Estudio sobre la cultura política de la juventud universitaria en El Salvador

August 8, 2017 | Autor: Rafael Paz Narvaez | Categoría: Youth Studies, Political Science
Share Embed


Descripción

Aproximación al pensamiento político de las personas jóvenes contemporáneas y su participación en procesos electorales Rafael Paz Narváez En este artículo se realiza un estudio del pensamiento político de las personas jóvenes contemporáneas en El Salvador, a partir de reflexiones y datos provistos por investigaciones publicadas sobre la situación de la juventud en el país, por la aplicación de dos instrumentos de investigación de carácter exploratorio y por elementos expresados en las entrevistas a investigadores. En lo que se refiere a la presencia de población joven respecto al conjunto de toda la población del país, se puede tener en cuenta que “la EHPM 2010, reporta que el 58.5% de la población es menor de 30 años y la población de 60 años y más, que es considerada como los adultos mayores, representa el 10.4%. Esto revela que la población salvadoreña es bastante joven” (DIGESTYC, 2011: 9) Para 2010, según datos de la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM 2010) la población total del país fue de 6,181,405 habitantes. Las mujeres constituyen el 52.7% de la población total, los hombres el 47.3%. El índice de masculinidad se calcula en 0.90, lo que indica que habitan el país 90 hombres por cada 100 mujeres. Este índice nacional no es homogéneo, dado que en la zona urbana es de 0.86, en la rural, 0.97 y en el Área Metropolitana de San Salvador se sitúa en 0.85. (DIGESTYC, 2011) Al ubicar al sector de la población universitaria respecto al conjunto del país se encontró que “la matrícula estudiantil que las instituciones del nivel superior reportaron para el año 2011 fue de 160,374 lo cual representa un incremento del 6.91 % con relación al 2010.” (MINED, 2011: 13) Del conjunto de personas inscritas en la educación superior, para 2011, “las universidades inscribieron a 147,311 estudiantes representando el 91.86 % del total de la población en el nivel superior, los institutos especializados tuvieron una matrícula de 8,776 estudiantes significando el 5.47% y los institutos tecnológicos recibieron a 4,287 estudiantes que representa el 2.67%.” (MINED, 2011: 13) En el año 2011, del conjunto de 147,311 personas estudiantes universitarias inscritas, una cantidad de 67,325 (45.70 %) se identificaron como hombres y 79,986 (54.30 %) mujeres. La universidad estatal, Universidad de El Salvador, proporcionaba el 31.26% (una cifra de 46,054 estudiantes), en tanto que 23 universidades privadas inscribieron al 68.74 % del total (101,257 estudiantes). Entre los años 2010 y 2011 se observó un incremento para el año 2011 de 9,544 estudiantes (6.93 %) en relación al año 2010. (MINED, 2011: 13) Algunas de las instituciones de enseñanza superior tienen, además de sus sedes centrales, presencia regional. Así, la Universidad de El Salvador inscribió en el 2011 una población total de 46,054 estudiantes, incluyendo tres centros regionales con una población de 15,708 estudiantes (34.11% de todas las personas inscritas como estudiantes en la UES). La Universidad Capitán General Gerardo Barrios, con una sede central en San Miguel, cuenta con una población estudiantil total de 5,167 y un centro regional con una población de 1,702 1

estudiantes (32.94%) en Usulután; La Universidad Católica de El Salvador registró una población total de 4,859 estudiantes y un centro regional con una población de 1,091 estudiantes (22.45%); La Universidad Dr. Andrés Bello, con una población total de 7,594 estudiantes, cuenta con tres centros regionales con 4,088 estudiantes (53.83% de su total); La Universidad Francisco Gavidia con una población total de 12,041 estudiantes y un centro regional con una población de 485 estudiantes (4.03%); La Universidad Modular Abierta con una población total de 4,605 estudiantes, y tres centros regionales con una población de 2,949 estudiantes (64.04%); La Universidad Panamericana con una población total de 2,208 estudiantes y dos centros regionales con una población de 1,648 estudiantes (74.64%).” (MINED, 2011: 13) Para contar con una base actualizada de análisis se aplicó durante los primeros meses de 2013, en 4 ciudades del país, una encuesta a 1011 estudiantes de los primeros años en las universidades. Además se aplicaron 56 entrevistas abiertas a jóvenes de carreras de ciencias sociales en la sede central de la Universidad de El Salvador. En conjunto, los datos proporcionados por ambos instrumentos posibilitan una aproximación exploratoria al sentir y pensar de mujeres y hombres jóvenes sobre procesos políticos. La encuesta cuantitativa ha llegado a 1011 personas jóvenes inscritas en universidades, en cuatro ciudades del país. Las entrevistas cualitativas exploran la diversidad del pensamiento en 56 personas jóvenes universitarias. Los datos obtenidos mediante estos instrumentos exploratorios se comparan y refieren con los resultados encontrados por las investigaciones precedentes, las cuales ha sido presentadas en 2002 y 2010 por la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), Programa El Salvador, en 2005 por la Secretaría Nacional de la Juventud y en 2009 por el Instituto Universitario de Opinión Pública (IUDOP). Tabla 1 Personas jóvenes entrevistadas (Universidad de El Salvador), por edad y sexo Años de edad

Femenino

Masculino

Total

18

5

1

6

19

11

1

12

20

7

5

12

21

4

2

6

22

2

7

9

23

2

2

4

24

2

1

3

27

0

1

1

28

1

1

2

33

0

1

1

Totales

34

22

56

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por entrevistas cualitativas

2

Tabla 2 Personas jóvenes entrevistadas (Universidad de El Salvador), por carrera y sexo Carrera

Femenino

Masculino

Total

Trabajo social

18

4

22

Sociología

16

18

34

Totales

34

22

56

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por entrevistas cualitativas Como resultado de la aplicación de una encuesta exploratoria en universidades de las ciudades de San Salvador, Santa Ana, San Miguel y San Vicente se cubrió un conjunto de 1011 personas jóvenes, desde los 16 años cumplidos hasta los 35 años, resultando una edad promedio de 19.88 años. Únicamente 42 personas tienen menos de 18 años. El 61.8% de las encuestadas es mujer y el 38.2% hombre. El 95.4% de la población encuestada tiene 25 años o menos, en tanto que las edades más frecuentes, para el caso, los 18 años, proporcionan el 21.6% del total. Las personas con 19 años constituyen el 18.8%. Tabla 3 Personas jóvenes universitarias encuestadas, por ciudad y sexo Ciudad

Sexo

Total

Femenino

Masculino

San Salvador

287

168

455 (45%)

San Vicente

93

46

139 (13.7%)

San Miguel

180

122

302 (29.9%)

Santa Ana

65

50

115 (11.4%)

625

386

1011

(61.8%)

(38.2%)

(100%)

Total

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta Las personas jóvenes encuestadas estudian en centros educativos con presencia en San Salvador, Santa Ana, San Miguel y San Vicente. En el caso de San Salvador, se incluyeron jóvenes de la Universidad de El Salvador, de las carreras de sociología, trabajo social, profesorados en ciencias naturales y de medicina. Además de UES San Salvador, en esta ciudad también se aplicaron encuestas en Universidad Tecnológica, Universidad Don Bosco, Universidad Evangélica de El Salvador y en la Universidad Cristiana de las Asambleas de Dios. En Santa Ana y San Vicente se cubrieron estudiantes de la UES, de las carreras de trabajo social, profesorado en educación inicial y licenciatura en idioma inglés. En San Miguel, las encuestas se aplicaron mayoritariamente con estudiantes de medicina, pero se incluyeron en menor medida otras carreras. En San Miguel, la encuesta también fue respondida por personas jóvenes de la Universidad de Oriente, Universidad Gerardo Barrios, Universidad Modular Abierta y Universidad Andrés Bello.

