EL CONTRABANDO Y SUS REDES EN EL GOLFO DE HONDURAS Y SU PERSECUCIÓN EN LA CAPITANÍA GENERAL DE GUATEMALA, SIGLO XVIII
Descripción
HISTORIA MEXICANA VOLUMEN LXill
NÚMERO 4
ABRIL-JUNIO 2014
252
C O L E G I O
D E
M É X I C O
HISTORIA VOLUMEN LXIII
MEXICANA NUMERO 4
ABRIL-JUNIO 2014
252 Artículos 1551
RAFAL
REICHERT
El contrabando y sus redes en el Golfo de Honduras y su persecución en la Capitanía General de Guatemala, siglo XVIIl 1583
TOMÁS PÉREZ
VEJO
Manuel de la Barcena y Arce: una vida entre dos mundos 1651
BEATRIZ BASTARRICA
MORA
El sombrero masculino entre la Reforma y la Revolución mexicanas: materia y metonimia 1709
THERESA
ALFARO-VELCAMP
Buenos y malos extranjeros: la formación de clases como perspectiva ante las admisiones y exclusiones en la política migratoria de Estados Unidos en el siglo xx 1761
AURELIA VALERO PIE
José Gaos, Edmundo O'Gorman, Leopoldo Zea y el Seminario para el estudio del pensamiento en los países de lengua española 1809
CARLOS SOLA AYAPE
El exilio puesto aprueba: la polémica periodística entre Indalecio Prieto y Alfonso Junco en tomo al oro del Vita 1871
JAIME EDMUNDO RODRÍGUEZ
ORDÓÑEZ
Las revoluciones atlánticas: una reinterpretación
Archivos y documentos 1969
JOHN
2091
Sobre
Vida conyugal, maltrato y
F R A N C I S C A R E N G I F O S.,
abandono. El divorcio eclesiástico en Chile, 1850-1890 (Ana
MAYO
Haciendo negocios en la ciudad de México: Davidson versus Limantour
Lidia García Peña) 2097
Sobre M Ó N I C A
BLANCO,
Historia de una utopía. Toribio Es-
quivel Obregón (1864-1946) (Graciela Márquez Colín) Crónica 1993
2101
JORGE ORDÓÑEZ
José Fuentes Mares: actualización bibliográfica (1987-2012) Reseñas ALBERRO
y PILAR
GONZALBO AIZPURU,
La
PILAR GONZALBO AIZPURU,
2113
Educaáón, familia y vi-
Sobre F E L I P E
CASTRO GUTIÉRREZ,
Sobre
Sobre
N I C H O L E SANDERS,
Gender and Welfare in México:
Sobre J O R G E
DE HOYOS PUENTE,
La utopía delregreso. Pro-
en México (Aurelio Velázquez Hernández) 2116
Historia social de la Real
Casa de Moneda de México (Guillermina del Valle Pavón) 2056
(eds.), La
yectos de estado y sueños de nación en el exilio republicano
da cotidiana en México virreinal (Verónica Zarate) 2047
MARTÍN-SÁNCHEZ
sa Fernández Aceves)
Martínez Baracs) Sobre
y JUAN
The Consolidation of a Postrevolutionary State (María Tere-
Sobre S O L A N G E
sociedad novohispana. Estereotipos y realidades (Rodrigo 2041
GIRAUDO
no y trayectorias nacionales, 1940-1970 (Eva Sanz Jara) 2107
2033
Sobre L A U R A
ambivalente historia del indigenismo. Campo interamerica-
BURGOS
Sobre
CLAUDIA DÁVILA VALDÉS,
Refugiados españoles en
Francia y México. Un estudio comparativo (1939-1952) ( M i guel Lisbona Guillen)
C A R L O S M A R I C H A L y J O H A N N A VON G R A F E N S T E I N
(coords.), El secreto del imperio español: los situados colonia-
2 1 2 5 Resúmenes
les en el siglo xvm (Ernest Sánchez Santiró) 2062
Sobre
C A T H E R I N E ANDREWS yjEstJS H E R N Á N D E Z
JAIMES,
2 1 3 1 Abstracts
Del Nuevo Santander a Tamaulipas. Génesis y construcción de un Estado periférico mexicano, 1770-1825 (Josefina 2 o raída Vázquez) 2072
Sobre R O B E R T O
BREÑA,
El imperio de las circunstancias. Las
independencias hispanoamericanas y la revolución liberal española (Tomás Pérez Vejo) 2079
Sobre M A R C O
A N T O N I O LANDAVAZO,
Nacionalismo y vio-
lencia en la independencia de México (Roberto Breña) 2086
Sobre Z U L E M A
TREJO CONTRERAS,
Redes, facciones y libera-
lismo. Sonora, 1830-1876 (Erika Pañi)
V I Ñ E T A D E LA PORTADA
Dibujo de Salvador Pruneda tomado de Leopoldo Z E A , " L a filosoñ'a en México. José Gaos", en Revista Mexicana de Cultura, núm. 7 (18 mayo 1947), p. 4. Agradecemos a Aurelia Valero Pie habernos facilitado la imagen y la referencia. •
E L C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N EL G O L F O D E H O N D U R A S Y SU P E R S E C U C I Ó N E N L A CAPITANÍA GENERAL DE GUATEMALA, SIGLO XVIII
Rafal R e i c h e r t Universidad
Nacional
Autónoma
de
México
E
' 1 Reino de Guatemala desde 1540 formaba parte integral >del virreinato de la N u e v a España. E n 1609 el Reino se
convirtió en la Capitanía General de Guatemala, donde el
presidente de la Real A u d i e n c i a también ocupaba el cargo m i l i t a r de capitán general del t e r r i t o r i o bajo su jurisdicción. E l t e r r i t o r i o se extendía desde el actual estado de Chiapas, Belice, los países centroamericanos, hasta la f r o n t e r a entre Costa Rica y Panamá.^ E n aquel espacio geográfico d o m i n a ban volcanes, montes, abundantes bosques y gobernaban i n dios bélicos, sobre t o d o en la costa caribeña, donde las c o n diciones de vida eran m u y duras. Estos eran los principales factores p o r los cuales los vasallos de la corona española n o Fecha de recepción: 20 de mayo de 2013 Fecha de aceptación: 12 de junio de 2013
' Sobre la historia del Reino de Guatemala, véanse los trabajos de José Milla, Severo Martínez Peláez, Murdo MacLeod, Adriaan van Oss, Héctor Pérez Brignoli y George Lovell, entre otros.
HMex,
LXIII:
4, 2014
1551
1552
RAFAL REICHERT
demostraban gran interés p o r poblar y desarrollar aquellas
E L C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N E L G O L F O D E H O N D U R A S 1 5 5 3
La historiografía que trata el contrabando en la Capitanía
tierras, estableciendo sus poblados y ciudades en las zonas
General de Guatemala es escasa; los autores que estudian el
de mejores condiciones vitales - t i e r r a a d e n t r o - , dejando las
tema son María Eugenia Brenes Castillo^ y Juan Carlos So-
extensas áreas costeras del Pacífico, sobre t o d o en el Caribe,
lórzano Fonseca,"* quienes en sus trabajos se centran en los
prácticamente despobladas e indefensas.
análisis del contrabando inglés en la provincia de Costa R i -
Este acontecimiento p r o n t o lo aprovecharon los extran-
ca, sin reflexionar acerca de otras partes del inmenso espacio
jeros provenientes de Inglaterra, H o l a n d a y Francia, quie-
geográfico que ocupaba la Capitanía. E n el l i b r o de H é c t o r
nes desde la segunda m i t a d del siglo x v i i encontraron en las
Feliciano Ramos^ podemos encontrar ciertas referencias al
riberas caribeñas del reino guatemalteco, lugares apropia-
contrabando en la costa caribeña del Reino de Guatemala.
