Flor indiana en Sevilla. Un cuadro de Santa Rosa de Lima sobre el cuerpo de sor Sebastiana de Neve

June 23, 2017 | Autor: M. Fernández Valle | Categoría: Visual and Cultural Studies, Cultura Visual, Sevilla, Transferencias Culturales, Santa Rosa De Lima
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Descripción

América: cultura visual y relaciones artísticas

RAFAEL LÓPEZ GUZMÁN, YOLANDA GUASCH MARÍ y GUADALUPE ROMERO SÁNCHEZ (eds.)

América: cultura visual y relaciones artísticas

Granada, 2015

COMITÉ CIENTÍFICO: ANTONIO BONET CORREA (Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Madrid) RAFAEL LÓPEZ GUZMÁN (Universidad de Granada) PAULA ANDRÉ (Instituto Universitario de Lisboa) MARÍA LUISA BELLIDO GANT (Universidad de Granada) MIGUEL ÁNGEL CASTILLO OREJA (Universidad Complutense de Madrid) GLORIA ESPINOSA SPÍNOLA (Universidad de Almería) RAMÓN GUTIÉRREZ DA COSTA (CONICET. Argentina) RODRIGO GUTIÉRREZ VIÑUALES (Universidad de Granada) IGNACIO HENARES CUÉLLAR (Universidad de Granada) MARÍA DEL PILAR LÓPEZ PÉREZ (Universidad Nacional de Colombia. Bogotá) VÍCTOR MÍNGUEZ CORNELLES (Universitat Jaume I. Castellón) FRANCISCO MONTES GONZÁLEZ (Universidad de Granada) JOSÉ MIGUEL MORALES FOLGUERA (Universidad de Málaga) ALFREDO J. MORALES MARTÍNEZ (Universidad de Sevilla) JOSÉ DE NORDENFLYCH (Universidad de Playa Ancha. Valparaíso) ADRIANA PACHECO BUSTILLOS (Universidad Pontificia Católica del Ecuador. Quito) JAVIER PIZARRO GÓMEZ (Universidad de Extremadura. Cáceres) FERNANDO QUILES GARCÍA (Universidad Pablo de Olavide. Sevilla) WILLIAM REY ASHFIELD (Universidad de la República. Montevideo) INMACULADA RODRÍGUEZ MOYA (Universitat Jaume I. Castellón) ANA RUIZ GUTIÉRREZ (Universidad de Granada) MARIO SARTOR (Universidad de Udine) MIGUEL ÁNGEL SORROCHE CUERVA (Universidad de Granada) JOSÉ ANTONIO TERÁN BONILLA (Dirección de Estudios Históricos del INAH. México) MARÍA VICTORIA ZARDOYA LOUREDA (Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría. La Habana) WIFREDO RINCÓN GARCÍA (CSIC. Madrid)

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LOS AUTORES UNIVERSIDAD DE GRANADA AMÉRICA: CULTURA VISUAL Y RELACIONES ARTÍSTICAS ISBN: 978-84-338-5770-5 Depósito Legal: Gr.-515/2015 Preimpresión: Atrio Ediciones, S.L.

Printed in Spain

Impreso en España

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Presentación LOS EDITORES [XIII-XV] 1 REFLEXIONANDO SOBRE AMÉRICA Gregorio Vásquez de Arce y Ceballos. Reflexiones sobre la construcción de un mito OLGA ISABEL ACOSTA LUNA [3-12] Andújar: destino americano de una ciudad andaluza JOSÉ MARÍA BELLIDO MORILLAS [13-18] Félix Lemaur y el sistema defensivo del Puerto de Mariel ENRIQUE CAMACHO CÁRDENAS [19-26] Silvestre Abarca y el proyecto de reforma del fuerte de Nuestra Señora de los Ángeles en Jagua (Cuba) PEDRO CRUZ FREIRE [27-34] Arte al margen: los grafitos mayas prehispánicos NÚRIA FELIU BELTRÁN [35-42] El ingeniero Tomás O’Daly en Puerto Rico NURIA HINAREJOS MARTÍN [43-50] Literatura artística en las bibliotecas jesuitas de los virreinatos del Perú y Nueva Granada EWA KUBIAK [51-58]

VI

SUMARIO

El mito del origen: un viaje entre dos cielos MÓNICA LÓPEZ DEL CONSUELO [59-66] Árboles prehispánicos para atrios novohispanos PEDRO LUENGO GUTIÉRREZ [67-74] La Oratoria Sagrada en el Tucumán ANA MARÍA MARTÍNEZ DE SÁNCHEZ [75-84] El IV Centenario del Descubrimiento de América en Granada a través de la prensa ELVIRA MORENO MORENO [85-94] Licencia de pasajero: destino Santafé. Las pesquisas sobre Alonso Rodríguez, carpintero sevillano en el siglo XVI GUADALUPE ROMERO SÁNCHEZ [95-104] Reformas urbanas previas al extrañamiento en tres reducciones guaraníticas PABLO RUIZ MARTÍNEZ-CAÑAVATE [105-114] El canónigo del Sacro Monte Pedro Vejarano, obispo de Buenos Aires. Una experiencia frustrada JOSÉ MARÍA VALVERDE TERCEDOR [115-122] 2 INTERCAMBIANDO IMÁGENES El retrato del gobernador Torre y Pando (1826) y la nueva imagen del poder en Puerto Rico JUAN LUIS BLANCO MOZO [125-132] Proyecto de investigación sobre la Real Fábrica de Loza Fina y Porcelana de Alcora. Influencias artísticas, tráfico comercial y coleccionismo. Siglos XVIII-XX EVA CALVO CABEZAS [133-140]