3

Tabla 4 Personas jóvenes universitarias encuestadas, por edad y sexo Edades

Sexo

Total

Femenino

Masculino

16

18

6

24

17

82

36

118

18

132

86

218

19

121

69

190

20

100

63

163

21

56

43

99

22

42

31

73

23

25

21

46

24

10

8

18

25

7

8

15

26

6

5

11

27

6

3

9

28

5

2

7

29

1

0

1

30

2

3

5

31

3

0

3

32

4

0

4

33

1

1

2

34

1

1

2

35

3

0

3

625

386

1011

Total

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta

4

Tabla 5 Universidades incluidas, con frecuencia de estudiantes Estudiantes

Porcentaje

Porcentaje acumulado

UES Universidad de El Salvador

679

67,2

67,2

UGB Universidad Gerardo Barrios

25

2,5

69,6

UNIVO Universidad de Oriente

23

2,3

71,9

UMA Universidad Modular Abierta

12

1,2

73,1

UDB Universidad Don Bosco

49

4,8

77,9

UTEC Universidad Tecnológica

88

8,7

86,6

UEES Universidad Evangélica de El Salvador

14

1,4

88,0

UCAD Universidad Cristiana Asambleas de Dios

97

9,6

97,6

UAB Universidad Andrés Bello

24

2,4

100,0

Total

1011

100,0

Universidades

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta Algunas ideas políticas de las personas jóvenes contemporáneas en El Salvador Los estudios realizados por la FLACSO, la Secretaria de la Juventud y el IUDOP, abordan la situación de la juventud en El Salvador, incluyendo el aspecto de la cultura política de las personas jóvenes. El estudio del IUDOP (Santacruz y Carranza, 2009) se orientó a identificar y caracterizar al conjunto general de la población juvenil salvadoreña, incluyendo a quiénes ya han abandonado los estudios: En relación al estudio, el 58% de los entrevistados no estaba estudiando al momento de la encuesta. La edad promedio de abandono del sistema educativo fueron los 16 años. El 66% de los varones tuvo su primera relación sexual a los 16 años o menos, lo que ocurrió en el 45.6 5 de las mujeres. (Santacruz y Carranza, 2009: 3)

La población encuestada por el IUDOP incluyó a personas de todos los niveles educativos, entre quiénes se identificó a una pequeña minoría de universitarias. En cuanto al nivel educativo, el 1.4% manifestó que no contaba con ningún tipo de educación formal; el 21.7% cursó primaria; el 36.8%, estudios de plan básico; tres de cada diez tenían estudios de bachillerato, y el 9.8% de la muestra había tenido acceso a estudios superiores (Santacruz y Carranza, 2009: 14)

Los resultados obtenidos por Santacruz y Carranza revelan que la mayoría de personas jóvenes (57.1%) se informan de noticias a través de la televisión (2009: 18), en tanto que casi la mitad (48,1% no tenían preferencias partidarias. La investigación de Guillermo Padilla también encuentra que “los encuestados se informan con mayor frecuencia (diariamente o por lo menos una vez a la semana) a través de la televisión; la prensa y en menor medida por la radio.” (Padilla, 2002: 150) Guillermo Padilla sostiene además que “La apreciación que los encuestados tienen sobre la 5

objetividad de los medios de comunicación, en general, es positiva. La evidencia empírica muestra que, como buena hija de la era mediática, la población de estudio tiene una marcada tendencia a creer que lo transmitido por aquellos se ajusta o apega a los hechos de la realidad.” (Padilla, 2002: 149) En el estudio de IUDOP, el 24,5% de personas jóvenes preferían a ARENA (Alianza Republicana Nacionalista) y el 22.4% al FMLN (Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional) indicando que “las jóvenes son quienes, principalmente, no expresan simpatía por un partido político, en una proporción significativamente mayor que la de los hombres. La simpatía hacia el partido oficial no difiere estadísticamente entre hombres y mujeres. Sin embargo, la simpatía femenina suele ser menor en el caso del FMLN, en contraste con la de los hombres” (Santacruz Giralt, 2009: 18) El estudio de IUDOP encuentra que “En relación con el interés ciudadano por la política, los resultados indican que los jóvenes tienen, en general, bajo interés por este rubro: la cuarta parte (25.5%) no tiene interés alguno por la misma, el 44.1% refiere poco interés, el 16.7% manifiesta algún nivel de interés, y solo el 13.8% afirma tener mucho interés por la política” (Santacruz, 2009: 19) El estudio también indagó respecto a “la orientación ideológica de los y las jóvenes. Esto se hizo a partir de una escala —donde 1 representa la extrema izquierda, y el 10 la extrema derecha—, en la que se auto ubicaron en la posición que les parecía más cercana a su visión sobre su propia tendencia política”. Indicando que el 12% de los jóvenes no definieron su posición, sin embargo, “el 12% se ubica en la extrema izquierda (en el 1, en dicha escala del 1 al 10); la quinta parte (19.9%), en el centro; y el 16.1%, en la extrema derecha (en el10, en la misma escala).” (Santacruz, 2009: 19-20) Al respecto, en mayor detalle el estudio encontró que: La tendencia de los datos apunta a la existencia de un mayor aglutinamiento de jóvenes a la derecha del espectro ideológico. Si se reclasifican los datos anteriores, y se toman en cuenta solo aquellos que se posicionaron ideológicamente, se tiene que un poco más de la quinta parte (22.8%) se ubica en los puntos más cercanos a la extrema izquierda (entre el 1 y el 3). Por el contrario, el 31% se ubicó en las posiciones más cercanas a la extrema derecha (entre el 8 y el 10). El resto de jóvenes (46.2%) se ubicó en posiciones de centro (entre el 4 y el 7 dela escala). (Santacruz y Carranza, 2009: 20)

La investigación de IUDOP también define que “a mayor nivel educativo, la tendencia es a alejarse de la extrema derecha y adoptar posiciones más centrales en el espectro ideológico”, que “quienes no tienen un partido de preferencia definido adoptan también posiciones que se alejan de las extremas” y que “quienes viven en las zonas urbanas, sobre todo en el AMSS, suelen a tener una posición más de centro que quienes viven en otras regiones del país, sobre todo en las zonas rurales” (Santacruz y Carranza, 2009: 20) En lo que se refiere al interés en la política, el estudio del IUDOP encuentra que: En términos generales, y como punto de partida, los resultados muestran que muchos jóvenes no están interesados en ella: uno de cada cuatro (25.5%) no tiene ningún interés

6

en la política; el 44.1% tiene poco interés; el 16.7%, algún nivel de interés, y solo el 13.8% refirió mucho interés. En suma, prácticamente siete de cada diez jóvenes, a nivel nacional (69.6%), tienen poco o nulo interés hacia la política. (Santacruz y Carranza, 2009: 96)

Sin embargo el interés en la política es mayor entre quiénes tienen mayor nivel educativo y habitan áreas urbanas (Santacruz y Carranza, 2009: 97) FLACSO, en un estudio de 2011 también estudió ““la definición política que asumían los jóvenes salvadoreños. Ante esta pregunta: políticamente “¿cómo te definirías?”, las respuestas obtenidas muestran que casi la mitad de la juventud salvadoreña “no asumía ninguna posición política””. (Ramos, 2011: 197) Pero, a diferencia del estudio del IUDOP, realizado dos años antes, encuentra que: Si se agrupan las respuestas de las opciones radical y moderada de derecha y de izquierda, los datos muestran que un porcentaje mayor de jóvenes se definían con “una posición política de izquierda” (23.6%), luego estarían los jóvenes que se identificaban con “una postura política de derecha” (16,6%) y finalmente los que optaron por colocarse en una “posición de centro” (13.1%) (Ramos, 2011: 197-198)

A efectos de explorar el imaginario político de las personas jóvenes salvadoreñas, en este caso, inscritas en los primeros años de universidad, en la presente investigación se retomó una pregunta propuesta en el estudio de FLACSO del año 2002 (Padilla). Esta pregunta se refiere a los imaginarios políticos que pueden considerarse asociados a las afinidades de las personas jóvenes, en tanto manifiestan identificarse con una tesis o idea básica. En aras de indagar cuáles son los imaginarios con los que se identifican los jóvenes urbanos salvadoreños, se les formuló la siguiente pregunta: “¿con quiénes te sientes más identificado?”. Se limitó la respuesta a una opción. Las alternativas que se le presentaron, exceptuando la primera y la última, intentan presentar sintéticamente los rasgos básicos de cuatro imaginarios. Las opciones planteadas fueron: con ninguno, con quienes defienden la tradición y las instituciones (imaginario conservador), con quienes buscan el cambio a través de la promoción de los más pobres y necesitados (imaginario socialista), con quienes impulsan el desarrollo económico, la actividad empresarial y la competitividad (imaginario liberal o neoliberal), con quienes buscan el cambio a través de la transformación de las personas y no de las instituciones (imaginario neoconservador), y no sabe/no responde (Padilla, 2002: 163-164)

Esta pregunta permite agrupar a las personas jóvenes en razón a su identificación con una propuesta política muy general, y en este sentido, muy abstracta. Para contar con mayores elementos respecto al imaginario político juvenil en El Salvador, el instrumento aplicado en esta investigación incluyó 10 afirmaciones de contenido político frente a las cuales se podían pronunciar y escoger una de cuatro opciones: declarar su desconocimiento, es decir, que no sabe al respecto; considerarla verdadera; considerarla falsa; y como opción diferente, que considera la tesis en parte cierto y en parte falsa, dando la posibilidad de tomar una posición relativista.