dos para practicar la piratería y el fructífero comercio ilíci-
Ramos analiza el f u n c i o n a m i e n t o de este proceder, su fenó-
to con la población hispana. Es i m p o r t a n t e subrayar que la
meno, y los principales puertos y poblados, tanto españoles
mayoría de esta población, p o r cuestiones socioeconómicas,
c o m o extranjeros, que p a r t i c i p a b a n en ese t i p o de comer-
se quedó al margen de la vida comercial del imperio español,
cio. Sin embargo su obra se dirige, sobre t o d o , a la presen-
lo que a su vez obligó a los habitantes de aquellas tierras a
tación de otras zonas del G r a n C a r i b e , c o m o las islas de
buscar otras vías para suministrarse los géneros europeos.^
las A n t i l l a s y las costas de Venezuela, C o l o m b i a y el G o l f o
E n el presente artículo se busca explicar el aspecto del
de M é x i c o . O t r o s autores, c o m o Ruggiero Romano,^ L u i s
c o m e r c i o c l a n d e s t i n o q u e a l o l a r g o d e l s i g l o x v i n se
C h á v e z O r o z c o , ' ' W a l t e r Bernecker,^ Joi'ge V i c t o r i a O j e -
desarrolló en la costa caribeña de la Capitanía General de
da^ y Julio César Rodríguez,^° en sus trabajos presentan y
Guatemala, profesión que en esta región d o m i n a r o n los b r i -
analizan el aspecto del comercio clandestino para las p r i n -
tánicos, quienes desde su "isla-almacén", Jamaica, i n t r o d u -
cipales regiones comerciales de la N u e v a España (Veracruz
cían bienes europeos al t e r r i t o r i o hispano. Además, la inves-
y sus alrededores, Yucatán, ciudad de M é x i c o ) , enfocándo-
tigación se centrará en u n análisis de las redes de contrabando
se en el análisis de las estructuras de contrabando, el origen
que se crearon en el Reino de Guatemala para hábilmente
de la mercancía y algunos modos de introducción de bienes
i n t r o d u c i r mercancías a su interior, así c o m o su f u n c i o n a miento y estructuras. Por o t r o lado, también se presentará la información sobre los proyectos que intentaban aplicar autoridades reales para detener el comercio ilícito en la región.
^ B R E N E S C A S T I L L O , "Matina".
"* SoLÓRZANO FONSECA, " E l comercio de Costa Rica". •"' RAMOS, El contrabando inglés en el Caribe. R O M A N O , Mecanismo.
' '• ^ .'k,
^ C H Á V E Z O R O Z C O , El contrabando y el comercio exterior. ^ Sobre la historia de la costa caribeña del Reino de Guatemala, véanse los trabajos dejóse Antonio Calderón Quijano, E . O . Winzerling, Frank Griffith Dawson, Mónica Toussaint Ribot, Claudia García, Juan Manuel Santana Pérez, José Antonio Sánchez Suárez, entre otros.
^ BERNECKER,
Contrabando.
V I C T O R I A O J E D A , "Corrupción y contrabando en la Nueva España". R O D R Í G U E Z T R E V I Ñ O , " E l contrabando en el comercio exterior de Nueva España".
1554
RAFAL REICHERT
E L C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N E L G O L F O D E H O N D U R A S
1555
prohibidos al t e r r i t o r i o novohispano. Sin embargo, n i n g u n o
del N u e v o M u n d o , con u n m o d e l o más centralizado y me-
de los investigadores mencionados prestó atención al tema
j o r controlado p o r la corona. C o n este propósito, en 1535 y
del contrabando en la región del G o l f o de H o n d u r a s . Es importante mencionar que este artículo es f r u t o de una
1542 se establecieron dos grandes virreinatos: de la N u e v a España y del Perú, los únicos constituidos en América p o r
investigación llevada a cabo en el A r c h i v o General de C e n -
la casa española de los H a b s b u r g o . L a frontera entre ambos
t r o América ( C i u d a d de Guatemala) durante la realización
virreinatos se extendía p o r el i s t m o centroamericano entre
del p r o y e c t o posdoctoral: "Navegación, comercio y guerra,
las provincias de Costa Rica y Panamá. Jurídicamente, tanto
rivalidad p o r el d o m i n i o colonial en la región del G o l f o de
la N u e v a España c o m o Perú eran gobernados p o r audien-
H o n d u r a s , 1713-1763", que el autor desempeñó en el C e n -
cias. E n el caso del virreinato novohispano, había cuatro ins-
t r o Peninsular en H u m a n i d a d e s y Ciencias Sociales de la
tituciones administrativas de este t i p o , que se f u n d a r o n en el
(Mérida, Y u c a t á n ) . A s i m i s m o cabe señalar que es-
siglo X V I . L a tercera audiencia que se estableció bajo la auto-
te trabajo sobre el contrabando en la Capitanía General de
ridad novohispana fue la de Guatemala (1543) y su facultad
Guatemala es apenas u n p r i m e r acercamiento al tema, esca-
se extendía p o r las tierras centroamericanas desde Costa R i -
samente presentado tanto p o r la historiografía novohispana
ca hasta la frontera de la península de Yucatán, i n c l u y e n d o
como p o r las historiografías económica y social, lo que aún
la provincia de C h i a p a s . "
UNAM
puede crear nuevas dudas y preguntas.
Sin embargo, esta entidad n o p u d o c o n c u r r i r con las de las ciudades capitalinas de ambos v i r r e i n a t o s : M é x i c o y
EL REINO D E GUATEMALA EN LA GEOPOLÍTICA ESPAÑOLA
L i m a , lugares donde se centralizó n o sólo el poder administ r a t i v o y legislativo sino también e c o n ó m i c o y comercial.
A p a r t i r de 1519, con los descubrimientos del i s t m o de Pa-
Además, a partir de la década de 1540, cuando se descubrie-
namá, Yucatán y la costa de sotavento del G o l f o de M é x i -
r o n las ricas minas de plata en Zacatecas ( N u e v a España) y
co, la expansión española se trasladó de las islas antillanas a
P o t o s í (Perú), la atención m e t r o p o l i t a n a se enfocó en estos
las tierras continentales de ambas Américas, donde los vasa-
dos virreinatos y la explotación de sus riquezas, que en cen-
llos del rey híspano encontraron civilizaciones desarrolladas
tenas de toneladas c o m e n z a r o n a f l u i r a la metrópoli para
y más ricas que los tainos y caribes. A s i m i s m o , la conquis-
llenar tanto las arcas reales c o m o los cofres de mercaderes
ta de los pueblos mexica, maya e inca provocó que España
particulares.
se viera obligada a cambiar las ideas sobre c ó m o administrar las grandes extensiones territoriales del sur y el n o r t e . C o n ello, se buscaba reemplazar la organización basada en las encomiendas, que eran otorgadas sobre t o d o a aquellos c o n quistadores que p a r t i c i p a r o n en la exploración y conquista
L a f r a n j a costera d e l C a r i b e en la C a p i t a n í a G e n e ral de Guatemala se extendía desde Panamá hasta el G o l fo D u l c e . A q u e l espacio geográfico en la época c o l o n i a l se " R U B I O M A N É , El virreinato I , pp.
5-9.
