EL MATERIAL LÍTICO DE AZUL PAMPA (HUMAHUACA, JUJUY, ARGENTINA) DURANTE EL BLOQUE TEMPORAL 3000-1000 AP. MOVILIDAD E INTERACCIÓN. En Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología XL 2, Buenos Aires, versiones impresa y online 2015.

Share Embed


Descripción

ISSN 0325-2221 (versión impresa) ISSN 1852-1479 (versión online)

TOMO XL (2) julio-diciembre 2015 Buenos Aires

COMISIÓN DIRECTIVA SOCIEDAD ARGENTINA DE ANTROPOLOGÍA 2014-2015 Presidenta: Mónica Berón Secretaria: Fabiana Bugliani

Tesorera: Mara Basile

Primer vocal titular: Carlos Zanolli

Segundo vocal titular: Verónica Lema

Primer vocal suplente: Juan Engelman

Revisores de cuentas: Darío Hermo Laura Miotti

Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología está incluida en los siguientes índices, catálogos y repositorios - Latindex Catálogo Folio 7380 (Nivel Superior de Excelencia) - Dialnet CIRC: Clasiicación Integrada de Revistas Cientíicas Gru”“ C - Catálogo Red de Bibliotecas Universitarias (REBIUN) - Handbook of Latin American Studies (HLAS) - Naturalis, Facultad Ciencias Naturales y Museo (FCNyM), Universidad Nacional de La Plata - SeDiCi, Universidad Nacional de La Plata - Catálogo Biblioteca Universitaria CSIC 000784889 - DOAJ (Directory Open Access Journal) - Anthropological Literature, Harvard - CLASE, UNAM - EBSCO-HOST Database - Directory Indexing of International Research Journals (CiteFactor) - Núcle“ Básic“ de Revistas Cientíicas Argentinas. CAICYT- CONICET. Relaciones es una publicación semestral editada por la Sociedad Argentina de Antropología (SAA) para difundir la investigación en Ciencias Antr“”“lógicas de la Re”ública Argentina y el C“n“ Sur. Se ”r“”“ne difundir a nivel académico amplio los resultados de investigaciones o sus distintos grados de avance, favorecer la discusión entre los autores y mantener actualizados a los miembros de la SAA en los temas de su incumbencia. Publica artícul“s “riginales de investigación básica y a”licada, n“tas, entrevistas, c“mentari“s, reseñas y obituarios de autores argentinos y extranjeros sobre Arqueología, Antropología Social, Antropología Bi“lógica, Etn“grafía y Etn“hist“ria. Los artículos son revisados por un Comité Editorial y evaluados por, al menos, dos especialistas nacionales y/“ extranjer“s. L“s artícul“s, n“tas y reseñas que se ”r“”“ngan ”ara su ”ublicación deberán ser “riginales y no haber sido publicados previamente en ninguna de sus versiones y no estar simultáneamente propuestos ”ara tal in en “tra revista. L“s aut“res irmantes s“n res”“nsables del c“ntenid“ de sus escrit“s, de adecuar sus trabajos a nuestra guía estilística, de la exactitud de los datos consignados, de la correcta atribución de las citas y referencias bibli“gráicas, de l“s derech“s legales ”“r la ”ublicación del material enviad“ y del a”r“”iad“ manej“ y tratamient“ de las cuesti“nes relaci“nadas c“n la c“aut“ría. La revista Relaciones requiere a los autores que concedan la propiedad de sus derechos de autor para que sus artículos, notas y reseñas sean reproducidos, publicados, editados, comunicados y transmitidos públicamente en cualquier forma o medio así como su distribución en el número de ejemplares que se requieran y su comunicación pública en cada una de sus modalidades, incluida su puesta a disposición del público a través de medios electrónicos o de “tra tecn“l“gía ”ara ines exclusivamente cientíic“s, culturales, de difusión y sin ines de lucr“. DNDA 5071710 Es propiedad de la Sociedad Argentina de Antropología Moreno 350, 1091, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina Teléfono: 54(11) 4345-8196/7 C“rre“ electrónic“: s“ciedadargentinaantr“”“l“gia@yah““.c“m s“ciedadargentinaantr“”“l“[email protected]“m Página web: htt”://www.saantr“”“l“gia.“rg.ar/relaci“nes“nline.htm C“rre“ electrónic“ de Relaci“nes: relaci“[email protected]“m Hech“ el de”ósit“ que marca la ley 11.723 Impreso en la Argentina

Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología Directora Mónica Berón: CONICET, Muse“ Etn“gráic“ Juan B. Ambr“setti , Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. FACSO, UNICEN. Editora responsable Anabel Feely: Muse“ Etn“gráic“ Juan B. Ambr“setti , Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. Comité editorial revista Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología Tomo XL (2015) Valeria Cortegoso: investigad“ra del CONICET y d“cente de la Universidad Naci“nal de Cuy“, Argentina. Nora Viviana Franco: investigad“ra del CONICET, Institut“ Multdisci”linari“ de Hist“ria y Ciencias Humanas (IMHICIHU); ”r“fes“ra de la Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina. Paula N. González: investigad“ra del CONICET, Institut“ de Genética Veterinaria, Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad Naci“nal de La Plata (UNLP)-Centr“ Cientíic“ Tecn“lógic“, La Plata, y d“cente de la Facultad de Ciencias Naturales y Muse“, Universidad Naci“nal de La Plata, Argentina. Leandro Luna: investigad“r del CONICET, Muse“ Etn“gráic“ Juan Bautista Ambr“setti , Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina. Jorge Martínez: investigad“r CONICET, Institut“ Su”eri“r de Estudi“s S“ciales, Institut“ de Arque“l“gía y Muse“, Universidad Naci“nal de Tucumán. Valeria Palamarczuk: investigad“ra del CONICET, Muse“ Etn“gráic“ Juan B. Ambr“setti , Facultad Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, y d“cente de la Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina. Claudio Revuelta: miembr“ de Muse“ de Ciencias Antr“”“lógicas y Naturales, Universidad Naci“nal de La Ri“ja y de la Escuela de Desarr“ll“ L“cal y Turism“, Universidad Naci“nal de Chilecit“. Florencia C. Tola: investigad“ra del CONICET, d“cente de la Universidad de Buen“s Aires, Argentina; investigad“ra as“ciada al Centre Enseignement et Recherche en Ethnologie Amérindienne du Laboratoire d’Ethnologie et de Sociologie Comparative (Université Paris Ouest Nanterre La Défense et Centre National de la Recherche Scientiique), Francia. C“rrección de estil“: Anabel Feely. Diagramación: Beatriz Bellelli.

Evaluadores Relaciones XL (2) Mara Basile, CONICET, Muse“ Etn“gráic“ Juan B. Ambr“setti , Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina; Carlos R. Belotti López de Medina, Muse“ Etn“gráic“ Juan B. Ambr“setti , Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina; María Gabriela Chaparro, INCUAPA (CONICET - UNICEN), Facultad de Ciencias S“ciales, Universidad Naci“nal del Centr“ de la Pr“vincia de Buen“s Aires, Argentina; Luis Vicente Javier Coll, Muse“ Etn“gráic“ Juan B. Ambr“setti , Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires; Pablo Cruz, CONICET - Institut“ Interdisci”linari“ de Tilcara, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina; Rafael Pedro Curtoni, UE INCUAPA-CONICET, Facultad de Ciencias S“ciales, Universidad Naci“nal del Centr“ de la Pr“vincia de Buen“s Aires, Argentina; María Pía Falchi, Institut“ Naci“nal de Antr“”“l“gía y Pensamient“ Latin“american“, Argentina; Rodolphe Hoguin, CONICET - Institut“ de Arque“l“gía, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina; Carlos Masotta, CONICET, Universidad de Buen“s Aires, Facultad Latin“americana de Ciencias S“ciales, Argentina; Reinaldo Andrés Moralejo, CONICET, División Arque“l“gía, Muse“ de La Plata, Facultad de Ciencias Naturales y Muse“, Universidad Naci“nal de La Plata; Mariano Nagy, Institut“ de Ciencias Antr“”“lógicas, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina; Gustavo Neme, IANIGLA-CONICET- Muse“ de Hist“ria Natural de San Rafael, Argentina; María Lelia Pochettino, Lab“rat“ri“ de Etn“b“tánica y B“tánica A”licada, Facultad de Ciencias Naturales y Muse“, Universidad Naci“nal de La Plata, Argentina; Marcos Quesada, Centr“ de Investigación y Transferencia Catamarca (CONICET - Universidad Naci“nal de Catamarca) y Escuela de Arque“l“gía, Universidad Naci“nal de Catamarca, Argentina; Recalde Andrea, CONICET, Área de Arque“l“gía del Centr“ de Estudi“s Históric“s Pr“f. S. A. Segreti . Universidad Naci“nal de Córd“ba, Argentina; Natalia Carden, CONICET - Facultad de Ciencias S“ciales (UNCPBA); Federico Restifo, CONICET - Institut“ de Arque“l“gía, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina; María Amalia Zaburlín, Centro regional de estudios de arqueología, Facultad de Humanidades y Ciencias S“ciales, Universidad Naci“nal de Jujuy, Argentina.

RELACIONES ha sido caliicada con el Nivel Superior de Excelencia por el CAICYT-CONICET. LATINDEX Registro Nº 7380. Integra el Núcleo Básico de Revistas del CAICyT, Res. 2485. El ”resente T“m“ XL (1 y 2) de Relaci“nes ha sid“ realizad“ gracias a las c“ntribuci“nes de l“s s“ci“s.

362

Comité Asesor Cientíico Carlos A. Aschero Investigad“r Su”eri“r del C“nsej“ Naci“nal de Investigaci“nes Cientíicas y Técnicas, Vicedirect“r del Institut“ Su”eri“r de Estudi“s S“ciales (ISES), CONICET; Pr“fes“r Titular Facultad de Ciencias Naturales e Institut“ Miguel Lill“, Universidad Naci“nal de Tucumán. Argentina. Francisco Raúl Carnese Pr“fes“r C“nsult“ Facultad Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires; Direct“r Sección Antr“”“l“gía Bi“lógica del Institut“ de Ciencias Antr“”“lógicas de la Facultad Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina. Isabelle Combès Investigad“ra as“ciada c“n el Institut“ Francés de Estudi“s Andin“s (UMIFRE nº 17/CNRS-MAE) Pr“fes“ra del Pr“grama de P“st Grad“ en Hist“ria de la Universidade Federal da Grande D“urad“s (Mat“ Gr“ss“ d“ Sul, Brasil) Miembr“ del Taller de Estudi“s e Investigaci“nes Andin“-Amazónic“s (TEIAA) de la Universitat de Barcel“na, Es”aña. Jean-Pierre Chaumeil Direct“r de investigación en el CNRS y miembr“ del Centr“ EREA del Lab“rat“ire d’Ethn“l“gie et de S“ci“l“gie C“m”arative-LESC (UMR 7186: Université Paris Ouest Nanterre La Défense-CNRS). Felipe Criado-Boado Pr“fes“r de investigación del CSIC, Institut“ de Ciencias del Patrim“ni“ (Inci”it), C“nsej“ Su”eri“r de Investigaci“nes Cientíicas (CSIC). Es”aña. Tom D. Dillehay Rebecca Webb Wils“n University Distinguished Pr“fess“r “f Anthr“”“l“gy, Religi“n, and Culture and Pr“fess“r “f Anthr“”“l“gy and Latin American Studies, De”artment “f Anthr“”“l“gy Vanderbilt University, Nashville, TN, Estad“s Unid“s. Ana María Lorandi Investigad“ra Su”eri“r de C“nsej“ Naci“nal de Investigaci“nes Cientíicas y Técnicas (CONICET) Pr“fes“ra Facultad Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina. Jefa Sección Etn“hist“ria, Institut“ Ciencias Antr“”“lógicas, Facultad Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina. Manuel Francisco Mena Larrain Investigad“r residente, C““rdinad“r Prehist“ria y Antr“”“l“gía, Centr“ de Investigación en Ec“sistemas de la Patag“nia (CIEP), C“yhaique, Chile. Adriana Piscitelli Investigad“ra nivel A en el Núcle“ de Estud“s de Géner“ PAGU de la Universidade Estadual de Cam”inas/ Unicam”. Pr“fes“ra del De”artament“ de Antr“”“l“gía y el D“ct“rad“ en Ciencias S“ciales de la misma universidad. Investigad“ra nivel 1D del CNPq (C“nselh“ Naci“nal de Desenv“lviment“ Cientíic“ e Tecn“lógic“, Brasil), Brasil. Tristan Platt Chair in Anthropology and History, Centre for Amerindian, Caribbean and Latin American Studies De”artment “f S“cial Anthr“”“l“gy, Sch““l “f Phil“s“”hical, Anthr“”“l“gical and Film Studies Faculty “f Arts, University “f St Andrews, St Andrews, Esc“cia, Rein“ Unid“. Sandra Alejandra Siffredi Investigad“ra C“nsej“ Naci“nal de Investigaci“nes Cientíicas y Técnicas, Pr“fes“ra Facultad Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires, Argentina.

Alexandre Surrallés Directeur de Recherche, Centre Nati“nal de la Recherche Scientiique, Lab“rat“ire d’anthr“”“l“gie s“ciale, C“llège de France. Paris, Francia. John Verano Pr“fess“r De”artment “f Anthr“”“l“gy, Tulane University, LA y Ass“ciate Edit“r Internati“nal J“urnal “f Pale“”ath“l“gy.