SUMARIO

VII

Aproximación a las obras, modelos, artífices y devociones de origen andaluz en Guatemala GLORIA ESPINOSA SPÍNOLA; TERESA SUÁREZ MOLINA Y MIGUEL Á. SORROCHE CUERVA [141-150] Flor Indiana en Sevilla. Un cuadro de Santa Rosa de Lima sobre el cuerpo de sor Sebastiana de Neve MARÍA DE LOS ÁNGELES FERNÁNDEZ VALLE [151-158] Un legado artístico de la imagen de poder. Aproximación a la galería de retratos de los virreyes de Nueva España SARAI HERRERA PÉREZ [159-164] Intercambios de arte contemporáneo España-América. Estudio de una década de relaciones a través de obra escultórica en Salamanca. Domus artium 20022012 RAQUEL LARA RUIZ [165-174] Lepanto en los virreinatos americanos VÍCTOR MÍNGUEZ [175-182] Arquitectura y alhambrismo en Nuevo México. El Scottish Rite Temple ELENA MONTEJO PALACIOS [183-190] Modelos iconográficos y emblemáticos de los «emblemas» de la iglesia de la Compañía de la ciudad argentina de Córdoba JOSÉ MIGUEL MORALES FOLGUERA [191-204] «En la cruz del Salvador». El Camino Real de la Cruz en la pintura de la Real Audiencia de Quito ÁNGEL PEÑA MARTÍN [205-214] Paloma por dentro o sea la mano de vidrio. Diálogo plástico-poético entre Federico García Lorca y Pablo Neruda JOSÉ LUIS PLAZA CHILLÓN [215-222]

VIII

SUMARIO

Saudades do Brasil em Portugal. Consideraciones sobre la presencia y ausencia del arte brasileño (siglos XX y XXI) en Portugal RENATA RIBEIRO DOS SANTOS [223-228] Influencia y apropiaciones estilísticas en el «Castelo Mourisco» de Río de Janeiro JOSÉ MANUEL RODRÍGUEZ DOMINGO Y RENATA BARROS DE MELO [229-238] Los milagros de San Francisco Solano en Iberoamérica y su trabajo evangelizador: aspectos iconográficos MARÍA DEL AMOR RODRÍGUEZ MIRANDA [239-246] 1808, Guatemala por Fernando VII: iconografía y emblemática en el estudio de las Juras Novohispanas INMACULADA RODRÍGUEZ MOYA [247-256] Cuando el corazón es lienzo: retóricas del recuerdo y cultura visual en el barroco hispano LUIS VIVES-FERRÁNDIZ SÁNCHEZ [257-266] 3 IDENTIDAD Y CULTURA VISUAL El Instituto de Cine Nicaragüense, un intento de rescatar y desarrollar la identidad nacional BELÉN AMADOR RODRÍGUEZ [269-276] La segunda generación pictórica del exilio republicano español: el caso de Regina Raull MARÍA BUENO MARTÍNEZ [277-284] Vázquez de Sola: una voz disonante ANGÉLICA CARMENATE PORTILLA [285-292]

IX

SUMARIO

Ronda en el tiempo. Identidades históricas y contemporáneas en la obra de Fanny Rabel GIULIA DEGANO [293-300] La oscuridad que se apaga. Juan delGado BRUNELA CURCIO Y JUAN DELGADO [301-304] La utopía del modernismo brasileño. Una aproximación desde la colonialidad PAULO H. DUARTE-FEITOZA [305-312] Construcción del enemigo y de la nación en las imágenes de la prensa de guerra paraguaya (1867-1868) MARÍA LUCRECIA JOHANSSON [313-324] Tremendísima Mulata. Identidad racial, nacional y de género en la cultura visual cubana decimonónica SALVADOR MÉNDEZ GÓMEZ [325-336] De la construcción de identidad desde la plaza principal y del patrimonio de Cúcuta LUIS FERNANDO NIÑO LÓPEZ [337-344] La cultura indígena americana en La Otra Conquista MARÍA ROCÍO RUIZ PLEGUEZUELOS [345-352] 4 DESDE AMÉRICA Retrospectiva de la construcción del cordón amurallado de Cartagena de Indias, su presente y futuro JORGE LUIS ÁLVAREZ CARRASCAL [355-362]

X

SUMARIO

Cada día atrasamos el reloj un cuarto de hora para llegar con la hora americana. Diario de viaje hacia el exilio LIDIA BOCANEGRA BARBECHO [363-372] Arte y Censura. La pintura de Débora Arango, un reflejo de la realidad social colombiana ELIANA SOFÍA BOTERO MEDINA [373-378] La catedral de Guadalajara. Su historia y significados ARTURO CAMACHO BECERRA [379-388] La red de palacios virreinales del imperio hispánico. La sala del Real Acuerdo de México en el siglo XVII JUAN CHIVA BELTRÁN [389-398] La soleá de Macondo JANNETH ESPAÑOL CASALLAS Y CARLOS MARTÍN BARRANCO [399-406] La bóveda maya y su relación con otras culturas milenarias LAURA GILABERT SANSALVADOR [407-416] Investigando las figurillas cerámicas mayas: problemas y soluciones PATRICIA HORCAJADA CAMPOS [417-424] Biombo con la iglesia de Nuestra Señora de Las Aguas, Santafé de Bogotá. Pintura inédita de la segunda mitad del siglo XVII MARÍA DEL PILAR LÓPEZ PÉREZ [425-438] Estudios para la puesta en valor de estructuras de barro cocido pertenecientes a la cultura Quitu-Cara, Ecuador OLGA M.ª MEDINA LORENTE Y BEGOÑA CARRASCOSA MOLINER [439-444] Aproximación al urbanismo maya. Una base cartográfica homogénea como punto de partida ANDREA PEIRÓ VITORIA [445-456]

XI

SUMARIO

Un político-azucarero con intereses en Cuba y en Andalucía. «La Antequerana» de Romero Robledo FRANCISCO JOSÉ SÁNCHEZ SÁNCHEZ [457-464] El barrio Las Flores: arquitectura y urbanismo en la bonanza cafetalera rubiense, 1880-1930 ANA CECILIA VEGA PADILLA [465-474] 5 PATRIMONIO AMERICANO Museo Expresso. Recorridos museográficos por el territorio del paisaje cultural cafetero NAJANY ISABEL ARANGO VÁSQUEZ [477-484] Murallas sumergidas. Futuro de Cartagena basado en lecciones del pasado ALFONSO RAFAEL CABRERA CRUZ [485-494] Arquitectura patrimonial civil habitacional en la periferia de Sucre MARCELA CASSO ARIAS [495-500] Puesta en valor del acervo arquitectónico del barrio El Prado en Barranquilla IGNACIO SALOMÓN CONSUEGRA BOLÍVAR [501-506] Apuntes de un proyecto, para la difusión del patrimonio iberoamericano en Córdoba y su provincia MARÍA JOSÉ ESCRIBANO NIETO [507-512] Camino Real de Tierra Adentro (México): de camino histórico a itinerario cultural ARIADNA DENI HERNÁNDEZ OSORIO [513-520] La casa bajera en Barranquilla (Colombia): aproximaciones para su reconocimiento y puesta en valor PAOLA MILENA LARIOS GIRALDO [521-528]