1556
E L C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N E L G O L F O D E H O N D U R A S
RAFAL REICHERT
1557
caracterizaba p o r difíciles accesos desde el m a r d e b i d o a
res y bancarrotas estatales, la marina española entró en u n
fuertes corrientes y peligrosos islotes, bajos, bancos y arre-
periodo de degradación, lo que provocó el declive del siste-
cifes. Además de los obstáculos naturales, esa región se ca-
ma de las flotas anuales a finales del siglo x v i i e irregularidad
racterizaba p o r u n clima insalubre, feroces indios e insopor-
de las comunicaciones entre la metrópoli y la Capitanía Ge-
tables insectos que n o dejaban establecerse fácilmente a los
neral. Esto influyó en la lenta caída del sistema p o r t u a r i o del
colonos españoles. Con
ello, después de la conquista del Reino de Guatemala
Reino, lo que llegó a tal grado que Puerto Caballos y T r u j i l l o q u e d a r o n devastados y prácticamente abandonados.'^
(1524-1530), en esa costa caribeña se f u n d a r o n tres puertos
Cabe señalar que el c o m e r c i o que llevaban a cabo los
de importancia que mantenían la conexión con la metrópoli
mercaderes m e t r o p o l i t a n o s , quienes tenían el m o n o p o l i o
y otras posesiones españolas en Hispanoamérica. E l p r i m e -
para traficar c o n la Capitanía G e n e r a l de Guatemala, era
ro y de m a y o r envergadura fue T r u j i l l o (fundado en 1525),
muy
la ciudad p o r t u a r i a a donde, durante los tiempos de la Ca-
criollos. P o r eso, estos últimos en varias ocasiones busca-
rrera de Indias (navegación en flotas f o r m a l i z a d a a par-
ron oportunidades para adquirir las mercancías españolas a
t i r de 1543), a r r i b a b a n dos embarcaciones que se separa-
un precio razonable (mediante u n chantaje comercial) o de-
ban de la f l o t a de N u e v a España a la altura de Jamaica. Esa
cidían arriesgarse y buscar géneros más baratos, que traían
escuadrilla a m e n u d o se d e n o m i n a b a las " N a o s o F l o t i -
a las Indias proveedores o contrabandistas de otros países
lla de H o n d u r a s " . E l segundo sitio de la Capitanía a d o n -
europeos. Esta práctica p o r u n lado les daba mayores ga-
escaso, m u y caro y n o rentable para los comerciantes
de de vez en cuando llegaban los barcos metropolitanos fue
nancias, pero p o r o t r o ponía a los mercaderes americanos en
P u e r t o Caballos ( f u n d a d o en 1526). Este lugar p o r t u a r i o
riesgo de perder su negocio y sufrir consecuencias jurídicas.
cumplía más una función regional y de cabotaje que una de
Estas oportunidades las aprovecharon los ingleses asenta-
u n p u e r t o de altura.^'* E l último lugar que a p r i n c i p i o s del
dos en Jamaica y otras pequeñas islas del G o l f o de H o n d u -
siglo
fue creado c o m o u n puesto de vigilancia y defen-
ras, quienes desde la segunda m i t a d del siglo x v i i ejercieron
sa costera contra piratas y corsarios, pero que con el t i e m p o
un fructífero comercio clandestino con los subditos hispa-
también se convirtió en u n paraje marítimo, fue el castillo
nos de las provincias de H o n d u r a s , Nicaragua y Costa R i -
XVII
de San Felipe de Lara del G o l f o D u l c e . L a importancia de
ca. Además, el escaso c o n t r o l a d m i n i s t r a t i v o - m i l i t a r de la
T r u j i l l o y P u e r t o Caballos perduró hasta bien entrada la
corona en esas áreas les permitió establecerse en Wallis (el
centuria decimoséptima, cuando tras varias derrotas m i l i t a -
extremo suroeste de la península de Yucatán, de donde extraían palo de Campeche), Roatán, U t i l a y Guanaja (las is-
F L O Y D , La Mosquitia, p. 43.
C A B A L L E R O JUÁREZ, El régimen jurídico de las armadas, p. 137. P É R E Z B R I G N O L I , Breve historia de Centroamérica, p. 92. P É R E Z B R I G N O L I , Breve historia de Centroamérica, p. 93. O -.¡-z: '•
las frente a T r u j i l l o , las cuales u t i l i z a b a n c o m o almacenes P A Y N E I G L E S I A S , El puerto de Truxillo, pp. 4 5 - 4 6 .
1558
RAFAL REICHERT
EL C O N T R A B A N D O Y SUS REDES EN EL GOLFO DE H O N D U R A S 1559
de c o n t r a b a n d o ) , y la Costa de M o s q u i t o s (la región que
perdidas, causadas p o r la alta m o r t a l i d a d de negros d u r a n -
se extendía desde el C a b o C a m a r ó n y el río A g u a n hasta
te la travesía del Atlántico. C o n ello, a partir de 1713 Jamai-
el río San Juan, d o n d e f u n d a r o n pequeñas plantaciones de
ca y Barbados se c o n v i r t i e r o n en "almacenes" de esclavos y
azúcar).'''
mercancías, que después de clasificados eran d i s t r i b u i d o s a
E n la M o s q u i t i a , los ingleses se aliaron c o n los zambos-
las factorías de la South Sea C o m p a n y en Cartagena, P o r t o -
m o s q u i t o s , quienes s u r g i e r o n de una mezcla entre i n d i o s
belo, Veracruz, L a Habana y Santiago de C u b a . A s i m i s m o
nativos de la región (mezquitos) y esclavos africanos (zam-
una parte de las mercancías se otorgaba a contrabandistas,
bos), salvados de u n barco negrero portugués que naufragó
quienes introducían esos géneros a otras partes del G o l f o -
en las cercanías del Cabo de Gracias a D i o s en 1641. L a base
Caribe.'^
fundamental de la economía regional la constituían la pes-
L a corona española, viendo este peligro para sus intereses
ca, la recolecta de frutas terrestres y el corte de maderas pre-
económicos, desde u n p r i n c i p i o intentó intervenir y detener
ciosas, p r o d u c t o s que los indígenas intercambiaban p o r los
el fenómeno del comercio clandestino. U n a persona i m p o r -
géneros europeos que durante la "época dorada de la p i r a -
tantísima en esta obra fue J o s é Patino Rosales, el secretario
tería" traían a estas costas bucaneros, corsarios y piratas. A l
de Hacienda, M a r i n a y de Indias, quien emprendió una v i -
p r i n c i p i o del siglo x v i i i , los británicos c o n s t r u y e r o n en la
gorosa lucha p o r medios b u r o c r á t i c o s y bélicos c o n t r a el
Costa de M o s q u i t o s una decena de pequeñas plantaciones
d i l u v i o de mercancías inglesas ilegales. E l f u n c i o n a r i o real
azucareras; sin embargo, la mayoría de los colonos ingleses
nunca se quedaba pasivo y siempre respondía a los abusos
estaban involucrados en el comercio clandestino con las p o -
británicos. A la agresión contestaba con la agresión, al con-
blaciones hispanas de las provincias de H o n d u r a s , N i c a r a -
trabando con los corsarios, a la irregularidad de la C o m p a -
gua y sobre t o d o Costa Rica.'^
ñía del A s i e n t o de N e g r o s con la suspensión del n a v i o de
E l contrabando británico todavía se fortaleció en la C a p i -
permiso, y a las notas de protesta sobre medidas de gobier-
tanía General de Guatemala con el otorgamiento a la compa-
n o perjudiciales a los intereses comerciales extranjeros con
ñía inglesa South Sea C o m p a n y del asiento de negros, que le
el hábil empleo de la tradicional l e n t i t u d de la burocracia es-
daba exclusividad para aprovisionamiento en los t e r r i t o r i o s
pañola.^°
hispanos de esclavos africanos, m u y necesarios en la eco-
Cabe señalar que la persecución del contrabando britá-
nomía de plantación. Además de este privilegio, la empresa
nico en el G r a n Caribe p o r los corsarios hispanos p r o v o -
británica o b t u v o el derecho de enviar con cada flota al N u e -
có tres conflictos béUcos: la guerra de la Cuádruple A l i a n -
v o M u n d o u n navio de permiso para recompensar posibles
za (1717-1721), la guerra Anglo-española (1727-1729) y la
R E I C H E R T , "Navegación, comercio y guerra", p. 2 0 . ^ F L O Y D , La Mosquitia, pp. 2 7 - 5 2 .
^' T H O M A S , La trata de esclavos, p, 242. B É T H E N C O U R T M A S S I E U , "Patino en la política", p. 24.
