 3 de marzo, 2015].

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

cursos épicos y religiosos experimentan emociones cíclicas;

Carlos Urani Montiel Contreras

Historia literaria del norte de México: una propuesta de diseño curricular

AL NORTE ESTU D IO S DE LITER A T U R A

y cada cierto tiempo, definido por el simple azar, la fuerza

tantos otros pertenecientes a una misma tradición con una

natural que las compone se desborda .12

sorprendente unidad temática.

Insisto en que un enfoque regional y diacrónico permite

La integración de una región histórica—Iiteraría que ha

agrupar a varios autores que no encajan en las historias lite­

sido nombrada con diferentes topónimos y lenguas (La Gran

rarias nacionales o que se leen aquí o allá, pero no en ambos

Chichimeca, provincias internas novohispanas, el lejano nor­

lados de un límite político que no puede ser entendido como

te español, Nueva Vizcaya, Nuevo/a México, The Far West,

una frontera cultural. ¡Ya bastante tenemos con la línea o el

Spanish Borderlands, Texas, American West) permitirá situar­

muro! Desde esta perspectiva se incluyen textos y autores

la en su contexto continental, en el marco universal de las

que cruzaron iday vuelta nuestras fronteras, incluso las ideo­

fronteras y en una tradición literaria en constante diálogo y

lógicas, tal es el caso de fray Marcos de Niza (Descubrimiento

discusión. Me uno al reclamo del historiador español Alfredo

de las siete ciudades de Cíbola, 1539); el malogrado explorador

Jiménez Núñez: “Ya es hora de establecer un marco concep­

1555); los adelanta­

tual distinto al que hasta ahora ha imperado sobre un enor­

dos y “pacificadores” españoles Francisco Vázquez de Corona­

me espacio que lejos de ser cada día más historia es cada día

Alvar Núñez Cabeza de Vaca (La relación,

do (Relación de la jornada de Cíbola, escrita por Pedro de Casta­

más presente y más futuro ”.13 Sin duda, el clima favorable que atraviesan los programas

ñeda de Nájera en 1540) y Gaspar de ViIlagrá (Historia de la

u a c j,

Nueva México, 1610); los jesuítas europeos Eusebio Francisco

de literatura en la

tanto en licenciatura (avalado por el

Kino (Sangre misionera en Sonora, 1695), Joseph Neumann

Consejo para la Acreditación de Programas Educativos en

(Historia de las rebeliones en la Sierra Tarahumara, 1724) e Ignaz

Humanidades), con dos Cuerpos Académicos en operaciones

Pfefferkorn ( Descripción de la provincia de Sonora, 1795); la pie­

(Estudios Literariosy Lingüísticos,y Humanidades Digitales),

za teatral decimonónica de Los téjanos (1841-46); el relato del

como a nivel maestría (perteneciente al Programa Nacional

viaje cientificista del alemán Julius Fróebel (1856); así como

de Posgrados de Calidad del Consejo Nacional de Ciencia y

varios autores contemporáneos: Gloria Anzaldúa, Guillermo

Tecnología), es el mejor marco para que en el próximo redi­

Gómez-Peña, Rafa Saavedra, jim m y Santiago Baca, Benja­

seño de la carrera en Literatura Hispanomexicana (que ojalá

mín Alire Sáenz, Cormac McCarthy, Aileen El-Kadi, entre

cambie su nombre), la Literatura del norte de México quede in­ cluida dentro de la malla curricular en los cursos obligatorios. De tal forma, los egresados obtendrán el conocimiento y las

12

266

Debo esta idea a las “Coordenadas...” expuestas por Antonio More­ no, quien explica que "A pesar de los cataclismos infames de la hora, Ciudad Juárez sigue conservando un aire cultural inquietante. No creo que corran peligro sus mitos fundacionales (desde Cabeza de Vaca hasta Fray García de San Francisco), ni tampoco sus credos sub­ versivos e insondables”. Vid. A. Moreno (ed.), Road to Ciudad Juárez-, crónicasy relatos de frontera. Samsara, México, 2014, p. 12.

Luis Carlos Salazar Quintana Coordinador

herramientas necesarias para describir, analizar y difundir la historia literariadesu propia región.¿Si noson ellos,quiénes?

13

Alfredo Jiménez Núñez, “El lejano norte español: cómo escapar del American West y de las Spanish Borderlands", en Colonial Latin American Review A (1996), p. 408.

Carlos Urani Montiel Contreras

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