El impacto ambiental de proyectos portuarios turísticos en bahía Magdalena, Baja California Sur, México

July 6, 2017 | Autor: E. Najera-Hillman | Categoría: Conservation
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Descripción

blanca

Pacífico Mexicano. Contaminación e Impacto Ambiental: Diagnóstico y Tendencias

Alfonso V. Botello, Federico Páez-Osuna, Lia Mendez-Rodríguez y Miguel Betancourt-Lozano, Saul Álvarez-Borrego y Rubén Lara-Lara editores

Pacífico Mexicano. Contaminación e impacto ambiental: diagnóstico y tendencias

Botello, A.V., F. Páez-Osuna, L. Mendez-Rodríguez, M. Betancourt-Lozano, S. ÁlvarezBorrego y R. Lara-Lara (eds.), 2014. Pacífico Mexicano. Contaminación e impacto ambiental: diagnóstico y tendencias. uac, unam-icmyl, ciad-mazatlán, cibnor, cicese. 930 p.

© Universidad Autónoma de Campeche, 2014. Instituto de Ecología, Pesquerías y Oceanografía del Golfo de México © Universidad Nacional Autónoma de México, 2014 Instituto de Ciencias del Mar y Limnología © Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo A.C. Unidad Mazatán, 2014 © Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste SC, 2014 © Centro de Investigación Científica y de Eduación Superior de Ensenada, 2014

ISBN 978-607-7887-94-2

Contenido Presentación Directorio de participantes

Tomo I Marco conceptual 1. The Pacific coast of Mexico 1 A. V. Botello, A. O. Toledo, G. de la Lanza-Espino and S. Villanueva-Fragoso

PLAGUICIDAS Introducción 29 A. V. Botello

2. Niveles de concentración de pesticidas organoclorados en moluscos bivalvos del nw de México

33

3. Plaguicidas organoclorados en huevos de la tortuga golfina Lepidochelys olivacea (Eschscholtz, 1829), en las costas del estado de Sinaloa, México

43

4. Plaguicidas y pcb en sedimentos de granjas camaronícolas en un sistema costero de Sinaloa, México

57

J. I. Osuna-López, M. G. Frías-Espericueta, G. López-López, G. Izaguirre-Fierro, H. Zazueta-Padilla, M. Aguilar-Juárez, E. M. Correa-González, J. C. Bautista Covarrubias, J. A. Cervantes-Atondo, L. Sánchez-Osuna y D. Voltolina

L. García Solorio, E. Noreña Barroso y S. Capella Vizcaino

L. M. García-de la Parra, C. González-Valdivia, L. Juleny Cervantes-Mojica, G. Aguilar-Zárate, P. Bastidas y M. Betancourt-Lozano

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

5. Impacto socio-económico del uso de agroquímicos en distritos de riego del noroeste de México (dr 063 Guasave, Sinaloa, y dtt 009 El Bejuco, Nayarit) 73 F. A. González Farias, X. Cisneros Estrada, D. Escobedo Urías y M. López Hernández

6. Consideraciones toxicológicas sobre el uso de plaguicidas en un valle agrícola del noroeste de México

101

7. Plaguicidas organoclorados en sistemas costeros de Nayarit

119

8. Plaguicidas organoclorados en agua y sedimento durante la época de secas y lluvias en la laguna de Agua Brava, Nayarit

139

9. Contenido de plaguicidas organoclorados en varios peces depredadores de la costa de Oaxaca y evaluación del riesgo de exposición por consumo en la salud humana

169

J. Belisario Leyva-Morales, L. M. García de la Parra, I. Eugenia Martínez-Rodríguez, P.J. Bastidas-Bastidas, J.E. Astorga-Rodríguez, J. Bejarano-Trujillo y M. Betancourt-Lozano M. L. Robledo-Marenco, C. Alberto Romero-Bañuelos, A. Elizabeth Rojas García, I. Martha Medina Díaz, Y. Y. Bernal Hernández, B. Socorro Barrón Vivanco y M. I. Girón Pérez

A. Islas-García, Fernando A. González-Farías, L. Robledo Marenco, J. B. Velázquez Fernández y A. V. Botello

G. Martínez Villa, M. Betancourt-Lozano, G. Aguilar Zárate, J. Ruelas Inzunza, V. Anislado Tolentino, G. Cerdenares Ladrón de Guevara, S. Ramos Carrillo y G. González Medina

10. Efectos de plaguicidas organoclorados y organofosforados en humanos 209 M. G. Frías-Espericueta, M. Aguilar-Juárez, I. Osuna-López, J. A. Cervantes-Atondo, G. Izaguirre-Fierro, G. López-López, L. Sánchez-Osuna, H. Zazueta-Padilla y D. Voltolina

METALES, METALOIDES E HIDROCARBUROS Introducción 221 F. Páez Osuna y L. Mendez

11. Metales y metaloides: origen, movilidad y ciclos biogeoquímicos F. Páez-Osuna

225

12. Transferencia de Cd, Cu, Hg, Pb y Zn en la trama trófica de un ecosistema lagunar subtropical de la región centro-este del golfo de California 241 M. E. Jara Marini, L. García Rico, J. García Hernández y F. Páez-Osuna

13. Metales pesados (Cd, Cu, Fe, Mn, Pb, Hg y Zn) y metil-mercurio en mamíferos marinos varados en el golfo de California

267

14. Monitoreo de cuatro metales pesados y un metaloide en isópodos de la especie Ligia occidentalis (s.l.) (Dana, 1853), en costas rocosas con diferentes impactos antropogénicos, en Guaymas, Sonora, México

279

15. La contaminación y distribución de metales pesados en la laguna costera de Barra de Navidad (Jalisco) en el Pacífico Mexicano

293

16. Efectos del dragado de una bahía en el sur de Sonora, en las concentraciones de metales pesados de huevos de aves de colonia

323

17. Mercurio total en algunas especies marinas del noroeste de México: evaluación de riesgo a la salud

341

18. Niveles de mercurio en peces de las costas mexicanas

349

19. Arsénico en organismos marinos del Pacífico Mexicano

365

J. Ruelas-Inzunza, F. Páez-Osuna y M. Horvat

A. Güido Moreno, J. García Hernández, M. E. Jara Marini, G. Leyva García y D. Aguilera Márquez

U. Zaragoza-Araujo, J. L. Zavala-Aguirre, A. Zavaleta-Carmona, F. J. Barragán-Vázquez y J. de Anda-Sánchez

D. Aguilera-Márquez, G. Leyva-García y J. García-Hernández

C. G. Delgado-Alvarez, M. G. Frías-Espericueta y J. R. Ruelas-Inzunza A. Vargas-Jiménez, M. G. Frías-Espericueta y J. R. Ruelas-Inzunza M. E. Bergés Tiznado y F. Páez-Osuna