ISSN 0325-2221 (versión impresa) – ISSN 1852-1479 (versión online) Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología XL (2), julio-diciembre 2015

ÍNDICE Tomo XL (2) TABLE OF CONTENTS

ARTÍCULOS Propuestas aproximativas hacia una síntesis de la ocupación humana de la puna de Salta Approximate proposals towards a human occupation synthesis of the Puna of Salta Pablo Mignone ................................................................................................................. 367-393 El material lítico de Azul Pampa (Humahuaca, Jujuy, Argentina) durante el bloque temporal 3000-1000 AP. Movilidad e interacción The lithic materials of Azul Pampa (Humahuaca, Jujuy, Argentina) during the 3000-1000 BP period. Mobility and interaction Lidia Clara García ......................................................................................................... 395-423 Nuevos aportes para la caracterización de terrazas de cultivo del primer milenio d.C. en el valle de Ambato (Andes del sur, Catamarca, Argentina) mediante el análisis de microrrestos New contributions to agricultural terraces features from the irst millennium A.D. in the Ambato Valley (Southern Andes, Catamarca, Argentina) by microremain analysis Alejandro F. Zucol, María de los Milagros Colobig y Germán G. Figueroa ................ 425-454 Tiempos, cuevas y pinturas. Relexiones sobre la policronía del arte rupestre de Oyola (provincia de Catamarca, Argentina) Time, caves and paints. Relections about the polychrony of the rock art of Oyola (Catamarca Province, Argentina) Marcos Quesada y Lucas Gheco .................................................................................... 455-476 Moviéndose con el paisaje: una propuesta metodológica desde el valle Balcosna, Catamarca Moving with the landscape, methodological proposal from the Balcosna Valley, Catamarca Emilio Villafañez, Ezequiel Fonseca, Gabriel Acuña y Hugo Puentes .......................... 477-500 En las supericies del presente. Disquisiciones sobre el método de excavación arqueológica In the surfaces of the present. Disquisitions on the method of archaeological excavation Leandro D’Amore ........................................................................................................... 501-522 Representaciones en contexto. Características del paisaje rupestre de Cerro Colorado (Sierras del Norte, Córdoba, Argentina) Representations in context. Characteristics of rock art of Cerro Colorado (Sierras del Norte, Córdoba, Argentina) Andrea Recalde ............................................................................................................... 523-548 365

Arque“l“gía en el área de Valles Transversales (”r“vincia de La Pam”a, Argentina). Caracterización y tendencias de l“s c“njunt“s arque“lógic“s. Im”licancias s“ciales en la c“nstrucción del ”aisaje Archaeology in the Valles Transversales area (Province of La Pampa, Argentina). Characteristics and trends of archaeological record. Social implications in the construction of landscape Mónica Berón, Manuel Carrera Aizpitarte y Florencia Páez ........................................ 549-587 Hachas grabadas, ”lacas grabadas y c“municación visual su”rarregi“nal entre gru”“s cazad“res-rec“lect“res de inales del H“l“cen“ tardí“ Engraved axes, engraved plaques and supraregional visual communication among Late Holocene hunter-gatherer groups Agustín Acevedo .............................................................................................................. 589-620 Pr“ces“s de c“ntact“ en las f“t“grafías de ma”uches y tehuelches en Patag“nia a ines del sigl“ XIX y c“mienz“s del XX Contact processes in the photographs of mapuche and tehuelche in Patagonia by the end of the XIXTH century and beginning of the XXTH Ana R. Butto .................................................................................................................... 621-643 NOTAS Primer“s resultad“s de las investigaci“nes arque“lógicas en arr“y“ El Siasg“ (De”resión del rí“ Salad“, Buen“s Aires) Firs results of the archaeological research in Arroyo El Siasgo (River Salado Depression, Buenos Aires) Paula D. Escosteguy, Virginia M. Salerno, Paula Granda y Mariana S. Vigna ............ 645-653 MEMORIA ANUAL SOCIEDAD ARGENTINA DE ANTROPOLOGÍA 2014-2015 . 655-659 NORMAS EDITORIALES PARA LOS AUTORES ...................................................... 661-668 PUBLICACIONES DE LA SOCIEDAD ARGENTINA DE ANTROPOLOGÍA ........ 669-671

366

ISSN 0325-2221 (versión impresa) – ISSN 1852-1479 (versión online) Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología XL (2), julio-diciembre 2015: 395-423

EL MATERIAL LÍTICO DE AZUL PAMPA (HUMAHUACA, JUJUY, ARGENTINA) DURANTE EL BLOQUE TEMPORAL 3000-1000 AP. MOVILIDAD E INTERACCIÓN Lidia Clara García

Fecha recepción: 15 de noviembre de 2014 Fecha de aceptación: 8 de septiembre de 2015

RESUMEN Este trabajo trata sobre el desarrollo creciente de la complejidad en la microrregión Azul Pampa, con centro en Inca Cueva, desde 3000 años atrás. Para este momento, caracterizamos la ocupación cerámica temprana representada por los niveles inferiores de Inca Cueva alero 1, enfatizando el estudio de su material lítico; para un segundo momento, ca. 2000 AP, consideramos Inca Cueva cueva 5 y alero 3; inalmente, las ocupaciones de ca. 1000 AP, están representadas también por la cueva 5 y alero 3, así como por sitios a cielo abierto como el Antigal de Alto Sapagua. Comparamos las evidencias con las proporcionadas por el caso de control establecido en Sierra del Aguilar, representado por el alero Tomayoc, y con una muestra de materiales de supericie recolectada por los pobladores. Consideramos la interacción entre sitios de ocupación permanente, semipermanente y de paso así como con regiones distantes. Palabras clave: torteros – puntas – cuentas – perforadores – interacción

THE LITHIC MATERIALS OF AZUL PAMPA (HUMAHUACA, JUJUY, ARGENTINA) DURING THE 3000-1000 BP PERIOD. MOBILITY AND INTERACTION ABSTRACT This paper contributes to the knowledge of increasing complexity development from the Azul Pampa microrregion, centered at Inca Cueva, since 3000 years BP. For this moment, we characterize the early ceramic settlement of Inca Cueva rock shelter 1, stressing the study of its C“nsej“ Naci“nal de Investigaci“nes Cientíicas y Técnicas, Institut“ de Arque“l“gía, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. E-mail: [email protected]“m 

395

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

lithic materials. For the second moment, ca. 2000 BP, we consider Inca Cueva cave 5 and rock shelter 3. Finally, the occupations ca.1000 BP are represented also by cave 5 and rock shelter 3, as well as open air sites such as Alto Sapagua. We compare the evidences with those produced by the control case established at Sierra del Aguilar, represented by Tomayoc rock shelter, as well as with the surface sample collected by local settlers. We consider the interaction between permanent, semi-permanent and occasional sites, as well as with distant regions. Key w“rds: spindles – points – beads – drills – interaction INTRODUCCIÓN Algunos autores asocian el inicio de una economía productiva con la aparición de la cerámica (C“hen 1984); “tr“s, en cambi“, n“ c“nsideran su ad“”ción “ invención c“m“ relevante. Entre est“s últim“s, Testart (1982) ”lantea que el almacenamient“ de aliment“s es la clave ”ara diferenciar s“ciedades de may“r “ men“r grad“ de c“m”lejidad. Un m“del“ que da cuenta del inicio de la producción de alimentos es el del stress producido por cambios ambientales, aumento de la ”“blación, cambi“s signiicativ“s en el sedentarism“, ”r“”iedad, territ“rialidad y estrategias de reducción del riesg“ que ”udier“n haber “currid“ ”“r ”rimera vez s“l“ un“s mileni“s antes de la d“mesticación (Hayden 1995). El aut“r deja de lad“ ex”licaci“nes más tradici“nales del cambi“ hacia la agricultura, tales c“m“ la inluencia de l“s ambientes marginales y las ”resi“nes ”“blaci“nales. Enfatiza, en cambi“, la im”“rtancia de las áreas ricas en recurs“s, en las cuales esta c“menzó, las c“m”lejas “rganizaci“nes s“ciales ya establecidas, el advenimient“ de la intensiicación ec“nómica y la c“m”etencia. C“m“ cristalización de est“s cambi“s, a”arecen nuevas tecn“facturas c“m“ la cerámica. L“s estudi“s realizad“s en cuevas y aler“s de la quebrada de Inca Cueva (iguras 1 y 2) dan cuenta de las primeras ocupaciones con cerámica en ca. 3000 AP, a ”artir de un sustrat“ cazad“rrec“lect“r, en el cual hay reutilización de materiales lític“s y antecedentes del us“ de arcillas ”ara recubrir ”iezas de cestería en “cu”aci“nes ”revias (Aguerre et al. 1973). Las evidencias de L. Núñez Atenci“ (1994) en San Pedr“ de Atacama ”usier“n en relación esta inf“rmación s“bre las “cu”aci“nes cerámicas tem”ranas de Inca Cueva y a”“yar“n el ”lante“ s“bre la existencia de un Formativo inicial entre ca.3200 y 2500 AP. Las estrategias de ”ast“re“-agricultura ”ara este ”erí“d“ en la micr“rregión en estudi“ deben rec“n“cerse aún s“bre una evidencia fáctica may“r. Sin embargo, actualmente se acepta esta cronología para el inicio del Formativo en el Noroeste argentin“.

Objetivos del trabajo y muestra analizada Nuestra investigación general se centró en el Perí“d“ “ Estadi“ F“rmativ“ inicial a ”len“ en el área de estudi“ dentr“ del la”s“ que va del 3000 al 1000 AP, ab“rdand“ el ”r“blema del sedentarismo/nomadismo sin descuidar el grado de permanencia en los sitios dentro de un ”atrón de asentamient“ variable y c“m”lementari“. L“ enf“cam“s c“m“ el desenv“lvimient“ de l“s sistemas de asentamient“ y subsistencia cazad“res-rec“lect“res, en su transición hacia una ec“n“mía de ”r“ducción que c“nsideram“s, ”ara est“s m“ment“s, c“m“ básicamente ”ast“ril c“n a”“y“ de agricultura restringida, así c“m“ de actividades de caza y rec“lección. N“s interesam“s, ”“r l“ tant“, básicamente en est“s m“ment“s que c“nsideram“s clave ”ara el estudi“ del cambi“ cultural (García 1998-99). De acuerd“ c“n l“ antes dich“, analizam“s el material lític“ de l“s niveles cerámic“s tem”ran“s de ICa1 (”red“minantemente desech“s de talla) selecci“nand“ aquell“s atribut“s de la 396

Figura 1. Ma”a de la micr“rregión Azul Pam”a, Humahuaca, Jujuy, c“n l“s siti“s menci“nad“s. Ubicada dentr“ de Sud América. T“may“c se encuentra a 7 km al este de Aguilar

ti”“l“gía m“rf“lógic“-funci“nal de Ascher“ (1975b-1983) que ”ermitieran res”“nder a nuestras ”reguntas. Est“ se realizó c“n el in de establecer la función de las “cu”aci“nes iniciales, ca”as 5 y 6, la ”rimera de las cuales fue fechada al c“mienz“ de este bl“que tem”“ral. C“m“ en el cas“ de la cerámica, n“ descuidam“s el c“n“cimient“ anteri“r, y ”“r es“ n“s “cu”am“s también de las ”untas de ”r“yectil líticas. Las que habían sid“ enc“ntradas anteri“rmente en Inca Cueva, según l“s investigad“res que n“s ”recedier“n, ”arecen estar marcand“ m“ment“s cr“n“lógic“s diferentes a ”artir de su m“rf“l“gía. En trabaj“s ”revi“s s“bre las excavaci“nes y análisis de ICa1 (García 397

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

Figura 2. Quebrada de Inca Cueva. Ubicación de siti“s a ciel“ abiert“ y en cuevas y aler“s. Ma”a realizad“ s“bre la base de f“t“grafía aérea am”liada s“bre carta IGM-2365-110-7. Larg“ t“tal de la quebrada: a”r“ximadamente 7 km

1998-99) hem“s ”resentad“ las bases de dat“s, dibuj“s de materiales, ”lantas y ”eriles a que harem“s referencia aquí. Un resultad“ inicial, ”resentad“ en tablas y gráic“s s“bre desech“s de talla y dibuj“s de artefact“s y rem“ntaje, se encuentra en García y Carrión (1992). En el ”resente trabaj“, hacem“s énfasis en l“s materiales lític“s c“m”arables c“n el rest“ de la muestra “btenida de excavación y fechada en Inca Cueva y Alt“ Sa”agua, así c“m“ aquella recu”erada ”“r l“s 398

”“blad“res en su”ericie. C“menzam“s ”“r ICa1, niveles inferi“res (igura 3 A), mientras que ”ara el segund“ m“ment“ de nuestr“ bl“que tem”“ral (2000 AP) c“nsideram“s l“s materiales de Inca Cueva cueva 5 (ICc5), niveles inferi“res (igura 3 B), lueg“ Inca Cueva aler“ 3 (ICa3), vinculad“ c“n Icc5 ”ara niveles su”eri“res (Figura 3 C) e Inca Cueva Taller E (IC-E),(igura 3 D). Para el últim“ m“ment“ de nuestr“ bl“que tem”“ral (1000 AP), analizam“s l“s rescates 1 y 3 del Antigal de Alt“ Sa”agua (AAS), vinculad“s, (igura 3 E) y el rescate 2 de Alt“ Sa”agua (igura 3 F). La inf“rmación de est“s materiales se encuentra en las tablas 1 y 2. L“s materiales c“m”arativ“s s“n l“s ”r“”“rci“nad“s ”“r l“s ”“blad“res, que l“s recu”eran al ”astar sus animales, ”rinci”almente en el Cerr“ Alt“ de Sa”agua (igura 2, al este); una muestra de est“s se ilustra en la igura 4. En cuant“ al Pukará de H“rnaditas (HB), cercan“ a la Mesada de H“rnaditas (HA) que, tentativamente, es anteri“r (igura 1), la rec“lección de materiales de su”ericie realizada ”“r n“s“tr“s en 1987 y la revisión de tres c“lecci“nes de excavación (Primera ex”edición B. Muñíz Barret“ 1919; N. Pelisser“ 1969 y H. Yac“bacci“ 1988-89), n“ n“s ”ermiten ”“r el m“ment“ c“m”arar c“n l“s materiales aquí ”resentad“s.

Figura 3. El material lític“ de l“s siti“s menci“nad“s. A: ICa1 niveles inferi“res; B: ICc5 niveles inferi“res; C: ICa3; D: IC-E; E: AAS Rescates 1/3; F: AAS Rescate 2

399

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

Tabla 1. Puntas de ”r“yectil de l“s siti“s arque“lógic“s SITIO, Nivel y N°

Long.

Anch.

Esp.

ICa1,5/6, 1

18

11

3

ICa1, 5/6, 42

20

12

3

ICa1, 5/6, 43

20

15

3

ICa1, 4, 3 T, 33

32

13

9

ICc5, 4, 235

27

16

ICc5, 4, 250

69

27

ICc5, 4, 234

43

25

6

ICc5, 4, 233

27

21

4

ICa3, 1, 34

24

17

ICa3, 1, 75

18

10

AAS R 1/3,3,19/61

35

15

Peso

M.P.

LIMBO

Si

Triang. Ct“.

10

Ba

Triang. Ct“.

14,1

Si

Triang. Ct“.

58,5

Cu

Lanc. Ch.

8

59,7

Gr. Gd. cua

Lanc. Fract.

12

379,7

Metac.

Lanc. Gde.

143,3

Metac.

Lanc. Gde.

26,4

Si

Triang. Ct“.

3

12,5

P“s. T“

Triang. Ct“. base cónc.

2

5,1

Obs

Triang. Ct“. Fract. á”ice

5

29,5

Si

Triang. Al.

7,1

Referencias: M. P.: Materia Prima. Cu: cuarcita; Ba: basalt“; Obs: “bsidiana; Si: sílice; Metac.: metacuarcita; Gr. Gd. Cua: C“n gran“s grandes de cuarz“; P“s. T“: P“sible t“ba. Limb“: Lanc. Gde: Lance“lad“ grande; Lanc.Ch.: Lance“lad“ chic“; Lanc. Fract.: Lance“lad“ fracturad“; Triang. Al.: Triangular alargad“; Triang. Ct“.: Triangular c“rt“; Triang. Ct“. Base cónc.: Triangular c“rt“ de base cóncava; Triang. Ct“. Fract. Á”ice: Triangular c“rt“ fracturad“ en el á”ice. L“ng.: L“ngitud; Anch.: Anch“; Es”.: Es”es“r. T“das las dimensi“nes en mm y ”es“ en g.

Tabla 2. T“rter“s y cuentas de l“s siti“s arque“lógic“s SITIO Y N°

400

D.

ESP

PESO

M. P.

GR. TIPOL. SUGER.

ICa3, 1, 166

6

1

0,06

P“s.T“

Cuenta

ICa3, 1, 71

27

9

2,77

P“s. T“

T“rter“ fragm.

ICa3, 1, 164

17

8

0,97

P“s. T“

T“rter“ fragm.

