El recinto amurallado de Saurecci (Guspini, Cerdeña, Italia): conexión entre minas y mar

Share Embed


Descripción

FORTIFICACIONES EN LA EDAD DEL HIERRO: CONTROL DE LOS RECURSOS Y EL TERRITORIO

Fortificaciones en la Edad del Hierro: Control de los recursos y el territorio. Coordinadores: Óscar Rodríguez Monterrubio, Raquel Portilla Casado, José Carlos Sastre Blanco y Patricia Fuentes Melgar. Organización: Asociación Científico-Cultural Zamora Protohistórica. © de los textos: los autores. © de las ilustraciones: los autores. © Glyphos Publicaciones. Edita: Arbotante Patrimonio e Innovación, S.L. Glyphos Publicaciones. www.glyphos.net 1ª edición, julio de 2015 ISBN: 978-84-944018-6-2 Depósito legal: VA-600-2015 Impreso en España / Printed in Spain Todos los derechos reservados. No está permitida la reproducción, reimpresión, ni utilización por cualquier forma o medio, bien sea electrónico, mecánico, químico o de otro tipo, tanto conocido como los que puedan inventarse, incluyendo el fotocopiado o grabación, ni se permite su almacenamiento en un sistema de información y recuperación, sin el permiso anticipado y por escrito del editor.

Óscar Rodríguez Monterrubio, Raquel Portilla Casado, José Carlos Sastre Blanco y Patricia Fuentes Melgar. (Coordinadores).

Fortificaciones en la Edad del Hierro Control de los recursos y el territorio

Índice Fortificaciones en la Edad del Hierro: Control de los recursos y el territorio. ISBN: 978-84-944018-6-2. Coordinadores: Óscar Rodríguez Monterrubio, Raquel Portilla Casado, José Carlos Sastre Blanco y Patricia Fuentes Melgar.

de la Edad del Hierro: recursos y control del territorio ...................................... 11 Capítulo 1. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en el Norte de la Península Ibérica ............................................................... 13 Estudio preliminar del sistema defensivo del poblado protohistórico de Munoaundi (Azpeitia - Azkoitia, Gipuzkoa, Euskal Herria): entrada principal con sus estructuras defensivas ........................................................................................................................................ 15 del Noroeste .................................................................................................................................... 31 Abierto por inventario: novedades castreñas en la comarca de La Cabrera y Valdería (León) ............................................................................................................................ 51 Avance de resultados de la primera intervención arqueológica en La Peña del Castro (La Ercina, León) ............................................................................................................................ 81 El paisaje protohistórico en el alto Valle del Sil (León)............................................................. 91 El Oppidum de Monte Bernorio, estructura defensiva y proyección territorial.................. 109

Capítulo 2. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en la zona central de la Península Ibérica ............................................................................. 129 La aplicación de métodos geofísicos en la detección de sistemas defensivos vacceos. El caso de Paredes de Nava .......................................................................................................... 131 El Castillejo de Chilla (Candeleda, Ávila): Estudio del Territorio .......................................... 152 Redescubriendo el Picón de la Mora: un poblado y santuario vettón en la ribera del Huebra ........................................................................................................................... 158 Piedras hincadas en el Alto Tajo .................................................................................................. 164 Sistemas defensivos y control del territorio en la Oretania septentrional ............................. 175 Un modelo de control territorial durante la Prehistoria Reciente........................................... 194

Capítulo 3. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en la zona Occidental de la Península Ibérica................................................................................ 207 Da memória à paisagem, da paisagem à memória – o castro S. João das Arribas................ 209 O sistema defensivo do Castelo dos Mouros de Vilarinho dos Galegos (Mogadouro, Nordeste de Portugal), tipologia, faseamento e cronologia ............................ 225 Arquiteturas da II Idade do Ferro. A evolução do sistema defensivo do sítio .............................................................. 242 de um territorio .............................................................................................................................. 277 Território e Domínio, a proto-história como narrativa para fruição da Paisagem ............... 290 As muralhas do Castro de Cidadelhe (Mesão Frio, Portugal)................................................. 299 Muralhas proto-históricas no Alto Côa (Portugal): análise com ferramentas SIG e 3D ...... 307 Las murallas protohistóricas de la villa romana del Alto da Fonte do Milho (Peso da Régua, Portugal) ............................................................................................................. 324

