EL HOMBRE Y SU REALIDAD ACTUAL

EL HOMBRE Y SU REALIDAD SOCIAL
La muestra pictórica tiene como temática el hombre y su realidad social. Para acercarnos por ese camino de color a los hechos y hombres que marcan la coyuntura social, por eso cuando vemos "los mil colores de la quinua" de Arguedas en las pinceladas y paletas expresivas y pensamos en el Amazonas departamental que vio nacer a Fanny Palacios Izquierdo, un ser con tal sensibilidad que la realidad y nuestra sociedad demandaba hacía tiempo. Aquella alma que pudo comprimir y mostrarnos en un despliegue de color con paletas intensas y expresivas la realidad que nos negamos a ver; a veces queremos huir de ella. No sería completa la semejante hazaña sino por el igualmente sensible y tenaz Bruno Portuguez Nolasco, con quien forma la dualidad como en la cosmovisión andina para adentrarnos a rastras a ese inquietante y fascinante mundo del hombre y su realidad.
Los estudiosos del mundo entero aceptan y demuestran que la obra de arte no es ajena a su contexto social, sino por el contrario, crea ese lenguaje plástico que las palabras no pueden traducir totalmente sino ensayar un acercamiento al aura de la obra. La obra junta de Portuguez y Palacios expresan ese contexto, ese grito de protesta. Del mismo modo, reivindica a la mujer honesta y forjadora del avance social con un firme anhelo a la justicia. Una esperanza puramente humana. Todo ello sale a luz en la obra de los esposos y héroes de la pintura neorrealista de Palacios-Portuguez .
Si el 'virus' fuera esa sensibilidad profunda y nos pudiera contagiar de la apoteosis que despliegan las suaves y firmes pinceladas, sumados con la musicalidad de los colores vivos, podríamos tal vez rehacer nuestra existencia misma con ganas de no querernos sanar. Como dijo Alfonso De Silva: "Con la sensibilidad se puede llegar a dominar la técnica. Pero por medio de la técnica jamás se llega a la sensibilidad". Sencillamente los mejores eruditos podrían 'rajarse' la cabeza intentando encontrar mejor palabra con la cual comunicar los valores intrínsecos de la plástica de Fanny y Bruno; pero no se puede. Como decía Gombrich, el gran historiador de arte: "Si pudiéramos traducir todo lo que la obra de arte dice, no tendría por qué existir" es que la magia del arte se conecta directamente con el alma del ser para decirnos a través de sutiles gotas de placer que, con ojos despiertos y conscientes de nuestra realidad, podemos empatar con el aura de la obra como en una conexión simbiótica.
Ya afirmaron, los grandes hombres del mundo, que el arte puede transformar a las conciencias más duras y a la misma sociedad hacer revolucionar siempre para un porvenir mejor, así Van Gogh dijo: "Aunque estoy a menudo en la miseria, hay sin embargo, en mí una armonía y una música serena y pura. En la casita más pobre, en el rincón más sórdido, veo cuadros y dibujos. Y mi espíritu marcha en esa dirección por un impulso irresistible" es así que el arte de nuestros autores nos impulsa a ser conscientes de nuestra realidad y luchar para esculpir nuestros dotes de sensibilidad. Ya dijo el maestro Picasso: "Sin dificultades que superar, sin problemas que resolver y sin misterios que penetrar, nada me interesa", o puede pasar, cuando seamos indiferentes al arte, que seamos ciegos conscientes sin un rumbo definido. "Mi arte está destinado a hacer a muchos, estúpidos", señaló Miguel Ángel, por ello hacemos caso al llamado de Fanny y Bruno e interiorizamos la voz de Shólojov: "El arte posee la poderosa fuerza de influir sobre la mente y el corazón del hombre. Creo que tiene derecho a llamarse artista quien orienta esta fuerza a crear la belleza en el alma humana, en bien de la humanidad" ¿Acaso nos estamos "maquinizando" con el efecto colateral de la sociedad de consumo y nos adentramos en el olvido de la parte humana de la sociedad? El arte siempre cacheteó al hombre con la cruda realidad, por eso Goya dijo: "Hay ideas que tenemos que dibujar para que nos den sosiego para que no pesen tanto en nuestro espíritu, pero aún estas tienen su origen en la vida misma. Es en la calle, entre el pueblo, donde hay que ir a buscar los temas y los modelos". Así, esta muestra habla por sí sola del hombre y su realidad, realidad nuestra que debemos asumir con ímpetu de cambio.
Por: Julio Óscar Zúñiga Pastor. Noviembre 2014