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

20. Determinación de metales pesados en cuerpos de agua: la ostrícultura en Sonora 379 L. García-Rico, L. Tejeda Valenzuela, M. E. Jara-Marini, A. Gómez-Álvarez y J. García-Hernández

21. Hidrocarburos Aromáticos Policiclicos (hap) en la costa del golfo de Tehuantepec, México

397

22. Indicadores microbiológicos e hidrocarburos aromáticos policíclicos del sistema costero Chantuto-Panzacola, Chiapas

413

R. Flores Ramírez, A. Berumen Rodríguez, C. Ilizaliturri Hernández, J. Chiprés de la Fuente, H. Romo Toledano, D. García Morales y G. Espinosa-Reyes

L. G. Calva Benítez, M. R.Torres-Alvarado, S. H. Hernández Álvarez y G. M. Trejo Aguilar

Tomo II MICROBIOLOGÍA Y FLORECIMIENTOS ALGALES Introduccion 437 I. Wong Chang

23. Incidencia de vibrios patogenos en ostion Crassostrea gigas cultivado en la peninsula de Baja California

441

24. Contaminación microbiológica en la Bahía de Acapulco

457

25. Contaminación microbiológica en la zona costera del Pacífico Mexicano

477

26. Impacto ambiental de los Florecimientos Algales Nocivos (fan)

495

27. Los florecimientos macroalgales de las costas del Pacífico Mexicano: una síntesis sobre sus causas y efectos

509

C. Abraham Guerrero Ruíz, J. A. Fuentes Pascacio y M. L. Lizárraga-Partida G. Barrera Escorcia, J. C. Vázquez Martínez y M. E. Meave del Castillo

Carlos Leopoldo Fernández-Rendón y Guadalupe Barrera-Escorcia

R. Cortés-Altamirano, M. C. Cortés-Lara, R. Alonso-Rodríguez y S. Licea-Durán

A. Piñón-Gimate, Federico Páez-Osuna, E. Serviere-Zaragoza y M. Casas-Valdez

IMPACTO AMBIENTAL Introducción 535 S. Álvarez-Borrego y R. Lara-Lara

28. Impacto en la calidad del aire en la región del golfo de California, México

539

29. Índices para determinar salud ambiental acuática. Estudios de caso en las regiones del istmo de Tehuantepec y la costa oriental del golfo de California

559

30. Biovigilancia de contaminantes orgánicos persistentes en la costa occidental de Baja California

591

31. Isótopos estables (δ15N y δ13C) en organismos filtradores como trazadores de contaminación: un caso de estudio en dos lagunas costeras del sureste del golfo de California, México

619

32. El impacto ambiental de proyectos portuarios turísticos en bahía Magdalena, Baja California Sur, México

635

33. Organismos macrobénticos indicadores de contaminación. Bahía de Guaymas, Sonora, costa oriental del golfo de California

655

34. Impactos medioambiental y socioeconómico sobre la cuenca baja del río Culiacan, Sinaloa

687

35. Evaluación de la calidad del agua en el sistema estuarino de Urías, México por medio de índices tróficos

705

H. Bravo A., R. Sosa E., I. Cureño G., P. Sánchez A., M. Jaimes P., G. Fuentes G., V. Torres M. y J. Genescá LL.

S. Margarita Ortiz Gallarza y A. Ortega Rubio

E.A. Gutiérrez Galindo, C. Quezada Hernández, M.V. Orozco Borbón, L. W. Daesslé

Y. E. Torres-Rojas y F. Páez-Osuna

R. Marcín Medina, G. Hinojosa Arango, J. López Calderon, A. Gómez Gallardo, E. Nájera-Hillma, y R. Riosmena Rodriguez

S. M. Ortiz Gallarza, G. J. de la Lanza Espino y R. T. Pérez Rodríguez

G. de la Lanza Espino y Norma Sánchez Santillan

M. Á. Sánchez-Rodríguez, E. I Izaguirre-Flores, y O Calvario-Martínez

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

36. Comportamiento anual de la calidad del agua del estero de Urias, México

721

37. Biomarcadores bioquímicos en ostión Crassostrea corteziensis del estero Boca de Camichín, Nayarit

739

38. Contaminación en la bahía de Zihuatanejo

751

39. Influencia de las descargas de aguas residuales y su impacto en la calidad del agua de la bahía de Acapulco, Guerrero

789

40. La prueba de micronúcleos: biomarcador de contaminación genotóxica, mutagénica o/y teratogénica

819

41. Histopatologías en el camarón blanco L. vannamei expuestos a una mezcla de metales

849

42. Efectos del cultivo de peces en jaulas flotantes sobre la calidad del agua y de los sedimentos en el Pacífico Mexicano

859

E. I. Izaguirre-Flores, M. A. Sánchez-Rodríguez y O. Calvario-Martínez

L. Ortega-Cervantes, I. Martha Medina-Díaz, Y. Yvette Bernal-Hernández, A. E. Rojas-García, M. L. Robledo-Marenco, B. Socorro Barrón-Vivanco, M. Iván Girón-Pérez y C. A. Romero-Bañuelos

D.J. Izurieta, F.P. Saldaña, B.L. Inclan, J. Sánchez, Ch., F.A. Ordoñez, L.A. Ruiz, C.M. Mijangos, M.J. Cortes, P.R. Morales, L. J. Pérez, M.H. Vélez, A.I. Ramírez y T.A. Mejía.

M. P. Saldaña-Fabela, M. A. Gómez-Balandra, J. Izurieta-Dávila y Y. Pica-Granados

O. Torres-Bugarín, M. L. Ramos-Ibarra, S. Ruíz Bernés, A. Flores García y M. Guadalupe Zavala

S.M. Abad-Rosales, M.G. Frías-Espericueta, A.C. Nevárez-Velázquez, J.I. Osuna-López, F. Páez-Osuna, R. Lozano-Olvera y D. Voltolina

J. Ramón Rendón Martínez, M. G. Frías Espericueta, C. Hernández, D. A. Osuna Bernal, E. Romero-Beltrán y D. Voltolina

NORMATIVIDAD 43. Normatividad en zonas costeras 873 T. E. Saavedra Vázquez

Pacífico Mexicano. Contaminación e Impacto Ambiental: Diagnóstico y Tendencias

Marcín Medina, R., G. Hinojosa Arango, J. López Calderon, A. Gómez Gallardo, E. Nájera-Hillma, y R. Riosmena Rodriguez, 2014. El impacto ambiental de proyectos portuarios turísticos en bahía Magdalena, Baja California Sur, México. p. 635-654. En: A.V. Botello, F. Páez-Osuna, L. Mendez-Rodríguez, M. Betancourt-Lozano, S. Álvarez-Borrego y R. LaraLara (eds.). Pacífico Mexicano. Contaminación e impacto ambiental: diagnóstico y tendencias. uac, unam-icmyl, ciad-Mazatlán, cibnor, cicese. 930 p. isbn 978-607-7887-94-2.

