Ensayo Hoy puede ser un Gran Dia

June 24, 2017 | Autor: M. De Simone Maimone | Categoría: Human Values, Love, Human behavior, Inspiration, Saving the Love, Inspirational Stories
Share Embed


Descripción



Hoy puede ser Un Gran Día
Por Miguel Arcángel De Simone Maimone
Escribamos una letra, pongámosle música y hagamos de ella una canción… pero, hagamos algo más… No la escribamos en un papel sino en nuestras vidas y pongámosle la melodía de nuestras conversaciones… igual será una canción… una bella canción… tan original la tuya como la mía… como único e irrepetible es cada hombre y mujer… y a la vez tan armoniosas ambas entre sí, por ser tocadas al ritmo del corazón humano.
"Hoy puede ser un gran día,
plantéatelo así,
aprovecharlo o que pase de largo,
depende en parte de ti".
-Joan Manuel Serrat-
¿Qué se necesita para escribir una canción? Inspiración… Algo o alguien que desafíe a nuestro espíritu y le permita distinguir lo necesario de lo contingente, lo realmente importante de lo accidental o superfluo. Es la inspiración la que nos hace crear, y aunque te falte léxico o desconozcas las formas de redacción, en ti, en cada uno yace escondido un compositor o poeta.
En una valoración profunda que trascienda la materialidad de las cosas para mirar no ya sus cualidades físicas sino a su relación con las personas, el compositor o poeta (es decir tu) puede ir más allá de la vivienda y descubrirla como hogar, ir más allá de la alimentación y contemplarla como banquete, más allá del vestido para expresar su juventud espiritual o la elegancia de su madurez … y así, por inspiración, las necesidades de la vida pueden transformarse: La salud en oportunidad, el transporte de un lado a otro en peregrinación, la seguridad en responsabilidad, el descanso en sueño… la compañía de otro en encuentro, descubrimiento, reto, conquista, pertenencia.
En definitiva, como lo cantara Joan Manuel Serrat, hoy puede ser UN GRAN DÍA y esto, más que del reconocimiento de la gente que te rodea, depende en gran medida de ti, de la conciencia que tengas de tu dignidad y vocación, de lo que eres y de cuánto te identifiques con lo que haces.
Hoy puede ser un gran día y aprovecharlo o que pase de largo dependerá, en un primer momento, de que reflexiones y distingas lo verdaderamente necesario en tu vida de lo superfluo. Pues lo necesario es todo aquello que nos ayuda o sirve para ser quiénes somos y vivir como tales, mientras que lo superfluo es todo aquello que desfigura nuestra identidad y nos distrae o aleja del modo de vivir coherente con ella, algo de lo que se puede prescindir.
"No consientas que se esfume,
asómate y consume
la vida a granel.
Hoy puede ser un gran día,
duro con él".
¿Cuándo es buena la pobreza y cuándo es mala la riqueza?
¡Cuánta gente he conocido que piensa que vale por el dinero que tiene! Sin darse cuenta los pobres que nada de eso se llevarán a la tumba… Es más, te garantizo que sus familiares empezarán a repartírselo, al menos en aspiraciones de herencia, a los 55 minutos de que haya muerto, eso sí, después de haber vertido una lágrima de ley por su pérdida.
¡Cuántos pierden la salud para ganar fortunas y se acaban sus fortunas para recuperar la salud! Y eso que, hasta el día de hoy, no haya forma de pagarle a la Parca un soborno para que se haga de la vista gorda y no nos lleve a la otra orilla. ¡Nada de lo que tengas puede comprarte un segundo más de vida! ¿Por qué entonces pensar que el sentido de esta vida se encuentra en algo que no puede acompañarte más allá de tus esfuerzos mortales ni prolongar tu estancia entre los mortales?
Es la conciencia de lo invaluable que es cada persona y la motivación por ser mejor y hacer mejor las cosas la que dimensiona a la riqueza; dicho de otra manera, según el viejo refrán: "rico no es el que mucho tiene sino el que poco necesita". Pienso que la riqueza es mala cuando ella te aísla de la comunidad ya sea porque te regodeas en ella egoístamente sin compartir, ya sea porque tienes tanto y temes tanto perderlo que ya no lo disfrutas por cuidarlo. Incluso, voy a decir algo que puede parecer locura, pero la pobreza puede ser buena… cuando te hace mejor persona y se convierte en un reto para salir adelante.
"Hoy puede ser un gran día
donde todo está por descubrir,
si lo empleas como el último
que te toca vivir".
¿El hombre es básicamente egoísta o
cabe un margen de generosidad?
Si no es el dinero lo verdaderamente necesario… ¿qué será lo que dé sentido a nuestras vidas? ¿dónde podremos encontrarlo? Si lo buscas afuera, me temo que no lo encontrarás, pues el sentido de las cosas se halla en su propia esencia. Permíteme explicarte: No serviría para un fin, algo que no le estuviese ordenado desde su propia constitución, por ejemplo, no existen ladrillos de gelatina ni un vaso de ácido saciará tu sed. Cada cosa, desde su propia esencia, guarda ya, implícita, su finalidad; su modo de ser marcará su destino. Esta es una verdad que, en cierta forma, también se aplica a las personas, aunque con una grandísima diferencia; pues si bien en nuestra esencia humana se esconde el sentido de nuestra vida, hacia donde debiéramos dirigir nuestras decisiones y actividades, también es cierto que nuestra libertad decide la dirección e intensidad de las mismas, pudiéndose dar el caso de mirar para el lado contrario y atentar contra la propia existencia.