ICa3, 1, 188

16

9

1,47

P“s. T“

T“rter“ fragm.

ICa3, 1, 159

25

10

4,24

P“s. T“

T“rter“ fragm.

ICa3, 1, 155 a

31

16

11,43

P“s. T“

T“rter“ fragm.

ICa3, 1 155 b

27

11

3,98

P“s. T“

T“rter“ fragm.

ICa3, 3, 93

22

7

2,90

P“s. Cali

T“rter“

AAS, R1, 21/1

34

13

8,53

P“s. T“

T“rt. fragm. rem. C’ 21/2

AAS, R1, 21/2

36

13

7,97

P“s. T“

T“rt. fragm. rem. C’ 21/1

AAS, R1, 22

22

9

2,63

P“s. Cali

T“rter“ fragm.

AAS, R1, 26/13

37

1

19,72

P“s. T“

T“rter“

AAS, R 1, 42/10

37

11

12,84

T“

T“rter“

AAS, R 1, 68

5

2

0,09

Tur

Cuenta

AAS, R 1, 41Z

5

2

0,06

Tur

Cuenta

AAS, R 1, 42Z

5

2

0,07

So

Cuenta

AAS, R 1/3, 45

9

4

0,43

So

AAS, R 1, 46Z/11

32

16

14,98

P“s. T“

Cuenta T“rt. sin term.ó icha

AAS, R 2, 39

8

3

0,31

Tur

Cuenta

AAS, R 2, 38

16

12

3,57

T“

T“rter“

(Tabla 2. Continuación) SITIO Y N°

D.

ESP

PESO

M. P.

GR. TIPOL. SUGER.

AAS, R 2, 38

18

7

2,33

T“

Cuenta ó tortero

AAS, R 2, 47/1

24

8

3,82

T“

T“rter“ fragm.

AAS, R2, 671

35

9

12,02

P“s. T“

T“rt. sin term.ó icha

AAS, R 2, 67/2

44

18

33,1

P“s. T“

T“rt. sin term.ó icha

AAS, R 2, 67/3

36

12

17,02

P“s. T“

T“rt. sin term.ó icha

Referencias: D: Diámetr“. Es”.: Es”es“r. M. P.: Materia Prima. Gr. Ti”“l. Suger.: Gru”“ ti”“lógic“ sugerid“. P“s. T“: P“sible t“ba; P“s. Cali: P“sible caliza; T“: t“ba; Tur: turquesa; S“: s“dalita; T“rt.: t“rter“; Fragm.: fragmentad“; Rem. C’: rem“nta c“n; Sin term.: sin terminar. T“das las medidas en mm y el ”es“ en g.

Figura 4. Selección de materiales lític“s recu”erad“s ”“r l“s ”“blad“res. A: N° 134; B: N° 135; C: N° 152; D: N° 84; E: N° 145; F: N° 81; G: N° 104; H: N° 113; I: N° 117; J: N° 119; K: N° 123; L: N° 122; M: N° 98; N: N° 97. L“s númer“s c“rres”“nden a las tablas 3 y 4

401

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

Realizam“s a c“ntinuación una breve descri”ción de l“s siti“s y “cu”aci“nes c“nsideradas (iguras 1 y 2): •฀ ICa1: está ubicad“ en la margen izquierda de la quebrada de Inca Cueva, a S23° O65°, en el de”artament“ Humahuaca, Jujuy, a 3.650 m s.n.m., “rientad“ hacia el E. Tiene 8 m de anch“, debaj“ del re”ar“, ”“r 3 m de ”r“fundidad. Se excavar“n seis ca”as a través de décapage en una su”ericie de 33,5 m2, habiendo mapeado 22 m2 hasta una ”r“fundidad de 80 cm. Se c“ntinuó d“s metr“s más hacia el arr“y“, d“nde se enc“ntrar“n estructuras ”“sthis”ánicas y un taller lític“. Tiene arte ru”estre del m“ment“ transici“nal entre el Precerámic“ y el Cerámic“ tem”ran“. •฀ ICc5: está ubicada en la ”arte alta de la quebrada de Inca Cueva, también en la margen izquierda, a 3.700 m s.n.m., a s“l“ 787,5 m de ICa1. Tiene 5 m de anch“ ”“r 3,50 m de ”r“fundidad, también “rientada hacia el E. El talud tiene una su”ericie “cu”ada de 7 m de ”r“fundidad ”“r 10 m de anch“. Este es”aci“ está relaci“nad“ c“n ICa3. Esta cueva ”resenta también arte ru”estre similar al de ICa1 y ”“steri“r. Tuv“ cinc“ excavaci“nes ”“r diferentes arqueól“g“s, incluyénd“n“s en las d“s últimas. Hem“s “rganizad“ la inf“rmación de t“das las excavaci“nes en cinc“ niveles. La r“ca de base a”arece a 1,28 m. •฀ ICa3: está l“calizad“ hacia el N de ICc5, se abre al SO. Tiene 13,30 m de anch“ y 2,50 m en su máxim“ re”ar“ y ”resenta arte ru”estre de l“s d“s gru”“s identiicad“s en ICc5, ”er“ más abundantes y visibles. Aquí se realizar“n d“s s“nde“s al azar. N“ había sid“ trabajad“ antes. AAS: se encuentra a un“s 3 km al SE de Inca Cueva (iguras 1 y 2), a 3.400 m s.n.m. Se trata de un siti“ c“m”lej“, multic“m”“nente, c“n diferentes estructuras, entre ellas circulares y rectangulares de diferentes ”erí“d“s, cercan“ a terrazas de agricultura. Está en las cercanías de un siti“ c“n arte ru”estre grabad“ del últim“ ”erí“d“ menci“nad“. Tres camin“s l“ cruzan en direcci“nes N, E y O. Hem“s trabajad“ allí cubriend“ un área de 3 ha a l“ larg“ de cinc“ cam”añas. Realizam“s ma”e“s, rec“lecci“nes su”ericiales, teste“s y rescates que fuer“n lueg“ am”liad“s en excavación ”“r décapage. La tabla c“n l“s fechad“s de las “cu”aci“nes c“nsideradas se encuentra en García e Higa (2014:24). En el cas“ de ICa1, en el marc“ de l“s estudi“s de la “rganización tecn“lógica lítica, n“s ”lanteam“s detectar la ”resencia de estrategias tecn“lógicas de ti”“ ex”editiv“ y c“nservad“ en relación c“n l“s artefact“s y desech“s de talla, c“nsiderand“ sus características técnicas y las materias ”rimas em”leadas. Al res”ect“, es”eram“s enc“ntrar un c“m”“rtamient“ tecn“lógic“ de ti”“ ex”editiv“ en relación c“n la materia ”rima l“cal y c“nservad“ en relación c“n la n“ l“cal, teniend“ en cuenta la distancia a las fuentes de a”r“visi“namient“ de l“s materiales y la ”“sible talla de extracción en el siti“. Seguim“s la ”r“”uesta de Bamf“rth (1986:48) que ex”resa the intensity of maintenance and recycling appears to vary in response to raw materials availability . A su vez, según la deinición dada ”“r Binf“rd (1979:258), las tecn“l“gías ex”editivas, a diferencia de las c“nservadas, comprise tools that are manufactured, used and discarded according to the needs of the moment . Esta última estrategia tecn“lógica c“m”rendería l“s c“m”“rtamient“s “”“rtunístic“s, n“ ”laniicad“s (Nels“n 1991:62). Además, hem“s c“nsiderad“ una serie de c“nsecuencias de la implementación de estos tipos de estrategias tecnológicas, vinculadas con la movilidad, ubicación ”róxima a las materias ”rimas, dis”“nibilidad de tiem”“, “cu”ación y reus“ regular del lugar, que se maniiestan a través del descarte material que ”r“ducen (Nels“n 1991).Una variable crítica en relación c“n las tecn“l“gías c“m“ estrategias (Binf“rd 1973, 1977), y es”ecialmente entre las conservadas, es la preparación de las materias primas en anticipación a condiciones inadecuadas (materiales, tiem”“ “ instalaci“nes) ”ara su elab“ración durante el m“ment“ y lugar de us“. A su vez, la ex”editividad minimiza el esfuerz“ tecn“lógic“ baj“ c“ndici“nes d“nde el tiem”“ y lugar de us“ s“n altamente ”redecibles (Nels“n 1984, 1991; Bleed 1986; Parry y Kelly 1987). De acuerd“ c“n est“s ”lante“s, hem“s analizad“ el material lític“ de ICa1 e ICc5 siguiend“ la ti”“l“gía m“rf“lógic“-funci“nal de Ascher“ (1975b-1983). 402

Cabe aclarar que en el ”rimer“ de l“s cas“s (ICa1) esta tarea se ”ud“ c“m”letar c“n l“s registr“s de t“das las excavaci“nes a nuestr“ carg“. Mientras en el segund“ cas“ (ICc5), habiend“ excavaci“nes ”revias c“n diferentes técnicas, fue necesari“ un reanálisis de la t“talidad de las “cu”aci“nes estudiadas c“m“ bl“que entre el 2000 AP y la “cu”ación Inka (Cha”arr“ 1999, 2001), más allá de l“s análisis realizad“s exclusivamente ”ara la última excavación del siti“ (García 199899). En el rest“ de l“s siti“s c“nsiderad“s (es”ecialmente en AAS), las investigaci“nes están en curs“, ”“r l“ que n“s centrarem“s, en est“s cas“s, exclusivamente en l“s artefact“s terminad“s. LAS INVESTIGACIONES PREVIAS Y LOS CAZADORES COMPLEJOS Nuestras investigaci“nes en Inca Cueva –que c“ntinuar“n las realizadas ”“r C. Ascher“ y H. Yac“bacci“ ”ara las “cu”aci“nes de cazad“res-rec“lect“res (Ascher“ 1973, 1975a, 1979, 1988; Yac“bacci“ 1990) y las de A. Fernández Distel ”ara Inca Cueva 5(Fernández Distel, 1983)– se centrar“n en la excavación, fechad“ y análisis de l“s materiales de l“s siguientes siti“s arque“lógic“s: ICa1 y D (estructura circular), ICc5, Inca Cueva cueva 4 (ICc4), Inca Cueva cueva 6 (ICc6), ICa3, Inca Cueva cueva 1 (ICc1) y estructuras su”eri“res, así c“m“ IC-E, en la Quebrada de Inca Cueva. A su vez, el trabaj“ c“n la Misión Arque“lógica Francesa dirigida ”“r las d“ct“ras D. Lavallée y M. Julien en Sierra del Aguilar, n“s ”r“”“rci“nó una secuencia c“n fechad“s abs“lut“s relativa al siti“ T“may“c, trabajad“ ”ara “btener evidencia de un cas“ de estudi“ en aler“ en un ”is“ de Puna más alt“, c“n ines c“m”arativ“s (Lavallée y García 1992, Lavallée et al. 1997). C“n res”ect“ a las investigaci“nes arriba menci“nadas ”ara la eta”a de cazad“res-rec“lect“res (Ascher“ 1979, 1988; Yac“bacci“ 1990, discutidas en García 1998-89), nuestr“ a”“rte fue fechar madera de un carcaj c“rres”“ndiente a la c“lección Justinian“ T“rres A”arici“, de Jujuy recu”erada en 1936, de la cual hicim“s una clasiicación. Este ”rimer fechad“ l“grad“ ”ara dicha c“lección (5.340 ± 70, C13/12: 5.320 ± 70; AC 4.330 y 3.975 2 sigmas; Beta 124617) vinculó l“s enterrat“ri“s retirad“s del lugar en aquella 锓ca c“n el nivel 1b de las excavaci“nes realizadas ”“r C. Ascher“ y H. Yac“bacci“ en ICc4. La ca”a 2 de dicha cueva había dad“ fechad“s de 10.620 ± 140 (LP-137) y 9.230 ± 70 (CSIC-498), entre “tr“s (Ascher“ y P“destá 1986; Yac“bacci“ 1990). En este c“ntext“, se encuentra el cuer”“ m“miicad“ de una j“ven que está vestida c“n ”iel de guanac“ c“n ”el“ en ambas caras. C“n res”ect“ a este, Ascher“ (2007:154) señala l“ siguiente: Una multitud de cuentas cuidad“samente aserradas y ”ulidas, hechas a ”artir de c“lumelas de un gran carac“l de la Yunga (Stropocheilus sp.) y “tras rec“rtadas de l“s b“rdes de grandes valvas de Diplodon sp., ”lumas de aves tr“”icales y ”“sibles ”erneras c“n numer“sas ”ezuñas de cérvid“, habrían sid“ ”arte de sus ad“rn“s.

P“r l“ tant“, enc“ntram“s cuentas desde estas “cu”aci“nes, ”er“ diferentes de las que referirem“s más adelante, c“rres”“ndientes al 1000 AP. INCA CUEVA ALERO 1, ca”as 5 y 6 Las puntas de proyectil líticas Pedunculadas de limbo triangular L“s hallazg“s El c“ntext“ del ”rimer s“nde“ de ICa1 ca”a 5 c“nstaba, entre “tr“s materiales, de un fragment“ de cerámica c“l“r café y de una ”unta ”equeña de basalt“, de limb“ triangular c“n 403

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

”edúncul“ diferenciad“ y aletas entrantes, de tendencia unifacial, semejante a las c“n“cidas en siti“s tem”ran“s de la región (llamadas ”uneñas ). P“steri“rmente, al am”liar la excavación alreded“r del f“gón central, se recu”erar“n d“s ”untas más c“n las características de la antes descri”ta. Estas eran de t“ba siliciicada y sílice (según la determinación del d“ct“r Teruggi, de la Universidad Naci“nal de La Plata). Las comparaciones D“s de las tres ”untas de ”r“yectil triangulares antes descri”tas (igura 3 A), estaban realizadas en materias ”rimas n“ l“cales y, ”“r su ”resencia en l“s siti“s que menci“narem“s a c“ntinuación, fuer“n c“nsideradas inicialmente c“m“ indicad“res de “cu”aci“nes F“rmativas. Su c“m”aración fue ”“sitiva c“n materiales de Alfarcit“, sect“res Debenedetti A y B (Madraz“ c“municación ”ers“nal y 1969; Zaburlín et al. 1996), Antum”a (”“r gentileza de la licenciada M. P“destá) y Cam”“ C“l“rad“ (Tarragó c“municación ”ers“nal y 1980). En el trabaj“ tecn“-ti”“lógic“ s“bre ”untas de ”r“yectil realizad“ ”“r P. Esc“la (1987, 1991), se c“rres”“ndían c“n las de “tr“s siti“s del ”erí“d“ F“rmativ“ Tem”ran“ “ Inferi“r. Se analizar“n ”untas similares ”r“venientes de Casa Chávez M“ntícul“s, Las Cuevas, P“trer“ Grande y Antum”a. En el M“ntícul“ 1 de Casa Chávez, junt“ c“n estas y en relación c“n las “cu”aci“nes asignadas al F“rmativ“, había ”untas a”edunculadas de base esc“tada que eran c“m”arables c“n las ”untas tardías de T“may“c (nivel I, relaci“nad“ c“n cerámica ti”“ Ang“st“ Chic“ Incis“), ”er“ Casa Chávez M“ntícul“s 1 tiene fechad“s que c“mienzan en ca. 2000 AP, o sea a partir del segundo momento planteado en este trabaj“ ”ara “cu”aci“nes cerámicas tem”ranas. Se c“m”arar“n también c“n las ”untas recu”eradas del siti“ T“may“c, “btenidas en el s“nde“ inicial realizad“ durante 1986, y c“n l“s materiales de Cueva Cristóbal (Fernández c“municación ”ers“nal y 1988-89). Las ”untas triangulares c“n ”edúncul“ de Inca Cueva aler“ 1, nivel inferi“r (ca”as 5 y 6) c“rres”“nderían al subgru”“ A1 II establecid“ ”“r Esc“la ”ara l“s siti“s F“rmativ“s. Est“s mism“s diseñ“s de ”untas s“n también similares a las recu”eradas en Tulán-54 (Núñez Atenci“ c“municación ”ers“nal y 1994), d“nde l“s niveles de “cu”ación más tem”ran“s c“rres”“nden al F“rmativ“ Inferi“r Inicial. P“steri“rmente, vim“s también que se c“rres”“nden a nivel macr“rregi“nal c“n las de Wankarani (Walter 1994). También hay ”untas similares en Alt“ Sa”agua N“rte y entre aquellas rec“gidas ”“r l“s ”“blad“res de Azul Pam”a en la ”arte alta del Cerr“ Alt“ de Sa”agua (García 1998-99). Dad“ que ”ara ICa1, la muestra de ”untas de ”r“yectil n“ ”ermitía análisis funci“nales (Ratt“ 1991), se manejó este indicad“r ”ara señalar la ”“sible adscri”ción de esta “cu”ación al m“ment“ F“rmativ“, tal vez relaci“nad“ c“n la función ec“nómica ”red“minante en est“s m“ment“s en el siti“.

