ENFOQUE GERENCIAL

ENFOQUE GERENCIAL: Se centra en cómo lograr la motivación y satisfacción de los empleados por la influencia directa del comportamiento de los gerentes, usando la comunicación, el establecimiento de metas y el reconocimiento al lograr las metas. Entender y tener sensibilidad a las características particulares de los empleados es un requisito de un buen gerente que motiva a los empleados a permanecer en las empresas por encima de ciertos aspectos negativos. Los Gerentes deben aplicar a su vez, algunos principios básicos para hacer sentir cómodos a los empleados y ayudarlos a ser productivos.
Para aumentar la motivación los gerentes practican:
Inspirar a los empleados por medio de comunicación uno a uno:
La comunicación efectiva es esencial para el trabajo gerencial. Por medio de la comunicación los gerentes logran motivar a los empleados transmitiendo un sentido de propósito y una misión significativa.
Asegurarse que los empleados tienen metas específicas
Por medio del establecimiento de metas efectivas los gerentes pueden dirigir el desempeño de sus empleados. Las metas efectivas deben ser específicas, difíciles y aceptadas por los empleados.
Las metas específicas pueden ser usadas por los empleados como retroalimentación para determinar que tan bien esta su desempeño y servir para decidir si mantienen los métodos que están usando o deben cambiar el enfoque.
Los empleados deben aceptar las metas como razonables, considerando que estas pueden lograrse y esas deben ser de un grado de dificultad tal que motive al empleado a hacer un esfuerzo extra. Una forma de asegurar que las metas sean aceptadas es involucrar a los empleados en el proceso de fijar las metas. La técnica de administración por objetivos (APO), utiliza este principio. En la APO, el gerente se involucra estrechamente con los empleados en un proceso que comienza con la identificación y concertación de metas, continua con el seguimiento y terminan con la evaluación del desempeño en la consecución de las metas.
A los empleados altamente competentes, previa autorización, se les pude permitir establecer sus propias metas, con lo cual se asegura la aceptación y se logra motivar a los empleados a sentirse capaces de un mayor desempeño.
Con las mismas características que las metas individuales, se deben establecer las metas del equipo, para mejorar el desempeño del grupo. Se recomienda no establecer demasiadas metas de equipo (entre tres y cinco es suficiente) para mantener el grupo concentrado y el equipo debe entender la importancia de lograr como grupo las metas colectivas.
Proporcionar a los empleados elogios, reconocimiento u otras recompensas de modo que se sientan bien por lograr esas metas.
Las recompensas por el logro de metas incrementan la motivación y el desempeño al fortalecer el compromiso de los empleados. Según la teoría del reforzamiento, el comportamiento es una función de sus consecuencias. Las recompensas son consecuencias son positivas y los castigos consecuencias negativas. Debido a que el enfoque del reforzamiento es modificar comportamientos, para mejorar el desempeño, los gerentes deben conocer cuales comportamientos producen mejor desempeño en sus empleados. Para incrementar la frecuencia de un comportamiento se usa el reforzamiento positivo o el reforzamiento negativo. Para disminuir o eliminar comportamientos, se puede usar el castigo o la extinción, siendo la extinción la ausencia de cualquier reforzamiento positivo o castigo.