XII

SUMARIO

El Camino Real de los Tejas. Sistema de información geográfica en la investigación para el patrimonio cultural ANGELA LOMBARDI; AZZA KAMAL Y SHELLEY ROFF [529-538] Las aduanas de la ciudad cubana de Matanzas IGNACIO J. LÓPEZ HERNÁNDEZ [539-548] Edificio de la Antigua Aduana en Barranquilla. Catalizador de regeneración urbano LAINETH HORLENES ROMERO DE GUTIÉRREZ [549-558] Rescate del patrimonio cultural. El caso de la Società Unione Operai Italiani en Buenos Aires BIANCA SCHÄFER M.A. [559-568] Algunas consideraciones respecto al patrimonio arquitectónico y urbano de México JOSÉ ANTONIO TERÁN BONILLA [569-580] Centros históricos latinoamericanos y caribeños LUISA MARÍA VELÁSQUEZ [581-588] Patrimonio del pasado, apuesta de futuro. La puesta en valor del patrimonio cultural maya CRISTINA VIDAL LORENZO [589-596] Arquitectura moderna en Cartagena de Indias, Colombia, reconocimiento y valoración RICARDO ZABALETA PUELLO [597-612] Cementerios y cultura funeraria contemporánea entre Europa y Latinoamérica JOAQUÍN ZAMBRANO GONZÁLEZ [613-622]

Flor Indiana en Sevilla. Un cuadro de Santa Rosa de Lima sobre el cuerpo de sor Sebastiana de Neve María de los Ángeles Fernández Valle

Universidad Pablo de Olavide. Sevilla. España - Universidad de Talca. Chile

1.   Flor indiana en Sevilla La Flor indiana Santa Rosa de Lima tuvo un importante culto y devoción en la ciudad de Sevilla. Sus imágenes fueron vehículos mediadores de múltiples intermediaciones divinas, como fue el caso de Sebastiana de Neve, religiosa del convento de Madre de Dios de Sevilla y sobrina del influyente canónigo Justino de Neve. En este centro dominico un cuadro de la recién beatificada Rosa de Santa María actuó milagrosamente sobre el cuerpo de la monja sevillana, hecho que alcanzó tal magnitud que el relato fue publicado en Sevilla y Barcelona e incluso en otros medios nacionales y europeos. La importancia del mismo y su proyección sobre el Puerto de Indias nos enfrentan a un caso de enorme interés en términos sociológicos y culturales respecto a la presencia y apropiación de los cultos indianos a este lado del Atlántico. Durante el siglo XVII en el Virreinato del Perú se dio uno de los procesos devocionales más importantes de las Indias Occidentales; Isabel Flores de Oliva era proclamada la primera santa americana de la monarquía hispánica. Rosa Limensis a lo largo de su vida tuvo visiones y experiencias místicas, de la misma forma que transfirió milagros por medio de su persona y por la intermediación de retratos divinos, reliquias u otros objetos localizados en altares y capillas. Tras su muerte, acontecida en 1617, el poder taumatúrgico de sus imágenes y reliquias se hizo efectivo en numerosos lugares del virreinato peruano en primera instancia 1, hasta alcanzar

Mújica Pinilla, Ramón. Rosa limensis. Mística, política e iconografía en torno a la patrona de América. México: Fondo de Cultura Económica, 2005. 1

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dimensiones universales, circunstancia a la que no estaría ajena la ciudad de Sevilla. El culto popular a Santa Rosa se extendió rápidamente por todo el orbe católico a través de las estampas, pinturas y esculturas que mostraban el rostro y los símbolos dominicos asociados a su imagen. Este conjunto de obras generaron un ícono simbólico en la sociedad y un nuevo vehículo mediador en la cultura visual de la época. Las relaciones de su vida, publicadas durante los siglos XVII y XVIII, planteaban los poderes adquiridos por las imágenes y cómo estos repertorios incidían de manera sobrenatural hacia todos aquellos que buscaban ayuda y protección en la primera patrona americana. En Sevilla las imágenes de Rosa de Santa María también albergaron poderes taumatúrgicos, como se comprueba a través de las fuentes documentales que relatan las experiencias milagrosas y las celebraciones originadas en el ámbito hispánico. Apenas un año después de su enterramiento 2 ya se tenía conciencia de su vida y de los poderes divinos en la capital hispalense, lugar donde también se imprimió la obra La Rosa del Perú del fraile Juan de Vargas Machuca 3. Con el paso del tiempo la efigie de Santa Rosa de Lima fue adquiriendo mayor presencia

En 1618 se celebró el Capítulo General en Lisboa y las actas se imprimieron en Sevilla por Francisco de Lira, en las cuales refieren a Rosa de Santa María: «En la Provincia de San Iuan Bautista del Perú, murió Sor Rosa de Santa María, de la Tercera Orden, que en todo imitó al vivo à Santa Catalina de Sena», véase: Hansen, Leonard y Parra, Jacinto de. La bienaventurada Rosa pervana de S. Maria de la Tercera Orden de Santo Domingo. Sv admirable vida, y preciosa mverte. Madrid: por Melchor Sánchez, impresor de libros, 1668, pág. 367. 3 Vargas Machuca, Juan de. La Rosa de el Perv, sor Isabel de Santa Maria, de el habito del Glorioso Patriarca Santo Domingo de 2

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e identidad en la sociedad andaluza, gracias a los logros conseguidos por los dominicos y a la información que circulaba a este lado del Atlántico respecto a los actos milagrosos originados en distintos territorios americanos y europeos. Es bien sabido que la orden dominica, desde los años veinte del siglo XVII, tuvo como objetivo conseguir la beatificación y canonización de la joven limeña 4. Para ello hicieron una importante labor propagandística por medio de las publicaciones que relataban las virtudes y los actos heroicos de la vida de la santa. En la fecha temprana de 1643, Antonio de León Pinelo, relator del Consejo de Indias, refirió a la ejemplar y virtuosa vida de Santa Rosa y al valor de las imágenes: «admirable en penitencia, oración, extasis, y en soberanas ilustraciones obrando el cielo por ella grandes prodigios en vida, y en muerte» 5. 2.   Un Cuadro Milagroso Dentro de la ciudad de Sevilla los conventos dominicos adquirieron un papel relevante en la difusión de los dones de Santa Rosa de Lima. Con motivo de las celebraciones desarrolladas por la beatificación y canonización se alzaron los altares y todo tipo de representaciones en la Catedral de Sevilla, el Palacio Arzobispal y en el antiguo convento de San Pablo 6, entre otros templos, en virtud de engran-