Y, ¿cuál es nuestra esencia? Para responder a esta pregunta sin perderme en disquisiciones filosóficas o religiosas que, aunque valiosas, nos distraerían del objetivo de este ensayo, remitámonos a un calificativo que es de uso común y a su antítesis: Humano e inhumano. Decimos que alguien es muy humano cuando es sensible o compasivo, piadoso, bienhechor o caritativo y misericordioso; por el contrario, decimos que alguien es inhumano cuando es cruel, desalmado, brutalmente duro, impío, ferozmente agresivo o sanguinario. En conclusión, a partir de nuestra experiencia comunitaria, descubrimos que el hombre es más humano cuando ama y atenta contra su naturaleza no sólo cuando odia sino inclusive cuando deja de amar.
Es cierto que todos tenemos algo de egoístas, pues somos "vasijas de barro" y fácilmente podemos caer en la falsedad y quebrarnos; pero también es cierto que en nuestra propia riqueza personal hay una veta de noble generosidad. Una veta que si la abrimos al otro, nos permitirá descubrir en cada uno una inagotable mina de amor, de acciones y decisiones libres que traerán incontables sonrisas y momentos felices.
Yo creo que el hombre, como imagen y semejanza de Dios, que es amor, ha sido creado por y para el amor, ahí está la grandeza de su dignidad y el sentido de su existencia… La vida humana, nuestra vida, solo tiene sentido en la medida en que ella misma se traduce en amor… en actos responsables de donación a personal a aquellos a quienes libremente elegimos amar… por eso creo que el hombre veraz es más generoso que egoísta, lo malo es que, a veces, no sabe cómo actuar.
"Si la rutina te aplasta,
dile que ya basta
de mediocridad.
Hoy puede ser un gran día
date una oportunidad".
¿Cuáles son tus valores?
Pero, si lo que realiza al hombre es la vivencia del amor en todas sus expresiones (compartir generoso, ayuda solidaria, convivencia fraterna y perdón misericordioso) y destinatarios (amor filial, paterno, materno, conyugal, de amistad, caritas cristiana)… ¿Por qué la gente no lo vive? ¿por qué hay quienes piensan que la vida no tiene sentido o viven sin un sentido en sus vidas?
Lamentablemente los valores que tú o yo pudiéramos tener y que están en sintonía con nuestra dignidad y vocación personal, no siempre coinciden con los valores que encontramos en el lugar donde trabajamos o, más ampliamente, en la sociedad. Pues en una sociedad posmoderna individualista y pragmática, en la que se tiene una frágil convivencia consensuada de individualidades egoístas, los "valores" que imperan son fama, posición económica, físico, moda, raza o estrato social. Así, aunque la empresa u organización en la que trabajemos tenga explícitos en su planificación valores como puntualidad, productividad, atención, liderazgo, servicio, trabajo en equipo, armonía y confianza, al momento de las ganancias monetarias fácilmente se olvidan y trastocan, deshumanizándolos en relaciones automatizadas y utilitaristas.
¿Qué hacer entonces? Ser auténtico, tener convicciones; convicciones que iluminen nuestras decisiones y determinen nuestro modo de actuar. Así, tanto los valores propios de la organización o empresa en la que trabajes, como los valores personales de honestidad, servicio, disciplina, alegría, responsabilidad, puntualidad e integridad, podrán ser una realidad que forje en el amor una sociedad más sólida, justa y solidaria.
"Hoy puede ser un gran día
imposible de recuperar,
un ejemplar único,
no lo dejes escapar".
¿Será posible corregir el rumbo? ¿cómo cambiamos de vía?
Revisando la propia vida, cuando nos damos cuenta de que no todo en ella ha sido constructivo surge la pregunta de si estaremos a tiempo de cambiar, de si no será demasiado tarde… Recuerdo que hace algunos años, una ancianita de 95 años, al ver lo sorprendido de mi mirada al saber su edad, me dijo: "Ay mijito no te sorprendas de los años que uno pueda tener sino de lo que pueda hacer con los años que le quedan por que mientras haya vida, hay esperanza".
Mientras haya vida, hay esperanza… El cambio de vía vendrá en la misma medida en que dejemos de buscar nuestro valor en el tener y en el hacer y, tomando conciencia de lo que somos (hijos de Dios) vivamos más conformes a nuestra naturaleza, es decir, amando.
Porque quien ama es honesto, quien ama es atento, quien ama sirve, quien ama se organiza y respeta el trabajo y tiempo de los demás, etcétera. Si soy verdadero conmigo mismo y con la gente de mi alrededor, amando construiré la comunidad y mejoraré el entorno en que todos nos desarrollamos.
Si como adultos asumimos el compromiso y la responsabilidad de predicar con el ejemplo diario nuestros valores familiares y principios religiosos, tratando de ejercitar los propios talentos y de subsanar en lo posible las debilidades, podremos influir en las nuevas generaciones y motivarlas a retomar los valores fundamentales y trascendentes que les permitan darle sentido a su vida.
El cambio es posible cuando somos congruentes entre lo que pensamos, decimos y hacemos. Cuando nos comprometemos a vivir de acuerdo a nuestras creencias y valores más altos sin importar las críticas hechas por ignorancia o animadversión.
¿Pero, cómo saber si algo es realmente bueno? Contrastándolo con los grandes valores como el Amor, el Bien, la Verdad, la Belleza y la Justicia, tomándolos como referentes. Y si eres creyente, enriqueciendo tu visión con los principios morales de tu religión. Si vivimos así, o por lo menos lo intentamos, vamos a equivocarnos menos, vamos a construir en lugar de destruir y podremos ser factor de cambio en la sociedad de la cual formamos parte.
Verdaderamente Hoy puede ser Un Gran Día en el que viva de acuerdo a mi dignidad y vocación, disfrutando lo bello de la vida y co-creando con Dios para hacer de este mundo más humano, más a su imagen en la semejanza divina que nos da el amor.
"Pelea por lo que quieres
y no desesperes
si algo no anda bien.
Hoy puede ser un gran día
y mañana también".