El impacto ambiental de proyectos portuarios turísticos en bahía Magdalena, Baja California Sur, México

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Rocío Marcín Medina, Gustavo Hinojosa Arango, Jorge López Calderon, Alejandro Gómez Gallardo, Eduardo Nájera-Hillma y Rafael Riosmena Rodriguez

Resumen En las últimas décadas los impactos causados por humanos se han incrementado considerablemente en los ecosistemas costeros. Esto es debido en gran medida a los asentamientos y actividades antropogénicas como desarrollos turísticos, urbanización, actividades pesqueras no sustentables; y tránsito marino. Las zonas costeras albergan hábitats críticos en donde se alimentan, reproducen y protegen una gran biodiversidad de animales tanto en estadios adultos como juveniles y larvarios. Los mamíferos marinos en particular están expuestos a un disturbio potencial por embarcaciones, que les pueden ocasionar desde colisiones, alterar sus conductas así como su comportamiento acústico, cambios en el uso del hábitat o hasta llegar a la pérdida del mismo, disminución de las poblaciones, entre otros. Una zona de gran interés debido a su diversidad biológica, potencial pesquero y atractivo paisajístico es bahía Magdalena en la costa del Pacífico de bcs. Donde en 2012 el gobierno estatal pretendía modificar el muelle de Puerto Cortés, en isla Santa Margarita, para implementar el proyecto “dragado de mantenimiento del canal de navegación alterno en Puerto San Carlos”, cuyo objetivo era permitir el tránsito a mega cruceros turísticos de gran calado provenientes del Océano Pacífico, construir un muelle de altura y un “Pueblo Ballenero” con lugares de recreo y descanso, tiendas y restaurantes de

635

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

uso exclusivo para turistas de los cruceros, restringiendo el acceso a la isla. De llevarse a cabo este desarrollo portuario-turístico se prevé que tenga consecuencias con grandes impactos tanto ambientales como sociales, afectando a especies, varias de ellas protegidas por la nom-059-semarnat-2010 así como su hábitat, aunado a las actividades económicas que realizan los pescadores como las pesquerías y el ecoturismo que hasta el momento ha sido dominado por las pequeñas embarcaciones denominadas localmente como pangas. Palabras clave: Impacto ambiental, hábitat crítico, desarrollo portuario turístico, ballena gris, delfín, tursión.

Abstract In recent decades the impact caused by humans has increased considerably in coastal ecosystems. This is due in great part to settlements and anthropogenic activities such as touristic development, urbanization, unsustainable fishing activities and marine transit. The coastal zones host critical habitats where a great biodiversity of animals feed, reproduce and find protection, in adult, juvenile and larval stages. In particular, marine mammals are exposed to potential disturbance by ships, which can cause collisions, alter their behavior and acoustic perception, changes in the use of the habitat or even its loss, reduction in populations, among others. Magdalena Bay, located on the Pacific coast of Baja California Sur is a zone of great interest due to its biological diversity, fishing potential and natural beauty. In 2012 the state government decided to modify the pier of Puerto Cortés, at Santa Margarita Island, to implement the project “maintenance dredging of the alternative navigation channel in Puerto San Carlos”, with the objective of allowing transit of large tourist cruise ships from the Pacific Ocean, and to construct a high pier and a “Whaling Village” with recreational areas, shops and restaurants for the exclusive use of the tourists from the cruises, restricting access to the island. If this project is carried out, it will have consequences of great environmental and social impact, affecting species, some of which are protected by nom-059-semarnat-2010, along with their habitat, added to the economic activities of the fishermen and fisheries, as well as ecotourism, which until now has been dominated by small vessels known locally as “pangas”. Keywords: Environmental impact, critical habitat, touristic port development, gray whale, dolphin, bottlenose dolphin.

Introducción Se considera al complejo lagunar bahía Magdalena-bahía Almejas dentro del estado de Baja California Sur, como uno de los hábitats litorales más importantes de México, región prioritaria hidrológica y área prioritaria para la conservación de la biodiversidad (Anómino, 2006; Ruiz-Luna y Acosta-Velázquez, 2009; Cruz-Escalona et al., 2013). 636

En el 2000, la Comisión para la Cooperación Ambiental de América del Norte (cca) identificó de la región de Baja California hasta el mar de Bering, como una de sus regiones prioritarias para la conservación de la biodiversidad en América del Norte (Morgan et al., 2005). Es el mayor ecosistema de humedales en la costa oeste de la península

Impacto ambiental

de Baja California (Morgan et al., 2005) y centro de actividad biológica debido a que posee hasta cuatro veces la productividad primaria y secundaria de otras áreas costeras del Pacífico peninsular (Nienhuis & Guerrero-Caballero, 1985; Lluch-Belda et al., 2000a), lo que permite altas densidades de especies de importancia tanto ecológica como comercial (Lluch-Belda et al., 2000a). Dentro de los animales se incluyen aves marinas, peces, moluscos, crustáceos, reptiles, anfibios y delfines entre otros. Forma también parte de un corredor biológico y circuito migratorio de organismos protegidos por la nom-059-semarnat-2010 como son las tortugas marinas (Nichols et al., 2000), elefantes y lobos marinos (Mirounga angustrirostris y Zalophus californianus respectivamente) (Peterson & Bartholomew, 1967; Le Boeuf & Laws, 1994), ballenas gris (Eschrichtius robustus), azul (Balaenoptera musculus) y jorobada (Megaptera novaeangliae) (Rice & Wolman, 1971; Urbán, 2001; Gendron, 2002). Esto sin contar el gran número de aves migratorias que hacen uso del complejo lagunar y los manglares que bordean sus costas internas. Las actividades antropogénicas en las zonas costeras de Baja California Sur han aumentado considerablemente en los últimos años, con el consecuente incremento del tráfico de embarcaciones, debido a esto, los mamíferos marinos costeros están expuestos a un disturbio potencial por el tráfico marino, cuyos efectos directos son: las colisiones que resultan en lesiones y/o acoso por las embarcaciones durante actividades de avistamiento que pueden alterar su comportamiento (Wells & Scout, 1997; Nowacek et al., 2001; Prideaux, 2003), y efectos in-