Guzman, crédito de su Tercera Orden, lustre y Patrona de la alma Ciudad Lima, su Patria. Sevilla: por Juan Gómez de Blas, 1659. 4 Hampe, Teodoro. Estudio del proceso de canonización de Santa Rosa. Cuzco: Centro de Estudios Regionales Andinos Bartolomé de Las Casas, 1998. 5 Antonio de León Pinelo expuso el valor de las imágenes de Rosa de Santa María en la obra que escribió sobre el arzobispo Toribio de Mogrovejo: «Sor Rosa de Santa Maria, Religiosa profesa de la Tercera Orden de Santo Domingo, Virgen purisima, esplendor de su patria Lima, admirable en penitencia, oración, extasis, y en soberanas ilustraciones obrando el cielo por ella grandes prodigios en vida, y en muerte: murió coronada de virtudes, opulenta con meritos. Hallame à su funeral, donde vital concurso, y aclamacion, qual suele ser el que suele acompañar los cuerpos de los Santos», citado en: Hansen Leonard y Parra, Jacinto de. La bienaventurada Rosa … Op. cit, pág. 371. León Pinelo era miembro de una de las familias más importantes de la época. Su vida trascurrió en Madrid y Sevilla, siendo probable que difundiese información en tierras andaluzas respecto a los poderes y las virtudes de la joven limeña. 6 El investigador Francisco Montes González refiere a las celebraciones desarrolladas en el convento dominico, véase Montes González, Francisco. ��������������������������������������������� «Cultos y devociones americanas en la religiosidad andaluza de los siglos XVII y XVIII». En: Actas del Congreso Internacional Andalucía Barroca, vol. IV. Ciencia, religiosidad y fi-

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decer a la primera santa americana. Precisamente en estos mismos años en el convento dominico de Madre de Dios sucedió una acción milagrosa que incrementaría el posicionamiento de la orden y del espacio sagrado. Fue aquí donde la monja Sebastiana de Neve, sobrina del afamado Justino de Neve, revivió a la muerte gracias al poder taumatúrgico de un cuadro que reflejaba la imagen de Rosa Limensis. Este hecho fue conocido en la ciudad del Betis y más allá de las fronteras peninsulares a través de los religiosos y cronistas que difundieron y publicaron la noticia en distintos medios. Propaganda que no solo daba fama y ayudaba al proceso de Rosa de Santa María, en el momento en el que estaban solicitando su canonización, sino que también tenía un efecto favorable y positivo sobre el propio recinto conventual al posicionarse en un lugar destacado dentro del Puerto de Indias. Desde los orígenes el convento de Madre de Dios disfrutaba de culto y estima por los miembros de la realeza e influyentes religiosos 7. Con el paso del tiempo, el éxito y el posicionamiento del convento en la ciudad de Sevilla era indiscutible, hecho que animaba a las jóvenes a ingresar para consagrar su amor y vida a Cristo. Al respecto, Diego Ortiz de Zúñiga refiere a las religiosas que profesaron sus votos y al suceso ocurrido a sor Sebastiana de Neve: «y ha tenido Religiosas de admirable vida, y exemplo, de que hazen particular memoria las Cronicas de su sagrado Habito. El año de 1669 lo favoreció la gloriosísima Santa Rosa, dando milagrosa salud de una mortal apoplejía, á Sor Sebastiana de Neve y Chaves, Religiosa de él, de que corre relación impresa» 8. Poco tiempo después del acto milagroso de la santa a sor Sebastiana de Neve se publicó el prodigio en Sevilla y Barcelona (Fig. 1) con la información de

losofía (2007). Sevilla: Consejería de Cultura, Junta de Andalucía, 2009, pág. 262. 7 Diego Ortiz de Zúñiga destaca la posición del convento y de sus protectores: «El Convento de Madre de Dios, de la Orden de Santo Domingo y sujeto á ella, dixe su fundación y su traslacion en los años de 1476 y otros siguientes. Fuele muy devota, y mostrólo en mercedes la Católica Reyna Doña Isabel, que le dio la casa en que permanece, y renta de pan, y agua de los Caños de Carmona: amplió su edificio el Arzobispo D. Fray Diego de Deza, Dominico, con que oy compite á los mayores de Sevilla, y su Iglesia tiene ilustres capillas y entierros, gobiernalo su Religion», véase: Ortiz de Zúñiga, Diego. Anales eclesiásticos y seculares de la muy noble y muy leal ciudad de Sevilla. Madrid: Imprenta Real, 1677, pág. 736. 8 Ibídem.

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lo acontecido en Madre de Dios. En la obra impresa se detalla el momento en que la monja daba sus últimos suspiros mientras las religiosas: «Echaron sobre el cuerpo, que parecía ya difunto, vn quadro de la Beata Rosa, y al punto bolbiò en su sentido, pidiendo por señas de comer, por haber quedado sin habla» 9. Asimismo, el fraile Juan Meléndez relata también el mismo episodio: «Vna de ellas truxo vn Quadro de la Santa Rosa, y con Fè viua lo echò sobre el cuerpo moribundo; pidiendo a la Santa la salud de la enferma, ya mortal. Apenas tocò la pintura la cama, quando boluiò, como de un parasismo, y pidió por señas le diesen de comer» 10. Tras nuevas recaídas y sin conocer los testigos si la intermediación divina se había realizado por medio de Santa Rosa u otro santo, la monja sevillana pidió beber del jarro que había pertenecido a Isabel de Flores, el cual se tenía por reliquia puesto que el veinticuatro Alberto Corbert también había experimentado favores de Rosa Limensis en la capital hispalense. En la relación publicada se describe el momento vivido por sor Sebastiana: «Dieronsole, y aplicandosele ella misma à la garganta, se quedó recogida por espacio de media hora y viendola tan sosegada, vna Religiosa, creyendo que estaua muerta, llegó a mirarla y ella, y todas las que assistian vieron tenia el rostro caìdo, y la boca dentro del xarro, y les pareció hablaua; y juzgando aquella nouedad era para espirar, le diò vozes dicha Religiosa, diciendo: Sancta, sancta rosa, ora pro me. Repitiò lo mismo la enferma clara, y distintamente, à que le persuadieron pidiesse a la Santa le alcançasse de Dios salud, si le conuenia, y si no, conformidad para morir, si era essa su voluntad. Entonces alçò la cabeça la enferma, y leuantando el braço, y con la voz muy alta, riendose dixo: Que no me he de morir porque me lo ha dicho Santa Rosa, que ha estado aquí, y me ha puesto la mano en la garganta» 11.