7

Tabla 6 Imaginario político con el cual se identifican personas jóvenes Imaginarios

Frecuencia

Porcentaje

Conservadores (defienden las tradiciones e

76

7,5

286

28,3

231

22,8

285

28,2

Con ninguno

93

9,2

No sé

40

4,0

1011

100,0

instituciones establecidas)

Socialistas (proponen cambios a favor de las mayorías en desventaja socio-económica)

Liberales (impulsan la competitividad, actividad empresarial y desarrollo económico)

Neoconservadores (quieren un cambio a través de las personas y no de las instituciones)

Total

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta Para el conjunto de 1011 personas jóvenes entrevistadas, los imaginarios socialista y conservador alcanzan un porcentaje similar (el 28%). El imaginario liberal reúne al 22.8%, el conservador al 7.5% y las personas jóvenes que no optaron por ninguno de los tipos anteriores el 9.2%. Únicamente el 4% no sabe si se identifica con alguna de las afirmaciones que se asocian a los imaginarios políticos. En el año 2002, frente a esta misma pregunta, conuna muestra de 613 jóvenes urbanos (309 mujeres y 304 hombres) con edades entre 14 y 24 años cumplidos (Padilla, 2002: 35) se agrupó de manera que “en términos globales, los encuestados se sienten más identificados con el imaginario "neoconservador" (3 de cada 10 personas), seguido de “el socialista” y con "el liberal". El ideario "conservador" registra la menor proporción de simpatizantes. El porcentaje de individuos que respondió que no se identificaba con ninguno o que dijo no saber es bastante reducido.” (Padilla, 2002: 165) Al examinar la identificación con los imaginarios políticos según se distribuyen las frecuencias por el sexo de las personas jóvenes encuestadas, se encuentra que, aún cuando las jóvenes mujeres contribuyen con el 61.8% del total de 1011 encuestadas, en tanto que los hombres jóvenes el 38.2%, la proporción en la que participan en los imaginarios neoconservador y socialista es diferente. Entre quiénes se identificaron con el imaginario neoconservador, casi el 71% es mujer, en tanto que, entre aquellas personas que se identifican con el imaginario socialista, las mujeres llegan casi al 53%. En este sentido, las mujeres participan más del imaginario neoconservador, en tanto que, al contrario, en el imaginario socialista, los hombres tienen más presencia. También en el imaginario liberal tienden a ganar una mayor presencia los hombres que las mujeres, pero no de manera tan marcada como en el caso del imaginario socialista. Tabla 7 Imaginario político con el cual se identifican personas jóvenes, por sexo Identificado con imaginario político

Sexo

8

Total

Conservadores Socialistas Liberales Neoconservadores Con ninguno No sé Total

Femenino

Masculino

48

28

76

63,2%

36,8%

100,0%

151

135

286

52,8%

47,2%

100,0%

134

97

231

58,0%

42,0%

100,0%

202

83

285

70,9%

29,1%

100,0%

61

32

93

65,6%

34,4%

100,0%

29

11

40

72,5%

27,5%

100,0%

625

386

1011

61,8%

38,2%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta Para explorar con mayor amplitud el imaginario político de las personas encuestadas también se solicitó que tomaran una opción frente a una serie de 10 cuestiones que permiten analizar con mayor detalle la forma de sentir, conocer y pensar que tienen. Entre las 10 cuestiones consideradas, una de ellas explora la actitud respecto a involucrarse en procesos de tipo político. La frase respecto a la cual consideraron las opciones a elegir en este caso fue “Es preferible mantenerse apartado de la política”. Consideramos relevante comenzar el análisis del imaginario político de las personas jóvenes a partir de esta cuestión. Casi el 46% de todas las personas jóvenes consultadas niegan que sea mejor o preferible mantenerse apartado de la política, por lo tanto, se puede estimar que, en contrapartida, tienen una mayor apertura a la participación en procesos políticos. No obstante, aunque es la opción que agrupó la mayor frecuencia, debe considerarse que no llega a una mayoría simple. Un importante 34% opta por una posición relativista, de manera que se puede considerar que su participación eventual en procesos políticos estaría asociada a precauciones y desconfianzas. Poco más del 15% considera que lo mejor es mantenerse apartado de la política, en tanto que una minoría del 5% no sabe definir lo que es mejor respecto a apartarse de los procesos de la política.

9

Tabla 8 Mantenerse apartado de procesos políticos, según imaginarios Imaginarios políticos Conservadores Socialistas Liberales Neoconservadores Con ninguno No sé Total

no sé

verdadero

parte cierto parte falso

falso

Total

4

21

22

29

76

5,3%

27,6%

28,9%

38,2%

100,0%

12

26

81

167

286

4,2%

9,1%

28,3%

58,4%

100,0%

11

36

87

97

231

4,8%

15,6%

37,7%

42,0%

100,0%

16

40

98

131

285

5,6%

14,0%

34,4%

46,0%

100,0%

5

22

34

32

93

5,4%

23,7%

36,6%

34,4%

100,0%

4

9

20

7

40

10,0%

22,5%

50,0%

17,5%

100,0%

52

154

342

463

1011

5,1%

15,2%

33,8%

45,8%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta Con respecto a la frecuencia general del 46% que se niegan a apartarse de la política, las personas jóvenes que se identifican con el imaginario socialista se colocan por encima, con un porcentaje de 58.4% en su propio grupo, aún cuando, el otro 41.6% adopta las otras opciones. En cambio, entre quiénes se identifican con el imaginario conservador, hasta un 27.6% asume que es preferible mantenerse alejado de la política. La siguiente pregunta a considerar planteó a las personas jóvenes encuestadas si el resentimiento social de personas inconformes podría considerarse una de las causas de la guerra. Esta afirmación (una causa de la guerra civil en El Salvador fue el resentimiento social de personas inconformes) y las reacciones que estimula, se abren a múltiples interpretaciones, especialmente considerando que, para algunas personas, sentir resentimiento puede ser legítimo. Aun cuando en el desencadenamiento de la guerra que afectó al país entre 1970 y 1992 efectivamente incidieron factores subjetivos, también es relevante reconocer la primacía de los factores objetivos en la génesis del conflicto. Los Acuerdos de Paz de 1992 definen como causas de la guerra el cierre o exclusión de los espacios políticos y la circunstancia de que algunos estratos de la población no tenían acceso a los beneficios del crecimiento económico. De ahí, de esas causas identificadas y reconocidas en los acuerdos de paz, pueden derivarse resentimientos e inconformidades, pero, ¿Qué significado y consecuencias tiene considerarlos como una de las causas de la guerra? De hecho una mayoría simple del 45% de las parsonas jóvenes encuestadas si la 10

considera como causa de la guerra. Tabla 9 Resentimiento e inconformidad como causa de la guerra, según imaginarios Imaginarios políticos Conservadores Socialistas Liberales Neoconservadores Con ninguno No sé Total

no sé

verdadero

parte cierto parte falso

falso

Total

10

26

31

9

76

13,2%

34,2%

40,8%

11,8%

100,0%

14

139

90

43

286

4,9%

48,6%

31,5%

15,0%

100,0%

24

120

74

13

231

10,4%

51,9%

32,0%

5,6%

100,0%

15

125

113

32

285

5,3%

43,9%

39,6%

11,2%

100,0%

12

33

36

12

93

12,9%

35,5%

38,7%

12,9%

100,0%

9

13

12

6

40

22,5%

32,5%

30,0%

15,0%

100,0%

84

456

356

115

1011

8,3%

45,1%

35,2%

11,4%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta En esta pregunta, el 45% de las personas encuestadas consideró que el resentimiento de inconformes es una causa del conflicto armado. Quienes están en mayor acuerdo con la consideración de verdadero son aquellas personas que se identifican con el imaginario liberal, entre quienes la proporción llega al 52%. Las personas que se identifican con el imaginario socialista alcanzan el 48.6% afirmando que ese juicio es verdadero. En general, un 35% asume una posición relativista, en tanto que sólo un 11% escoge el juicio como falso. Un 8.3% declara no saber al respecto. En la Gráfica 1 es posible observar que la distribución de frecuencias de las opciones (verdadero, falso, en parte cierto en parte falso y no sé) presenta semejanzas en todas las categorías de imaginarios políticos. Sin embargo, en el imaginario liberal la frecuencia considerando como verdadero este juicio, señala una ligeramente mayor orientación hacia esa opción. Ya se ha constatado que, respecto a los dos juicios analizados, las posiciones relativistas reúnen entre el 33.8% y el 35% de las opiniones. En tanto que asumir como verdadera o falsa una aseveración acumula frecuencias hasta un 45% en el conjunto de todas las categorías de imaginarios políticos, con lo cual, sólo se llega a mayorías relativas. Gráfica 1 11

Resentimiento e inconformidad como causa de la guerra, según imaginarios

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta A continuación se presenta el análisis de tres aseveraciones que, en conjunto, al reconocerlas como válidas o verdaderas, se pueden asociar a posicionamientos políticos de carácter liberal. Estas afirmaciones son: Los gobiernos de Estados Unidos han procurado ayudar a la nación salvadoreña; El progreso en el país se debe principalmente al despliegue e inversión de la empresa privada; y La pobreza resulta de tener pocas capacidades y no saber aprovechar las oportunidades. En el caso de la pregunta sobre el apoyo de los gobiernos de Estados Unidos a la nación salvadoreña, se encuentra que casi el 42% de la población encuestada adopta una posición relativista, en tanto que considera que la afirmación es “en parte cierta y en parte falsa”. El 27.6% de las personas encuestadas consideran como verdadero que el gobierno de Estados Unidos apoya a la nación salvadoreña. Sólo un 19% considera como falsa la afirmación, en tanto que una minoría de 11.6% no sabe al respecto. Se puede afirmar que entre la población juvenil encuestada, Estados Unidos, y los gobiernos de ese país no son rechazados. Más bien, hay una aceptación relativa.