Lanceoladas En la última cam”aña en ICa1, al am”liar la excavación hacia el talud, en el tercer deca”ad“ del nivel más ”r“fund“, a”areció una ”unta lance“lada ”equeña que es c“m”arable c“n las ”untas lance“ladas ”equeñas de Icc7 (Ascher“ c“municación ”ers“nal y Aguerre et al. 1973). Se enc“ntrar“n también “tras d“s ”untas similares fragmentadas; t“das c“nfecci“nadas en cuarcita gris, materia ”rima l“cal. Las ”untas de Inca Cueva cueva 7 s“n descri”tas c“m“ ”untas f“liáceas bifaciales de ret“que a ”resión que m“rf“lógicamente ”ueden c“nsiderarse e”ig“nales c“n res”ect“ a l“s ti”“s básic“s del c“m”lej“ Ayam”itín (igura 3 B-C en Aguerre et al. 1973:203).

404

Diez ejem”lares de este ti”“ c“rres”“ndientes a ICc7 ”resentar“n rest“s de mástic en la ”“rción su”eri“r del limb“ y tres, rest“s de tient“s sujet“s en la ”“rción media del limb“. Est“ tiene im”“rtancia c“n res”ect“ al ejem”lar c“m”let“ y c“n las bases fragmentadas de ICa1, dad“ que ”resentan adelgazamient“s semejantes. La ”unta de ICa1 n“s ”ermite señalar la reactivación c“m“ la causa de l“s distint“s tratamient“s c“n res”ect“ a la de ICc7. A”arentemente, la ”ref“rma “ la f“rma-base era una ”ieza de sección ”lan“-c“nvexa c“n cara ”lana. En una siguiente eta”a de trabaj“ se ”r“duj“ la sección bic“nvexa, ”“r ret“que bifacial, y el rebaje del bulb“ de ”ercusión. Las d“s bases de ”untas de ”r“yectil lance“ladas, fragmentadas, de cuarcita gris s“n c“m”arables entre sí y varían c“n res”ect“ a las anteriormente mencionadas en ICc7 en: 1) Pref“rma “riginal (aquí es una ”ieza ”lan“ c“nvexa). 2) Ti”“ de ret“que (de reactivación). A ”esar de est“s rasg“s técnic“s ”untuales, el diseñ“ de la f“rma inal resultante es similar. La ”unta lance“lada entera de ICc1 es también c“m”arable c“n cuatr“ ”untas c“ntem”“ráneas de Cueva de Cristóbal (Fernández 1988-89).

Los desechos de talla y las lascas con rastros complementarios El estudi“ de l“s desech“s de talla (que s“n may“ría) siguió d“s vías: la ti”“lógica y la tecn“lógica. Ambas, “rientadas a establecer las eta”as de ”r“ducción lítica cum”lidas en el siti“ y la ”“sible función de las “cu”aci“nes (Ascher“ 1975b-1983). El c“njunt“ s“bre el cual se inf“rma, c“m”rende las lascas c“n y sin rastr“s c“m”lementari“s, recu”eradas en la excavación de ICa1, ca”as 5 y 6. El “bjetiv“ de est“s análisis fue, en ”rimer lugar, acercarn“s a la funci“nalidad del siti“ en l“s m“ment“s iniciales de “cu”ación. Se trata de un conjunto de lascas donde predomina notablemente la cuarcita en sus variedades rosada de gran“ in“ y vi“lácea de gran“ grues“, aunque se registran también algun“s cas“s de t“ba siliciicada, basalt“, sílice, ftanita y “bsidiana (determinadas ”“r el d“ct“r Teruggi). La cuarcita c“rres”“nde a un 93,6% del c“njunt“ en la ca”a 5 y a un 87,2% en la ca”a 6, mientras que el rest“ de las materias ”rimas c“ntribuye ”“c“ al c“njunt“ (6%): 17 lascas. P“r “tr“ lad“, se realizó c“n éxit“ el rem“ntaje de un núcle“ y lascas (igura 5). Est“ ”ermitió, entre “tras c“sas, mantener la se”aración de ca”as realizada en el terren“, ya que l“s materiales de las ca”as 5 y 6 n“ rem“ntar“n entre sí. La cantidad de desech“s efectivamente rem“ntad“s fue mínima y se di“ siem”re dentr“ de una misma ca”a y extracción. Al clasiicar las lascas según su extracción, c“m”r“bam“s que en la ca”a 5 un 38% s“n externas (”rimarias, secundarias y de d“rs“), es decir, c“nservan c“rteza del nódul“ “riginal, mientras que en la ca”a 6 el resultad“ es similar: un 43%. Est“s ”“rcentajes, sumad“s al hallazg“ de una decena de núcle“s y tres ”ercut“res, ”ermiten su”“ner que se habrían efectuad“ tareas de talla ”rimaria en el siti“ (extracción de lascas). A juzgar ”“r l“s alt“s ”“rcentajes de lascas ”lanas y angulares en ambas ca”as y ”“r el hech“ de que esta actividad ”r“duce c“njunt“s d“nde ”red“minan las lascas internas (Bellelli 1990), se habría realizad“ una intensa extracción de f“rmas base. Enc“ntram“s un 61% ”ara la ca”a 5 y 54% ”ara la 6. A su vez, es alt“ el desa”r“vechamient“ de lascas a”tas c“m“ f“rmas base (42% de lascas enteras ”ara ca”a 5). El examen de l“s tal“nes a”untó en el mism“ sentid“, c“n un 30,20% de c“rticales y 56,08% de lis“s en la ca”a 5 y un 22,09% de c“rticales y 50% de lis“s en la ca”a 6. Est“ refuerza la existencia de ”re”aración de ”lataf“rmas lisas “rientadas a la extracción de lascas internas. En relación c“n las materias ”rimas n“ l“cales, ”“dem“s sintetizar l“ siguiente: a) T“das las lascas en materias ”rimas n“ l“cales c“rres”“nden a la categ“ría de internas. b) L“s ti”“s más re”resentad“s s“n l“s de reactivación y adelgazamient“ bifacial. 405

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

Figura 5. Núcle“ rem“ntad“ de ICa1 y “tr“s materiales lític“s as“ciad“s

c) Están ausentes lascas c“n c“rteza y núcle“s que indiquen tareas de talla ”rimaria (García y Carrión 1992). En cambi“, en relación c“n la materia ”rima l“cal, que es ”red“minante, la gran cantidad de núcle“s y desech“s en relación c“n l“s instrument“s, la c“rres”“ndencia de materia ”rima entre desech“s y núcle“s, además de su c“nc“rdancia m“rf“lógica, l“s alt“s ”“rcentajes de lascas c“n c“rteza y el cas“ del rem“ntaje de núcle“ registrad“ están señaland“ que en el siti“ se habrían realizad“ l“s ”rimer“s ”as“s del ”r“ces“ de manufactura lítica. C“m”lementariamente, vari“s indicad“res sugieren la extracción de f“rmas base c“m“ actividad im”“rtante. La fabricación y reactivación de instrument“s de cuarcita en el siti“ habría sid“ mínima, c“nclusión que extraem“s 406

de l“s ”“c“s cas“s de lascas de reactivación y adelgazamient“ bifacial registrad“s ”ara esa materia ”rima y ”“r la mínima c“ntribución de tal“nes facetad“s, ”untif“rmes y ilif“rmes. La situación cambia c“m”letamente al c“nsiderar las “tras materias ”rimas que, aunque escasamente, también están ”resentes. Tant“ en la ca”a 5 c“m“ en la 6, n“ c“nstatam“s ningún cas“ de lascas ”rimarias “ secundarias y s“n may“ritarias, en cambi“, las de adelgazamient“ bifacial y las de reactivación. En ambas ca”as ”red“minan l“s tal“nes ”untif“rmes. La ausencia tant“ de lascas externas c“m“ de núcle“s en estas materias ”rimas n“s da la idea de que n“ hub“ actividades de extracción y/“ f“rmatización ”“r talla. Sí, ”r“bablemente, se habría reac“ndici“nad“ instrument“s ya traíd“s al siti“. Si relaci“nam“s este hech“ c“n la excelente calidad de estas materias ”rimas y la distancia a sus fuentes de a”r“visi“namient“, ”“dríam“s enc“ntrarn“s ante un c“m”“rtamient“ de ti”“ c“nservad“ ”ara éstas, en c“ntra”“sición c“n l“ que “curre c“n la cuarcita. N“s queda el interr“gante acerca de las ”“sibles actividades realizadas que, sin embarg“, n“ quedar“n registradas ”“rque l“s instrument“s siguier“n funci“nand“ en el sistema. De hech“, n“ tenem“s instrument“s en ftanita ni “bsidiana en est“s niveles. Desde un ”rinci”i“, habíam“s ”lantead“ una estrategia tecn“lógica de ti”“ ex”editiv“ en relación c“n la cuarcita, debid“ –entre “tras c“sas– a la cercanía de una fuente de dich“ material, la ”r“bable talla de extracción en el siti“ (lueg“ sustentada ”“r nuev“s dat“s) y el desa”r“vechamient“ de lascas a”tas c“m“ f“rmas base. En suma, se “bservó en el c“njunt“ que las distintas materias ”rimas ”resentes re”resentan estrategias de a”r“vechamient“ diferentes: mientras s“bre cuarcita tenem“s re”resentada t“da la secuencia de ”r“ducción lítica (reducción de núcle“s, extracción de f“rmas base, manufactura –en men“r medida– y descarte) c“n un alt“ a”r“vechamient“ del material, en el rest“ de las materias ”rimas s“l“ se registran evidencias de reactivación y terminación de instrument“s. El hech“ de que una cantera de cuarcita se encuentre a ”“c“s metr“s del siti“, n“s c“nduj“ a sugerir la hi”ótesis de que las “cu”aci“nes iniciales del aler“ 1 habrían estad“ relaci“nadas, en l“ que hace a la tecn“l“gía lítica, c“n un c“m”“rtamient“ de ti”“ ex”editiv“, en cuant“ a l“s desech“s c“n rastr“s c“m”lementari“s de may“r tamañ“ (Binf“rd 1973, 1977, 1979; Bamf“rth 1986). Las siguientes “bservaci“nes ”ermitirían ref“rzar esta hi”ótesis: a) L“s artefact“s f“rmatizad“s en cuarcita muestran muy ”“ca elab“ración y n“ se registra ningún cas“ de reavivamient“ “ algún “tr“ indicad“r de mantenimient“. b) L“s módul“s de tamañ“ elegid“s ”ara la utilización directa de las lascas m“strar“n ser muy es”ecíic“s (su”erand“ en larg“ y anch“ l“s ”r“medi“s de las lascas sin rastr“s en una “ más desviaci“nes standard), mientras que fuer“n descartadas el rest“ de las lascas, a ”esar de ”“seer il“s utilizables. c) La relación entre desech“s, núcle“s e instrument“s, el alt“ ”“rcentaje de micr“lascas y la ”“sitiva relación de ensamblaje “btenida (igura 5) sugieren que la talla fue realizada en el siti“. d) El análisis de l“s gráic“s de frecuencias acumuladas de l“s tamañ“s de las lascas de las ca”as 5 y 6 m“stró que las curvas se ”arecían de manera signiicativa. El gráic“ de dis”ersión de lascas de cuarcita ”ermite “bservar que las lascas más largas s“n las que ”resentan rastr“s c“m”lementari“s (García 1998-99:287-297). El tamañ“ ”r“medi“ may“r de las lascas de la ca”a 6 ”“dría deberse a des”lazamient“s ”“r ”is“te“ (W““d y J“hns“n 1978; Schiffer y Skib“ 1987; Pintar 1989). N“s ”r“”usim“s ent“nces una serie de análisis que creím“s relevantes c“n res”ect“ a la hi”ótesis inicial y una serie de actividades destinadas a veriicarl“s: a. Análisis cuantitativ“s. b. Análisis es”acial. c. Rem“ntaje (García y Carrión 1992; García 1998-99). S“bre esta base, ”udim“s “bservar que las tendencias veriicadas c“n anteri“ridad se mantenían. 407

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

Per“, ”“r “tr“ lad“, se trabajó en la redeinición c“nce”tual de las tecn“l“gías ex”editivas y c“nservadas. A la luz de esta ref“rmulación, c“nsideram“s que la identiicación ”“sitiva de un c“m”“rtamient“ de ti”“ ex”editiv“ en el aler“ 1 y en “tras cuevas y aler“s relaci“nad“s c“n la ”r“blemática general cum”liría un r“l fundamental en la ex”licación de la estrategia general y del ”atrón de m“vilidad del gru”“ en cuestión. Ad“”tand“ la ”“sición de Bamf“rth (1986), asumim“s que la dis”“nibilidad sería un fact“r que incidía fuertemente en la decisión, t“mand“ el c“m”“rtamient“ c“nservad“ c“m“ una estrategia ”ara ec“n“mizar materia ”rima cuand“ esta es de difícil adquisición (”“r distancia al lugar d“nde se desarr“lla la actividad). Per“ este fact“r c“nsiderad“ aisladamente n“s ”areció insuiciente ”ara ex”licar la ”resencia de una estrategia tecn“lógica de ti”“ ex”editiv“. C“nsideram“s, ent“nces, que ninguna estrategia tecn“lógica es abs“lutamente ex”editiva “ c“nservada, sin“ que c“nigura una combinación de ambas estrategias tecnológicas, siendo esa combinación la respuesta más satisfact“ria a determinada necesidad d“nde tant“ l“s fact“res ambientales (distribución de l“s recurs“s lític“s) c“m“ l“s “rganizativ“s (”r“gramación de las actividades) s“n determinantes. En este sentid“, el grad“ de ”ermanencia en el siti“ juega un r“l fundamental en la ex”licación. En este cas“ n“ tenem“s indicad“res de estrategias tecnológicas ex”editivas y/“ c“nservadas, sin“ que hablam“s de un c“ntext“ lític“ que ”resenta evidencias de comportamientos ex”editiv“s y/“ c“nservad“s. En relación c“n la ”“sibilidad de determinar la duración de las “cu”aci“nes, creím“s ”ertinente c“nsiderar varias “bservaci“nes ”ara ajustarlas, a ”artir del análisis c“m”let“ de las ”lantas y l“s materiales, l“ que ab“rdarem“s ”ara sintetizar el análisis de ICa1, ca”as 5 y 6.