Capítulo 4. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en la zona Oriental de la Península Ibérica ..................................................................................... 339 Los Sistemas defensivos de las ciudades ibéricas del valle medio del Ebro del siglo III al I a. C. Exito y olvido de un modelo tardío ............................................................... 341 tipología e implicaciones............................................................................................................... 361 El caso de Segeda II (Belmonte de Gracián, Zaragoza) ............................................................ 385

La fortaleza ibérica de Sigarra: génesis y diacronía entre la Primera Edad del Hierro y la Antigüedad Tardía (siglos VI a.C. – VI d.C.) ...................................................................... 399

Capítulo 5. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en el Sur de la Península Ibérica......................................................................................................... 409 paramento con compartimentos .................................................................................................. 411 ................................ 424 La poliorcética ibérica en el Sureste peninsular: el área central de la bastetania.................. 432 (Cabra, Córdoba). Resultados preliminares ............................................................................... 441

Capítulo 6. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en la Provincia de Zamora ............................................................................................................. 449 diferencias con los de las Sierras del Teleno y la Cabrera ........................................................ 451 El Castro de Las Labradas (Arrabalde, Zamora): un ejemplo excepcional de la defensa de un territorio ante la amenaza de Roma................................................................... 479

del Hierro ........................................................................................................................................ 499 El Castro de Peñas de la Cerca (Rionegrito de Sanabria): Sistemas defensivos del Noroeste de Zamora y control de los recursos .......................................................................... 506

Estrategias de poblamiento entre la Edad del Hierro y el inicio del dominio romano a través de dos casos del occidente zamorano ............................................................ 520 “Cuesta el Pico” (Castrillo de la Guareña, Zamora). Un asentamiento atípico de la Primera Edad del Hierro al Sur del Duero ....................................................................... 534 La presencia de defensas en los poblados de la cultura del Soto: una evidencia cada vez menos excepcional ......................................................................................................... 547

Capítulo 7. Sistemas defensivos de la Edad del Hierro en Europa y el Norte de África................................................................................................................ 565 El recinto amurallado de Saurecci (Guspini, Cerdeña, Italia): conexión entre minas y mar .................................................................................................................................... 567 Monumentos funerarios Protohistóricos presaharianos en la región de ..................................................................................... 575

de la Edad del Hierro: recursos y control del territorio ...................................... 589

EL RECINTO AMURALLADO DE SAURECCI (GUSPINI, CERDEÑA, ITALIA): CONEXIÓN ENTRE MINAS Y MAR Laura Garau [email protected] Claudia Sanna [email protected] RESUMEN dicho recinto. Está situado en el territorio del municipio de Guspini, en la zona centro-occidental de Cerdeña (Italia), en un área rica en yacimientos de galena para la obtención de plomo, explotados con toda probabilidad desde la época nurágica. La posición de la muralla, situada a 176 m sobre una pequeña colina que domina la vega, hace suponer que controlaba una hipotética vía de conexión entre las minas del interior y el mar. En la denominada “Costa Verde”, cercana al yacimiento, se ha hallado uno de los pocos cargamentos conocidos de material nurágico, procedente de la localidad va en una altura máxima de 5-6 m y está realizada con bloques poliédricos de basalto que presentan cercanos (Bruncu del Bronce Reciente-Final, aunque la frecuentación del asentamiento se remonte a la Edad del Cobre (por la presencia de cerámica tipo Monte Claro) y que continúe durante la Edad del Hierro, debido a su posición estratégica con un destacado control visual sobre el sistema lagunar de Marceddì y el golfo marino contiguo. PALABRAS CLAVE Cerdeña, , Hierro I, arquitectura, relaciones de intercambio. ABSTRACT tral-western area of Sardinia (Italy), which is rich in deposits of lead and galena exploited probably since the Nuragic Age. The position of the 176 m in height wall, located on a small hill overlooking the valley, suggests that it could have controlled a hypothetical route connecting the mines of the interior and the sea. In so-called “Costa Verde” situated near the settlement, there had been found one local lead ingots and votive axes. The wall is preserved by a maximum height of between 5 and 6 m. It was made of basalt polyhedral blocks having dimensions and techniques similar to those used for the construction of nearby the assignment of the wall to the Newly-Final Bronze Age, although the settlement attendance, judging by the presence of Monte Claro ceramic, dates back to the Copper Age and continues during the Iron Age due to its strategic position with an outstanding visual control over the lagoon system of Marceddì and the nearby gulf. KEYWORDS Sardinia, Nuragic, Early Iron Age, Architecture, Exchange Relations.