12

Tabla 10 Gobiernos de Estados Unidos han procurado ayudar a la nación salvadoreña Respuesta

Frecuencia

Porcentaje

Porcentaje acumulado

no sé

117

11,6

11,6

verdadero

279

27,6

39,2

en parte cierto y en parte falso

423

41,8

81,0

falso

192

19,0

100,0

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por la encuesta Al examinar la forma en que se distribuyen las opiniones sobre el apoyo de los gobiernos estadounidenses a la nación salvadoreña según las diferentes categorías de imaginarios políticos, se encuentra que entre las personas encuestadas que optaron por identificarse con un imaginario socialista se acumula una frecuencia ligeramente superior a la general en la consideración que niega el apoyo de los gobiernos de Estados Unidos a El Salvador como nación, sin embargo, es en la posición relativista en la cual esta identidad con el imaginario socialista acumula más. En lo que se refiere al imaginario liberal, el reconocimiento como verdadera a esa afirmación supera, en proporción, a los demás imaginarios. En las entrevistas cualitativas se explora la percepción de personas jóvenes universitarias sobre el presidente de Estados Unidos. La pregunta en particular es: ¿Cual es su opinión de la elección y posterior reelección del presidente Obama en Estados Unidos de Norteamérica, especialmente considerando su calidad de afroamericano? Dado que solicita la opinión del presidente a partir de su condición de afroamericano, se esperaba como probable, al menos respecto a este aspecto, respuestas favorables. Cuando se analizan los resultados obtenidos en las entrevistas cualitativas aplicadas a personas jóvenes estudiantes de las carreras de trabajo social y de sociología se encuentran una mayor cantidad de opiniones favorables al actual presidente de Estados Unidos. De las 56 personas entrevistadas, 54 expresaron opinión sobre el presidente Obama. Se registraron 44 opiniones favorables, 9 desfavorables y 7 ambivalentes. Los datos favorables y desfavorables registran ese aspecto parcial expresado en las respuestas ambivalentes, no debe esperarse que las sumas equivalgan al total de opiniones expresadas. Los resultados obtenidos se presentan a continuación.

13

Tabla 11 Opinión sobre la elección y posterior reelección del presidente Obama en Estados Unidos de Norteamérica, especialmente considerando su calidad de afroamericano Sexo

expresaron opinión

favorables

desfavorables

ambivalentes

Femenino

32

27

4

6

Masculino

22

17

5

1

Total

54

44

9

7

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por entrevistas cualitativas Las respuestas ejemplares entre las opiniones favorables son las siguientes: No se mucho del tema, pero si trabaja en bien para las mayorías esta bueno, también se demuestra que ya se va quitando la discriminación entre los negros y los blancos. Me parece muy bien porque de cierta medida ha demostrado su apoyo a este país es decir El Salvador. Tiene poder de convencimiento para haber sido reelegido y quizás las políticas sociales implementadas fueron bien aceptadas. … de los dos candidatos sólo él tenía propuestas de mi agrado, por ejemplo la situación de los indocumentados. Quizás por ser afroamericano piensa más humano... … sólo sé que mis familiares en el extranjero están contentos por el gane de él.

Entre las opiniones claramente desfavorables al presidente Obama se destacaron las siguientes: Que sea afroamericano, chele, amarillo o piel roja, siempre va a representar los intereses del imperio gringo. Nos quieren hacer ver o creer que están en contra del racismo, pero este presidente no ha cesado el envío de tropas a los países árabes para robar petróleo y sigue poniendo bases militares en Colombia. La reelección de Obama en los Estados Unidos de Norteamérica, en calidad de africano no ha cambiado nada, ya que no es el como funcionario quien decide las políticas públicas o de estado de esa nación. Él es un conservador y un liberal, las relaciones internacionales siguen siendo agudas con el Medio Oriente y América del Sur. En su primera elección se esperaba lo mejor de él, que pensara y actuara distinto a los ex presidentes, obviamente, por ser originario de un lugar marginado. Pero no; demostró lo mismo, siguió invadiendo y ya no da alegría que haya sido reelecto porque se identifica siempre con el imperio capitalista.

En lo que se refiere a opiniones ambivalentes, podemos tomar en cuanta como representativas las siguientes: El presidente Obama me parece que ha sido un presidente más flexible en cuanto a la igualdad y equidad que en Estados Unidos faltaba, ya que por ser una persona de color y

14

no el típico norteamericano, ha tenido más apoyo de sus seguidores, pero no creo que sea una persona del todo buena, en la política nadie es bueno siempre. Solo siento admiración hacia el como persona, por haber llegado tan alto. Sin embargo el resto me es indiferente.

La calidad de afroamericano efectivamente puede suscitar simpatías y opiniones favorables al presidente Obama, tanto como la propuesta de reforma migratoria, un tema de particular sensibilidad para la población salvadoreña. Sin embargo, la consideración positiva del gobierno norteamericano trasciende la figura política de Obama. Como se constata, a partir de la información proporcionada por las personas entrevistadas y encuestadas, la percepción de Estados Unidos y su política adopta preferentemente una posición relativista, aunque muchas personas jóvenes la consideran de forma favorable. Quiénes manifiestan una opinión crítica y adversa a las políticas de los gobiernos y políticos norteamericanos están en minoría, pero llegan a ser al menos un 20%. Tabla 12 Gobiernos de Estados Unidos han procurado ayudar a la nación salvadoreña, según imaginarios políticos Imaginarios políticos Conservadores Socialistas Liberales Neoconservadores Con ninguno No sé Total

no sé

verdadero

parte cierto parte falso

falso

Total

16

22

23

15

76

21,1%

28,9%

30,3%

19,7%

100,0%

25

53

143

65

286

8,7%

18,5%

50,0%

22,7%

100,0%

31

86

83

31

231

13,4%

37,2%

35,9%

13,4%

100,0%

30

79

116

60

285

10,5%

27,7%

40,7%

21,1%

100,0%

10

20

48

15

93

10,8%

21,5%

51,6%

16,1%

100,0%

5

19

10

6

40

12,5%

47,5%

25,0%

15,0%

100,0%

117

279

423

192

1011

11,6%

27,6%

41,8%

19,0%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Únicamente un 19% de las personas jóvenes universitarias de los primeros años considera falso que el gobierno de Estados Unidos apoye a la nación.

15

Gráfica 2 Gobiernos de Estados Unidos han procurado ayudar a la nación salvadoreña, según imaginarios políticos

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Tabla 13 Progreso en el país se debe al despliegue e inversión de la empresa privada Respuestas

Frecuencia

Porcentaje

no sé

139

13,7

verdadero

228

22,6

en parte cierto y en parte falso

330

32,6

falso

314

31,1

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta

16

Al analizar la respuesta a la tesis sobre si el progreso en el país se debe principalmente al despliegue e inversión de la empresa privada se encuentra que un 22.6% de las personas jóvenes encuestadas considera que esa afirmación es verdadera. La posición relativista es la que acumula mayor frecuencia, con el 32.6%, pero, en esta ocasión, el rechazo a la tesis acumula el 31%, de manera que se puede señalar que un amplio sector de las personas jóvenes salvadoreñas no comparten la creencia sobre un rol protagonista de la empresa privada en el progreso en el país. Cuando esta afirmación se analiza considerando los diferentes imaginarios políticos se encuentra consistencia relativa entre las opciones políticas, en tanto que, entre las personas jóvenes que se identificaron con un imaginario liberal, un 31.6% considera esta tesis como verdadera, la frecuencia más alta de aprobación entre todos los tipos de imaginario. Por el contrario, en el caso del imaginario socialista, el 39.2% niega esta tesis, siendo el porcentaje de frecuencia más alto de rechazo entre todos los tipos de imaginarios. Es relevante destacar, que respecto a esta tesis un 13.7% de la población declaró que no sabe determinar sobre la verdad o falsedad de la misma. Tabla 14 Progreso en el país se debe al despliegue e inversión de la empresa privada, según imaginarios políticos Imaginarios Conservadores Socialistas Liberales Neoconservadores Con ninguno No sé Total