Núcleos, nódulos y percutores Completando el panorama arriba planteado desde los desechos de talla, registramos la ”resencia de una gran cantidad de nódul“s y ”ercut“res, realizad“s en cuarcita. Hay también un yunque y un ”ercut“r s“bre núcle“. La ”resencia de est“s materiales es signiicativa y t“talmente diferente a l“ registrad“ en ICc7. Se halló un ”ercut“r c“n sustancia r“ja, que ”“dría tener que ver c“n la ”re”aración de ”inturas, ”ara l“ cual habría que analizar la c“m”“sición de esta sustancia y la del arte ru”estre del gru”“ estilístic“ B, únic“ ”resente en ICa1 y adscri”t“ ”“r C. Ascher“ a l“s m“ment“s Precerámic“s inales y Cerámic“s tem”ran“s (Ascher“ et al. 1991).

Sintetizando La cuarcita es la materia ”rima ”red“minante. Salv“ en las ”untas de ”r“yectil triangulares c“n ”edúncul“ y aletas diferenciadas (basalt“ y sílice). Las ”untas lance“ladas están c“nfecci“nadas en cuarcita r“sada y gris, de “rigen l“cal. Estas estarían marcand“ una c“ntinuidad tecn“lógica (arriba analizada) c“n la “cu”ación arcaica tardía que c“nsideram“s. Per“ a diferencia de esta, enc“ntram“s aquí m“lin“s y man“s. En este sentid“, hay materiales que, aunque registrad“s, fuer“n dejad“s en el siti“ ”“r ”r“blemas de trans”“rte –c“m“ d“s m“rter“s de cuarcita (25 cm ”“r 25 cm cada un“) y una man“ de m“ler– que indican el equi”amient“ del siti“ c“n l“s materiales de may“r ”es“ dejad“s in situ, ”reviend“ una re“cu”ación dentr“ de un esquema de m“vilidad restringida (sedentarism“ en términ“s anuales), de acuerd“ a l“ hi”“tetizad“ s“bre la base de la investigación etn“arque“lógica (García 2001). En la ”rimera lim”ieza de 1989, que n“ estam“s teniend“ en cuenta ya que n“ ”“dem“s garantizar la as“ciación c“ntextual, registram“s además la ”resencia de d“s ”“sibles c“nanas. Est“s materiales a”arecier“n en as“ciación c“n tiest“s. N“ hay registr“ de ”alas líticas, aunque est“ n“ signiica que n“ estuvieran ”resentes en l“s siti“s 408

c“m”lementari“s. De hech“, hem“s registrad“ su ”resencia en Alt“ Sa”agua, en su”ericie, así c“m“ en las estructuras ”“r encima de ICc1 en dirección a la misma l“calidad (igura 2). También se registró la ”resencia de un fragment“ de ras”ad“r. Se enc“ntró, además, un lit“ c“n acanaladura central y desbaste en el extrem“ distal, que ”“dría estar re”resentand“ un fragment“ de maza. Un ejem”lar similar a”areció en 1991 en niveles su”ericiales rem“vid“s de ICc5. S“lamente existe un ”equeñ“ desech“ de ”iedra verde ”ara ICa1, del ti”“ que a”arece en may“r cantidad en Alt“ Sa”agua N“rte (García y Fernández D“ Rí“ 2011). P“r l“ tant“, sumand“ la inf“rmación ”r“”“rci“nada ”“r l“s instrument“s, núcle“s, desech“s, ”ercut“res, man“s, m“lin“s, c“nanas y ”untas de ”r“yectil, además del ras”ad“r, uniface y la ”“sible maza, c“nsideram“s que la gama de actividades re”resentadas en estas “cu”aci“nes desde el material lític“ está marcand“ un siti“ de “cu”ación c“n un carácter más que “casi“nal. T“d“s est“s materiales a”arecier“n en as“ciación c“n fragment“s cerámic“s en c“ntext“s que garantizan su c“ntem”“raneidad, es”ecialmente ”“r el carácter de la técnica a”licada en su recu”eración. En relación c“n l“s artefact“s de m“lienda, en nuestra micr“rregión (c“m“ dijim“s arriba), a”arecen dentr“ de la secuencia a ”artir de esta “cu”ación de ICa1. La “cu”ación anteri“r, ICc7, n“ ”resentó este ti”“ de artefact“s, aunque sí vegetales (Aguerre et al. 1973; Bab“t 2011). En las ca”as iniciales de ICa1, c“m“ ex”resam“s, su ”resencia c“nsta de d“s man“s de m“ler, d“s c“nanas fragmentadas, d“s ”ercut“res y d“s fragment“s de ”ercut“r (t“d“s en cuarcita que es una materia ”rima l“cal), un“ de l“s cuales ”resenta sustancia r“ja. Est“s últim“s ”ueden haber tenid“ más de una función. Esta ”resencia tiene su im”“rtancia ”“r l“ que direm“s seguidamente. En Ant“fagasta de la Sierra, Puna Salada, a diferencia de l“ que sucede en nuestra área, Bab“t (2006) –teniend“ en cuenta las tres eta”as cr“n“lógicas que ella diferencia en su larga secuencia de “cu”ación– sitúa evidencias c“m”arables c“n las nuestras entre su caracterización de ines del segund“ m“ment“ y c“mienz“s del tercer“. C“nsidera que las ”rácticas de almacenamient“ y c“cción, junt“ c“n la serie m“lienda/machacad“/trituración, ”r“”“rci“nar“n una am”lia gama de sub”r“duct“s ”ara la alimentación de las ”“blaci“nes es”ecialmente a ines del H“l“cen“ Medi“ (Bab“t 2009, 2011). La aut“ra ”lantea que lueg“ se da una intensiicación en el c“nsum“ de vegetales es”ecialmente en el bl“que ubicad“ entre ca. 3200 añ“s AP y ca.1100 añ“s AP. Para este últim“, sin embarg“, s“stiene la existencia de un hiat“ en dicha secuencia de más de mil añ“s res”ect“ a siti“s residenciales. RESULTADOS PARA LA PRIMERA OCUPACION CON CERÁMICA, CA. 3000 AP. C“nsideram“s a ICa1 c“m“ un siti“ de “cu”ación semi”ermanente que ”resenta un rang“ de actividades restringidas, ubicad“ en una micr“rregión d“nde funci“nó un sistema de asentamient“ y subsistencia de ti”“ F“rmativ“. El siti“ ”resenta escasez de instrument“s y abundancia de desech“s de talla lític“s. Creem“s que cum”le c“n ciertas ex”ectativas de ex”l“tación recurrente de recurs“s, teniend“ en cuenta, ”“r ejem”l“, la alta ”resencia de m“lin“s (Jacks“n y Benavente 1995-96). Otras actividades llevadas a cab“ en estas ”rimeras “cu”aci“nes de ICa1 fuer“n la realización de fueg“ –a través del sistema de fricción r“tativa sim”le, am”liamente difundid“ en l“s Andes Centr“ Sur–, el m“lid“ –re”resentad“ ”“r m“lin“s, c“nanas y man“s (dejad“s en el siti“ c“m“ site furniture ”ara futur“s us“s)– y el c“nsum“ de aliment“s –re”resentad“ ”“r cerámicas n“ restringidas así c“m“ ”“r rest“s de material faunístic“ de camélid“s y r“ed“res–. También es ”“sible ”lantear la ”r“ducción de arte ru”estre y la ejecución de tareas de rec“lección. A ”artir de esta lista de actividades y del análisis de la distribución de l“s materiales en ”lanta, c“nsideram“s que se trata de una “cu”ación semi”ermanente, ”“siblemente de c“rta duración, ”er“ recurrente, de actividades restringidas. Si el us“ se di“ en 锓ca de lluvias, ”ara el 409

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

”ast“re“, est“ limita el área de “cu”ación debaj“ de la línea de re”ar“, que es d“nde se encuentra el f“gón c“n b“rde de ”iedra, que estructura la may“ría de l“s materiales a su alreded“r. Est“ es, de n“viembre a marz“. Según algunas inter”retaci“nes, l“s hallazg“s de material lític“ y faunístic“ as“ciad“s c“ntextualmente, estarían evidenciand“ una actividad de descuartizamient“ en un es”aci“ des”ejad“ ”eriféric“. Cerca del f“gón, d“nde también se encuentran may“ritariamente l“s rest“s cerámic“s, es más ver“símil que sirvieran ”ara ”re”araci“nes culinarias. P“stulam“s esta inter”retación ”ara est“s hallazg“s, en c“njunt“ c“n el rest“ de l“s vestigi“s de t“d“ ti”“ y estructuración del es”aci“ interi“r. El análisis faunístic“, sin embarg“, ”arecería c“ndecir c“n el de una “cu”ación tí”icamente tem”“raria de ”ast“res. En est“s cas“s, generalmente se trans”“rtan la c“lumna y c“stillas, ya sacriicad“ el animal en la base residencial. INCA CUEVA CUEVA 5, NIVELES INFERIORES Y ALERO 3, VINCULADO COMO TALUD (OCUPACION DESDE CA. 2000 AP) Las puntas de proyectil líticas A”edunculadas de limb“ triangular y lance“ladas De acuerd“ c“n l“ investigad“ ”“r quienes n“s ”recedier“n (Aguerre et al. 1973), el doctor G“nzález (1963) halló, en el talud de ICc1, ”untas de ”r“yectil bifaciales a”edunculadas de limb“ triangular junt“ c“n “tras unifaciales y aquellas lance“ladas de b“rdes sub”aralel“s asimilables a las de m“rf“l“gía ti”“ Ayam”itín. Según las c“m”araci“nes que se establecier“n durante el estudi“ de l“s siti“s ”recerámic“s, estas ”untas triangulares a”arecían también en el talud de ICc4 y en el nivel cerámic“ tem”ran“ de ICc5, aunque c“n may“r elab“ración. Se las c“m”araba secuencialmente c“n aquellas de la cueva III de Huachich“cana (CHIII), recu”eradas en l“s niveles ”recerámic“s c“n cultígen“s. En ICc7, además de las lance“ladas ”equeñas, a”areció una ”unta de limb“ triangular c“rt“, de b“rdes y base c“nvexa, en cuarcita, así c“m“ “tra a”edunculada de limb“ triangular c“rt“ c“n b“rdes c“nvex“s y base recta, fragmentada, de basalt“. A su vez la ca”a D de ICc5 brindó ”untas triangulares similares en sílice gris y “tras lance“ladas (igura 3 B y tabla 1), mientras que del aler“ 3, c“n una “cu”ación c“rres”“ndiente a l“s niveles su”eri“res de ICc5, se rec“lectó una ”unta triangular de t“ba c“n esc“tadura basal (igura 3 C y tabla 1). Las tablas de l“s análisis de desech“s de talla c“rres”“ndientes a la última excavación en el siti“ (1991) se encuentran en García (1998-99:298). Trabaj“ de gabinete c“n desech“s de talla Un estudi“ de t“das las excavaci“nes de ICc5 en su c“njunt“ fue ”lasmad“ en una tesis de Licenciatura y su ”“steri“r ”ublicación (Cha”arr“ 1999, 2001). La cueva 5 ”resenta algunas diferencias im”“rtantes c“n el aler“ 1, c“m“ un may“r re”ar“ y ”r“tección, una men“r visibilidad de cam”“s de ”ast“re“, etc. C“nsideram“s, ”“r l“ tant“, que n“s enc“ntram“s en ”resencia de siti“s semi”ermanentes de distint“ grad“. C“mentarem“s a c“ntinuación el análisis de l“s desech“s de talla recu”erad“s durante la cam”aña de 1991. La muestra analizada inicialmente (que fue c“m”letada a posteriori) está compuesta por 66 lascas distribuidas en “ch“ niveles de extracción, y su estudi“ se ha c“m”lementad“ c“n el de l“s núcle“s y ”ercut“res. La met“d“l“gía a”licada fue la misma c“n la que analizam“s l“s materiales lític“s de ICa1 (ca”as 5 y 6). Sin embarg“, en este cas“ las c“nclusi“nes tienen un alcance más limitad“ debid“ a l“ reducid“ de la muestra. A l“s efect“s de realizar algunas “bservaci“nes s“bre el c“njunt“, se”aram“s las materias ”rimas en d“s grandes gru”“s: l“cales y n“ l“cales 410

(igura 2, área de catchment) (Yac“bacci“ 1990; Ratt“ 1991). El ”rimer“ está c“m”uest“ ”“r la cuarcita, en su variedad r“sada, y el sílice; el segund“ ”“r basalt“, ftanita y “bsidiana. Debem“s señalar que las siguientes c“nsideraci“nes hacen referencia al c“njunt“ gl“bal de l“s desech“s, ya que algun“s niveles cuentan c“n muy ”“c“s ejem”lares c“m“ ”ara sustentar inter”retaci“nes tecn“lógicas más ”recisas. En cuant“ a materias ”rimas, “bservam“s una c“ntribución may“r de materias ”rimas n“ l“cales en el c“ntext“ lític“ de la cueva 5 que en l“s niveles inferi“res (ca”as 5 y 6) del aler“ 1. Si bien esta tendencia es detectable en todos los niveles, la cantidad de casos por capa no permite su evaluación estadística. Gl“balmente, en cambi“, l“s ”“rcentajes sugieren que la “bservación es pertinente: Materia ”rima l“cal: 57,58% Materias ”rimas n“ l“cales: 42,42% Con respecto a los aspectos tecnológicos, en la cuarcita (materia prima local) se registran indicad“res de actividades de reducción ”rimaria: ”resencia de núcle“s, ”ercut“res y las categ“rías de desech“s c“rres”“ndientes a esa eta”a de ”r“ducción lítica (lascas c“n c“rteza). Entre las lascas internas, la categ“ría más re”resentada es la de las ”lanas, relaci“nables c“n la extracción de f“rmas base. Las materias ”rimas n“ l“cales muestran una distribución diferente de las categ“rías de desech“s. En t“d“s l“s niveles analizad“s se ”resentan c“n exclusividad en la f“rma de lascas internas (angulares, ”lanas, de reactivación, reducción bifacial, de arista) a exce”ción de un s“l“ cas“ (nivel de 60 a 70 cm). Tal c“m“ n“tam“s en el aler“ 1, las categ“rías más re”resentadas s“n las de adelgazamient“ bifacial y reactivación (García y Carrión 1992). Si bien esta tendencia parece mantenerse en casi todos los niveles, este comentario se trata de una a”r“ximación ”reliminar y general s“bre la base de una muestra. La secuencia ”resenta una “cu”ación de la cueva desde 2000 AP hasta m“ment“s Inka. Además de l“s desech“s de talla y de la ”unta triangular menci“nada, que ”ertenece a la ca”a D de las excavaci“nes históricas, la secuencia de esta cueva muestra una may“r variabilidad y cantidad de materiales lític“s, entre l“s que se encuentran m“lin“s y man“s en may“r cantidad, fragment“s de ”untas de ”r“yectil de “bsidiana desde niveles muy tem”ran“s (ca. 2000 AP), cuchill“s, raederas, t“rter“s (similares a l“s de ICa3 y AAS), núcle“s ag“tad“s, núcle“s bi”“lares, ”ercut“res, bifaces, lascas y un“s instrument“s de esquist“ de f“rmatización sumaria c“n esb“z“ de h“mbr“s y ”“sible ”edúncul“, que ”arecerían ser ”untas de ”r“yectil, aunque serían demasiad“ frágiles ”ara ”“der cum”lir esa función; es de destacar que estas ”iezas se encuentran en diferentes niveles c“n una m“rf“l“gía recurrente. REFLEXIONES DESDE EL MATERIAL LÍTICO Ha habid“ en este ”unt“ d“s niveles de análisis. Las características del diseñ“ de l“s artefact“s lític“s fuer“n c“nsideradas prima facie c“n ines c“m”arativ“s. Lueg“ se ab“rdar“n l“s as”ect“s funci“nales de l“ ”r“ducid“ en cada siti“, ”ara ver el ti”“ de “cu”ación dentr“ de un sistema y “rganización s“cial c“m“ núcle“ del trabaj“. Se a”licó el mism“ ti”“ de análisis a las muestras de cada siti“, fundamentalmente, ”ara tratar de recu”erar las actividades desarr“lladas, investigar la utilización de materias ”rimas l“cales “ n“ l“cales ”ara distintas tecn“facturas y ”ara c“m”arar las “cu”aci“nes desde l“ tecn“lógic“. Un interés que surge a ”artir de la “bservación de la unif“rmidad de las ”untas de ”r“yectil triangulares c“n ”edúncul“ en l“s siti“s F“rmativ“s es investigar sus as”ect“s funci“nales, 411

