Ensayo: Marx y su concepto del hombre

Universidad de morelia
Marx y su concepto del hombre
Ensayo

Ángel Eduardo Narro García
18/11/2015






MARX Y SU CONCEPTO DEL HOMBRE

Escrito por Erich From en 1961, "Marx y su concepto del hombre" representa un punto de vista claro y sin tergiversaciones de los postulados marxistas. Lo más importante del libro, por otro lado, es el contexto histórico en el que es publicado. El primer año de la década de los 60's es como un preludio a la tensión y paranoia occidental causada por la guerra fría, y un libro con ideologías marxistas publicado en EEUU era como un libro de Copérnico en el Vaticano en el obscurantismo.
Dos años antes de su publicación la revolución cubana llegaba a su fin y el comandante Castro tomaría el poder de la isla. En el '61 el gobierno americano rompería oficialmente las relaciones diplomáticas con Cuba y tiempo después levantaría el famoso bloqueo económico que sigue en funcionamiento hasta la fecha. Como respuesta ante las necesidades económicas del estado cubano y ante los atentados a su soberanía nacional realizados por EEUU, Cuba tomaría por aliado comercial, y más tarde político, a la URSS, la misma que instalaría puestos de lanzamiento de misiles nucleares en la isla, causa de la conocida "crisis de los misiles".
En ese mismo año se levantaría el muro que dividió la Alemania Occidental de la Oriental a manos del gobierno socialista ruso. Era el comienzo de la guerra fría, de la carrera espacial, del duelo mundial entre un capitalismo en auge, encabezado por Estados Unidos y un "comunismo" en decadencia, liderado por la ya desintegrada Unión Soviética. El resultado, como ya es conocido, fue claro. La sociedad capitalista adquiere un poder hegemónico sobre la comunidad internacional y el bloque socialista que se mantiene vigente hoy en día.
Pero desde hacía ya mucho tiempo las ideologías y la comprensión de los textos marxistas habían quedado escondidas tras las tergiversaciones y propaganda americana, tras estados y dirigentes políticos que hacían pasar sus ideas autoritarias y reaccionarias por la palabra de Marx.
Como dice el mismo Fromm "pareciera que no hay límites para el malentendimiento y la deformación de las teorías". Incluso actualmente se hacen infinidad de referencias a Marx y al socialismo, y pareciera que los políticos y periodistas no han leído una sola obra escrita por el mismo o sobre el mismo.
Una de las principales tergiversaciones hechas a lo largo de la historia sobre la teoría marxista se refiere a la motivación humana. Se habla comúnmente sobre la afirmación de que Marx creía que la principal motivación psicológica del hombre es el deseo de ganancias y bienestar económico. Marx planteaba que esto no era una motivación propia de la naturaleza humana, sino que ciertas condiciones económicas, mismas del capitalismo, producen como incentivo principal el deseo de dinero y bienes materiales. Él distinguía dos impulsos humanos, diferentes a los de Freud, los "fijos" o "constantes", que se refieren a las necesidades como el hambre y el deseo sexual; y los "relativos" que deben su origen a la influencia de determinado tipo de organización social.
Se dice también que el modelo ideal de un hombre para Marx era el de una persona "bien vestida y alimentada pero sin alma". A esto, coloquial e ignorantemente, se le conoce como "materialismo".
Está de más decir que nada puede alejarse más de la realidad. El objetivo del socialismo, refiriéndome al socialismo no sólo como un modelo económico y político sino como una filosofía humanista, es el terminar con la enajenación del hombre, de liberarlo de las necesidades falsas creadas por el determinismo económico en el que se desarrolla.
Otros tantos individuos afirman que la filosofía socialista va en contra de la naturaleza humana, que el hombre es de nacimiento una persona con envidia, que la naturaleza del hombre es competir y que es natural que el más pequeño sea comido por el más grande. En lo siguiente comparto el punto de vista de Fromm y del propio Marx: el capitalismo no es el resultado de la naturaleza humana ni tampoco es la principal motivación del hombre.
Es absurdo, a veces hasta divertido cuando se ha alcanzado un estado de conformidad, ver las ironías de las críticas occidentales hacia los modelos socialistas. Como aquellas clásicas caricaturas que mostraban a los pueblos socialistas como una gran masa de robots carentes de individualización y de "alma", todos vestidos igual, consumiendo los mismos productos, sin ningún tipo de realización personal, siempre al servicio de la enorme máquina productora y autoritaria que representaba al omnipotente estado. Digo "gracioso" porque la enajenación y las necesidades falsas creadas por el capitalismo contemporáneo parecieran producir ese mismo resultado a la sociedad actual. Aquellos mismos que decían que el socialismo representaba un atentado a la libertad humana siguen siendo igual de "libres" ahora, libres de elegir sobre qué celular los hará más felices si el de $10,000 o el de $11,000.
El entendimiento de la comprensión errónea de los postulados marxistas es muy simple, históricamente hablando, uno de los principales problemas ya mencionados fue, y sigue siendo en gran medida, la propaganda americana. Hay que mencionar también que la propaganda americana tiene raíces completamente fundadas en razones justas. Es irónico y penoso que el más grande representante del comunismo aplicado en el mundo sea también una de las personas más sanguinarias y absolutistas de la historia del siglo pasado. Josef Stalin creó la imagen actual del socialismo en el mundo, un socialismo tal y como lo describen los occidentales y críticos políticos, sin libertad, frío, enajenado y sanguinario.
La última raíz de distorsión de las teorías marxistas fue su poca distribución a nivel internacional. Pocos de los textos que hablaban sobre las raíces filosóficas e históricas del socialismo nunca fueron (hasta hace poco tiempo) traducidos tanto al inglés como al español.
La perspectiva de Fromm sobre los escritos de Marx es de gran ayuda para tener una comprensión integral de la misma. Muchas veces pareciera que el mismo Marx descuida la parte psicológica que explica racionalmente el porqué de su teoría, y se centra más en lo práctico, económico, político y filosófico.
Marx tenía una concepción del hombre que pocos se hubieran imaginado. Él decía que: "no es la consciencia del hombre lo que determina su ser, sino, por el contrario, es el ser social el que determina su consciencia". Marx pensaba, al igual que Freud, que la mayor parte de lo que pensamos conscientemente es, en su mayoría, consciencia "falsa" y racionalizaciones; que los verdaderos impulsos que crean los actos del hombre son inconscientes. Según Freud, estos actos se originan gracias a los impulsos de la libido; según Marx se originan en la organización social del hombre.
Un punto en el que difiero fuertemente con Fromm y su interpretación es en la necesidad del uso de la fuerza para la implementación de un estado socialista; la historia ya ha presenciado anteriormente transiciones de un sistema capitalista a uno socialista que no han requerido un levantamiento armado, está el caso de Chile en 1970 encabezado por el presidente Salvador Allende, que, si bien no llegó a implementar un gobierno estrictamente socialista, nos demuestra la capacidad de la vía democrática para defender los intereses del pueblo.
Por otro lado, concuerdo en su tesis que plantea que la fuerza política no puede producir ningún cambio para el cual la sociedad no esté preparada. Con esto se refiere, desde mi punto de vista, que un sistema socialista no puede representar un cambio cultural e histórico; es, por el contrario, un síntoma mismo de un cambio cultural, el resultado de un cambio en la consciencia social, el cual se logrará únicamente cuando la sociedad logré desenajenarse de la ideología falsa formada gracias a la influencia de su lugar en la historia y su papel como objeto de producción.








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