directos como: cambios en el uso del hábitat, aumento de estrés, disminución de las poblaciones, alteración tanto de las conductas como del comportamiento acústico, lo que puede provocar un decremento en su interacción social y la orientación en su ambiente; y en última instancia conllevan a la pérdida de su hábitat, lo que puede llegar a ser especialmente crítico en las especies que tienen un rango limitado en su distribución (Richardson et al., 1995; Wells & Scout, 1997; Nowacek et al., 2001; Prideaux, 2003; Lemon et al., 2006; Marcín-Medina, 2010). Puede citarse como ejemplo de lo anterior a los cambios que ocurrieron en las bahías del sur de Sonora y norte de Sinaloa, donde las ballenas grises solían concentrase en invierno. El intenso desarrollo de la acuacultura en esa zona y el incremento de la pesca y del tráfico marino, han ocasionado que las ballenas no usen más esta zona (Guerrero et al., 2006). El caso de la ballena gris en esta zona es muy particular, pues es conocido que la costa occidental de la península de Baja California, es el objeto de la distribución invernal con fines de reproducción de la población oriental de esta especie, donde las lagunas costeras de Ojo de Liebre, San Ignacio y el complejo lagunar de bahía Magdalena-bahía Almejas, son las principales zonas de concentración, la cuales tienen una importancia fundamental, pues son las principales zonas de parto y crianza de sus ballenatos (Rice & Wolman, 1971). Actualmente se sabe también que hay movimientos de adultos de la población occidental a estas zonas (Weller et al., 2012), lo que hace aún más relevantes estas zonas. En lo que corresponde a las lagunas de Ojo de Liebre, San Ignacio y el 637

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

complejo lagunar de bahía Magdalena, las principales modificaciones a su hábitat se deben a la pesca ribereña, el tráfico marino, el turismo y el desarrollo industrial, como es el caso de la extracción de roca fosfórica en bahía Magdalena y la extracción de sal en Guerrero Negro (Guerrero et al., 2006). Bahía Magdalena es una región que depende de los recursos pesqueros que se producen tanto dentro como fuera del cuerpo lagunar. Las zonas productivas del complejo lagunar bahía Magdalena-Almejas presentan cierta regularidad de localización, siendo la porción central una de las más importantes para los moluscos bivalvos y camarón, mientras que la escama se puede obtener de los canales de manglares o en la parte externa de la bahía (García-Martínez y Chávez-Ortíz, 2007). Los productos más importantes con base a precio y volúmenes de producción son: abulón, langosta, camarón, varias especies de peces agrupadas en la categoría de escama, almejas generosa, catarina y chocolate (Cota-Nieto, 2010). Las almejas dependen de la estabilidad relativa de los sedimentos, ya que al ser filtradores dependen de una cierta calidad de agua para evitar la saturación del aparato filtrador. El 10 de julio de 2012, la Administración Portuaria Integral de Baja California Sur (apibcs) como promovente, en cumplimiento a lo dispuesto por los Artículos 28 y 30 de la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (lgeepa), sometió para evaluación por parte de la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (semarnat), la Manifestación de Impacto Ambiental Modalidad Particular (mia-p), el proyecto “dragado de mantenimiento del canal de navegación alterno en puerto San 638

Carlos”, en bahía Magdalena, municipio de Comondú (Baja California Sur). Su objetivo era realizar un muelle de altura y permitir el tránsito a mega cruceros turísticos que navegan por el Océano Pacífico, tales como Holland America Line y Carnival Cruise Line, para lo cual solicitaban hacer un dragado para un canal de 3 550 m de longitud con la profundidad para que naveguen embarcaciones de gran calado con esloras de hasta 300 m., manga de 35 m. y calados de hasta -8.80; y con un volumen a desazolvar de aproximadamente 1 371 448 m3. Mediante un convenio firmado por la Federación con la empresa de cruceros Carnival, para entregarle tanto el muelle de Puerto Cortés ubicado en la isla Santa Margarita donde se encuentra operando actualmente la base naval de la Secretaría de la Marina (semar) (instalaciones que tendrían que ser removidas de llevarse a cabo este desarrollo y en donde no se considera que existe un decreto presidencial del 21 de noviembre de 1950 en el que se indica que la semar tiene a su cargo la administración de la isla Margarita), como terreno e instalaciones anexas, para construir además un “Pueblo Ballenero” que tendría lugares de recreo y descanso, tiendas y restaurantes de uso exclusivo para turistas de los cruceros, restringiendo el acceso a la isla, que estaría a cargo de la línea de cruceros y sus concesionarios (Manifestación de Impacto Ambiental en su modalidad particular con la clave 03bs2012hd048). El presente trabajo es un análisis que compila información de varios proyectos de investigación sobre el uso del complejo lagunar bahía Magdalena-Almejas por parte de la ballena gris y los tursiones. Asimismo se incluye información sobre las pescas que

Impacto ambiental

pudieran ser afectadas por el incremento en el tráfico de embarcaciones y la dinámica

de sedimentos que resultaría de las obras de dragado propuesto.

Objetivos Objetivo general

• Analizar el impacto ambiental potencial del proyecto “Dragado de mantenimiento del canal de navegación alterno en Puerto San Carlos”, Baja California Sur (México).

Objetivo específico

• Explicar el impacto ambiental potencial para el ecosistema y las especies como ballenas y delfines que provocaría del proyecto “dragado de mantenimiento del canal de navegación alterno en Puerto San Carlos”. • Determinar el impacto ambiental para las pesquerías que provocaría el proyecto “dragado de mantenimiento del canal de navegación alterno en Puerto San Carlos”,

Area de estudio El complejo lagunar bahía Magdalena-Bahía Almejas se encuentra en el municipio de Comondú, en la costa sur-occidental de la península de Baja California Sur, México (240 16’ N y 250 45’ y 1110 20’ W 1120 18’ W) (figura 1). Está protegido del Océano Pacífico por dos islas de barrera, Magdalena y Santa Margarita o Margarita; y se divide en tres zonas geomorfológicamente distintas (Álvarez-Borrego et al., 1975, Hernández Rivas et al., 1993; Lluch-Belda et al., 2000b): • Zona Noreste conocida también como Zona de canales (137 km2): conformada por una gran cantidad de esteros, lagunas y canales someros (usualmente < 12

m y con profundidades inferiores a 3.5 m y máximas de 18 m), interconectadas al sur con el canal de San Carlos por medio de un canal de 42 m de profundidad, y al norte con el canal de Santo Domingo (< 10 m) que se conecta con la plataforma continental a través de dos bocas (Santo Domingo y La Soledad) relativamente angostas (< 2 km de ancho) y de poca profundidad (~20 m). Cercano a la boca de la Soledad encontramos Puerto Adolfo López Mateos. • Zona Central denominada como bahía Magdalena (883 km2): se comunica al oeste con la plataforma continental adyacente a través de una boca relativa639

