FOUCAULT Y EDIPO-REY - ¿Miente Foucault?

June 7, 2017 | Autor: Diego Chimbi | Categoría: Michel Foucault, Filosofía del Derecho, Edipo Rey
Share Embed


Descripción

FOUCAULT Y EDIPO-REY: EN DEFENSA DE SÓFOCLES 1 Diego Chimbí Naicipa2

Resumen El propósito de este trabajo es observar en detalle los argumentos que el autor Michael Foucault utiliza para sustentar las conclusiones a las que llega en la segunda conferencia de la serie La verdad y las formas Jurídicas realizadas en la Universidad de Río de Janeiro, Brasil, en el año de 1973.

Posición de Foucault frente a la tragedia Edipo Rey

A pesar del análisis exhaustivo que nos trae Foucault en su conferencia La verdad y las Formas Jurídicas sobre la tragedia de Sófocles es curioso observar las conclusiones negativas a las que llega el autor. ¿Por qué Foucault invalida la tragedia de Sófocles?, ¿No le es esta obra suficiente para explicar el método de indagación o símbolo griegos?, ¿Cuáles son los argumentos por los cuales llega a valorar negativamente la tragedia griega? Para tratar de responder a estas preguntas, he tomado dos análisis sobre la tragedia de Sófocles –Edipo Rey- una que aparece en el prólogo de una traducción en español realizada por el Licenciado en Filosofía Jorge Cano Cuenca, y el otro un escrito realizado por el señor Daniel Madeiro en su blog personal. Ambos me fueron de gran ayuda para dar otra interpretación a la tragedia de Sófocles, que difieren con la expuesta por el pensador Michel Foucault.

1

Proyecto Integrador, presentado en la materia de Teoría General de la Prueba al profesor. Carlos Leonel Buitrago 2 Estudiante de Derecho, Universidad la Gran Colombia. Código 6001220804

La intención explícita de Michel Michael Foucault después de describir en forma minuciosa y muy acertada los métodos judiciales griegos para establecer la verdad, nos muestra el propósito real de su exposición: Quiero demostrar que Edipo, colocado dentro de este mecanismo del φυμβολον, de mitades que se comunican, juego de respuestas entre los pastores y los dioses, no es aquél que no sabía sino, por el contrario, aquel que sabía demasiado, aquél que unía su saber y su poder de una manera condenable y que la historia de Edipo debía ser expulsada definitivamente de la Historia (Foucalut, 1978)

Foucault nos pide que saquemos de la Historia la obra de Sófocles, pues en ella el personaje principal de Edipo une el saber y el poder de una manera correcta, pero que la misma historia se encarga de refutar, invalidando la unión del saber y el poder y así mismo generar una perspectiva equivocada, de que el saber y el poder se encuentran separados: Occidente será dominado por el gran mito de que la verdad nunca pertenece al poder político, de que el poder político es ciego, de que el verdadero saber es el que se posee cuando se está en contacto con los dioses o cuando recordamos las cosas, cuando miramos hacia el gran sol eterno o abrimos los ojos para observar lo que ha pasado. (Foucalut, 1978, pág. 25)

Estas conclusiones derivan de un postulado que establece el autor y enmarca la historia, que es la de colocar al “poder” como eje central de la obra: “(…) durante toda la pieza lo que está en cuestión es esencialmente el poder de Edipo y es esto mismo lo que hace que éste se sienta amenazado.” Y más adelante nos confirma que “(…)Edipo no defiende en modo alguno su inocencia, su problema es el poder y cómo hacer para conservarlo; esta es la cuestión de fondo desde el comienzo hasta el final de la obra. (Foucalut, 1978, pág. 20).

El autor nos dice que el personaje de Edipo, no busca establecer su inocencia, haciendo una especie de omisión en declarar lo contrario, en refutar las acusaciones que se le hacen, y que dichas omisión y refutaciones se deben a que esencialmente a Edipo no le importa saber la verdad sino lo que le interesa es conservar el poder; ¿será este un razonamiento válido para el personaje de Edipo?

Los argumentos de Foucault

Para poder aceptar su tesis es necesario valorar en detalle los argumentos y pruebas con los cuales pretende validarla.