no sé

verdadero

parte cierto parte falso

falso

Total

20

13

22

21

76

26,3%

17,1%

28,9%

27,6%

100,0%

24

56

94

112

286

8,4%

19,6%

32,9%

39,2%

100,0%

26

73

74

58

231

11,3%

31,6%

32,0%

25,1%

100,0%

40

54

102

89

285

14,0%

18,9%

35,8%

31,2%

100,0%

17

21

28

27

93

18,3%

22,6%

30,1%

29,0%

100,0%

12

11

10

7

40

30,0%

27,5%

25,0%

17,5%

100,0%

139

228

330

314

1011

13,7%

22,6%

32,6%

31,1%

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Al examinar la aceptación o rechazo a la tesis sobre si la pobreza resulta de tener pocas capacidades y no saber aprovechar las oportunidades, se está explorando la forma en que las personas jóvenes contemporáneas entienden la problemática de la pobreza. La frase 17

hace recaer la posibilidad de estar en condición de pobreza con características propias de quiénes están o podrían estar en pobreza, en este sentido se valora que las respuestas afirmativas revelan afinidades próximas a las ideologías políticas liberal. Este tesis divide la opinión de las personas jóvenes encuestadas, prácticamente la misma cantidad de jóvenes la consideran falsa (34.9%), como la cantidad de quiénes la consideran verdadera (34.5%). En tanto que el 28.6% toma una posición relativista. Sólo un 2% declara que no sabe como considerar esta tesis. En lo que se refiere a los imaginarios políticos, de manera coherente con lo que se espera, las personas con un imaginario socialista que consideran falsa esta tesis alcanzan una frecuencia del 46.9% entre todas las que se pronunciaron como socialistas, de hecho la frecuencia más alta entre todos los imaginarios políticos considerados. Por el contrario, en lo que se refiere al imaginario liberal, es congruente que quienes así se identificaron reúnan el 43.3% considerando como verdadero que la pobreza se asocia a la incapacidad y a no aprovechar oportunidades. Por otra parte, en el caso de los imaginarios conservador y neoconservador, las opciones se reparten de manera semejante a los resultados para el conjunto de personas encuestadas. Tabla 15 Pobreza resulta de tener pocas capacidades y no saber aprovechar las oportunidades, según imaginarios políticos Imaginarios políticos Conservadores Socialistas Liberales Neoconservadores Con ninguno No sé Total

no sé

verdadero

parte cierto parte falso

falso

Total

3

29

16

28

76

3,9%

38,2%

21,1%

36,8%

100,0%

4

70

78

134

286

1,4%

24,5%

27,3%

46,9%

100,0%

5

100

63

63

231

2,2%

43,3%

27,3%

27,3%

100,0%

6

97

82

100

285

2,1%

34,0%

28,8%

35,1%

100,0%

2

34

37

20

93

2,2%

36,6%

39,8%

21,5%

100,0%

0

19

13

8

40

,0%

47,5%

32,5%

20,0%

100,0%

20

349

289

353

1011

2,0%

34,5%

28,6%

34,9%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Al considerar en su conjunto estas preguntas sobre la causalidad de la pobreza, el carácter motor de la empresa privada en el progreso o desarrollo del país, y la percepción de los 18

gobiernos de Estados Unidos como apoyo a la nación, se puede resumir que la opinión sobre la pobreza es la que revela cierta polarización entre imaginarios liberales y socialistas. Esta contraposición está presente en las opiniones sobre la empresa privada y el gobierno estadounidense, pero de forma más atenuada. Los imaginarios conservadores y neoconservadores tienden a adoptar mayoritariamente posiciones relativistas (parte cierto, parte falso). Los datos indican que efectivamente ocurre un posicionamiento ideológico entre las respuestas afirmativas a estas preguntas y la identificación con un imaginario liberal, aunque no está generalizado entre quiénes así se identifican. De manera similar, los imaginarios socialistas también presentan un posicionamiento parcial (no generalizado) hacia una respuesta negativa a las preguntas, escogiendo la opción de falsa para ellas. Los datos indican que, para una relevante proporción de personas jóvenes, en dos de tres preguntas predominan las respuestas relativistas, aunque en el caso de la percepción del gobierno de Estados Unidos presenta cierto énfasis favorable, en tanto que hacia la empresa privada del país presenta un énfasis desfavorable. Para realizar un análisis integrado de las tres preguntas se calculó un índice que suma los valores de las tres y calcula el promedio. Para realizar este cálculo se tomaron unicamente aquellos casos en los cuales las personas jóvenes efectivamente se identificaron con uno de los 4 imaginarios políticos, excluyendo todos los casos que no se identifican con ninguno y a quienes declararon no saber. También se excluyeron del cálculo a todos los casos que respondieron no se a cualquiera de las tres preguntas. De esta manera se ha generado un índice que mide el grado de coherencia entre el imaginario político y la convicción sobre las tesis propuestas, mediante el posicionamiento de los casos en 7 estratos: desde aquellos que respondieron falso a todas las preguntas, pasando por quienes respondieron de manera relativista a las tres preguntas, hasta quiénes afirman como verdaderas las tres tesis. En la siguiente tabla se presentan los resultados. La coherencia de los imaginarios se examinó sobre 681 casos. Tabla 16 Distribución de imaginarios políticos en estratos de afirmación o negación de tesis liberales 7 estratos

Conservador

Socialista

Liberal

Neoconservador

Total

Verdadero > 3 superiores

12

61

83

82

238

27.9%

25,7%

46,6%

36,8%

35%

10

54

52

57

173

23,3%

22,8%

29,2%

25,6%

25,4%

V/F 1 intermedio Falso < 3 inferiores

21

122

43

84

270

48,9%

51,5%

24,2%

37,7%

39,7%

Total

43

237

178

223

681

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta

19

El análisis sobre que tan consistente es la identificación con un imaginario político indica que efectivamente hay coherencia: El 46.6% de los jóvenes estudiantes universitarios (hombres y mujeres) que se identificaron con el imaginario liberal se posicionan en los tres estratos superiores de afirmación de las tesis liberales. Por el contrario, las personas que se identifican con el imaginario socialista mayoritariamente (51,5%) se sitúan en los tres estratos que rechazan las tesis liberales. En el conjunto de todos los casos analizados, alrededor de una cuarta parte (25,4%) toma posiciones relativistas, en el estrato intermedio (salvo en el caso del imaginario liberal, que se sitúa en 29.2%). En el caso de las personas que optaron por el imaginario conservador, el 49% también rechaza dichas tesis. El imaginario neoconservador distribuye alrededor del 37% de los casos en los estratos superiores e inferiores, con un 25% en el estrato intermedio. A partir de estos datos se puede retomar la reflexión que se presentó en la investigación sobre la cultura política juvenil en el 2002: Es preciso aclarar que los imaginarios expuestos no tienen porque identificarse mecánicamente con corrientes ideológico-política definidas, mucho menos con opciones partidaristas. Si bien, para identificar los imaginarios empleamos el nombre de algunas tradiciones de pensamiento socio-político (o ideologías políticas) conocidas, ello únicamente lo hicimos por cuestiones estrictamente prácticas. Unas personas, por ejemplo, puede haberse apropiado –por tradición familiar, por formación religiosa o por otras víasde cualesquiera de los mentados imaginarios y simpatizar con quienes lo defienden, pero ello no significa que dicho individuo conozca el cuerpo doctrinario e ideológico que abarca la tradición de pensamiento que lleva el mismo nombre, ni que comulgue expresamente con él. Por tanto no puede equipararse “izquierda = socialista” o “derecha = conservador”, pues no necesariamente la simpatía con un imaginario colectivo se traduce en una la filiación o defensa de una determinada ideología o posición partidarista. Por ejemplo, alguien puede autoidentificarse ideológicamente como izquierdista y, sin embargo, puede mantener posturas conservadoras, respecto a la educación familiar, a la moral sexual, etc. , y no sabe/no responde (Padilla, 2002: 164)

Cabe señalar, a partir de los nuevos datos, si se encuentra una asociación coherente entre las identificaciones con los imaginarios y los posicionamientos políticos, al menos, en lo que cabe para un grupo de personas jóvenes, existe consecuencia entre sus posicionamientos ideológico-políticos y su identificación con un imaginario. En estos casos, probablemente existan consecuentes afinidades partidistas. A continuación se aborda el análisis de otro subconjunto de tres preguntas, las cuales tienen en común la característica de identificar que tan proclive es cada persona hacia las opciones alternativas de sociedad. Se consideran las tesis: Los movimientos sociales son necesarios para lograr mejores condiciones y calidad de vida; El feminismo propone una transformación social justa; y El cambio climático actual se asocia a la actividad económica moderna. En este caso, contestar que dichas tesis son verdaderas se asocia a una mentalidad alternativa. Por el contrario, contestar que dichas tesis son falsas estaría revelando la afinidad con una forma conservadora de considerar el mundo. A continuación, en las tablas 17, 18 y 19 se presentan las frecuencias alcanzadas por cada opción de respuesta.