567

FORTIFICACIONES EN LA EDAD DEL HIERRO: CONTROL DE LOS RECURSOS Y EL TERRITORIO

MARCO GEOGRÁFICO El recinto amurallado de Saurecci se eleva en el territorio del municipio de Guspini administrativamente enmarcado en la provincia del Medio Campidano, en Cerdeña (Fig. 1). Este área se caracteriza por la presencia de una zona minera, Montevecchio, explotada probablemente desde la época nurágica distante sólo 4 km del yacimiento objeto de estudio. EXCURSUS BIBLIOGRÁFICO Las primeras noticias relativas a las evidencias arqueológicas protohistóricas del ayuntamiento de Guspini se remontan a 1641 cuando padre S. Vidal, a propósito de la zona meridio1 . Habrá que esperar hasta el siglo XIX para que se publiquen otras dos importantes obras concernientes el territorio de Guspini y el de Saurecci. La primera es el texto redactado por V. Angius contenido en el “Dizionario geoti di S.M. il Re di Sardegna” de G. Casalis. En el capítulo relativo al ayuntamiento de Guspini enumera 9 :“ ”. El segundo trabajo es de A. La Marmora2 el cual publica la primera planimetría de Saurecci, además de otras relativas a los poprimeros decenios del siglo XX, A. Taramelli3 durante sus investigaciones en el área en torno al de la zona de Guspini, entre los cuales se incluye también a Saurecci. Son de particular interés las consideraciones que el estudioso hace sobre la distribución de los y sus funciones: “Il

LILLIU 1982, p. 490. LA MARMORA 1840, pp. 45, 57, 67, 97, lám. III . VI, I. 3 TARAMELLI 1918, pp. 85-100. Carta de la distribución de los nuraghi 3-4; foto Saurecci pp. 90-91.

. Esta distribución respondería a la explotación, durante la época nurágica, de la cercana área minera y los , ubicados en puntos estratégicos, serían las “ . Desde la mitad del mismo siglo, el territorio de Guspini ha sido objeto de numerosas prospecciones arqueológicas realizadas por G. Lilliu y algunos de sus estudiantes entre los cuales destacamos a C. Puxeddu4. Este último publicó un estudio exhaustivo sobre el territorio de la diócesis de Ales, sobretodo por lo que concierne a época prenurágica y romana. En el mismo volumen se incluye el importante trabajo de G. Lilliu en el cual se individualizan, sólo en el ayuntamiento de Guspini, veintisiete monotorres, mientras Saurecci es catalogado como “ ”5. En otras publicaciones el investigador vuelve a ocuparse de esta muralla llegando a datarla en el Eneolítico en comparación con las murallas del Midi francés y del Hérault6. Siguiendo esta línea interpretativa R. Zucca considera probable la tesis de G. Lilliu y su asociación no sólo con el sur de Francia sino también con los castra de Portugal7. Otro importante punto de referencia para la investigación de los yacimientos del entorno es la Tesis Doctoral de B. Koberstein (1993) que ha combinado las prospecciones arqueológicas con la realización de planimetrías de algunos valido de la guía de un óptimo conocedor de la zona, T. Agus, autor sobre todo de 8 de la importancia de esta área minera desde la época nurágica. A este propósito es de gran interés la noticia del hallazgo de un ajuar funerario asociado a cerámicas de la Edad del Hierro y de un molde de fundición de estea-

PUXEDDU en AA.VV. 1975, pp. 69- 132. LILLIU en AA. VV. 1975, p. 144, n. 37. 6 LILLIU 1988. 7 ZUCCA 1987, pp. 43-50. 8 AGUS 1990, pp. 447-455.