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

”“siblemente vinculad“s c“n l“ ec“nómic“. Es decir, el análisis de sus ”“sibles us“s (c“n ”r“”uls“r “ c“m“ ”unta de lecha), del ti”“ de ”resas s“bre l“s que fuer“n em”leadas “, inclus“, si fuer“n utilizadas ”ara defensa, arr“jará luz s“bre as”ect“s ec“nómic“s “ c“nlictiv“s de la s“ciedad, que a su vez remitirán a la “rganización s“cial. Llama la atención la a”arición de estas ”untas en l“s c“ntext“s que llamam“s F“rmativ“s en la gran may“ría de l“s siti“s que c“m”aram“s dentr“ de este bl“que tem”“ral y su ”resencia en c“ntext“s tan lejan“s c“m“ Tulán y Wankarani, que s“n c“etáne“s ”er“ distantes. Necesitam“s muestras más grandes para poder estudiar este problema, posiblemente vinculado al cambio cultural relaci“nad“ c“n l“ ec“nómic“, que ”uede haber variad“ en un mism“ sentid“ en t“d“s est“s siti“s, aunque l“s diseñ“s ”ueden remitir también a c“municación a grandes distancias. Para las ”untas lance“ladas chicas, ”“dem“s t“mar algunas ideas de l“s hallazg“s de cuevas 1 y 7, d“nde en algunas a”arece el tendón que las enmangaba y el mástic y, en la última cueva menci“nada, un intermediari“ de astil dentr“ de l“s c“ntext“s cazad“res-rec“lect“res inales. ALTO SAPAGUA, OCUPACIONES SEMIPERMANENTES DESDE CA. 1000 AP De acuerd“ a l“ menci“nad“ en la intr“ducción, hem“s trabajad“ cuatr“ rescates en AAS, fechad“s hacia el 1000 AP (iguras 1, 2, 3E y F,). Hem“s ”resentad“ anteri“rmente las investigaci“nes realizadas en la quebrada de Sa”agua, que incluye el Antigal de Alt“ Sa”agua (García y Fernández D“ Rí“ 2011), l“s fechad“s radi“carbónic“s de este bl“que tem”“ral y l“s dat“s de arte ru”estre, z““arque“l“gía y cerámica (García e Higa 2014). A ”esar de que el estudi“ detallad“ de l“s materiales lític“s en este cas“ está aún en ”r“ces“, se c“m”aró el material “btenid“ en las cinc“ cam”añas realizadas en el siti“ de l“s c“ntext“s fechad“s (tablas 1 y 2) c“n una c“lección de materiales de su”ericie facilitada ”“r ”“blad“res (igura 4, tablas 3 y 4). Tabla 3. Puntas de ”r“yectil de su”ericie recu”eradas ”“r l“s ”“blad“res

412



Long.

Anch.

Esp.

Peso

M.P.

81

58

22,3

11 .

14,7

Cu

Lanc. Gde.

LIMBO

83

59

24,4

9,7

12,2

Cu

Lanc. Gde.

84

48,5

22,3

9

11,8

Cu

Lanc. Gde.

87

46,5

21,4

11

12,1

Ba

Lanc. Gde.

88

21,7

23,7

11,3

3,54

Ba

Triang. Ct“. Ch.

89

42

21

14

8,25

Cu

Lanc. Gde.

90

42,4

25,2

7,7

7,36

Cu

C“rd.

92

27,5

22

5,8

3,34

Cu

Triang. Ct“. Ch.

125

20,3

19

8

0,85

Cal

Triang. Ct“. Ch.

126

39

19

8

4,52

Cu

Lanc. Ch.

127

40

18,5

11

4,95

Cal

Triang. Al.

128

23

18

7

2,19

Obs

Triang. Ct“. Ch.

129

20,5

13

3

0,63

Obs

Triang. Ct“.

130

25

14

3,8

0,93

Obs

Triang. Al.

131

23

18

4

1,28

Si

Triang. Ct“.

132

20

10,4

5

0,73

Si

Triang. Al. Ch.

(Tabla 3. Continuación) N°

Long.

Anch.

Esp.

Peso

M.P.

133

24,5

12

3

0,61

Si

Triang. Al. Ch.

LIMBO

134

21,5

13

4,2

0,76

Si

Triang. Ct“. Ch.

135

22

11,6

9.

0,82

Si

Triang. Al. Ch.

136

23

11,5

4.

0,83

Si

Triang. Al. Ch.

137

22,5

22,3

4

0,96

Cal

Triang. Ct“. Ch.

138

19

15

4,4

0,66

Cal

Triang. Ct“. Ch.

139

14,5

11

3

0,28

Si

Triang. Ch.

140

27,5

15

6

1,98

Si

C“rd.

141

27

14

9

2

Ba

Sub Triang. Ch.

142

21

13

6,5

1,77

Ba

Triang. Al.

143

30,5.

14

6

2,82

Ba

Lanc. Ch.

144

29

21

7,5

3,88

Ba

Triang. Ct“. Gde.

145

29

12

9

3,06

Ba

Lanc. Ch.

151

34,4

15,4

8

4,47

Cal

Lanc. Ch.

152

48

13

7,8

4,6

Cal

Lanc. Gde.

153

33

25

7

4,67

Obs

Triang. Ct“. Gde.

154

35,9

15,4

7,7

3,36

Obs

Triang. Al.

155

32,5

14,6

8,8

3,15

Obs

Lanc. Ch.

156 157

23,6 15,5

12,3 12,2

6,3 6

1,98 0,96

Obs Obs

Triang. Ch. Triang. Ch.

M. P.: Materia Prima. Cu: cuarcita; Ba: basalt“; Cal: calced“nia; Obs: “bsidiana; Si: sílice. Limb“: Lanc. Gde: Lance“lad“ grande; Triang. Ct“. Ch.: Triangular c“rt“ chic“; C“rd.: C“rdif“rme; Lanc.Ch.: Lance“lad“ chic“; Triang. Al.: Triangular alargad“; Triang. Ct“.: Triangular c“rt“; Triang. Al. Ch.: Triangular alargad“ chic“; Triang. Ch.: Triangular chic“; Sub triang. Ch.: Sub triangular chic“; Triang. Ct“. Gde.: triangular c“rt“ grande. L“ng.: L“ngitud; Anch.: Anch“; Es”.: Es”es“r. T“das las dimensi“nes en mm y ”es“ en g.

Tabla 4. Rest“ de l“s materiales lític“s de su”ericie recu”erad“s ”“r l“s ”“blad“res N°

Long.

61/1 61/2

28,7 23,8

61/3

11

Anch.

13

Esp.

Peso

M. P.

GR. TIPOL. SUG.

11,7 12

8,68 4,33

T“ T“

T“rter“ T“rter“ ó cuenta asim.

4,2

0,53

Obs

Lasca

76

54

36

17

35,38

Cu

Biface

77

89,2

45,9

21

80,20

Cu

Biface

78

46

78

15,5

58,25

Cu

Raedera sobre lasca

79

48

61

16

36,50

Cu

Lasca c“n il“ activ“

80

54,5

48

11

26,94

Cu

Lasca c“n il“ activ“

82

60,2

30,1

17

21,10

Ba

Pref“rma bifacial

85

59

23,5

10,5

12,58

Ba

Biface d“s il“s act.

86

28,5

42

19

18,78

P“s. Ba

Raedera unif. Circ.

91

2,8

28,7

7,7

3,36

Org. Silicif.

Lasca c“n ”“s. il“ act.

413

(2), julio-diciembre 2015: 395-423 (Tabla 4. Continuación) N°

Long.

Anch.

Esp.

Peso

M. P.

GR. TIPOL. SUG.

93

31

21

16,58

T“

T“rter“ grues“

94

35,5

11

13,74

T“

T“rter“ in“

95

41

18

21,38

T“

T“rter“

96

63

20,5

34,35

T“

T“rter“ sin terminar

97

31

16,5

17,33

Cali

98

32

15

14,08

P“s. Cali

T“rter“

T“rter“ c“n á”ice

99

5,5

3

0,14

Tur

Cuenta

100

6

3

0,09

Tur

Cuenta

101

5

2,3

0,09

Tur

Cuenta

102

6

2

0,10

Tur

Cuenta

103

6

2

0,12

Tur

Cuenta

104

9

3,5

0,45

Tur

Cuenta

105

10

4,3

0,67

Tur

Cuenta

106

7,5

3

0,26

Tur

Cuenta

107

8

4,5

0,39

Tur

Cuenta

108

8,5

4

0,52

Tur

Cuenta

109

6,5

3

0,21

So

Cuenta

110

10

5

0,80

Tur

Cuenta

111

14

5,5

0,72

P“s. Cali

Cuenta

112

14,5

4,5

1,48

So

Cuenta

113

19,2

6

1,83

S“ alt.

Cuenta

114

11,8

11,9

1,36

P“s. Cali ó T“

Cuenta o tortero

115

18

7,4

3,34

Tur

Cuenta o tortero

116

25,5

10

4,47

Cali

T“rter“ asimétric“

117

8,4

23,8

2,53

Tur

Cuenta cilíndrica ”ul.

118

7,8

14

2,28

Tur

Cuenta cil. ”ul. fragm.

119

15,6

23,7

8,06

So

Cuenta cil. ”ul.

120

15

21,4

6,03

Fo

Cil. c“n rayas sim.

121

14

15,2

3,62

Fo

Cil. c“n rayas sim.

122

12,4

25

6,85

Fo

Cil. c“n rayas sim.

123

25,5

13,2

7

2,03

Cal

Perf“rad“r

124

30

10,9

0,7

3,50

Cal

Perf“rad“r

141

27

15

4

2,02

Ba

Posible cuchillo

146

145

101

15

300, 07

Cu

Azada

149

29

24

18

8,39

T“

T“rter“

150

52,8

29,2

21,2

49,25

Cu

Posible Pulidor

M. P.: Materia Prima. Cu: cuarcita; Ba: basalt“; P“s. Ba: P“sible basalt“; Cal: calced“nia; Obs: “bsidiana; T“: t“ba; Org. Silicif.: Material de “rganism“s siliciicad“s; Cali: caliza; P“s. Cali: P“sible caliza; Tur: turquesa; S“: s“dalita; S“ alt: s“dalita alterada; P“s. Cali “ T“: P“sible caliza “ t“ba; F“: Fósil ”“siblemente ”ale“z“ic“. L“ng.: L“ngitud; Anch.: Anch“; Es”.: Es”es“r. T“das las dimensi“nes en mm y ”es“ en g. Gr. Ti”“l. Sug.: Gru”“ ti”“lógic“ sugerid“.

414

N“s referirem“s acá es”ecialmente a esta última, relativa al material lític“ de su”ericie de Alt“ Sa”agua rec“lectad“ ”“r l“s ”“blad“res que habitan actualmente el lugar. Este material am”lía la muestra de l“ recu”erad“ ”“r n“s“tr“s en ”r“s”ecci“nes y excavaci“nes, vinculad“ en algun“s de l“s cas“s a rescates de enterrat“ri“s c“n “frendas. Tal es el cas“ de un enterrat“ri“ de un ne“nat“ (rescate 2, fechad“ ca.1000 AP) en el que ”arte de la “frenda c“nsistía en una “lla c“n t“rter“s sin terminar (igura 3 F). La muestra que t“mam“s aquí (igura 4) se c“m”“ne de 84 ítems, de l“s cuales 36 s“n ”untas de ”r“yectil (tabla 3), 10 s“n t“rter“s, 20 s“n cuentas, 2 s“n ”erf“rad“res y el rest“ c“rres”“nde a bifaces, raederas, lascas c“n il“ activ“, ”ref“rma bifacial s“bre laja, 1 ”“sible cuchill“, 1 azada lítica y tres materiales de “rganism“s siliciicad“s (tabla 4). Las materias ”rimas s“bre las que están c“nfecci“nad“s s“n l“cales y n“ l“cales, de acuerd“ a l“s estudi“s ”revi“s en la z“na (igura 2). L“cales s“n la cuarcita, la calced“nia, el sílice y la caliza; en cambi“, el basalt“, la “bsidiana, la t“ba, la turquesa, la s“dalita y el cuarz“ s“n c“nsiderad“s c“m“ n“ l“cales (igura 2, área de catchment). Las cuentas de esta muestra están c“nfecci“nadas may“ritariamente en turquesa, siguiend“ en ”resencia la s“dalita, s“dalita alterada y caliza. C“n l“ cual, salv“ el ejem”lar de caliza, se trata de materias ”rimas n“ l“cales. En cambi“, l“s ”erf“rad“res s“n de calced“nia, materia ”rima l“cal. En este sentid“, n“s interesan es”ecialmente l“s trabaj“s de Rees H“lland (1999), Ló”ez Cam”eny y Esc“la (2007) y Núñez et al. (2007), que c“mentarem“s en la discusión y c“nclusi“nes. Las ”untas de ”r“yectil ”resentan m“rf“l“gías similares a las descri”tas ”reviamente ”ara ICa1 e ICc5, c“ntr“ladas c“n la secuencia de T“may“c. Están c“nfecci“nadas en cuarcita, calced“nia, sílice, basalt“ y “bsidiana; estas d“s últimas s“n materias ”rimas n“ l“cales. El nivel 4 del s“nde“ de T“may“c (Lavallée et al. 1997), posteriormente interpretado como IIb, brindó una ”unta c“m”arable c“n las tem”ranas menci“nadas ”ara ICa1. Otra similar es la identiicada c“m“ 2.a, ”erteneciente al sub-nivel IIc. También la ”unta 2.f ”erteneciente al f“nd“ de II general, c“m”arable c“n la 2.d, tentativamente del mism“ nivel. T“das estas ”untas fuer“n manufacturadas en sílice, a diferencia de las ”“steri“res, may“rmente talladas en “bsidiana. En T“may“c se enc“ntró una ”unta f“liácea bifacial tallada en cuarcita gris clara y ret“cada a ”resión en el c“ntext“ fechad“ en 4250 ± 50 AP (GIF-8710), c“rres”“ndiente a la ”rimera “cu”ación del aler“, en E9 (Lavallée y García 1992; Lavallée et al. 1997:146-7 y ig. 2a:148). C“n l“ cual, es c“m”arable en este as”ect“ c“n la “cu”ación de cazad“res-rec“lect“res de Inca Cueva cueva 7 antes menci“nada. La secuencia ”ara las ”untas de ”r“yectil de T“may“c muestra una ev“lución desde estas últimas, ”asand“ ”“r las triangulares c“n ”edúncul“ y aletas diferenciadas y, inalmente, las ”untas esc“tadas triangulares c“n ”red“mini“ de “bsidiana c“m“ materia ”rima (Lavalée et al. 1997). En este cas“, “bservand“ la secuencia, enc“ntram“s may“r utilización de “bsidiana. Para nuestr“s ”lante“s, c“m”aram“s las ”untas de ”r“yectil menci“nadas ”ara ICc7, ICa1, ICc5 y T“may“c (igura 6). La tabla 5 muestra una comparación de los materiales hallados por los pobladores con aquell“s analizad“s de l“s siti“s fechad“s; se ”resentan las frecuencias, ”“rcentajes y materias ”rimas l“cales y n“ l“cales em”leadas en su manufactura (tabla 5).