20

Tabla 17 Movimientos sociales son necesarios para lograr mejores condiciones y calidad de vida Respuestas

Frecuencia

Porcentaje

No sé

64

6,3

Verdadero

573

56,7

En parte cierto y en parte falso

300

29,7

Falso

74

7,3

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Tabla 18 Feminismo propone una transformación social justa Respuestas

Frecuencia

Porcentaje

No sé

149

14,7

Verdadero

400

39,6

En parte cierto y en parte falso

302

29,9

Falso

160

15,8

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Los resultados indican que, frente a las tres preguntas, la población encuestada en conjunto optó en mayoría por las respuestas que la posicionan como favorable a procesos sociales alternativos. El 56,7% de la población considera que la movilización social es necesaria para mejorar las condiciones de vida. El 39.6% considera que el feminismo propone una transformación social justa, y el 37.5% reconoce que el cambio climático actual se asocia con la actividad económica. La tesis que tiene una menor aceptación es la del cambio climático, respecto a la cual, un 30.4% la considera falsa. Para el caso de la tesis sobre el feminismo como movimiento social que propone una transformación social justa se considera indispensable analizar la distribución de frecuencias según el sexo de la persona entrevistada. Tabla 19 Cambio climático actual se asocia a la actividad económica moderna Respuestas

Frecuencia

Porcentaje

No sé

106

10,5

Verdadero

379

37,5

En parte cierto y en parte falso

219

21,7

Falso

307

30,4

Total

1011

100,0

21

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Los datos revelan que hombres y mujeres jóvenes, cursando los primeros años de estudios universitarios no comparten por igual la consideración respecto a la calidad de justicia para las transformaciones sociales propuestas por el feminismo. Entre quienes consideran justas las propuestas feministas, sólo el 30.8% son hombres, frente al 69.3% de mujeres, de manera que se constituyen en minoría. Sin embargo, entre quienes consideran que las transformaciones propuestas no son justas, el 52.5% son hombres. El sesgo de género respecto a esta opinión es muy marcado.

22

Tabla 20 Feminismo propone una transformación social justa, según sexo Sexo

Respuestas No sé Verdadero En parte cierto y en parte falso Falso Total

Total

Femenino

Masculino

88

61

149

59,1%

40,9%

100,0%

277

123

400

69,3%

30,8%

100,0%

184

118

302

60,9%

39,1%

100,0%

76

84

160

47,5%

52,5%

100,0%

625

386

1011

61,8%

38,2%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta También en las posiciones relativistas los hombres quedan en minoría, con el 39% de esa opción. Son principalmente las mujeres jóvenes quienes consideran justas las transformaciones propuestas por el movimiento feminista, el apoyo de jóvenes hombres a esta tesis es minoritario. Tabla 21 Distribución de imaginarios políticos en estratos de afirmación o negación de orientación hacia sociedad alternativa 7 estratos

Conservador

Socialista

Liberal

Neoconservador

Total

Verdadero > 3 superiores

30

168

96

133

427

62,5%

71,5%

56,1%

62,1%

63,9%

10

40

49

44

143

20,8%

17,0%

28,7%

20,6%

21,4%

V/F 1 intermedio Falso < 3 inferiores

8

27

26

37

98

16,7%

11,5%

15,2%

17,4%

14,7%

Total

48

235

171

214

668

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta En todos los imaginarios políticos se encuentra una tendencia hacia considerar verdaderas las tesis que pueden reconocerse como propias de una sociedad alternativa, a la cual se llega mediante algún proceso de movilización y cambio social, aunque es de reconocer que para el imaginario socialista esta tendencia es más frecuente, con un 71,5%. Las transformaciones sociales procuradas por el feminismo, la conciencia de que el cambio 23

climático está asociado a las prácticas económicas actuales y el reconocimiento de que los movimientos sociales son necesarios para mejorar las condiciones de vida, obtienen una convocatoria y consenso que, en términos generales alcanza casi al 64% de todas las personas jóvenes encuestadas. En lo que se refiere a la pregunta sobre si en El Salvador la educación universitaria es un derecho del cual se excluye a muchas personas, los resultados obtenidos reportan que el 60.3% de las personas jóvenes consideran que esta tesis es cierta, frente a un minoritario 16.6% que la considera falsa. Quienes adoptaron una posición relativista alcanzaron una frecuencia del 19,5% Tabla 22 Educación universitaria es un derecho del cual se excluye a muchas personas Respuestas

Frecuencia

Porcentaje

No sé

36

3,6

Verdadero

610

60,3

En parte cierto y en parte falso

197

19,5

Falso

168

16,6

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Finalmente, para cerrar esta sección sobre el imaginario político de las personas jóvenes universitarias se presenta el resultado de la pregunta sobre si en Honduras, a partir del golpe de estado, ha retrocedido la democracia. La particularidad respecto a esta tesis es que la mayor frecuencia se acumula en la opción de respuesta no sé. Los datos revelan que las personas jóvenes universitarias tienen pocas referencias respecto a acontecimientos relativamente recientes en el entorno inmediato regional centroamericano. En general, se puede advertir que se pronuncian con mayor confianza respecto a las relaciones con Estados Unidos, que a la situación política actual en el vecino país. Tabla 23 En Honduras la democracia retrocedió con el golpe de estado Respuestas

Frecuencia

Porcentaje

No sé

461

45,6

Verdadero

187

18,5

En parte cierto y en parte falso

177

17,5

Falso

186

18,4

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Sea que se identifiquen con el imaginario neoconservador o con el socialista, las personas jóvenes universitarias si se orientan al cambio de la sociedad, a través de las personas, o para favorecer a las mayorías en situación de desventaja económica. Una mayoría del 60.3% 24

comparte la creencia de que en nuestro país la educación universitaria es excluyente, Casi el 40% tiende a considerar falsas las tesis del imaginario liberal, en tanto que casi el 64% tiende a considerar como válidas las tesis que orientan hacia una sociedad alternativa.

25

Disposición de las personas jóvenes a participar en procesos electorales Un aspecto específico de la cultura política que prevalece entre personas jóvenes contemporáneas, en la medida que este estudio hace posible una aproximación, se refiere a su percepción sobre los procesos electorales contemporáneos, así como su disposición a participar en ellos. Los estudios anteriores han encontrado que, entre las personas jóvenes ““Las principales razones por las que los electores votantes tomaron parte en al menos un evento electoral son, en orden de importancia: votar "es un derecho o un deber"; "para contribuir a la democracia", para poder "elegir a los gobernantes" y, en menor medida, otras razones, como para "acompañar a un amigo", "por que no tenían otra cosa que hacer", etc.” (Padilla, 2002: 153) Por supuesto, la población estudiada por las diferentes investigaciones incluye a un sector de jóvenes que aun no alcanzan la edad de ejercer el sufragio. Sin embargo, en los estudios aparecieron de manera constante indicios de que “la desconfianza en los políticos es la principal justificación empleada por los electores no votantes para no haber emitido nunca el sufragio (aproximadamente 1/3 de ellos adujo esta causa); las otras atenuantes esgrimidas, en orden de importancia, fueron: "la falta de documentos", "la minoría de edad" y, finalmente, otras circunstancia como "tener que trabajar", "estar fuera del país", etc” (Padilla, 2002: 153154) Pese a que, en un segmento relevante de la población joven está presente una percepción negativa de los partidos y de los procesos electorales, su disposición a participar en las elecciones puede reconocerse como mayoritaria. De hecho, ““Ante la pregunta “si mañana fueran las elecciones y no tuvieras problemas para votar ¿irías?” las respuestas de los jóvenes mostraron que independientemente de variables como sexo, nivel educativo, región administrativa, zona urbana o rural y estrato socio-económico, los jóvenes, en su mayoría, “si asistirían a votar” (84%)”” (Ramos, 2011: 195) En la encuesta exploratoria realizada para el presente estudio se encontró que un 41% del total de jóvenes sí votaron en las elecciones municipales y legislativas del 2012, en tanto que una mayoría del 58% no votó. Por supuesto, en este dato incide la circunstancia de que 22% de las personas jóvenes entrevistadas tenían al momento de la encuesta 18 años o menos. Para las elecciones presidenciales del 2014, el 67% de la población joven encuestada manifiesta que si votará, un 22% no lo ha decidido todavía y un minoritario 10% manifestó que no votará. Respecto a este último grupo debe considerarse que un 14% de las personas jóvenes en estudio tienen 16 y 17 años. Sin embargo, es relevante considerar los aspectos cualitativos de la orientación de las personas jóvenes hacia el ejercicio del voto, los procesos electorales y los partidos políticos. Para ello se puede tomar en cuenta las opiniones expresadas en las entrevistas cualitativas. Aunque en este tipo de entrevista la consideración de las cantidades no es lo relevante, del 26