1

4

2

5

568

EL RECINTO AMURALLADO DE SAURECCI

tita, además de algunos lingotes en la zona de Arcuentu, materiales casi todos inéditos. Relevantes para el conocimiento del territorio de Guspini han sido también las publicaciones de G. Ugas. El autor enmarca el asentamiento de Saurecci entre los poblados del Eneolítico de la Cultura de Monte Claro, mientras fecha la muralla en el Bronce Final, interpretándola por lo tanto como un antemuro de un polilobulado9. Otro investigador, E. Contu10, a propósito de la misma muralla no tiene duda De opinión contraria L. Foddai11 que en una reciente publicación, aunque describa el los12 englobado en el recinto amurallado de la estructura, asocia la construcción de la muralla de Saurecci a la Cultura Monte Claro comparándola con las murallas de Monte Ossoni y Monte Baranta. Los últimos en orden cronológico en haberse ocupado de la estructura son A. Vanzetti et alii (2014)13 que sostienen la hipótesis que la muralla esté desprovista de un central. Resumiendo, la investigación sobre Saurecci se divide en dos asignaciones cronológicas contrapuestas: la primera considera la estructura comparable a las murallas Monte Claro, es decir del Eneolítico, mientras la seépoca nurágica. Las autoras están de acuerdo con la hipótesis de una frecuentación del yacimiento ya desde el Eneolítico, pero consideran que al Bronce Final. Las principales motivaciones en la base de nuestro planteamientos son dos: las características de la estructura muraria y la comparación formal con los cercanos.

UGAS 1998, pp. 513-548. CONTU 1997, p. 523. 11 FODDAI en AA.VV. 2011, pp. 45-46. 12 De hecho la presencia de una tholos excluye la comparación con estas murallas en cuanto se trata de una técnica edilicia desconocida en la Edad del Cobre. 13 VANZETTI et alii 2014, p. 13. 9

10

DESCRIPCIÓN DE LA MURALLA Saurecci es un recinto amurallado romboidal que se extiende en un área de 32x63 m. Está formado por cuatro torres que cierran los cuatro lados (Fig. 2). El alzado se conserva en 5-6 m hacia el N-NE aunque sean numerosos los derrumbes causados sobre todo por la vegetación y el estado de abandono. La estructura muraria está realizada con bloques poliédricos de basalto, técnica asimilable a la utilizada en la construcción de los las cuatro torres mencionadas, la que está al NE (torre A) es la mejor conservada: se accede desde el exterior y en su interior se aprecia la cubierta en casi totalmente integra. El diámetro externo de la torre es de 8 m con 14 hiladas. El acceso se abre en el lado S del lienzo, con una entrada arquitrabada cuadrangular –de 0,94x0,93x0,95 m– encima de la cual hay una “abertura de descarga” también de forma cuadrangular -0,4x0,4 m-. A la cámara se accede mediante un pasillo de 1,6 m de largo y 0,8 m de ancho. La altura de la cámara es de 4,5 m con 10 hiladas, mientras la cubierta en tiene un diámetro máximo de 4,5 m. En la pared opuesta al acceso se observa un nicho de forma ojival que mide 0,96x 0,93x 0,95 m. A la falsa cúpula falta sólo el último sillar de cobertura y está realizada con la técnica típica de los de la zona: la yuxtaposición de bloques de basalto con una argamasa de mortero de barro (todavía visible en diferentes puntos) y numerosísimas cuñas o sistema de enripiado. El lienzo que conecta esta torre A con la torre D es de 22 m de longitud y tiene una altura de 3,5 m con 7-8 hiladas con un desprendimiento de aproximadamente 6 m de largo, donde se aprecian derrumbes. Entre la torre D, de 9,2 m de diámetro, y la torre C, de 7,2 m, el paño se conserva prácticamente ininterrumpido: mide 27 m, tiene una altura de 3 m para 6 hiladas y engloba la torre la torre B, esta última más alta con respecto a la anterior, se conectan por medio de un lien569

FORTIFICACIONES EN LA EDAD DEL HIERRO: CONTROL DE LOS RECURSOS Y EL TERRITORIO

zo de 18 m de longitud donde son visibles abundantes derrumbes. en correspondencia con la torre A, que dista desde la torre B aproximadamente 14 m, mientras en los otros casos las torres están comprendidas en el interior del lienzo y se vilíneo de la muralla. Las características de la estructura, la dimensión de los sillares y la presencia de numerosas ménsulas en el suelo hacen suponer que esta muralla tenía un pasillo superior como se observa en los antemurales de los otros complejos nurágicos de Cerdeña, en coincidencia con la implementación de la función defensiva de este monumento. Por ende debemos imaginar que el aspecto originario del conjunto de muralla y torres fuera francamente similar a las del Nuraghe Losa, o Santu Antine, o del cercano Nuraghe Cuccurada, con muros macizos coronados por caminos de ronda. Las autoras, tras una minuciosa observaque fuera construida de manera unitaria: de hecho la continuidad del paño murario y la de la misma sustentan esta teoría. Lamentablemente, la presencia de una densa vegetación no permite comprobar la existencia de eventuales estructuras contenidas en el interior del recinto murado, pero es más que probable que las haya –presumiblemente una torre principal y un bastión con torres- como sugiere la presencia de numerosas piedras de derrumbe. COMPARACIÓN CON LOS ASENTAMIENTOS DEL ENTORNO La posición del recinto amurallado, situada a 176 m sobre un cerro que domina el valle del entorno y controla visualmente la laguna de Marceddì y la llanura de Sanluri, nos lleva a proponer la existencia de una hipotética ruta de conexión entre la mina de Montevecchio y la Costa Verde, sobre la cual Saurecci ten570

