El Foro de Davos y la Agenda Económica para el Futuro

El Foro de Davos y la Agenda Económica para el Futuro


Fernando Álvarez Simán*
http://mx.geocities.com/feralvarezsiman/

"La incertidumbre es una margarita cuyos pétalos no se terminan jamás de
deshojar."

Klauss Schwab, de nacionalidad Suiza, economista y promotor de esa ciencia,
inició desde el año de 1970 un encuentro anual de líderes mundiales al pie
de los Alpes, específicamente en el pueblo de poco menos de 10,500
habitantes: Davos. A partir de entonces y con los años, además de
especializarse en materia económica; el Foro adquirió mucha importancia
internacional, tanto que hoy el Foro Económico y la Ciudad de Davos son
considerados uno de los principales centros estratégicos de la
globalización.

Hombres de finanzas, jefes de gobierno, ministros de economía, empresarios
y líderes de opinión son generalmente los participantes activos del Foro
Económico Mundial, además entre los miembros y colaboradores del Foro
podemos contar a la Reina Rania de Jordania, Bill Gates, Henry Kissinger,
Bono, el vocalista de la Banda Irlandesa de Rock U2, a Condoleezza Rice y
Tony Blair. Sin embargo, sobre el Foro Económico de Davos no está por demás
recalcar que la organización que impulsa el evento siempre recalca que el
modo de producción capitalista no es parte del problema sino que es la
solución, es esta situación en particular lo que hace que el Foro tenga
críticos acérrimos, pero también defensores. Para los primeros es el lugar
donde se reúnen los poderosos del mundo y lo hacen para acumular más
riqueza y por ende empobrecer a quienes menos tienen; para los segundos es
el lugar donde quienes toman las decisiones económicas y políticas
trascendentales se reúnen para intentar mejorar nuestro mundo. Lo que es
más claro es que Davos representa el lugar donde se trazan las políticas
públicas y comerciales que rigen el sistema económico en el que vivimos.

El Foro Económico Mundial en si, es una fundación privada en la que sus
miembros pagan dinero para participar en la cumbre anual, en algunos casos
dictar una conferencia y codearse con el mundo de la política y las
finanzas. Los organizadores siempre insisten que el Foro no pretende tomar
decisiones sino fomentar el debate, por lo que lo consideran un "mercado de
ideas" y el lugar idóneo para acuerdos empresariales y fomento del diálogo
político.

La edición 2009 que terminó en días pasados estuvo marcada por la crisis
económica mundial, tan es así que la aseguradora American International
Group (AIG) dejó de ser uno de los principales patrocinadores, Goldman
Sachs envío a un representante de segundo nivel, Claudia Schiffer y
Angelina Jolie, invitadas asiduas, también estuvieron ausentes. Por su
parte, el secretario general de la Organización para la Cooperación y el
Desarrollo Económico, (OCDE) el Mexicano José Ángel Gurría, señaló que
"Davos refleja lo que pasó en la vida real: los principales protagonistas y
quienes están estableciendo la agenda son los líderes políticos".

Según los analistas internacionales la edición 2009 es la más pesimista de
la historia si la ubicamos en el contexto del agotamiento del modelo
económico actual. Por ello, la reunión de este año no fue dominada por el
mundo de las finanzas; los políticos fueron la inmensa mayoría y el gran
atractivo de la reunión, lo que evidencia el disminuido poder del mercado
libre, al tiempo que un gobierno tras otro intentan lograr consensos para
detener a la economía global en caída libre, debido a la dudosa actuación
de los grandes corporativos internacionales.

A pesar de el gran número de políticos, el Foro llegó a su fin sin que los
participantes vertieran algunas ideas de cómo salir de la crisis financiera
mundial, lo más alarmante fue que los partícipes, que son quienes toman las
decisiones políticas y económicas en el mundo hicieron patente el
escepticismo sobre el futuro económico que se nos avecina. Aún más; no se
logró saber cuán hondo ha lastimado la crisis mundial, y mucho menos se
atrevieron a pronosticar cuándo acabará.