1560
RAFAL RFJCHERT
EL C O N T R A B A N D O Y SUS REDES E N EL GOLFO DE H O N D U R A S 1561
guerra de la Oreja de Jenkins (1739-1748), que t e r m i n a r o n
el N u e v o M u n d o . Este intercambio de bienes a partir del si-
definitivamente con el contrato del A s i e n t o de Negros y el
glo X V I se convirtió en u n ramo n u t r i t i v o de la economía his-
navio de permiso para la G r a n Bretaña.
pana y adquirió u n nivel significativo en la creación del i m -
R e t o r n a n d o al ámbito de la Capitanía General de G u a -
perio colonial de España, donde el comercio u l t r a m a r i n o se
temala, tres años después del f i n de la guerra de la O r e j a
convirtió en u n i n s t r u m e n t o para la conquista t e r r i t o r i a l . E l
de Jenkins, la A u d i e n c i a Real aprobó el p r o y e c t o de levan-
propósito p r i m o r d i a l de esta actividad se enfocó en conse-
tar u n nuevo p u e r t o en O m o a , p r o t e g i d o p o r u n p o d e r o -
guir mayores riquezas al menor costo posible. Esta regla fue
so castillo, el de San Fernando (1752), con el f i n de c o n t r o -
aplicada n o sólo p o r la corona española, sino también p o r
lar la zona costera de la p r o v i n c i a de H o n d u r a s y detener
la de Portugal, y desde la década de 1620 también p o r otras
la introducción del contrabando inglés al i n t e r i o r del R e i -
potencias europeas ( H o l a n d a , Francia e Inglaterra).^^
n o . A l m i s m o t i e m p o f u e r o n otorgadas varias patentes de
C o n ello, los mercaderes europeos que aspiraban vale
corso para dueños de barcos de Santiago de C u b a y L a H a -
participar en el dinámico desarrollo de los mercados hispa-
bana, interesados en la persecución de las embarcaciones ex-
noamericanos t u v i e r o n que elegir u n o de los dos caminos
tranjeras cargadas de géneros ilícitos que intentasen arribar a
que les diera acceso a la economía indiana. E l p r i m e r o era
las costas caribeñas de la Capitanía.^^ Además en los próxi-
p o r la vía oficial o semioficial, d o n d e las casas comerciales
mos años se diseñaría u n p r o y e c t o de recuperar y repoblar
europeas se establecían en Sevilla, Santa A n a y Cádiz, o con-
el p u e r t o de T r u j i l l o y sus alrededores, propuesta que se ha-
trataban a agentes españoles, quienes bajo sus nombres les
ría reahdad en los años setenta del siglo xviii.^^
permitían entrar en el negocio con la Casa de Contratación y p o r supuesto con las Indias. A l o largo del p e r i o d o colo-
EL CONTRABANDO EUROPEO EN E L GOLFO D E HONDURAS
nial numerosos mercaderes de A l e m a n i a , H o l a n d a , F r a n -
E l c o n t r a b a n d o en las posesiones u l t r a m a r i n a s hispanas
no e incluso se establecieron en Andalucía para participar en
cia, Italia e Inglaterra se i n c o r p o r a r o n al comercio americasurgió prácticamente en el m i s m o m o m e n t o en que Espa-
el comercio u l t r a m a r i n o , eludiendo así el m o n o p o l i o . C a -
ña estableció el m o n o p o l i o comercial con sus tierras ameri-
be señalar que sólo algunas casas comerciantes, c o m o Eller-
canas, centralizándolo bajo la administración de la Casa de
man, Cabarrús y Lalanne, M a c r a g h , W o u l f e , Cavagnaro,
Contratación, la cual desde 1503 fue responsable de la orga-
H o p e , entre otras, hicieron sus grandes fortunas al unirse al
nización, el manejo y el cuidado del comercio exterior con
comercio sevillano. Este proceder, según A n a Crespo, al f i nal del siglo
R E I C H E R T , "Navegación, comercio y guerra", p. 24.
"
•
XVII
provocó que el reparto de la plata indiana
beneficiara a otras naciones europeas: holandeses ( 3 0 % del
SANTANA P É R E Z y S Á N C H E Z SUÁREZ, "Repoblación de costa de Mos-
quitos", p. 697.
^ W A L K E R , Política española y comercio colonial, pp. 44-46.
1562
RAFAL REICHERT
E L C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N E L G O L F O D E H O N D U R A S
1563
total), franceses ( 2 5 % ) , genoveses e italianos ( 1 0 % ) , e ingle-
ficios económicos a todos los participantes. Así que el p o -
ses ( 1 0 % ) , p o r eso en España sólo se quedaba alrededor de
sible enriquecimiento convirtió el comercio clandestino en
2 5 % del metálico extraído de Hispanoamérica.^'^
una floreciente actividad de la vida comercial del virreinato
Sin embargo, hay que subrayar que el i n t e r c a m b i o legal c o n las colonias u l t r a m a r i n a s españolas era costoso y
novohispano y u n daño para los reglamentos comerciales establecidos p o r la metrópoH.^^
l a b o r i o s o , p o r l o que sólo mercaderes c o n una fuerte p o -
Es i n d u d a b l e que el c o n t r a b a n d o extranjero surgió en
sición económica p u d i e r o n participar en él. P o r o t r o lado,
el G o l f o de H o n d u r a s en las últimas décadas del siglo x v i ,
los grandes comerciantes europeos en múltiples ocasiones
cuando c o m e n z ó el l e n t o declive del sistema de las flotas
aprovechaban sus contratos oficiales para respaldar la i n -
que después de la G u e r r a de los Treinta A ñ o s (1618-1648)
troducción a Hispanoamérica de una parte de su mercan-
se convirtió en una crisis de la marina española, la cual per-
cía ilegalmente.^^ A q u í tocamos el segundo m o d o de hacer
duró hasta el f i n de la centuria. Este descuido provocó el de-
comercio con las colonias hispanas, es decir, p o r medio del
sabastecimiento n o sólo de la Capitanía General de Guate-
contrabando en el que p a r t i c i p a r o n los europeos de todos
mala sino también de otras regiones de los virreinatos de la
los niveles socioeconómicos.
N u e v a España y el Perú. Además los mercaderes metropoH-
D u r a n t e la época c o l o n i a l surgió el término, a p a r t i r de
tanos, aprovechando esta situación, vendían sus mercancías
una actuación " c o n t r a u n bando o f i c i a l " para r o m p e r las
a precios excesivamente elevados. Esto a su vez provocó que
reglas establecidas p o r el c o m e r c i o legal, o sea, n o pagar
en las tierras americanas se buscara la autosuficiencia econó-
los i m p u e s t o s y aranceles que este i n t e r c a m b i o i m p l i c a -
mica, lo que influyó en el desarrollo de la producción agro-
ba e i n t r o d u c i r p r o d u c t o s p r o h i b i d o s p o r los r e g l a m e n -
pecuaria, artesanal y minera. P o r o t r o lado, las i r r e g u l a r i -
tos de la Casa de C o n t r a t a c i ó n , el C o n s e j o de Indias y el
dades de abastecimiento en los productos básicos europeos
rey de España.^'^
provocaron una fuerte demanda de los géneros extranjeros,
Julio César Rodríguez Treviño sugiere que el contrabando en la N u e v a España surgió con la apertura de la Carre-
vendidos a u n precio m e n o r p o r los holandeses, ingleses y franceses.
ra de Indias y fue una alternativa de negocio y de super-
Cornelius Goslinga presentó unas de las primeras n o t i -
vivencia, t a n t o para la p o b l a c i ó n novohispana c o m o para
cias sobre el c o n t r a b a n d o extranjero en el Reino de G u a -
los comerciantes españoles y extranjeros, aportando bene-
temala. E n su l i b r o Los holandeses en el Caribe
menciona
acontecimientos en que los corsarios neerlandeses de la w i c " C R E S P O SOLANA, Mercaderes atlánticos, pp. 56-57. Sobre el contrabando, véanse los trabajos de Clarcnce H . Haring, José Luis Cornelias, Geoffrey J. Walker, Luis Jáuregui, Ernest Sánchez Santiró, Antonio Serrano Ortega, Ana Crespo Solana, entre otros. R A M O S , El contrabando inglés en el Caribe, p. 21.
(en neerlandés: West-Indische C o m p a g n i e ) llegaban a las ^ R O D R Í G U E Z TREVIÑO, " E l contrabando en el comercio exterior de Nueva España", p. 19.