dría el control. Esta ruta podría seguir, en el primer tramo, el cauce del río Montevecchio, que nace en Montevecchio para desembocar en la laguna de Santa Maria, y continuar por un trazado similar al de la actual carretera SP 65. En apoyo de esta hipótesis está la disposición de diferentes , sobre todo de tipo complejo, colocados en puntos estratégicos para el control de la ruta (Fig. 3). Los localizados a lo largo de la vía, desde el un cuadrilobulado, ceñido por un macizo antemural formado por seis torres y construido con grandes sillares de basalto; Nuraghe Nureci, monotorre situado a 278 m trilobulado, realizado con piedras de traquita local, estructura muraria de tipo poliédrico y utilización de cuñas; Nuraghe Crabili, cuadrilobulado realizado con hiladas irregulares de piedras de basalto escasamente retocadas y reforzadas con numerosas cuñas; Nuraghe Baccas y Nuraghe Altea, dos de tipo complejo con el poblado anexo situados en los lados opuestos de la hipotética vía de penetración; otro, el Nuraghe Ois, monotorre con antemural en las cercanías de Neapolis y al piedemonte del Monte Ois; el asentamiento nurágico de Neapolis; el de tipo complejo de Punta Sa Rana que si asoma a la laguna de Marceddì; el monotorre Frucca que corona el pueblo de S. Antonio de Santadi y desde el que se disfruta de una amplia panorámica del golfo de Oristano en los días de cielo despejado. Este sistema de control capilar del territorio hasta llegar al mar se completa con otros dos actualmente incluidos en el interior del cuartel militar de Capo Frasca. La intensa antropización del territorio y la construcción de antemural con torres, nos hacen comprender que el yacimiento objeto de estudio no debe ser considerado un aislado, sino más bien parte de un sistema orgánico, funcional que presenta una técnica constructiva empleada. De hecho, las características de la estructura y la dimensión de los sillares de la muralla de Saurecci y de

EL RECINTO AMURALLADO DE SAURECCI

la única torre accesible son totalmente similares a las de los monumentos arriba descritos: todos construidos con piedra local (predominantemente basalto), en obra poliédrica con numerosísimas cuñas o enripiadas. En algunos casos, al interior de las torres han quedado rastros de mortero de barro utilizado para rejuntar los bloques (véase como ejemplo el Nuraghe Melas- situado a 2 km a NE de Saurecci en comparación con este mismo yacimiento en las Figs. 4 y 5). Una última prueba de las similitudes entre Saurecci y las estructuras de la zona es la comparación entre la estructura de la torre principal del Nuraghe Melas y la torre A: ambas están precedidas por un acceso abocinado hacia la cámara y presentan grandes nichos ojivales que se abren en la pared opuesta respecto a la entrada, características comunes a casi todas las torres nurágicas. Con estas comparaciones queremos demostrar la inconsistencia de la asimilación de la muralla de Saurecci con las del Calcolítico como Monte Ossoni14 y Monte Baranta15. No obstante, no podemos excluir que las estructuras nurágicas se superpongan a un anterior asentamiento de la Edad del Cobre, aunque hasta la actualidad no se hayan encontrado estructuras que validen dicha hipótesis, teniendo en cuenta que nunca se ha intervenido arqueológicamente en este yacimiento. Finalmente el hallazgo de materiales nológico que va desde el Eneolítico hasta la milenaria de Saurecci. LOS MATERIALES CERÁMICOS En este apartado se analizan las cerámicas pertenecientes probablemente a la última fase de utilización del recinto amurallado: la Edad del Hierro. De hecho, aunque en super-