415

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

Figura 6. Puntas de ”r“yectil c“m”aradas en la secuencia. Refs.: B y C: ICc7; 33, 1, 42 y 43: ICa1 ca”a 5; 234, 235 y 233: ICc5 ca”a D; T“ (T“may“c): Abaj“ izquierda: IIb; Abaj“ centr“: IIc; Abaj“ derecha: II General f“nd“. Lavallée et al. 1997:148

416

Tabla 5. T“tales y ”“rcentajes MUESTRA

TOT

%

36

MATERIA PRIMA Cu

Ba

30,25

7

7

6

10

8,4





Cuentas

20

16,8



Lascas

4

3,36

2

Bifaces

3

2,52

Raederas

2

Pref“rmas

1

POBLAD. Puntas de ”r“yectil T“rter“s

Cal Obs

Si

To

Cali Tur

So

Fo

Cua

8

8



















7

3





















1





2

14

4













1

2

1





















1,68

1

1



0,84



1



































Fósiles

3

2,52



















3



Perf“rad“res

2

1,68





2

















Cuchillos

1

0,84



1



















Azada

1

0,84

1





















Pulidor

1

0,84

1





















11

9,24

3

1



1

4

1









1

17

14,28











15

2









SITIOS Puntas de ”r“yectil T“rt./Fichas Cuentas

7

5,88











2



3

2





TOTALES Materia ”rima local Materia ”rima n“ local

119

99,97

17

12

8

10

12

25

7

17

6

4

1

40,33

X

59,66

X X

X X

X X

X X

X

X

Referencias: P“blad.: P“blad“res. T“rt./Fichas: T“rter“s/Fichas. Cu: cuarcita; Ba: basalt“; Cal: calced“nia; Obs: “bsidiana; Si: sílice; T“: t“ba; Cali: caliza; Tur: turquesa; S“: s“dalita; F“: fósil; Cua: cuarz“.

DISCUSIÓN Y CONCLUSIONES El material lític“ de ICa1 muestra una re“cu”ación de un siti“ semi”ermanente s“bre las mismas bases, c“mbinand“ tecn“l“gía c“nservada y ex”editiva entre las actividades desarr“lladas. Planteam“s que l“s c“mienz“s de esta eta”a están más ligad“s a la actividad ”ast“ril a ”artir de un sustrat“ cazad“r-rec“lect“r. Yac“bacci“ et al. (1997-98) ”lantean que el ”r“ces“ de d“mesticación “ manej“ de segment“ de camélid“s ”ara ines es”ecíic“s es un ”r“ces“ regi“nal y que, c“n ciert“s desfasajes, se desarr“lla de manera simultánea. En Susques, Puna de Jujuy, este m“ment“ cazad“r-d“mesticad“r se da alreded“r de l“s 3500 AP. Est“s aut“res, a través de diferentes líneas de evidencia, establecen una estabilización de la estrategia ”ast“ril registrada hacia l“s 2040 AP. También destacan la im”“rtancia de la caza de camélid“s silvestres y el c“nsum“ de r“ed“res, que determinan la existencia de un sistema ”ast“ril-cazad“r hasta m“ment“s tardí“s, ca. 260 AP. Trabaj“s más recientes en la cueva Quis”e (Susques, Puna de Jujuy), ”resentan evidencias de “cu”ación desde 2500 AP hasta la actualidad. Las distintas líneas de evidencia, entre las cuales se 417

(2), julio-diciembre 2015: 395-423

cuentan los estudios del material lítico, muestran el uso de esta cueva a lo largo de su secuencia, el que estuv“ ”rinci”almente relaci“nad“ c“n el manej“ de rebañ“s de llamas, aunque las ”rimeras “cu”aci“nes evidencian un may“r énfasis en la caza de animales silvestres (Yac“bacci“ et al. 2011). N“s resultan de may“r interés las inter”retaci“nes s“bre el ”atrón de asentamient“ y la m“vilidad, que c“inciden c“n l“s ”lante“s vertid“s ”ara Azul Pam”a. L“s fechad“s ”ara esta cueva cubren t“d“ el bl“que tem”“ral aquí analizad“, hasta l“s ca.1100 añ“s AP. C“nsideram“s que ”ueden c“existir d“s ti”“s de estrategias tecn“lógicas líticas, c“nservada y ex”editiva, que se c“njugan. La que se realiza l“calmente, ”ara necesidades diarias, intercambiada a nivel micr“rregi“nal y la que se intercambia ”“r “tr“s bienes a distancias may“res dentr“ de la región. Ambas estrategias tecn“lógicas se c“njugan y s“n necesarias ”ara la subsistencia de la s“ciedad. C“ntrariamente a l“ que se es”eraba, enc“ntram“s una may“r ”resencia de materias ”rimas l“cales en las “cu”aci“nes del 3000 AP y men“r ”resencia de materias ”rimas n“ l“cales, situación que cambia ”“rcentualmente en el 2000 AP y más aún en el 1000 AP, cuand“ tenem“s may“ría de materias ”rimas n“ l“cales (iguras 3 y 4; tablas 1, 2, 3, 4 y 5). En el t“tal de la muestra, hay un 40,33% de local vs. 59,66% de n“ l“cal, ”er“ vem“s un cambi“ ”“rcentual a l“ larg“ del bl“que tem”“ral c“nsiderad“. En un segund“ m“ment“ (ca. 2000 AP) l“s mecanism“s de interacción c“n z“nas alejadas, en un circuit“ este-“este, se habrían intensiicad“, c“mbinánd“se c“n la ”r“ducción micr“rregi“nal. El aument“ y estabilización de la s“ciedad habrían ”r“ducid“ una tendencia a “cu”aci“nes c“n may“r grad“ de ”ermanencia. En un tercer m“ment“ (ca. 1000 AP.), enc“ntram“s también las “cu”aci“nes semi”ermanentes en l“s mism“s es”aci“s c“nsiderad“s fav“rables ”“r estar en una z“na de c“ncentración de nutrientes (Yac“bacci“ 1990) “ ”“r ser el únic“ refugi“ cercan“ al agua y c“n buen“s ”ast“s en una am”lia z“na (Lavallée et al. 1997). En el cas“ AAS, el aument“ de ”“blación y la ”“sible vinculación c“n l“s andenes de cultiv“ y l“s camin“s que l“s unen aut“rizan a integrar en un circuit“ anual l“s siti“s de “cu”ación semi”ermanente y ”ermanente en cuya h“m“geneidad n“ está ausente el arte ru”estre c“m“ manifestación de una c“sm“visión que ”arece tener una larga ”erduración, desde el Arcaic“ hasta nuestr“s días, c“n cambi“s ”r“cesuales ”er“ manteniend“ un sentid“ que incluye la relación del h“mbre c“n su ambiente andin“. La caza ”uede c“nsiderarse una fuente de aliment“s im”“rtante durante t“d“ el bl“que tem”“ral (3000-1000 AP) a ”artir del hallazg“ de las ”untas de ”r“yectil líticas (que, sin embarg“, ”“drían referir a defensa territ“rial), ”er“ también, fundamentalmente ”“r l“s análisis faunístic“s que indican la ”resencia de ”equeñ“s mamífer“s y camélid“s n“ d“mesticad“s en las “cu”aci“nes, tant“ en Inca Cueva c“m“ en AAS (García e Higa 2014). C“nsideram“s a las “cu”aci“nes y sus c“ntext“s c“m“ ”arte de un c“njunt“ que fue usad“ en un m“ment“ determinad“ ”“r un gru”“ human“ en m“vimient“ dentr“ de un territ“ri“. Más allá del sesg“ que c“nllevan l“s materiales de su”ericie, ”ara la muestra analizada hacia el inal del ”erí“d“ c“nsiderad“, tenem“s que decir que su inf“rmación, es”ecialmente en relación c“n las cuentas y ”untas así c“m“ c“n las materias ”rimas em”leadas en su c“nfección, su”era en gran medida aquella ”r“”“rci“nada ”“r las ”r“s”ecci“nes y excavaci“nes sistemáticas. AAS, siti“ de “cu”ación ”ermanente, es también atravesad“ en tres direcci“nes (este, “este y n“rte) ”“r el camin“ de carretas , anteri“rmente incaic“, ”“siblemente realizad“ s“bre sendas ”revias. Este siti“ se c“m”“rta de manera muy diferente en relación c“n l“s siti“s semi”ermanentes de distint“ grad“ de Inca Cueva u “casi“nales, c“m“ el Abra del Altar, que c“necta ambas quebradas (igura 2). De la revisión general de l“s registr“s, surge que ICa1, ca”as 5 y 6, ”resentó s“lamente cinc“ ”untas de ”r“yectil, tres c“n ”edúncul“ y á”ice, una lance“lada (más d“s fragmentadas)y ninguna cuenta ni t“rter“. En l“s “tr“s siti“s c“etáne“s c“n l“s que c“m”aram“s (García 199899) “bservam“s que, cuand“ había cuentas, éstas eran c“nfecci“nadas en valva, c“m“ las antes 418

menci“nadas ”ara cazad“res c“m”lej“s en ICc4. ICc5, en su “cu”ación inicial, fechada ca.2000 AP, ”resenta cuatr“ ”untas de ”r“yectil, tres lance“ladas y una triangular. Del estudi“ de t“d“ su material lític“ en c“njunt“ (Cha”arr“ 1999, 2001) surge que en eta”as ”“steri“res a”arecen t“rter“s y un á”ice de ”unta c“n micr“rret“ques, ”er“ tam”“c“ hay cuentas. Finalmente, en AAS, l“s registr“s de excavación muestran que hay un t“tal de 30 ítems, algun“s de l“s cuales (n=19) están as“ciad“s a l“s fechad“s que n“s interesan. Dad“s l“s intens“s ”r“ces“s de f“rmación naturales y culturales acaecid“s en el siti“ AAS (García e Higa 2014), nos interesa la colección principal recuperada por pobladores, la cual presenta la t“talidad de l“s gru”“s m“rf“lógic“s de ”untas (c“nfecci“nadas en materias ”rimas l“cales y n“ l“cales) ”resentes en l“s siti“s semi”ermanentes. Las lance“ladas llegan a ”esar hasta 14,71 g, en tant“ que las triangulares, entre 0,28 y 0,85 g, c“n l“ cual, de acuerd“ a su tamañ“ y ”es“, ”“drían c“nsiderarse c“m“ ”untas de lecha (Ratt“ 1991). En esta c“lección también a”arecen cuentas, en este cas“ c“nfecci“nadas c“n materias ”rimas distantes, c“m“ la turquesa y s“dalita, ”“siblemente ”r“venientes del n“rte de Chile. De acuerd“ a l“s c“ntext“s c“n alta frecuencia relativa de desech“s y cuentas de malaquita y cris“c“la, así c“m“ ”erf“rad“res de cuarz“ en l“s c“ntext“s F“rmativ“s, se c“nsidera que hub“ manufactura de cuentas ”ara intercambi“, que hacia el Tardí“ s“n reem”lazadas ”“r cuentas más grandes, de may“r es”es“r y más t“scas que las F“rmativas. Además, l“s siti“s de ”r“ducción de cuentas en la vega de Turi están em”lazad“s en ”unt“s estratégic“s de c“ntr“l de vías de c“municación (Rees H“lland 1999). Enc“ntram“s también en nuestra muestra ”erf“rad“res de sílice, que se c“nsidera que han f“rmad“ ”arte de las actividades realizadas en l“s alt“s de caravanas. En el Arcaic“ Tardí“, en la quebrada de Tulán, n“rte de Chile, las cuentas s“n ”rinci”almente malac“lógicas, as“ciadas a una industria de micr“”erf“rad“res(Núñez et al. 2007). En cuant“ a si se trata de “frendas ( ”ag“s ) “ manufactura en siti“s d“méstic“s, Ló”ez Cam”eny y Esc“la (2007) ”lantean la ”r“ducción de cuentas en ámbit“s d“méstic“s agr“”ast“riles de la micr“rregión de Ant“fagasta de la Sierra, Catamarca, Argentina, c“m“ ”“sible excedente ”ara el intercambi“. En este c“ntext“ de ”r“ducción destacan l“s micr“”erf“rad“res que, s“stienen, n“ han sid“ descri”t“s aún ”ara “tr“s siti“s de la micr“rregión ni ”ara “tr“s c“ntext“s agr“”ast“riles del NOA. Amb“s ítems estarían circuland“ c“m“ mercancía, ex”licación que c“nsideran más a”r“”iada que la de su manufactura en l“s ”arader“s vinculad“s a la circulación de caravanas. Para dilucidar estas inquietudes es necesaria may“r inf“rmación c“ntextual. AGRADECIMIENTOS Al C“nsej“ Naci“nal de Investigaci“nes Cientíicas y Técnicas. Al Institut“ de Arque“l“gía, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. A Héct“r Serafín Lamas y Ema Lamas ”“r ”arte de l“s materiales analizad“s. A Estanisla“ Martínez ”“r las f“t“grafías. A Eduard“ Palamarczuk ”“r las determinaci“nes de materias ”rimas. A Cecilia Pérez de Mic“u ”“r el t“rter“ de la estructura en el talud de ICa1.A S“ledad Higa ”“r la igura 1. A Mónica Berón y l“s d“s evaluad“res que mej“rar“n el trabaj“. T“d“s l“s c“nce”t“s vertid“s s“n, sin embarg“, de mi exclusiva res”“nsabilidad. BIBLIOGRAFÍA Aguerre, A., A. Fernández Distel y C. Ascher“ 1973. Hallazg“ de un siti“ acerámic“ en la Quebrada de Inca Cueva (Pr“v. de Jujuy). Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología, T. VII, Nueva Serie: 197-235.

