Entre la ética de la convicción y la ética de la responsabilidad

Entre la ética de la convicción y la ética de la responsabilidad.

TESIS CENTRAL: La invalidez de una teoría ética respecto a su calificación como correcta y verdadera es dada por la ambigüedad que presenta en su fundamentación. Según el filósofo alemán Max Weber todo actuar orientado en sentido ético oscila entre las dos máximas existentes: la ética del obrar por la convicción y la ética del obrar por la responsabilidad; mientras la primera es de carácter deontológico y tiene su expresión en la moral kantiana -ética del deber ser-, la segunda es meramente teleológica -su fundamento está en el fin buscado por la acción- y en ella se fundan muchas de las teorías éticas con mayor uso en nuestros tiempos; pues esta-la ética de la responsabilidad- estriba en el resultado con cual la acción pretende responder al problematicidad vista, buscando por supuesto el éxito sobre el problema; esta ética está fundamentada en la practicidad de las acciones y decisiones por lo que es la favorita de un mundo sumergido en la globalización y el neoliberalismo donde la regla de “la mayor ganancia al menor costo” impera como reguladora ante la toma de las decisiones. La ética es el estudio que la filosofía hace sobre las acciones del hombre para designar su bondad o maldad en cuanto a su rectitud con la naturaleza humana, cuando me refiero a teoría ética quiero hacer alusión al pensamiento sistemático que busca fundamentar bajo ciertos criterios la bondad o maldad de las acciones a juzgar. La teoría de la ética de la responsabilidad fundamenta la moralidad de las acciones en la calidad de la respuesta que la acción da para solucionar las problemáticas a atacar, en ella una acción es buena o mala dependiendo del fin que busca y el éxito que logra respecto a su fin, por ello las acciones son vistas sólo como medios a …,más no como un todo en sí, esta comprensión de medios a…, es un peligro en la búsqueda de la verdadera y recta moralidad, pues permite que los actos humanos sean han juzgados con ambigüedad, en calidad del fin al cual buscan responder, en ella una misma acción será mala o buena según el fin buscado.

La ética de la responsabilidad es la ética de la respuesta, más no la ética del deber, la ética de la responsabilidad será útil pues es fácil de ser moldeada a los intereses del actor, más no puede ser declarada como la ética correcta y verdadera por su ambigüedad suscitada por su falta de fundamentación metafísica y es que lo ambiguo es inestable por lo que no puede ser criterio de fundamentación para enjuiciar. La teoría ética de la responsabilidad pertenece a las teorías de índole utilitarista las cuales descansan sobre el imperativo maquiavélico: el fin justifica los medios. Una teoría ética correcta y verdadera será aquella que descanse sobre los principios de la naturaleza del ser, la cual reclama las acciones necesarias que DEBEN SER, no las que convienen o que se creen mejores para a los intereses del actor.

La creación de este artículo está inspirado en la lectura: "Iniciarte. F., Liberalismo y republicanismo”, Editorial EUNSA, Pamplona, 2001. José Esteban Pérez Torres.