La primera prueba que Foucault nos trae para resaltar que la obra trae como tema central el poder proviene del título de la misma: Edipo Rey, al respecto dice: “(…) es digno de tener en cuenta que el título de la obra de Sófocles no sea Edipo, el incestuoso o Edipo, asesino de su padre, sino Edipo Rey. ¿Qué significa la realeza de Edipo?” (Foucalut, 1978) El anterior comentario trae dos características; una la de dar importancia al término “rey” en relación con el “poder”, y la otra una premisa tácita, que nos sugiere que el título de una obra se debe corresponder necesariamente con el tema central de la misma. Para quienes hayan visto películas, o leído otras obras podrán validar que esta premisa, no siempre se cumple, pues por ejemplo en la obra “Sueño de una noche de verano” no es el sueño, la noche o la estación del verano el tema principal sino elementos secundarios que rodean al tema principal que es el amor que ocurre entre varios personajes enamoramiento pasajero provocado por el duende Puck, durante la boda de Teseo e Hipólita o para no ir tan lejos, es “Edipo en Colono” (otra obra de Sófocles) la historia de Edipo y esa ciudad: pues no, en cambio como lo afirma Daniel Madeiro “es una obra que describe los últimos días de Edipo en el destierro, ciego, querido y ayudado por sus hijas y respetado hasta por el propio Teseo” (Madeiro, 2006), siendo la ciudad un elemento secundario de la obra. Ahora si hacemos caso a lo que nos dice Foucault sobre sensación que percibe Edipo de amenaza, nos encontramos en la obra de Sófocles un Edipo cuya conducta difiere del Edipo citado por Foucault, por cuanto este no tiene miedo de seguir investigando ni de su descendencia sino que en medio de su búsqueda se dirige a su madre y le dice : “¡Estalle lo que quiera! En cuanto a mí, persisto en querer saber mi origen, por humilde que sea. Ella, naturalmente orgullosa como toda mujer, se avergüenza, sin duda, de mí bajo nacimiento. (…)Y siendo tal mi origen, y nacido bajo este signo, no puedo cambiarlo. ¿Por qué voy a renunciar a descubrir mi nacimiento?” (Sófocles, Colombia Aprende, 2001)

Quisiera decir que Sófocles por motivos estéticos o dramatúrgicos no pondría un titulo tan feo o inoportuno como Edipo el incestuoso, quitándole sorpresa a su trágico final, pero eso sería caer en la trampa de colocar en boca de Sófocles un razonamiento totalmente subjetivo e indemostrable, sin posibilidad de contradicción, pero no nos imposibilita para decir, que en el análisis de Foucault nos extraña que siendo él tan minucioso en referir los nombres de la obra a su idioma original en griego , no haya seguido con este método a la hora de postular la conexión de rey y poder pues el título de la obra al cual se debió haber referido Foucault no era el de Edipo Rey, que proviene de la traducción del latín Oedipus Rex, sino de su nombre original

oυς τύραννoς,

idipous Tyrannos, donde se

desprende el termino de Tirano que en la Grecia clásica representaba al gobernante que ocupaba el poder no por derecho (de iure), sino que lo detentaba por la fuerza (de facto), generalmente con la ayuda del pueblo o un golpe militar , esto s se debe tener en cuenta pues éste término entra en contraste con el título de Βασ λεύς, basileus que significa Rey por derecho hereditario (Wikipedia, 2015), esto puede darnos otro análisis, donde pondera la verdad , la libertad y predestinación como eje central, porque al final de la obra descubrimos que al personaje de Edipo le correspondía el trono de Tebas por derecho (de iure) hereditario al ser hijo de Layo, es decir Edipo es un Basileus y no un Tirano, al contrario de lo que él mismo creía, no es extranjero, la verdad de su origen no solamente lo descubre él, sino nosotros. (Cano Cuenca, 2001)

Por último respecto a este argumento quiero resaltar que Sófocles no fue el autor del mito de Edipo Rey, el mito, ya se conocía desde la Odisea es decir 300 años antes, por tanto Sófocles , no escondió la trampa de desligar el poder con el saber, el dramaturgo jugó más bien con la dualidad entre la predeterminación divina (el destino que establecen los dioses) y la libertad que tiene el hombre, así lo evidencia Homero en el canto XI; También vi a la madre de Edipo, la hermosa Epicasta, la que cometió una acción descomedida, por ignorancia de su mente, al casarse con su hijo, quien, después de dar muerte a su padre, se casó con ella (los dioses han divulgado esto rápidamente entre los hombres). Entonces reinaba él sobre los cadmeos sufriendo dolores por la funesta decisión de los dioses en la muy deseable Tebas, pero ella había descendido al Hades, el de puertas poderosamente trabadas, después de atar una alta soga al techo de su elevado palacio, poseída de su furor. Y dejó a

Edipo numerosos dolores para el futuro, cuantos llevan a cumplimiento las Erinias de una madre.

