El regreso de los exiliados republicanos en la Restauración: una doble quiebra vital https://mediakiosque.univ-pau.fr/avc/courseaccess?id=3139

El regreso de los exiliados republicanos en la Restauración: una doble quiebra vital. Eduardo Higueras Castañeda. Universidad de Castilla-La Mancha El político progresista Manuel Ruiz Zorrilla (1833-1895) fue el eje de la oposición violenta a la Restauración monárquica en España. Expulsado del país en febrero de 1875, pasó en el exilio los últimos veinte años de su vida. Desde París, Londres y Ginebra, organizó una red subversiva cuya aspiración era concertar y organizar todas las fuerzas antimonárquicas, tanto del interior de España como las de la emigración, para implantar la República mediante un golpe de fuerza con claro protagonismo militar. La década de 1880 demarcó el apogeo de este “republicanismo revolucionario”, que cristalizó en los movimientos insurreccionales de 1883, 1884 y 1886. Todos ellos resultaron un fracaso, de modo sus implicados se vieron ante la alternativa de la emigración, el presidio o el patíbulo. Varios miles de republicanos —en su mayoría militares y, a menudo, acompañados de sus familias—, cruzaron la frontera para evitar las dos últimas opciones. Ruiz Zorrilla, como jefe político y máximo responsable de dichas intentonas, fue el organizador de las comunidades de exilados republicanos repartidas por Francia, Portugal, Suiza y Argelia. En su archivo privado se conserva un importante fondo documental que permite analizar en profundidad la experiencia de los emigrados políticos durante el exilio, pero también tras el regreso. Cruzar la frontera significó para ellos una ruptura vital brusca y traumática, agravada por la vivencia de una situación de exclusión y escasez. En la mayor parte de los casos, volver a cruzar la frontera no fue más que una segunda quiebra vital. En esa situación, fueron las redes de solidaridad del partido las que les facilitaron trabajo y les procuraron reconocimiento político. De hecho, no fueron pocos los que trataron de rentabilizar su exilio iniciando una carrera en la política republicana. La comunicación, de este modo, persigue explorar y analizar la experiencia de la emigración, el retorno de los que la padecieron así como su compleja readaptación en un nuevo marco vital, en un colectivo demarcado por una identidad política y un origen profesional muy similar. Para ello se cuenta con un abundante fondo documental inédito y con el significativo conjunto de memorias que algunos de ellos publicaron en los últimos años del siglo XIX y los primeros del XX.