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

Figura 1. Complejo lagunar bahía Magdalena-bahía Almejas y sus principales rasgos geográficos.

mente ancha (6.5 km) y profunda (40 m) entre las islas de Magdalena y Margarita y es la principal fuente de acceso a embarcaciones mayores y megafauna. En esta zona se encuentra el puerto de San Carlos. • Zona Sur conocida como bahía Almejas (370 km2): con una profundidad promedio de 8 m a un máximo de 27 640

m. Se comunica con el Océano Pacífico a través de una amplia boca (~2 km) a través del canal Rehusa formado por isla Margarita e isla Creciente. En esta zona se encuentra puerto Chale. Las 3 zonas están interconectadas mediante canales con una profundidad menor a los 12 m. Al noroeste se comunican la zona de bahía Magdalena con la zona de canales con

Impacto ambiental

el canal de San Carlos (~5 km de ancho) y en el sureste bahía Magdalena y bahía Almejas con el canal de Gaviotas (~2.5 km de ancho y profundidad 20 m). Dentro de las condiciones oceanográficas convergen la corriente Norecuatorial y la de California en la parte exterior de la bahía, lo que permite surgencias estacionales, concentración y enriquecimiento de nutrientes, procesos de turbulencia y transporte de Ekman (Arriaga-Cabrera et al., 1998). Esto aunado a los bosques de manglar distribuidos en los canales someros dentro de la bahía, permiten una amplia biodiversidad y hábitats críticos de alimentación, refugio y reproducción para una gran cantidad de invertebrados y vertebrados muchos de ellos de valor comercial y ecológico (Chávez-Rosales, 2006). El sistema lagunar de bahía Magdalenabahía Almejas es un ecosistema costero de considerable relevancia para el desarrollo socioeconómico regional (Mathews, 1975) debido a sus altas concentraciones de fitoplancton que prevalecen durante la mayor

parte del ciclo anual (Nienhuis & GuerreroCaballero, 1985) e intensa actividad pesquera principalmente de peces pelágicos menores, camarón, jaiba y moluscos bivalvos (Saldierna et al., 1987; Sánchez-Ortiz y Gómez-Gutiérrez, 1992), y es considerada como una de las zonas más productiva en Baja California Sur. La acumulación de grandes agregaciones superficiales de zooplancton detectadas a lo largo del frente de marea (< a los 15 m de profundidad) en bahía Magdalena están compuesta principalmente por enjambres de copépodos Calanus pacificus y depredadores zooplanctófagos como la langostilla, sardinas, y macarela. Se ha demostrado que este frente de marea es una zona ecotonal temporal pero con un relevante papel ecológico en la trofodinámica de bahía Magdalena, particularmente para especies pelágicas como las langostillas y cardúmenes de sardinas que se alimentan de zooplancton y sus depredadores tope en esta bahía subtropical altamente eutrófica (Martínez-Gómez, 2006).

Metodología Descripción de la metodología utilizada

El enfoque de nuestro trabajo es cualitativo, debido a que se ha desarrollado un mapa sig para comprender la distribución espacial de los delfines, en una zona donde se pretende realizar un proyecto de desarrollo turístico sin considerar aspectos relevantes para la sustentabilidad de la zona central de bahía Magdalena. El contexto de nuestra investi-

gación está en el marco de la sustentabilidad ambiental. Se realizó una revisión bibliográfica de artículos científicos publicados en revistas nacionales e internacionales sobre estudios realizados en el complejo lagunar de bahía Magdalena-bahía Almejas, así como la búsqueda de materiales como reportes de instituciones de investigación, tesis y tesinas, que permitieran ejemplificar los posibles impac641

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

tos del desarrollo de actividades de dragado en las ballenas grises y los tursiones. Asimismo se presenta información no publicada y basada en el conocimiento de los autores. En cuanto a la observación de mamíferos marinos, se cuenta con los datos de la Escuela de Estudios de Campo donde sistemáticamente visitaron las zonas de esteros y el cuerpo principal de la laguna para hacer censos para registrar la distribución, abundancia y uso del hábitat de 4 especie de mamíferos marinos (Perazio, 2010). Se realizaron recorridos a lo largo del complejo lagunar bahía Magdalena-bahía Almejas de manera regular en la temporada de avistamiento de ballena gris, y con diferentes temporalidades para el caso de delfines. En ambas bahías se realizó la búsqueda directa de cetáceos mediante la técnica de muestreo de distancia en segmentos lineales (Buckland et al., 1993) a bordo de embarcaciones pequeñas (pangas). Los transectos fueron registrados con un sistema geoposicionador (gps). En cada panga se posicionaron cuatro personas para la observación y censo de cetáceos, cada uno orientado en diferente ángulo de observación. Los observadores de ambos lados y el del centro utilizaron binoculares 7×50, mientras que el cuarto observador se encargó de registrar los datos. Las observaciones de cetáceos se realizaron desde la panga a una velocidad que permitía distinguir los organismos presentes

en el área, durante la mayor parte del día, en buenas condiciones oceanográficas y climáticas (0 a 3 en la escala Beaufort). Al realizar cada avistamiento se registró la fecha, hora, coordenadas geográficas (latitud y longitud), se identificó en la medida de lo posible la especie y el número de individuos. Al finalizar el día, los datos fueron transferidos a una computadora portátil para llevar el registro diario del esfuerzo de búsqueda de cetáceos. Se elaboraron mapas de distribución y abundancia relativa de cada especie con el programa Surfer versión 8.0. Los avistamientos en los cuales no se pudo identificar la especie no fueron incluidos en los análisis. En el caso particular de la ballena gris se tomaron fotografías, con una cámara digital, de cada individuo a la altura de la aleta dorsal del lado derecho e izquierdo, se iniciará con la elaboración de un catálogo fotográfico. Se identificó el número de individuos diferentes que entran a la bahía, utilizando la técnica de foto-identificación. Las fotografías se analizaron en el laboratorio con la finalidad de distinguir cada individuo y conocer el número de organismos que entraron a la bahía en dos años (2011-2012). La fotografía de cada individuo se etiquetó con claves para posteriormente utilizar la técnica de captura-recaptura y establecer el número total de ballenas que habitan el complejo lagunar bahía Magdalena-bahía Almejas.