total de 56 entrevistas consideradas en el estudio se obtuvo que 38 jóvenes hombres y mujeres si participaron en procesos electorales, inclusive 12 de ellos movilizados en el aparato electoral, en las Juntas Receptoras de Votos, en la logística del evento y, en un caso, hasta como observador de la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos (PDDH). De esta manera, entre quiénes participan se encuentran casos que indican “sólo he asistido a las urnas a votar en elecciones del actual presidente”, revelando que no ha participado en todos los eventos electorales a los que su edad le hace posible. En este sentido, otro testimonio añade que “en el ultimo proceso de elección de alcaldes y diputados nada más, participe más bien por amigos que me influenciaron a ir, ya que no tenia interés en ejercer el voto para alcaldes”. En los casos en los cuales la participación es más plena: “Sí. A través del sufragio en elecciones municipales y presidenciales. En las elecciones municipales porque siento necesario organizar el gobierno local, esto después de conocer el perfil del candidato de cada partido en contienda (por indagaciones personales) y en las presidenciales por las expectativas generadas por los candidatos”. Además, entre las personas jóvenes de esta orientación se encuentra que “Sí. Participo porque me sentí en la obligación de cumplir mis deberes, y además hacer valer mi derecho de creer que estoy eligiendo a mis gobernantes”. También se registraron manifestaciones de una ciudadanía muy activa: “Sí. En mesas electorales y como impulsador y activista en mi municipio y también haciendo valer mi derecho de voto. Así también participo en los procesos electorales. Yo creo que los partidos políticos deberían trabajar más con jóvenes dinámicos para que les apoyen durante este proceso electoral que se avecina”. En cambio, entre las personas que expresaron que no han participado, resaltaron razones asociadas a la minoridad: “No, nunca he efectuado un sufragio ni tampoco en propagandas políticas, ni nada de lo que involucra estos procesos, debido a que cuando se dieron los últimos de éstos aún era menor de edad.” Sin embargo, entre las racionalidades y emocionalidades de personas jóvenes con edad de votar que no participan en los procesos electorales se encontraron tres orientaciones básicas: (1) la apatía a procesos políticos (“No, porque nunca me ha llamado la atención en participar en dicha cosa”), reforzada incluso por tradiciones familiares; (2) el sentimiento y la noción de no sentirse representadas por las posiciones y representaciones políticas existentes (“No, porque no ha habido un candidato en particular que llene mis expectativas que como ciudadana considero necesarias para el desarrollo social y económico del país.”); y (3) argumentos, asociados a apatía o a no sentirse representadas, respecto a que los centros de votación se ubican en lugares peligrosos, que estaban lejos, o que por tareas y responsabilidades no se podía asistir y participar (“No porque no me ha llamado la atención las propuestas de los candidatos para alcalde y segundo porque ni los conocía y por qué el lugar para ejercer el voto era muy peligroso”). Sin embargo vale la pena señalar que entre quiénes consignaban que no participaron en eventos electorales anteriores se despierta el interés por involucrarse: “No aún no he participado porque mi familia no acostumbra a hacerlo pero en las próximas elecciones si lo haré” y “No he participado en los procesos 27

electorales por que como ya lo dije antes me parece que es pérdida de tiempo aunque hoy creo que no es así y me gustara participar en las próximas elecciones”. Tabla 24 Votó en las elecciones del año 2012 Respuestas

Si votó No votó Total

Sexo

Total

Femenino

Masculino

248

175

423

39,7%

45,3%

41,8%

377

211

588

60,3%

54,7%

58,2%

625

386

1011

100,0%

100,0%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta En lo que se refiere a la opinión de las personas jóvenes entrevistadas sobre el conjunto de los partidos políticos (considerando por tanto, todo el espectro político) la mayoría expresó opiniones desfavorables. Las emocionalidades y racionalidades asociadas a este rechazo son básicamente tres: (1) los partidos políticos se constituyen en lo fundamental como grupos de interés particular (“son grupos que luchan solamente a su conveniencia queriendo alcanzar el poder según sus intereses” y “hoy en día en nuestro país la política se ha ido corrompiendo y degenerando cada vez más, siendo una lucha constante por la obtención del poder, cada partido político actúa según le convenga sin pensar en el bienestar salvadoreño”); (2) los partidos políticos están en una dinámica de polarización (“hoy los partidos políticos dejan mucho que desear, viven en una guerra permanente entre derecha e izquierda; y por lo cual muchas veces dejan de hacer lo que les compete por estar peleando. Deberían ya de madurar y pensar mejor en trabajar y no como niños: que te digo y me dirás”); y, (3) en la incapacidad de gestionar proyectos políticos (“ningún partido político ha demostrado tener la capacidad de resolver los problemas de la sociedad” y “la realización de proyectos políticos es muy deficiente en cuanto a los partidos políticos”). En una variante peculiar, el malestar con la gestión de los partidos políticos se expresa como un rechazo a la hegemonía de sectores económicamente poderosos: “hasta ahora no han habido muchas mejoras sobre todo para la clase humilde pues solo han sido beneficiadas las altas masas de El Salvador ”. Lo que también se expresa así: “aunque [un] presidente tenga la voluntad de querer trabajar y luchar y darle lo mejor al pueblo salvadoreño, los de más poder económico no los dejan de manipular como títeres”. Las opiniones sobre los partidos políticos con mayor matiz indicaron que “hay que hacer una diferencia entre partidos políticos, como para tener una sola opinión, los institutos políticos 28

son herramienta para llevar al poder que en la actualidad tienen un alto grado de burocracia administrativa, monopolio de poder”. Hasta quién distingue su partido de preferencia en particular, como una expresión aparte del conjunto: “la mayoría son grupúsculos (excepto el FMLN [Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional]), todos los partidos de derecha defienden intereses de la burguesía y buscan auxilio únicamente del imperio gringo, el FMLN es el único instrumento que representa los ideales de obreros, campesinos y de la población en general, todo proceso tiene sus dificultades, en lo personal sé que los objetivos que persigue hoy el FMLN no son los mismos que antes del conflicto armado” La opinión expresada por las personas jóvenes en las entrevistas cualitativas, en lo que se refiere a los procesos electorales, en su mayoría es desfavorable. Entre las percepciones emocionales y racionales que se asocian a la opinión desfavorable sobre los procesos electorales se encuentra que: (1) Un rechazo a la forma de las campañas electorales, en las cuales se expresan opiniones y frases ofensivas entre partidos y candidatos (“no estoy de acuerdo con el tipo de propaganda que hacen, pues nos bombardean con tanta publicidad o con campañas de desprestigio a los candidatos opositores que hacen que uno pierda credibilidad y ánimos de asistir a votar”); (2) un rechazo a la violencia física y psicológica que se realiza en las campañas electorales (“siempre se han visto marcados por la violencia y campañas de miedo introducidos a la población a través de los medios de comunicación y deben cambiar la actitud”); (3) se perciben los procesos electorales como ámbito marcado por la capacidad de ejercer el engaño y la manipulación a gran escala (“mucha ingenuidad por parte de la población al creer en tanta mentira política” y “son momentos en los cuales la población se llena de entusiasmo (la mayoría) creyendo que de una vez por todas la situación en el país cambiará, es una oportunidad para creer en algo, aunque al final todo o casi todo fue en vano”); (4) la percepción de que los partidos hacen tanto fraude como pueden (“Me parecen que son un proceso sucio porque siempre hay partidos que buscan hacer cualquier tipo de trampa”; “he visto como han hecho fraudes en mi municipio”; “habían sido un fraude por que ARENA [Alianza Republicana Nacionalista] los manipulaba”; “muchas alcaldías de ARENA que dan documentos a extranjeros”); Además hay una percepción de que los procesos electorales se organizan de forma deficiente y con despilfarro (“no estoy de acuerdo en que se gaste mucho en dinero en el debate que van hacer los diferentes candidatos a la presidencia ese dinero se puede invertir en otra cosa” y “Son muy deficientes en el aspecto de logística. A la hora de trasladar los votos para hacer el conteo hay falta de seguridad en los centros de votación”) Una opinión que sintetiza la percepción desfavorable sobre los procesos electorales entre las personas jóvenes detalla que las elecciones son “totalmente manipuladas, un derroche de dinero, no son honestas, son atrasadas tecnológicamente, y siempre se espera que haya fraude; nadie reconoce qué es [lo] legitimo, también son violentos, irrespetuosos, [con] poca ética”.