La experiencia milagrosa tuvo tal repercusión e impacto en el convento que se reunieron en la celda más de ciento cincuenta personas, encontrándose en la misma los testigos y los médicos que debían de certificar el suceso. El doctor Diego Felipe Valverde y Orozco, con una larga trayectoria y respetado por la sociedad sevillana, dictaminó:

9 Prodigioso milagro de Dios N. Señor obro por intercession de la Beata Rosa de Santa María, de la tercera Orden de N.P.S Domingo de Guzman; con vna Religiosa del Conuento de Madre de Dios, de la Ciudad de Seuilla à los quatro de Nouiembre 1669. Barcelona: en casa Mathevad, 1670, s.p. 10 Meléndez, Juan. Tesoros verdaderos de las Yndias en la Historia de la gran Provincia de San Jvan Bavtista del Perv. Tomo II. Roma: Imprenta de Nicolás Ángel Tinaffio, 1681, pág. 474. 11 Prodigioso milagro… Op.cit., s.p.

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1.—Prodigioso milagro de Santa Rosa de Lima a sor Sebastiana de Neve, obra publicada en Barcelona en 1670. Biblioteca Nacional de España.

«Que este es milagro portentoso, porque tiene los requisitos de la salud que por milagro se adquieren; que los principales son, un efecto que sobrepuja à la naturaleza; y lo segundo, ser instantaneamente, y subito; y lo tercero, ser perfectamente adquirido, porque naturaleza no puede con su fuerça vencer una enfermedad mortal; pero aqui, que súbitamente adquiriò la salud perfecta, concurren todas las condiciones de milagro» 12.

Como planteamos con anterioridad, el fraile Juan Meléndez también hizo eco de la noticia transcurrida en el convento de Madre de Dios. En Roma publicó la obra Tesoros Verdaderos de las Indias, en la cual dedica un extenso capítulo a los milagros de Santa Rosa obrados en Sevilla y Lima en 1669, con la particularidad de dedicar gran parte del relato a la intermediación originada en el Puerto de Indias. Este religioso informa detalladamente del prodigio, en episodios tan significativos como el momento en que la propia sor Sebastiana dijo: «Yo no he de morir, porque me lo ha dicho Santa Rosa, que ha estado aquí

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conmigo, y me ha puesto la mano en la garganta» 13. Asimismo, plantea el éxito alcanzado: «Diuulgòse luego, por toda la Ciudad de Seuilla, aplaudiendo a la Virgen Santa Rosa, con singulares muestras de alegria, y consuelo» 14. Pasado el tiempo este suceso fue recogido nuevamente por el investigador William Stirlin Maxwel en su obra sobre Murillo, publicada en 1848, donde difundía la noticia señalada de Diego Ortiz y Zúñiga 15. Este milagro hace replantearnos la incidencia que tuvo la santa limeña en la Península —más allá de la devoción que le profesaron los indianos que vivieron en la metrópoli como es el caso del fraile Miguel de Aguirre en el convento de los agustinos recoletos en Madrid— puesto que se demuestra como personas que no eran naturales de América o bien que nunca habían viajado al nuevo continente podían verse favorecidas directamente por el poder taumatúrgico de sus imágenes. No obstante, este prodigio milagroso no fue un caso aislado sino que sabemos de otros ocurridos en esos mismos años en la capital hispalense. En un informe dirigido al arzobispo de Sevilla, en torno a 1668, se exponen las virtudes e intermediaciones divinas de Santa Rosa de Lima sobre los sevillanos, haciendo alusión a la importancia de registrar todos los testimonios para ayudar al proceso de canonización vigente en aquel momento 16. De esta forma se dejaba constancia de la jerarquía y devoción que se tenía hacia la santa por parte de los fieles originarios de Sevilla, si bien no fueron los únicos procesos conocidos en otras urbes españolas 17.

13 Meléndez, Juan. Tesoros verdaderos de las Yndias… Op.cit., pág. 475. 14 Ibídem, pág. 476. 15 Stirlin Maxwel, William. Annals of the Artists of Spain. Vol. II. London: John Ollivier 59, Pall Mal, 1848, pág. 890. 16 Archivo de la Real Academia de la Historia, Madrid. Leg. 09-03736. Copia del papel que se dio a su Exma en la causa de la canonización de la Beata Rosa. Al respecto, véase el estudio: Fernández Valle, María de los Ángeles. «El poder de las imágenes: Santa Rosa de Lima en la capital hispalense». En: Fernández Valle, María de los Ángeles, Ollero Lobato, Francisco, Rey Ashfield, William (eds). Arte y Patrimonio en España y América. Montevideo: Universidad de la República, 2014, págs. 119-139. 17 El fraile Jacinto de Parra describió los milagros desarrollados por intermediación de las imágenes de Santa Rosa de Lima, como los obrados en la ciudad castellana de Toro: «De todo esto he experimentado admirables efectos en esta Ciudad de Toro, donde he repartido algunas Imágenes de la Virgen Rosa, à quien piadosamente

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El investigador Ramón Mujica Pinilla refirió al culto vivido a escala mundial, tomando el relato del dominico fray Juan Meléndez: «No he pasado por parte de España y de Italia donde no haya oído prodigiosas maravillas hechas por intercesión. No hay Ciudad, no hay lugar, no hay Iglesia en que no tenga su capilla y altar; apenas nace una niña a quien no pongan el nombre de Rosa. No se oye otra cosa en todo el Orbe católico sino sus alabanzas, no se encuentra sino su devoción en todo género de personas» 18.