cerámica común fechables en el Bronce Pleno y Reciente, el descubrimiento de fragmentos ma nuestra propuesta de una frecuentación continuada del lugar hasta, por lo menos, a centrarnos en el estudio de dos fragmentos decorados de asa pertenecientes a dos ejemplares de jarra askoide. Ambos presentan dos “apéndices” laterales opuestos y dos composiciones decorativas parcialmente distintas. En el primer fragmento los dos apéndices están situadas en la parte central del asa, mientras la rica decoración, formada por un motivo en zig-zag realizado con impresiones y una hilera horizontal de círculos concéntricos situados en los picos del zig-zag, todo ello enmarcado por tres líneas de impresiones, se articula en el arranque inferior del asa (Fig. 6, a). El segundo fragmento también de asa tiene los dos apéndices dispuestos en la parte media del asa y presenta una decoración más rosas líneas realizadas con peine y dispuestas diagonalmente resaltan los círculos concéntricos alineados verticalmente a lo largo de la zona media del asa; también se aprecia una perforación levemente descentralizada con respecto a la alineación de círculos decorativos (Fig. 6, b). El arranque del asa presenta motivos decorativos similares a los del primer fragmento, es decir una alineación de círculos concéntricos de pequeñas dimensiones enmarcada por líneas paralelas. Para los dos fragmentos existen numerosas comparaciones posibles procedentes del ámbito isleño16, pero el parangón más cercano es seguramente con el material de la UE 12 de Is Olbias (Monte Zara, Monastir, Cagliari)17. En este yacimiento, excavado en 2011-2012, han salido a la luz materiales de diferentes fases arqueológicas y en particular en la UE 12 se ha hallado un conjunto de materiales nurág-

SEBIS 1995, pp. 89-110; CAMPUS y LEONELLI 2000, pp. 392-418, 646-679. 17 FARCI y MORITTU 2013, pp. 104-138. 16

MORAVETTI 2001, pp. 22-30. 15 MORAVETTI 2004. 14

571

FORTIFICACIONES EN LA EDAD DEL HIERRO: CONTROL DE LOS RECURSOS Y EL TERRITORIO

icos datados entre el siglo IX y el VIII a.C. La abundancia de fragmentos encontrados y la riqueza y variedad de motivos decorativos permiten comparar este material con las dos asas objeto de estudio. Se observan sobre todo motivos formados por círculos concéntricos entre líneas de impresiones18 y composiciones de círculos con líneas oblicuas19. En cambio, por lo que concierne al motivo en espina de pez o diseño romboidal del segundo fragmento es posible encontrar alguna comparación con jarras askoides procedentes de “Su Nuraxi” (Barumini, Medio Campidano)20. La perforación de la segunpara colgar la jarra por medio de una cuerdecita, tiene un paralelo muy próximo en un fragmento hallado en la localidad Is Crus (Villaspeciosa, Cagliari)21, aunque este no muestre ninguna decoración. Pese a que las comparaciones más estrictas con el asa analizada presenten las perforacioeran practicados en la zona superior, en posición más funcional, como en el caso del asa de Cuccureddus hallada en la estancia b22. Finalmente, el conjunto de paralelos encontrado, nos permiten plantear la adscripción cronológica de estos dos fragmentos a la primera edad del Hierro. CONCLUSIONES En este trabajo hemos planteado la problemática del recinto amurallado de Saurecci, en el cual está inmerso. El análisis de la técnica constructiva de la muralla y la comparación con los cercanos, unidos a la observación de numerosos restos de cerámicas dispersos de la adscripción de esta estructura a la época nurágica. Además, la larga frecuentación del

yacimiento, desde el Calcolítico a la Edad del Hierro, está sustentada en los materiales observados durante las numerosas prospecciones. Desafortunadamente hasta ahora no tenemos indicios directos de la explotación de la mina de Montevecchio durante la época nurágica, pero en la cercanía del asentamiento en la localidad 23 situada en la llamada “Costa Verde”, se ha hallado una de las pocas cargas navales de material nurágico tardío, formado por lingotes de plomo local y hachas votivas. Este importantísimo cargamento, que es en este momento objeto de un estudio llevado a cabo por la Dra. Ardu y una de las dos autoras la Dra. Garau, está constituido por 89 objetos metálicos, la mayor parte plúmbeos, de los cuales por lo menos 5 presentan decoraciones -en espina de pez, incisiones- del todo asimilables a las halladas en la cerámica coetánea. En particular la doble hacha en miniatura custodiada en el museo de Sardara (Medio Campidano), morfológicamente similar a otros restos materiales procedentes del pecio aunque no decorados, presenta una temática decorativa semejante a los motivos impresos del segundo fragmento de asa arriba descrito. Estas similitudes unidas a las huellas de actividades de metalurgia halladas en Saurecci -molde para doble hacha, escoyacimiento a la mina de Montevecchio, además de su localización con funciones de control de la vía de acceso a la costa nos hacen proponer la hipótesis que este yacimiento jugó un rol fundamental en la transformación y distribución de metales hasta la edad del Hierro. Este papel de propuestas, que son por el momento sólo hipótesis, sería oportuno efectuar unas campañas de excavación en Saurecci y contextualmente continuar con el estudio de los materiales proeste modo se alcanzarían dos objetivos: precisar el marco cronológico de los dos contextos y pre-