Hoy puede ser un gran día
(Joan Manuel Serrat)
Hoy puede ser un gran día,
plantéatelo así,
aprovecharlo o que pase de largo,
depende en parte de ti.

Dale el día libre a la experiencia
para comenzar,
y recíbelo como si fuera
fiesta de guardar.

No consientas que se esfume,
asómate y consume
la vida a granel.
Hoy puede ser un gran día,
duro con él.

Hoy puede ser un gran día
donde todo está por descubrir,
si lo empleas como el último
que te toca vivir.

Saca de paseo a tus instintos
y ventílalos al sol
y no dosifiques los placeres;
si puedes, derróchalos.

Si la rutina te aplasta,
dile que ya basta
de mediocridad.
Hoy puede ser un gran día
date una oportunidad.

Hoy puede ser un gran día
imposible de recuperar,
un ejemplar único,
no lo dejes escapar.

Que todo cuanto te rodea
lo han puesto para ti.
No lo mires desde la ventana
y siéntate al festín.

Pelea por lo que quieres
y no desesperes
si algo no anda bien.
Hoy puede ser un gran día
y mañana también.

Hoy puede ser un gran día
duro, duro,
duro con él.


Junto con ésta cita, las demás estrofas transcritas a lo largo del ensayo son de la canción "Hoy puede ser Un Gran Día" de Joan Manuel Serrat que aparece citada en la excelente película "Elsa y Fred", sobre el redescubrimiento del sentido de la vida en la compañía del ser amado.
Hoy puede ser Un Gran Día

11
1
1

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.