29

Sin embargo, entre las personas jóvenes también se expresaron opiniones favorables sobre los procesos electorales. En lo que se refiere a la percepción favorable a los procesos electorales se encontró que desde sus emocionalidades y racionalidades reconocen que: (1) Existe un esfuerzo por mejorar la calidad de la participación en los procesos electorales, por lo que están de acuerdo con las recientes reformas del 2012. Los jóvenes reconocen que “en cierto momento buscan la manera de facilitar la participación de la gente en el proceso ”, en tanto que opinan: “Me ha parecido muy bien acercar aún más los centros de votación a las comunidades, además porque se motiva a todos a votar” y “En las últimas elecciones ha mejorado con el voto residencial y con la fotografía de las personas por qué se va a votar” (2) Se reconoce que “Se ha mejorado la imparcialidad del TSE [Tribunal Supremo Electoral] y la transparencia”, dado que “desde el 2009 donde vinieron visores y personas internacionales, todo ha cambiado, es mejor que antes” y “los procesos electorales me parecen que han mejorado ya que años atrás existía mucha duda a la hora que los resultados salían a flote”. En este contexto, la mayoría (67%) de personas jóvenes encuestadas, con capacidad de ejercer el sufragio, proyectan ejercerlo para el 2014. Tabla 25 Votará en las próximas elecciones del año 2014 Respuestas Sí votará No votará No ha decidido Total

Sexo

Total

Femenino

Masculino

414

264

678

66,2%

68,4%

67,1%

64

43

107

10,2%

11,1%

10,6%

147

79

226

23,5%

20,5%

22,4%

625

386

1011

100,0%

100,0%

100,0%

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta A continuación se presentan los resultados de un bloque de cinco preguntas orientadas a medir la importancia atribuida a la participación en el próximo proceso electoral del 2014, tanto como persona que se limita a ejercer el voto, como persona con disposición a incorporarse en el evento electoral, en el marco de las Juntas Receptoras de Votos. Además, se mide la relevancia atribuida a los procesos electorales en tanto podrían (o no) contribuir a elegir gobernantes idóneos, o en tanto los resultados se den a conocer oportunamente y el proceso en general sea reconocido como legítimo. Es posible observar que para el 63% de la población joven encuestada las elecciones 2014 y 30

votar en ellas es muy importante y extremadamente importante. Casi el 85% de la población se adhiere a la tesis sobre la importancia de que resulten electos gobernantes idóneos, las personas apáticas al respecto apenas acumulan el 6.8%. Para el 72.5% de las personas jóvenes universitarias, resulta de relevancia conocer los resultados electorales el mismo día. Las personas con un mayor grado de apatía al respecto reúnen al 13.7% del total. Tabla 26 Importancia atribuida a votar en las próximas elecciones presidenciales del 2014 Frecuencia

Porcentaje

extremadamente importante

222

22,0

muy importante

420

41,5

medianamente importante

187

18,5

poco importante

135

13,4

nada importante

47

4,6

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Tabla 27 Importancia atribuida a que resulten electos gobernantes que aborden adecuadamente las problemáticas nacionales Frecuencia

Porcentaje

extremadamente importante

433

42,8

muy importante

424

41,9

medianamente importante

85

8,4

poco importante

49

4,8

nada importante

20

2,0

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta

31

Tabla 28 Importancia atribuida a conocer los resultados de las elecciones el mismo día Frecuencia

Porcentaje

extremadamente importante

326

32,2

muy importante

407

40,3

medianamente importante

140

13,8

poco importante

108

10,7

nada importante

30

3,0

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta En lo que se refiere a participar directamente en las JRV, Juntas Receptoras de Votos, es decir en el nivel directo del evento electoral, el compromiso decae significativamente, de manera que sólo un 21.5% considera extremadamente importante o muy importante la participación directa en las JRV. Para un 60.5% esta actividad y forma de participación tiene poca o ninguna relevancia. Cuando se sale del plano de la participación directa, la relevancia otorgada a los procesos electorales se confirma como de relevancia, dado que poco más del 80% de la población joven en estudio afirmó que es de gran importancia. La apatía se presenta en el 8.4% de la juventud. Tabla 29 Importancia atribuida a participar en el próximo evento electoral como personal de las Juntas Receptoras de Votos Frecuencia

Porcentaje

extremadamente importante

54

5,3

muy importante

164

16,2

medianamente importante

181

17,9

poco importante

324

32,0

nada importante

288

28,5

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta

32

Tabla 30 Importancia atribuida a que el proceso electoral y sus resultados sean reconocidos como válidos y legítimos Frecuencia

Porcentaje

extremadamente importante

440

43,5

muy importante

385

38,1

medianamente importante

101

10,0

poco importante

58

5,7

nada importante

27

2,7

Total

1011

100,0

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta Al realizar un análisis integrado de las cinco preguntas, mediante el cálculo de un índice de importancia atribuida a los procesos electorales se encuentra que la población se distribuye mayoritariamente en el estrato intermedio. Únicamente el 17.4% concede alta importancia a los procesos electorales, en tanto que el 12,3% se ubica en el estrato bajo de atribución de importancia a los procesos electorales, particularmente al de 2014. Tabla 31 Indice de importancia atribuida a procesos electorales 1 es extremadamente importante 5 es nada importante

Frecuencia

Porcentaje

[1,00 – 1,60] Estrato alto

176 casos

17,4%

[1,80 – 3,20] Estrato intermedio

711 casos

70,3%

[3,40 – 5,00] Estrato bajo

124 casos

12,3%

Total

1011

100

Fuente: elaboración propia en base a datos producidos por encuesta

33

REFERENCIAS Artiga, Alvaro. Las elecciones del 2009 en perspectiva ECA Vol. 64, N° 719 Artiga, Alvaro. La reforma política en El Salvador. 2008 www.juridicas.unam.mx Bonilla, Adolfo Ideas económicas en la Centroamérica ilustrada: 1793-1838. San Salvador FLACSO . 1999. 371p. Fundación DEMUCA. 2009 Ingeniería y sistemas electorales a nivel Municipal: Centroamérica y República Dominicana Fundación DEMUCA y AECID. -- San José, C.R., DEMUCA,. Fundación DEMUCA. 2010 Guía de reformas electorales municipales en Centroamérica y República Dominicana Fundación DEMUCA. - San José, C. R.: DEMUCA, FUSADES 2005 Las Instituciones Democráticas en El Salvador: Valoración de Rendimientos y Plan de Fortalecimiento. Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social. Hernández, Héctor 1978 Régimen de partidos políticos en El Salvador. 1930-1975. Guatemala, Editorial INCEP. Herrera Mena, Sajid Alfredo 2008 ¿Liberales contra conservadores? Las facciones políticas en El Salvador del siglo XIX. Asociación para el Fomento de los Estudios Históricos en Centroamérica. Febrero 2008 Jiménez Morales, Óscar Antonio. Otros estudios sobre abstencionismo electoral: Los casos de El Salvador, Nicaragua y Panamá. EUMED Loya, Nayely. 2008 Concejos Municipales Pluripartidarios: una reforma prioritaria. Alternativas para el Desarrollo, N°108. Dic 2008, Jul 2009.

FUNDE

Oliva Mancía, Mario Daniel Ernesto 2011 Ciudadanía e higienismo social en El Salvador, 1880-1932. Tesis para optar al grado de doctor en filosofía iberoamericana. UCA, 2011. Paz Narváez, Rafael 2007 Informe sobre avances, aciertos, obstáculos y límites de la participación ciudadana en El Salvador. 2007 34

Ramos, Carlos Guillermo. El Salvador. Transición y procesos electorales a fines de los 90. Nueva Sociedad Nro. 158 Noviembre-Diciembre 1998, pp. 28-39 TSE, Tribunal Supremo Electoral. PLAGEL. Plan General Elecciones 2012. Nueva Sociedad Nro. 158 Noviembre-Diciembre 1998, pp. 28-39 DIGESTYC, Dirección General de Estadística y Censos 2011 Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples 2010. DIGESTYC. San Salvador, 2011. 508p. Marroquín, Alejandro Dagoberto 2000 Apreciación sociológica de la independencia Salvadoreña. (2ª. Ed.). Salvador: Dirección de Publicaciones e Impresos

San

MINED, Ministerio de Educación 2011 Resultados de la Información Estadística de Instituciones de Educación Superior 2011. San Salvador. 150p. Padilla Guillermo 2002 Juventud y cultura política. Guillermo Padilla. -- 1a. ed. -- San Salvador. FLACSO Programa El Salvador, 2002. 212 p. Ramos, Carlos, y otros 2011 Identidades, prácticas y expectativas juveniles: al inicio del siglo XXI. Coordinación: Carlos Guillermo Ramos. Investigación principal: Wendy María Alas, Sandra Elizabeth Cabrera, Ana Margarita Montoya. Investigadores asociados: José Luis Benítez, Amparo Marroquín. 1a ed. San Salvador. FLACSO, 2011. 230p. Santacruz Giralt, María L y Marlon Carranza 2009 Encuesta Nacional de Juventud Análisis de resultados. María L. Santacruz Giralt y Marlon Carranza. -- 1a. ed. -- San Salvador, Instituto Universitario de Opinión Pública (IUDOP), 2009. 205 p. Secretaría Nacional de la Juventud 2005 Encuesta nacional de juventud. Secretaría Nacional de Juventud. 47p.

35

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.