1564
RAFAL REICHERT
cercanías de T r u j i l l o j Puerto Caballos para comerciar paños, ropa, herramienta de h i e r r o y utensilios de casa con las poblaciones topónimas. Además, en tres ocasiones, aparte de realizar u n fructífero intercambio comercial, t u v i e r o n la suerte de atrapar las N a o s de H o n d u r a s que salían de esos puertos con valiosos cargamentos de plata, o r o , especias y madera preciosa hacia la metrópoli (en 1624 p o r Schouten, en 1627 p o r L u c i f e r y en 1630 p o r Booneter).'^^ Sin embargo, el contrabando holandés y de otras naciones europeas era ocasional en la costa caribeña de la Capitanía. Esta situación cambió radicalmente con la toma de Jamaica p o r los ingleses en 1655 y la cada vez m a y o r penetración del G o l f o de H o n d u r a s p o r esta nación. C u a n d o en 1687 los zambosmosquitos f i r m a r o n una alianza con los anglosajones, éstos lograron n o sólo u n aliado fiel dedicado al saqueo, el incendio y la rapiña de las poblaciones hispanas, sino también u n lugar seguro para almacenar su contrabando que desde la Costa de M o s q u i t o s se repartía a las provincias de N i c a r a gua y Costa Rica.^^ Todavía entre 1701 y 1713, cuando E u r o p a estuvo i n v o l u c r a d a en la G u e r r a de Sucesión Española, a la región llegaron mercaderes y contrabandistas franceses, quienes aprovechando el pacto familiar entre el nuevo rey de España, Felipe V de B o r b ó n , y su abuelo L u i s X I V de Francia, hicieron buen negocio al i n t r o d u c i r géneros franceses en las
EL C O N T R A B A N D O Y SUS REDES EN EL GOLFO DE H O N D U R A S 1 5 6 5
quienes en varias ocasiones f u e r o n apoyados p o r las u n i d a des militares de la R o y a l Navy.^° A l terminar este apartado es i m p o r t a n t e decir que desde 1565, cuando Andrés de Urdaneta estrenó el continuo intercambio comercial con el Lejano Oriente, mediante el Galeón de Manila que anualmente partía de Acapulco con plata y bienes novohispanos hacia las islas Filipinas, donde se realizaba el comercio con los mercaderes chinos y japoneses, también se estableció el intercambio intercolonial entre ambos v i r r e i natos, donde la costa pacífica de la Capitam'a General de Guatemala desempeñaba u n papel importante como el p u n t o de escala para los buques que navegaban de Callao, G u a y a q u i l y Panamá a H u a t u l c o , Acapulco y posteriormente San Blas. En este ambiente de extensas áreas costeras, donde el único puerto de altura se encontraba en E l Realejo (actual N i c a r a gua), muchas veces se practicaba el comercio ilícito que desde 1634, cuando se prohibió definitivamente el comercio entre la Nueva España y el Perú para prevenir al escape de la plata peruana a las Filipinas, se fortaleció y floreció prácticamente hasta 1778, cuando se declaró la ley de libre comercio en Hispanoamérica.-*' E l país que monopolizó el contrabando en el M a r del Sur fue Francia, que tan sólo entre 1700 y 1725 envió más de 150 barcos, provenientes en su mayoría de los puertos de Saint M a l o , Nantes y Marsella, para que ejercieran transacciones ilegales con los subditos americanos del rey de España.-*^
provinicas de la Capitanía. Sin embargo, los mercaderes galos no p e r d u r a r o n m u c h o t i e m p o ya que fueron desalojados por los contrabandistas británicos provenientes de Jamaica,
G O S L I N G A , LOS holandeses en el Caribe, pp. 1 4 0 , 1 4 5 , 149. B R E N E S C A S T I L L O , "Matina", p. 4 0 5 .
'° PINTO SORIA, Economía y comercio en elReyno de Guatemala, p. 141. ^' Sobre el proceder del contrabando en el Pacífico, véanse los trabajos de Carmen Yuste López, Dení Trejo Barajas, Guadalupe Pinzón Ríos, Mariano Ardash Bonialian, entre otros. •'^ P É R E Z M A L L A Í N A B U E N O y T O R R E S R A M Í R E Z , La Armada del Mar
del Sur, p. 77.
1566
RAFAL REICHERT
C O N T R A B A N D O B R I T Á N I C O Y SUS R E D E S EN L A CAPITANÍA GENERAL D E GUATEMALA
C O N T R A B A N D O Y SUS REDES EN EL GOLFO DE H O N D U R A S
1567
plata, o r o en p o l v o , cochinilla, tinta y añil para entregárselo a d o n Ignacio Beteta. N o obstante, esto n o fue la verdad ya que Grenier negoció con el capitán de El Próspero
para
E l contrabando británico en la Capitanía General de Guate-
que entregara sólo una parte del cargamento y depositara en
mala se p u d o desarrollar gracias a varios factores que l o h i -
su balandra telas y prendas de vestir procedentes de Francia
cieron florecer. Se ha mencionado que las primeras causas
para venderlas en la Capitanía. Además, el verdadero desti-
p o r las cuales se practicó fácilmente fue la escasez de p r o -
natario de la mercancía n o era Beteta, sino una red de c o n -
ductos europeos m u y demandados p o r las poblaciones l o -
trabandistas compuesta de españoles, marineros británicos
cales y el casi nulo c o n t r o l administrativo de las zonas cos-
y uno de los mayores proveedores de las mercancías inglesas
teras. C o n ello, fue fácil convencer a varios individuos, entre
en la costa de H o n d u r a s , G u i l l e r m o Pitt. A l concluir su i n -
indios, mestizos, negros y españoles, para que colaboraran
vestigación, A l o n s o Fernández de H e r e d i a escribió que " e l
en el comercio clandestino con contrabandistas de Jamaica,
suceso de apresar la balandra inglesa cargada de mercancías
quienes pagaban bien p o r la participación en dicho proce-
era supuesto y falso para que con cautela se i n t r o d u j e r a n
der. Además los oficiales reales de la capital, las provincias,
otras cosas del comercio ilícito". Según la observación del
las alcaldías y los ayuntamientos estaban bastante abiertos
gobernador, a los corruptos oficiales reales y Grenier, G u i -
a las " o f e r t a s " (corrupción), ya que la visión de buenas ga-
llermo Pitt ofreció u n soborno de casi 12000 pesos.•'•^
nancias les convencía de r o m p e r la ley y de cerrar los ojos ante la introducción de mercancía ilegal en sus territorios. U n b u e n ejemplo de ello es el caso que descubrió e i n -
A d e n t r á n d o n o s en el f u n c i o n a m i e n t o del c o n t r a b a n d o en el Reino de Guatemala es bueno conocer algunas ideas de Julio César Rodríguez Treviño. U n a de ellas expUca que
vestigó entre 1749 y 1751, el capitán general de Guatemala,
el fenómeno del contrabando de la N u e v a España y de H i s -
A l o n s o Fernández de Heredia, quien desenmascaró y acu-
panoamérica se debió a u n c o n j u n t o de normas n o escri-
só a d o n D i e g o Tablada (lugarteniente de gobernador), d o n
tas sobre el almacenaje, las cargas, las rutas y los involucra-
Francisco Torres (contador de la Real Hacienda) y d o n D o -
dos. Estas reglas resultaron vitales para asegurar el éxito del
m i n g o de Azaña (tesorero de la Real Hacienda) de p e r m i t i r
intercambio ilícito, así c o m o para l i m i t a r la efectividad de
la introducción sin permiso oficial de ropa y telas, dejándo-
proyectos establecidos p o r el g o b i e r n o español c o n el f i n
se c o r r o m p e r p o r Simón W a l t o n , el capitán inglés de la ba-
de combatir lo.
landra El Próspero,
que fue confiscada en 1749. Según los
testimonios reunidos p o r el gobernador, tanto Tablada com o Torres y Azaña colaboraron con u n francés, R a y m u n d o Grenier, capitán de una balandra corsaria. Los oficiales acusados constataron que El Próspero
traía u n cargamento de
" A G C A , A3 Real Hacienda, Comisos, leg. 2869, exp. 41766, fs. 1-96. R O D R Í G U E Z T R E V I Ñ O , " E l contrabando en el comercio exterior de
Nueva España", p. 116.