3.   Más allá de la muerte «[Sebastiana de Neve] ¡Qué hermosa sombra le avrá hecho a su muerte en la presencia de Dios a nuestra difunta, treinta y tres años de edad, gastados todos en buenas obras, aviéndose criado en este religioso convento desde los catorze meses después de su nacimiento, poco más o menos: aviéndole observado desde aquesta edad tan tierna algunas señales, pronósticos de lo que avía de ser cuando avía de ser más crecida!» 19.

Con el paso del tiempo la devoción seguía inserta y latente en la ciudad sevillana. Además de las obras artísticas realizadas durante el siglo XVII, con motivo de las fiestas de beatificación y canonización, sabemos de la continuidad de su culto como se comprueba en la oración fúnebre dedicada a sor Sebastiana de Neve, vinculando una vez más su vida con la madre de las rosas. Nueve años después del milagro ocurrido en el convento de Madre de Dios murió sor Sebastiana de Neve, fallecimiento que dio lugar a una importante misa en el centro religioso en el que profesó sus votos. El fraile Sebastián de Betancur y Abreu predicó la oración fúnebre de la monja dominica, impresa el mismo año del fallecimiento 20. En esta obra plan-

se pueden atribuir estas marauillas», Hansen, Leonard y Parra, Jacinto de. La bienaventurada Rosa… Op.cit., pág.379. 18 Meléndez, Juan. Tesoros verdaderos de las Yndias… Op.cit, citado por Ramón Mujica Pinilla en Rosa limensis… Op.cit., pág. 67. 19 Núñez Beltrán, Miguel Ángel. La oratoria sagrada de la época del Barroco. Doctrina, cultura y actitud ante la vida desde los sermones sevillanos del siglo XVII. Sevilla: Universidad de Sevilla y Fundación Focus-Abengoa, 2000, pág. 382. 20 El Padre Juan de Cardenas, miembro de la Compañía de Jesús, aprobó el sermón de la Oración Fúnebre, impresa a petición de algunas de las figuras más influyentes de la época, el Doctor Don Gregorio Bastan y Arostegui, Racionero de la Santa Iglesia Metropolitana de Sevilla, Provisor y Vicario General de este Arzobispado, y Don Ambrosio Ignacio Espínola y Guzmán, Arzobispo de Sevilla; ambos dieron la licencia para que se imprimiese dicho sermón. Betancur y Abreo, Fray Sebastian. Oracion fvnebre en las

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tea el interés del canónigo Neve por honrar la vida de su sobrina sor Sebastiana: «Fue V. md. Servido de mandarme, con la eficacia que suele, quando quiere manifestar el dominio que tiene en los corazones, que escriviesse el Sermon, que prediqué en las Honras de su dichosa sobrina Soror Sebastiana de Neve, porqie lo querian leer algunas personas, que tenían noticia de tan pasmosa vida» 21. Indudablemente la oración fúnebre fue un encargo de Justino de Neve, siendo posible que el religioso también hubiese incidido años atrás, si nos atenemos al poco tiempo que había transcurrido del milagro a su difusión en 1670. Habían pasado nueve años desde la intermediación de Santa Rosa a sor Sebastiana y todavía seguía vivo el relato y la experiencia divina en la sociedad sevillana. El propio Justino de Neve y un grupo importante de personas vinculadas a la alta jerarquía estuvieron presentes en la significativa ceremonia. En la censura del dominico Marcos de Aguilar queda reflejada la magnitud del acontecimiento: «acompañé á todo el auditorio que se halló presente; porque no caben en ponderacion los aplausos, y demostraciones, que (aviendolo oído) hizieron todos; y siendo los oyentes la mayor parte de la Nobleza de esta Ciudad; assi de Eclesiasticos, como de Seculares de sus dos Ilustrissimos Cabildos, á que se llegó gran numero de Religiosos doctos, con cuya aprobación quedaua el Sermon bastantemente calificado» 22.

Este fraile del convento de San Pablo también recordaba la estrecha relación entre sor Sebastiana y la Patrona del Virreinato del Perú: «Lo mismo juzgo de esta Santa Comunidad de Madre de Dios de Sevilla, que por tiempo de treinta y tres años gozó de la compañía de este Angel; mayormente quando estando ya casi á la muerte, nos la volvió Dios por tiempo de nueve años á esta vida (que tantos han pasado desde que su Madre Santa Rosa hizo aquel célebre milagro de mejorarla de repente» 23.

De tal modo, el sermón reflejó una y otra vez las virtudes de la religiosa sevillana y su lazo con la criolla limeña, refiriéndose a ésta como ejemplo a seguir e imitar por los ciudadanos. En este sentido, el reverendo Juan de Cardenas, miembro de la

honras de la Señora Sor Sebastiaba de Neve, religiosa del convento de Madre de Dios de Seuilla. Sevilla: por Juan Cabezas, 1678. 21 Ibídem, pág. A2. 22 Ibíd., s.p. 23 Ibíd., pág. B.

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Compañía de Jesús de Sevilla 24, destacó las virtudes de sor Sebastiana y su importante papel dentro del templo: «juzgo que sera de grande gloria de Dios, y utilidad de los Fieles, que se publiquen las admirables virtudes, y obras marauillosas que obró Dios en esta Venerable sierva suya; y á todos les servirá de espuelas para la imitacion de sus heroicas virtudes: pero singularmente para las Religiosas del Sagrado Convento de Madre de Dios, será este Sermon de gran estimulo, para tomar házia la altura de la perfección, el vuelo tan alto, como fue el que tomó esta alma dichosissima» 25.