Resultados y discusión Dada la relevancia biológica y económica del complejo lagunar de bahía Magdalena-bahía Almejas, los proyectos portuarios turísticos 642

como el del “dragado de mantenimiento del canal de navegación alterno en puerto San Carlos” que pretendía realizar la Adminis-

Impacto ambiental

tración Portuaria Integral de Baja California Sur, puede poner en un gran riesgo a varias especies protegidas y las pesquerías. Dentro de los disturbios ambientales se encuentran el impacto por ruido y contaminación marina que provocan el dragado y el tránsito de embarcaciones a los mamíferos marinos. Se ha registrado la presencia cuatro especies de cetáceos, tres de ellos pertenecientes al suborden odontoceti miembros de la familia delphinidae: tursiones o toninas (Tursiops truncatus), delfín de costados blancos (Lagenorhynchus obliquidens), delfín común de rostro corto (Delphinus capensis); y uno solo perteneciente al suborden mysticeti de la familia Eschrichtidae, la ballena gris (Eschrichtius robustus). Al respecto dos especies que se deben considerar por su permanencia e importancia biológica y económica son la ballena gris y los delfines que están protegidos en México por la nom-059-semarnat-2010.

Ballena gris

El complejo lagunar bahía Magdalena-bahía Almejas es la única zona de crianza de ballena gris en la península de Baja California que no cuenta con ningún tipo de protección con carácter de Área Natural Protegida. Aun así, cuenta con áreas restringidas designadas para la observación de ballenas grises (Ollervides y Rohrkasse, 2007). Estas áreas son donde se concentran la mayor parte de la población de ballenas que entran al complejo lagunar bm–ba y donde ocurre la mayor parte de los nacimientos de ballenatos (Pérez-Cortés et al., 2004). La ballena gris, al ser una especie migratoria se le encuentra principalmente durante los meses de enero a marzo, teniendo un pico en su abundancia

durante el mes de febrero (Fleischer et al., 2007). Una serie de censos desde embarcaciones menores de 1983 a 1985 registraron la presencia de ballenas grises de mediados de enero a mediados de marzo (Fleischer & Beddington, 1985; Fleischer y Contreras, 1986). Los conteos máximos de 1985 reportaron 173 madres con cría y 15 adultos sin cría. Una segunda serie de 1997 a 2002, mostró cambios drásticos en la abundancia de ambos tipos de ballenas (madres y adultos) (Pérez-Cortés et al., 2000; Urbán et al., 2003), con un decremento de la abundancia de 1997 (83) a 1998 (12) y una recuperación gradual hasta el 2002, relacionado con los efectos de El Niño 1998. La zona de navegación de los cruceros es justo por la boca principal donde se agregan los adultos para el cortejo y apareamiento. Se han identificado tres zonas principales de distribución de las ballenas durante su estadía en la bahía: a) Canal de Santo Domingo principalmente usado por madres y crías, b) Bahía Magdalena y c) Bahía Almejas (Pérez-Cortes et al., 2004). El análisis de la distribución de los individuos dentro de bahía Magdalena han demostrado una segregación de los organismos dependiendo de la edad y sexo (Hinojosa-Arango y RiojaNieto, 2009). Mientras que la parte exterior de la bahía es zona de navegación no solo para ballena gris, pero también para ballena jorobada en su ruta migratoria a la región de Jalisco, Nayarit e incluso otros estados más al sur de México (Pérez-Cortes et al., 2006). Debido a la interacción regular de las ballenas con las embarcaciones menores durante su estadía en las bahías de Baja California, pareciera que se han ido acostumbrando a dicha interacción (Specht, 2008). 643

Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

Los reportes del incremento del número de ballenas “amistosas” en las diferentes bahías ha ido en aumento, sin embargo se puede apreciar que las ballenas son acosadas fuertemente por algunos prestadores de servicios, especialmente aquellos que han realizado la actividad por menor tiempo. En otras áreas cercanas, Todos Santos, se ha observado que las ballenas modifican sus velocidades de movimiento y comportamientos ante la presencia de embarcaciones menores (Heckel et al., 2001). Para el caso de la ballena gris, las zonas someras (2 a 5 m) son las preferidas por las madres para criar a sus ballenatos, debido principalmente a que son zonas que evitan los adultos sin cría y los depredadores en general. Aunque generalmente es mencionada como área de reproducción, los estudios en el complejo lagunar de bahía Magdalena-bahía Almejas son esporádicos y con distintos fines y metodologías. Se sabe que las madres y sus crías prefieren la zona comprendida por el canal de Santo Domingo hasta la boca de la Soledad, mientras que el resto de los adultos y las ballenas jóvenes se distribuyen con preferencia en el resto del área. En particular la ballena gris, es un recurso natural protegido por las leyes mexicanas y su observación es aprovechada por las cooperativas pesqueras que se dedican a ser guías de turismo lo que les permite una derrama económica a diferentes sectores como el pesquero, prestadores de servicios y empresarial de San Carlos y López Mateos. En general en Baja California Sur, los ingresos totales, derrama económica por transporte, alojamiento, alimento y otros, son mayores que los ingresos directos por la observación turística. Los precios por la observación (pa644

gados a la panga /lancha) sólo representan un mínimo (1 a 2% aproximadamente) del precio total del viaje. Si bien esos precios incluyen costos y ganancias, indican que el mayor beneficio económico es hacia las otras actividades del viaje. La estimación anterior no considera los costos para proteger a las ballenas, instalaciones, vigilancia, etc.). En este caso, la estimación somera de la derrama económica para el estado es de 45 millones en 1996 (Foucat y Saad, 1988). Diversos estudios han mostrado el efecto negativo de procesos de dragado, como el ocurrido en la laguna Ojo de Libre en 1957, cuando la compañía Exportadora de Sal, realizó trabajos de dragado en los canales principales de la laguna y resultaron en la disminución significativa de ballenas durante los 10 años siguientes (Dedina, 2000). Asimismo se sabe que ésta y otras especies de mamíferos marinos migratorios nadan más alejados de la costa al acercarse a ciudades como Los Ángeles y San Diego para evitar el ruido y la interacción con embarcaciones (Moore & Clarke, 2002). En cuanto a bahía Magdalena es una de las tres lagunas utilizadas por la ballena gris para aparearse y dar a luz, por lo que es de gran importancia que los servicios ecológicos de la misma se conserven. En bahía Magdalena, Martínez et al. (2002) reportaron cambios en la frecuencia respiratoria y en las diferentes categorías de comportamiento asociado con el acercamiento de las embarcaciones turísticas, mencionando sin embargo que los efectos negativos por perturbaciones en el medio sólo se pueden contemplar en estudios a largo plazo. Por su parte Rivera et al. (2003), reportaron un aumento en las conductas y