RAFAL REICHERT
1568
ía. C O N T R A B A N D O Y SUS REDES EN EL GOLFO DE H O N D U R A S
Gráfica 1
1569
teras de H o n d u r a s , Nicaragua y Costa Rica. U n a expedición de este t i p o fue enviada en marzo de 1715 de Santiago
ESQUEMA DE FUNCIONAMIENTO DEL CONTRABANDO
INGLÉS
EN L A CAPITANÍA GENERAL D E GUATEMALA
de Guatemala a la región del G o l f o Dulce, San Pedro Sula y Puerto Caballos, bajo el mando del teniente Pedro de A l d a ña, quien al frente de 20 soldados t u v o que i n u t i l i z a r la red
r Comerciantes y casas comerciales ingleses
del comercio clandestino en aquella área.-'^ Durante el c u m p l i m i e n t o de sus deberes apresó en u n pa-
Proveedores británicos en las Indias (contrabandistas)
f Proveedores españoles en las 1^ Indias (contrabandistas)
raje costero a una balandra inglesa, que era bien conocida entre los vecinos de la zona ya que comerciaba con ellos frecuentemente. E l oficial real se d i o cuenta de que descubrió
Venta directa a las poblaciones costeras
un negocio en el cual estaba involucrada la gente del gobierno regional. D e las cartas que cayeron en sus manos resultó que el capitán inglés, conocido como capitán G u i l l e r m o ,
Intermediarios en la Capitanía General de Guatemala (oficiales reales, religiosos, m a r i n e r o s ,
arrieros, peones)
mantenía correspondencia c o n comerciantes, reUgiosos y oficiales reales, tanto de Puerto Caballos como de San Pedro Sula.^-^ Desafortunadamente, en la noche la embarcación se escapó y ai día siguiente apareció, en el campamento del teniente
^ Comerciantes y casas comerciales españoles J
Aldaña, d o n Francisco del Castillo, ayudante del corregidor d o n E n r i q u e L o n g m a n , personaje que mantenía buenos
Nota: elaboración propia.
contactos c o n los comerciantes de Jamaica. E l teniente, bajo la amenaza, se v i o obligado a devolver las cartas y se reti-
U n a tarea permanente de las autoridades americanas en
ró a la capital de la Capitanía. Es interesante que al volver a
la lucha contra el contrabando británico fue el envío de las
Santiago de Guatemala, Pedro de Aldaña fue acusado p o r el
expediciones militares contra sus asentamientos en Wallis,
mencionado corregidor "de n o c u m p l i r con sus deberes m i -
Roatán y la Costa de M o s q u i t o s . P o r eso, de los centros del
litares". Sin embargo, tras autos levantados contra el militar
poder español en la Capitanía (Santiago de Guatemala, C o -
salieron varias irregularidades que t e r m i n a r o n con la cance-
mayagua y Granada) salían al exterior de las provincias c o n cierta regularidad destacamentos armados, con el f i n de alejar a los ingleses pero también para encontrar, perseguir y destruir los focos del contrabando entre las poblaciones cos-
^^^GCA, A2 Capitanía Genera], Asuntos Generales, 1579-1821, Icg. 383, exp. 3491, fs. 1-42. A G C A , A2 Capitanía General,/ISMKIOS Generales, 1579-1821, leg, 383, wp. 3491, fs. 7-8.
1570
RAFAL REICHERT
C O N T R A B A N D O Y SUS REDES EN EL GOLFO DE H O N D U R A S
1571
lación de su p l e i t o y el levantamiento de autos contra d o n
realizar esa " c a c e r í a " y fue acompañado p o r 17 soldados,
Enrique L o n g m a n , quien tras u n largo proceso t u v o que re-
quienes realizaron u n p r i m e r ataque al poblado de San A n -
n u n c i a r a su cargo y fue acusado de fraude y c o r r u p c i ó n
tonio, donde encontraron y decomisaron dos cajas con ropa
j u n t o con sus colaboradores de la región.^^
y otros géneros escondidos en la casa de una india llamada
L a expedición del teniente Pedro de Aldaña fue u n éxito
p o r los vecinos doña María. D o s cajas más se sacaron de la
debido a la actuación p o r sorpresa, lo que suscitó el levan-
casa donde vivía el padre Juan, cura de la iglesia parroquial.
tamiento de acusaciones contra las personas del poder pú-
Los dos fueron detenidos y se les acusó de contrabando.-'^
b l i c o , ya que p o r lo regular se atrapaba a peones, arrieros
L a p e r s e c u c i ó n de la p a n d i l l a de El Andaluz
duró ca-
o marineros -sujetos de poca i m p o r t a n c i a para d i s m i n u i r
si cinco meses, y en el transcurso f u e r o n detenidos varios
el contrabando. Esta situación se debió al hecho de que los
i n d i v i d u o s , entre los cuales se encontraban arrieros, amas
dirigentes de la red de contrabando actuaban a la sombra y
de casa, peones, pescadores y religiosos, así c o m o 22 m u -
casi nadie sabía quién era en reahdad el beneficiario. A d e -
las que se e n v i a r o n p o r la m e r c a n c í a a la costa cerca de
más, en ocasiones se pagaba a ios i n t e r m e d i a r i o s para que
T r u j i l l o . Después de este ataque, la parte de la red c o n t r a -
guardaran silencio. C o n ello era m u y difícil desenmascarar
bandista responsable de la r e c e p c i ó n , el almacenamiento
y destruir la estructura de la organización clandestina, como
y el transporte de los géneros fue destruida. L a búsqueda
sucedió en el caso de la expedición de Pedro de Aldaña. Pero
de d o n Francisco El Andaluz
si ello sucedía, las consecuencias provocaban la fractura y la
tiempo en el que el contrabandista se escapaba y reestable-
desintegración de la red contrabandista.
cía nuevas organizaciones de comercio subterráneo. F i n a l -
duró todavía dos años más,
O t r o ejemplo del f u n c i o n a m i e n t o de las organizaciones
mente el c r i m i n a l fue d e n u n c i a d o a n ó n i m a m e n t e p o r u n
del comercio clandestino es el caso de la persecución de u n
i n f l u y e n t e comerciante de C o m a y a g u a y detenido en So-
famoso contrabandista español de la zona, d o n Francisco El
naguera.-^'-'
Andaluz^
que realizó el capitán Nicolás de Rivera en el año
174L D u r a n t e esa acción fue atrapado Juan de T r u j i l l o , u n criollo que era la mano derecha de El Andaluz,
E l caso de d o n Francisco El Andaluz
demuestra la ha-
bihdad de mantenerse en el negocio, que para cada g r u p o
responsable
era m u y l u c r a t i v o y en realidad m u y deseado p o r la gen-
en la red de recepción y el escondite de las mercancías p r o -
te de la costa caribeña, que p o r la falta de trabajo y escasez
venientes de Roatán y Jamaica. Además T r u j i l l o organizaba
de recursos prefería ejercer el comercio ilícito. Por o t r o la-
el transporte de muías en las regiones de Sonaguera, O m o a y
do, el caso de El Andaluz
T r u j i l l o . E l capitán Nicolás de Rivera v i n o de la capital para
p a r t i c i p a b a n sujetos de varios niveles s o c i o e c o n ó m i c o s .
A G C A , A2 Capitanía General, Asuntos Generales, 1579-1821, leg. 383, exp. 3491, fs. 6/39-42.