Este suceso otorgó al convento una indiscutible aura divina, siendo probable que fomentase e incidiese en el acceso de jóvenes religiosas. Paralelamente, los ciudadanos no estarían ajenos a esta experiencia, como expuso Diego de Ortiz de Zúñiga 26, y de ahí las palabras tan elocuentes de Fray Marcos de Aguilar: «les servirá de espuelas para la imitacion de sus heroicas virtudes: pero singularmente para las Religiosas del Sagrado Convento de Madre de Dios» 27, alentando a las religiosas a imitar la vida gloriosa de Rosa Limensis. 4.   Imágenes en el Puerto de Indias Junto a las obras y noticias publicadas —respecto a la intermediación milagrosa vivida en Madre de Dios— se complementa la historia de la sobrina de Neve y su relación milagrosa con Santa Rosa con una imagen que efigia a ambas protagonistas. En el Hospital del Pozo Santo de Sevilla se localiza una pintura (Fig. 2) 28 en la que aparecen la monja y Santa Rosa reflejando el momento de la intermediación divina, imagen dada a conocer por el investigador

La aprobación estuvo a cargo del reverendo Juan de Cardenas, miembro de la Compañía de Jesús, y la censura de la oración fúnebre se realizó por fray Marcos de Aguilar, religioso del Real Convento de San Pablo de Sevilla, quien también estuvo presente en la misa desarrollada en el Convento de Madre de Dios de Sevilla. 25 Betancur y Abreo, Fray Sebastian. Oracion fvnebre… Op. cit., s.p. 26 Ortiz de Zúñiga, Diego. Anales eclesiásticos… Op. cit., pág. 736. 27 Betancur y Abreo, Fray Sebastian. Oracion fvnebre… Op. cit., s.p. 28 Agradezco el permiso facilitado por Carlos Coloma Ruiz, Vicario Episcopal para la Vida Consagrada, y a la Hermana Sacramento del Hospital del Pozo Santo de Sevilla, por permitirme fotografiar la imagen. 24

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«Ya habia conseguido la Beata Rosa de Santa María las supremas felicidades. Roma la aclamó Santa […] Respondio España con festivos ecos, por ser origen de la nueva Esposa, y ofrecio lauros a su diadema. Prorrumpio la Andalucia en demostraciones, y casi nunca vistos excesos de gozo; florecieron sus carmenes, sacó el Betis vistosas joyas de oro de los senos de sus arenas» 31.

2.—Anónimo. Santa Rosa de Lima y sor Sebastiana de Neve. Óleo sobre lienzo, ha. 1669. Hospital de Pozo Santo. Sevilla.

Estas festividades repercutieron positivamente en la demanda de numerosas imágenes a los artistas más consagrados de la ciudad. Sin duda, Murillo debió de tener un papel muy relevante en aquellos años, tanto en las fiestas sevillanas que consagraron los procesos conseguidos en Roma en los años de 1668 y 1671, como también en la experiencia vivida en el convento de Madre de Dios e incluso en otros milagros obrados en el Puerto de Indias 32. El insigne Murillo creó varias imágenes de Santa Rosa de Lima, en la actualidad dos se localizan en el Museo Lázaro Galdiano de Madrid (Fig.3) y una tercera imagen en una colección particular (Fig. 4), esta última dada a conocer por el investigador Enrique Valdivieso González 33. Es posible que alguna de las imágenes estuviese vinculada al convento dominico y al suceso milagroso de la monja Sebastiana de Neve, si tenemos en cuenta la amistad del artista con Justino de Neve 34. El investigador Diego Angulo Íñiguez vinculó uno de los lienzos de Murillo 35 con un posible regalo del artista a su propia hija sor Francisca María de Santa Rosa, quien profesaba sus votos en el convento de Madre de Dios 36. En esos

Francisco Montes González 29. En la misma se encuentra una inscripción que presenta el suceso: «Año 1669. A 3 de noviembre dio salud milagrosamente la Bienaventurada S. Rosa a Sor Sebastiana de Nebe y Chaves Religiosa del Convento de M. de Dios de Sebilla aviendo estado 19 dias con una apoplegia y con la mortaja i cantando ia el credo i dejándola los medicos por ia sin remedio instantáneamente restituió la vida Santa Rosa apareciéndosele y poniéndole la mano en la garganta i mandándole comer siempre pescado» 30.

Nos encontramos en los años de beatificación y canonización de Rosa de Santa María, periodo en el que la ciudad se preparó para festejar estos nombramientos tan deseados. No obstante, el fraile Jacinto de Parra expuso la importancia que tuvo Andalucía:

29 Montes González, Francisco. «Rosa en su Celestial Paraíso. Una fiesta limeña en la Granada Barroca». Cuadernos de Arte de la Universidad de Granada (Granada), 41 (2010), pág. 152. 30 Ibídem, pág. 151.

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31 Parra, Jacinto de. Rosa lavreada entre los Santos. Epitalamios sacros de la Corte, aclamaciones de España, aplavsos de Roma, congratvlaciones festivas del clero, y religiones, al feliz desposorio que celebro en la gloria con Christo la Beata Virgen Rosa de Santa Maria, de la Tercera Orden de Predicadores, Patrona del Perú. Madrid: por Domingo García Morrás, impresor del Estado Eclesiastico de la Corona de Castilla y León, 1670, pág. 479. 32 Fernández Valle, María de los Ángeles. «El poder de las imágenes… Op. cit., págs. 135-139. 33 Valdivieso González, Enrique. Murillo. Catálogo razonado de pinturas. Madrid: El Viso, 2010 pág. 199, 476 (cat., nº 304). 34 En cuanto a la relación entre el artista y el canónigo de la catedral de Sevilla se presentó una exposición en el Museo Nacional del Prado, en el Hospital de los Venerables Sacerdotes de Sevilla y en la Dulwich Picture Gallery de Londres. Véase el catálogo: Murillo & Justino de Neve. El arte de la amistad. Madrid: Museo Nacional del Prado: Fundación Focus-Abengoa: Dulwich Picture Gallery, 2012. 35 En la actualidad se localiza en el Museo Lázaro Galdiano (Inv. 5310). 36 Angulo Íñiguez, Diego. Murillo. Su vida, su arte, su obra. Tomo I. Madrid: Espasa Calpe, 1981, pág.434; Murillo. Catálogo crítico. Tomo II. Madrid: Espasa Calpe, 1981, pág. 291 (nº370).