Las palabras más repetidas durante el Foro fueron "restaurar la confianza",
"buscar soluciones globales", "reducir de nuevo las deudas" e "impedir el
proteccionismo". Aun así lo rescatable del Foro es el documento de
conclusiones que resume los principales retos que afronta la economía
internacional y que pueden resumirse en: a) beneficios y defectos de la
atomización del riesgo; el Foro recomienda poner más énfasis en un nuevo
modelo de riesgo basado en el mercado, para evitar la vulnerabilidad del
sistema en épocas de turbulencias como la actual. b) seguridad alimentaria,
El crecimiento demográfico, el calentamiento del planeta, la clase media
China e India, además de los biocombustibles hará que el mundo se enfrente
a un período de precios elevados en el mundo. Así, el texto sostiene que la
concentración geográfica del riesgo en zonas de producción económicamente
eficientes hoy es un gran riesgo. c) futuro energético, el informe apunta
que las mayores reservas petroleras están situadas en regiones inestables
desde el punto de vista geopolítico, así que lo primero es resolver
políticamente los problemas que contribuyen a la violencia en esas
regiones.

De esta manera, las recomendaciones del Foro sugieren que el desajuste
entre los incentivos para llevar a cabo cambios fundamentales en: la
economía energética global, entre países desarrollados y en desarrollo y
entre diferentes elementos de los sectores público y privado, hacen más
difícil alcanzar soluciones globales. Ello hace que el mundo tenga una
necesidad imperante de forjar alianzas para hacerle frente a dichos
desajustes y es necesaria más globalización (alianzas entre países y
bloques comerciales regionales) para incrementar la eficiencia, garantizar
la equidad y gestionar un entorno global de riesgo mucho más complejo y
difícil, pero más seguro que los que han existido hasta ahora.

En resumen, el Foro Económico de Davos quedó rebasado por los
acontecimientos que llevaron al mundo a la crisis económica que hoy
vivimos, sin embargo surgen ideas sobre el futuro de lo que se llama "la
nueva economía", que implica el crecimiento sin inflación gracias a las
nuevas tecnologías y la eliminación global de barreras comerciales, sin
embargo, un efecto colateral es que aumenta la diferencia entre ricos y
pobres si los gobiernos y las empresas no forman un frente común para
evitarlo. Adicionalmente los participantes del Foro, como lo hemos apuntado
creen que la peor fase de la crisis económica aún no ha llegado, a pesar
del recorte en los tipos de interés, en este sentido un aliciente es que el
día viernes, el Senado americano aprobó el paquete financiero de Barck
Obama, dicho paquete financiero contempla 780 mil mdd en gastos del
gobierno y estímulos fiscales. Gran parte del dinero se destinará a
víctimas de la recesión en forma de cupones alimentarios, seguros por
desempleo y servicios de salud. Sin embargo, ha quedado claro que el
debilitamiento de la coyuntura estadounidense es muy fuerte y que, incluso
si logra librarse de la recesión, la situación es preocupante. No cabe duda
de que la situación americana repercutirá en el resto de economías del
mundo, si bien afectará en mayor o menor medida dependiendo de los vínculos
financieros que tengan los diversos países tengan con Estados Unidos.

Respecto a nuestro país, antes de la crisis económica, Klauss Schwab, el
fundador y principal promotor del Foro Económico de Davos, había
manifestado antes diversos medios de comunicación que estaba ansioso de
promover a México como miembro importante de una segunda ola de países
"BRIC", vale decir que en economía global, se emplean estas siglas para
referirse a Brasil, Rusia, India y China, que tienen en común una enorme
población y un gran territorio, lo que les proporciona muchos recursos
naturales y una buena dosis de peso político entre los países emergentes,
lo que los hace atractivos como destino de inversiones.