A G C A , A3 Real Hacienda, Comisos, leg. 228, exp. 2357, fs. 1-32. A G C A , A3 Real Hacienda, Comisos, leg. 228, exp. 2357, fs. 9/27-28.
demuestra que en el contrabando
1572
RAFAL REICHERT
además de que existía una fuerte competencia entre los g r u pos, o m e j o r d i c h o , entre los jefes de las redes del c o n t r a b a n d o , d o n d e u n o podía d e n u n c i a r a su r i v a l , sólo para sacarlo del negocio o interceptar sus mercancías, que después de ser decomisadas p o r la Real Hacienda de la Capitanía se ponían a la venta a u n precio menor. U n a situación similar ocurrió en u n j u i c i o , en enero de 1755, c o n t r a d o n M a n u e l A m a t , c o m e r c i a n t e de Santiago de Guatemala, q u i e n navegando en u n paquebote desde Santiago de Cuba h i z o una escala en Jamaica con el pretexto de reparar su embarcación. D e la isla salió con u n cargamento de 34 cajones llenos de ropa y otros géneros que f u e r o n decomisados en el p u e r t o de O m o a gracias a una denuncia anónima. L a mercancía y el contrabandista f u e r o n enviados a la ciudad de Guatemala, donde después de casi dos años de j u i c i o , se le condenó a 10 años de prisión en C u b a y se decomisaron todos sus bienes, los cuales f u e r o n puestos a la v e n ta pública p o r parte de la Tesorería Real de Guatemala. A d e más, se vendió la mercancía detenida, que aportó casi 7000 pesos para la Hacienda Real. Es interesante que tres cuartas partes de la mercancía pasaron a manos de u n solo comerciante que fue representado p o r d o n Joseph de Herrera.''°
C O N T R A B A N D O Y SUS REDES E N EL GOLFO DE H O N D U R A S
1573
ingleses, zambos-mosquitos y holandeses de Curazao, con los cuales intercambiaban el cacao p o r géneros europeos.*' Las mercancías de m a y o r demanda f u e r o n : negros para las plantaciones, ropa, paños, herramienta y utensilios de casa y cocina que desde la zona costera de M a t i n a se remitían al i n t e r i o r : hacia O l a n c h o , Granada y poblaciones alrededor del lago de Nicaragua. E l contrabando en esa región llegó a tal grado que entre 1730 y 1760 saHeron varias expediciones militares desde Santiago de Guatemala, Comayagua y Granda con el f i n de eliminar las organizaciones clandestinas. Esas acciones también sirvieron para destruir las p o b l a ciones de zambos-mosquitos. L a expedición más conocida en la región se realizó en agosto de 1759, cuando el gobernador de Costa Rica, d o n M a n u e l Solar, apresó a cerca de 50 contrabandistas, mercancías y piraguas y se enfrentó a un destacamento de zambos-mosquitos e ingleses. La t r o p a española ganó el combate, y en poco t i e m p o los presos i n gleses confesaron a d o n M a n u e l Solar que el corregidor de Matagalpa (Nicaragua), d o n Matías de Oropesa, estaba i n volucrado y protegía el tráfico ilegal en el t e r r i t o r i o bajo su gobernación.''^
Respecto a las redes del comercio clandestino en la C a p i tanía General de Guatemala, n o se deben o l v i d a r las organizaciones que funcionaban en la p r o v i n c i a de Costa Rica, donde la región de m a y o r penetración p o r contrabandistas era M a t i n a , u n valle d o n d e los españoles cultivaban cacao. L a cercanía de esta región a la Costa de M o s q u i t o s p r o v o caba que a m e n u d o los hispanos entraran en contacto con B R E N E S C A S T I L L O , "Matina", pp. 4 1 9 - 4 2 0 .
A G C A , A3 Real Hacienda, Comisos, leg. 2869, exp. 41773, fs. 1-38.
A G C A , A l Superior Gobierno, Reales Cédulas, Audiencia, lee. 4622,
-92-93.
'
B
>
1574
EL C O N T R A B A N D O Y SUS REDES E N EL GOLFO DE H O N D U R A S
RAFAL REICHERT
Gráfica 2
1575
C o n ello, es posible reahzar u n esquema general del f u n cionamiento del comercio clandestino, no sólo para la C a p i -
ESQUEMA D E LMOVIMIENTO D E LA MERCANCIA
tanía General de Guatemala sino también para otras regio-
Y E L CAPITAL EN E L CONTRABANDO
nes bajo ta administración española en las Indias. Se puede
Mercancías. 5= embarcadas en* un país europeo
Mercancías entregadas a los proveedores o contrabandistas en las Indias
decir que el contrabando comenzaba con la llegada de las mercancías a las colonias americanas de Inglaterra, H o l a n da, D i n a m a r c a y Francia. E n estos enclaves extranjeros, se almacenaban géneros o se repartían para luego venderlos a los subditos del r e y de España. C u r i o s a m e n t e , hasta
Ganancia en plata y otras riquezas americanas Mercancías compradas y vendidas por los comerciantes españoles
Mercancías transportadas y entregadas a ios intermediarios en os territorios ultramarinos
Nota: elaboración propia.
este m o m e n t o , el proceder tenía u n estatus legal. Apenas en el m o m e n t o de colocar las mercancías a b o r d o de balandras, paquebotes, bergantines, goletas, que se dirigían a las costas bajo la administración hispana, se volvían bienes ilegales, que a m e n u d o se buscaba asegurar con permisos falsificados. Podemos d e d u c i r que este g r u p o de contrabandistas estaba f o r m a d o en su mayoría p o r extranjeros y de vez en cuando p o r españoles que tenían intereses fuera de la metróp o l i o colaboraban con empresas extranjeras.
CONCLUSIONES
Todavía podemos enumerar otros casos de comercio clandestino en la Capitanía General de Guatemala durante el
Los barcos que traían contrabando a la Capitanía General de Guatemala buscaban llegar a lugares con poca vigilancia, donde avisaban a los vecinos sobre su arribo con u n disparo de cañón, señas de luz o simplemente mandaban lanchas
sin embargo, con base en la presente revisión d o -
a la costa. Por o t r o lado, también se aprovechaban acuer-
cumental y la bibliografía, se puede decir que el aparato del
dos internacionales para entrar a los puertos de la C a p i t a -
funcionamiento de las redes de contrabando era similar pa-
nía, donde con u n permiso oficial se ejercían transacciones
ra toda Hispanoamérica. Las diferencias se pueden encon-
ilegales. Existen casos en los que con el pretexto del asien-
trar en la escala del contrabando, su alcance, su i m p o r t a n -
to de negros también se introducían mercancías prohibidas.
cia regional o global, su valor económico y la composición
O t r a práctica frecuente fue el uso de los buques españoles
de los integrantes - t a n t o hispanos c o m o extranjeros- que
que navegaban entre Cuba y los puertos de T r u j i l l o , Puerto
siglo
XVIII,
l o ejercían.
Caballos, O m o a y el G o l f o D u l c e . E n esos casos las embar-
1576
RAFAL REICHERT
C O N T R A B A N D O Y SUS REDES E N EL GOLFO DE H O N D U R A S
1577
caciones en Jamaica compraban o intercambiaban géneros,
como peones o intermediarios en el ajedrez contrabandista
que después introducían al i n t e r i o r de la Capitanía.
terminaban perdiendo sus bienes y a m e n u d o se les conde-
Se puede decir que el contrabando no fue u n simple p r o -
naba a la cárcel, o se les enviaba a servir c o m o presidiarios en
ceso de i n t r o d u c c i ó n de mercancías, sino una m a q u i n a -
las fortificaciones de O m o a , La Habana y Santiago de Cuba.
ria que involucró tanto la planificación logística c o m o administrativa y económica y donde se aprovechaba cualquier
SIGLAS Y REFERENCIAS
oportunidad para engañar a la administración española. A d e más, la organización de una red clandestina involucraba u n
AGCA
ejército de intermediarios menores, quienes ejercían oficios de proveedores y transportistas responsables de segura recepción, transporte y entrega de mercancías a comerciantes mayores o agentes de empresas en el Reino de Guatemala. H a y que subrayar que las redes del comercio ilícito en la Capitanía General de Guatemala n o eran m u y distintas de las que se desarrollaron en otras partes de las Indias. Sin embargo, el ambiente que encontraron los contrabandistas en las costas caribeñas del Reino era más favorable que en otros l u gares de mejor vigilancia tanto militar como administrativa. R e t o r n a n d o una vez más al factor h u m a n o y su i m p o r tancia en las redes del contrabando guatemalteco, se puede decir que en dicha actividad participaba gente de diversos niveles sociales: desde pardos, arrieros, pescadores, soldados, indios, mulatos, marineros, religiosos, pequeños mercaderes, hasta las élites del m u n d o administrativo y comercial. E l factor común para la participación de esos individuos en el comercio subterráneo era la satisfacción económica, en la que sólo los diferenciaba el nivel de las ganancias. Finalmente, cabe decir que la mayoría de "la gente de p o d e r " se salvaba de acusaciones p o r el c o m e r c i o ilícito o la corrupción, d e b i d o a su posición privilegiada, conexiones y estatuto social. E n c a m b i o los sujetos que sólo fungían
'
Archivo General de Centro América, Guatemala. A I Superior Gobierno, Reales Cédulas, Audiencia, leg. 4622. A2 Capitanía General, ramo Asuntos Generales 15791821, !eg. 383, exp. 3491. A 3 Real Hacienda, ramo de Comisos, leg. 2869, exp. 41766. A3 Real Hacienda, ramo de Comisos, leg. 2869, exp. 41773. A3 Real Hacienda, ramo de Comisos, leg. 228, exp. 2357.