18 19

Ibídem Ibídem

20 21 22

CAMPUS y LEONELLI 2000, pp. 634-676, lám. 676, n. 1. Ibídem, pp. 621-664, lám. 368, n. 2.

572

23

TOCCO 2009, pp. 121-135.

EL RECINTO AMURALLADO DE SAURECCI

573

FORTIFICACIONES EN LA EDAD DEL HIERRO: CONTROL DE LOS RECURSOS Y EL TERRITORIO

BIBLIOGRAFÍA AA. VV.: La diocesi di Ales- Usellus –Terralba. Aspetti e valori. Editrice sarda Fossataro, Cagliari: 1975, pp. 69- 132, 144. Nuova Sardegna, Sassari: 2011, vol. IV, pp. 4546.

co, storico, statistico, commerciale degli Stati di Sua Maestà il Re di Sardegna, I-XXVIII. G. Maspero, Torino: 1833-1856. E. ATZENI, R. CICILLONI, G. RAGUCCI y E. USAI: Il complesso megalitico pre-protostorico di Cuccurada- Mogoro (OR). Aspetti del Dolianova: 2001, pp. 31-35. F. CAMPUS y V. LEONELLI: La tipologia della ceramica nuragica. Il materiale edito. BetaGamma, Viterbo: 2000. E. CONTU: La Sardegna preistorica e nuragica. Chiarella, Sassari: 1997. Is sul versante orientale di Monte Zara-Monastir-Cagliari. Prima campagna 2011–2012”. Quaderni della Soprintendenza per i Beni Archeologici per le province di Cagliari e Oristano, Vol. 24 (2013), pp. 104-138. A. B. KOBERSTEIN: Die fundlandschaft Guspini, Provinz Cagliari, Sardinien. Archäologische Studien in Südwestsardinien mit einer Einführung zur sardischen Vorgeschichte, Tesis doctoral inédita de la Universidad de Freiburg. Köln: 1993. A. LA MARMORA: Voyage en Sardaigne ou description statistique, physique et politique de cette ile avec des recherches sur ses productions naturelles et ses antiquités, II partie (antiquités). Arthus Bertrand libraire, Parigi: 1840 (edición italiana traducida por V. Martelli, Cagliari: 1926-28). tore, Sassari: 1982. G. LILLIU: La civiltà dei Sardi dal Paleolitico

della Sardegna preistorica. Aspetti del megalinova: 2001, pp. 22-30.

574

A. MORAVETTI: Monte Baranta e la cultura di Monte Claro. Sardegna Archeologica - Scavi e S. SEBIS: “Materiali dal villaggio nuragico di Su Cungiau ‘e Funtà nel territorio di Nuraxinieddu”, Quaderni della Soprintendenza per i Beni Archeologici per le province di Cagliari e Oristano, Vol. 11 (1995), pp. 89-110. A. TARAMELLI: “Il tempio nuragico di S. Anastasia”. Monumenti Antichi dei Lincei, Vol. XXV, L. TOCCO: “Il giacimento subacqueo del Rio vigazione in età nuragica”. Tharros Felix, Vol. 3 (2009), pp. 121-135.

Romana, Vol. XII (1998), pp. 513-548. A. VANZETTI, G. D. CASTANGIA, A. DEPALMAS, N. IALONGO, V. LEONELLI, M. PERRA gna e delle isole del Mediterraneo occidentale nella protostoria. Mura di legno, mura di terra, antico”. Atti del Convegno Internazionale Sapienza Università di Roma (7-9 maggio 2012), (2014), pp. 83-123. Oristano: 1987.

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.