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4.—Bartolomé Esteban Murillo. Santa Rosa de Lima con el Niño. Óleo sobre lienzo, ha. 1668-1671. Colección privada. 3.—Bartolomé Esteban Murillo. Santa Rosa de Lima con el Niño. Óleo sobre lienzo, ha. 1668-1671. Museo Lázaro Galdiano. Madrid.

mismos años e incluso con anterioridad al acceso de sor Francisca al convento, hacia 1671, ya había ocurrido el milagro, por lo que es posible que solicitasen al afamado pintor una imagen de la santa americana. Lo que no hay duda es que tanto la hija del artista como la sobrina del canónigo de la catedral de Sevilla veneraron y oraron ante múltiples imágenes de Santa Rosa de Lima en el espacio conventual. Además de las obras creadas en aquellos mismos años por Murillo se sumaron a la causa otros artistas, como definieron los investigadores Jorge Bernales Ballesteros 37 y Rubén Vargas Ugarte 38. Juan de Val-

Pintura de Santa Rosa con el Niño conservada en el Museo Lázaro Galdiano (Inv. 5310). 37 Bernales Ballesteros, Jorge. «Iconografía de Santa Rosa de Lima». Homenaje al profesor Hernández Díaz. Tomo I. Sevilla: Universidad de Sevilla, 1982, págs. 283-324; Santa Rosa de Lima en el arte europeo. Discurso del Dr. Jorge Bernales Ballesteros leído en el acto de recepción el 27 de mayo de 1986, y discurso de contestación del Dr. José Hernández Díaz. Sevilla: Real Maestranza de Caballería, 1988. 38 Vargas Ugarte, Rubén. Santa Rosa en el arte. Lima: talleres gráficos de San Martín, 1967.

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dés Leal, Cornelio Schult y Pedro Roldán hicieron nuevos retratos divinos de Santa Rosa de Lima en torno a los años setenta del siglo XVII. Valdés Leal siguió el modelo realizado por Murillo con algunas variantes —pintura localizada en la actualidad en una colección privada en Barcelona— mientras que Schult y Pedro Roldán crearon sus propias imágenes. Estos artistas dignificaron y ayudaron a la difusión, culto y presencia de Santa Rosa de Lima en la Sevilla de aquella época. En la actualidad se conservan en el convento de Madre de Dios varias imágenes de Santa Rosa de Lima; dos copias de la emblemática pintura de Murillo conservada en el Museo Lázaro Galdiano 39, posiblemente del propio taller del artista; otro lienzo

39 Pintura en la que aparece Santa Rosa arrodillada con el Niño, Museo Lázaro Galdiano (Inv. 5310). Esta obra sirvió de modelo en la propia época si nos atenemos al número de copias que se conservan, llegando incluso a realizarse fuera de las fronteras peninsulares como se comprueba en la imagen localizada en el Denver Art Museum, realizada por el pintor mexicano Juan Rodríguez Juárez. Al respecto, el investigador Fernando Quiles García dio a conocer documentación que informaba del envío a Nueva España de una imagen de Santa Rosa de Lima realizada por Murillo, véase Quiles García, Fernando. «Santa Rosa de Lima

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con la imagen de Santa Rosa junto a Santo Domingo de Guzmán y a la Virgen del Rosario; una cuarta pintura donde se observa a Santa Rosa coronada por rosas y portando también flores en sus manos; otro lienzo donde aparece con un ramo de rosas con el Niño (Fig.5) 40 y una última pintura en la que se encuentra nuevamente coronada por rosas. A estas pinturas se suma la escultura realizada por Francisco de Barahona, ubicada en la calle superior izquierda del retablo mayor de la iglesia dominica. Las obras artísticas fueron los vehículos mediadores en la asimilación y adopción de la santa americana e incluso en su propia apropiación. Además de las obras citadas en el convento de Madre de Dios se localizan otras imágenes en Sevilla, destacando la serie de ocho pinturas del Hospital de la Caridad 41, junto a otros lienzos localizados en los conventos de los Capuchinos, Santa Paula, Santa María del Socorro, Santa María de Jesús, además de la Catedral de Sevilla y el Palacio Arzobispal 42. Asimismo, en la iglesia de la Magdalena se localiza la escultura de Roldán y en la iglesia de San Nicolás de Bari encontramos una talla de Santa Rosa de Lima, realizada por Francisco Antonio Gijón, junto a Santa Catalina de Siena y San José, por debajo de la imagen labrada de la Giralda. Parecería que las santas llegarían a formar una unidad en un escenario en el que los fieles se arrodillarían para solicitar su ayuda y protección a ambos lados del Atlántico. Las obras publicadas sobre la vida de Santa Rosa de Lima nos ayudan a entender y comprender la información que circulaba en aquellos años, además de demostrarnos el valor de las imágenes y el poder taumatúrgico y sensitivo que tuvieron sobre los fieles. Es significativo el capítulo del fraile Andrés

en el Museo Lázaro Galdiano». Goya (Madrid), 304 (2005), págs. 41-43. 40 Agradezco la amabilidad y atención de sor Adela, Priora del Convento de Madre de Dios de Sevilla. 41 Las pinturas se han atribuido a Francisco Meneses Osorio, véase: Serra Giráldez, Sofía. Francisco Meneses Osorio, discípulo de Murillo. Sevilla: Diputación Provincial de Sevilla, 1990, págs. 79-81. Por el contrario, los investigadores Juan Miguel Serrera y Enrique Valdivieso consideran que no son obras de dicho autor, véase: El Hospital de la Caridad de Sevilla. Sevilla: 1980, pág. 44. 42 Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico (IAPH). Inventarios y catálogos de conocimiento de los bienes. Inventario de Bienes Muebles de la Iglesia Católica. Investigador principal: Alfredo J. Morales Martínez. Agradezco la información facilitada por Salud Soro Cañas.

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5.—Anónimo. Santa Rosa de Lima con el Niño. Óleo sobre lienzo, ha. 1668. Convento Madre de Dios. Sevilla.

Ferrer de Valdecebro titulado: «Milagros que han hecho los retratos y estampas de la Virgen Rosa en todo linaje de enfermedades» 43, además de las referencias de otros autores como Leonard Hansen, Jacinto de Parra 44 o Antonio González de Acuña 45, entre otros, donde informan del poder de las imágenes. Como planteó el investigador Ramón Mujica Pinilla: «casi todos los milagros de Rosa se relacionaban de una manera u otra con su culto a las imágenes» 46.

43 Ferrer de Valdecebro, Andrés. Historia de la Vida de la Beata María Rosa de Santa María. Madrid: por María Rey, viuda de Diego Díaz de la Carrera, [1668-1669]. 44 Hansen, Leonard y Parra, Jacinto de. La bienaven-turada Rosa… Op. cit. 45 González de Acuña, Antonio. Rosa mística, vida y mverte de Santa Rosa de S. María Virgen de la Tercera Orden de S. Domingo; natural de las Ciudad de los Reyes Metropoli del Reyno del Peru en las Indias Occidentales. Roma: por Nicolás Ángel Tinas, 1671. 46 Mujica Pinilla, Ramón. Rosa limensis… Op. cit, pág. 229.

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