B E R N E C K E R , Walter
Contrabando. Ilegalidad y corrupción en el México del siglo XIX, México, Universidad Iberoamericana, 1994. B É T H E N C O U R T M A S S I E U , Antonio de
"Patino en la política internacional de Felipe V. Estudios y documentos", en Cuadernos de Historia Moderna, 1 (1954), pp. 11-38. B R E N E S C A S T I L L O , María Eugenia
"Matina, bastión del contrabando en Costa Rica", en Anuario de Estudios Centroamericanos, 4 (1978), pp. 393-450. C A B A L L E R O J U Á R E Z , José Antonio
El régimen jurídico de las armadas de la Carrera de Indias, siglos XVI y XVI!, México, Universidad Nacional Autónoma de México, 1997.
1578
RAFAL REICHERT
EL
C A L D E R Ó N Q U I J A N O , José Antonio
1579
G R I F F I T H D A W S O N , Frank
"William Pitt's Settlemcnt at Black River on thc Mosquito Shore: A Challenge to Spain in Central America, 1732-1787", en The Hispanic American Historical Review, 63:4 (1983), pp. 677-706.
Belice 1663-1821: historia de los establecimientos británicos del río Valis hasta la independencia de Hispanoamérica, Sevilla, Victoria-Artes Gráficas, 1944. C H Á V E Z O R O Z C O , Luis
El contrabando y el comercio exterior en la Nueva México, Banco de Comercio Exterior, 1967.
C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N E L G O L F O D E H O N D U R A S
España,
G U T I É R R E Z E S C U D E R O , Antonio y María Luisa L A V I A N A C U E T O S
(coords.) Estudios sobre América: siglos xv!-xx, Sevilla, Asociación E s pañola de Americanistas, 2005.
C O M É E L A S , José Luis Sevilla, C(íí^¿zjylmeríCíi, Madrid, Mapfre, 1992.
H A R I N G , Clarcnce H .
C R E S P O S O L A N A , Ana
Mercaderes atlánticos: redes del comercio flamenco y holandés entre Europa y el Caribe, Córdoba, Universidad de Córdoba, Cajasur, 2009. Comunidades transnacionales. Colonias de mercaderes extranjeros en el mundo atlántico (1500-1830), Madrid, Doce Calles, 2010. F L O Y D , Troy La Mosquitia, un conflicto de imperios, San Pedro Sula, Centro Editorial, 1990. G A R C Í A , Claudia "Interacción étnica y diplomacia de fronteras en el reino miskitu a fines de! siglo xviii", en Anuario de Estudios Americanos, 61:1 {1999), pp. 95-121. "Ambivalencia de las representaciones coloniales: líderes indios y zambos de la costa de Mosquitos afines del siglo xviii", en Revista de Indias, 67:241 (2007), pp. 673-694. G O S L I N G A , Cornelio C h . Los holandeses en el Caribe, L a Habana, Casa de las Américas, 1984.
Comercio y navegación entre España y las Indias, en la época de los Habsburgos, México, Fondo de Cultura Económica, 1984.
•
L o v E L L , George
Conquista y cambio cultural: la sierra de los Cuchumatanes de Guatemala, 1500-1821, La Antigua, Centro de Investigaciones Regionales de Mesoamérica, 1990.
M A C L K O D , Murdo Spanish Central America: A Socioeconomic History, 15201720, Berkeley, Univcrsity of California Press, 1973.
M A R T Í N E Z P E L Á E Z , Severo
La patria del criollo: ensayo de interpretación de la realidad colonial guatemalteca, Guatemala, Universitaria, 1971. M I L L A , José Historia de la América Central, Guatemala, Guatemala, Centro editorial "José de Pineda Ibarra", 1963. P A Y N E I G L E S I A S , Elizct
El puerto de TruxUlo. Un viaje hacia su melancólico abandono, Tegucigalpa, Guaymuras, 2007.
1580
RAFAL REICHERT
S A N T A N A P É R E Z , Juan Manuel y José Antonio S Á N C H E Z S U Á R E Z
P É R E Z B R I G N O L I , Héctor
Breve historia de Centroamérica, rial, 1990.
E L C O N T R A B A N D O Y SUS R E D E S E N E L G O L F O D E H O N D U R A S 1581
Madrid, Alianza Edito-
P É R E Z M A L L A Í N A B U E N O , Pablo Emilio y Bibiano T O R R E S R A M Í R E Z
La Armada del Mar del Sur, Sevilla, Escuela de Estudios H Í S pano-Americanos de Sevilla, 1987. P I N T O S O R I A , Julio César Economía y comercio en el Reyno de Guatemala: consideraciones para una historia económica, Guatemala, C E U R , USAC, 1982.
"Repoblación de costa de Mosquitos en el último cuarto del siglo xviii", en Revista de Indias, 67:241 (2007), pp. 695-712. S O L Ó R Z A N O F O N S E C A , Juan Carlos
" E l comercio de Costa Rica durante el declive del comercio español y el desarrollo del contrabando inglés: periodo 16901750", en Anuario de Estudios Centroamericanos, 2 0 : 2 (1994), pp. 27-63. T H O M A S , Hugh La trata de esclavos. Historia del tráfico de seres humanos de 1440 a 1870, Barcelona, Planeta, 1998.
R A M O S , Héctor Feliciano El contrabando inglés en el Caribe y el Golfo de México (17481778), Sevilla, Diputación Provincial de Sevilla, 1990. R E I C H E R T , Rafal "Navegación, comercio y guerra. Rivalidad por el dominio colonial en la región de! Golfo de Honduras, 1713-1763", en Revista Península, vu-.l (2012), pp. 13-38.
T O U S S A I N T R I B O T , Mónica
Belice: una historia olvidada, México, Instituto de Investigaciones Dr. José María Luis Mora, Centro de Estudios Mexicanos y Centroamericanos, 1993. V A N Oss, Adriaan Catholic Colonialism: A Parish History of Guatemala, 15241821, Cambridge, Cambridge Uníversity Press, 1986.
R O D R Í G U E Z T R E V I Ñ O , Julio César
" E l contrabando en el comercio exterior de Nueva España en la época borbónica, 1700-1810", tesis de doctorado, México, Instituto de Investigación Dr. José María Luis Mora, 2010.
V I C T O R I A O J E D A , Jorge y Dora P É R E Z A B R I L
"Corrupción y contrabando en la Nueva España del siglo xviii: la continuidad de una práctica", en G U T I É R R E Z E S C U D E R O y L A V I A N A C U E T O S , 2005.
R O M A N O , Ruggiero Mecanismo y elementos del sistema económico colonial americano. Siglos XVI-XVni, México, Fondo de Cultura Económica, 2004. R U B I O M A N É , José Ignacio El virreinato I. Orígenes y jurisdicciones, y dinámica social de los virreyes, México, Fondo de Cultura Económica, Universidad Nacional Autónoma de México, 1983.
W A L K E R , Geoffrey J . Política española y comercio colonial: 1700-1789, Barcelona, Ariel, 2001. WINZERLING, E . O .
The Beginning of British Honduras, 1506-1765, Nueva York, The North River Press, 1946.
Lihat lebih banyak...
Comentarios