Impacto ambiental

en el número de respiraciones, así como una disminución en el tiempo de inmersión de las ballenas grises en presencia de embarcaciones durante 2000-2001 y 2001-2002. Ollervides y Rohrkasse (2007) analizaron el repertorio de vocalización de la ballena gris en bahía Magdalena y reportaron que las señales registradas en el repertorio acústico de las ballenas grises cambiaron en respuesta a los niveles del ruido ambiental. Las características específicas en cada señal (frecuencia predominante, ancho de banda, duración, y frecuencias máximas y mínimas) se contrastaron en presencia y ausencia de embarcaciones y ruido asociado a estas. Aunque la respuesta acústica de las ballenas varió según la localización de los grupos en el complejo lagunar, también se observaron cambios en respuesta acústica según el tamaño y la composición del grupo. A corto plazo, los efectos del tráfico de embarcaciones parecen afectar negativamente la reproducción (apareamiento y crianza) de estos organismos. Recomiendan implementar un programa de estudio que registren los posibles efectos acumulativos del creciente tráfico marítimo en bahía Magdalena para su regulación en beneficio de la población que migra anualmente a este complejo lagunar y la actividad de ecoturismo local que depende de esta especie. Urbán et al. (2003) proponen como las mayores amenazas potenciales para la ballena gris: 1) el incremento de las actividades de observación turística; 2) el aumento del ruido marino asociado al tráfico de embarcaciones y todo aquel de baja frecuencia producido por el hombre, que puede interferir con los llamados entre ballenas y entre madre-cría; y (3) la contaminación marina

producida por embarcaciones, estaciones de combustible, industria y desarrollos turísticos como marinas y hoteles.

Delfines

Dependiendo de la disponibilidad de recursos, se han llegado a observar agregaciones de más de 1 000 delfines de costados blancos frente a puerto Magdalena, localizado en la isla del mismo nombre. Estas agregaciones son poco comunes, pero se dan cuando la disponibilidad de sardina y otras presas es alta dentro de la bahía (observaciones personal Gustavo Hinojosa). Dentro de los cetáceos que se observan todo el año en esta región está el delfín costero conocido como tursión o tonina (Tursiops truncatus). Debido a sus hábitos costeros, se les observa en zonas someras protegidas como bahías y estuarios, forman grupos pequeños de 2 a 15 animales, y tienden a incrementarse cuando aumenta la profundidad (Wells et al., 1980; Shane et al., 1986; Ballance, 1990; Heckel, 1992; Felix, 1997; Rogan et al., 2000; Rogers et al, 2004; Bearzi, 2005; May-Collado et al., 2007). Dentro de su importancia biológica es que son organismos longevos, residentes, depredadores tope y consumidores oportunistas (Kelly, 1983; Shane et al., 1986; Shane, 1990; Wells & Scott, 1999; Connor, 2000), centinelas de los ecosistemas marinos costeros, y mediante el estudio de sus agrupaciones se pueden conocer las condiciones de su hábitat, es por lo que se les considera indicadores indirectos de la productividad (Wells et al., 2004) y debido a su sensibilidad al ruido son indicadores de impacto lo que puede conllevar a la perdida de hábitat.

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Pacífico mexicano. Contaminación e impacto ambiental: Diagnóstico y Tendencias

Para bahía Magdalena, se ha reportado una población residente de 70 tursiones foto identificados que entran y salen del canal, los grupos más grandes se encuentran en boca de La Soledad, que es la zona que conecta al canal de Santo Domingo con el Océano Pacífico, y los grupos de madres con crías se encuentran en zonas internas más protegidas (figura 2) (López-Sagástegui, 2002; Pérez Cortés-Moreno, 2006; Perazio, 2010). Los diferentes estudios realizados en bahía Magdalena muestran que los delfines

utilizan varias zonas de la misma como áreas de alimentación principalmente. La zona más sureña señalada por el estudio de la escuela de estudios de campo en 2010 y 2011, se encuentra directamente en la ruta de navegación que ocuparían los cruceros para llegar a cabo Cortez. Esta área es usada para la alimentación debido a la alta disponibilidad de peces, entre ellos la sardina, componente importante de la alimentación de estos mamíferos marinos.

Figura 2. Avistamientos de Tursiops truncatus en bahía Magdalena. 646

Impacto ambiental

En cuanto a determinar los hábitats críticos de los tursiones, sus impactos ambientales y humanos en particular por dragados, en la ensenada de La Paz y el sureste de la bahía de La Paz en el Golfo de California se llevó a cabo una investigación sobre el uso del hábitat de los delfines costeros con base al análisis de su comportamiento. La ensenada es una laguna costera y representa parte del hábitat crítico de una agrupación semiresidente de 72 animales foto-identificados, en donde las madres con crías y jóvenes se alimentan, socializan y descansan; y enseñan a los juveniles cerca del mangle a cazar, por lo tanto es considerada es una laguna de crianza (Marcín-Medina, 2010). En donde se ha podido identificar que los disturbios ambientales y antropogénicos que los impactan son los huracanes, el tráfico de embarcaciones turísticas y pesqueras, así como los dragados para la construcción y mantenimiento de las marinas. En julio del 2005, se pudo registrar por primera vez en México un cambio de hábitat de los delfines inducido por factores ambientales y antropogénicos: perdiendo la cuenca suroeste de la ensenada por azolve, tormentas tropicales, huracanes y el impacto del dragado de la marina interna de Singlair que afectó a estos cetáceos sensibles al ruido. Al comenzar el dragado para el canal de acceso a la marina Singlar Fidepaz, un grupo de hembras con delfines jóvenes, que se alimentaban muy cerca, alteraron su conducta y se alejaron de la zona probablemente debido al disturbio por ruido. Es pertinente indicar que durante el período de un ciclo anual de estudio no se les volvió a registrar

dentro de la cuenca suroeste. Este impacto negativo en el comportamiento coincide, con lo observado en la boca del río Tuxpan en Veracruz, durante el acarreo de piedras para ampliar la escollera norte, provocando una disminución drástica de la presencia de los tursiones en comparación con años anteriores (Martínez-Serrano1 com pers., 2009). Lo interesante de estos acontecimientos, es que por medio de la observación directa, el registro del comportamiento y el monitoreo constante de la especie, se puede relacionar su ausencia con un factor perturbador específico. En estos casos en particular, fue notoria la reacción de los tursiones al disturbio por ruido, lo que implica un alto impacto antropogénico para la especie. Es pertinente mencionar que con estos disturbios los delfines pierden parte de su hábitat crítico, y si el impacto es mayor como el que se esperaría con el dragado del muelle de altura que se pretendía realizar en bahía Magdalena las consecuencias serían contraproducentes para una especie que está protegida; y directamente a la parte más vulnerable de la población que son las madres con crías y juveniles. Al respecto, es importante mencionar que ya se está considerando la intensidad de los disturbios humanos en países como Estados Unidos, Irlanda, Nueva Zelanda e Inglaterra, para establecer los hábitats críticos de los delfines, y poder planear estrategias para la conservación de estos mamíferos marinos (Wells & Scott, 1997; Nowacek et al., 2001; Ingram & Rogan, 2002; Higham & Lusseau, 2004; Pierpoint y Allan, 2004).