Como último elemento traigo una prueba, del cual advierto su debilidad por desconocer la edición en griego que lee Foucault o alguna traducción que garantice la fuente, pero que cito, porque de las traducciones que revise, incluyendo una del profesor Jorge Cano Cuenca, en ninguna de ellas encontré un texto que se asemeje a la referido por Foucault; en el momento en que Edipo se dirige al esclavo de Corinto o mensajero de Corinto después de que éste le afirma que no es hijo de Polibio. En la respuesta del Edipo de Foucault el personaje se siente amenazado y descalifica por impertinente el testimonio del mensajero; “Dices eso para que me avergüence, para hacer que el pueblo crea que soy un hijo de esclavo. Igualmente ejerceré el poder; soy un rey como los otros” (Foucalut, 1978) Este Edipo de Foucault, desconfía del esclavo de Corinto, cosa que no ocurre con el Edipo de la traducción de Jorge Cano Cuenca , donde al contrario Edipo después de recibir la revelación del esclavo de Corinto no juzga su declaración y lo interpela con más preguntas tales como: ¿(…)me habías comprado o me habías hallado?, cuando me entregaste a él?; ¿por qué motivos recorrías aquellos lugares? Preguntas dignas de una indagación y no de alguien que simplemente tiene miedo y desdeña la verdad. Otro momento que prueba la diferencia entre la actitud del Edipo citado de Foucault y el de Sófocles es cuando él enarbola la hipótesis a Yocasta de una posible ascendencia esclava, que podría humillarlo a él, diciéndole :“(…). Aunque descendiese yo de una triple generación de esclavos, tu no resultarías por ello humillada” (Cano Cuenca, 2001), posición que reafirma la conducta de un Edipo, buscador de verdad, y refuta la de Edipo conservador del poder.

Un motivo de la condena de Focault hacia el mito de Sófocles

De lo que nos cuenta Foucault sobre Nietzsche dice que este filósofo sostiene que el conocimiento es una invención y no una revelación, que el conocimiento es el consecuente de una lucha de poder, es un artificio , un ideal fabricado, y por ello el filósofo debe aproximarse no como filósofo sino como político, para poder conocer estas relaciones de lucha donde los impulsos de reír, deplorar y odiar que son los motores e instintos que toma el sujeto frente a cualquier objeto u otro sujeto, chocan y se enfrentan generando así un conocimiento. Lo anterior es uno de los motivos por los cuales Foucault condena el mito de Edipo, pues Sófocles o su interpretación nos dejaría la enseñanza de que el rey no puede saber la verdad, de que el rey no puede saber o si no dejaría de tener el poder, esta lección o interpretación rompe con la tesis manifiesta de relación poder-y-saber y saber-y-poder, dejando su contrario poder-y-no saber y saber-no poder.

Conclusiones

Foucault maneja un discurso a lo largo de las dos primeras conferencias que contrasta dos tipos de interpretación , una interpretación subjetiva (no demostrada) de lo que el mito de Edipo nos quiere decir (desunión del saber y el poder) y la otra interpretación (unión saberpoder) con base en los textos de Nietzsche (el choque de espadas) que supuestamente desenmascara al mito de Sófocles y lo invalida, comprobación histórica

por ende, no estamos ante una

de una tesis sino meramente la confrontación de dos

interpretaciones que él tiene acerca del mito y no, necesariamente de Sófocles. De lo que se deduce de la obra teatral de Sófocles, se puede decir que el autor nos deja ante un dilema, propio de la época , saber si Edipo podía evitar su destino, si en verdad somos libres , o si la doxa con su determinismo divino nos manejaba

Sería interesante realizar la comprobación de la veracidad de la cita que nos trae Foucault, sobre la posición que tiene Edipo respecto al poder cuando confronta al esclavo de Corinto, pues de la comprobación que se realiza con las traducciones, si son correctas, se concluye que Foucault se basa en un texto inexistente, extrañamente tergiversado para la adaptación de su posición frente al mito.

BIBLIOGRAFÍA Cano Cuenca, J. T. (2001). Edipo Rey (Segunda Edición ed.). (J. Cano Cuenca, Trad.) España: Ediciones Cátedra. Foucalut, M. (1978). La verdad y las formas jurídicas. (E. Lynch, Trad.) Rio de Janeiro: Gedisa. Obtenido de http://www.posgrado.unam.mx/arquitectura/aspirantes/La_verdad.pdf Madeiro, D. A. (Junio de 2006). Otro analisis sobre Edipo Rey. Obtenido de http://madeiro.blogspot.com.co/2006/06/otro-anlisis-sobre-edipo-rey-de.html Sófocles. (2001). Colombia Aprende. (P. Editores, Ed.) Recuperado el 02 de Noviembre de 2015, de http://www.colombiaaprende.edu.co/html/mediateca/1607/articles65455_archivo.pdf Wikipedia. (17 de 11 de 2015). Basileos. Obtenido de https://es.wikipedia.org/wiki/Basileos

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.