Es un llamado a Alimentarnos de otra manera.

Es un llamado a alimentarnos de otra manera
No necesariamente de comida.
Entre labios revelamos los discursos que le dan aroma a los diálogos, cortamos en julianas algunos códigos de los que se cargan los mensajes, desnudamos la frialdad del vecino por medio de una pizca de sal, preparamos los ingredientes antes de estar mezclados con el mismo esmero con que pensamos los verbos, servimos los platos de la misma forma y con la misma organización al modo cómo vivimos, nos alimentamos tan literalmente de alimentos como metafóricamente de experiencias, métodos, personas, palabras, técnicas, oportunidades que nos brindan calidades de vida.
No es homogenizar los derechos, ni simplificar los puntos de lo cotidiano, excusarse con el tiempo tampoco resulta valido, unos dicen: "Prefiero comer algo rápido y comer en casa" "camine nos comemos un combo de $3000 ", "llegan las seis de la tarde y se escucha: No he almorzado" sucede en ámbitos laborales, deportivos, recreativos, académicos, la alimentación como manta que cobija a todos tiene tantos dichos, tantas salidas de paso, tantas opiniones que a los ojos del mundo normal todo resulta comestible, los ángulos de reflexión con que se quiere abarcar a las personas que estén leyendo el texto va más allá de lo cotidiano, del afán, de la impaciencia y de la falta de organización en sus platos.
Muchas veces las personas en sus decisiones correctas desean ser aceptadas desde el comentario equivoco del grupo, por ende, la normalidad como factor común de un conjunto particular, atrapa a quien quiere alejarse de la idea de lo normal.
Para algunos:
En la normalidad todo se afronta tan normal que lo anormal es un mal
aunque cuando logro des-normalizarme, lo anormal lo veo normal
Sin embargo, para otros.:
Des-normalizar requiere mantener actualizada la normalidad
para que en cada normalidad aun exista la idea de lo anormal.
Fuera de la caja negra esta lo que nadie ha visto, por ende, a normalizar la normalidad suscita nuevas formas de entender esta dualidad.

La invitación es a afrontar los discursos tradicionales del común, a no escuchar con la gula de la boca el doble bocado de quien dijo que no había repetido, a no digerir sin masticar; sino al contrario, saborear y descubrir los ingredientes que componen el banquete, a dictar sospechas de la esencia del mensaje , a ser portadores de una reflexión, a tener voto sobre las premisas que organizan mi contexto, a ser protagonista del mundo que comienza a re-construirse, a ser el plato que soporta el alimento, ser el ser humano que alza voz para unirse al grito de quienes exigen nuevas formas de organización, el mismo que apela por economías más justas, por comidas sin tantos intermediarios, por los imaginarios de quienes desean territorios más familiares, en otras palabras, es el llamado a un activismo que cocina las formas de asociarnos, el apoyo mutuo, la sinceridad en el hablar… y así, distanciarnos de la competencia, de la envidia, de la privatización ajena.
De seguro de esa forma, dejaríamos de alimentarnos sin tantas huellas sobre la comida, sin tantas mentiras sobre el discurso, sin bocados bajo cuerda. Quizás así, volveríamos a confiar uno en el otro. 
En consecuencia, en un mundo de paralelos, lo que es "el mal" para unos, puede ser "el bien" para otros, la subjetividad del discurso suelto no tiene peso, conviene a quien quiera adoptarla. En este caso, la objetividad se funda en la relación de mi cuerpo como contexto y el alimento como categoría que moldea mi entorno; la gráfica proporcional de alimentarme con respecto a X, Y, Z (oportunidades por las que defino mi calidad de vida) , establece una relación directa, una buena alimentación desemboca en un entorno propicio, duradero, ameno, justo, siendo mi cuerpo el que transfiere un mensaje, y permite construir instantes, para luego ejemplificarlos a la luz de otros.
La manera en como se extienden las acciones es la forma como alimentamos desde nosotros para otros. No es pertinente imaginarse esta articulación de manera vertical, no hay un debajo ni un sobre, acá la relación es totalmente horizontal, quienes participan tienen algo que aprender y algo que enseñar.Quién organiza la actividad es el libre conocimiento mas no sus perfiles.
¿Qué tan consecuentes somos con lo que nos alimentamos? (Alimentación= enriquecimiento por medio de hechos, palabras, etc.)
No es fácil hablar de la seguridad del alimento cuando en la otra olla está hirviendo la hegemonía de los mercados, tampoco es sencillo discutir sobre economías solidarias cuando vemos las estadísticas del híper consumo (que incluye hábitos tóxicos para la salud). Es para nuestra generación una utopía seguir pensando el discurso del desarrollo cuando en otro renglón, de otra página y de otro libro se habla de la filosofía del Buen Vivir de las comunidades andinas. Así es que sin más preámbulos y antes de que la cena se pase de cocción…
EN……
La mesa 4 todo esta listo, en ella esta vez no se pasó un menú con alimentos de la huerta de doña María. Sino que se enunciaron ecuaciones de categorías a entender
. HECHOS+PALABRAS+VISIONES+IMAGINACION+a+b+c
ALIMENTARSE = ——————————————————-
. Ética
______ . La mesa 8 también esta lista, y en ella su menú sí son plantas comestibles, ya entendieron que primero hay que alimentarse armónicamente de las relaciones entre naturaleza, hombre y ciudad y de seguro así el menú llega por sí solo.
El primer postre fue tiramisú de limón, que no llena pero sí antoja
y el segundo fue lo que logré hacer pensar, no antoja de a mucho pero sí llena de a poco.