* M.C. Ibiza Martínez Serrano Lab. de Mamíferos Marinos. Facultad de Ciencias Biológicas y Agropecuarias, Universidad Veracruzana Tuxpan, Veracruz, México 647

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Las pesquerías y los posibles impactos

Los principales moluscos que se capturan en la bahía son en su mayoría filtradores, ejemplo almeja generosa, chocolata, catarina y callo de hacha. Todas ellas dependen de un grado específico de calidad de agua y concentración de partículas inorgánicas en suspensión. Las obras de dragado pueden alterar estas condiciones ocasionando que especies sésiles (almeja generosa, chocolata y callo de hacha) o semisésiles (almeja catarina) puedan ser enterradas por el sedimento, o que su aparato filtrador se sature, con la consecuente pérdida de producción en perjuicio de los pescadores. Los polígonos principales para la extracción de la almeja generosa, se encuentran en la trayectoria de navegación que potencialmente pudieran seguir los cruceros de gran calado. Esto representa un peligro grave para los pescadores ya que existen reportes

de accidentes donde las embarcaciones han “atropellado” a los pescadores. Durante la temporada fuerte de pesca de esta especie, se observan pangas semiestacionarias en la zona de pesca, lo cual entorpecería la navegación de embarcaciones mayores. De igual forma, la zona principal de arrastres de camarón se encuentra directamente en la ruta que los cruceros deben de seguir para llegar a puerto Cortez, por lo que, indirectamente se daría la perdida de área disponible para la captura de esta especie. Una de las atenuantes de la interacción entre las pesquerías y los cruceros turísticos dependerá de la temporada donde se dé la mayor afluencia de estos últimos. Bahía Magdalena es un cuerpo costero con vocación pesquera y la temporalidad de los recursos jugará un papel esencial en determinar el grado de afectación o el sector pesquero sobre el cual tengan incidencia.

Conclusiones y recomendaciones El Resolutivo de semarnat del 24 de enero del 2013, con respecto a la Evaluación y Dictamen de la Manifestación de Impacto Ambiental modalidad Particular, del proyecto “Dragado de Mantenimiento del Canal Navegación Alterno en Puerto San Carlos” en bahía Magdalena, municipio de Comondú, Baja California Sur, indica que el promovente no describía plenamente el medio abiótico y biótico del sitio de tiro del material dragado, por lo tanto no describe la posible biota marina que pudiera afectarse con el depósito de 1 371 448 m3 de arena. 648

Tampoco las medidas de mitigación para los mamíferos y tortugas marinas, que habitan permanentemente y temporalmente en bahía Magdalena y que la utilizan como zona de refugio, crianza, zona de anidamiento y crianza etc., así como las medidas de prevención y mitigación para evitar que el proyecto afecte las actividades pesqueras al modificar o afectar la biota del sustrato marino durante el dragado y depósito de material. Debido a que el promovente al no entregar documentación que evaluara estos impactos y sus medidas de mitigación en el tiempo

Impacto ambiental

establecido, semarnat declaro la caducidad del procedimiento administrativo y le negó su aprobación. Cabe mencionar que tampoco consideraba el impacto por ruido para cetáceos como el tursión y la ballena gris que utilizan el área como parte de su hábitat crítico. Además el promovente presentaba una mia de forma parcial y segmentada, debido a que sólo mencionaba el dragado de los 1 371 448 m3 de fondo marino para el acceso de cruceros, sin considerar que el puerto ballenero para cruceros e infraestructura implicaba una modificación ambiental. De llevarse a cabo un desarrollo portuarioturístico como el mencionado, se prevé que tenga consecuencias con grandes impactos tanto ambientales como sociales, afectando a especies, varias de ellas protegidas por la nom-059-semarnat-2010 así como su hábitat. En particular los mamíferos marinos están expuestos a un disturbio potencial por las embarcaciones, como colisiones, alteración de sus conductas, cambios en el uso del hábitat o hasta llegar a la pérdida del mismo, disminución de las poblaciones, entre otros. Varios cetáceos costeros son una especie sensible al ruido, y se ha registrado que en las zonas donde se lleva a cabo dragados para marinas o muelles, se alejan y pierden parte de su hábitat. Por lo tanto, con esta clase de proyectos turístico portuario, se prevé que el disturbio por ruido y los impactos del tráfico marino de megacruceros implicaría mayores consecuencias en bahía Magdalena por

el tamaño del dragado del muelle de altura afectando no sólo el hábitat crítico de especies como la ballena gris y los tursiones; sino también la derrama económica de las personas del lugar que se dedican al ecoturismo. También cabe mencionar, que la zona de navegación de los cruceros es justo por la boca principal donde se agregan los adultos de ballena gris para el cortejo y apareamiento. Actualmente se observa una competencia desbalanceada entre los prestadores de servicios locales y los cruceros, estos últimos no tienen los permisos necesarios para realizar el avistamiento de ballenas pero llevan a cabo la actividad de todas formas. También es importante mencionar que las embarcaciones al ser de gran calado, tienen una mayor probabilidad de colisiones con mamíferos marinos en donde pueden resultar heridos o muertos. Estos posibles impactos de desarrollos turísticos portuarios aunado a la información recopilada hasta la fecha sobre las diferentes especies de mamíferos marinos y especies explotables por las pesquerías del complejo bahía Magdalena-bahía Almejas, en conjunto con la reciente mortandad de delfines, lobos y tortugas marinas reportadas durante el 2013, hacen imperante que diferentes sectores se reúnan para establecer estrategias y seleccionar las áreas prioritarias de protección y conservación de la fauna marina, así como fomentar desarrollos de bajo impacto en beneficio de las comunidades locales.

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