419

(2), julio-diciembre 2015: 395-423 Ascher“, C. A. 1973. L“s m“tiv“s laberíntic“s en América. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología T. VII, Nueva Serie: 197-275. 1975a. M“tiv“s y “bjet“s dec“rad“s del siti“ ”recerámic“ Inca Cueva 7 (Pcia. de Jujuy). Antiquitas, XX-XXI: 2-7. 1975b-1983. Ensay“ ”ara una clasiicación m“rf“lógica de artefact“s lític“s. Inf“rme al CONICET. Ms. 1979. Un asentamient“ acerámic“ en la Quebrada de Inca Cueva (Jujuy). Inf“rme ”reliminar s“bre el siti“ Inca Cueva-4. Actas J“rnadas de Arque“l“gía del N“r“este Argentin“. Antiquitas N° 2: 159-189. 1988. De ”unta a ”unta: ”r“ducción, mantenimient“ y diseñ“ de ”untas de ”r“yectil ”recerámicas de la ”una argentina. Precirculados de las ponencias cientíicas presentadas a los Simposios del IX Congreso Nacional de Arqueología Argentina: 219-229. Universidad de Buen“s Aires, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Institut“ de Ciencias Antr“”“lógicas. 2007. Íc“n“s, Huancas y c“m”lejidad en la Puna sur de Argentina. En A. E. Nielsen, M. C. Riv“lta, V. Seldes, M. M. Vázquez y P. Merc“lli (c“m”s.), Producción y circulación prehispánicas de bienes en el sur andino: 135-165. Córd“ba. Brujas. Ascher“, C.A. y M. M. P“destá 1986. El arte ru”estre en asentamient“s ”recerámic“s de la Puna Argentina. Runa XVI: 29-57. Ascher“, C. A., M. M. P“destá y L. C. García 1991. Pinturas ru”estres y asentamient“s cerámic“s tem”ran“s en la Puna argentina. Arqueología 1:950. Bab“t, M. del P. 2006. El ”a”el de la m“lienda en la transición hacia la ”r“ducción agr“”ast“ril: Un análisis desde la Puna Meridi“nal argentina. Estudios Atacameños 32: 75-92. 2009. Tradici“nes, ”reguntas y estrategias en el ab“rdaje arque“lógic“ de la m“lienda. En R. Barberena, K. B“rrazz“ y L. A B“rrer“ (eds.), Perspectivas Actuales en Arqueología Argentina: 155-188. Buen“s Aires. CONICET, IMHICIHU. 2011. Cazad“res-rec“lect“res de l“s Andes Centr“-Sur y ”r“cesamient“ vegetal. Una discusión desde la Puna meridional argentina (ca. 7.000-3.200 añ“s AP). Chungara 43(1): 413-432. Bamf“rth, D. 1986. Techn“l“gical eficiency and t““l curati“n. American Antiquity 51(1): 38-58. Bleed, P. 1986. The O”timal Design “f Hunting Wea”“ns. Maintainability “r Reliability. American Antiquity 51(4): 737-47. Bellelli, C. 1990. L“s desech“s de talla en la inter”retación arque“lógica. Un siti“ de su”ericie en el Valle de Piedra Parada (Chubut). Precirculad“ X Congreso Nacional de Arqueología Argentina. Catamarca. Binf“rd, L. R. 1973. Interassemblage variability - The M“usterian and the functi“nal argument. En C. Renfrew (ed.), The explanation of Culture Change: 227-254. L“ndres, Duckw“rth. 1977. General Intr“ducti“n. En L. R. Binf“rd (ed.), For Theory Building in Archaeology: 1-10. Nueva Y“rk. Academic Press. 1979. Organizati“n and f“rmati“n ”r“cesses: l““king at curated techn“l“gies. Journal of Anthropological Research 35: 255-273. Cha”arr“, M. G. 1999. La “rganización de la tecn“l“gía lítica en s“ciedades ”ast“riles ”rehistóricas (desde ca. 2.000 AP)

420

en la quebrada de Inca Cueva: El cas“ de la cueva 5 (Jujuy, Argentina). Tesis de Licenciatura inédita, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. 2001. La “rganización de la tecn“l“gía lítica en s“ciedades ”ast“riles ”rehistóricas (desde ca. 2.000 AP) en la quebrada de Inca Cueva: El cas“ de la cueva 5 (Jujuy, Argentina). Arqueología 11: 9-47. C“hen, M. N. 1984. La crisis alimentaria de la prehistoria. La superpoblación y los orígenes de la agricultura. Madrid, Alianza Universidad. Esc“la, P. 1987. Las ”untas de ”r“yectil del F“rmativ“ en ”una y quebradas de acces“: un estudi“ tecn“- ti”“lógic“ de cuatr“ cas“s de análisis. Tesis de Licenciatura inédita. Facultad de Fil“s“fía y Letras. Universidad de Buen“s Aires. 1991. Puntas de ”r“yectil de c“ntext“s f“rmativ“s: acercamient“ tecn“-ti”“lógic“ a través de cuatr“ cas“s de análisis. Actas del XI Congreso Nacional de Arqueología Chilena, T. II: 175-184. Santiag“. Fernández, J. 1988-89. Ocu”aci“nes alfareras en la cueva de Cristóbal, Puna de Jujuy, Argentina (2860 ± 160 añ“s AP). Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología, N.S. XVII (2): 139-182. Fernández Distel, A. A. 1983. Ma”a Arque“lógic“ de Humahuaca. Scripta Ethnologica. Su””lementa 4. C.A.E.A., Bs. As. García, L. C. 1998-99. Arque“l“gía de asentamient“s f“rmativ“s en la Puna Oriental y su b“rde, Pr“vincia de Jujuy: El cambi“ hacia una vida crecientemente sedentaria y ”r“ductiva en Azul Pam”a, De”artament“ de Humahuaca. Tesis D“ct“ral inédita. Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. 2001. W“men at W“rk: A Present Archae“l“gical View “f Azul Pam”a Herding Culture (N“rth West Argentina). En L. A. Kuznar (ed.), Ethnoarchaeology of Andean South America. Contributions to Archaeological Method and Theory. Internati“nal M“n“gra”hs in Prehist“ry, Ethn“archae“l“gical Series 4: 202-220. Michigan, Ann Arb“r. García, L. C. y F. I. Carrión 1992. El f“rmativ“ en la ”una de Jujuy, Inca Cueva-aler“ 1. Cuadernos 3: 21-33. García, L. C. y S. Fernández D“ Rí“ 2011. La “cu”ación humana en la quebrada de Za”agua (Puna de Jujuy). En G. E. J. Ló”ez y H. J. Musci“ (eds.),Arqueología de la Puna Argentina: Perspectivas actuales en el estudio de la diversidad y el cambio cultural: 19-31. Oxf“rd, BAR Internati“nal Series 2296. García, L. C. y P. S. Higa 2014. Un cas“ de estudi“ s“bre s“ciedades ”r“duct“ras de aliment“s iniciales a ”lenas en la ”r“vincia de Jujuy. En G. Cassi“d“r“, A. Re y D. Rindel (eds.), Integración de diferentes líneas de evidencia en la arqueología argentina: 17-39. Buen“s Aires, As”ha. G“nzález, A.R. 1963. Pr“blemas arque“lógic“s de la Puna Argentina. Homenaje al Dr. Pedro Bosch Gimpera, en el Septuagésimo aniversario de su nacimiento: 373-384. Institut“ Naci“nal de Antr“”“l“gía e Hist“ria, Universidad Naci“nal Autón“ma, Méjic“. Hayden, B. 1995. A new “verview “f d“mesticati“n. En: T. D. Price y A. B. Gebauer (eds.), Last Hunters First Farmers New perspectives on the prehistoric transition to agriculture: 273-299. Santa Fe, New Mexic“, Sch““l “f American Research Press.

421

(2), julio-diciembre 2015: 395-423 Jacks“n, D. D. y M. A. Benavente 1995-96. Instrument“s lític“s del c“m”lej“ ”ast“ril tem”ran“ Chiuchiu 200 , N“rte de Chile. Estudios Atacameños 12: 41-52. Lavallée, D. y L. C. García 1992. Investigaci“nes en el aler“ T“may“c - 1987-1989. Cuadernos 3: 7-11. Lavallée, D., M. Julien, C. Karlin, L. C. García, D. P“zzi-Esc“t y M. F“ntugne 1997. Entre Desiert“ y Quebrada. Primer“s resultad“s de las excavaci“nes realizadas en el abrig“ de T“may“c (”una de Jujuy, Argentina). Bulletin de l’Institut Français d’Études Andines 26 (2): 141-175. Ló”ez Cam”eny, S. M. L. y P. S. Esc“la 2007. Un verde h“riz“nte en el desiert“: ”r“ducción de cuentas minerales en ámbit“s d“méstic“s de siti“s agr“”ast“riles. Ant“fagasta de la Sierra (Puna Meridi“nal Argentina). En A. E. Nielsen, M. C. Riv“lta, V. Seldes, M. M. Vázquez y P. Merc“lli (c“m”s.), Producción y circulación prehispánicas de bienes en el sur andino: 225-257. Córd“ba, Brujas. Madraz“, G. 1969. Rea”ertura de la investigación en Alfarcit“, Pcia. de Jujuy, Re”. Arg. Monografías 4. Muse“ Munici”al Dámas“ Arce. Olavarría. Nels“n, M. C. 1984. Chi””ed st“ne Analysis in the Rec“nstructi“n “f Prehist“ric Subsistence Practices: An exam”le fr“m s“uthwestern New Mexic“. Tesis D“ct“ral, University “f Calif“rnia at Santa Barbara, Ann Arb“r, University Micr“ilms. 1991. The Study “f Techn“l“gical Organizati“n. En M. B. Schiffer (ed.), Archaeological Method and Theory, V“l. 3: 57-100. Tucs“n, University “f Ariz“na Press. Núñez Atenci“, L. 1994. Emergencia de c“m”lejidad y arquitectura jerarquizada en la ”una de atacama: Las evidencias del siti“ Tulán-54. En M. E. Albeck (ed.), Taller de costa a selva. Producción e intercambio entre los pueblos agroalfareros de los andes centro sur: 85-115. Institut“ Interdisci”linari“ Tilcara, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. Núñez, L., P. de S“uza, I. Cartajena y C. Carrasc“ 2007. Quebrada Tulán: evidencias de interacción circum”uneña durante el f“rmativ“ tem”ran“ en el sureste de la cuenca de Atacama. En A. E. Nielsen, M. C. Riv“lta, V. Seldes, M. M. Vázquez y P. Merc“lli (c“m”s.), Producción y circulación prehispánicas de bienes en el sur andino: 287-304. Córd“ba. Edit“rial Brujas. Parry, W. J. y R. L. Kelly 1988. Ex”edient C“re Techn“l“gy and Sedentism. En J. K. J“hns“n y C. A. M“rr“w (eds.), The Organization of Core Technology: 285-304. B“ulder, Westview Press. Pintar, E. 1989. Una ex”eriencia de ”is“te“: ”erturbación del registr“ arque“lógic“? Shincal 1: 61-71. Ratt“, N. R. 1991. Elección de r“cas y diseñ“ de artefact“s: ”r“”iedades físic“-mecánicas de las materias ”rimas líticas del siti“ Inca Cueva c-4 (Jujuy, Argentina). En H. Niemeyer (ed.), Actas del XI Congreso Nacional de Arqueología Chilena, T II: 121-137. Santiag“, Muse“ Naci“nal de Hist“ria Natural y S“ciedad Chilena de Arque“l“gía. Rees H“lland, C. 1999. Elab“ración, distribución y c“nsum“ de cuentas de malaquita y cris“c“la durante el ”erí“d“ f“rmativ“

422

en la vega de Turi y sus inmediaci“nes, subregión del rí“ Salad“, N“rte de Chile. En C. A. Ascher“, M. A. K“rstanje y P. M. Vu“t“ (eds.), En los tres reinos: Prácticas de recolección en el Cono Sur de América: 83-93. San Miguel de Tucumán, Magna Publicaci“nes. Schiffer, M. y J. Skib“ 1987. The“ry and ex”eriment in the study “f techn“l“gical change. Current Anthropology 28 (5): 595622. Tarragó, M. N. 1980. L“s asentamient“s aldean“s tem”ran“s en el sect“r se”tentri“nal del valle Calchaquí, Pcia. de Salta, y el desarr“ll“ agríc“la ”“steri“r. Estudios Arqueológicos 5: 29-53. Testart, A. 1982. The Signiicance “f F““d St“rage am“ng Hunter-Gatherers: Residence Patterns, P“”ulati“n Densities, and S“cial Inequalities, and c“mments. Current Anthropology 23 (5): 523-537. Walter, H. 1994. Excavación M“und Huancarani. Investigaciones de arqueólogos alemanes en Bolivia: 9-96. Buen“s Aires, C“lección Mankacén, C.A.E.A. W““d, W. R. y D. L. J“hns“n. 1978. A survey “f disturbance ”r“cesses in archae“l“gical site f“rmati“n. En M. B. Schiffer (ed.), Advances in Archaeological Method and Theory V“l. 1: 315-381. New Y“rk, Academic Press. Yac“bacci“, H. D. 1990. Sistemas de asentamient“ de l“s cazad“res-rec“lect“res Tem”ran“s de l“s Andes Centr“-Sur. Tesis D“ct“ral inédita, Facultad de Fil“s“fía y Letras, Universidad de Buen“s Aires. Yac“bacci“, H. D., M. P. Catá, M. R. M“rales, P. S“lá; M. S. Al“ns“. M. R“senbusch, C. Vázquez, C. T. Samec, B. I. Oxman y M. Cáceres 2011. El us“ de cuevas ”“r ”ast“res andin“s: el cas“ de cueva Quis”e (Susques, Puna de Jujuy). En G. E. J. Ló”ez y H. J. Musci“ (eds.), Arqueología de la Puna Argentina: Perspectivas actuales en el estudio de la diversidad y el cambio cultural: 33-47. Oxf“rd, BAR Internati“nal Series 2296. Yac“bacci“, H. D., C. M. Mader“, M. P. Malmierca y M. del C. Reygadas 1997-98. Caza, d“mesticación y ”ast“re“ de camélid“s en la Puna argentina. Relaciones de la Sociedad Argentina de Antropología XXII-XXIIII: 389-418 y c“mentari“s y res”uesta: 419-429. Zaburlin, M. A., H. E Mamaní, S. Del R. Di” y M. E. Albeck 1996. S JujTil-41: Alfarcit“. Variaci“nes s“bre un clásic“. Actas y Mem“rias del XI C“ngres“ Naci“nal de Arque“l“gía Argentina. Revista del Museo de Historia Natural de San Rafael (Mendoza). XXV N° 1/2.

423

Lihat lebih banyak...

Comentarios

Copyright © 2017 DATOSPDF Inc.