Los futurólogos en economía predicen que China e India, serán los
proveedores globales dominantes de tecnología y de servicios mientras que
Brasil y Rusia llegarán a ser dominantes como proveedores de materias
primas. Se presume así que lo siguiente es la cooperación de estos países
dentro del BRIC, puesto que Brasil y Rusia juntos constituyen los mayores
proveedores de materiales y alimentos al mundo actual. Así, estas naciones
tienen el potencial de formar un bloque económico de enormes proporciones.
Por lo pronto, la crisis económica mundial le quita a México la posibilidad
de dejar de ser considerado un país recientemente industrializado NIC
(Newly Industrialized Country). Será para mejor ocasión según parece.

Por ello, nuestra participación se limitó a los encuentros que sostuvo el
Presidente Calderón, entre otros con el expresidente Ernesto Zedillo,
además se encargó de analizar los problemas y posibilidades de México para
competir con India y China, dos de sus principales rivales en la atracción
de inversiones y de competencia con el acceso de mercancías al mercado
norteamericano. Una de las 244 sesiones del Foro se dedicó a analizar la
situación de la economía de México y de Brasil, las dos principales
economías de América Latina. La mesa redonda tenía por título "¿Brasil y
México: dos motores de crecimiento?". La primera conclusión es que estos
dos países "están comenzando a ver los frutos de las reformas fiscales y
monetarias del año pasado". Sin embargo, también apunta que los índices de
crecimiento deben acelerarse si Brasil y México quieren solucionar su
persistente problema de disparidades de ingreso. Otra conclusión fue que si
México quiere crecer necesita hacer grandes inversiones en infraestructura.

En sus intervenciones, el Presidente Calderón afirmó que México se
encuentra gozando de una estabilidad económica y que, incluso, dentro de
algunos años se posicionará dentro de una de las 5 mejores economías del
mundo. Igualmente manifestó que pese a que los países emergentes no
participaron en los excesos que han generado la crisis, van a sufrir
igualmente las consecuencias de la recesión que sufren las economías
avanzadas. Por lo que pidió que para ayudar a los países que no pueden
aplicar planes de expansión financiera, será necesario recapitalizar
instituciones financieras globales como el Fondo Monetario Internacional y
el Banco Mundial.

En resumen, el Foro Económico de Davos, fue un escaparate para los
políticos, quienes no fueron capaces de diseñar estrategias para salir de
la crisis económica que azota al mundo entero, por ello, tendremos que
esperar hasta abril en la reunión que el G-20 mantendrá en Londres a
comienzos de abril, en la que se deberá definir el esqueleto del nuevo
sistema financiero. Esperemos que así sea. Para México esperemos que exista
otra oportunidad de ser considerado un país BRIC, porque ello significa
mayor peso específico en el entorno internacional.

Esperemos que la reunión en abril de frutos y que México siga avanzando en
la escena mundial, esperemos que sea en el corto plazo, porque como decía
el economista más famoso de todos los tiempos y que hoy está en boca de
todos, Keynes**: "a largo plazo todos estaremos muertos".

**John Maynard Keynes (1883-1946) economista británico, cuyas ideas
tuvieron una fuerte repercusión en las teorías económicas y políticas
modernas, así como también en las políticas fiscales de muchos gobiernos.
Keynes y sus seguidores de la postguerra destacaron no solo el carácter
ascendente de curva de oferta, en contraposición con la visión clásica,
sino que además la inestabilidad de la demanda agregada, proveniente de los
shocks ocurridos en mercados privados, como consecuencia de los altibajos
en la confianza de los inversionistas. Dado este énfasis en la demanda, era
natural para Keynes proponer el uso de políticas públicas (fiscales y
monetarias) activas para contrarrestar las perturbaciones de la demanda
privada, por lo que es particularmente recordado por su aliento a una
política de intervencionismo estatal, a través de la cual el estado
utilizaría medidas fiscales y monetarias con el objetivo de mitigar los
efectos adversos de los periodos de recesión, de las fluctuaciones cíclicas
o crisis cíclicas de la actividad económica. Los economistas lo consideran
uno de los principales fundadores de la macroeconomía moderna.